Ética y Moral


Experimentación con animales


La ética en la experimentación con animales

Los seres humanos tenemos con los animales una relación de doble sentido, ya que por un lado hay animales salvajes, a los que normalmente les tenemos miedo ya que nos pueden atacar y agredir; y por otro lado están los animales domésticos, de los que obtenemos gran variedad de alimentos y también sirven de animales de compañía.

Animales de laboratorio

También podemos distinguir otro grupo, animales de laboratorio, éstos se utilizan en campos de ciencia, como biología y medicina, y también en muchas industrias. Así cuando quieren sacar un cosmético al mercado o cuando sacan un nuevo medicamento, antes se realizan ensayos con animales para saber qué posibles efectos desconocidos pueden producir.

Sobre este tema hay dos opiniones diferentes, unos opinan que aunque estos experimentos sean útiles para los seres humanos, no justifica todo el sufrimiento que padecen los animales. Otros opinan que el ser humano es superior a los animales por lo que pueden utilizarlos para hacer los experimentos.

La ciencia asume que los animales humanos y no humanos tenemos respuestas similares ante estímulos similares y que tenemos una fisiología suficientemente parecida como para que sus pruebas puedan ser justificables a los ojos de los “científicos”. Se asume que los demás animales también sienten, sufren, buscan el placer, pasan miedo, les duele cuando se les pega… en definitiva, que si se les causa dolor eso afecta al sujeto que tienen entre sus manos y pese a eso, pese a saber, ver, confirmar, que somos similares, siguen encarcelándolos, quemándolos, envenenándolos, apaleándolos… en nombre de la ciencia, de la estética, de la mejora de las armas…

Así, no existe un sufrimiento para los "humanos" y otro para los “demás animales", tan sólo existe el sufrimiento. La terrible experiencia del dolor, el estrés, la angustia y del miedo, resultan tan indeseables para unos como para otros. Por ello, el mismo grado de padecimiento ajeno debería tener uestra parte la misma consideración ética.

En todo ello está la base del espejismo, por el que los intereses de los demás animales (aunque sean tan fundamentales como la vida, la libertad, el no sufrir…) son infravalorados frente a los de los animales humanos, simplemente porque no son de nuestra especie (discriminación similar a la que podría hacer un racista con los intereses de individuos de una raza o cultura diferente a la suya).

Pero, aún en el hipotético caso de una cierta eficacia de la experimentación con animales no humanos, estaríamos ante un mero intercambio de "dolor por dolor". Incluso el más entusiasta vivisector aceptará como válida la teoría de que, si queremos obtener datos realmente significativos para los humanos sobre una enfermedad concreta, deberemos estudiar los modelos más próximos a nosotros, por lo que si queremos “buena ciencia” lo ideal sería experimentar directamente con humanos (cosa que si se hace sin el consentimiento del sujeto implicado la propia sociedad ve como totalmente carente de ética). Las capacidades cognitivas de los individuos no son importantes a la hora de valorar si sus intereses merecen ser respetados. Si no utilizaríamos a un bebé humano, a un discapacitado cognitivo o a un enfermo de Alzheimer (humanos con una menor

capacidad intelectual, similar en muchos casos a la de otras especies no humanas) en un experimento de abrasión dérmica por ejemplo,

tampoco es ético hacerlo con conejos, ya que éstos tienen la misma capacidad de sentir (dolor, angustia, pánico, desasosiego, estrés…) que los humanos.

La técnica más usada en la experimentación con animales

VIVISECCIÓN

La vivisección es la práctica de experimentar con animales vivos. Realizan casi todos los tipos de experimentaciones con ellos que se puedan imaginar..

La sociedad cierra los ojos porque quiere beneficiarse de estos experimentos y no quiere saber en qué consisten o cómo se desarrollan. Al hablar a favor del respeto a los animales y en contra de que se realicen dolorosos experimentos con ellos, puede parecer a algunos que es como si estuviésemos hablando en contra de la especie humana porque, en nombre de la ciencia, y a favor de la salud del hombre, todo queda justificado. Pero, ¿es esto así? La sociedad tiene que saber el costo en sufrimiento que suponen los avances científicos.

Un “animal de laboratorio” es un ser sano al que se le provoca una enfermedad para ser posteriormente sometido a intervenciones quirúrgicas cruentas para curar, no a él, sino la enfermedad, con el consiguiente dolor mientras enferma, dolor en el postoperatorio, etc. Y a ese animal sólo le espera morir como víctima del experimento o ser sacrificado porque ha dejado de ser útil. Además, durante la experimentación pasa la vida prisionero en una jaula y sabe perfectamente que, cada vez que lo sacan de ella, es para producirle dolor.

Filosofos que apoyaron la experimentación con animales

En el siglo XVII, el filósofo René Descartes afirmó que los animales no tenían alma sino que, esencialmente, eran máquinas de carne y hueso que estaban en la tierra sólo para el uso del hombre. En consecuencia, según Descartes, el ser humano no tenía por qué sentirse culpable por matar animales ya que esas matanzas no eran, de ninguna manera, moralmente censurables. Esta creencia fue abrazada con entusiasmo por la iglesia católica, que en aquellos tiempos mantenía una intensa lucha contra el paganismo, cuyas ideas, en general, dicen que los animales tienen un espíritu propio, que no pertenece al hombre y que no deben asesinarse de forma arbitraria.

Conclusiones

Nuestras conclusiones acerca de la experimentación con animales son las siguientes y las hemos formulado a través de preguntas y respuestas:

-¿Es ético la experimentación con animales?

No, por que en la mayoria de los casos se provoca un sufrimiento innecesario en animales que no han tenido la culpa de ser objeto de experimentos. Aunque a traves de estas investigaciones obtenemos nuevos avances, desarrollo y nuevos medios estos no justifican el sufrimiento al que son sometidos estos animales.

-¿Justifica estas actuaciones que algunos intelectuales y filosofos apoyaran estas investigaciones?

No, por que por ejemplo el filosofo Descartes que los animales no-humanos, a los que consideraba máquinas de carne y hueso, sin vida consciente, ni deseos ni emociones. Consideraba que su vida y sus movimientos se realizaban mecánicamente, como una especie de autómatas complejos. Y por tanto no sufrían ni experimentaban dolor

-¿Qué alternativas podemos escoger a la experimentación con animales?

Existe una enorme variedad de técnicas de investigación sin animales que, siendo un acercamiento más humano a la ciencia, también pueden resultar más económicas y más efectivas. Estas incluyen el cultivo de células, tejidos y órganos; micro-organismos tales como las bacterias, investigación molecular; estudios con tejidos post-mortem, simulaciones por ordenador incluyendo QSAR's estudios de población (epidemiología) e investigación clínica con voluntarios humanos. Además así no producimos sufrimiento innecesario a los animales que no tienen culpa de nada.




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Enviado por:Xikamix
Idioma: castellano
País: España

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