Derecho
Victimología
VICTIMOLOGÍA
PROGRAMA
Introducción
Lección 1
Visión histórica del problema victimológico: Evolución histórica en el protagonismo de la víctima. Posición crítica.
Olvido científico de la víctima.
Redescubrimiento y nuevo posicionamiento de la víctima.
Autoevaluación
Lección 2
2.1 La victimología como disciplina científica.
2.2 Objeto de estudio de la Criminología.
2.3 El problema de la cientificidad
2.4 Autoevaluación
Lección 3
3.1 Clasificación de las victimas. Algunos ejemplos.
3.2 Victimario, victimidad y crimen sin víctima.
3.3 Factores victimógenos. Iter victimae.
3.4 Autoevaluación
Lección 4
4.1 Victimización primaria y secundaria
4.2 El Consejo de Europa y la victimización secundaria.
4.3 Autoevaluación
Lección 5
El movimiento de asistencia a las víctimas del delito. Situación internacional.
El Convenio europeo de 1983 sobre indemnización a las víctimas de delitos violentos.
La Declaración de las Naciones Unidas de 1985.
Autoevaluación
Lección 6
6.1 Consideraciones de carácter económico. Planteamiento.
6.2 Sistema penal y sistemas reparatorios: Reparación y conciliación en el proceso penal.
6.3 Autoevaluación
Lección 7
7.1 VictimologÍa y Política Social.
7.2 La Ley de Indemnización a las Víctimas de Delitos violentos y contra la libertad sexual.
7.3 La indemnización a víctimas de Terrorismo.
7.4 Autoevaluación
Lección 8
8.1 Victimología y Derecho Penal: La víctima en el Código Penal.
8.2 La Victimodogmática.
8.3 La víctima en la fase previa a la ejecución del hecho delictivo.
8.4 La víctima durante la realización del delito.
8.5 La víctima tras la consumación del delito. Parte general. Parte especial.
8.6 Autoevaluación
Lección 9
9.1 Victimología y la Política Criminal
9.2 Protagonismo victimal y proceso. Posibilidades procesales de la víctima.
9.3 Nuevos cauces de intervención procesal para la víctima. La Ley Orgánica 7/1988 de 28 de diciembre.
9.4 Autoevaluación
BIBLIOGRAFÍA
ð Victimología. Nueve palabras clave. Beristain Ipiña A.
ð La moderna Criminología. Gerardo Landrove.
ð Tratado de Criminología. Garcia Pablos de Molina, A.
ð La hora de la víctima. Herrera García, M.
Introducción
La Victimología se definió en el I Simposio Internacional celebrado en Jerusalén (1973) como "el estudio científico de las víctimas", y más específicamente según Gulotta como "la disciplina que tiene por objeto el estudio de la víctima de un delito, de su personalidad, de sus características biológicas, psicológicas, morales, sociales y culturales, de sus relaciones con el delincuente y del papel que ha desempeñado en la génesis del delito".
La justicia penal tiene como objetivo castigar los actos contrarios a derecho, con lo cual el Derecho Penal está orientado hacia el delincuente quedando la víctima en una situación marginal o simplemente limitada a la participación como testigo en el esclarecimiento de los hechos, dejando totalmente de lado la conformación de su propio proceso de victimización: entender qué ha pasado y por qué ha pasado, "el Síndrome del Porqué" basado en la necesidad que todo ser humano tiene de comprender los sucesos que le ocurren, más aún cuando se trata de vivencias desagradables que provocan un gran impacto en las personas.
Así, paradójicamente, la víctima de un delito es a veces quien menos atención recibe, siendo ésta generalmente de tipo médico, a veces de asistencia social pero quedando al descubierto las consecuencias psicológicas de la victimización.
Hasta ahora, la llamada Escuela Clásica se ocupó principalmente del delincuente, es decir de comprender su comportamiento, estudiar su conducta, y revisar los modos de reinsertar al delincuente en la sociedad, nadie se preocupó de que existía otra figura que forma parte de la denominada pareja penal, que no es otra que la víctima.
Para soslayar este lapsus en el estudio del delito, algunos criminólogos se preocuparon de definir el papel de la víctima en todo acto delictivo, y de esta manera surgió la Victimología como una de las muchas ramas de la Criminología. La acepción Victimología es un neologismo aparecido a finales de la década de los cuarenta de este siglo y utilizada como contraposición a Criminología. Su utilización en lengua castellana no ha supuesto ningún problema semántico, y hoy por hoy goza de una gran difusión.
Como toda ciencia relativamente nueva, se encuentra con notables dificultades para hallar su propio espacio dentro de las disciplinas que tienen por objetivo el estudio de lo criminal, como fin último de su búsqueda para realizar avances en este tipo de disciplinas, que entroncan con las Ciencias Sociales.
En el fondo esta situación de conflicto entre realidad y teoría, e incluso entre las distintas orientaciones teóricas no son más que una manifestación de los profundos conflictos de carácter social a los que ni el legislador, ni la administración pueden sustraerse. Por ello, ante los proyectos de programas de defensa a las víctimas cuya valoración inicialmente no puede dejar de ser muy positiva surge siempre la duda de si no serán estrategias meramente políticas.
Lo cierto es que en la investigación victimológica se advierte una clara diferencia de enfoque cuando la persona que realiza la investigación es un hombre o una mujer. Es sin embargo una disciplina en ciernes donde aún está prácticamente todo el camino por andar, un camino que afecta a las bases de la estructura social y a las propias bases del sistema penal.
El objetivo de los estudios victimológicos es, generalmente, la víctima del delito. En este sentido cabe distinguir entre lo que podríamos denominar "victimización derivada del delito", es decir, aquel proceso por el que a una persona se le convierte en víctima de una conducta tipificada por el ordenamiento jurídico como delito, de las que se podrían denominar "victimización no derivada del delito y victimización social". Existen multitud de conductas socialmente admitidas y jurídicamente permitidas que presuponen la desigualdad entre el hombre y la mujer, la superioridad de aquél sobre ésta y que, además, comportan o conllevan actuaciones que atentan incluso gravemente contra bienes jurídicos importantes, de forma que si tal conducta afectará a un hombre, estaría fuertemente desvalorada, bien social, bien jurídicamente. Más bien al contrario, los victimizadores actúan cumpliendo las normas del rol social que desempeñan. En este caso, incluso existen supuestos donde lo que "está bien" es colocar a la víctima en ese lugar y son las propias instituciones las que colaboran al mantenimiento de esa injusta -desde un punto de vista material- situación. En este sentido, es plenamente válida aquella observación según la cual "lo injusto no es siempre lo ilegal".
En este sentido puede distinguirse entre la victimización no derivada del delito, generalmente fundamentada en una situación de victimización social, de la propia "victimización social" realizada por el abuso injusto e insolidario de la prepotencia económica y social frente a grupos marginados o especialmente débiles.
Es necesario una fuerte y decidida toma de conciencia en lo que atañe a la temática abordada o bien proseguir con la tendencia menos difícil, cual es la de mimetizarse o adaptarse lo mejor posible al caos victimizante. De optar por este último camino lo que se logrará será acallar voces pero no solucionar conflictos -objetivo que debería ser el principal fin perseguido por el sistema de justicia- los cuales en forma latente permanecerán subyacentes hasta aflorar nuevamente cada vez peor. En este sentido esta introducción no pretende ser más que un aporte hacia ese deseado objetivo, partiendo de una descripción fragmentada y seguramente parcial.
Como reflexión final quisiera decir que peor que no detectar los problemas que posee el sistema de Justicia, en donde se hallan en juego derechos de trascendencia como la libertad misma, resulta encubrirlas y convivir con ellas, día a día, y no intentar, por utópico que parezca, efectuar un cambio.
Por otro lado, se puede afirmar también que los estudios victimológicos, tal como se plantean desde la mayor parte de la doctrina, sobre víctimas femeninas son infecundos y parciales, puesto que solo tienen por objeto las víctimas del delito, mientras que las mujeres son víctimas de muchas conductas agresivas que no se consideran delito, o no se consideraban hasta hace poco. Y cuando las conductas sí se consideran delito, la ineficacia de las instituciones es tan absoluta, que muchas víctimas consideran que lo mejor es no acudir a ellas, con lo cual, al no ser denunciados los hechos, no entramos en el circuito de "lo penal" y la víctima quedará también al margen de los estudios oficiales, dentro de la cifra negra de la criminalidad.
Estos graves déficits de ejecución convierten el ejercicio del Ius Puniendi en un arma arrojadiza y de desprestigio en manos del Estado, primero, porque al no poder resolver aquellos conflictos para cuya resolución ha sido creada la norma, provoca la incredulidad generalizada en el sistema y, segundo, porque pone de manifiesto lo que pretende ocultar: graves desigualdades materiales y deficiencias asistenciales directamente achacables al Estado y a la Administración.
Lección 1: SURGIMIENTO DE LA VICTIMOLOGIA
1.1 Visión histórica del problema victimológico: Evolución histórica en el protagonismo de la víctima. Posición crítica.
1.2 Olvido científico de la víctima.
1.3 Redescubrimiento y nuevo posicionamiento de la víctima.
1.4 Autoevaluación
TEMA 1: SURGIMIENTO DE LA VICTIMOLOGIA
La Victimología es una ciencia muy nueva. Todavía sus postulados, teorías, incluso su objeto no están perfectamente delimitados. Desde la 2ª Guerra Mundial e incluso en los años 70 es cuando surge en serio como ciencia.
Visión histórica del problema victimológico: Evolución histórica en el protagonismo de la víctima. Posición crítica.
La primera vez que aparece un estudio a nivel teórico es en 1948 con la obra de VON HENTING "The Criminal and his victim" (El criminal y su víctima). Será a partir de los años setenta cuando comienzan a realizarse estudios con autonomía sobre la víctima, surgiendo la "Victimología" cobrando fuerza, incluso como asignatura, dentro de los estudios de Criminología.
En la actualidad, sobre todo a finales de los años ochenta y principios de los noventa, por influencia de la doctrina alemana e italiana, se empezó a estudiar la Victima-dogmática" que supone incluir parámetros dogmáticos dentro de la estructura del Derecho Penal de corte victimológico.
Llama la atención a este respecto la reforma del Código Penal y de la L.E.Cr. efectuada por la L.O. 14/1999 de 9 de Junio, en materia de protección a las víctimas de malos tratos, en cuya Exposición de Motivos se establece, por primera vez en un texto penal, con relación a la prevención y a la reincidencia en los delitos de violencia familiar, objetos y finalidades victimológicas, modificando el concepto procesal de primeras diligencias a efectos de medidas cautelares a adoptar por el Juez instructor desde una perspectiva del Código Penal en cuanto a la defensa y tutela de la víctima. (Ver art. 33.3 f) Código penal “La privación del derecho a residir en determinados lugares o de acudir a ellos....”).
Respecto a la Victimología han existido discusiones entre distintos autores acerca de su denominación, sin embargo dicha polémica es absolutamente estéril. El término "Victimología" se acuña en el I Simposio Internacional de Jerusalén sobre lo que se denominó "el estudio científico de las victimas".
Como movimiento científico se promueve el estudio de la víctima en la etiología del delito, a fin de que el mismo vaya más allá del tratamiento económico en relación con las víctimas intentando separar los problemas teórico-dogmáticos en la etiología del delito y lo que son problemas meramente indemnizatorios. La victimología no tiene como único objetivo un tratamiento humanitario respeto a la víctima, pretende desarrollar mediante un estudio en profundidad de la víctima una serie de reglas y principios comunes que supongan un beneficio para el avance y evolución, tanto de las ciencias criminológicas como de las jurídicas, permitiendo una mejor comprensión del fenómeno criminal, de la dinámica criminógena y de la personalidad del delincuente.
A nivel internacional se asumen hoy como propios de la Victimología los objetivos que en la década de los ochenta consolido ROBERT, en concreto los siguientes:
1) Desarrollar un análisis pormenorizado del papel que las víctimas desempeñan en el desencadenamiento del fenómeno criminal ("Víctima provocadora").
2) Análisis de los modelos posibles en torno a la asistencia jurídica, moral o psicológica y terapéutica de las victimas.
3) Investigación de los temores sectoriales a nivel de la victimización.
4) Examen de la criminalidad real a partir de los informes de las víctimas sobre delitos no perseguidos, es lo que se conoce como de la cifra negra de los delitos, la denominada "criminalidad oculta".
5) Resaltar la importancia de la actitud "de, para, o con la víctima" a la hora de concretar la pena en cada delito. ( ver art 21.5 del Código Penal con relación a la atenuación de la pena: "La de haber procedido el culpable a reparar el daño ocasionado a la víctima, o disminuir los efectos, en cualquier momento del procedimiento y con anterioridad a la celebración del juicio oral").
Toda la evolución del Estado Moderno es un continuo proceso de neutralización de la víctima o de sus familiares al producirse la asunción del "ius puniendi" por el Estado, separándose así el interés directo de la víctima de la administración de justicia (entendida esta en el más amplio sentido); en consecuencia, al monopolizar el Estado la acción punitiva la actividad de la víctima va perdiendo cada vez más protagonismo quedando escasos reductos de la misma en el ámbito jurídico penal entre los que cabe citar: la legítima defensa, los delitos perseguibles a instancia de parte, el perdón del ofendido etc...
Sin embargo en un Estado Democrático el pleno funcionamiento de la Administración de Justicia no se contrapone al avance en el estudio de la prevención victimal, generando sistemas modelos de ayuda tendentes tanto a indemnizar económicamente a las victimas, como influir en la elaboración de las leyes y del sistema jurídico en general, por ello el sistema se ha ido perfeccionando con el estudio de la victima sin que resulten en modo alguno incompatibles el estudio y valoración de las perspectivas victimales con el pleno funcionamiento de las leyes, pues el estudio victimológico ayuda a avanzar en el estudio criminal y delictivo, produciéndose lo que se ha denominado "EL RESURGIR DE LA VÍCTIMA".
OLVIDO CIENTIFICO DE LA VICTIMA:
La palabra Victimología es un neologismo que se acuñó a finales de los años 40 primero en inglés y después en francés (Victimology/Victimoligie). La Victimología se definió por primera vez en el primer simposio internacional en 1973. Se decía que la Victimología era el estudio científico de las víctimas. Primer problema: definir qué es víctima, lo que es bastante difícil o complicado.
El concepto de Victimología no es pacífico ya que los autores le asignan un objeto de estudio en ocasiones muy diferente. Gulotta, definió a la Victimología como la disciplina que tiene por objeto de estudio la víctima de un delito, su personalidad, características biológicas, psicológicas, morales, sociales y culturales, sus relaciones con el delincuente y el papel que ha desempeñado en la génesis del delito. Habrá autores que no sólo incluyan las víctimas de delitos sino de hechos antijurídicos, de catástrofes naturales etc…
En el s XIX ,a finales, se comenzó a estudiar científicamente y en profundidad el delincuente mientras que recientemente, sobre los años 70, se ha empezado a estudiar seriamente, científicamente, la figura de la víctima, con lo cual volver a incidir en la idea de que la Victimología es una ciencia muy nueva, imperfecta, que está de moda, que últimamente ha tenido impulsos importantes pero cuyos postulados son todavía muy discutibles. En sus orígenes la Victimología estudiaba fundamentalmente las relaciones entre la víctima y el delincuente. Hoy este objeto de estudio se ha ampliado notablemente. Por ejemplo el delito de estafa es el paradigma de delito en que hay una interacción entre víctima y delincuente. También en los crímenes pasionales, por eso era y es fundamental determinar esa relación delincuente-víctima tanto en un momento anterior, durante y después de la comisión del delito. Esto era lo que más llamaba la atención en los albores de la Victimología.
Hoy abarca otras cuestiones, no sólo su papel en la comisión del crimen. Se ocupa hoy en día la Victimología, ampliando el objeto de estudio, además de las relaciones delincuente-víctima estudia:
- Se ocupa del papel desempeñado por la víctima en la génesis o desencadenamiento del delito y ello implica ver qué relación tiene con el delincuente. También hay delitos en que no hay relación previa. Por ejemplo un atraco. Pero habitualmente se da una relación, es muy común.
- Se ocupa también de la asistencia terapéutica: psicológica, social, jurídica.
- El problema de las indemnizaciones por los daños sufridos.
- La Victimología también examina la criminalidad real mediante los informes facilitados por las víctimas incluso de los delitos no perseguidos, no denunciados. Son las encuestas de victimización.
- También estudia la importancia de las víctimas en el Derecho Penal (DP) y en la determinación de la pena. Luego hay una ampliación notable del objeto de estudio.
El nacimiento de la Victimología se vincula a las preocupaciones de algunos estudiosos de la Criminología y de la Sociología Criminal por la víctima del delito, su personalidad y sobre todo por su relación con el delincuente. Hasta la consolidación de la Victimología la víctima había sido totalmente despreciada por el DP, el D Procesal, la Política Criminal e incluso por la Criminología.
Se ha llegado a decir que la víctima no plantea problemas, sino el delincuente que puede reincidir. Este pensamiento era el que subyacía antes de la consolidación de la Victimología. Así, el DP ha estado orientado fundamentalmente hacia el delincuente mientras que la víctima, a lo sumo, ejercía el papel de testigo en el procedimiento penal.
El origen de este profundo desprecio hacia la víctima o la llamada “neutralización de la víctima” surge cuando se implanta el DP estatal o “ius puniendi” estatal. Esto sucede aproximadamente en el s. XVIII. El “ius puniendi” estatal supone que el Estado es el encargado de enjuiciar e imponer la pena al delincuente, superándose la idea anterior de la venganza privada por parte de la víctima o de sus familiares. Como es sabido, con anterioridad a este momento histórico la venganza privada por parte de la víctima o de sus familiares era socialmente aprobada.
De esta manera las propias víctimas eran las que administraban Justicia y no el Estado, siendo, por tanto, las víctimas verdaderas protagonistas en esa antigua administración de Justicia. Sin embargo, como hemos dicho, con la llegada del DP estatal la Justicia va a ser administrada por el Estado sin que quepa la práctica de la venganza por parte de la víctima o de sus familiares. Con ello se pretendía superar las arbitrariedades, las injusticias que realizaban las víctimas o sus familiares contra el delincuente. Sin embargo la víctima cayó en el olvido, se le prohibió la venganza y poco a poco su papel fue desapareciendo hasta prácticamente difuminarse.
Hay que indicar que en épocas anteriores, sobre todo en sistemas de origen germánico, en los que la víctima o sus familiares tenían la obligación por ejemplo de vengar una muerte con la muerte del agresor o cobrar una suma de dinero que se repartían entre todos es un ejemplo del papel tan importante que en otros tiempos tuvo la víctima en la Administración de Justicia. Tras el surgimiento de este DP estatal una de las pocas cosas que se estudiaban en relación a las víctimas era la responsabilidad civil derivada del delito, es decir, la obligación del delincuente de reparar los daños causados a la víctima.
Como hemos visto el problema surge en muchos casos cuando el delincuente es insolvente y no puede indemnizar a la víctima. Algunas razones más adicionales que también se han esgrimido como causa del olvido de las víctimas:
- Se dice que hay una identificación con el delincuente ya que éste representa un sujeto sin inhibiciones que realiza lo que desea sin importarles la norma, la sociedad o la víctima. Gran parte de la sociedad alguna vez ha deseado cometer algún delito. Por ejemplo evadir impuestos, lesionar… Hay una tendencia psicológica a identificarse con el delincuente. Es por esto que se afirma la existencia de esa identificación con el delincuente, con quien se atreve a realizar lo que nosotros nunca haríamos. Sin embargo, nadie o casi nadie se identifica con la víctima, nadie quiere serlo. Además el criminal despierta sentimientos morbosos de curiosidad. De hecho, muchos criminales pasan a la Historia pero muy pocas víctimas lo hacen.
- El delincuente inspira temor porque existe el riesgo en muchas ocasiones de que la conducta delictiva pueda repetirse y por eso los estudios y medios del Estado se centran en la figura del criminal para que éste no sea un peligro para la sociedad.
- Las víctimas en cierta medida representan el fracaso del Estado al proteger los intereses colectivos. Es por ello que conviene olvidar a ciertas víctimas ya que al Estado no les conviene resaltarlas.
- El concepto de bien jurídico se dice que también influyó al olvido de las víctimas porque el ataque a los bienes jurídicos de contenido abstracto que supone el delito quedaba desconectado de la realidad de la víctima. En definitiva se estaba construyendo un DP, un concepto de bien jurídico desconectado de la realidad de esas víctimas.
1.3 REDESCUBRIMIENTO Y NUEVO POSICIONAMIENTO DE LA VICTIMA
ORIGENES DEL MOVIMIENTO VICTIMOLOGICO
Tras la 2ª Guerra Mundial se produce la aproximación científica hacia las víctimas. En esas fechas comienzan los estudiosos a interesarse desde el punto de vista científico por las víctimas. Como vemos, se trata de una ciencia muy joven. Entre los pioneros de la Victimología se suelen citar a H. Von Hentig y B. Mendelsohn. Veamos las aportaciones de cada uno de ellos:
- Hentig: curiosamente este autor era un criminólogo alemán, exiliado en los EEUU. Sus obras son consideradas el punto de partida de la Victimología. Este autor se centró en las causas del delito y por ello destacó la importancia de la relación del delincuente con la víctima y configuró el concepto de “pareja criminal” obviamente formada por el delincuente y la víctima. Desde ese momento se comienza a pensar que existen muchos delitos que no se pueden explicar sin tener en cuenta la relación criminal-víctima (estafas, violencia de género etc…) ya que muchas veces, en cierta medida, la víctima coopera o incluso provoca el hecho criminal (insultos y como resultado una lesión). La cuestión fundamental y lo difícil es saber en qué medida la víctima contribuye a la comisión del delito. Recordemos que su primera obra es de 1948 “The criminal and his victim”. En esta obra es donde se hace la primera clasificación de las víctimas prestando atención este autor a los menores, mujeres, ancianos, deficientes mentales, inmigrantes y a la actitud o a la conducta de la víctima frente al agresor.
- Mendelsohn: es otro de los pioneros o padres de la Victimología. Curiosamente también este autor era israelita, en concreto, era abogado en Jerusalen. Se dice que este autor fue el creador de la palabra “Victimología”. Va más allá este autor que Von Hentig ya que afirma y reafirma que la Victimología debe ocuparse de todo tipo de víctimas y no sólo de las víctimas de los delitos. Por lo tanto, la Victimología se ocuparía no sólo de las víctimas de los delitos sino también de las víctimas de catástrofes naturales. De todas maneras este autor también se fija en la “pareja criminal” y en esta relación criminal destaca dos momentos fundamentales:
a) Antes de la comisión del delito: en este momento el criminal y la víctima, en muchas ocasiones, se atraen debido a sus relaciones sociales aunque en otras ocasiones los dos son indiferentes, no hay atracción como por ejemplo un delincuente que escoge víctimas absolutamente indiferenciadas.
b) Después de la comisión del delito: en este momento ambas partes representan intereses contrapuestos, en conflicto. Mendelsohn realizó en su día una clasificación de las víctimas que ha sido tenida en cuenta por muchos autores posteriores. En su clasificación incluye 5 tipos de víctimas (existe un nivel mayor de participación progresivamente en esta clasificación):
- Víctima ideal: es aquella que no ha hecho absolutamente nada para provocar la acción criminal. Ej- los niños, víctimas indiscriminadas en atentados, atracos etc…
- Víctima por ignorancia: es la que irreflexivamente provoca su propia victimización al facilitar la acción del agresor. Ej- el que se deja las puertas abiertas.
- Víctima provocadora: incita con su conducta la producción del delito, lo provoca. Ej- insultos y agresiones.
- Víctima voluntaria: incluye aquellos casos de colaboración todavía mayor con el delincuente, voluntariamente consentiría la comisión del delito. Ej- eutanasia.
- Víctima agresora: la que denuncia falsamente: delito de denuncia o acusación falsa.
Distingue dentro este autor dos subtipos:
a) Víctima simuladora: acusa falsamente y ello implica el delito de acusación falsa
b) Víctima imaginaria: inventa o imagina su condición de víctima cuando no se ha producido ningún delito. Delirios de persecución, paranoias, algunos casos de esquizofrenia.
En 1984, Neuman, creó otra clasificación de las víctimas más moderna. Distingue cuatro grupos de víctimas:
- Víctimas individuales: diferencia las que carecen de actitud victimal y aquellas que sí tienen actitud victimal porque cooperan de forma dolosa o culposa a la producción del delito.
- Víctimas familiares: todas aquellas víctimas dentro del ámbito de la unidad familiar (parientes o con relación análoga de afectividad). Especialmente niños, ancianos.
- Víctimas colectivas: introduce aquí a la propia nación, Estado (ej- golpes de Estado, rebeliones). Son víctimas no tangibles en algunos supuestos. También incluye a la propia sociedad como víctima: genocidios. También incluye en este grupo a determinados grupos sociales lesionados en sus derechos a través del sistema penal Ej- excesos en centros de prisiones, calabozos, torturas.
- Víctimas sociales: son colectivos que el propio sistema social convierte en víctimas. Ej- marginados, minusválidos, ancianos, minorías étnicas, raciales, religiosas. Incluso el propio delincuente a veces es una víctima social, producto de la marginación social.
B) FASE DE CONSOLIDACION
A los autores antes mencionados siguieron otros que ayudaron a la consolidación de la Victimología como ciencia: Ellenberger, Schultz. Y además contribuyeron a esta consolidación otros factores:
- Los movimientos feministas llamaron la atención sobre la violencia ejercida a las mujeres realizándose programas de asistencia y creándose centros de atención para estas víctimas. A raiz de estas actuaciones llamaron también la atención sobre los niños maltratados. En multitud de casos de mujeres maltratadas llevan detrás niños maltratados.
- Las encuestas de victimización que comenzaron a proliferar. Con ellas se puede obtener datos reales sobre las víctimas, ya que se toman en cuenta a las víctimas que no denuncian los delitos.
- Los simposios internacionales de Victimología. El primero de ellos se celebró en 1973 y desde entonces se van celebrando cada 3 años. En 1976, surgió una publicación periódica especializada llamada “Victimology” y en 1980 se creó la Sociedad Internacional de Victimología. En estos simposios se han tratado temas como el concepto de Victimología, de víctima, metodología, relaciones victimario-víctima, prevención, tratamiento y resarcimiento de las víctimas, violencia en la familia, las víctimas del nacional socialismo, víctimas de la contaminación de catástrofes naturales etc…
Con la confluencia de todos estos factores la Victimología ha alcanzado su madurez como disciplina científica ocupándose fundamentalmente de las siguientes cuestiones: indemnizaciones de las víctimas, programas de ayuda y tratamiento de las víctimas, intervención de la víctima en el hecho criminal (es decir, en qué medida participa en el desencadenamiento del delito) la protección de las víctimas-testigo, la predisposición de la víctima para poder o no evitar el crimen etc… Hemos de tener en cuenta que la Victimología no pretende enfrentar los derechos de la víctima con los derechos del delincuente sino establecer en sus justos términos el papel de las víctimas reconociéndose los derechos que le corresponden pero sin confrontarlos con los derechos del delincuente que, en todo caso, deberán ser respetados.
AUTOEVALUACIÓN
1. ¿Cómo influyó el advenimiento del ius puniendi Estatal en el olvido científico de las víctimas?
2. Ventajas e inconvenientes que existen ante el monopolio estatal del derecho penal.
1. Explique brevemente las razones que han causado el olvido científico de las víctimas.
2. ¿Por qué se produce un cambio de planteamiento en relación con las víctimas precisamente tras la segunda guerra mundial?
3. ¿Qué diferencias existen entre los postulados de Hentig y los de Mendelsohn?.
4. Explique la relación entre las posibles vivencias de ambos autores y sus pensamientos victimológicos.
5. ¿Qué diferencia de criterio clasificador existe entre la clasificación de Mendelsohn y la de Neuman?
6. ¿Qué importancia puede tener el movimiento feminista en la consolidación de la victimología?.
7. ¿Puede esbozar una definición de víctima?
8. ¿Piensa que se ha avanzado bastante en relación con el reconocimiento de los derechos de las víctimas?
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Enviado por: | Isasu |
Idioma: | castellano |
País: | España |