Filosofía y Ciencia
El Hombre como Pensador; Mateo Andrés
“El Hombre como Pensador”, Mateo Andrés S.J.
Introducción:
En el libro “El Hombre como Pensador”, de Mateo Andrés S.J., nos dan una breve introducción a la filosofía. El autor mediante este libro, tiene como objetivo despertar el pensador dormido que yace en cada uno de nosotros, los jóvenes. Y lo intenta de una manera más interesante, de estilo poético-deportivo para que así los estudiantes se animen a filosofar.
El autor intenta hacerlo de esta manera ya que se trata de jóvenes que carecen de todo rigor científico y aun lingüístico. Y así cree que es mejor de esta manera, que por vía de exactitud filosófica.
El busca que los jóvenes piensen, y dejen el hábito de ser meros repetidores, y se ejerciten en pensar, para acabar pensando bien.
En el primer capitulo, el autor intenta explicar que es filosofar, partiendo de la necesidad innata en el hombre, ya que todo hombre aspira a reflexionar sobre su vida.
Es un hecho que el hombre filosofa, así comienza el autor para expresar la necesidad que tiene todo hombre de filosofar, así sea conciente o inconscientemente. Como existen hombres agricultores, médicos y sacerdotes, también existen los filósofos, que se dedican a pensar, a buscar la causa última de todo.
Comienza explicando las diferencias existentes entre hombre y animal. Diciendo que el animal y el hombre no se situan de la misma manera. “El animal no reflexiona sobre la situación. El hombre, si. El hombre - dicen los existencialistas - “se situa”; es decir, toma conciencia de la situación; se relaciona con ella tratando de conocerla u utilizarla a su servicio. En consecuencia, el hombre progresa; el animal, no.”
Con esto el quiere decir que si el hombre y el animal son puestos en una misma situación, el hombre, autoconciente y libre, se interroga sobre esta y ve que le ofrece y niega, el animal, no.
Luego pasamos a ver las diferencias entre el hombre comun y el hombre filosofo, que diferencia hay de uno y otro si ambos reflexionan? El hombre filosofo es el que empuja la reflexion humana hasta el ultimo extremo de la reflexion, y en consecuencia pregunta por el valor de todo y cada uno de los diferentes puntos de vista. “Merece la pena vivir?, el suicidio no es una alternativa igualmente valiosa?” (Camus)
En resumen, el hombre es un ser de reflexion: puesto en una situación no puede menos de pensar sobre ella y sobre si mismo. Pues bien, ser filosofo es llevar esa tendencia hasta sus ultimas consecuencias; y de ese modo, tratar de fundamentar o hallar el fundamento no solo de una serie de acciones, sino del mismo ser-hombre y actuar como-hombre.
En este doble contexto de exceso de filosofias y necesidad de filosofar, la introducción puede significar dos cosas, objetiva y subjetiva.
La objetiva es el esfuerzo de introducir a los planteamientos y soluciones, propuestos por los filosofos, siglo tras siglo. La subjetiva es ponernos ante la disposición interior del hombre que no puede menos de pensar y filosofar.
Existen cuatro rasgos que distinguen al hombre concreto:
-Dista de su mejor ser
-es conciente de esa distancia
-se cuestiona y sufre por ella
-anhela superarla
El hombre existe distante de si mismo. En ningun momento llega el hombre a ser todo-lo-que-puede-ser, todo-lo-que-debe-ser. El hombre concreto siempre dista del ideal y del deber. Mientras vive en la tierra el hombre nunca llega, nunca se iguala consigo mismo. A esta distancia se le llama intradistancia. “El hombre nunca “es” ya logrado, sino un “proceso”; al mismo tiempo ilusion, desengaño; grito y silencio; espera y desesperación.”
Ser hombre es distar, y seguir distando de si mismo; es nunca haber llegado.
Los poestas son los que se acercan a esta realidad evasiva del hombre, como se ve en un ejemplo presentado en el libro, en el poema de Antonio Machado.
Los principales signos claros de intradistancia humana son:
El dolor: “No puedo creer en un Dios que deja padecer a los inocentes” (Camus)
La tristeza: Los sentimientos del pasado nos hablan de que “cualquier tiempo pasado fue mejor” (J. Manrique)
La culpa: “No hago lo que quiero, sino lo que no quiero” (S. Pablo, Rom. 7,14) La lucha moral y la culpa expresan asi, como pocos otros signos, la terrible intradistancia humana. La injusticia: Las injusticias del debil contra el fuerte, el abuso, las guerras, etc.
Conclusión:
Este libro me gusto mucho, porque me ayudo a filosofar sobre el comportamiento del ser humano, la descripción que da el libro de este es muy real. El autor describe el hombre como un ser inconforme de lo que es. Que a diferencia de los animales, el hombre se guia a si mismo, no le guian sus instintos como al animal, sino sus convicciones.
Lo que mas me gusto fue el concepto que el autos da de cómo el hombre no “es” sino un “proceso”, siempre trata de mejorarse y llegar lo mas lejos que puede. Y como todo hombre es filosofo, ya que filosofar es una accion inconsciente de todo hombre. Si el hombre decide ser filosofo, lo es, si no lo decide, tambien lo es.
Y es muy real el hecho en que el joven siente de un modo especial y en grado muy agudo la intradistancia, como los sentimientos de inseguridad, ilusion y esperanza, en ninguna otra persona se dan tan vivos como en el joven.
Bibliografía
“El Hombre como pensador”, Mateo Andres S.J.
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Idioma: | castellano |
País: | República Dominicana |