Filosofía


Personalidad, apariencia y realidad


FILOSOFÍA - TEMA V - PERSONALIDAD

ORIGEN DEL TÉRMINO PERSONALIDAD

El término persona parece provenir del griego “prospon” término con el que se designaba las máscaras de las representaciones teatrales.

En el mundo griego clásico no hubo una reflexión sobre la noción de persona, pero sí la hubo de temperamento ligada a la medicina. Galeno hablaba de tres humores (temperamentos) relacionados con los cuatro elementos de la tierra (agua, tierra, aire y fuego). En el mundo cristiano el concepto de persona tuvo una orientación teológica. Se decía que Dios es uno, pero compuesto por tres realidades: padre, hijo y espíritu santo. Se debatía si Cristo tenía naturaleza divina o humana. La solución fue decir que Cristo tiene una doble naturaleza pero es una sola persona.

En el Derecho romano aparece el concepto de persona como término judicial. La persona es el sujeto legal sobre el que recaen los derechos y deberes. En la actualidad se distingue entre persona física y jurídica.

LOS RASGOS DE COMPORTAMIENTO O RASGOS DIFERENCIADORES

Carácter diferenciador de los rasgos

Un rasgo es un modo de comportamiento propio de un individuo o grupo de individuos. Puede ser: (1) heredado y entonces decimos que es de temperamento o (2) aprendido y entonces hablamos de un rasgo de carácter. No debemos confundir temperamento con instinto (el primero no es común a toda la especie) y tampoco debemos confundir carácter con hábito (el primero tiene una mayor constancia)

Carácter ideal de los rasgos

Un rasgo implica un modo de comportamiento pero el hombre permanece en un desarrollo, una constante evolución personal y además el hombre no vive aislado sino que vive en un mundo a su vez cambiante. Por ello el concepto de rasgo es un poco ideal.

EL CONDUCTISMO

Estudiosos de la personalidad de esta corriente es fundamentalmente Skinner. Esta corriente psicológica se caracteriza por:

  • La función de la psicología es el análisis de la conducta, prescindiendo del estudio de cualquier tipo de procesos mentales

  • La conducta puede ser explicada como la respuesta dada a un estímulo

  • Casi todo el comportamiento es aprendido

  • Tienden a sustituir el concepto de carácter con el de hábito. De ahí que podamos definir la personalidad como el conjunto de hábitos de comportamiento. Un hábito es una relación relativamente estable y aprendida entre un estímulo y una respuesta, que es posible modificar por procesos de condicionamiento.

    FREUD Y EL PSICOANÁLISIS

    El objetivo de Freud es encontrar un tratamiento adecuado para las enfermedades nerviosas, para las cuales no se han descubierto las causas orgánicas. Esto condicionará el pensamiento de Freud, puesto que en un primer momento era monista, pero se verá obligado a separar lo mental de lo físico. Podemos calificar a Freud de emergentista, puesto que considera que la mente es un producto del cerebro y podemos reducir su actividad a procesos físico-químicos.

    Freud explica la actividad mental como un proceso dinámico fruto de la interacción de tres estructuras : “ello”, “yo” y “súper-yo” cuyo motor es una forma básica de energía que Freud la llama libido

    Partimos del supuesto que todo causa produce un efecto. Otro supuesto es que existe una energía específica de la mente que cuando se adhiere a una idea u objeto, éste se queda cargado de energía y vinculado a fuertes tensiones emocionales, es lo que denominamos catectizado. El organismo tiende a permanecer en un estado de equilibrio energético (principio de constancia) y es roto cuando sometemos al hombre a estímulos. El hombre tiende a volver al estado anterior para lo que se libera energía, y esa vuelta al estado de equilibrio es vivida como placer. A las fuerzas que posibilitan al organismo a liberar la energía que provoca la tensión, Freud las llama pulsiones, pero a su vez existen unas fuerzas que intentan evitar que liberemos la tensión, son las contrafuerzas.

    Durante el siglo XVII y XVIII se llegó a la conclusión que todos los fenómenos mentales son conscientes, controlables y racionalizables. Pues bien, con Freud descubriremos que existe una parte de nuestra vida que es inconsciente, y por ello irracional e incontrolable.

    Freud comienza estudiando los procesos hipnóticos. Un contemporáneo, Charcot, demostró que determinadas manifestaciones histéricas podían ser curadas mediante la sugestión hipnótica. Bernhein descubrió experimentando que hay procesos en la mente del individuo de los que éste no tiene constancia. Freud concluyó que existen procesos mentales desconocidos para el individuo y que determinan su comportamiento.

    Finalmente, Breuer, descubrió un método para curar las neurosis. Se partía de que la neurosis surge como consecuencia de que el individuo reprime ciertos problemas emocionales obligándoles a replegarse al inconsciente. Aparentemente se libra de sus conflictos, pero esa energía negativa no es liberada, y esa acumulación produce la neurosis. Pues bien, mediante el método hipnótico catártico, se consigue que el paciente recupere esos conflictos emocionales, los haga conscientes y se libere esa energía reprimida.

    Freud con el tiempo pensó que la hipnosis no curaba los trastornos histéricos, por lo que propuso un método: hacer hablar al enfermo a partir de ciertas ideas sugeridas. Cuando el paciente no quiera hablar o se quede bloqueado ahí es donde está el problema, en el sujeto operan unas fuerzas represoras. Es aquí donde el analista debe centrarse para descubrir el origen del problema. Cuando las tensiones no afloran libremente lo hacen de forma derivada, buscando acciones sustitutivas en forma de obsesiones, fobias, ideas fijas, etc. El psicoanálisis nació como cura, pero Freud acabó dándole otras utilidades, como por ejemplo para descubrir los procesos mentales inconscientes o elaborar una teoría acerca del funcionamiento de la mente.

    Primera tópica de la mente: consciente, preconsciente e inconsciente.

    Trata de los lugares que constituyen el aparato psíquico. Freud desarrolló dos teorías, la primera tópica en la que se distinguen tres lugares: inconsciente, preconsciente y consciente. En la segunda tópica se distinguen tres lugares: el ello, el yo y el super-yo.

    • Inconsciente: conjunto de procesos que actúan sobre la conducta pero que escapan al control de la conciencia. No es accesible en condiciones normales, sí en la hipnosis. Es el lugar de los deseos, fantasías, todo lo instintivo. Éstos están fuertemente cargados de energía. No funciona con los esquemas de la lógica. Cuando el niño nace todo es inconsciente. Pero las sensaciones que recibe del exterior dejan huella en su memoria y comienza a manejar los recuerdos, por lo que de las capas superiores del inconsciente nace el preconsciente.

    • Preconsciente: aquellos contenidos no conocidos de forma inmediata, pero que pueden ser recordados. Se almacenan los datos memorizados. Entre el inconsciente y el preconsciente se sitúa una censura que impide el paso de los contenidos inconscientes al preconsciente, aunque estos contenidos pueden pasar de un lado a otro disfrazándose.

    • Consciente: constituido por contenidos que son directamente accesibles al individuo. Básicamente por percepciones y procesos reflexivos.

    Segunda topología de la mente: ello, yo, super-yo

    Es una complementación de la primera. Aparecen tres estructuras: ello, yo y super-yo.

    • Ello: lo hacemos corresponder con el inconsciente anterior. Es la fuente de los deseos que exigen satisfacerse inmediatamente, sin contemplación ni consideración, por eso decimos que es instintivo. En el ello se encuentran las ideas innatas. Los recién nacidos son puro ello. A partir del ello y mediante el contacto con la realidad se comienza a formar el yo. Comienza a descubrir que las cosas no se satisfacen inmediatamente, por lo que comienza a controlarse. El ello carece de valores morales y no actúa pensando en los demás, sino que actúa según el principio de placer, que expresa que esta conducta está enfocada exclusivamente a obtener placer)

    • Yo: surge del contacto del ello con el mundo real. Es el conjunto de motivaciones y actos de una persona que permiten su adaptación a la realidad. Satisface las necesidades y resuelve los conflictos, (fruto de deseos imposibles). Tiene como objetivo que ni el super-yo ni el yo venza uno sobre otro. Funciona a nivel consciente y lo observamos en el razonamiento, pero también funciona a nivel inconsciente y lo observamos en los mecanismos de defensa del yo. Cuando actúa debe considerar los actos teniendo en cuenta las consecuencias. El yo no se rige por el principio de placer sino por el principio de realidad. Aprende a renunciar a un placer inmediato para evitar un sufrimiento u obtener un placer mayor. Aparece una conciencia primaria volcada sobre sí mismo (narcisismo), aunque el niño paulatinamente abandona ese estado de narcisismo para colocar el centro de atención en el mundo externo y se desarrolla así el yo.

    • Super-yo: conjunto de normas morales inconscientes que regulan la conducta. Surge como consecuencia de la interiorización de las normas que vienen impuestas desde afuera. Se desarrolla en la fase fálica. Los padres aparecen como arquetipo de toda autoridad cuya interiorización conlleva a la conciencia moral. El super-yo castiga las infracciones del yo haciéndolo sentirse culpable o deprimido. No funciona sólo como represor, sino que también existe un componente denominado yo-ideal que nace de la admiración hacia la figura paterna o materna que se convierten en modelos para el yo.

    Hay una relación entre el yo, el super-yo y el ello. En ocasiones hay conflictos porque el yo sirve al super-yo y al ello. No debe haber problema si se satisfacen las necesidades racionalmente. Estos conflictos se solucionan mediante los mecanismos de defensa del yo, que son los siguientes:

    • Represión: el super-yo frena los impulsos del ello. Ayuda al yo. El no poder satisfacer un deseo se reprime. Surge la frustración.

    • Proyección: refleja o achaca a otro individuo un deseo que no admitimos que poseamos. (Un individuo odia a un familiar, el consciente no lo reconoce y el individuo dice que es su familiar quien le odia a él)

    • Racionalización: aporta una explicación racional que oculta los verdaderos motivos.

    • Regresión: volver a etapas anteriores de nuestra evolución personal (cuando el niño tiene un hermano vuelve a hacerse pis)

    • Negación: negar o deformar los hechos.

    • Reacción o formación reactiva: mostrar una conducta externa a un sentimiento o afecto que se ha reprimido. Lo que se hace es ocultarlo. (tener manía a alguien y tratarle bien)

    • Sublimación: desviar el objeto de las pulsiones hacia actividades socialmente aceptadas y por tanto, aceptadas por el super-yo. (origen del arte, deporte ...) La sublimación son mecanismos de defensa que permite salir a la pulsión.

    Las pulsiones

    Distinguimos:

    • Origen: la excitación de algún elemento del organismo por un estímulo

    • Objeto: el medio a través del cual se satisfacen las pulsiones

    • Fin: eliminar la excitación producida, en virtud del principio de constancia.

    Clasificación de los instintos

    • Instintos sexuales: regidos por el principio de placer

    • Instinto de autoconservación: regidos por el principio de realidad

    • Eros: engloba a los dos anteriores

    • Thanatos: tendencia a aniquilar la vida

    • Eros:

    Desarrollo de la libido

    El niño pasa por una serie de fases de desarrollo de su libido. La no maduración y superación de estas fases dará origen a las perversiones sexuale3s. Esta no superación adecuada puede deberse a regresiones.

    Fase oral: se desarrolla tras el nacimiento. Órgano erógeno: boca. Fase oral pasiva y agresiva.

    Fase anal: dos y tres años. Zona erógena: ano.

    Fase genital: cuatro años. Llamado también periodo fálico. Órgano erógeno: Genital. Complejo Edipo y Complejo de Electra.

    Entre los seis y los doce años se desarrolla el periodo de latencia. Disminuye el deseo sexual. Se acaba de formar el super-yo. Después llega la pubertad, la libido se hace independiente y llega a la madurez. Cambios hormonales, físicos e interés por el otro sexo. Una persona adulta tendrá una vida sana si supera satisfactoriamente todas las etapas. A Freud se le critica que mira la sexualidad femenina desde un punto de vista de la sexualidad masculina.

    FILOSOFÍA - TEMA VI - APARIENCIA Y REALIDAD

    Ontología: el estudio del ser, de lo que las cosas son. Trata de decirnos lo que es real.

    Gnoseología: investiga las características generales del conocimiento humano. Además de sus condiciones de posibilidad y límites.

    Epistemología: estudia las condiciones de posibilidad del conocimiento científico, además del ámbito en el que se puede mover y sus límites. Teoría del conocimiento científico. Implicaciones con la ética (genética). Se desarrolló en el siglo XX

    LA REALIDAD EL PROBLEMA ONTOLÓGICO

    Vamos a ver algunas categorías empleadas para determinar que es lo real.

    Ser y devenir

    Parménides: el ser. Inmutabilidad. Lo que cambia no es propiamente real.

    Heráclito: el devenir. Lo real es el cambio permanente. Seguidores: Nietzsche.

    Necesidad y contingencia

    Necesario: entendemos que es necesario aquello que no puede dejar de ser, o aquello que no puede ser de otra manera.

    Contingencia: entendemos que es contingente aquello que puede ser o no ser, que puede darse de una manera u otra.

    Desde los siglos VI a.C hasta los siglos XVIII y XIX, lo auténticamente real debe estar caracterizador por ser necesario. Con el triunfo del pensamiento cristiano-islámico, la necesidad pasó de ser un atributo de la naturaleza, a ser un atributo de Dios. Para Santo Tomás, Dios es necesario, el hombre es contingente.

    Necesidad Ser

    Contingencia Devenir

    Lo finito y lo infinito

    Finito: tiene límites de cualquier tipo (tiempo, espacio). Los griegos creen que lo finito es lo real, porque tiene límites y está determinado.

    Infinito: carece de límites, por tanto está indeterminado y no lo podemos conocer. Es incognoscible., porque es el no ser.

    Los griegos creen que lo finito es lo real. Sin embargo, los cristianos consideran que lo infinito es lo auténticamente real (Dios). Para ellos, la limitación es un signo de ser menos. El hombre tiene aspiraciones infinitas. Esto indica que el alma del hombre es inmortal.

    Esencia y existencia

    Esencia: conjunto de características o rasgos que definen algo. Es lo que hace que una cosa sea lo que es. Podemos entenderlo como un conjunto de rasgos, o, a partir de la filosofía moderna, el conjunto de notas o rasgos necesarios para que algo sea posible. A este conjunto de notas o rasgos se le conoce como condiciones de posibilidad. De este modo evitamos crear nuevas esencias.

    Existencia: concepto polémico. Aquello que puede ser percibido por el sentido externo o el sentido interno (razón)

    Materia y espíritu

    Materialismo: la realidad primera es material. Todo surge a partir de la materia. La realidad básica es la realidad corporal.

    Espiritualismo: lo primero es lo espiritual. Todo surge y todo viene a partir del espíritu. El espíritu es la realidad más básica.

    EL CONOCIMIENTO: EL PROBLEMA EPISTEMOLÓGICO

    Los conocimientos científicos no se corresponden con lo que percibimos por los sentidos. Distinguimos dos posturas:

    • Realista: ha permanecido hasta el siglo XVI. Afirma que podemos conocer la realidad tal y como es. Estos pensadores se han ocupado de estudiar el objeto conocido. Han adaptado el sujeto que conoce al objeto conocido.

    • Idealista: nace en el siglo XVI. Se plantean como funciona el conocimiento para así poder descubrir el verdadero. Analizan el sujeto que conoce. Empieza con Descartes y termina con Kant. El mundo lo construimos nosotros. Los idealistas presuponen que las estructuras del mundo se corresponden con las estructuras mentales para garantizar de este modo que podamos conocer. ( En Descartes, esto lo asegura Dios)

    ¿Cómo conocemos la realidad?

    Distinguimos dos tipos de conocimiento:

    • Conocimiento sensible: obtenido a través de los sentidos y de las sensaciones externas.

    • Conocimiento intelectual: elaborado por el entendimiento. Opera con conceptos, juicios y razonamientos. Es el conocimiento inteligible.

    El conocimiento sensible lo podemos obtener mediante la sensación externa (lo que nos rodea) o mediante la sensación interna (sensaciones dentro de nuestro cuerpo). Es lógico pensar que el conocimiento humano es la síntesis de los dos conocimientos. Esta síntesis la llevó a cabo Kant. Esta síntesis se denomina idealismo trascendental

    • Empirismo: cuando el conocimiento sensible es el único conocimiento.

    • Racionalismo: cuando el conocimiento intelectual es el único conocimiento.

    El lenguaje juega un papel muy importante en las reflexiones epistemológicas, puesto que todas ellas las transmitimos a través del lenguaje.

    Conocimiento y verdad

    Podemos clasificar las maneras de entender la verdad en tres grupos:

    • La verdad como propiedad de las cosas: parte de los Presocráticos. Verdad se dice en griego antiguo (alétheia), que nosotros traducimos por verdad, aunque la traducción literal es desvelamiento. Esa es la verdad para ellos, un desvelamiento que consiste en que lo que está oculto o es desconocido se desvele y se nos muestre.

    Sin embargo, también podemos entender la verdad óntica de Agustín de Hipona, que mantiene que las cosas en sí mismas son verdaderas y que el error y la mentira están en el juicio que emitimos.

    • La verdad como propiedad del entendimiento: para Aristóteles la verdad está en el juicio, puesto que los juicios son elaborados por el entendimiento y por tanto se considera que la verdad es una propiedad del entendimiento.

    La verdad entendida como concordancia entre los juicios elaborados por el entendimiento y la realidad externa.

    Hay concordancia entre los juicios elaborados por el entendimiento cuando la relación establecida en el juicio entre dos términos es la misma que la relación que guardan entre sí las cosas designadas por esos términos en la realidad.

    La verdad entendida como coherencia

    Algo es verdadero cuando se deduce correctamente de algo ya dado, al margen de que corresponda o no con la experiencia.

    La verdad entendida como certeza

    Lo verdadero es aquello de lo que no cabe dudar.

    • La verdad como propiedad de la acción: es verdadero lo que funciona. Unos enunciados son verdaderos porque al conectarlo con el mundo nos conducen a un fin con éxito. El conocimiento debe estar orientado a conseguir fines prácticos.

    ARISTÓTELES

    Platón diferencia dos realidades: Sustancias y accidentes.

    Sustancias: aquel tipo de cosas que existen por sí mismas. Es como un equivalente al término esencia. No existe un conocimiento sensible de ella, pero sí un conocimiento intelectual. Aristóteles distingue dos tipos:

    • Sustancia primera: el objeto o el ser concreto. (Mesa)

    • Sustancia segunda: la idea o representación que hacemos de ella. (Cpto. mesa)

    A partir de las cosas concretas creamos las ideas, al revés que Platón. Todos los objetos tienen materia (aquello de lo que está hecho algo) y forma (aquello por lo cual algo es una cosa y no otra). La materia es común a todas las sustancias primeras, la forma las diferencia. La distinción de forma y materia sólo se puede hacer intelectualmente.

    La sustancia se compone de:

    • Materia prima: eterna e indeterminada. Sin forma. No puede existir ni ser pensada con independencia de la forma.

    • Forma sustancial: da forma a la materia prima. Es universal, es decir, común a los individuos de una misma especie.

    Accidentes: las realidades que sólo pueden existir en otra cosa. Dependen de la sustancia para existir, por lo que son de segundo orden.

    Gnoseología. Aristóteles distingue dos grupos de conocimiento:

    • Conocimiento sensible: conoce lo particular. Lo desarrolla a través de los sentidos. Es sinónimo de experiencia.

    • Conocimiento intelectual: conocimiento de lo universal. Se desarrolla a través del entendimiento.

    Alma: las formas sustanciales que estructuran la materia de los seres vivos. Nos centraremos en las facultades del alma que nos permiten conocer: facultad de conocimiento sensible (opera a través de los sentidos externos e internos) y facultad de conocimiento intelectual (opera a través del entendimiento)

    El conocimiento sensible y el intelectual se complementan. Todo parte con la experiencia sensible, pero no todo nuestro conocimiento es sensible (seríamos empiristas radicales). La meta es el conocimiento intelectual. Aristóteles piensa que primero conocemos y luego abstraemos, llegando así a elaborar conceptos, primero la inducción y luego la deducción, al revés que Platón.

    HUME

    Todo nuestro conocimiento se elabora a partir de las impresiones, que son provocadas por las cualidades de los objetos externos (impresiones de sensación) o por nuestros estados internos (impresiones de reflexión). Cuando desaparecen las impresiones quedan unas huellas en la memoria que llamamos ideas innatas. Al conjunto de percepciones e ideas las llamamos percepciones.

    A partir de las percepciones elaboramos las ideas complejas, atendiendo a la ley de semejanza (ni las cosas ni las impresiones son semejantes en sí mismas, la semejanza las pone el individuo), la contigüidad espacial y temporal (relacionamos las impresiones que se dan en espacios de tiempo pequeños) y la ley de causalidad (no hay relación causal de las cosas)

    Existen dos tipos de juicio:

    • Juicios de razón: se establecen únicamente relaciones entre ideas. Atienden al principio de no contradicción. Su validez es universal y necesaria. Son juicios a priori, anteriores a la experiencia. No aportan conocimiento nuevo.

    • Juicios de hecho: se basan en los datos de la experiencia. Son verdaderos en cada caso, por tanto no son ni universal ni necesarios (depende de la experiencia). Son a posteriori. Dan información del mundo.

    Gnoseología.

    - No admite la existencia de las ideas innatas. Los conceptos son sólo nombres bajo los cuales incluimos a una multitud de impresiones en virtud de la ley de semejanza.

    - Principio de causalidad: no existe impresión de causa (el principio de que toda causa produce un efecto no es cierto) por lo que el principio de causalidad no es válido. El principio de causalidad lo pone el individuo.

    - Fenomenismo: sólo conocemos fenómenos (lo que se manifiesta). Soy yo quien los experimenta. No puedo ir más allá mis impresiones, no conozco el objeto que causa las impresiones, únicamente conozco la impresión.

    - Escepticismo: el conocimiento ha de atenerse a las impresiones. Hay verdades de carácter universal y necesario que no aportan conocimiento y por otro lado, conocimiento que no es ni universal ni necesario.

    Ontología.

    Si no podemos decir nada del mundo con seguridad no podemos hablar de Dios, sustancia, etc. porque no tengo percepción de ello. Sólo puedo conocer los accidentes, pero no la sustancia, puesto que la sustancia es un concepto creado por mí.




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    Enviado por:Kekoforever
    Idioma: castellano
    País: España

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