Literatura
Las Cántigas; Alfonso X El Sabio. Los milagros de Nuestra Señora; Gonzalo de Berceo
SIMILITUDES ENTRE LAS CÁNTIGAS DE LOOR DE SANTA MARÍA DEL REY ALFONSO X “EL SABIO” Y LOS MILAGROS DE NUSTRA SEÑORA DE GONZALO DE BERCEO
Alfonso X, el Rey Sabio
Reseñas histórico-biográficas
Alfonso X `El Sabio' nace en Toledo, en 1221, hijo de Fernando III de Castilla y León y de Beatriz de Suabia. Proclamado Rey de Castilla y León en 1242 de la que fue monarca hasta su muerte, en 1284.
Su reinado no fue fácil. Sufrió varias derrotas frente a los musulmanes, una guerra civil a causa de la sucesión al trono y muere en plena lucha contra su hijo Sancho.
En lo político y lo social Alfonso X no consigue grandes logros, no obstante, es una figura clave para la cultura hispánica del siglo XIII, destacando y haciendo crecer su reino en el terreno cultural y científico.
Como ejemplo de ello, tenemos la creación de la Escuela de Traductores de Toledo.
En el siglo XIII hay una profunda transformación en el contexto político, social y cultural, el territorio musulmán decae y la cultura cristiana va acrecentándose por toda España.
Sin duda, la época del reinado de Alfonso X no sólo conlleva una profunda transformación cultural, siendo el gran paso para el Renacimiento, sino que es también la transición que marca las costumbres y cultura de la época actual.
Las Cantigas
Breve introducción
Son cantigas monódicas galaico-portuguesas. Se conservan cuatro códices, dos en la biblioteca del Monasterio del Escorial, uno en la Biblioteca Nacional de Madrid, cuatro en la Biblioteca de Florencia. Cuatro manuscritos con una bellísima colección de miniaturas donde aparecen ilustrados más de treinta y cinco instrumentos musicales.
Su fecha de elaboración se sitúa entre 1257 y 1283. Es una colección de Milagros que constituye un Cancionero de autor donde el Rey asume su papel de trovador. Son de
fuerte carácter propagandista y eminentemente religioso. Las Cantigas tienen una tensión laudatoria desde el mismo prólogo y el transcurso de la obra.
Están escritas en gallego-portugués, lengua que Alfonso X conoce en Burgos y que emplea en las Cantigas a fin de conseguir una mayor musicalidad y belleza.
El Cancionero Marial está compuesto para ser para ser cantado siendo primordial el elemento musical, así podemos distinguir entre dos términos primordiales para la comprensión del texto. El término `cantar' cuyo autor usa para referirse a la parte literaria de la obra y el término `cantiga' interpretado como el resultado de aplicar la melodía a la letra.
Su estructura suele ser AA/bbba, el esquema de un virelai, estribillo de dos vv. monorrimos, una mudanza de tres vv. también monorrimos, más un verso de vuelta que rima en estribillo. A veces la vuelta la constituyen dos versos con el esquema AA/bbaa o bien el estribillo lo forman dos vv. de rima distinta y la vuelta rima con el segundo verso del estribillo, quedando suelto el primero AB/cccb. Otras veces, el estribillo está formado por tres o cuatro vv. con esquema virelai ampliados.
La estrofa suele ser de cuatro versos., dándose también el caso de estrofas de cinco y seis versos. Se tiende al isosilabismo, existiendo también estrofas polimétricas. Como ejemplo de riqueza literaria, encontramos la Cantiga número uno (Prólogo), modelo de
canciones provenzalizantes, donde es desarrollado un tema trovadoresco de contenido amoroso en siete estrofas de vv. decasílabo, de esquema aaabab.
También tenemos ejemplos de refrán que sólo rima consigo mismo, lo llamado en métrica gallego-portuguesa `palavra perduda' (C. 25 y 32). Así como muestras de rondel (rondeaux francés) donde la estrofa se intercala con uno de los versos del refrán (C. 20 y 33).
En resumen, las Cantigas de Santa María son un fenómeno singular en toda Europa, una de las colecciones de literatura y música medieval más apreciadas y valoradas en todo el mundo.
Gonzalo de Berceo
Reseñas histórico-biográficas
Gonzalo de Berceo es el primer poeta castellano que toma el nombre del pueblo próximo a San Millán, escribe en el siglo XIII su obra cumbre, los Milagros de Nuestra Señora, supone los inicios de la literatura castellana.
A principios del siglo XII en Francia, Inglaterra, Alemania, y parte de Europa encontramos a nobles que saben leer y escribir, van floreciendo las escuelas y universidades, se amplia el número de lectores, y coincide con el desarrollo de literaturas en lengua vulgar, así como el crecimiento de ciudades y el incremento del comercio. La Península Ibérica es un territorio ocupado por los musulmanes y los conflictos entre los reinos cristianos no es favorable para la literatura española. Los cristianos conscientes de su inferioridad científica frente a los musulmanes, habían iniciado una intensa labor de traducción de textos árabes al latín, que, desde comienzos del XII queda centralizada en la Escuela de Traductores de Toledo. Es el llamado `Renacimiento del siglo XII'.
De Gonzalo de Berceo se sabe que debió ser clérigo adscrito al monasterio de San Millán, recibiendo las Ordenes Mayores y conjeturando su vida entre 1198 y 1260. Pasa sus primeros años en el Monasterio de San Millán
del Suso. Parece que no hay dudas en que fue clérigo secular, pues hay documentos donde aparece con el epíteto de preboste.
Poco más se sabe de su vida, no así de sus obras y de su labor hagiográfica, cuya obra cumbre son los Milagros de Nuestra Señora, cantiga de loor donde laurea los lances de María. También cabe destacar entre sus obras y poemas el que escribió a Alejandro Magno, los Loores de Nuestra Señora y el Duelo de la Virgen María entre otros.
Los Milagros de Nuestra Señora
Breve introducción
La labor hagiográfica de Berceo nos narra la historia de María, de la salvación y de sus milagros, basándose para ello en Las Sagradas Escrituras y en las interpretaciones autorizadas de los Santos Padres, así como en la tradición popular.
Berceo como trovador se propone exaltar la obra y gracia de María, escribe así los `sos fechos reales' y los `sos fechos miraclos'.
El estilo lírico adquiere importancia en las oraciones y en los himnos, donde, como hemos dicho anteriormente, recurre a epítetos bíblicos.
La fecha de la composición data del año 1240, y siguió componiéndose hasta después de 1252, ya que la cuaderna 869 se refiere a Fernando el Santo, muerto en 1252, como «el Rey de la buena ventura», lo cual parece indicar que ya Berceo tenía noticia de su muerte.
El tipo de estrofa usada es la Cuaderna vía, es decir, cuatro versos alejandrinos monorrimos y cada verso consta de dos hemistiquios de siete sílabas, veamos pues, este ejemplo:
1 2 3 4 5 6 + 1 = 7 1 2 3 4 5 6 + 1 = 7 7 + 7 = 14
Amigos e vasallos || de Dios omnipotent,
La rima es perfecta, con esquema AAAA, BBBB, CCCC, etc. Lo podemos observar en el siguiente fragmento:
Amigos e vasallos de Dios omnipotent, A
si vos me escuchásedes por vuestro consiment, A
querríavos contar un buen aveniment: A
terrédeslo en cabo por bueno verament. A
En definitiva, Gonzalo de Berceo plantea su labor hagiográfica desde un punto de vista propagandista y religioso que busca la emotividad, la lírica y la épica a razón de los Milagros de María.
Es una obra cumbre de la literatura medieval hispánica.
Cantigas y Milagros
Similitudes
Tanto las Cantigas de Alfonso X como los Milagros de Nuestra Señora de Berceo, son dos obras cumbre de la literatura medieval española que han persistido hasta nuestros días como objeto tanto de lectura como de estudio.
Las canciones de amor profano y escarnio pasan a un segundo plano en favor de las obras de exaltación mariana, con un claro fin propagandístico. Estas obras buscan la exacerbación de la vida y obra de María, así, tanto los Milagros como las Cantigas las calificamos de loor, de loor hacía la virgen.
Como hemos visto, en cuanto a su contenido las dos obras pertenecen a un mismo género, loor, y tocan un mismo tema, la exaltación mariana.
Respecto a su estructura, en las dos obras, observamos que abundan los versos alejandrinos (catorce sílabas), una función práctica, pues a los autores les resultaba imposible narrar un milagro en un octosílabo, así, con el alejandrino consiguen una mayor libertad de acción. Son de carácter responsorial, con el fin de comprobar la verdad sentenciosa que encierra el refrán. Los milagros suelen ser introducidos con un exordio de ponderación para procurar captar la atención del lector o del oyente a modo de apelativo. Un ejemplo de ello lo contemplamos en la cantiga XVII de Alfonso X: “E
daquest' un miragre / vos quer' eu ora contar, que fezo Santa Maria…”, otro, lo podemos observar en el exordio del Prólogo del libro de Berceo: “Amigos e vasallos de Dios omnipotent, si vós me escuchásedes por vuestro consiment, querríavos contar un buen aveniment:…”, o el milagro IV: “Todo omne del mundo fará grand cortesía…”.
El beneficiario de estos milagros suele ser un pecador o, por el contrario, el reconocimiento a toda una vida santa. En Berceo, el beneficiario se muestra pasivo respecto a la acción, cuya protagonista es María, que actúa de inmediato y con gran precisión, así, por su contenido, podemos calificar al milagro mariano como épico. La exaltación de la heroína.
Los milagros marianos tienen una clara tradición oral, siendo así estas dos obras no sólo un cancionero de autor, sino una perfecta recopilación escrita de acciones de Nuestra Señora, de carácter tanto popular como culto.
El número cinco cobra especial importancia en estas obras, ya que son cinco letras de las que consta el nombre de María y conlleva una connotación simbólica. Así Berceo se esfuerza por hacer veinticinco los milagros de su colección y veinticinco son los nombres que recibe María en el Prólogo. Las Cantigas de Santa María terminadas en cinco reciben un tratamiento especial en el Códice Rico y al menos dos de las Cantigas de Loor (la 70 y la 410) glosan las cinco letras de su nombre.
La literatura de los milagros es muy específica de la Edad Media, como muestra, disfrutamos de autores como Alfonso X, Gonzalo de Berceo, Gautier de Coinci o de Adgar, desde los siglos XI y XII en latín, pasando al siglo XIII a lengua Romance, como es el caso de Gonzalo de Berceo.
En conclusión, se trata de literatura propagandística de corte religioso y emotivo que, con el tiempo, desvirtúa su factor laudatorio y toma un tizne moralizante. Es un objeto de lectura obligado para conocer la historia de la Edad Media a través de la literatura, mudándonos de lugar para evitar dichos tiznes moralizantes y situándonos en la más pura sociedad medieval donde el centro, fue Dios.
Bibliografía
ALFONSO X, Cantigas, Catedra, Madrid, 1988.
ALFONSO X, Las Cantigas de Loor de Alfonso X El Sabio, Júcar, Capellades (Barcelona), 1990.
DE BERCEO, Gonzalo, El libro de los Milagros de Nuestra Señora, Universidad de Granada, Granada, 1981.
DE BERCEO, Gonzalo, Los Milagros de Nuestra Señora, Colegio Universitario de La Rioja, Logroño, 1984.
Otras fuentes:
http://www.geocities.com/urunela3/berceo/biografia.htm
http://www.geocities.com/urunela2/milagros.htm
http://www.valleNajerilla.com
Descargar
Enviado por: | Geropita |
Idioma: | castellano |
País: | España |