Historia


La azarosa historia del cine americano; Lewis Jacobs


La Azarosa historia del cine Americano.

Comercio, técnica y películas

Durante la primera mitad del siglo XX, el cine nace en los laboratorios, y crece como medio de expresión y sirve como medio para divertir a las masas. Se desarrollo gracias a tres factores: El científico, el artista y el hombre de negocios. Cada uno de estos factores contribuyó a su configuración, precisando su fisonomía y reforzando su poder. Se convirtió en una de las mayores industrias del momento. En un arte nuevo, emergiendo de la ciencia y de las artes tradicionales, y en un potente factor social. De 1896 a 1903 se produjo la génesis del cine, y logró cumplir sus tres objetivos, un jugoso ámbito de negocios, una técnica peculiar y una gran amplitud de público.

El nuevo invento del cine, provoca un asombro general, el público califico el espectáculo de milagroso.

La invención de un proyector hizo posible la idea y el cine comenzó a afirmarse como una nueva forma de diversión colectiva, haciéndose popular en todas partes donde se proyectaba. En poco tiempo, el cine se había convertido en un número habitual de los programas de variedades, consiguiendo una creciente atención por parte de la prensa.

Las películas tenían que tratar sobre acontecimientos reales, pero los cineastas americanos comprendieron que no debían buscar el tema de sus películas necesariamente en acontecimientos reales y que las posibilidades del cine no se limitaban a la simple captación de los hechos cotidianos; por lo que la temática fue evolucionando.

Georges Melies: La puesta en escena.

Georges Melies, francés, el primero en explotar las posibilidades del cine como medio de expresión abrió un nuevo camino, aumentando la atención hacia sus potencialidades y creadoras. Sus innovaciones conseguirían un efecto revolucionario. Méliès concebía el cine como una fábrica de ilusiones. Adquirió un proyector en Londres y creó su propia productora, la Star Film. Se proponía al realizar sus películas, impresionar al espectador, y despertar su curiosidad.

Su excepcional habilidad como ilusionista produjo en sus primeras obras notables resultados. Entre ellas se encuentran: “El caso Dreyfus, 1899”, “le Diable au Couvent” “ Un hipnotista en el trabajo”, “ Cendrillon”(Cenicienta.Entre otras.

El Comercio: Hacia la expansión nacional.

El enorme éxito de las películas con argumento determina una nueva inversión de capitales en la industria cinematográfica. La introducción del sistema de cambio en la distribución, la creación de verdaderas salas cinematográficas y los estudios cinematográficos hicieron del cine una autentica meca de los negociantes. L demanda de las películas aumentó extraordinariamente y el cine se convirtió en un producto para las masas; Facilitando el desarrollo comercial de la industria.

Harry J. Miles constituye junto a su hermano Herbert una especie de agencia “Miles Brothers Exchange”; al darse cuenta de la necesidad de organizar una rama de la industria que no se ocupara la producción ni de la exhibición. El nuevo organismo se convirtió muy pronto en una de las empresas más importantes y rentables de la nueva industria. La Miles Brothers Exchange adquiría el film de los productores y se lo alquilaba luego a otros exhibidores a la cuarta parte del precio de adquisición. Este sistema provocó inmediatamente un nuevo criterio en la valoración de las películas. Los dueños de los locales hacían lo posible por obtener los filmes más recientes y muy pronto los precios del alquiler empezó a equipararse con el nivel del coste de las películas.

El cine de anteguerra

Perfeccionada la técnica narrativa y adoptando el largometraje, los productores americanos recurrieron a temas de la vida contemporánea, al tiempo que aprovechaban el material ofrecido por la literatura.

Todas las películas revelaban independientemente de su fuente, un rasgo típico del periodo (1908-1914):

  • Política progresista

  • Fuerte moralismo completado con una decidida intención didáctica

  • Sentimiento social de humanitarismo

  • La figura del reformador dominaba la escena.

El cine tenia plena conciencia de lo que quería, de cómo debía expresarlo y de las reacciones que suscitaría en los espectadores; todo ello sin defraudar al público que acudía ante los anuncios de “Fuertemente dramático y muy emocionante”.

Algunas películas centraran su atención en el siglo XX y los temas tratados correspondieran con los problemas que ocupaban la mente, la conciencia y el corazón del público, el fuerte moralismo que los dominaba inalterable. Tras este tipo de filmes más modernos, latía convencimiento de los los productores de que el cine, aparte de divertir, debía llevar a cabo una labor didáctica. Esta actitud ampliamente extendida, se manifestaba también el la producción masiva de libros y periódicos, en la multiplicación de escuelas y bibliotecas públicas, y en la financiación privada de instituciones a favor del progreso de la cultura, Por todo ello, el cine continuaba impertérrito en su actitud moralizante, condenado la corrupción de costumbres, rompiendo lanzas en defensa de los “Ideales”, elaborando complejos sermones sociológico-religiosos.

El Bien y el Mal conformaban el núcleo de la mayoría de las películas: todas acababan con el castigo del pecador y la salvación del bueno. Sea cual fuere la situación, un brusco viraje en el último momento se demostraba siempre que el pecado lleva a la muerte, mientras que la fe y la bondad contribuyen a que tras las tribulaciones, todo se resuelve satisfactoriamente.

El cine demostraba que todo hombre, por muy bajo que cayera, ere perfectamente capaz de recuperar los valores espirituales aparentemente perdidos. El amor, el matrimonio, la familia y la virtud de la mujer se contaban entre los temas morales favoritos A estos filmes moralizantes se les unía los que ensalzaban América como el país el que el mérito y la valía personal acababan siempre triunfando. En América, nación democrática, la social no determinaba la prosperidad. La fama y la riqueza no se basaban en la educación recibida, sino el coraje y la voluntad de carácter. En América muchos grandes hombres habían surgido de la nada. El espíritu de emulación y de trabajo abría todos los caminos; en todo hombre había en potencia un superhombre.

Sin embargo se condenaba la ambición desmesurada. El interés del público por los grandes negocios y las empresas de millones de dólares encontraba un enérgico correctivo en filmes que ensañaban a desconfiar de los éxitos demasiado fáciles. Los medios más seguros para triunfar, según el cine eran: trabajar duro, la paciencia y la honestidad.

Los nuevos Westerns expresaban el nuevo culto americano por la valentía, con una característica figura del Cowboy. El Oeste constituía, en un principio un elemento folklórico de atracción, pero con el tiempo llegó a significar mucho más.

También tenia de gran importancia el patriotismo militar. En los primeros años los filmes sobre el ejercito, la marina y la historia Americana, gozaban de una extraordinaria popularidad. La construcción y fortificación del Canal de Panamá, la ocupación de las Filipinas, la extensión de la influencia estadounidense en Sudamérica y los problemas de la defensa nacional constituían temas muy apreciados por el público.

Los innumerables filmes cómicos, satirizaban las debilidades humanas, no solo se apartaban de la representación de la vida cotidiana, sino que expresaban de igual modo la actitud didáctica de los productores.

Durante estos años el cine había demostrado con creciente evidencia su carácter de poderoso instrumento social, capaz de influir extraordinariamente en la mentalidad de los espectadores. Los defensores de la censura y los reformadores de los primeros años no habían exagerado las posibilidades del nuevo arte.

En 1914 todas las tendencias iban tomando cuerpo. El material temático se había hecho más rico, tras nutrirse de la literatura y la vida cotidiana. La participación del cine en los problemas de su tiempo se intensificó. Las cuestiones sociales encontraban un terreno mas fértil y propicio.

Lograron la atención de una nueva categoría de espectadores; aparte de aumentar la importancia social del cine, contribuyeron a modificar el contenido de las películas pues el victorianismo imperante difícilmente de compaginaba con las exigencias de un público más culto. Orientada hasta entonces hacia una clientela proletaria, la cámara se dirigió hacia las clases medias. Después el cine se concentró no en la interpretación del mundo de los trabajadores, sino en procurar divertirles mostrando los problemas de los estratos más elevados de la sociedad. En adelante, el ambiente obrero solo aparecía esporádicamente en los periodos de crisis económica.

Transición

Operaciones a gran escala.

En 1914 cuando estallo la guerra en Europa, la producción americana representaba más de la mitad de la producción mundial. En 1917, casi todos los filmes en circulación se habían realizado en América. La declaración de la guerra determinó el hundimiento de las industrias de los países que mayor competencia hacía al cine americano: Francia, Alemania, Suecia, Gran Bretaña, Italia y Noruega. La ruina de los competidores supuso un verdadero golpe de suerte para los productores estadounidenses, que consiguieron el monopolio del mercado. El cine era el último invento para enriquecerse rápidamente, por lo que cada semana se traía la noticia de creación de nuevas empresas. Hollywood se convirtió en la meta de una carrera hacia el oro. El enloquecido entusiasmo de los hombres del 49 parecía revivir.

Los productores, ante la necesidad de nuevas estrellas, se volcaron hacia Broadway en busca de actores célebres. La competencia se agudizó de tal forma que llegó a parecer que todo actor que se asomaba a un escenario acabaría en el cine. El publico no se entusiasmaba con las celebridades del teatro, lo que le importaba era su eficacia ante las cámaras. El proceso de creador se basaba esencialmente en la utilización continuada de un actor en muchas películas, hasta establecer una relación de familiaridad entre el intérprete y el público. Los actores se convirtieron en el factor mas importante del cine.

Las películas se realizaban siguiendo una nueva fórmula estereotipada, y los temas eran comunes y triviales.

Un Individualista: Charles Chaplin

La figura de Charlie Chaplin esta indisolublemente unida al cine. Este insigne actor, director y productor ha aportado bien poco a la técnica y a la forma cinematográfica. Es un mímico observador, humorista y crítico social.

Desde el primer momento, público y crítica advirtieron la presencia de Chaplin. Los espectadores empezaron a preguntar quién era ese hombrecito de extraños andares. Al acabar su primer año de producción cinematográfica, la popularidad de Chaplin había alcanzado tan fabulosas proporciones, que The New York Mail publica que “ Charles Chaplin es actualmente uno de los más poderosos instrumentos de atracción con que cuenta el cine. En muchos casos, los filmes cómicos de Chaplin obtienen recaudaciones mas altas que las películas con argumento de larga duración” (10 de abril de 1915). Se había convertido en la figura mas popular de los Estados Unidos, su imagen empezó a aparecer en todas partes, como ocurriría luego con el ratón Mickey.

Al pasar res años Chaplin alcanzó adquirir la madurez en el ámbito cómico, superando a su antiguo maestro Senté.

Luego de viajar a Europa, y ver un mundo deshecho y empobrecido por la guerra, demostró ser uno de los pocos hombres de Hollywood capaces de asumir una actitud crítica frente a la sociedad, con Filmes que demostraba la desigualdad social.

Chaplin quizá es el único inmortal de os actores de la pantalla; el símbolo de la lucha del hombre contra la masificación, y ahora mas que nunca, de los derechos del individuo.

Ninguna otra personalidad, en toda la historia del cine americano, se ha impuesto al público como lo ha hecho Chaplin. Gusta a los niños por su comicidad y a los adultos por su profundidad.

Hacia el Estilo

De los muchos directores aparecidos en este periodo, tres sobre todo son los que merecen especial mención, porque poseían un estilo personal y una habilidad técnica especializándose en temas dramáticos ( Thomas Ince), cualidades plásticas (Maurice Tourneur) y en el genero cómico con un estilo de farsa original ( Mack Sennet).

El cine durante la primera guerra mundial.

El periodo bélico demostró con creces la importancia social del cine, que se movilizo oficialmente en defensa de una causa. Las películas de aquellos años reflejan gradualmente el cambio de la opinión pública americana, que paso de la tolerancia a la intolerancia, del progresismo a la reacción, del pacifismo al militarismo. La pantalla recogió el naciente espíritu guerrero de la nación, lo intensifico y amplió, animando al pueblo americano a participar en la contienda mundial.

Cuando estalló la guerra en 1914, los diferentes grupos discutían entre sí interminablemente, mientras la ideología pacifista se diluía en una fragmentación de opiniones. El cine demuestra las distintas etapas del proceso del conflicto, con más claridad que ningún otro medio de expresión.

El cine resulto muy eficaz para enseñar a los ciudadanos la disciplina y la organización militar. Placas y cortometrajes con las personalidades favoritas del publico. Los factores de las pantallas (símbolo de virilidad y feminidad americana), bajaron sus pedestales para ofrecer su aportación a la actividad patriótica: Cooperaron en las películas de la cruz roja, incitaron al publico a la lealtad, se convirtieron en hombres de la calle, soldados o enfermeras para hacer propaganda de los bonos gubernativos.

Los espectadores habían visto a sus hijos marchar al frente y a la muerte, mientras los actores de la pantalla permanecían seguros en su casa. Esta situación empezó a nutrir un cierto clima de hostilidad. Hubo critica sobre los actores que no se alistaron. El nacionalismo se exacerbó con continuos homenajes a la tradición americana. También el cine se ocupo de demostrar el importante papel de los ciudadanos que permanecían en su patria.

Al igual que Estados Unidos, los filmes demostraron su incalculable utilidad en los demás países aliados, por lo que estas películas americanas llevaron a cada rincón de los países aliados el lema de “Victoria para la democracia”.

En1918, la industria cinematográfica americana se había reafirmado sólidamente y estaba dispuesta a una expansión a gran escala. Al acabar la guerra los productores tuvieron miedo de que la época dorada del cine hubiera pasado, pero realmente, a partir de entonces inició su verdadera grandeza.

Progresiva sofisticación del contenido de las películas.

Durante el periodo 1914-1914, dos importantes factores influyeron en el contenido de las películas:

Interno: El nuevo y más amplio tipo de publico

Externo: La guerra Mundial.

El moralismo y la religiosidad que conformaron el cine de anteguerra se analizaron en el mayor Best Seller de los años 1913, 1914 y 1915.

El final de la guerra mundial y las crecientes exigencias de los espectadores, se había introducido en el cine un interés sensual, llamado mas tarde Sex-appeal. La nueva moda era una reacción contra los primitivos dramas moralistas, reacción especialmente fulminante por cuanto América estaba en guerra.

La entrada de América en la guerra influyó en la gran manera el contenido de los filmes. En el periodo anterior, la afluencia de las clases medias al espectáculo fílmico era relativamente escasa. Pero después e la declaración de la guerra se puso de moda ir al cine, con la consiguiente transformación de la materia que se nutría. La guerra contribuyó a la desaparición de los criterios decimónicos, que sustituyeron por puntos de vista nuevos más liberales ante los problemas éticos del individuo.

El cine evolucionaba y se replanteaba sus ideas. La mujer se trataba con menor simpatía, a la vez se censuraba al marido absorbido por los negocios.

La desintegración de los viejos esquemas morales se patentizó también en filmes sobre las chicas modernas y en los dramas sexuales educativos. En un mundo desgarrado por la guerra, el tema del sexo fue tratado más ampliamente. Varios filmes se propusieron la educación sexual del soldado e indicaron los peligros de las enfermedades venéreas.

La Guerra Mundial no solo aceleró la sofisticación del contenido de las películas, sino que consolidó definitivamente el aspecto evasivo del cine.

Se empezó a descubrir la capacidad del cine para trasladar al individuo a un mundo onírico, en donde todas las injusticias de la vida real encontraban siempre oportuna reparación. La pantalla asumió una función consoladora y evasiva. De ahí la Nutrida producción de obras cómicas, sentimentales, espectaculares y aventureras.

Las nuevas temáticas que el cine ofrecía podrían ser sobre las mujeres americanas, con sus novios, hijos, y maridos en los campos de adiestramiento o en el frente, los mal de amores, básicamente basado en los alardes de belleza juvenil.

Antes de que Estados Unidos entrara en Guerra, los negros y demás minorías fueron tratados en el cine desde un punto de vista más bien desfavorable. Luego de la guerra las minorías se vieron forzadas por una nueva actitud. Se animó a todos a unirse alrededor de la bandera Americana sin distinción racial.

En 1918 las estrellas de la pantallas no solo eran objeto de apasionado interés, sino de verdadera adoración. En 1920 las revistas se dedicaban a hurgar en la vida privada de las estrellas de la pantalla.

Aunque aún inmaduro y explotado por los hombres de negocios, para su provecho particular, al acabar la Gran Guerra se reconoció el significado social del cine en toda su amplitud, así como plasmar la opinión publica y para reflejar la evolución de la mentalidad americana. La opinión pública se crea a través de diversas, sutiles y eficaces influencias...entre ellas....el cine....es de las mas importantes.... Lo que el cine dice penetra profundamente.

Jacobs, Lewis La azarosa historia del cine americano, Editorial Lumen 1939.




Descargar
Enviado por:Galaxya
Idioma: castellano
País: Costa Rica

Te va a interesar