Resumen:

Madrid, siglo XVII. España vive bajo el reinado de Felipe IV y grandes poetas como Francisco de Quevedo, Luis de Góngora y Lope de Vega viven entre sonetos y jarras de vino. Diego Alatriste, un veterano soldado de los tercios de Flandes que malvive como espadachín a sueldo, acaba de salir de la cárcel. A las puertas de ésta le esperaba Iñigo Balboa, hijo de Lope Balboa que fue compañero de batalla con el Capitán Alatriste y del que se llegó a decir que fueron como hermanos. A Iñigo lo enviaba su madre desde Guipúzcoa para cubrir deudas de amistad entre su marido y el capitán y para quitarse una boca a la que alimentar. De ese modo Iñigo fue como un criado, pero en realidad era su amigo.

Una buena mañana al Capitán Alatriste le sale un trabajo inesperado. El teniente Saldaña le dice que acuda a una dirección y allí le explicarán lo que debe hacer. Cuando acude, se encuentra con que dos enmascarados le encargan el asesinato de dos jóvenes que llegan a Madrid de madrugada y le piden que sea lo más discreto posible. En esa hazaña le acompañará un tercer enmascarado allí presente y que sólo se limitaba a escuchar. Y así se hizo, esa noche los dos se abalanzaron sobre los dos extranjeros y se batieron en duelo de espadas. Cuando Diego vence al joven con quien le tocó luchar y está listo para matarlo, pide clemencia, pero no para sí, sino para el otro joven que aún se batía con el compañero del capitán. Así que Diego, asombrado por su actitud decide hacer lo que le pide y protege al joven que todavía se batía. El compañero de Diego Alatriste, al ver que no puede con los dos se retira y le dice al capitán que se arrepentirá de lo que hizo.

Aquellos jóvenes resultaron ser el Marqués de Buckingham y el futuro Carlos V, hijo de Jacobo I rey de Inglaterra que venía para pedir matrimonio a la hermana de Felipe IV. Aquella noche la pasaron en la casa de un amigo de Alatriste, el conde de Gualdamedina.

El hecho de que Alatriste tenía que matar a esos dos extranjeros y no lo hizo hace que varias veces ponga su vida en peligro batiéndose en duros duelos a espadas contra asesinos a sueldo pagados por aquellos enmascarados y que al final termine en la cárcel con pena de muerte pero que salve su vida gracias a que tiene amigos que le ayudaron a desenmascarar a los que realmente quisieron matar a esos jóvenes.

Este libro, como primera parte de una serie de cinco o seis libros, explica muchos detalles que después no desarrolla y deja la historia muy incompleta por lo que si queremos enterarnos de algo hay que leerse esos cinco o seis libros.

Personajes:

-Diego Alatriste: Un soldado viejo que ha sufrido en sus carnes muchas batallas españolas como Flandes. Astuto, listo, no se deja engañar fácilmente, sabe lo que quiere y como lo quiere y tiene una facilidad increíble para ganar amigos y conservarlos. Su profesión después de la guerra (espadachín a sueldo) le llevará a meterse en más de dos líos.

-Iñigo Balboa: La historia nos llega desde el punto de vista de este jovenzuelo de trece años. Hijo del difunto Lope Balboa compañero de batalla de Diego Alatriste y del que se dijo que fueron como hermanos. Iñigo es atrevido y valiente (más de una vez le ha salvado el pellejo al capitán y este no se lo ha dicho con palabras pero le ha pagado con la misma moneda)

Los demás personajes tienen muy poco que ver con la historia y los que sí que importan algo, como los “malos”, aparecen tan poco que no se les puede describir ni física ni personalmente.

Lugar y tiempo:

En el centro de Madrid de hace 4 siglos. España empieza a decaer y ya no es tan importante como antes. Con el reinado de Felipe III se fueron las afirmaciones de que España era el centro del planeta y la mayor potencia mundial. El oro procedente de las Américas iba decayendo y con él la importancia de este país. Pero a pesar de ello, las gentes son alegres y los escritores y poetas que conviven con los protagonistas (Lope de Vega, Luis de Góngora, Francisco de Quevedo, Juan Vicuña, el pintor Velásquez) siguen ejerciendo lo que a ellos más les gusta: beber vino. Que la gente se peleara con espadas en medio de la calle y en los bares era lo más normal de aquella época.

Opinión Personal:

De emocionante este libro solo tiene los primeros capítulos. Esos capítulos en los que te imaginas, mientras lees, que todos los detalles que te explican se desarrollaran en el extenso taco de folios que tienes en la mano derecha, pero no ocurre así. Mientras esperas esa parte igual de emocionante o más que ese capítulo del asalto en la madrugada tienes tiempo de leerte el libro entero (vaya metáfora).

Por otra parte el libro contiene muchos datos históricos, que es bueno porque aprendes, y también malo porque si no sabes historia no disfrutas por completo de la lectura, cosa que me ha pasado a mí. Este libro introduce un poco a la literatura española de hace 4 siglos, fragmentos de poesía se reparten por todo el libro mostrándonos claramente la forma de escribir que tenían aquellos españoles.

Y quizá ese es el problema: demasiada atención por parte del autor en esos detalles de literatura y muy poca en lo que a aventura se refiere. Me ha decepcionado puesto que al comenzar a leer me esperaba mas emoción, acción y ese tipo de cosas que hace que un libro sea interesante para una persona de mi edad. Eso no quiere decir que sea malo y encantado lo recomendaría a alguien que quiera leerse un “buen libro”.