Arte


Arte medieval y Religión


UNIVERSIDAD INTERAMERICANA DE COSTA RICA

CENTRO DE ESTUDIOS DE POSTGRADO

MAESTRIA EN HUMANIDADES

TRABAJO FINAL DE GRADUACIÓN PARA OPTAR EL GRADO ACADEMICO DE MASTER EN HUMANIDADES

ARTE MEDIEVAL: ARTE AL SERVICIO DE LA RELIGION

INDICE

INDICE

INTRODUCCIÓN

El presente trabajo cumple con el requisito de hacer una investigación final para optar por el grado de Master en Humanidades de la Universidad Interamericana de Costa Rica; que según lo estipulado, trata de unir un aspecto de las humanidades con la profesión del aspirante. Dado que en mi caso es la Historia Del Arte, la relación se hará en el campo del arte medieval, por lo que se tratará de una investigación de gran importancia que permitirá poner en práctica los conocimientos adquiridos.

Este estilo, en los diez siglos que dura, refleja los valores, las aspiraciones y el pensamiento de la sociedad eclesiástica para la que es producido, por lo que existen claras diferencias de hecho en las obras artísticas realizadas en esta época, demostrando así una evolución cada vez mayor del poder de la religión cristiana; sin embargo, nos interesa además de lograr establecer esas diferencias y sus aspectos iconográficos, aquellos caracteres en los que se logra trazar algún grado de continuidad a través del tiempo y los cambios habidos.

Con el fin de poder establecer las características de este periodo, y entender las particularidades del mismo - realizado en arquitectura, escultura, pintura y mosaico - esta investigación cubrirá primero, de forma sucinta, la parte histórica del periodo; así como una reseña de la expansión de la religión cristiana a partir de su aparición en el siglo I, para luego estudiar detenidamente el Arte del Medioevo.

Así, este trabajo representa el estudio de una manifestación específica del ámbito artístico, temporalmente restringida a una época específica, por lo que intentaremos ampliar su análisis con aspectos de otras disciplinas como la Historia y la Religión, con el fin de incluir temáticas de diversos cursos del programa de la Maestría y, mediante el estudio de una de sus manifestaciones, tratar de comprender el arte como un reflejo del ser humano, tanto en su aspecto social como individual.

CAPITULO I

LA EDAD MEDIA

La Edad Media es el periodo de la historia europea que transcurrió desde la desintegración del Imperio Romano de Occidente, en el 476, y que termina en el siglo XIV, unos dicen que con la caída del Imperio Romano de Oriente en 1450 y otros dicen que en 1492, con el descubrimiento de América, por lo que es muy difícil indicar una fecha exacta, ya que, nunca ha existido una brusca ruptura en el desarrollo histórico y cultural del hombre.

El término fue empleado por vez primera por el historiador Flavio Biondo de Forli, en su obra Historiarum Ab Inclinatione Romanorun Imperii Decades e implicó en su origen un detenimiento del progreso, ya que, se consideró que fue un periodo de paralización cultural, ubicado cronológicamente entre la gloria de la Antigüedad Clásica y el Renacimiento, lo cual es falso, ya que, este periodo es uno más de los que constituyen la evolución histórica europea, con sus propios procesos críticos y de desarrollo.

La Edad Media podemos dividirla en Temprana Edad Media, Alta Edad Media y Baja Edad Media

La Temprana Edad Media, que va del siglo V al IX, estuvo caracterizada por las invasiones Bárbaras. “El desarrollo político y económico era fundamentalmente local y el comercio regular desapareció casi por completo, aunque la economía monetaria nunca dejó de existir de forma absoluta”.

A fines del siglo IV de nuestra era, el Imperio Romano se extendía por toda Europa, Asia y África por el Mar Mediterráneo. Pero este gran imperio se hallaba dividido en Imperio Romano de Occidente, e Imperio Romano de Oriente.

El Imperio Romano de Occidente se hallaba rodeado desde el mar del Norte hasta el mar Negro por pueblos bárbaros. Para impedir las invasiones, los romanos habían fortificado las fronteras, las atrincheraron y establecieron campos militares en los que tenían numerosas legiones.

A sí mismo, durante el siglo IV, los romanos intentaron contener la amenaza bárbara estableciendo una serie de pactos con algunos pueblos fronterizos de origen germano lombardos, francos, alamanes, vándalos, visigodos y ostrogodos, entre otros, a los que se otorgaba la condición de federados y una cantidad de dinero anual a cambio de su ayuda militar contra otras tribus invasoras. Sin embargo, a finales de esta centuria la llegada de los hunos, pueblo nómada y pastor originario de la estepa asiática, provocó la avalancha masiva de los germanos y el desmoronamiento definitivo de las fronteras del Imperio, que ya no se hallaba en condiciones de defender su integridad.

El Feudalismo

En la culminación de este proceso iniciado durante el Imperio Romano, los campesinos comenzaron a ligarse a la tierra y a depender de los “grandes propietarios para obtener su protección”, y una rudimentaria administración de justicia en lo que constituyó el germen del régimen señorial. Los principales vínculos entre la aristocracia guerrera fueron los lazos de parentesco, aunque también empezaron a surgir las relaciones feudales, dichos vínculos tienen su origen en la antigua relación romana entre patrón y cliente, y en la institución germánica denominada comitatus ó grupo de compañeros guerreros, que se dio como un fenómeno histórico-social, que solamente aludía a uno de los elementos constituyentes de las relaciones vasalláticas: el feudo.

El Feudalismo se desarrolló como respuesta a la desintegración de la autoridad central y al caos social que surgió tras el fin del mandato romano. Una jerarquía de hombres poderosos, regidos por el nuevo sistema de vasallaje y la división territorial en feudos, sustituyó al antiguo sistema romano de emperador, senado, provincia, ciudad y pueblo.

El feudalismo fue el sistema político, económico y social que predominó en Europa occidental desde el siglo X, hasta mediados del siglo XIII En esta época el feudalismo se dio predominantemente en Francia, Alemania y buena parte de Italia e Inglaterra

La sociedad feudal era visualizaba como una pirámide, en cuya cumbre estaban el monarca y el papado, enseguida se ubicaban los nobles y la jerarquía eclesiástica, y los siervos constituían la base.

Este sistema se caracterizó por un tipo de relación social que se conoció como vasallaje, que se dio básicamente entre los nobles y el monarca. El vasallaje se definía como un contrato que creaba obligaciones de obediencia y servicio entre el “vasallo” y el “señor”, el trato implicaba que este, otorgara al vasallo la posesión de una extensión de tierra llamada “feudo”, mientras que el vasallo prometía obediencia y fidelidad a su señor y se comprometía a cumplir una serie de funciones en su nombre

Dentro del espacio territorial de los señores vivían campesinos que no eran propiedad personal del señor feudal, pero tampoco eran hombres libres sino “siervos”; estos tenían la obligación de entregar parte de su trabajo agrícola y de realizar determinadas obligaciones laborales para su señor; la gran mayoría del campesinado vivía una condición de servidumbre, es decir, que ocupaban y cultivaban la tierra pero no eran sus propietarios.

El modo de producción feudal fue eminentemente agrícola y el comercio se redujo a su mínima expresión. La vida rural fue controlada por los señores feudales, que la organizaron dentro de sus propiedades, que incluían comarcas campesinas.

Este sistema unía la prestación política y militar a la posesión de tierras con el propósito de preservar a la Europa medieval de su desintegración en innumerables señoríos independientes tras el hundimiento del Imperio Carolingio.

El feudalismo alcanzó su madurez en el siglo XI y tuvo su máximo apogeo en los siglos XII y XIII. Su cuna fue la región comprendida entre los ríos Rin y Loira, dominada por el ducado de Normandía. Al conquistar sus soberanos, a fines del siglo XI, el sur de Italia, Sicilia e Inglaterra y ocupar Tierra Santa en la primera Cruzada, establecieron en todas estas zonas las instituciones feudales, así mismo España también adoptó un cierto tipo de feudalismo en el siglo XII.

Los orígenes de este sistema se remontan a la caída del imperio romano, ya que, cuando “los pueblos germanos conquistaron en el siglo V el Imperio romano de Occidente, pusieron también fin al ejército profesional romano y lo sustituyeron por los suyos propios, formados con guerreros que servían a sus caudillos por razones de honor y obtención de un botín”. Estos vivían de la tierra y combatían a pie porque, no necesitaban emplear la caballería. Pero cuando el resto de tribus bárbaras, invadieron Europa en los siglos VIII, IX y X, los germanos se vieron incapaces de enfrentarse con unos ejércitos que se desplazaban con suma rapidez.

En esta época los caballos de guerra eran costosos y su adiestramiento para emplearlos militarmente exigía años de práctica. Carlos Martel, con el fin de ayudar a su tropa de caballería, le otorgó fincas que tomó de las posesiones de la Iglesia. Estas tierras, denominadas beneficios, eran cedidas mientras durara el servicio de los soldados. Éstos, a su vez, fueron llamados vasallos, término derivado de una palabra celta que significaba sirviente, y se convirtieron en modelos para aquellos nobles que seguían a la corte.

La prestación militar era fundamental en este sistema y se conoció como Feudalismo Carolingio, pero carecía aún de uno de los rasgos esenciales del feudalismo desarrollado plenamente desde el siglo X. Fue sólo hacia el año 1000 cuando el término `feudo' comenzó a emplearse en sustitución de `beneficio', a partir de este momento se aceptaba de forma unánime que las tierras entregadas al vasallo eran hereditarias, con tal de que el heredero que las recibiera fuera grato al señor y pagara un impuesto de herencia llamado socorro. El vasallo no sólo prestaba el obligado juramento de fidelidad a su señor, sino también un juramento especial de homenaje al señor feudal, el cual, a su vez, le investía con un feudo. Si los herederos no eran aceptados por el señor, la propiedad del feudo revertía en éste, que así recuperaba el pleno control sobre el feudo; entonces podía quedárselo para su dominio directo o cederlo a cualquier caballero en un nuevo vasallaje. De este modo, el feudalismo se convirtió en una institución tanto política como militar, basada en una relación contractual entre dos personas individuales, las cuales mantenían sus respectivos derechos sobre el feudo.

En su forma más clásica, el feudalismo occidental asumía que casi toda la tierra pertenecía al príncipe soberano, quien la recibía “de Dios". El príncipe cedía los feudos a sus barones, los cuales le rendían el obligado juramento de homenaje y fidelidad por el que prestaban su ayuda política y militar, según los términos de la cesión. Los nobles podían ceder parte de sus feudos a caballeros que le rindieran, a su vez, homenaje y fidelidad y les sirvieran de acuerdo a la extensión de las tierras concedidas. Un noble podía conservar la totalidad de sus feudos bajo su dominio personal y mantener a sus caballeros en su señorío, alimentados y armados, todo ello a costa de sufragar las prestaciones debidas a su señor a partir de su propio patrimonio y sin establecer relaciones feudales con inferiores, pero esto era raro que sucediera ya que los caballeros deseaban tener sus propios señoríos. Los caballeros podían adquirir dos o más feudos y eran proclives a ceder, a su vez, parte de esas posesiones en la medida necesaria para obtener el servicio al que estaban obligados con su superior.

Dado el carácter contractual de las relaciones feudales cualquier acción irregular cometida por las partes podía originar la ruptura del contrato. Cuando el vasallo no llevaba a cabo las prestaciones exigidas, el señor podía acusarle, en su corte ante sus otros vasallos y si éstos encontraban culpable a su par, entonces el señor tenía la facultad de confiscar su feudo que pasaba de nuevo a su control directo y si el vasallo intentaba defender su tierra el señor podía declararle la guerra para recuperar el control del feudo confiscado; y en el caso contrario, si el vasallo consideraba que su señor no cumplía con sus obligaciones, podía desafiarle y declarar que no le consideraría por más tiempo como su señor, si bien podía seguir conservando el feudo como dominio propio o convertirse en vasallo de otro señor, se consideraba el desafío como una rebelión al señor, los vasallos desafiantes debían contar con fuertes apoyos o estar preparados para una guerra que podían perder.

El feudalismo alcanzó el punto culminante de su desarrollo en el siglo XIII; a partir de entonces inició su decadencia. El traspaso de feudos llegó a tal punto que los señores tuvieron problemas para obtener las prestaciones que debían recibir. Los vasallos prefirieron realizar pagos en metálico, “scutagium” a cambio de la ayuda militar debida a sus señores; a su vez éstos tendieron a preferir el dinero, que les permitía contratar tropas profesionales que en muchas ocasiones estaban mejor entrenadas y eran más disciplinadas que los vasallos. Además, el resurgimiento de las tácticas de infantería y la introducción de nuevas armas, como el arco y la pica, hicieron que la caballería no fuera ya un factor decisivo para la guerra.

La decadencia del feudalismo se aceleró en los siglos XIV y XV. Durante la guerra de los Cien Años, donde las caballerías francesa e inglesa combatieron duramente, pero las batallas se ganaron en gran medida por los arqueros de a pie y por los soldados profesionales, que combatieron en unidades cuyos jefes habían prestado juramento de homenaje y fidelidad a un príncipe, pero con contratos no hereditarios y que normalmente tenían una duración de meses o años.

La figura jurídica del feudo estaba contenida en el derecho consuetudinario de Europa occidental y en aspectos feudales como la tutela y el matrimonio, la confiscación, que continuaron en vigor después de que la prestación militar hubiera desaparecido. En Inglaterra las posesiones feudales fueron abolidas por ley en 1660, pero se prolongaron en algunas zonas de Europa hasta que el derecho consuetudinario fue sustituido por el Derecho romano, proceso concluido por el emperador Napoleón a principios del siglo XIX.

Los Caballeros Medievales

El origen de los caballeros medievales se remonta a Roma, en tiempos de Numa Pompilio, nació el ejército, “basado a su vez en la división de las treinta curias, cada una de las cuales había de proporcionar una centuria ó cien infantes, y una decuria o diez jinetes con sus caballos”; su número ascendía a trescientos, número que se triplicó en época de la República. A medida que Roma fue creciendo se separó la parte militar de la social; ya en el imperio los milites conformaron el orden ecuestre y se constituyeron en una nobleza cuyos títulos concedía el emperador y ocuparon los puestos de la administración que no estaban reservados a los senadores.

Los milites, eran fundamentalmente guerreros a caballo que configuraban el elemento más importante de los ejércitos romanos, basados en el poder de la caballería. Si los caballeros eran de origen noble, su rango social no quedaba modificado, pero si pertenecían a las clases humildes eran elevados a la posición social de sus compañeros de armas.

En la Temprana Edad Media, los guerreros de los pueblos germánicos luchaban a pie, pero entre los años 700 y 1000 se crearon fuerzas de caballería, como única solución para oponerse a los poderosos invasores musulmanes, vikingos y magiares o tribus húngaras.

En el siglo XI, la aristocracia germánica adoptó de forma generalizada las tácticas de lucha a caballo, el concepto de feudo y el de vasallaje, dando con ellos lugar al proceso de feudalización. Pero fue en Francia e Inglaterra donde, en el siglo siguiente, el caballero adquirió una connotación honrosa y no meramente militar, así el término francés chevalier que quiere decir jinete y la palabra inglesa knight, derivada del vocablo anglosajón cnight que significaba sirviente, adquirieron este significado. Al desarrollo de la caballería pesada contribuyeron la invención de los estribos, que permitía una mayor estabilidad en el combate a caballo, y el descubrimiento de medios para herrar a los equinos.

El caballero pasó a ser un guerrero a caballo que servía al rey o a otro señor feudal como contrapartida habitual por la tenencia de una parcela de tierra, aunque también por dinero o como tropa mercenaria. El caballero era por lo general un hombre de noble de cuna que, habiendo servido como paje y escudero, era luego ceremonialmente ascendido por sus superiores al rango de caballero. Durante la ceremonia el aspirante solía prestar juramento de ser valiente, leal y cortés, así como proteger a los indefensos

La formación de los caballeros empezaba a la edad de siete u ocho años, los niños de la clase noble eran enviados para servir de pajes en la casa de un gran señor. Las mujeres les enseñaban los conocimientos sociales básicos, y empezaban un entrenamiento elemental del uso de las armas y la equitación. Alrededor de los 14 años, los jóvenes se convertían en escuderos, es decir, en aprendices de caballero. Cada escudero se asignaba a un caballero, que debía continuar la educación del joven. Los escuderos eran compañeros habituales y sirvientes de los caballeros. Los deberes de los escuderos incluían limpiar la armadura y las armas (propensas a oxidarse), ayudar al caballero a vestirse y desvestirse, cuidar de sus pertenencias, e incluso dormir a su puerta como guardián. Los escuderos asistían al caballero en todas sus necesidades. Traían armas y caballos de reemplazo, curaban sus heridas, retiraban a los heridos del campo de batalla y, llegado el caso, se encargaban de que recibiera un entierro digno. En muchas ocasiones, los escuderos iban a la guerra con el caballero y luchaban a su lado. Los guerreros evitaban combatir contra los escuderos del bando enemigo y preferían buscar un caballero de su rango, o superior. Los escuderos, por su parte, deseaban enfrentarse a caballeros para obtener prestigio matando o capturando a un enemigo noble. Además del entrenamiento marcial, los escuderos se fortalecían mediante juegos, aprendían a leer y, generalmente, también a escribir, y estudiaban música, baile y canto.

A la edad de 21 años, un escudero podía ser designado caballero. Los candidatos que lo merecían, recibían ese honor de manos de un señor o de otro caballero de alto rango. Normalmente sólo podían llegar a ser caballeros aquellos que poseían tierras o ingresos suficientes para hacer frente a las responsabilidades de su rango. Los escuderos que se distinguían en la batalla durante la guerra podían ganarse el reconocimiento de un gran señor y ser ordenados caballero en el mismo campo de batalla. En un principio, la ceremonia de ordenación era simple; consistía normalmente en ser tocado con una espada en el hombro y después ceñirse el cinto con la espada. Posteriormente la ceremonia se complicó, sumándose al rito la Iglesia. Los candidatos se bañaban, se cortaban el pelo y pasaban la noche en vela, orando. Por la mañana recibían su espada y las espuelas de caballero.

El ordenamiento de un caballero estaba marcado por un ritual, el cual recibía el nombre de espaldarazo o palmada, que fue haciéndose más complejo con el paso del tiempo. Así, en el siglo XII, solo era necesario que otro caballero, una vez que el aspirante había demostrado su maestría con las armas, le reconociese como caballero, lo cual hacía dándole un golpe con su puño o con el plano de la hoja de una espada en el hombro o la nuca y le llamaba señor caballero; entonces los nobles asistentes le colocaban las espuelas, lo que se asociaba al valor en las batallas. En el siglo XIII, el ritual era mucho más complicado; “en primer lugar la Iglesia exigía que el escudero consagrara sus armas en un altar, que pasara la noche en vela orando y mantuviese ayuno, por último, debía tomar un baño ritual de purificación, jurar sobre los Evangelios y tomar la Comunión. Tras la ceremonia era frecuente que tuviesen lugar torneos y fiestas”. Aunque en un principio este ritual alcanzó un mítico prestigio que hizo que muchos nobles se ordenasen caballeros, el hecho de que el recién armado caballero debiera comprarse la armadura y el caballo, además de correr con los gastos de la ceremonia, provocó que a medida que el cargo de caballero fue perdiendo importancia, cada vez fueron menos los que estaban dispuestos a correr con estos gastos.

A mediados del siglo XIII, un caballero debidamente equipado debía tener un complicado yelmo que le cubriera toda la cabeza, un penacho para distinguirse de otros guerreros, una visera cerrada y armadura para él y su montura. Asimismo, debía emplear ayudantes para servirle, como pajes y escuderos, por lo que, de las familias que pensaran dedicarse a la guerra como ocupación principal, solamente aquellos que tuviesen medios suficientes podían llegar a ser nombrados caballeros.

El carácter y los ideales de la caballería estaban rodeados de un aspecto místico en el que se entremezclaban las cualidades de la nobleza, las virtudes cristianas y el amor cortés hacia las mujeres, el concepto del honor constituía la piedra fundamental del código caballeresco. La "palabra de honor" era el compromiso más solemne del caballero. La palabra dada por un caballero no podía ser retractada nunca.

El caballero ideal debía ser un hombre valeroso, leal, piadoso, recto en sus convicciones religiosas y generosas; debía poner su espada al servicio de los pobres y de los débiles y, especialmente, al servicio de las Cruzadas a Tierra Santa. Se creó de este modo la idea de Caballero de Cristo, del cual hablaremos en el segundo capítulo.

La autoridad para conferir el título de caballero variaba en los diferentes países. Normalmente era el soberano quien tenía este poder, pero en muchas órdenes militares como en los templarios, el Gran Maestre estaba considerado como soberano y, por tanto, igualmente dotado del poder de otorgar el rango. Otros que poseían esta autoridad eran los príncipes reales, los comandantes de los ejércitos reales y las personas de elevado rango o posición en las que el soberano hubiese delegado; además, se concedió esta facultad a algunos obispos y abades en los siglos XI y XII. El título de caballero era reconocido en todos los países europeos y no solamente en el país que lo había designado. No obstante, un soberano podía restringir el rango, prioridades y privilegios conferidos a un caballero armado como tal en el extranjero.

La batalla de Azincourt, en 1415, marcó el declinar de los caballeros, al ser la caballería francesa destrozada por la infantería inglesa. Desde ese momento los caballeros fueron transformando su posición militar en un escalón más de la jerarquía nobiliaria.

La Formación Del Estado Moderno

El Estado Moderno se origina por determinados cambios económicos y sociales que ocurrieron en Europa entre los siglos XIII y XV. Su nacimiento se encuentra en la decadencia del medioevo europeo, escenario de importantes cambios en su ordenamiento político. Lentamente, “surge entre las comunidades un sentimiento de identificación cultural y nacional en un territorio con fronteras determinadas y con un gobierno que dirige los destinos del pueblo. Los monarcas interesados en concentrar el poder en su persona negocian con los señores feudales ayudados por lo burgueses, tranzando derechos individuales sobre sus feudos a cambio de importantes privilegios. De este modo el concepto feudal de lealtad es reemplazado por el de autoridad y obediencia, propios de un Estado con poder centralizado.

El Estado Medieval, se caracterizaba por una economía eminentemente agrícola, lenta y de tipo localizada, que se expresaba a través del sistema feudal. El gobierno era descentralizado basado en numerosas clases sociales, sin embargo todo era posesión del rey el que lo había entregado todo a manos de barones y señores, en quienes residía el poder político y económico en las regiones. La ley en ésta época era producto de la ley natural divina profesada por la iglesia, de tal forma que la ley era una cuestión de costumbre y de tradición.

El medioevo tiene una distribución descentralizada y graduada del poder político que residía sobre el emperador, la iglesia y la ley. Sin embargo éste poder era limitado, ya que la institución sobre la que residía el poder político realmente era la Iglesia católica, ésta imponía una cultura común para todas las demás escalas de poder. Es así como la política en la Edad Media se convierte en un aspecto más de la teología, todos los poderes se derivaban de Dios a través de su iglesia, sin embargo existía un conflicto real de poder entre el Emperador y el Papa. De tal forma que a partir del año 1300, el poder de la iglesia se enfrenta a los reinos nacionales que buscan recuperar el poder político perdido.

La transformación del Estado medieval al Estado moderno fue muy lenta y se dio como respuesta a importantes cambios sociales y económicos. El primer factor que lleva a éste cambio es el descubrimiento de nuevas fuentes de riqueza, las rutas comerciales de la Europa medieval eran limitadas y hacia el final del siglo XIV e inicios del siglo XV, se descubrieron nueva tierras (India, África y América) y nuevas rutas comerciales, esto trae una inundación de plata y especias; el segundo es el desarrollo de las finanzas internacionales, esto se da debido al nuevo comercio. En la Edad Media, la iglesia cristiana combatía la usura y las personas vivían en una economía localista y su iniciativa individual era limitada, pero con la vasta expansión del comercio internacional, nace una nueva clase social, la burguesía, una nueva clase adinerada, que tiene como profesión la acumulación de la riqueza, el tercero es una revolución en los métodos de cultivo de la tierra producto del progreso de la ciencia y de la tecnología, y, en consecuencia, en la distribución de la propiedad territorial, y cuarto la Reforma, impulsada por Lutero, que dirigió su movimiento en contra de la corrupción de la iglesia. Las dos fuerzas motoras de éste movimiento fueron la Biblia como fuente de la verdad, es decir que el hombre no necesita intermediarios entre él y Dios, no necesita a la Iglesia Católica para interpretar la Biblia, es así como cambian las fuentes de poder, ya no es el papa o el emperador sino la nación. Es así como el término de la Edad Media trajo una declinación del poder del papa y del Sacro Impero Romano Germánico.

Así se construyen los cimientos del Estado moderno, el cual se basa en una fuerza centralizada. “Europa occidental, se establece conforme a los nuevos conceptos en estados territoriales, más o menos delimitados, cada uno con su propia burocracia, su ejército y su monarca absoluto. El nuevo sistema financiero es una institución respetable y reconocida por todo el mundo, y los derechos exclusivos de la propiedad privada se admitían universalmente”.

Éste concepto se refiere a que hay cambios en el interior del territorio, ya que un nuevo gobierno central necesita unas vías de comunicación rápidas. También es importante tener en cuenta la ubicación geopolítica del territorio; es indiscutible el hecho de que la política moderna depende de la geografía, ya que ésta es la que determina los recursos naturales de un país, de tal forma que un país que cuente con pocos recursos naturales es más propenso a tener conflictos políticos y por esta razón tampoco podrá tener un desarrollo político democrático como otros países que cuenten con más recursos naturales, la doctrina del Espacio Vital defendida por Alemania es la justificación principal para las invasiones hacia Europa, Asia, y Africa.

La segunda característica del Estado Moderno es la soberanía, la cual reside en el pueblo, es una institución anterior al Estado y éste es la institucionalización del poder político, de tal forma que el poder pasa a ser representado por instituciones y deja de ser individual. Debido a que el poder reside en el pueblo, en la nación, surge el concepto de Estado - Nación, que no existe antes del siglo XVI, de aquí podemos afirmar que una Nación es “un pueblo que vive bajo un único gobierno central lo suficientemente fuerte para mantener su independencia frente a otras potencias”. El Estado moderno surge de una base nacionalista, ésta nación se somete a una forma de control centralizada, el Estado. Las naciones buscan unidad y autoridad central y logran a través del Estado, una obediencia general de la población, y la iglesia pasa a ser una organización voluntaria.

El tercer aspecto es la constitucionalidad, es decir que se definen claramente las reglas del juego en el proceso político, basadas en la ley, previamente estipulada, y no en la ley divina, ni en la tradición ni en las costumbres. Esto ocurre debido a que el Estado es la institucionalización del poder político, lo que encierra las normas jurídicas que se desprenden del poder político que el Estado ejerce. Es así como el Estado incluye en su concepto una normatividad jurídica inherente a él, de aquí deriva la noción de soberanía ya que el poder político dentro del Estado y dentro del derecho es la soberanía de las instituciones estatales.

El cuarto aspecto es la burocracia pública, que es la administración de las organizaciones a gran escala, del gran Estado centralizado que se forma con la unificación del poder político. Es decir, se forman instituciones y se norman y se crean puestos públicos, todos en servicio del Estado.

El quinto aspecto es el poder legítimo, para Weber, “el Estado es una institución política de actividad permanente, mientras éste tenga el monopolio legítimo de la coacción física para el mantenimiento del orden vigente, es decir que el poder político le permite al Estado tener el privilegio de la fuerza física de una forma genuina y no impuesta”.

Por medio del poder político legítimo, “factor permanente de cohesión de la sociedad política, ya que ésta es una asociación obligatoria para sus miembros”, el Estado tiene la capacidad de hacerse obedecer, es decir, de imponer una conducta determinada a los miembros de la comunidad, es un fenómeno social, un instrumento de la relación política. Por esto, se puede afirmar que éste es la base de las relaciones de poder por medio de las cuales se obliga a hacer unos la voluntad de otros de forma legítima, es decir no es impuesto, sino que siempre busca la aceptación colectiva y por eso siempre va acompañado de un sistema de valores y creencias.

El sexto aspecto es la ciudadanía, ésta se refiere a los derechos de participación a los que tienen derechos las comunidades del Estado, estos fueron promulgados por medio de de los Derechos del Ciudadano difundidos en la Revolución Francesa. Actualmente los ciudadanos practican el derecho a la oposición, a la controversia política, ejerciendo grupos de presión, sindicatos, asociaciones, la participación de los individuos es cada vez mayor en la vida política, de tal forma que las decisiones políticas son el resultado de los intereses del pueblo. De ésta forma se transfiere la soberanía y el poder del Papa a la nación, ya que las decisiones políticas que antes se tomaban de manera unilateral se toman de forma colectiva o teniendo en cuenta la opinión del pueblo.

El séptimo aspecto son los impuestos centrales, sustanciales y regulares. En el Estado de la Edad Media los impuestos se recogían de diversas formas y eran para el señor feudal, todos estos se recanalizan para sostener al nuevo Estado centralizado, éste los usa para costear sus conquistas expansionistas y para financiar las guerras.

El último aspecto es la formación de un ejército nacional, en el sistema feudal el señor feudal contaba con sus ejércitos que protegían a los campesinos y a su territorio. Éste defiende al territorio nacional y tiene como objetivo conseguir la paz y la seguridad de la nación. También es usado para ampliar el territorio, defenderse de otros Estados invasores.

Todos estos aspectos nos conducen hacia el establecimiento de las actividades y características del Estado moderno, pero éstas no son eternas y estables, son un elemento más de las relaciones humanas. El estado es transitorio y está sujeto a la evolución de las naciones, en especial a los factores socioeconómicos, la insuficiencia de bienes para satisfacer por completo las necesidades básicas de las personas es la razón principal causante de los descontentos sociales y son el principal motor de los conflictos políticos y sociales. Las naciones no tienen firmeza, están en una constante búsqueda del progreso social, de ésta forma también el Estado está en constante cambio y sus características no son permanentes.

CAPITULO II

EL CRISTIANISMO EN LA EDAD MEDIA

Origen y Expansión

El Cristianismo, como las grandes religiones universales surgió en Oriente, a partir de la base común de las religiones arcaicas que se pueden clasificar en dos grandes ramas la del extremo Oriente, en donde se constituyen las religiones místicas: “Hinduismo y Budismo que se caracterizan por el valor absoluto que atribuyen a la experiencia interior de unión con Dios; y la del Medio Oriente, en donde aparecen las religiones de tipo profético, con los grandes profetas de Israel, y con Zoroastro en Persia”. La principal de las religiones proféticas es el Judaísmo, de la que proceden el Cristianismo y el Islam, éste último, con importantes diferencias que se caracterizan por el valor absoluto que conceden a la llamada divina comunicada por medio de un profeta, ambas tienen muy clara la idea de la unicidad de Dios, y no es el hombre quien lo descubre, sino que Él mismo es quien se da a conocer.

El cristianismo surgió originariamente a propósito de la persona de Jesús de Nazaret llamado Jesucristo, nacido en Belén de la provincia de Judea, siendo sus padres del carpintero José y de su esposa María la virgen. Durante los tres años que duró su vida pública, Jesús, quien se había proclamado como el Mesías y el hijo de Dios, había ido preparando un grupo de discípulos predilectos que habían de ser los continuadores de su obra. A estos discípulos, doce en total, había de encomendar la custodia de su doctrina, especialmente a Simón, llamado después Pedro, a quien instituyó como el jefe de la iglesia " Simón Barjona yo te digo que tú eres Pedro, o sea piedra, y que sobre esta piedra edificaré mi Iglesia; te daré las llaves del reino de los cielos, y lo que tú atares en la tierra, atado quedará en el cielo, y lo que desatares en la tierra, desatado quedará en el cielo". Jesús de Nazaret fue crucificado, resucitó al tercer día, convirtiéndose así en el primer hombre que venció a la muerte; y en el instante de su ascensión en cuerpo y alma al cielo, envió a sus apóstoles a llevar su palabra "Vayan, pues, por todo el mundo y hagan discípulos míos a todas las gentes, bautizándolos en el nombre del padre y del hijo y del espíritu santo y enséñenlos a cumplir todo lo que yo les he encomendado a ustedes”

La aparición de la iglesia cristiana comienza en el año 30, el día de la fiesta judía de Pentecostés “estaban todos reunidos en el mismo lugar. De repente vino del cielo un ruido, como el de una violenta ráfaga de viento, que llenó toda la casa donde estaban y aparecieron unas lenguas como de fuego que se repartieron y fueron posándose sobre cada uno de ellos, todos quedaron llenos del espíritu santo”, en ese momento Pedro proclamó a Cristo por primera vez al hablar de su resurrección, proclamando así mismo el arrepentimiento y haciendo un llamado al bautizo, en el nombre de Jesús, logró que se hicieran bautizar y “aquel día se unieron a ellos unas 3000 personas,” naciendo así la primera comunidad cristiana.

El cristianismo fue creciendo y logrando la conversión de miles de personas, y pronto surgieron otros grupos cristianos uno de ellos, de cultura griega, llamados los helenistas, quienes lanzaron una requisitoria al judaísmo, condenándolo, por haber ocasionado la muerte de Jesús de Nazaret; el jefe de este grupo Esteban fue encarcelado y luego lapidado convirtiéndose así en el primer mártir del cristianismo; a raíz de este hecho, los cristianos se vieron obligados a huir a Samaria, a la costa mediterránea y a Antioquía, iniciándose así la etapa de las persecuciones; que, en un principio fueron llevadas a cabo por el joven Pablo de Tarso, quien, en un viaje realizado a Damasco , fue cegado por una gran luz y oyó una voz que le decía “Yo soy Jesús a quien tu persigues”, a raíz de esta visión se hizo bautizar, y se convirtió en el responsable de la expansión del cristianismo a través de sus tres primeros viajes ó misiones por el Asia Menor, y Grecia; en su cuarto y último viaje, el apóstol Pablo es hecho preso y trasladado a Roma en cautividad, allí los “dos años de libertad vigilada le permitieron proclamar el reino de Dios y enseñar lo relativo al Señor Jesús el mesías

En Roma, los defensores del cristianismo no lograron ganar adeptos, ya que aparecieron calumnias que ocasionaron motines en contra de los cristianos, por lo que las autoridades intentando calmar el furor popular condenaron a los cristianos como supuestos culpables, dando origen a las persecuciones

Nerón llegó al poder en octubre del año 54, gracias a las intrigas de su madre Agripina, quien no vaciló ante el asesinato en sus esfuerzos por asegurar la sucesión del trono en favor de su hijo. Al principio, Nerón no cometió los crímenes por los que después se hizo famoso, pero poco a poco el joven emperador se dejó llevar por sus propios afanes de grandeza y placer, diez años después de haber llegado al trono, Nerón era despreciado por el pueblo y poetas y literatos, a cuyo número Nerón pretendía pertenecer sin tener los dones necesarios para ello.

Cuantos se oponían a su voluntad, o bien morían misteriosamente, o bien recibían ordenes de quitarse la vida; todos estos hechos corrían de boca en boca, y hacían que el pueblo siempre esperara lo peor de su soberano. Así en julio del año 64, estalló un enorme incendió en Roma, y las sospechas pronto cayeron sobre el emperador a quien ya muchos tenían por loco. El fuego duró seis días y siete noches; y después volvió a encenderse en diversos lugares durante tres días más. Diez de los catorce barrios de la ciudad fueron devorados por las llamas. En medio de todos sus sufrimientos, el pueblo exigía que se descubriera al culpable, y no faltaban quienes se inclinaban a pensar que el propio emperador había hecho incendiar la ciudad para poder reconstruirla a su gusto, como un gran monumento a su persona, según se decía, Nerón había pasado buena parte del incendio en lo alto de la torre de Mecenas, en la cumbre del Palatino, vestido como un actor de teatro, tañendo su lira, y cantando versos acerca de la destrucción de Troya. Luego comenzó a decirse que el emperador, en sus locas ínfulas de poeta, había hecho incendiar la ciudad para que el siniestro le sirviera de inspiración. Nerón hizo todo lo posible por apartar tales sospechas de su persona. Pero todos sus esfuerzos resultaban inútiles mientras no se hiciera recaer la culpa sobre otro, por lo que Nerón hizo aparecer como culpables a los cristianos, una gente a quienes todos odian por sus abominaciones, y los castigó con muy refinada crueldad.

A los cristianos se les hizo servir de entretenimiento para el pueblo. Se les vistió en pieles de bestias para que los perros los mataran a dentelladas. Otros fueron crucificados, entre ellos el apóstol Pedro quien se hallaba en Roma predicando junto a Pablo de Tarso que muere decapitado, a otros se les prendió fuego al caer la noche, para que la iluminaran. Nerón hizo que se abrieran sus jardines para esta exhibición, y en el circo él mismo ofreció un espectáculo, pues se mezclaba con las gentes disfrazado de conductor de carrozas, o daba vueltas en su carroza.

Nerón promulgó contra los cristianos, sus planes incluían extender la persecución a las provincias, y destruir el cristianismo en ellas, para lograr nuevas fuentes de víctimas para sus espectáculos. Pero en el año 68 buena parte del imperio se rebeló contra el tirano, y el senado romano lo depuso. Prófugo y sin tener a dónde ir, Nerón se suicidó. A la muerte de Nerón, se siguió un período de desorden, llamado el año de los cuatro emperadores. En todo este período, el Imperio parece haberse desentendido de los cristianos, cuyo número seguía aumentando silenciosamente.

En el año 81 Domiciano sucedió al emperador Tito. Al principio, su reino fue tan benigno hacia la nueva fe como lo habían sido los reinos de sus antecesores. Pero hacia el final de su reino se desató de nuevo la persecución, ya que, Domiciano amaba y respetaba las viejas tradiciones romanas, y que buena parte de su política imperial consistió en restaurar esas tradiciones, era de esperarse que se opusiera al cristianismo, que en algunas regiones del Imperio había ganado muchísimos adeptos, y que en todo caso se oponía tenazmente a la antigua religión romana, en Roma el emperador hizo ejecutar a su pariente Flavio Clemente y a su esposa Flavia Domitila.Puesto que los cristianos adoraban a un Dios invisible, por lo general los paganos les acusaban de ser ateos.

Si bien con Trajano, no hubieron persecuciones como tal, ya que no se sabía que hacer con ellos, si condenarlos por ser cristianos o esperar a que cometieran un delito, si se condenaron a los que seguían proclamándose cristianos, en esta época se destaca la muerte de Ignacio, obispo de Antioquía. En tiempos de Marco Aurelio “fueron condenados en Roma el apologista Justiniano, y en Esmirna el obispo Policarpo, discípulo de Juan y catequista de Ireneo, futuro obispo de Lyon. Con Policarpo aparece el testimonio del culto a las reliquias de los mártires. El día del aniversario de su muerte los cristianos se reunían en su sepulcro; así mismo, en Lyon en el 177, a raíz de un motín popular fueron arrestados y ejecutados alrededor de medio centenar de cristianos

Hacia finales del siglo II la iglesia “gozo de una cierta paz, ya que el imperio se hallaba en medio de un periodo de guerras civiles y trataba de defender sus fronteras, por lo que no les dio demasiada importancia a los cristianos”. Septimio severo, decidió seguir una política religiosa a través de la unión de todos sus súbditos bajo el culto al sol invicto, a lo que se negaron rotundamente los judíos y cristianos, por lo que prohibió bajo pena de muerte toda conversión al judaísmo o al cristianismo, así mismo, los cristianos que fueran acusados y que se negaran a ofrecerle sacrificio a los dioses serían condenados a muerte también; todo ocasiono un recrudecimiento en las persecuciones contra los nuevos conversos y sus maestros. En el año 202, aparece el edicto de septimio severo, provocando el martirio de San Ireneo, así como los de Perpetua y Felicidad.

Este periodo de persecución se prolongó hasta el 313, con la conversión de Constantino, que a través en su edicto de Milán, declaró la religión cristiana como oficial del Imperio Romano.

El cesaropapismo surge en oriente con Constantino, en él, el poder político nombra a la jerarquía eclesiástica, convoca concilios, legisla eclesiásticamente e interviene en pleitos eclesiásticos, “los emperadores conservan el título de pontifex maximus (sumo pontífice), es decir, cabeza de la religión tradicional. Pero una vez cristianos quieren desempeñar el mismo papel en la iglesia, el emperador se considera como igual a los apóstoles, o el obispo de fuera.” Junto al cesaropapismo, aparece la teocracia pontificia, que se da en occidente, y que busca reafirmar la autoridad del papa en las cuestiones políticas y eclesiásticas

Con la división del Imperio Romano, la expansión del cristianismo entre los bárbaros constituyó una poderosa fuerza civilizadora y ayudó a asegurar que algunos vestigios de la ley romana y del latín continuaran en Francia, Italia, España y Portugal. Sólo en Inglaterra el cristianismo romano sucumbió ante las creencias paganas. Los francos se convirtieron al catolicismo durante el reinado de Clovis y, a partir de entonces, expandieron el cristianismo entre los germanos del otro lado del Rin. Por su parte, los bizantinos extendieron el cristianismo ortodoxo entre los búlgaros y los eslavos.

El cristianismo fue llevado a Irlanda por San Patricio a principios del siglo V, y desde allí se extendió a Escocia, desde donde regresó a Inglaterra por la zona norte. A finales del siglo VI, el Papa Gregorio el Grande envió misioneros a Inglaterra desde el sur. En el transcurso de un siglo, Inglaterra volvió a ser cristiana.

Desde el S X, el imperio alemán, es el primero en restablecerse de la anarquía interior y consigue frenar el empuje de los eslavos. Otón I fue llamado por el Papa Juan XII, para que le ayudase frente a sus enemigos y como agradecimiento le nombró Emperador en el año 962; estableciéndose así el Imperio Germano-Cristiano.

Por medio de la dinastía carolingia y su instaurador Pipino el Breve, hijo de Carlos Martel, se comenzó la lenta reunificación de la Galia Franca, y cuando los lombardos quisieron conquistar el centro de Italia, este intervino y los derrotó; con ello le entregó al Papa los territorios conquistados, en vez de devolvérselos a los orientales; así nacieron los Estados Pontificios, dando inicio a una Alianza entre el Papado y la monarquía que se prolongaría por varios siglos.

La Aparición del Monacato

En el año 1000, unos cuantos cristianos fuertemente comprometidos, se retiraron de la sociedad para vivir como ermitaños. Estos, a su vez, inspiraron a los hombres más convencionales a realizar votos de pobreza y castidad, así como el servicio en respuesta a las enseñanzas de Jesucristo.

La vida monástica y las actividades dependientes de ella en la Iglesia cristiana, se presentaron desde principios del siglo III como un impulso vocacional de aquellos que deseaban dedicarse enteramente a una comprensión más profunda y una observación mas completa de los mandamientos y consejos de la religión cristiana.

El antiguo monje creía que con la imitación de Cristo podía cumplir de mejor manera algunos de los imperativos del Evangelio como son la genuina aspiración a la perfección y el verdadero amor a Dios. El monaquismo cristiano en sus orígenes se entendía a sí mismo como la realización de ideales cristianos de perfección y representó un paso importante en la evolución de la vida perfecta que se practicaba en la iglesia.

En las dos décadas finales del siglo III algunos cristianos de Egipto y de Siria Oriental se desligaron de sus anteriores formas de vida en común en la familia y en la comunidad cristiana y se retiraron a la soledad, dando el primer paso que, excediendo el temprano ascetismo cristiano, que estaba caracterizado por la exagerada austeridad que se imponían los cristianos, daría origen al monacato

El monacato aparece por primera vez en Egipto a finales del siglo III; allí aparecieron las primeras grandes de figuras de monjes, universalmente admitidas y propuestas como modelo. Las principales formas de vida monástica, el anacoretismo y, sobre todo, el cenobitismo, tenían perfiles nítidos, perfectamente determinados. Por su gran número y sus virtudes, “los monjes de Egipto alcanzaron pronto gran popularidad, se emprendían largas y penosas peregrinaciones para visitarlos. A fines del siglo IV, Egipto era el país del monacato, el paraíso de los monjes."

En Egipto, el monacato mantuvo con mayor rigor su total separación del mundo y casi no intervino en el curso de la historia, salvo en controversias doctrinales, pero en lo que se refiere a la vida política o económica el monacato no tuvo influencia.

La situación económica y política contribuyó de cierta manera al éxito del monacato en Egipto. El monacato fue en Egipto no sólo un fruto de la sabia y helenista Alejandría, sino del sencillo y ardiente pueblo copto. Fueron estas gentes rústicas, sin educación, las creadoras de las formas monásticas más probadas, los que proporcionaron a la Iglesia el paraíso de los monjes que fue Egipto a lo largo de los siglos IV y V.

Pronto, un grupo de hombres, intento trasladar este modelo de vida a Europa, formaron nuevas comunidades de religiosos afines que recibieron el nombre de monasterios. El Papa Gregorio I alentó la construcción de monasterios por toda la Europa cristiana. En algunas zonas de Europa, pronto se convirtieron en los únicos reductos del saber. Los monjes irlandeses preservaron la civilización en sus monasterios, ya que, se desplazaron a otras zonas europeas para enseñar y revivir el interés por el saber. Los monasterios eran la principal fuente de hombres instruidos capaces de ayudar en la administración del gobierno, por lo que muchos adquirieron importancia como asistentes y consejeros reales.

La política y la religión, tenían un mismo objetivo: construir el Reino de Dios, para ello recurrieron a la formación de los monacatos: en Cluny, fundado en el 910, buscan la renovación monástica y eclesial, en el Císter: fundado en 1098, intentan volver a la sencillez, pobreza y trabajo que Cluny olvidó, así como la conformación de grandes bibliotecas en las que se reunían documentos de gran importancia para la comunidad, su impulsador fue San Bernardo. Los Franciscanos: fundados por San Francisco de Asís, vivían de su trabajo y si no tenían suficiente se dedicaban a mendigar. Su misión era predicar y trabajar en el sentimiento pastoral con todo tipo de gente. Los Dominicos: fundados por Santo Domingo, eran sacerdotes que vivían en pequeñas comunidades urbanas; su misión era predicar el mensaje cristiano y dedicarse al trabajo intelectual, y fueron los encargados de llevar a cabo La Inquisición de la que hablaremos más adelante.

Las Cruzadas

La aparición del Islam, una religión monoteísta en la que el hombre debía someterse incondicional y libremente a Dios, cambió por su espíritu de conquista, casi de la noche a la mañana el mapa político de África del Norte, Medio Oriente, Asia Central y la Península Ibérica, que se vieron invadidos por el islamismo, amenazando con cumplir su objetivo de convertir al mundo entero a sus creencias. La iglesia católica, con el papa a la cabeza, se sintió abrumada por el auge de esta nueva religión, y se provocaron conflictos, al querer rescatar los fieles perdidos; estos conflictos entre los musulmanes y los cristianos dieron como resultado las Cruzadas.

Las Cruzadas fueron expediciones emprendidas, en cumplimiento de un solemne voto, para liberar los Lugares Santos de la dominación islámica, además de tener un motivo político, el de lograr el dominio del mar mediterráneo para poder lograr el dominio económico en Europa y sobre todo, fueron motivadas por los intereses expansionistas de la nobleza feudal, el control del comercio con Asia y el afán hegemónico del papado sobre las monarquías y las iglesias de Oriente.

El trasfondo de las cruzadas se hallaba en las peregrinaciones, de la que hablaremos más adelante, que tenían como destino Tierra Santa y Roma, donde descansaban los restos de Pedro y Pablo; si bien grandes hombres de la iglesia como Agustín de Hipona, se opusieron a ello por “considerar que se trataba de una superstición y que en todo caso había más merito en quedarse en casa y hacer el bien, que en marchar a algún lugar lejano por motivos religiosos”, a pesar de ello, adquirieron gran importancia, y se convirtieron en “una forma de penitencia adecuada para ciertos pecados”. Como las rutas de peregrinación se volvieron inseguras, debido a los conflictos políticos y sociales de cada país, ocasionó los peregrinajes armados que fueron las raíces de las cruzadas.

Las reformas efectuadas en la iglesia y el papado había aumentado el prestigio del romano pontífice ante todas las naciones cristianas; por tanto nadie sino el papa podía inaugurar el movimiento internacional que culminó en las Cruzadas.

Como consecuencia de esas reformas aparece el llamado “ius canonicus, en donde se reúnen las cartas y decretos de los papas, esto hace que adquieren la misma autoridad que la sagrada escritura”, el derecho ó ley canónica se hizo universal en el gobierno de la iglesia romana, ya que los papas debían intervenir en la totalidad de los asuntos eclesiásticos

Las cruzadas fueron predicadas por primera vez por Urbano II, quien puso en marcha a multitudes de gente humilde, dirigidas por el predicador Pedro el ermitaño. Este grupo formó la llamada Cruzada de los pobres. De forma desorganizada se dirigieron hacia Oriente, provocando matanzas de judíos a su paso. A su llegada a Bizancio, el “Basileo se apresuró a enviarlos al otro lado del Bósforo. Despreocupadamente se internaron en territorio turco, donde fueron aniquilados fácilmente”.

Mucho más organizada fue la llamada Cruzada de los príncipes, formada por una serie de contingentes armados, procedentes principalmente de Francia, Países Bajos y el reino normando de Sicilia. Estos grupos iban dirigidos por miembros de la nobleza como Godofredo de Bouillon, Raimundo de Tolosa y Bohemundo de Tarento. Durante su estancia en Constantinopla, estos jefes juraron devolver al Imperio Bizantino aquellos territorios perdidos por éste frente a los turcos.

Desde Bizancio se dirigieron hacia Siria atravesando el territorio selyúcida, donde consiguieron una serie de sorprendentes victorias. Ya en Siria, pusieron sitio a Antioquía, que conquistaron tras un asedio de siete meses. Sin embargo no la devolvieron al Imperio Bizantino, sino que Bohemundo la retuvo para sí formando el Principado de Antioquía.

Desde Antioquía se dirigieron hacia Jerusalén, en junio de 1099 sitiaron la capital, que cayó en manos de los cruzados el 15 de julio de 1099. En la conquista los cruzados realizaron una terrible matanza, que no respetó a judíos ni a musulmanes, mujeres o niños.

Con esta conquista finalizó la Primera Cruzada, y muchos de ellos retornaron a sus países de origen. El resto se quedó para consolidar los territorios recién conquistados. Junto al Reino de Jerusalén y al principado de Antioquía, se crearon además los condados de Edesa y Trípoli, estos estados fueron conocidos como francos.

Tras estos éxitos iniciales se produjo una nueva oleada de cruzados, que formaron la cruzada de 1101., esta expedición, dividida en tres grupos, fue aniquilada por los turcos mientras atravesaban Anatolia.

Gracias a la división de los estados musulmanes, los estados francos, como eran conocidos por los árabes, consiguieron establecerse y sobrevivir. Los dos primeros reyes de Jerusalén, Balduino I y Balduino II fueron gobernantes capaces que extendieron el reino a toda la tierra entre el Mediterráneo y el Jordán, e incluso más allá y rápidamente se integraron en el cambiante sistema de alianzas locales y así pudieron verse enfrentamientos entre la alianza de un estado cristiano con uno musulmán contra la alianza de otro estado cristiano con otro estado musulmán.

Sin embargo, a medida que el espíritu de cruzada iba decayendo entre los musulmanes iba creciendo el espíritu de jihad, principalmente entre la población, movilizada por los predicadores contra sus impíos gobernantes, capaces de tolerar la presencia cristiana en Jerusalén e incluso de aliarse con sus reyes.

Este sentimiento fue explotado por una serie de caudillos que consiguieron unificar los distintos estados musulmanes y lanzarse a la conquista de los reinos cristianos, el primero de ellos fue Zengi, gobernador de Mosul y de Alepo, que en 1144 invadió Edesa, conquistando el primero de los estados francos.

Como respuesta a ello el papa, a través de Bernardo abad de Claraval, predicó en 1146 la Segunda Cruzada, en la que participaron los reyes de la cristiandad, encabezados por Luis VII de Francia y por el emperador germánico Conrado III.

Cuando ambos reyes llegaron a Tierra Santa decidieron que Edesa era un objetivo poco importante y marcharon hacia Jerusalén. Desde allí, para desesperación del rey Balduino II, en lugar de enfrentarse a Nur al-Din, eligieron atacar Damasco, estado independiente y aliado del rey de Jerusalén.

La expedición fue un fracaso, ya que tras solo una semana de asedio infructuoso, los ejércitos cruzados se retiraron y volvieron a sus patrias. Con este ataque inútil consiguieron que Damasco cayera en manos de Nur al-Din, que progresivamente iba cercando los estados francos.

Más tarde, el ataque por parte de Balduino II a Egipto, iba a provocar la intervención de Nur al-Din en la frontera sur del reino de Jerusalén, preparando el camino para el fin del reino y la convocatoria de la Tercera Cruzada.

Las intromisiones del Reino de Jerusalén en el decadente califato fatimí de Egipto, llevaron al sultán Nur el-Din, a mandar a su lugarteniente Saladino, que le sucedería en el poder a su muerte, y quien era un hombre sabio, que logró la absoluta unión de las facciones musulmanas, y el control político y militar desde Egipto hasta Siria; así mismo era un musulmán devoto y decidido a expulsar a los cruzados de Tierra Santa. El Reino de Jerusalén, regido por Balduino IV, se vio obligado a firmar frágiles treguas seguidas por escaramuzas, tratando de retrasar el inevitable final. A la muerte del rey leproso, el estado se dividió en distintas facciones, pacifistas o belicosas, lo que provocó que se ocupara la mayor parte del reino, salvo las plazas costeras, abastecidas desde el mar, y en octubre del mismo año es conquistada Jerusalén, esta toma fue pacífica, sus habitantes debieron pagar un considerable rescate y muchos fueron esclavizados. El reino de Jerusalén había desaparecido.

La toma de Jerusalén conmocionó a Europa y el papa Gregorio VIII convocó una nueva cruzada. En esta participaron reyes de los más importantes de la cristiandad: Ricardo Corazón de León; Felipe II Augusto y el emperador Federico Barbarroja. Este último al mando del grupo más poderoso siguió la ruta terrestre, esta cruzada fue otro fracaso, ya que, Barbarroja murió ahogado en un río, y su ejército se desbandó. Solo una pequeña parte llegó a Palestina.

Los ejércitos inglés y francés llegaron por la ruta marítima. Su único éxito fue la toma de Acre, el 13 de julio de 1191, tras la cual Ricardo realizó una matanza de varios miles de prisioneros. Esta matanza le valió el nombre por el que seria reconocido en la historia, Corazón de León.

Felipe II Augusto estaba preocupado por los problemas en su país y molesto por las rivalidades con Ricardo, por lo que regresó a Francia, dejando a Ricardo al mando de la cruzada. Este llegó hasta las proximidades de Jerusalén, pero en lugar de atacar prefirió firmar una tregua con Saladino, temiendo que su ejército diezmado de 12000 hombres no seria capaz de sostener el sitio de la ciudad. Pensando en una próxima cruzada y militarmente en no arriesgar una derrota que no les daría a los cristianos la posibilidad del control posterior de la ciudad santa, pactaron con el mismo Saladino, la tregua que permitía el libre acceso de los peregrinos desarmados a la Ciudad Santa.

Tras la tregua firmada en la Tercera Cruzada y la muerte de Saladino, en 1193, se sucedieron algunos años de relativa paz, en los que los estados francos del litoral se convirtieron en poco más que colonias comerciales italianas.

En 1199 el Papa Inocencio III decidió convocar una nueva cruzada, para aliviar la situación de los estados francos. Esta Cuarta Cruzada no debería incluir reyes e ir dirigida contra Egipto, considerado el punto más débil de los estados musulmanes, para ello, los cruzados debían emplear la ruta marítima, por lo que se utilizó la flota de Venecia. Los cruzados fueron empleados para luchar contra los húngaros,y desde allí se dirigieron hacia Bizancio, donde consiguieron instalar a Alejo IV como basileus en 1203.

Alejo IV no fue capaz de sostenerse en el poder, ni de cumplir las promesas hechas y fue depuesto por Alejo V; esto lo aprovecharon los cruzados para poder tomar la ciudad deponer al nuevo emperador y elegir a Balduino de Flandes.

La V Cruzada fue organizada por Inocencio III y partió en 1218. Como la IV Cruzada tenía como objetivo conquistar Egipto. Tras el éxito inicial de la conquista de Damietta en la desembocadura del Nilo, que aseguraba la supervivencia de los estados francos, a los cruzados les pudo la ambición e intentaron atacar El Cairo, fracasando y debiendo abandonar incluso lo que habían conquistado, en 1221.

La organización de la VI Cruzada fue un tanto extraordinaria y exagerada. El papa había ordenado al emperador Federico II, que fuera a las cruzadas como penitencia. El emperador había asentido, pero había ido demorando la partida, lo que le valió la excomunión. Finalmente, partió en 1228 sin el permiso papal. Sorprendentemente, el emperador consiguió recuperar Jerusalén mediante un acuerdo diplomático. También obtuvo Belén y Nazaret.

En 1244 volvió a caer Jerusalén, esta vez de forma definitiva, lo que movió al devoto rey Luis IX de Francia a organizar una nueva cruzada, la Séptima, en la que se dirigió contra Damietta, pero fue derrotado y hecho prisionero en Egipto con todo su ejército. Vuelto a Francia, el mismo rey emprendió la llamada VIII Cruzada (1270), que terminó cuando la peste acabó con el rey Luis y gran parte de su ejército.

Como consecuencia de las cruzadas surgen las órdenes militares, mitad monjes, mitad guerreros, que cuidaban y protegían a los peregrinos cristianos que estaban en Tierra Santa. Las principales órdenes fueron: la de los Templarios y la de los Hospitalarios.

Los caballeros de la orden del Hospital de San Juan de Jerusalén recibieron el nombre de Orden de Malta tras su instalación, por parte del rey Carlos I, en la isla de Malta en 1530. La misión de la orden, fundada en Palestina en el siglo XI, fue primero hospitalaria (atención de los hospitales de peregrinos a Jerusalén), pero tomó pronto carácter militar en su lucha contra los musulmanes, en el marco de las Cruzadas.

Aproximadamente en el año 1048, un grupo de comerciantes fundaron un hospital en Jerusalén. La piadosa institución fue puesta bajo la advocación de San Juan. En la primera Cruzada, la institución era dirigida por un monje benedictino italiano conocido como beato Gerardo que concibió la creación de la orden como una institución encargada del cuidado de los peregrinos; fue su sucesor Raimundo de Puy dotó a la orden de carácter militar para defender a los peregrinos que acudían a Jerusalén.

Tuvo su primera sede en Jerusalén, haciéndose cargo en 1142 del castillo de los Caballeros, cerca de Trípoli, que convirtieron en una fortaleza inexpugnable. Tras la caída de Jerusalén en manos de Saladino en 1187, pasaron a San Juan de Acre, en donde construyeron un gran hospital. Una vez los cristianos fueron expulsados de Palestina en 1291, pasaron al reino de Chipre y de ahí a la isla de Rodas, que conquistaron en 1310. La orden se convirtió en una potencia naval en el Mediterráneo. Rodas se convirtió en una fortaleza inexpugnable que resistió cinco asedios durísimos. El último, en 1522, dirigido por Solimán el Magnífico duraría seis meses. Finalmente, la orden tuvo que capitular y abandonar la isla. Tras la expulsión, se asentaron brevemente en Sicilia, hasta que el rey Carlos I, con el beneplácito del papa Clemente VII, les cedió las islas de Malta, Gozo y Comino, así como Trípoli, en el norte de África, actual Libia. La orden debía permanecer neutral en las guerras entre naciones cristianas.

Los bienes que la Orden tenía en Europa y Asia eran administrados por preceptores y constituían una especie de feudos divididos en prioratos, y encomiendas, concedidos bajo ciertas condiciones a los jefes de la cofradía y formando una especie de feudalismo vitalicio.

Esta orden, ha permanecido hasta hoy en día, con el nombre de Soberana Orden Militar y Hospitalaria de San Juan de Jerusalén, de Rodas y de Malta., en 1961, la Santa Sede aprobó los nuevos estatutos de la orden. En la actualidad, la orden se dedica a tareas benéficas.

La Orden del Temple fue una orden medieval de carácter religioso y militar cargada de tintes legendarios, nacida en la primera cruzada. Fue fundada en Jerusalén en 1118 por nueve caballeros franceses, con Hugo de Payens cono primer gran maestre

En sus inicios su denominación oficial fue Orden de los Pobres Caballeros de Cristo; más tarde fueron conocidos comúnmente como Caballeros templarios o Caballeros del templo de Salomón, en alusión al sitio donde se hallaban instalados.

Su regla fue redactada en base a la regla de San Benito, de acuerdo a la reforma hecha por los cistercienses, de los que adoptaron el hábito blanco al que añadieron la cruz encarnada; en 1128, la orden obtuvo de Honorio II la aprobación papal.

Durante su estancia inicial en Jerusalén se dedicaron únicamente a escoltar a los peregrinos que acudían a los santos lugares, ya que su escaso número no permitía que realizaran actuaciones de mayor magnitud. Sin embargo, su número aumentó de manera significativa al ser aprobada su regla

Por mucho tiempo los templarios han estado relacionados con restos arqueológicos importantes para el cristianismo, como son el Santo Grial y la Veracruz en la cual murió Jesús.

Aparte de su poderío militar, con el transcurso del tiempo, el temple se convirtió, a través de donaciones, en uno de los mayores terratenientes de Europa; además, con el fin de salvaguardar los ahorros de los peregrinos, desarrollaron un sistema bancario basado en garantías, que se podían intercambiar por la cantidad indicada en cualquier encomienda templaria y alejaban el peligro de llevar grandes cantidades de dinero en efectivo. Este sistema bancario, y sus abundantes riquezas convirtieron a la orden en una gran prestamista, que aportaba los fondos cuando los diversos reyes europeos necesitaban dinero. Los templarios llegarían a ser una de las instituciones más ricas de su época, contando con vastas tierras y señoríos, numerosas ventajas comerciales, grandes tesoros y flotas comerciales que partían desde Marsella.

En España la Corona de Aragón llegó a un acuerdo con los templarios, para que colaboraran en la Reconquista, favoreciéndoles con nuevas donaciones de tierras, así como con derechos sobre las conquistas. También, según estas condiciones, cualquier paz o tregua tendría que ser consentida por los templarios, y no sólo por el rey.

En toda Europa, numerosas donaciones de padres que no podían dar un título nobiliario más que al hijo mayor, y buscaban cargos eclesiásticos, militares, cortesanos o en órdenes religiosas, enriquecieron a la orden.

Felipe el Hermoso, ante las deudas que su país había adquirido con ellos tras un préstamo que su abuelo Luis IX solicitó para pagar su rescate tras ser capturado en la Quinta Cruzada, así como su deseo de un estado fuerte, con el rey concentrando todo el poder, convenció al Papa Clemente V, fuertemente ligado a Francia, de que iniciase un proceso contra los templarios acusándolos de sacrilegio a la cruz, herejía, sodomía y adoración a ídolos paganos

El Viernes 13 de octubre del año 1307, Jacques de Molay, último gran maestre de la orden, y 140 templarios fueron encarcelados en una operación conjunta simultánea en toda Francia y fueron sometidos a torturas, por las cuales la mayoría de los acusados se declaró culpable de estos crímenes secretos.

El Papa reservó para su propio arbitrio la causa del Gran Maestre y de sus tres primeros dignatarios. Ellos habían confesado su culpabilidad y sólo quedaba reconciliarlos con la Iglesia una vez que hubiesen atestiguado su arrepentimiento con la solemnidad acostumbrada. Para darle más publicidad a esta solemnidad, delante de la catedral de Nôtre-Dame fue erigida una plataforma para la lectura de la sentencia, pero en el momento supremo, el Gran Maestre recuperó su coraje y proclamó la inocencia de los templarios y la falsedad de sus propias supuestas confesiones. En reparación por este deplorable instante de debilidad, se declaró dispuesto al sacrificio de su vida y fue arrestado inmediatamente como herético reincidente y por orden de Felipe fue quemado junto a Geoffroy de Charnay en la estaca frente a las puertas del palacio de Versalles el día de la Candelaria, 18 de marzo de 1314.

Después de estos hechos, el Papa dio la orden por disuelta, en Portugal los templarios cambiaron su nombre a Caballeros de Cristo, asegurando así las pertenencias de la orden en este país y algunos sobrevivientes de Francia escaparon los alpes en Suiza, y otros escaparon en barco a Escocia.

La Inquisición

La Inquisición surgió como una institución judicial creada por el pontificado en la Edad Media, con la misión de localizar, procesar y sentenciar a las personas culpables de herejía.

En los inicios de la iglesia la pena habitual por herejía era la excomunión. Con el reconocimiento del cristianismo como religión estatal en el siglo IV por Constantino, los herejes empezaron a ser considerados enemigos del Estado, sobre todo cuando habían provocado violencia y alteraciones del orden público. San Agustín aprobó con reservas la acción del Estado contra los herejes, aunque la Iglesia en general desaprobó la coacción y los castigos físicos.

En el siglo XII, en respuesta al resurgimiento de la herejía de forma organizada, se produjo en el sur de Francia un cambio de opinión dirigida de forma destacada contra los albigenses, cuya doctrina parecía nociva respecto al matrimonio y otras instituciones de la sociedad y, tras los más débiles esfuerzos de sus predecesores, el papa Inocencio III organizó una cruzada contra esta comunidad, y envió predicadores a la zona. Sin embargo, los diversos intentos destinados a someter la herejía no estuvieron bien coordinados y fueron relativamente ineficaces.

Además de la herejía de los albigenses, estaban la de los cátaros y la de los valdenses Los Cátaros pregonaban una extremada sencillez en las costumbres como principal culto religioso. Se situaban más fuertemente en el sur de Francia y en el norte de Italia durante el siglo XII. Sostenían la existencia de dos principios: Lo bueno ó Dios, y lo malo o el mundo material. De este movimiento surgieron los albigenses del sur de Francia y los bogomillas de Macedonia.

Los valdenses llamados así por su fundador, Pedro Valdo, predicaban el evangelio en lengua vernácula. Al principio se les toleró, pero más tarde fueron perseguidos. Los valdenses fueron castigados por considerar la Biblia suma autoridad para un cristiano, y por denunciar a la inmoralidad del clero.

La inquisición nace entre los años 1220 y 1230, “cuando el poder civil y el poder religioso colaboran en la búsqueda sistemática de los herejes y en su castigo.”El cargo de inquisidor fue confiado casi en exclusiva a los dominicos y los hermanos menores, a causa de su mejor preparación teológica y su supuesto rechazo de las ambiciones mundanas.

Dos inquisidores con la misma autoridad, nombrados directamente por el Papa, eran los responsables de cada tribunal, con la ayuda de asistentes, notarios, policía y asesores. Los inquisidores fueron figuras que disponían de imponentes potestades, porque podían excomulgar incluso a príncipes. En estas circunstancias sorprende que los inquisidores tuvieran fama de justos y misericordiosos entre sus contemporáneos. Sin embargo, algunos de ellos fueron acusados de crueldad y de otros abusos

Los inquisidores se establecían, por un periodo definido de semanas o meses, en alguna plaza central desde donde promulgaban órdenes solicitando que todo culpable de herejía se presentara por propia iniciativa. Los inquisidores podían entablar pleito contra cualquier persona sospechosa. A quienes se presentaban por propia voluntad y confesaban su herejía, se les imponía penas menores que a los que había que juzgar y condenar. Se concedía un periodo de gracia de un mes más o menos para realizar esta confesión espontánea; el verdadero proceso comenzaba después.

Si los inquisidores decidían procesar a una persona sospechosa de herejía, el prelado del sospechoso publicaba el requerimiento judicial. La policía inquisitorial buscaba a aquellos que se negaban a obedecer los requerimientos, y no se les concedía derecho de asilo. Los acusados recibían una declaración de cargos contra ellos. Durante algunos años se ocultó el nombre de los acusadores, pero el papa Bonifacio VIII abrogó esta práctica. Los acusados estaban obligados bajo juramento a responder de todos los cargos que existían contra ellos, convirtiéndose así en sus propios acusadores. El testimonio de dos testigos se consideraba por lo general prueba de culpabilidad.

Los inquisidores contaban con una especie de consejo, formado por clérigos y laicos, para que les ayudaran a dictar un veredicto. Les estaba permitido encarcelar testigos sobre los que recayera la sospecha de que estaban mintiendo. En 1252 el papa Inocencio IV, bajo la influencia del renacimiento del Derecho romano, autorizó la práctica de la tortura para extraer la verdad de los sospechosos. Hasta entonces este procedimiento había sido ajeno a la tradición canónica.

Los castigos y sentencias para los que confesaban o eran declarados culpables se pronunciaban al mismo tiempo en una ceremonia pública al final de todo el proceso. Era el sermo generalis o auto de fe. Los castigos podían consistir en una peregrinación, un suplicio público, una multa o cargar con una cruz. Las dos lengüetas de tela roja cosidas en el exterior de la ropa señalaban a los que habían hecho falsas acusaciones. En los casos más graves las penas eran la confiscación de propiedades o el encarcelamiento. La pena más severa que los inquisidores podían imponer era la de prisión perpetua. De esta forma la entrega por los inquisidores de un reo a las autoridades civiles, equivalía a solicitar la ejecución de esa persona.

A la jurisdicción de la Inquisición estaban sometidos los herejes, judíos y musulmanes conversos. Se usaban como penas la reconciliación pública o secreta, la sumisión a penitencias o vigilancia, el uso temporal de la túnica amarilla con cruz roja (llamada sambenito), la prisión o la muerte en hoguera.

Las Peregrinaciones y El Culto a las Reliquias

Un aspecto fundamental de la religiosidad de la Edad Media fue sin duda la veneración a las reliquias de los santos, pilar fundamental de movimientos de peregrinación. Las reliquias fundamentaban en todos los fieles una de las más firmes creencias de la época, “eran la expresión del favor divino que los santos gozaron ya en vida, sus restos corporales y objetos de uso cotidiano tenían para cualquier fiel una virtud de carácter milagroso incontestable, por ello la importancia de su posesión, desató una verdadera fiebre por las reliquias en las que los factores políticos y económicos tuvieron gran importancia.

Las reliquias más apreciadas eran las que se relacionaban con la vida de Cristo, llegando a contarse, aparte de la Vera Cruz, más de 40 sudarios y 35 clavos de la pasión.

El saqueo de Constantinopla por los cruzados en 1204, produjo una abundancia excesiva de supuestos restos sagrados por todo occidente alimentada por la creciente oferta de talleres orientales especializados en la fabricación de tales supercherías.

San Luis de Francia se trajo de Tierra Santa, una de las reliquias más conocidas la corona de espinas de Cristo, para la que hizo construir la Sainte-Chapelle, desde el siglo XII, se denunciaba el tráfico de falsas reliquias, por lo que la iglesia reguló el procedimiento de autentificación de los restos sagrados. Íntimamente ligadas al culto a los santos y a sus reliquias.

Las peregrinaciones constituían una de las formas privilegiadas de piedad popular. Durante la Alta Edad Media la motivación de estos viajes había sido básicamente expiatoria. A partir del siglo XI, se fijaron itinerarios sagrados en función de las reliquias previamente descubiertas, por lo que, la penitencia pública tomó también como objetivo los centros habituales de peregrinación. La gran mayoría de peregrinos viajaban por una decidida motivación religiosa. No se peregrinaba a cualquier lugar, sino allí donde esperaba conseguirse un don divino. Tampoco todos los destinos sagrados ofrecían idénticos beneficios, ya que, el peregrinaje respondía a un consciente acto de voluntad, minuciosamente preparado hasta en sus más mínimos detalles.

Antes de partir en peregrinación, los peregrinos, tras confesarse y hacer penitencia, asistían a una misa con liturgia específica en la que debían hacer una comunión colectiva, inmediatamente, el cura les impartía la bendición, entregándoles el bastón y las alforjas, tales signos externos eran más que suficientes para acogerse a la paz, civil como eclesiástica, que les protegía a lo largo de toda la Cristiandad. El viaje se realizaba en grupo y siguiendo un itinerario previamente establecido, con lo que el riesgo era mínimo.

Las rutas de peregrinación eran hacía tres ciudades que destacaban por encima del resto, debido a su enorme prestigio religioso: Jerusalén, Roma y Santiago de Compostela. En Jerusalén, "la tierra estaba más próxima al cielo", en Roma los peregrinos que acudían a visitar los sepulcros de los apóstoles san Pedro y san Pablo, aparte de las numerosas basílicas que albergaban los restos de infinidad de santos y mártires, estaban reafirmando consciente e inconscientemente el papel de la urbe como cabeza de la Cristiandad. Santiago de Compostela, adquirió una gran importancia como santuario regional al descubrirse el supuesto sepulcro del apóstol Santiago el Mayor en el siglo IX, y alcanzó a partir de fines del XI una enorme fama que le situó, junto a las sedes anteriores, a nivel claramente internacional, la ruta jacobea comenzó a ser recorrida por infinidad de viajeros de todo Occidente. Una complicada red de calzadas en Francia, flanqueada por lo demás por multitud de santuarios menores, enlazaba por Roncesvalles con el denominado Camino francés hasta Compostela. Accesos secundarios como el marítimo utilizado por los ingleses atestiguan el auge alcanzado por este centro de peregrinación.

CAPITULO III

LA FORMACIÓN DEL ARTE MEDIEVAL.

"la iglesia se ha convertido en un espectáculo de gran belleza, magnífico para los que pueden gozar de ella, e increíble para los que de ella oyen hablar”

Concepto del Arte Cristiano

En los inicios de la Edad Media, la actividad cultural consistió en la conservación y sistematización del conocimiento del pasado, se copiaron y se comentaron las obras de autores clásicos. Se escribieron obras enciclopédicas, como las etimologías de San Isidoro de Sevilla, en las que su autor pretendía compilar todo el conocimiento de la humanidad. En el centro de cualquier actividad estaba la Biblia: todo aprendizaje secular llegó a ser considerado como una mera preparación para la comprensión del Libro Sagrado.

Entre los siglos V y X, mientras en Oriente se desarrollaba la civilización bizantina y se expandía el Islam, el occidente europeo atravesó una etapa crítica y confusa, pues los pueblos bárbaros invadieron el imperio romano y a pesar que arrasaron con el sistema social y cultural romano, este logró sobrevivir a través de la expansión del cristianismo por la Europa Medieval, lo que implico algunos cambios en el lenguaje plástico y la aparición de una nueva iconografía basada en el Arte Cristiano.

El Arte Cristiano es un término que, aunque siempre se aplica solo a las bellas artes y a sus creaciones, es usado para designar a las bellas artes que se encuentran al servicio de la Iglesia, esto es, las que sirven para construir y embellecer las casas de oración, los hogares de los servidores consagrados de Dios, los monasterios, conventos, los lugares de último reposo, las que dan hermosura a los ritos y ceremonias de la Iglesia, así mismo algunas veces se utiliza para denotar a las manifestaciones artísticas en cuanto a que están en armonía con los ideales y principios cristianos. La evolución del arte cristiano muestra las variaciones de las creencias y no refleja solamente las creencias porque a menudo las crea.

“Hay incluso una serie de datos que quieren justificar el culto a las imágenes cristianas en el ambiente cristiano, como la leyenda del Mandylon del Rey Abgar de Edessa o la de la Verónica. También se puede añadir la Leyenda de San Lucas, el evangelista, a quien se le atribuyen muchos cuadros o imágenes de la Virgen tanto en Oriente como en Occidente”.

Orígenes del Arte Paleocristiano

El arte paleocristiano es el estilo artístico que se desarrolla durante los cinco primeros siglos de nuestra era, desde la aparición del Cristianismo, durante la dominación romana, hasta la invasión de los pueblos bárbaros, aunque en Oriente tiene su continuación, tras la división del Imperio romano donde se transforma en Arte Bizantino

Dice Gombrich que cuando en 311, aparece el primer decreto de tolerancia de Valerio Augusto, que será el antecedente más próximo del edicto de Milán, los problemas fueron enormes, ya que, durante las persecuciones no existió la posibilidad de construir espacios para realizar los cultos, pero una vez que la iglesia adquirió poder, el conjunto de sus relaciones con el arte tuvo que plantearse de nuevo.

Hasta el año 313, el arte arquitectónico de los cristianos se centró en la excavación de las catacumbas, que veremos más adelante, y el reforzamiento de sus estructuras. Después de la Paz de la Iglesia, la basílica, tema que será tratado en otro apartado, es la construcción eclesiástica más característica del mundo cristiana.

Tanto en la pintura como en la escultura, la valoración de los primitivos cristianos se dirige más al significado de las representaciones que a la estética de las mismas. El carácter simbólico se impone a la belleza formal. El repertorio de las representaciones pictóricas se encuentra básicamente en las catacumbas, decorando sus muros esto como un intento de expresar su fé en la nueva religión, lo que se repetirá a lo largo de todo el arte medieval.

Los temas son muy variados. Muchos representan a figuras cargadas de simbología cristiana como: el Buen Pastor, el "orante", el monograma de Cristo y el pez.

“El buen pastor representaba a cristo salvador con la oveja sobre los hombros, en representación del alma que ha salvado Este símbolo se encuentra con frecuencia en los frescos, en los relieves de los sarcófagos, en las estatuas, así como grabado sobre las tumbas. El orante representada con los brazos abiertos, es símbolo del alma que vive ya en la paz divina. El monograma de Cristo está formado por dos letras del alfabeto griego: la X (ji) y la P (ro) superpuestas. Son las dos primeras letras de la palabra griega "Christòs" (Jristós), es decir, Cristo. Este monograma, puesto en una tumba, indicaba que el difunto era cristiano. El pez representaba a Jesús como pescador de hombres es un símbolo muy difundido de Cristo, emblema y compendio de la fé cristiana, en la época de la persecución era el símbolo de distinción de los cristianos”.

Otros símbolos que se observan son “la paloma, el alfa y la omega, el ancla, el ave fénix, etc, la paloma generalmente aparece con el ramo de olivo en el pico como símbolo del alma en la paz divina. El alfa y omega son la primera y la última letra del alfabeto griego, representando a Cristo como el principio y el fin de todas las cosas. El ancla es el símbolo de la salvación se muestra como el alma que ha alcanzado felizmente el puerto de la eternidad. El ave fénix, ave mítica que al renacer de sus cenizas es vista como el símbolo de la resurrección de cristo”.

En la iconografía paleocristiana aparecen otros temas paganos como el de Orfeo “prefiguración de David en la cultura judaica, tampoco es indiferente a los conceptos de caída y salvación, anticipando el descenso al limbo de los justos; constituye por consiguiente una prefiguración pagana de Cristo.” Después del año 313 los temas figurativos son las más frecuentes, en los frentes de los sarcófagos aparecen relieves, que si en un principio siguen la estética clásica, como en el Sarcófago de Probo, luego se estereotipan las formas en esquemas planos y figuras de igual tamaño, encajadas en los espacios que determina un estructura de arcos que unifican la escena.

Las Catacumbas Como Espacio Funerario

Los primeros cristianos consideraban la sepultura de los muertos como un deber de la máxima importancia; debía aplicarse no sólo a familiares y amigos, sino incluso a los pobres y a los extranjeros. La creencia en la resurrección de los muertos, constituyó la esencia de ese interés por conservar o enterrar, no incinerar, los restos mortales de los difuntos. Ya los Evangelios hablan de la costumbre de sepultar a los muertos, y en los Hechos de los Apóstoles se afirma que hombres piadosos cuidaron de dar sepultura a Esteban, en cuyas exequias hicieron gran duelo. Desde entonces, siempre que fue posible, los cristianos procuraron recuperar los cuerpos de sus mártires gracias a que la ley romana protegía el culto a los muertos.

En un principio, no tuvieron reparos en usar cementerios paganos para sepultar a los muertos. No obstante, hacia el siglo II comenzaron a construirse cementerios cristianos en torno a Roma, en las propiedades que creyentes adinerados cedían a la Iglesia, o bien también se dieron casos de cementerios privados pertenecientes a familias acomodadas.

Los principales cementerios cristianos eran las catacumbas, que comenzaron a excavarse hacia el año 150 por influencia de los hebreos, que habían hecho lo mismo tiempo atrás. También fueron muchos los interesados en que sus cuerpos se enterraran junto aquellos que habían dado su vida por la fé. Así fue como en los alrededores de Roma, ante el gran aumento de creyentes, comenzaron a excavarse galerías subterráneas para sepultarlos.

Estos sitios estaban formados por galerías subterráneas, que parecían verdaderos laberintos y que en conjunto llegaban a medir muchos kilómetros. En las paredes de toba o piedra caliza, se excavaron filas de lóculos ó nichos rectangulares, de diferentes dimensiones, capaces de albergar un solo cadáver, aunque no era raro que contuviesen dos o más. Por su colocación en filas superpuestas, las tumbas daban la idea de un gran dormitorio, de este modo, los cristianos querían afirmar su fé en la resurrección de los cuerpos. Además de los lóculos, había otras clases de tumbas: el arcosolio, el sarcófago, la forma, el cubículo y la cripta

Las primeras catacumbas cristianas surgen a mediados del siglo II exclusivamente como cementerios. Su lejanía del centro urbano, su angostura y su humedad dificultaban su uso para otros menesteres, aunque eran frecuentadas por visitantes que deseaban rezar ante las tumbas de los familiares o de los mártires.

Como muchos de los terrenos donde se excavaron catacumbas fueron de donación privada, tomaron el nombre de los donantes, como las de Domitila, Priscila, Pretestato o Lucina y San Calixto.

Las catacumbas de Domitila fueron las primeras en ser excavadas, allí se hallan los restos de Flavio Clemente y su esposa Flavia Domitila, sobrina del emperador Domiciano, que fueron asesinados acusada de ateismo y usos hebraicos, por lo que el terreno privado destinado a tumba de esta familia pasó a convertirse, en zona de sepultura de cristianos.

Las catacumbas de Priscila, contienen la cripta del cónsul Acilio Clabrio que fue ejecutado en el 91 también por orden de Domiciano. En la llamada Capilla Griega se conservan los restos de una de sus descendientes, la matrona Priscila, quien donaría este terreno, a la Iglesia Romana.

En las catacumbas de San Calixto se encuentran la cripta de los Papas, lugar de sepultura de varios obispos de Roma desde Ponciano a Milciades, muerto en el 314.

La espiritualidad que se desarrolló en torno a estos osarios, se hallaba nutrida por el estudio de las escrituras, que pone a Jesucristo como figura dominante. Esto quedó representado en la iconografía hallada en las pinturas de las catacumbas de San Calixto y Santa Domitila, en las que se puede ver pintada, grabada, modelada en relieve sobre los sarcófagos y, finalmente, esculpida una de las imágenes mas antiguas la del buen pastor. Así mismo, a menudo, “Cristo, está representado en escenas bíblicas; se puede ver a Jesús curando al ciego o resucitando a Lázaro de la tumba; la multiplicación de los panes o la transformación del agua en vino”. Junto a estas imágenes, los cristianos de las catacumbas representaron, la virgen y los apóstoles. La espiritualidad de las catacumbas se vio representada también en imágenes de los sacramentos, “una de las más antiguas pinturas en los así llamados Cubículos de los Sacramentos, en las Catacumbas de San Calixto, representa el bautismo. Junto a un espejo de agua está sentado un pescador que con el sedal saca un pez; en otro fresco, los cristianos sentados a la mesa eucarística son siete, en los platos delante de ellos está el pez: Jesucristo, Hijo de Dios, Salvador.”

La decoración cristiana es totalmente plana, son figuras que pictóricamente están realizadas mediante el predominio de lo lineal frente a lo pictórico. Esto significa que el trazo del dibujo delimita las formas y en el interior de estas se contiene el color. Los colores utilizados en estas primeras pinturas son: colores fríos y cálidos, utilizados de forma plana. No hay por lo tanto estudios de luz ni plasmación de la luz porque no interesa el color como elemento realista sino que interesa el color para destacar la significación ideológica de la imagen.

En el símbolo de la Orante, la decoración se realiza proyectando un realismo tendiente al esquematismo y a la abstracción. Este expresionismo de carácter simbólico y de origen orientalizante se concreta esencialmente en el rostro y sobretodo en la expresión de los ojos, muy marcados y grandes. Todas las figuras son representadas pictóricamente aisladas entre si; posee además una significación religiosa en sí misma, las figuras están representadas única y exclusivamente por la simbología religiosa, además para potenciarla el pintor cristiano no duda en romper la proporcionalidad figurativa, o bien en una figura, o unas figuras con otras, por ejemplo, en la Orante las manos son más grandes y desproporcionadas y se destacan al igual que la figuración en un único plano frontal al espectador. Este recurso se realiza para destacar la simbología de la figuración: la plegaria.

La significación de esta Orante puede ser una de las primeras representaciones de la virgen como madre de Jesucristo. Su iconografía es una de las imágenes más repetidas en todas las catacumbas, tanto en las Orientales como en las Occidentales. Los pintores que realizan estas imágenes son todos ellos pintores anónimos, que proceden de niveles sociales muy bajos, artísticamente su formación es romana pero la adaptan a las nuevas necesidades del arte Cristiano.

Otro símbolo es el del Buen Pastor, tema muy representando en la iconografía del arte cristiano primitivo, aparece a partir del siglo II. El Buen Pastor generalmente esta representado con los rasgos de un joven pastor adolescente barbado, vestido con una túnica que acaba por encima de las rodillas. El Buen Pastor, para los cristianos, es una alusión a Jesús, visto como el buen pastor que salva al cordero, tal como lo dice el evangelio de Mateo.

Concepto Espacial de la Basílica Cristiana

En los primeros años del cristianismo, la alta jerarquía de la iglesia manifestó su creencia en el crepúsculo de los valores paganos, eran los momentos de las primeras reflexiones en voz alta sobre “la crisis de un mundo que ha envejecido y que con sus hechos experimenta su ocaso y derrumbe”.

En el 311, los cristianos tuvieron que elegir las formas para su templo y, ajenos tanto a la autonomía contemplativa griega como a la escenografía romana, seleccionaron lo que había para ellos de vital en ambas experiencias precedentes, casando la escala humana de los griegos con la conciencia del espacio interno romano. En nombre del hombre, produjeron en el espacio latino una revolución funcional

La iglesia cristiana dejó de ser el edificio misterioso que ocultaba el simulacro de un dios, ni tampoco era la casa de Dios, la iglesia se convirtió en un lugar de reunión, de comunión y de oración de los fieles. Los cristianos se inspiraron en la basílica, que poseía planta rectangular, ya que ella tendía a reducir las proporciones de la basílica romana, porque una religión “del amor exigía un escenario físico humano, creado a escala de aquellos a quienes tenía que acoger y elevar espiritualmente. Esta fue la transformación cuantitativa o dimensional; la revolución espacial consistió en ordenar todos los elementos de la iglesia en la línea del camino humano”.

Con la Paz de la Iglesia en el año 313, en Oriente, comienza una época en la que se construyen numerosos edificios dedicados al culto cristiano, muchos de ellos bajo el patrocinio imperial, coincidiendo con la cristianización del Imperio Romano de Oriente. La edificación monumental de iglesias comenzó con las fundaciones imperia­les de Constantino en Tierra Santa y Constantinopla. La planta basilical y el edi­ficio de planta centralizada fueron las dos tipologías arquitectónicas que se con­solidaron en este momento y que perdu­rarán en la arquitectura cristiana.

Basílica del Santo Sepulcro

La familia imperial constantiniana qui­so dignificar el escenario de la pasión y muerte de Jesús en Jerusalén, por ello contrató los mejores arquitectos para llevar a cabo una majestuosa construcción que hiciera honor a la relevancia que dichos escenarios tenían para los cristianos. Con este patrocinio se erigió el complejo del Santo Sepulcro la construcción eclesiástica más importante de Constantino en Oriente,”se componía de varias estructuras interrelacionadas, la rotonda de la Anástasis, que se elevaba sobre la tumba; un patio con pórtico que albergaba, en una esquina el monte calvario, la Basílica del Martyrium o conmemorativa, que servía a la vez como la catedral y un atrio exterior”

La iglesia del Santo Sepulcro combina la planta basilical con la centralizada, colocando en la cabecera de la basílica un mausoleo con un deambulatorio de columnas que servía para exponer las reliquias que ahí se guardaban. Esta nueva tipología de templo que se desarrolla durante el imperio bizantino en los santos lugares surge debido a la necesidad de acoger a un gran número de peregrinos que iban a visitar una de las primeras reliquias de la cristiandad, el lugar de la muerte de Jesús.

El proyecto innovador del Santo Sepulcro combina el concepto basilical con el principio del mausoleo circular para expresar un axioma moral. Desde el punto de vista del proyecto, esta basílica responde a un ideal que ofrece como novedad la combinación de un espacio centralizado con otro longitudinal, unidos por un atrio que facilita el acceso al espacio de la rotonda donde se encuentran las reliquias. Estaba compuesto por varias estructuras interrelacionadas: la rotonda de la anástasis que se eleva sobre la tumba; un patio con pórtico que albergaba el monte calvario; la basílica del martyrium o conmemorativa que servia como catedral; y un atrio exterior. La basílica era más corta en relación con su ancho, tenía galerías y dos naves laterales a cada lado.

Si bien, los griegos habían alcanzado la escala humana en una relación estática de proporción entre la columna y la estatura del hombre, la humanidad del mundo cristiano lleva esta proporción más allá, acepta y glorifica el carácter dinámico del hombre orientando todo el edificio según su camino, construyendo y encerrando el espacio a lo largo de su andar. El creyente que recorría la vía de salvación simbolizada por la nave central, además de mostrarse receptivo a tal efecto racional, no podía olvidar que el templo era, ante todo, símbolo del Cuerpo de Cristo.

La basílica romana se origina en el propio foro o, a través de este, en la estoa griega donde, fue el pórtico su elemento ordenador. Ya en la basílica, éste rodeó al espacio central descubierto, que pronto se cubrió para quedar iluminado superior y lateralmente. El pórtico quedaría incorporado y reducido a una alineación de columnas o soportes laterales, que separaba la nave central, de mayor altura, de las naves laterales.

En Roma, la basílica se convirtió en el modelo para las grandes y pequeñas iglesias, los lugares de culto paganos se convirtieron en basílicas de enormes tejados de madera, todas erigidas entre los siglos IV y V. La planta incluía un atrio o entrada, un nártex o pórtico, una gran nave central flanqueada por dos naves laterales, un transepto que cruzaba la nave, un ábside semicircular o poligonal opuesto a la nave. En frente del ábside se encontraba el altar. Los materiales de construcción columnas, paneles decorativos, mampostería y tejas de bronce, fueron extraídos de edificios imperiales que se incorporaron a las nuevas estructuras.

Basílica de Santa Sabina

Fue construida en el siglo V, es de planta basilical, de grandes proporciones y austeramente simple. Esta iglesia se distinguió por la “elegancia en sus líneas, proporciones y por su lujo decorativo.” La entrada a la iglesia se hacía por el atrio que tenía un nártex ó pórtico, el cual daba paso al interior del templo cumpliendo dos funciones, a la vez que servía como pórtico de la iglesia era, también el lugar donde se situaban los catecúmenos. El interior constaba de tres naves separadas por filas de columnas que soportaban dinteles o arquerías orientadas hacia el este, lo que provocaba que una de las tres naves estuviese al norte, otra al sur, dejando en la nave central al coro menor consistente en un espacio limitado por mamparas bajas y tiene a los lados dos púlpitos desde los que se dirigían los rezos y cánticos, esta parte se separaba del presbiterio mediante un septum, quedando detrás el transeptum ó nave del crucero.

La misma conquista dinámica se evidencia en los edificios de Planta centralizada central, como por ejemplo el Mausoleo de Santa Constanza,construido en torno al año 350 como mausoleo de Constantina, hija del emperador Constantino.

Mausoleo de Santa Constanza

Es un martyrium cristianode planta centralizada con un núcleo central cupulado y un deambulatorio que se comunica con este núcleo a través de columnas pareadas, cubiertas por una bóveda anular. En el tambor de la cúpula hay una gran hilada de ventanas que proporcionan luz directa al núcleo. El deambulatorio también tiene ventanas, que aunque son muy pequeñas proporcionan también luz indirecta. Así mismo posee un atrio con dos pisos. En el deambulatorio hay una serie de pequeños nichos y la bóveda anular que lo cubre está decorada con los primeros mosaicos cristianos que se conservan.

Este Mausoleo niega todo sentido de gravedad estática substituyendo los muros por una “teoría de maravillosas columnas apareadas que, por su orientación radial y por la sugerencia lineal de los arquitrabes que descansan sobre cada par, indican al espectador el centro del edificio desde cualquier punto del anillo circundante. En Santa Constanza, una fecundidad de pasajes creados por el hombre, una pluralidad de indicaciones direccionales repetidas todo alrededor, demuestran la nueva conquista cristiana, aún en los edificios de esquema central, que generalmente son más bien signo de una afirmación autónoma de un ideal edificio que de una reposada, rítmica, fluyente arquitectura humana.”

CAPITULO IV

Arte Bizantino

Al convertir Constantino, la antigua colonia griega de bizancio en capital del imperio romano de Oriente, razón por la que toma el nombre de Constantinopla, no hace sino culminar un proceso que aseguraba la pervivencia del Imperio de Oriente a la caída del sector occidental y de su capital Roma. Así mismo “permitió la pervivencia del arte romano imperial, que acabaría siendo una mezcla de romano, helenístico y oriental”.

El imperio bizantino comprende varias etapas la primera abarca desde la época de la dinastía Teodosia hasta mediados del siglo IX, destacando el reinado de Justiniano quien fracasó en su intento reconstruir el Imperio Romano. A fines del siglo X, el imperio bizantino alcanza una segunda fase en donde la dinastía macedonica consigue construir una etapa de esplendor una vez finalizada la guerra iconoclasta, que desarrollaremos más adelante. Desde mediados del siglo XI, el imperio bizantino atraviesa un último período de progresiva decadencia que culmina con la caída de Constantinopla en 1453, a manos de los turcos selyucidas.

La expresión artística que se configura, en el imperio bizantino, a partir del siglo VI se halla fuertemente enraizada en el mundo helenístico como continuador del arte paleocristiano oriental, siendo transmisor de formas artísticas que influyen poderosamente en la cultura occidental medieval.

las tres edades de oro de la ARQUITECTURA bizantina

El arte bizantino experimenta a lo largo de su dilatada historia una evolución que; sin embargo, no desdibuja las características básicas y constantes que configuran lo que denominamos estilo bizantino.

La aportación más sobresaliente aparece en la arquitectura bizantina, con la solución que se da al sostenimiento de las bóvedas. Los problemas que planteaba la utilización de cubiertas abovedadas, fueron resueltos al recoger y superar la tradición y técnicas romanas, aportando una solución valida al difícil obstáculo de los empujes mediante el empleo de la cúpula sobre pechinas ó triángulos esféricos, medias cúpulas y otros elementos de sujeción y contrarresto como contrafuertes y muros mas gruesos. Esta técnica, está al servicio de una concepción del espacio, un espacio dilatado, dinámico, que no podía quedar limitado por los muros y que se expresaba con más holgura en los templos de planta central pero también en las bóvedas de las iglesias de planta basilical. Los materiales usados son la piedra y el ladrillo empleados como materiales constructivos, los cuales son cubiertos con mayor o menor riqueza según se trate de muros exteriores o recintos interiores; en estos últimos, el mosaico, del que hablaremos más adelante, cubre de forma continua las paredes haciendo perder el interés en la decoración externa, así mismo se mantuvieron elementos de construcción como las arquerías de medio punto, la columna clásica como soporte, etc.

Otra aportación de gran trascendencia fue la decoración de capiteles, de los que hubo varios tipos; así, el de “tipo teodosiano es una herencia romana empleado durante el siglo IV como evolución del corintio y tallado a trépano, semejando a avisperos”; otra variedad fue el capitel cúbico de caras planas decorado con relieves a dos planos. En uno y otro caso era obligado la colocación sobre ellos de un cimacio o pieza tronco piramidal decorada con diversos motivos y símbolos cristianos.

Todos estos aportes fueron agregados a la tipología de los templos, que según la planta, podían ser de planta centralizada, sin duda concordante con la importancia que se concede a la cúpula, pero no son inferiores en número las iglesias de planta basilical.

Los templos bizantinos, además del cuerpo de nave principal, poseían algunos elementos constructivos, heredados de los paleocristianos, el atrio, queda reducido a un pórtico adosado a la fachada de la iglesia, agrega además otros elementos como el nártex o parte porticada del atrio, la iconostasis separa el espacio destinado a los fieles del prebisterio, la tribuna, constituye el antecedente de lo que será el triforio en las iglesias medievales del occidente europeo La evolución de la arquitectura bizantina motivó su división en tres edades de oro.

En la Primera Edad de Oro, el arquitecto pudo jugar constantemente con las cúpulas y con las plantas. La cúpula poseía el simbolismo del firmamento y la planta de la tierra, como elemento sustentante se usó la columna. Es en esta etapa cuando “se realizan las más grandiosas obras arquitectónicas que ponen de manifiesto los caracteres técnicos y materiales, así como el sentido constructivo que caracteriza el arte bizantino de este período”. Las tres obras magnas de esta primera época son Santa Sofía, San Vital, y Santos Sergio y Baco

Iglesia de Santa Sofía

Santa Sofía es la máxima construcción en toda la historia bizantina, fue diseñada por los arquitectos Antemio de Tralles e Isidro de Mileto quienes la construyeron obedeciendo a la idea de convertirla en el mejor templo jamás construido

Santa Sofía es una iglesia cuya característica fundamental es que en ella se compatibilizan a la perfección la tendencia basilical con su sentido dinámico, ritmo longitudinal y la tendencia centralizada con la cúpula como elemento principal.

Su exterior es similar a la de los otros edificios de estilo bizantino: “achaparrado, muy voluminoso, donde destaca la cúpula pero no de manera estilizada, sino muy baja y con un tambor poco desarrollado.” El interior es grandioso, Se accede a él, desde el atrio y el nártex. Su planta es cuadrangular, en la que se pueden diferenciar dos ejes: este-oeste y norte-sur. En el eje este-oeste es donde se observa el planteamiento característico de una planta centralizada, ya que está presidido sobre una enorme cúpula que está levantada sobre pechinas y se soporta sobre cuatro grandes pilares. A pesar de la centralización, una serie de elementos hacen que impere el eje este-oeste hacia el ábside. Para ello, lanzaron de pilar a pilar unos muros que cubrían totalmente las naves laterales y que forman arcos sujetos por pilares.

Lo más sorprendente de Santa Sofía, es su espectacular cúpula de treinta y un metros de diámetro, formada con cuarenta nervios en el interior y en el exterior se reforzó con cuarenta nervaduras cortas entre las cuales se abren ventanas estrechas. Esta cúpula, cuya edificación fue demasiado audaz, se hundió tras un terremoto en el año 559. Isidoro de Mileto, el Joven, fue el encargado de su reconstrucción, y decidió modificar el proyecto original y disminuir el diámetro y la altura, además de añadirle en el exterior unos macizos muros de sujeción. El empuje se contrarrestaba con dos bóvedas de cuarto de esfera que descansan en otras bóvedas, para ello tuvieron que transmitir los empujes a unas semicúpulas que a su vez los transmitían a unos cuartos de cúpulas que había en los extremos y que tenían forma de nicho.

El presbiterio estaba formado por un tramo cubierto por bóveda de cañón y una exedra semicircular cubierta por una bóveda de horno que al exterior se mostraba poligonal. Al otro extremo había un tramo cubierto por una bóveda de cañón que daba al nártex. Este reparto de presiones permitía alcanzar una sensación de ligereza en la construcción inigualable, a lo que contribuyeron los dos pisos de arquerías que se hallan bajo los dos arcos formeros de la nave; así mismo, las naves laterales estaban cubiertas por bóvedas de arista que alternaban con tramos cubiertos por bóveda de cañón, que coincidían con los contrafuertes. En el piso de tribuna la cubierta se hizo a base de pequeñas cúpulas.

Iglesia de los Santos Sergio y Baco

Estaba ubicada en Constantinopla, se trataba de una capilla palatina al mismo tiempo que un martyrium. Era de planta centralizada, formada por un núcleo central octogonal cubierto con una cúpula que se apoyaba en ocho pilares y que estaba inscrito en un cuadrado irregular que formaba el deambulatorio envolvente. El nártex estaba ubicado al oeste, encima de la tribuna había un tambor horadado que sostenía la cúpula formada por dieciséis elementos alternos curvos y rectos. Todo esto se manifestaba en el exterior a través de una estética horizontal; mostrando un edificio muy macizo y achaparrado, con predominio visual de la cúpula gallonada sobre ocho pilares y nave en su entorno.

La conexión entre el núcleo y el deambulatorio se hacía a través de exedras alternadas con tramos rectos configurados por columnas que sustentaban el piso superior o tribuna situado sobre el deambulatorio, el presbiterio, orientado al este, constaba de un tramo recto que comunicaba con el deambulatorio, cubierto con bóveda de cañón y una exedra.

Iglesia de San Vital en Rávena.

La iglesia de San Vital de Rávena, era una iglesia que cumplía las funciones de capilla palatina y martyrium, por lo tanto era de planta centralizada, así mismo esta iglesia es la primera en tender a una estética vertical, lo que permitía imaginar cómo podría ser el interior de la iglesia.

Estaba formada por dos octógonos, uno inscrito dentro de otro. El octógono central con pilares se extendía hasta el deambulatorio mediante siete nichos formados por columnas. Poseía un gran presbiterio en el octógono interior, formado por dos partes el tramo recto que ocupaba la anchura del deambulatorio y el remate en exedra, así mismo se hallaba encuadrado en dos pequeñas capillas y dos más grandes formadas por un tramo circular y tramo rectangular.

Igualmente, la iglesia presentaba un atrio y un nártex, que estaba unido al deambulatorio a través de un ángulo del octógono y creaba unos torreones y unos espacios triangulares con el fin de unir el nártex con el deambulatorio lo que hacía que el acceso fuera especialmente original

Desde sus inicios la cubierta del deambulatorio era de madera pero en luego se cubrió con una bóveda. La cúpula estaba sobre un gran tambor con ventanas ubicada en la parte central de la planta sobreelevada. En torno a ella, estaba el deambulatorio que presentaba dos pisos, uno bajo y la tribuna.

La Segunda Edad de Oro se inicia hacia el 860 y durará hasta finales del siglo XII. En esta época se mantienen los elementos anteriores sobre todo la cúpula definiendo un espacio central dentro de la estructura basilical, sin embargo también hay algunos elementos nuevos como el predominio de la planta de cruz griega insertada en espacios cuadrados o rectangulares; una mayor preocupación por el exterior el cual se trata arquitectónicamente; se usa más la alternancia de hileras de piedra y ladrillo formando dibujos; se usan las arquerías; aparece la búsqueda de una nueva tensión vertical interior; hay una distinta ubicación de las cúpulas secundarias que ocupan ahora los ángulos del cuadrado en lugar del centro de los brazos; los tambores, sobre los que se asientan las cúpulas, aparecen generalmente perforados dando una apariencia de linternas; y por último el uso de las naves laterales como meros deambulatorios para conectar el presbiterio y nártex.

Iglesia de Santa María de Dafni

Esta iglesia fue un antiguo monasterio, llamado Kaisariani que en el siglo XI fue reconstruido en su totalidad. La estructura arquitectónica del edificio se basa en una planta en forma de cruz griega inscrita en un rectángulo. La parte central estaba coronada por una alta cúpula. Al este y al oeste se encontraban respectivamente, un ábside trilobulado y un doble pórtico, así mismo hay la presencia de ventanas con arquivoltas que estaban dispuestas en diferentes aperturas arqueadas, separadas por altas columnas, los únicos adornos arquitectónicos del edificio eran unas molduras que encuadraban la decoración.

Basílica de San Marcos de Venecia

La Basílica de San Marcos de Venecia era de planta de cruz griega, sobre la cual se alzaban cinco cúpulas que fueron erigidas en la intersección de los brazos de dicha cruz. “La disposición arquitectónica de esta iglesia, se articulaba y repetía altamente en un solo módulo claramente identificable en la cúpula central que se alzaba, por medio de los grandes contrafuertes en cuatro pilares.”.

El centro, la cripta, las naves y el ábside se hallaban debajo del presbiterio y de las capillas laterales, las cuales tenían un techo de bóveda de cañón intersectada por columnas pequeñas, así mismo poseía dos transeptos uno al norte y otro al sur, el transepto del sur estaba conectado de cerca con el palacio episcopal a través de ventanas en los diferentes niveles, y en el transepto del norte estaba el área de los sacerdotes.

La Tercera Edad de Oro va desde el 1200 a la conquista turca. Arquitectónicamente, no arroja grandes novedades. Hay una profusión de escuelas, con demasiada variedad propia como para considerarlas consolidadas. Las iglesias propiamente bizantinas se recubren de ladrillo. Se mantiene la expansión, que en Rusia define el tipo nacional, caracterizado por la profusión de cúpulas exageradamente gallonadas, generalmente de forma helicoidal, largos tambores de asiento, y una linterna en a cúpula central.

Así mismo se multiplican los templos bizantinos por los valles del Danubio, por Rumania y Bulgaria, llegando hasta las tierras rusas de Moscú donde destaca la iglesia de la Asunción del Kremlin, en la Plaza Roja de Moscú, cuyas cinco cúpulas, la más alta y esbelta en el crucero y otras cuatro situadas en los ángulos que forman los brazos de la cruz, resaltan por su coloración, por los elevados tambores y por sus característicos perfiles bulbosos.

Iglesia Santa María De La Asunción Del Kremlin

La Catedral De La Asunción es la iglesia más vieja y más importante de Kremlin. Su planta es cruciforme, con paredes son de piedra caliza y perfectamente proporcionadas en cinco bóvedas que dan a la catedral cierta serenidad. Su trazado sigue el orden una planta de cruz griega dentro de un cuadrado con cinco cúpulas, “representando a Jesús y los cuatro evangelistas”, las cuales se hallaban levantadas sobre cinco tambores del mismo diámetro, con la excepción de la central que por su mayor tamaño tenía un tambor mayor y mas elevado, así mismo esta dividida por seis pilares en tres naves y doce galerías cuadradas.

El interior es elevado y de altura uniforme, además tiene cinco ábsides planos, “cuatro columnas en la naos, planas bóvedas de aristas sobre los brazos del crucero; en las naves laterales se formaban dos estrechas capillas en el área del presbiterio

Los mosaicos bizantinos

El mosaico tuvo un gran desarrollo durante la época romana y va a tener su mayor esplendor en el mundo bizantino. Durante los más de mil años que duró el Imperio Bizantino, los mosaicos se convirtieron en una manifestación artística muy especializada, se usaron mucho las teselas de vidrio hasta el punto de ser las únicas utilizadas por los bizantinos.

“El gusto por la riqueza y la suntuosidad ornamental del arte bizantino, eminentemente áulico, exigía el revestimiento de los muros de sus templos con mosaicos, no sólo para ocultar la pobreza de los materiales usados, sino también como un medio para expresar la religiosidad y el carácter semidivino del poder imperial, por ello se solían representar las figuras con un carácter rígido, inmaterial y con una disposición simétrica; la gran luminosidad era un intento de reflejo de lo sobrenatural”.

El mosaico de vidrio no era una invención bizantina; en Roma se utilizaban para detalles, aunque no para el conjunto general. La fabricación de las teselas era similar a la de otros objetos de vidrio: se hacían planchas con un material, que fuera opaco. Estas planchas luego eran cortadas formando las teselas. Los esmaltes de colores se ponían en un mortero formando pequeños ángulos para aprovechar su capacidad de reflejar la luz, y los esmaltes de oro se utilizaban para representar la luz que salía de las figuras sagradas, así mismo se usaban en elaboración de los mosaicos eran la terracota para el color carne, las piedras semipreciosas.

El mosaico podía estar en el suelo representando motivos geométricos, o en las paredes teniendo una temática representativa.

En el mosaico se produjo el abandono progresivo del naturalismo por la abstracción; ya que los mosaicos romanos eran de tipo realista, y el mosaico bizantino pretendía hacer representaciones trascendentes. Por ello se fueron perdiendo los paisajes y fondos arquitectónicos que se fueron sustituyendo progresivamente por fondos de color oro.

También se fueron perdiendo muchos detalles que complementaban la escena pero que no eran esenciales. Todo se fue reduciendo a las formas básicas, centrándose principalmente en la figura humana; la forma de representar esta figura humana tendía a un progresivo esquematismo, figuras frontales, rígidas, sin buscar una variación en los movimientos, lo que provoca que las figuras se fuesen haciendo planas y sin volumen.

Otro elemento que se fue perdiendo era la relación entre las figuras, ya que desaparecieron los grupos y las figuras comenzaron a aparecer aisladas. Además, a partir de mediados del S. VI, se inventó una técnica para colocar las teselas doradas de tal forma que brillaran de forma más intensa. Para esta técnica tuvieron que calcular la inclinación idónea para que las teselas reflejasen la luz.

Iglesia de San Vital De Rávena.

La mayor decoración se encontraba en el ábside y en la zona del presbiterio. Los mosaicos del ábside representaban al Cosmocrator, otorgándole la corona del martirio a San Vital, mientras eclesio ofrenda la iglesia iniciada por el, todos ellos rodeados de dos ángeles, la figura de cristo era la de un joven imberbe de rostro hierático y fijo y con una figura clásica; los personajes de San Vital Y san Eclesio participan de una “mayor dependencia del principio de bidimensionalidad que las tres figuras centrales mejor concebidas en términos espaciales”

En el ábside, los mosaicos de las paredes y la bóveda tenían relación con la representación de la Eucaristía. Además aparecían muchos elementos decorativos como las cráteras, hojas de vid, cestos de frutos picoteadas por palomas; el panel estaba dividiendo en una serie de escenas. En la parte baja, en los tímpanos, se representaron prefiguraciones de la Eucaristía, como “la visión de Mamré ó Abraham con los tres ángeles”, aquí la escena se desarrolla con un paisaje de influencia naturalista, clásica, con la presencia de detalles innecesarios y anecdóticos, como la presencia de Sara, las flores; lo que provoca que los personajes formen una escena interrelacionada.

Las paredes laterales del ábside representan la ofrenda hecha por Justiniano, vestido lujosamente con túnica blanca sobre la que lleva una manta púrpura, llevando la patena en las manos, conforme a un gesto frecuente de aquellos tiempos hacia las iglesias más importantes del imperio. A su lado se halla el arzobispo Maximiliano y un séquito de sacerdotes, cortesanos y guardias.

Sin duda cuanto aquí se ofrece “participa de un triple componente histórico, filosófico, artístico, conforme a un sistema original de categorías que privilegian el símbolo, la imagen, la luz, el color etc. Bizancio en este conjunto dorado ya se declara defensor de un sentido ético y estético en la obra que habrá de partir de lo cognoscitivo para aproximar lo real a la idea de manera que la imagen es sustitutiva de la palabra. En este cortejo de Justiniano, Maximiliano y amplio séquito de sacerdotes y oficiales, no se representa sino que se presenta al decimotercer apóstol que tiene la misión de hacer triunfar en la tierra el reino de Cristo, tras recuperar Bizancio el orden violentado en Rávena tras la victoria de Narsés sobre los ostrogodos. Acaso con este fin se celebre el acto litúrgico sacral conforme a un calculado efecto que invoca el poder imperial, plasmando una idea que era casi un principio moral: el carácter divino del soberano que dispensa al mundo la gracia divina.”

El programa iconográfico

En el arte bizantino los nuevos tipos iconográficos, basados en el mosaico, se adaptaban simbólicamente, según una Hermeneia ó programa prefijado, a las diferentes partes del templo: la cúpula, las pechinas, el ábside, y los muros de las naves.

Este nuevo programa iconográfico poseía algunas características generales como el simbolismo, ya que permitía estar al servicio de una doble función política y religiosa, ya que, solo importaba su valor como escritura, como narración, como símbolo, por ello todos sus elementos se sujetaban a este carácter funcional y simbólico, que permitiría el desarrollo de un nuevo y largo código de significados.

La abstracción fue la primera consecuencia de este nuevo programa, las figuras se hacían más abstractas, perdiendo toda referencia naturalista. Sólo excepcionalmente, o al final del periodo, hubo casos de cierto naturalismo que se asociaron a la influencia de Giotto. Así mismo el color se prefirió al dibujo, porque la intensidad y viveza del primero haría desaparecer al segundo, también se prefirió el mosaico al fresco, ya que daba resultados más apagados.

La luz fue otro elemento usado, ya que participaba en el modelado de las figuras, era una luz abstracta, no ambiental, que no procedía de un foco identificable, el brillo de los mosaicos contribuyó a este efecto.

La perspectiva no se usaba aún, ya que la pintura era plana y sin perspectiva, las figuras estaban en un mismo plano; la carencia de perspectiva impedía las relaciones proporcionadas, porque una persona podía ser tan alta como un árbol, y una ciudad representarse como una maqueta. El tamaño tenía un carácter simbólico que indicaba jerarquía.

En el espacio, la pintura tendía a llenar todo el espacio. Las figuras ocupaban toda la altura y anchura, y acomodaban su forma a la arquitectónica, con resultados rectos y curvos; el paisaje, no existía generalmente era una línea verde, o con plantas y flores, frente al dorado celestial que envolvía a las figuras, caracterizadas por la inexpresividad o hieratismo, y los rostros repetían tipos estereotipados, sin expresión sicológica alguna.

Los modelos más usados fueron Cristo y la virgen

  • La Teotokos representaba a la Virgen entronizada, madre de Dios, con el niño, el cual tiene en sus manos el rollo de la ley.

  • La Deesis era la imagen Cristo entre la Virgen y San Juan

  • El Pantócrator era el que todo lo gobierna, Cristo en su magnitud con los evangelios en una mano, y la otra adoctrinando con dos dedos. En esta imagen Cristo está escuchando la plegaria de la Virgen y San Juan y lleva en la mano el rollo de la ley con el que bendice.

  • Cosmócrator: Cristo sobre la bola del mundo, entre ángeles que ofrecen la corona de la gloria eterna a San Vital.

  • El Tetramorfo era la representación de los cuatro Evangelistas y sus símbolos

Las representaciones de la virgen bizantina, las encontramos tanto en muros y techos, como en objetos de devoción particular o Iconos:

  • La Blochernitissa era la virgen con el manto sobre la cabeza y los brazos extendidos hacia arriba, indicando su misión de intercesora y suplicante.

  • La Hodigitria era la virgen sola y de pié, como conductora de almas, tiene uno de los pies adelantado en actitud de empezar a caminar.

  • La Kiriotissa era la virgen representada como un trono de sabiduría y Jesús niño sentado en sus piernas, la virgen lo señala como camino de salvación.

  • La Glicofilusa era la virgen acariciando a Jesús niño o dándole un regalo.

  • La Galactotrofusa: era la virgen amamantando a Jesús niño, llamada la virgen de la leche

  • La Hagia Theotikos era la virgen con la cabeza cubierta, también se la representa sentada con el Niño, respondiendo así a la iconografía que se consolidó en el Concilio de Éfeso, donde se definió la maternidad de la Virgen. En este tipo se admite una relación de madre e hijo, conteniendo un componente más humano.

  • La Rioriotissa era la virgen como el trono de Dios. Lleva sobre sus faldas al Niño. Este modelo se difunde en el románico, actuando como sede de la sabiduría.

  • La Blaquernitisa era la virgen orante, que suplica con las manos hacia el cielo. Deriva de modelos paleocristianos de las catacumbas.

  • La Odegetria era la virgen que suele ir descalza y aparece de pie como conductora de Cristo; a veces, también, puede llevar la ley en la mano.

Otros temas narraban la vida de santos y representaban las fiestas litúrgicas del año. Se dividían en cuatro grupos:

  • Naturaleza humana de Cristo: la Anunciación, Nacimiento y Presentación en el Templo.

  • Naturaleza divina: Bautismo, Transfiguración (Cristo resplandeciente aparece ante los apóstoles) y la Resurrección de Lázaro.

  • La Pasión: Entrada triunfal a Jerusalén, Crucifixión y Resurrección.

  • Vida gloriosa de Cristo y la Virgen: Ascensión, Pentecostés y Asunción.

  • La crisis Iconoclasta

    Desde la muerte de Justiniano, en el año 567, hasta la subida al poder de Basilio I, que marca el inicio de la dinastía macedónica, fueron tres siglos que estuvieron marcados por una serie de crisis sociales, políticas y religiosas; aunque en realidad el período iconoclasta abarcaría sólo el último siglo y medio.

    Aproximadamente en el 726 se inició la querella iconoclasta por la controversia por el culto a las imágenes que centró toda la vida bizantina. El problema iconoclasta fue de graves consecuencias. En Siria hubo un progresivo rechazo contra el culto a las imágenes, muy influidos por judíos, musulmanes y monofisitas.

    León III aprovechó el tema de las imágenes para prohibir el culto a las imágenes y reafirmar el poder imperial sobre la Iglesia, y sobre todo para dar un golpe a los monasterios, que se habían convertido en importantes latifundios agrícolas, exentos de impuestos y abarrotados de hombres que no querían hacer el servicio militar. Así, quitando el culto a las imágenes cortaba una importante fuente de ingresos de los monasterios. León III creía que Dios había favorecido a los musulmanes porque no hacían imágenes, mientras que ellos habían caído en la idolatría.

    León III comenzó poco a poco su persecución a los iconodulos. En el año 726 mandó destruir el mosaico de la puerta Chalke, que el emperador Mauricio había encargado en este mosaico se veía a Cristo santificando al emperador, y ordeno sustituirlo por una cruz, lo que provocó una sangrienta rebelión encabezada por mujeres. En el 730 se publicó un edicto prohibiendo la representación de las imágenes sagradas y ordenando la destrucción las existentes. El patriarca de Constantinopla se opuso a esto y fue depuesto por Anastasio, nombrado por el emperador. El papa excomulga al emperador y a todos los iconoclastas provocando la ruptura entre el Imperio y el Papado.

    El edicto consiguió que no se hicieran nuevas imágenes, pero no se emprendió una masiva destrucción. Cuando llega su hijo Constantino V se vió obligado a emprender acciones militares contra árabes y búlgaros.

    En el año 754 comienza el VII Concilio Ecuménico, al que no acuden los representantes papales, ni los de Antioquia, Alejandría y Jerusalén. En este concilio se prohibió la reproducción de las imágenes y se ordenó la destrucción de las que ya existen. Se emprendió una persecución violenta: todas las imágenes religiosas de Constantinopla se destruyeron; aunque en las zonas más alejadas no se produjo una destrucción tan sistemática.

    A la muerte de Constantino V, las persecuciones se fueron moderando con su hijo León IV. Cuando éste murió, su hijo era muy pequeño y quedó como regente Irene, que se manifestó a favor de las imágenes y convocó el auténtico VII Concilio Ecuménico en Nicea, donde se restituyó el culto a las imágenes. Pero Irene se enfrentó a una grave crisis económica y militar. Además, esto coincidió con la coronación de Carlomagno como emperador romano en el año 800.

    Se produjo entonces un golpe de estado, que trajo consigo veinte años de anarquía; hasta que se impuso el general León V el Armenio, que se mostró contrario a las imágenes reimplantación de la iconoclastia, aunque sin grandes persecuciones. En el año 843 se convocó un concilio en el que definitivamente volvió el culto a las imágenes. Teodora fue apartada del trono por su hijo Miguel III, que entrega el poder a su tío Bardas, responsable de un gran renacimiento cultural.

    CAPITULO V

    EL ARTE PRERROMÁNICO EN ESPAÑA

    El Arte Prerrománico, fue una “expresión genérica que designó cualquier manifestación artística que precedía temporalmente al arte románico y que es posterior al periodo clásico romano”, este estilo tuvo gran autonomía de formas y soluciones novedosas ligadas al Arte Bizantino. Su mayor desarrollo se dio en España, donde su peculiar y sorprendente trayectoria dejó para la historia un arte magnífico conocido como Arte Prerrománico Español, el cual se inició en una época que comenzó con la caída del Imperio Romano y culminó con la llegada de la época románica; este estilo se dividió en dos períodos el Visigodo, y el Carolingio

    PERÍODOVISIGODO

    Los Visigodos, pueblo bárbaro de origen germánico, emigraron masivamente en el siglo III D.C., logrando establecerse en la Dacia, un país de la Europa antigua que se ubicaba junto al Mar Negro. “Tras permanecer unos años como feudatarios de Roma, se dirigieron hacia el oeste llegando a Galia, actual Francia, en el año 412. Mediante un pacto con Roma se asentaron en la provincia de la Aquítania, fundando allí el reino de Tolosa”. Desde allí, como tropas federadas de Roma, irrumpieron sucesivamente en territorio hispano para luchar contra “Vándalos, Suevos y Alanos”; estas esporádicas incursiones les permitieron apoderarse de plazas estratégicas y controlar las principales calzadas. “En el año 475, su rey Eurico se declaró independiente del Imperio Romano y, ampliando sus territorios, se extendió por Hispania. Su hijo y sucesor, Alarico II, gobernó ya sobre toda la Península Ibérica conformando un gran estado que incluía las tierras comprendidas entre el sur del Loira y el sur peninsular”. Tras ser derrotados por los Francos, los Visigodos fueron expulsados del territorio Galo, asentándose definitivamente en Hispania y  fijando como capital la ciudad de Toledo. “Éste es el punto de arranque de la Monarquía Visigoda como una entidad política de dominio peninsular cuyo reino llegó a ser el más poderoso de toda la Europa Occidental. Los Godos asimilaron importantes aspectos de la tradición clásica romana en cuanto a organización, derecho, pensamiento, y costumbres; este hecho, suavizó enormemente el tránsito entre la Hispania Romana y el Reino Visigodo, al favorecer una continuidad cultural y artística entre ambos. En lo único que no hubo asimilación fue a nivel religioso. Los visigodos profesaban el Arrianismo y los españoles el Cristianismo; estos problemas se solucionan a raíz de la conversión de Recaredo a la fé católica y  del III Concilio de Toledo celebrado en el 589, logrando la integración de los dos elementos que se consolidará, unificándose y dando forma al arte visigodo más prototípico”.

    Las manifestaciones artísticas de este pueblo, en especial las de carácter arquitectónico, no se producen plenamente hasta entrado el siglo VII, ya que “corresponden a dos tradiciones diferentes, una de tipo cristiano primitivo y otra hispano-visigodo, por lo que su arte fue unificando ambos componentes hasta llegar a tener un estilo propio, con personalidad definida que en la arquitectura se identifica por el uso del arco de herradura y una escultura algo tosca”.

    Este estilo representó una gran línea de fusión de elementos de distintas culturas, donde el elemento dominante fue el romano, ya que, los Visigodos, al constituirse en reino independiente en Hispania, llevaban más de un siglo de contacto intenso con Roma, y se hallaban profundamente romanizados; por lo que, conocían y respetaban el Arte Romano e incorporaron los elementos bizantinos, por la presencia de estos en la hispania bizantina, y norteafricanos, por el estrecho contacto comercial.

    Las Artes Menores

    Las Artes Suntuarias, conocidas como artes menores, siempre han sido consideradas menos relevantes por permanecer siempre a la sombra de la arquitectura, escultura y pintura, las llamadas artes mayores.

    Dentro de las artes menores se encuentran la cerámica, la platería, y la orfebrería. La orfebrería es “un arte esencialmente decorativo que utiliza el oro y otros metales preciosos como plata, platino y sus aleaciones, a menudo acompañados de esmaltes y piedras duras, preciosas y semipreciosas, para realizar joyas personales u objetos de uso sacro o profano”. Por sus características de maleabilidad que le permitía ser martilleado, grabado y modelado; además de su gran valor, desde el principio, el oro fue el metal más utilizado por los orfebres.

    La elaboración de la orfebrería medieval se basaba en la unión de diferentes materiales aplicados a las planchas de metal de base, la técnica más común era la filigrana una técnica realizada a base de hilo de oro reducido a finísimas hebras que se entretejen hasta formar un diseño, que se soldaba a la lámina de base; en cuanto a la pedrería se usaba la técnica del incrustado de gemas más o menos irregulares brillantes y de colores como la almandina ó granate, el cristal de roca, y la ágata que presentaban cabujonas ó pulidas y chatotas ó talladas; estas piedras se engastaban ó incrustan dentro de una pequeña pieza redonda soldada a la lámina base en la que se remachaban los bordes, o se engarzaban, también se usan comúnmente perlas irregulares llamadas aljófares; para lo cual aprovechaban entalles y camafeos antiguos. Otra Técnica muy usada en la orfebrería medieval es la de los esmaltes ó vidrios coloreados con compuestos de sílice y óxidos metálicos como colorantes. Estos esmaltes se realizaban con la técnica del Tabicado Bizantino ó Cloisonné, la cual es una técnica de verter vidrio fundido en alvéolos delimitados por hilos de metal, que se llenaban con polvos fundiéndolos en el horno y puliéndose luego la superficie, esto se hacia sobre una base de oro o plata y muy raramente cobre.

    En el Arte Visigodo se crearon inmensas cantidades de obras de arte basadas en la orfebrería y los esmaltes, como consecuencia del auge de la construcción de catedrales, iglesias y monasterios, dotándolos de tesoros elaborados en oro, como símbolo de riqueza y prestigio, pretendiendo con ello ganar la salvación eterna, ya que el brillo del oro era interpretado como reflejo de la luz divina; la mayor parte de estas donaciones se centraban en objetos religiosos, como frontales de altar, arcas, relicarios y material litúrgico: cruces, cálices, copones, etc., los objetos y productos de orfebrería, con o sin esmalte, que se realizaban eran muy diversos: arquetas-relicario, imágenes-relicario, palomas eucarísticas, báculos, cálices y copones, cruces, incensarios, etc.

    Las joyas más importantes del arte visigodo van a ser los tesoros de Guarrazar y de Torredonjimeno, compuestos por coronas y cruces votivas que los reyes visigodos españoles ofrecieron en su día a la Iglesia Cristiana, así mismo también se encuentran las llamadas Cruz De La Victoria, La Cruz De Los Ángeles y la Arqueta Relicario De San Genadio.

    El tesoro de Guarrazar, fue hallado entre los años 1853 y 1861 en el yacimiento arqueológico de la llamada huerta de Guarrazar, situada en la localidad toledana de Guadamur, muy cerca de Toledo. Entre todas las piezas halladas, las más valiosas son las coronas votivas de los reyes visigodos Recesvinto y Suintila. Ambas de oro, engastadas con zafiros, perlas y otras piedras preciosas. Hay también otras coronas más pobres y más pequeñas, cruces votivas, y había hasta cinturones; en estas obras se empleó la técnica de incrustado que fue la más usada por los pueblos bárbaros. Las letras de las coronas estaban ejecutadas con alvéolos de oro donde se han incrustado granates tallados en el hueco. Los adornos repujados de las aspas de las cruces eran de tipo germánico, pero la forma de las coronas era totalmente bizantina.

    El tesoro de Torredonjimeno es un hallazgo más reciente y fortuito, realizado en 1926, es el segundo tesoro visigodo más importante después del descubierto en Guarrazar. Se trataba de un conjunto de objetos que debieron formar parte de un tesoro eclesiástico ofrecido a las santas mártires de Sevilla Justa y Rufina. Tras ser vendido en el mercado de antigüedades quedo finalmente disperso y en gran parte desaparecido. Se cree que este tesoro poseía coronas, cruces repujadas y con cabujones, cadenas y colgantes de oro.

    La Corona Votiva De Recesvinto

    La corona votiva era uno de los principales objetos dados en ofrenda de carácter permanente que hacían los reyes a las iglesias para honrar a Dios. Consistían en grandes cercos de metal precioso, cuajados de pedrería y adornados con pendientes de vidrio, metal, perlas, etc. que después de haber servido para la coronación de un rey, eran ofrecidas para ser suspendidas sobre el altar, debajo del baldaquino o palio que cubría el altar de algunas iglesias, expresando casi siempre alguna inscripción latina con el nombre del oferente. Del centro de la corona pendía de ordinario una cruz votiva que podía servir a la vez para cruz de altar.

    La Corona Votiva De Recesvinto, consta de dos medias circunferencias de doble chapa de oro unidas entre sí por una bisagra y un pasador. En ella hay incrustaciones de piedras preciosas como zafiros, granates, almandinas y perlas; esta grabada en su exterior con hojas de laurel adornadas con granates; posee colgando unas cadenas con eslabones en forma de corazón; de las que penden unas letras en oro que forman el nombre del donante. A su vez esas letras terminan en unos colgantes adornados de esmeraldas, zafiros y perlas.

    Cruz de los Ángeles

    Una de las obras maestras de la orfebrería visigoda es la Cruz de los Ángeles, donada por Alfonso II el Casto a la catedral de Oviedo y realizada, según su inscripción, en el año 808, probablemente para su uso como relicario. Hoy se encuentra en la Cámara Santa de la citada catedral y es el símbolo de la ciudad.

    La tradición legendaria de esta cruz habla de que unos peregrinos, que resultaron ser ángeles, crearon esta obra. Desde luego así debió parecer en su época ya que esta obra no tiene comparación con cualquier obra de orfebrería realizada en España hasta la fecha.

    Se trata de una cruz griega de madera de cerezo unida por un medallón central, recubierta de láminas de oro fijadas mediante clavos también de oro. Su hermosa decoración es a base filigrana áurea y piedras preciosas y semipreciosas pulidas y engastadas en gemas como zafiros, amatistas, rubíes, ágatas y ópalos, además de perlas y piezas de origen romano.

    En el anverso destaca la labor de filigrana, que ocupa densamente toda la superficie, creando figuras de forma romboide en el medallón central y el arranque de dos de los brazos con entalles romanos.

    En el reverso lo más reseñable es la inscripción conmemorativa y el medallón con un camafeo romano rodeado por dos filas de perlas. El citado camafeo representa a una joven campesina tallada en ágata.

    Cruz de la Victoria

    Otra de las obras cumbre de la orfebrería visigoda es la Cruz de la Victoria, según la leyenda “se trata de la cruz que Pelayo enarboló en la Batalla de Covadonga contra el Islam”, fue realizada en el año 908 y donada por Alfonso III el Magno y su esposa Gimena a la catedral de San Salvador. Se encuentra en la Cámara Santa de la Catedral de Oviedo. Es el símbolo de Asturias, en 1977 fue robada, y recuperada totalmente deteriorada, por lo que fue restaurada posteriormente. Se trata de una cruz procesional, de estructura similar a la cruz de los ángeles.

    Se trata de una cruz latina, con un alma es decir un trozo de madera que se mete en el hueco de algunas piezas de poca consistencia para darles fuerza y solidez; “esta hecha en madera de roble revestida de oro, piedras preciosas y esmaltes con un medallón central y brazos que se ensanchan ligeramente hacia sus extremos, con un remate trilobulado de madera de roble recubierta de oro y piedras preciosas. Tiene los brazos ensanchados en sus extremos, en el enlace o centro de unión posee una cajita relicario. En su anverso destacaba un medallón de cristal de roca, hoy sustituido por una amatista de color oscuro”.

    Igualmente posee placas esmaltadas en forma cuadrangular en los brazos, así mismo presenta una gran colección de gemas pulidas ó cabujones. En su entorno se disponen ocho paneles de esmaltes y rodeando el conjunto ocho cabujones desaparecidos. La corona circular alterna cabujones con placas esmaltadas de diversa policromía, las cuales conservan las figuras de un cuadrúpedo, un ave y un pez.

    El reverso de la Cruz recoge la inscripción de donación de Alfonso III y su esposa Jimena en 908 y en la que se recoge el texto que resalta el signo de protección en que se ha convertido la Cruz: “Con este signo se protege al piadoso. Con este signo se vence al enemigo”.

    Arqueta Relicario de San Genadio

    Se trata de una arqueta-relicario que Alfonso III el Magno regaló a san Genadio, obispo de Astorga entre los siglos IX y X.

    Se trata de una arqueta ó arcón de madera, revestida por cinco planchas de plata repujada y sobredorada, con forma de prisma rectangular que se abre por la mitad. Sus partes frontales están decoradas en una división en dos paneles con arcos de medio punto rebajados, con vidrios azules, verdes y rojos engastados en cabujones. En el panel inferior se observan ángeles dispuestos de frente y de perfil con el brazo extendido en gesto de oración; en el superior se representan árboles simétricos, con notoria influencia bizantina. El remate frontal de la tapa muestra el Cordero Místico, con la cruz entre las patas, y una inscripción con los nombres del rey donante: Alfonso. En el paño frontal, con enormes alas, el toro y el águila, símbolos de los evangelistas Lucas y Juan. Falta la plancha posterior, que llevaría a los otros dos Mateo y Marcos. El resto de la riquísima y variada iconografía son catorce plantas muy estilizadas, al modo bizantino, en la arquería superior, y catorce figuras humanas con alas desplegadas y el brazo derecho levantado y la mano extendida en gesto de oración.

    Arquitectura Visigoda

    La intensa actividad arquitectónica de los siglos V, VI, y VII, se caracteriza por la construcción de las primeras catedrales, por una marcada continuidad de lo romano, pero sobre todo por la aparición del monacato benedictino y la regla de Benito de Nursia desde el VI, que determina la distribución de los monasterios posteriores..

    Las características fundamentales que identifican la arquitectura visigoda son los dos tipos de planta: la basilical latina y la de cruz griega con una clara inspiración bizantina. La planta de cruz latina puede ser de nave única o de tres naves, con abovedamientos que suelen ser de medio cañón, arista o cúpulas en los cruceros, posee un ábside con forma de herradura en el interior y rectos al exterior con predominio del abovedamiento, así mismo los Visigodos aportan en la arquitectura elementos como el sillarejo, la mampostería, el ladrillo, el arco de herradura y la bóveda de cañón; lo que ocasiona la anchura de los muros y la escasez de vanos, por lo que la iluminación de los interiores se resuelve mediante la creación de pequeñas ventanas o saeteras para iluminar sobre todo el presbiterio, los arcos suelen ser pequeños ya que el abóvedamiento de las naves obliga a que los muros tengan que ser gruesos y no haya arcos de gran tamaño, por ello el uso del arco de herradura con doble dovela como clave y con el trasdós que cae recto a partir de la circunferencia. El soporte usado es la columna y el pilar. Los capiteles pueden ser de orden corintio ó de pirámide invertida, se hace común la peculiar ordenación en espina de pescado, por su semejanza con el esqueleto de un pez.

    Así mismo los materiales de construcción son reutilizados y corresponden a edificios y villas romanas en estado de abandono, también se reaprovechan los sillares ó grandes bloques perfectamente cortados y escuadrados, colocados sin unión por argamasa, las columnas, y los capiteles de estilo corintio, de la época romana. A estos elementos hay que unir los propios creados por los visigodos a imitación de lo reaprovechado, pero muchas veces elaborados de una manera más tosca e irregular.

    Iglesia de San Juan de los Baños (Palencia)

    Esta iglesia fue mandada a construir por Recesvinto en la ciudad de Balneos, actual localidad de Baños de Cerrato, en la provincia de Palencia, España; un lugar que servia como villa de esparcimiento romano.

    Dice la leyenda de esta iglesia que “Recesvinto, venía de una batalla y al pasar por este pueblecillo se detuvo a descansar, pues se encontraba enfermo de una afección renal. Durante este reposo bebió el agua de un manantial existente en ese lugar y al recuperar rápidamente su salud se lo atribuyó a un hecho milagroso. Como gratitud decidió erigir en aquel lugar el templo que hoy vemos dedicado a San Juan Bautista." Es la iglesia más original y española de todo el arte visigodo que persiste, ya que, “representa la conjunción entre dos tendencias características de la época alto medieval. De un lado, destaca la continuidad de la planta basilical de origen paleocristiano, con ábsides rectangulares tripartitos, representativa de la influencia oriental y africana; y del otro recoge la corriente visigoda que tiende a la ruptura de la planta basilical con el empleo de arcos de herradura, cabeceras simples y otros recursos arquitectónicos”. Tiene además un “acta de nacimiento original, escrita en piedra y perpetuada sobre el arco triunfal del edificio, con una torpe escritura toda en mayúsculas, que dice así: Precursor del señor, Mártir, Bautista Juan, posee en eterno don esta basílica para ti construida; la cual devoto yo, Recesvinto Rey, yo mismo amador de tu nombre, te he dedicado, erigiéndola y dotándola a expensas mías y dentro del territorio de mi propia heredad en la era 699, año décimo tercero de mi glorioso correinato”.

    Es una iglesia construida sobre un antiguo templo romano, posee planta basilical que poseía un equilibrado ordenamiento del cuerpo, que se hallaba dividido en tres naves y tres ábsides divididos mediante arcos de herradura que caen sobre grandes columnas de capiteles que imitan lo corintio.

    La puerta exterior posee arco de herradura algo sobrepasado, ya que, el trasdós de las dovelas no sigue paralelo al intradós y su espesor es irregular. En su interior se podían ver los arcos de herradura sobre columnas de mármol reutilizadas, de color gris, beige y rosa, con los capiteles ocre y amarillo pastel, que contrastaban junto a los sillares de los muros de piedra caliza dura de color beige pálido. De todos los capiteles sólo uno era auténtico corintio romano, el resto eran imitaciones que se hicieron en época visigoda. En la clave del arco triunfal se contemplaba otra cruz y encima, una lápida de mármol, con la dedicatoria de Recesvinto sujetada por 4 modillones o repisas con cruces estilizadas, conchas y águilas.

    Esta Iglesia ha sufrido algunas reconstrucciones parciales incluso en la planta original; la cual se ensanchó a la altura del cuarto y último arco en una especie de crucero o transepto que se abría sobre una triple cabecera formada por tres capillas rectangulares y no continuas, así mismo desaparecieron los ábsides laterales y la planta quedó convertida en un simple rectángulo con la cabecera desfigurada. Aún así es de una gran belleza con su equilibrio de sencilla estructura y su discreto decorado

    De esta Iglesia lo que se conserva actualmente, es una sala amplia, dividida en tres naves por dos filas de columnas, cuyos muros exteriores se abren hacia la cabecera en la que hay tres capillas, la visigoda y dos laterales góticas; a la entrada se dispone un pórtico, del ancho de la nave central, con arco de herradura en la fachada; las columnas son romanas, al igual que algunos de los capiteles; hay también capiteles visigodos originales y otros que imitan a los romanos. La entrada a la capilla mayor se hace a través de un arco toral apoyado en pilares lisos con impostas levemente inclinadas hacia dentro; los muros de la capilla tienen la misma anchura que el arco toral, de forma que la bóveda y el arco tienen unido el dovelaje. De todo lo visible, único realmente visigodo es la parte central en la que se suceden el pórtico, la nave sobre columnas y la capilla, mientras que todos los restantes muros externos corresponderían a obras posteriores y la espadaña ó campanario que se observa al exterior es un añadido de los restauradores del siglo XIX.

    Iglesia Santa Comba de Bande (Orense)

    Situada a las orillas del río Limia en Orense, esta iglesia se erigió en el S VII en honor de sancte colombe virginis et martiris, es la iglesia visigoda mejor conservada.

    La construcción es más tosca que la de San Juan de los Baños, es el prototipo de iglesia cruciforme visigoda. Tiene planta de cruz griega a la que se le añade por el este un ábside de testero recto y al oeste un pórtico avanzado, el ábside rectangular saliente, y su perímetro rectangular del que sobresale por la cabecera del rectángulo la capilla mayor y por los pies, el pórtico, el perímetro rectangular queda dibujado por estancias a ambos lados del pórtico que comunicaban con este, otras con el transepto y las de la cabecera con la nave.

    El esquema de composición de Santa Comba de Bande es muy sencillo; sobre una planta de cruz griega inscrita en un cuadrado se dispone una bóveda de aristas sobre un cimborrio sostenido en cuatro arcos de herradura con el dovelaje contenido en los muros, de forma que, en la parte inferior, los bordes de los arcos coinciden en una arista común sobre los ángulos interiores de las naves y forman un plano circular de cuatro metros de diámetro. De este cuerpo central parten los cuatro tramos de naves de las que la oriental se abre por un arco de herradura sobre columnas pareadas a la capilla mayor; cuya cabecera es cuadrada, de cuatro metros de ancho; en la parte de los pies hay una puerta bastante ancha; ante esta puerta hay un pórtico, que se haya apoyado en una sillería similar a la del resto del edificio. La planta se completa con cuatro habitaciones, una a cada lado del cimborrio, y otras dos a los lados del pórtico. La disposición de las bóvedas resulta bastante elemental, con cuatro cañones perpendiculares al cimborrio, que dan firmeza a los cuatro arcos principales. La ligereza de las bóvedas, hechas de ladrillo, hizo innecesario un abovedamiento complementario en las habitaciones de los ángulos, que debieron tener techumbres de madera. Hay, además, una bóveda de cañón en la capilla mayor, de poca altura, sobre la que existía una cámara accesible desde la iglesia por una ventana situada sobre el arco toral.

    Iglesia San Pedro de la Nave (Zamora)

    Se encuentra situada en la localidad de San Pedro de la Nave-Almendra, en la provincia de Zamora, España. Esta iglesia se remonta a finales del siglo VII, ya que fue construida entre los años 680 y 711, es decir, en los años previos a la invasión musulmana. Fue declarada Monumento Nacional el 22 de abril de 1912. “originariamente tuvo su emplazamiento a orillas del río Esla, pero cuando se construyó el pantano de Ricobayo, se decidió su traslado piedra a piedra a su actual ubicación, Esta operación se llevó a cabo entre los años 1930 y 1932 bajo la dirección del arquitecto Alejandro Ferrant.”

    Este templo al exterior se muestra armonioso ya que su restauración tras el traslado procuró primar lo visigodo sobre lo posterior. Así de lo actual es todo de época visigoda a excepción de la fachada oeste y parte de las arcadas de la nave que corresponden a las épocas Románica y Gótica.

    Su primera traza respondió a una planta de cruz griega, a la que luego se le anexionaron dos naves laterales que le daban un aspecto híbrido por la unión de una planta basilical y una cruciforme, lo que viene a componer una planta rectangular de la que sobresalen tres capillas, la capilla mayor o ábside que forma una habitación independiente unida al cuerpo principal, y los pórticos de la cara norte y sur. Estos tres cuerpos salientes corresponden a los ejes principales de las naves internas que forman un crucero cuyo espacio central no coincide con el centro geométrico de la cruz griega. Las tres naves están separadas por arcos apoyados en pilares. Los pórticos sobresalen del rectángulo principal y se disponen en los extremos del eje menor del crucero

    La iglesia fue edificada completamente en sillería, perfectamente cuadrada y ajustada, unidas a un mismo nivel con trozos de madera, que aparecieron al desmontarse la iglesia; esta cubierta en su totalidad con bóvedas de cañón originales en los cubículos, el ábside, y parcialmente en el presbiterio, aunque desaparecieron en los demás lugares originando un derrumbe posterior de la parte de oeste.

    Los arcos en la iglesia tienen su mayoría una prolongación de un tercio del radio aunque los de las ventanas, al exterior, los arquillos, y los vanos de acceso no lo presenten. En parte porque en los pórticos, en su interior, el arco albergaba un dintel de madera desaparecido que cargaba con el material entre él y el arco.

    Las cubiertas son abovedadas en medio cañón, las del cabecero y las de los recintos laterales se conservan en su original estructura pétrea, las de los tramos occidentales de las naves son de ladrillo volteado sobre los primitivos arranques de sillería. Los arcos son de herradura al modo visigótico. De ellos, los dos torales perpendiculares al eje de la nave principal quedan más resaltados que los paramentos y se apoyan parcialmente en columnas adosadas a los pilares.

    La Escultura Visigótica

    Frente al gran desarrollo de la arquitectura visigoda, la escultura tuvo un desarrollo bastante modesto, reduciéndose en la mayoría de los casos a pequeños relieves decorativos más o menos abstractos, así mismo “se caracteriza por la ausencia de la escultura exenta ó de bulto redondo, que desaparece en favor de un relieve casi plano ó bajo relieve, en dos dimensiones, realizados con la técnica del Bisel”. La figura humana, las representaciones animalísticas y vegetales se completan siempre con incisiones que además de definir sus rasgos, obtienen resultados destacados de claroscuro. Estos relieves se dan exclusivamente de manera arquitectónica, ya que se encuentran grabados en los sillares, formando parte de capiteles y en las líneas de imposta.

    La representación de la figura humana sufrió una importante transformación en el que la figura “no solo perdió el volumen, si no que se hizo mucho más tosca y lineal, aunque muchas veces desaparece, en favor de los temas decorativos como los heredados del mundo clásico y otros procedentes de las tradiciones orientales; se observan así espirales, hojas de vid, racimos de uva, etc”. En ciertas obras, la decoración aparece formando composiciones más o menos amplias.

    Los temas usados en los capiteles historiados, llamados así por contener la representación de escenas bíblicas, son sacados del Antiguo Testamento y del Nuevo Testamento. Especialmente del primero, mientras que del segundo se recogen algunas escenas concretas de la vida de Cristo que se completan generalmente con la representación del Tetramorfo; los capiteles más conocidos están en San Pedro de la Nave; también los hay en Santa María de Quintanilla de las Viñas.

    Por medio de estos relieves con escenas cuidadosamente seleccionadas, “se instruye y alecciona al fiel presente en las ceremonias del templo. Los temas escogidos hacen referencia a Abraham, recomendando obedecer a Dios y a la iglesia en toda circunstancia, sean cuales sean sus designios, y, mediante la alusión a Daniel, se le alienta a los fieles a recurrir a la oración para solicitar la ayuda divina. Así mismo se les recuerda a los fieles, el modelo de vida y el ejemplo de salvación de los cuatro apóstoles: San Pedro, San Pablo, Santo Tomás y San Felipe, estrechamente vinculados con Cristo y, finalmente, se alude simbólicamente al valor redentor de la Eucaristía”.

    Iglesia de San Pedro de la Nave

    Los capiteles de San Pedro de la Nave representan una perfecta simbiosis entre el papel ornamental y el discurso dogmático y pedagógico, dedicado a la instrucción del pueblo ignorante, a través de un lenguaje que se corresponde con las importantes tradiciones artísticas del mundo visigodo y del clásico romano que se encontraron al llegar a la península ibérica.

    Los primeros capiteles se encuentran en la iglesia de San Pedro de la nave, se ubican sobre las columnas colocadas delante del ábside. Se trata de dos capiteles tronco piramidales decorados, en donde aparece en el reverso, una de las primeras imágenes de los tetramorfos, y en la parte principal se representa el tema de Daniel en el foso de los leones, es la historia de Daniel, un anciano de más o menos de 90 años de edad, que al ser echado en el foso de los leones, cayó en las mismas manos de Dios viviente; también están representados los apóstoles San Tomás y San Felipe, profundizando así en el tema de la salvación a través de la importancia del bautismo.

    En otro capitel, se representa una escena bíblica muy conocida en la que Dios le pide a Abraham que sacrifique y ofrezca en inmolación a su único hijo Isaac, esta escena es llamada el Sacrificio de Abraham; también se hallan representados los apóstoles San Pedro y San Pablo, estos dos temas centrales se van a completar con temas vegetales como hojas de vid y racimos de uva, haciendo una clara alusión al sacramento de la eucaristía.

    Iglesia Santa María de Quintanilla de las Viñas.

    Los sillares con los que esta construida esta iglesia, aparecen con una serie de líneas de piedras decoradas con un relieve bastante plano en el que se sintetizan las influencias clásicas, autóctonas y orientales de la escultura visigoda, estas piedras están realizadas en caliza y fueron realizadas por varios artistas al mismo tiempo.

    Estas piedras son triples en la cabecera y dobles en las naves del crucero; en las que están en la cabecera, la parte inferior muestra una gran soltura, agilidad y movilidad, e iconográficamente desarrolla temas tomados del arte clásico, predominando las uvas, la palma y la hoja de vid. La parte del medio resulta de mayor grandeza, predominan en ella los motivos orientales y figuras con forma o apariencia de animal, apareciendo imágenes de pavos, gallinas, faisanes, etc. En esta misma línea encontramos también círculos con estrellas con seis puntas. La tercera línea, que sólo aparece en la parte alta de la cabecera, muestra las representaciones animalísticas, también se conservan algunas muestras interesantes en donde aparecen motivos muy similares los que se desarrollan en las otras líneas de sillares, así mismo destacan los dos cuerpos sobre los que apoya el arco de la capilla mayor en las que se observan un círculo sostenido por ángeles en cuyo interior aparece una figura humana coronada por grupos de rayos y con la palabra sol encima. Enfrente de este hay otro círculo con una figura femenina y la palabra luna, dando así “la idea fundamental según la cual el arco es la bóveda del universo y esas dos representaciones aluden a la inmortalidad de Dios”. A lo largo de la iglesia aparecen otras representaciones de Cristo, la Virgen, etc. Se trata de relieves de un marcado hieratismo en el tratamiento de los cabellos, gestos y plegados, con una ausencia casi absoluta de naturalidad y con importantes defectos de proporción.

    En la decoración de los capiteles de Quintanilla de las Viñas, se han observado dos grupos diferentes; el primero de ellos elaborado por el llamado Maestro de San Pedro de la Nave, a él se deben los cuatro capiteles del cimborrio, sus basas e impostas, además de la talla de un friso sobre el que se montan las bóvedas de la nave central y los pequeños frisos encima de las ventanas de la misma nave. El segundo grupo es mucho mas tosco, a él corresponden los capiteles del arco triunfal, sus impostas y los amplios frisos ornamentales que, arrancando de ellas, corren a lo largo de la mitad de las paredes del templo en la cabecera y en la nave central.

    El maestro de San Pedro de la Nave, decoró los cuatro capiteles del crucero, con diversas escenas bíblicas, una de ellas representa a Daniel en el foso de los leones, que se halla vestido con túnica corta, y levanta las manos a la manera del orante paleocristiano, y a su lado dos leones simétricos que beben agua del fondo de la fosa. En las caras menores del capitel, los apóstoles San Felipe y Santo Tomás, con sus atributos distintivos.

    Enfrente de esta columna, en el lado derecho de la nave central, otro capitel representa el Sacrificio de Abraham, en el momento de sacrificar a su hijo Isaac, pero la mano de Dios lo detiene, señalándole la cabra para el sacrificio que atada espera. En las caras menores del capitel, los apóstoles San Pedro y San Pablo. En la parte superior de los capiteles se ven grandes impostas de frisos con pavos reales y perdices entre zarcillos, algunas veces con trifolios.

    La otra pareja de capiteles del crucero, los situados más cerca de la cabecera, exhiben parejas de aves picoteando racimos de uvas que surgen de un tallo central. En los laterales del capitel de la derecha, aparecen dos cabezas en forma de corona. Otras dos cabezas, llevan barba, poseen el pelo largo y no presentan aureola. Otros capiteles, por su parte, incorporan nuevamente cabezas humanas que alternan con racimos de uvas y elementos vegetales como piñas. La existencia de cuatro rostros enfrentados, dos en cada ábaco o capitel, hace una alusión a los cuatro evangelistas.

    El último par de capiteles esta situado en las columnas sobre las que apoya el arco de ingreso a la capilla mayor, el lugar más sagrado del templo. En sus frentes se incorporan arcos, con alegorías que indican al fiel el acceso a la Casa Celestial, y en sus laterales, flores de doce pétalos. Las molduras, por su parte, exhiben dos registros de tallos ondulados con uvas y cruces insertas en círculos.

    PERIODO CAROLINGIO

    Los francos eran un pueblo bárbaro germano de la zona del Rin, establecidos en la Galia, en el siglo V. Los primeros reyes fueron Faramundo y Clodion; ellos iniciaron la conquista de la Galia al expandir la frontera hasta el río Somme. Este período marcó el inicio de la unificación llevada a cabo “bajo el reinado de Clodoveo; sucesor de Meroveo, que le dio su nombre a la primera gran dinastía de reyes francos: Los Merovingios. Clodoveo puso los cimientos del estado más fuerte de Europa Occidental. Nació así el Regnum Francorum que, entre finales VIII y comienzos del IX, reconstituyó gran parte del mundo romano - bárbaro creando un organismo político relativamente unitario: El Sacro Imperio Romano.” Bajo el mando de Clodoveo el reino se extendió por toda la Galia, y expulsó del reino de Tolosa a los visigodos.

    La dinastía Merovingia fue conocida como la de los reyes holgazanes, ya que fueron coronados muy jóvenes y muchos de ellos murieron muy rápido por la vida de libertinaje que llevaban, esto hizo que dejaran en manos de altos aristócratas, quienes ejercían en cargo de mayordomos de palacio, todos los temas de gobierno, y los poderes administrativo y militar; esto ocasionó una “gran ambición de poder en mayordomos como Ebroino que pretendía restaurar el Reino Franco y Pipino de Landen que solo quería el poder para su hijo y su nieto”. Esta situación se extendió hasta el 751 cuando se extinguieron los merovingios, lo que ocasionó una situación muy difícil, pues el reino se vio convulsionado por rencillas y luchas por el poder que se hallaba en manos del mayordomo Pipino de Heristal, que tuvo que ceder el poder a su hijo el mayordomo Carlos Martel, quien lograría solucionar dicha crisis a través de operaciones militares, lo que le permitió recuperar el control, lo que le permitió a su hijo Pipino El Breve, dominar completamente la región Gala y un amplio fragmento de Germania

    Al morir Pipino el breve, en el 764, como era la tradición dejó en herencia el reino a sus dos hijos, Carlos y Carlomán, pero éste último murió muy pronto en el 771, por lo que Carlos reunió en sus manos todo el reino

    “Carlos inició una política de expansión territorial para intentar restaurar el antiguo Imperio Romano de Occidente, lo que le hizo enfrentarse a bizantinos, musulmanes y germanos. Extendió su Imperio por Francia, Italia, Alemania y hasta parte de España, estableciendo la capital en Aquisgrán, en la zona oeste de Alemania; estas conquistas le valieron el sobrenombre de Carlomagno”

    En el 800, estando en Roma, el papa le colocó la corona a Carlomagno, mientras que el pueblo lo vitoreaba con el título de Emperador, lo que daba toda una gran cantidad de privilegios. Este hecho dio origen al Sacro Imperio Romano Germánico llamado Carolingio, el cual fue una renovación del Imperio Romano de Occidente pero sobre una base cristiana.

    El Imperio Carolingio se convirtió ante todo un estado franco, un núcleo estable alrededor del cual otros pueblos reaccionaron muy diversamente ante esa pretendida hegemonía, Corno factores de cohesión el imperio contaba con una firme estructura administrativa, un poderoso ejército aliado con la Iglesia, las finanzas y con algunos elementos culturales como la escritura y la lengua. Por el contrario tenía que superar graves elementos disgregatorios cuyo origen estaba en la variedad de grupos étnicos y en las ambiciosas familias condales. Para lograr una mayor unión creo las Marcas ó territorios defensivos localizados en las fronteras del Imperio y los Condados ó zonas gobernadas por condes, que nombraba el rey y les otorgaba poder militar, administrativo y judicial. El reinado de Carlomagno significó el momento de mayor equilibrio entre esos factores por lo que logró inaugurar un período de esplendor político y también cultural, llamado Renacimiento Carolingio.

    El Renacimiento Carolingio, teniendo como guía a Alcuino de York, se inspiró más en la cultura romana que en la bizantina por la necesidad de preparar intelectualmente a clérigos, monjes y personal administrativo. La cultura salió de los monasterios para acceder y constituir centros intelectuales en catedrales e incluso en el palacio real de Aquisgrán; de esta manera se crearon escuelas monacales, catedralicias o episcopales y una gran escuela palatina para impartir la enseñanza que se llegó a dividir en dos grados diferentes: la elemental y la superior. La enseñanza elemental se impartía en las escuelas parroquiales y consistía fundamentalmente en aprender a leer. La superior o de artes liberales, se impartía en las grandes escuelas monacales, catedralicias y palatina y se dividía en dos grandes ramas: la de la lógica que compendiaba la gramática, retórica y dialéctica, y la rama de la física con aritmética, geometría, música y astronomía.

    El mayor esfuerzo de este proceso cultural se centró en la producción de libros. Las bibliotecas se enriquecieron con numerosas copias de libros que procedían de Irlanda, Italia y España; no sólo se copiaron libros de los grandes padres de la iglesia, sino también de la antigüedad clásica como Cicerón, Plinio, Tito Livio, etc; para ello se creó una caligrafía carolingia de letras pequeñas, redondeadas y separadas entre sí, que facilitaba enormemente la copia, la difusión y la lectura de estos libros.

    Arte Carolingio

    El arte Carolingio tiene una significación relevante en el contexto europeo de su tiempo. Ya que con él se plasma una idea de unidad y un intento de recuperar los modelos de la antigüedad, puesto que implicaba la voluntad de configurar un nuevo imperio romano de Occidente. El gran movimiento del arte carolingio “planteó el desarrollo de la idea imperial romana y, para que esta doctrina adquiriese credibilidad, era forzoso hacerla corresponder con una recuperación de los modelos arquitectónicos y plásticos de la antigüedad. Unos modelos cuyo paradigma se correspondía con los de la época de Constantino, debido a la creencia de que su conversión al cristianismo había cambiado el sentimiento religioso del Imperio”.

    Un arte surgido bajo estas creencias ideológicas tuvo que asentarse a través de “agrupaciones artísticas áulicas en las que el aparato de la corte y el soberano lograsen hacer visible, desde el punto de vista plástico, la imagen de esta nueva situación política. Una Nueva Roma que tenía forzosamente que expresarse a través de determinados programas arquitectónicos”.

    Escultura CAROLINGIA

    La escultura de este periodo ha desaparecido completamente, solo se sabe que “tiene como principal característica la carencia de escultura exenta o de bulto, ya que sigue la misma técnica del bajo relieve del período visigodo pareciendo casi un grabado. Los temas son geométricos y de gran sencillez ”; la estatuilla de bronce que se supone representa a Carlomagno; posee un enorme y singular valor ya que constituye la única pieza escultórica conservada

    Estatuilla Ecuestre de Carlomagno

    Esta pieza fue realizada en el S. VIII, mide 24 cms, esta hecha en bronce, con incrustación de hilos de oro; hoy en día pertenece a la colección de objetos de arte del Museo Nacional del Louvre

    Fue encontrada, por Alexandre Lenoir, dentro del conjunto de tesoros de la catedral de Metz en 1807; tiene un jinete representado con corona, y lleva el orbe del mundo. Su rostro es gordo y con un gran bigote, el traje es muy simple lo que corresponde con las descripciones de Carlomagno hechas por los historiadores. Sin embargo, es posible que el caballero sea un retrato de Carlos el Calvo, pues los retratos pintados en manuscritos subrayan el parecido con su abuelo, Carlomagno

    La Miniatura Carolingia

    La miniatura o iluminación de manuscritos fue una parte fundamental en el Renacimiento Carolingio por la producción de códices o libros anteriores a la imprenta, la cual se incrementó acusadamente con el fin de recopilar al máximo posible todo el conocimiento de la época, por lo que los scriptoria ó escritores se dedicaron a elaborar numerosos manuscritos con ilustraciones de gran calidad.

    Los códices se convirtieron en objetos de verdadero lujo acabados con magnificas ilustraciones y terminados con pedrería, oro y marfil, por lo que la miniatura se convirtió en la mejor expresión de que “el arte carolingio se inspiró en el arte de la Baja Antigüedad, observando una maestría extraordinaria de las artes figurativas, ubicadas en sus tres dimensiones y con una buena proyección en el espacio”.

    Para poder crear estas obras, Carlomagno creó cuatro grandes escuelas en las cuales además de enseñar el arte, se dieron los pasos decisivos para la creación de verdaderas obras de arte.

    La Escuela palatina de Aquisgrán, desarrolló su labor durante el último cuarto del siglo VIII. Esta escuela sitúa a los personajes sobre fondos arquitectónicos muy recargados. Es una etapa inicial de la miniatura en la que se puede observar cómo los artistas de este taller buscan modelos en las fuentes clásicas, bizantinas e incluso del mundo anglosajón. Los libros más representativos de esta escuela son el Evangeliario de Godestalc y los Evangelios de Ada.

    La Escuela de Ebbon de Reims pertenece ya al primer cuarto del siglo IX. Es una escuela que se distingue por representar a los personajes en un espacio aéreo, es decir, en plena naturaleza y generalmente solos, aunque alguna vez aparecen agrupados. Todos los personajes ofrecen una gran vivacidad en su expresión y el modelado no se realiza mediante trazos sino mediante el color: la línea desaparece y los colores se disponen en pequeños toques yuxtapuestos. Destaca el Evangeliario de Ebbon.

    La Escuela de Tours se encuentra activa durante el segundo tercio del siglo IX. Es una escuela de gran sobriedad que imita fielmente el arte antiguo. Los colores son muy discretos, poco numerosos y especialmente realzados por el oro y la plata. Una derivación de esta escuela es la escuela de corte de Carlos I el Calvo, del último tercio del s. IX, con ejemplares como el Evangeliario de San Emerano de Ratisbona.

    El Taller de Drogo de Metz pertenece a la Segunda mitad del S. IX. Se inspira en decoraciones murales o en mosaicos romanos del tipo de Santa Constanza. Así, las figuras son pequeñas y hay mucha vegetación y ligeras construcciones recortadas sobre el fondo. Los colores suelen ser poco utilizados y la obra adquiere una gran elegancia. Destaca el Sacramentario de Drogo.

    Evangeliario de Godescalc

    El Evangeliario de Godescalc fue un manuscrito iluminado, de 127 páginas en pergamino púrpura, realizado entre el 781 y el 783 por encargo de Carlomagno y su esposa Hildegard, para conmemorar su coronación y el bautismo de su hijo Pipino. Este manuscrito, fue elaborado con adornos naturalistas en la decoración, además de seis figuras en miniatura; los primeros cuatro eran los tetramorfos de los evangelistas; el quinto fue una representación de Cristo entronizado y la sexta imagen una fuente de la vida, que le daba aspecto de volumen y profundidad a las letras que estaban escritas en tinta de oro y plata.

    Evangeliario de Ebbon

    Este manuscrito contenía el texto de los cuatro evangelios y el prólogo de San Jerónimo, “las tablas de los capitulos numerados; reunidos en columnas; los cuales tenían decorados arquitectónicos con columnas de mármol veteado de capiteles corintios; y fustes adornados con arbustos y follajes estilizados, además de animales simbólicos como el león o el pavo real; así mismo al inicio de cada evangelio se ubicaba una mayúscula iluminada con oro y plata, en frente se ubicaban figuras a toda página que representaban a los evangelistas en actitud de escribir, en los que se presentaba un juego de color y luz que agitaba los pliegues de las prendas de vestir, y daba relieve a los cuerpos y le daba gran espiritualidad”.

    El Evangeliario de San Emerano de Ratisbona.

    Este manuscrito se componía de 74 miniaturas en una pintura relativamente estática, sin fuerza, que se caracterizada por una gran moderación y reserva en las actitudes y expresiones, ya que, presentaban imágenes mayestáticas, donde el monarca, Carlos el Calvo, estaba acompañado de símbolos de su realeza como el trono, los soldados en guardia de honor, y el baldaquino cupulado, todas ellas sobre pápiros teñidos en púrpura y oro.

    Sacramentario de Drogo.

    Fue un manuscrito iluminado, que contenía todas las oraciones que recitaba el oficiante a lo largo de todo el año. Este sacramentario de 130 páginas, fue escrito y pintado para el uso personal de Drogo, arzobispo de Metz. Este codice contenía decoraciones en algunas secciones, como carácteres vegetales para las oraciones del domingo, una de ellas con un cristo muerto de cuyas heridas salían sangre y agua que era recojida, por una figura femenina que representaba a la iglesia, en un caliz que se podía relacionar con la futura leyenda del Santo Grial; así mismo una serpiente se enroscaba en la base de la cruz con unas figuras que representaban el sol y la luna a los lados.

    La Arquitectura Carolingia

    Este tipo de arquitectura se presenta en un principio como una continuación de la visigoda, ya que de esta última nacieron las innovaciones arquitectónicas que darían pasó al estilo románico; ya que, proliferan los ábsides contiguos antecesores de la cabecera cluniacense. Aparecen los primeros arcos perpiaños, parecido al fajón, y el crucero se alumbra con una torre linterna. Se crea el llamado deambulatorio, un pasillo detrás del altar mayor prolongando las naves laterales que al principio iba por el exterior del templo, pero que acabó penetrando dentro del recinto. Las cubiertas eran de madera, también se emplea el pilar compuesto. Las mismas torres son de madera; la idea de crucero tiene ahora un fuerte desarrollo con la aparición de iglesias con doble crucero; las plantas son mayormente centrales con una gran tendencia a la altura del espacio; en la que la fachada se presenta enmarcada con pórticos, y torres, preludiando la doble torre románica.

    Capilla Palatina de Aquisgrán

    Esta iglesia se convirtió “en el edificio mítico de su época, verdadero símbolo del ideal imperial cristiano”; se trata de una iglesia de planta centralizada poligonal formada por un núcleo y un deambulatorio, que tiene dieciséis lados, en tanto que núcleo central es un polígono de ocho lados. El núcleo presenta un cuerpo cupulado con un gran tambor horadado que proporciona al centro luz directa. La tribuna está desdoblada en dos partes, la parte inferior es la que propiamente desemboca al deambulatorio, mientras que la superior lleva a una bóveda de cañón muy baja.

    Da una cierta sensación achaparrada porque los arcos del piso inferior resultan demasiado bajos en comparación con los dos niveles de la tribuna. Al este se encuentra la cabecera de testero recto, la cubierta del deambulatorio es interesante porque, el piso inferior está formado por ocho lados mayores, todos cubiertos con bóveda de aristas, y por ocho lados menores, cubiertos con bóveda de cañón de forma triangular, son pequeñas cuñas triangulares. En el piso superior los lados mayores se cubren con bóvedas de cañón que apoyan sobre muros diafragma que dan a arcos muy bajos, y los lados menores cubren con cuñas triangulares cubiertos también con bóveda de cañón. El que la bóveda de cañón se apoya sobre un muro diafragma apoyado en un arco se hizo porque este muro sostiene muy bien el empuje de la bóveda de cañón. Esta parte del muro diafragma es la que corresponde con el nivel superior en que está desdoblada la tribuna.

    Iglesia San Germigny des Prés

    Fue la iglesia oratorio de Teodulfo de Orleáns, obispo de esta ciudad y uno de los grandes mandatarios del imperio que era de linaje visigodo. Por ello, construyó esta iglesia de claras influencias visigodas. Es una iglesia de cruz inscrita en un cuadrado, al que se le añaden tres ábsides en la zona este, dos en el tramo del transepto y uno en la zona occidental, que curiosamente no rompía el eje longitudinal de la iglesia puesto que una puerta se abría justo en el centro del ábside. No es, por tanto, un ábside de carácter litúrgico, sino que simplemente está buscando reproducir un modelo arquitectónico.

    Está totalmente abovedada. Los ejes ortogonales se cubren con bóveda de cañón, presididos por un gran cimborrio de influencia carolingia, mientras los tramos de las esquinas se cubren con pequeñas cúpulas. Todo este abovedamiento se apoyaba fundamentalmente en cuatro pilares centrales. En el interior destacan los arcos de herradura y la compartimentación, características de clara influencia visigoda.

    CAPITULO VI

    ARTE ROMANICO

    El término románico designa el arte europeo occidental desarrollado durante los siglos XI y XII. “Este estilo, incluye elementos romanos y bizantinos con una unión de los artes precedentes carolingio y visigodo; toda esta mezcla lo forma como un periodo clásico seguido por el barroquismo del gótico”.

    Históricamente este período coincide, en lo político, “con un periodo de fragmentación feudal, y un momento intenso en la larga disputa entre el poder temporal y el espiritual, y con los primeros intentos de la Iglesia romana de recuperar la idea de Res Publica, entendida ahora como Res Publica Cristiana”.

    En lo religioso, se da la aparición de una nueva necesidad de vivir más auténticamente la fé, una fé sentida tanto individual como colectivamente. La nueva meta de propiciar el regreso a la iglesia primitiva basada en los modelos de vida apostólica como sinónimos de sencillez y pureza, dio lugar a la aparición de las herejías y las órdenes mendicantes, las cuales nacieron como reformas perfeccionadas del benedictismo original de Cluny y el Cister, además las peregrinaciones a Roma, Santiago y Tierra Santa se convirtieron en un sinonimo de la religiosidad colectiva.

    ARQUITECTURA

    Los progresos del arte románico se van a desarrollar fundamentalmente en el terreno de la arquitectura religiosa, que se basó en el modelo bizantino, pero con mayor sencillez, renunciando al enriquecimiento de materiales, ya que solo se usa la piedra, dispuesta en sillar o sillarejo, así como el ladrillo; también se evita la argamasa o cemento.

    “Son iglesias de planta cuadrada u octogonal, en las que se utilizan naves laterales casi tan altas como la central; como elemento de contrarresto, la central permanece ciega, mientras que las laterales permiten la iluminación mediante ventanas. La tribuna incrementa la capacidad del templo y su bóveda actúa como arbotante que traspasa el esfuerzo a los contrafuertes”. Los arcos más usados son los del tipo diafragma con bóvedas de cañón; usando como elemento sustentante el pilar, que podía ser cuadrado ó cruciforme, los fajones ó nervios suelen descansar en columnas adosadas, lo que se repite en las soluciones decorativas y pórticos. Estas columnas tienen fuste cilíndrico y liso. Los capiteles pueden ser simplemente cúbicos, lisos o con decoración de hojas. Pero el más característico es el historiado o narrativo.

    En la intersección se elevan cúpulas, y linternas o cimborrios, que parten de un cuadrado. Por último, el edificio se completa con una o dos torres, añadidas sobre la cumbre del edificio. Las fachadas principal y del crucero van decoradas con las portadas abocinadas. Contribuye a la importancia de la fachada la desaparición del atrio.

    El elemento de sustentación por excelencia es la bóveda, que se toma no solo como una solución práctica para evitar los frecuentes incendios en las cubiertas de madera, sino también como una nueva articulación del espacio, esto aporta soluciones en ambos sentidos, y también numerosos problemas, ya que su peso obligó a buscar elementos de contrarresto, primero se recurre a abovedar sólo la cabecera, manteniendo la cubierta de madera en el resto; después la bóveda de cañón cubre todo el templo lo que obliga a aumentar el grosor de las paredes, el uso de arcos fajones y perpiaños; así mismo se suprimen las ventanas laterales..

    Así mismo, la función sustentante del muro impide abrir grandes huecos. Las ventanas parecen unas saeteras abocinadas con derrame hacia el interior para difundir mejor la luz. Pare evitar esta impresión de saeteras, por fuera se visten con portadas de finas arquerías y columnas, generalmente concéntricas.

    A finales del periodo aparecen los rosetones con labores caladas, y el edificio se remata con una cornisa sustentada con molduras redondas ó canes, el exterior se remata con el uso de contrafuertes exteriores en forma de espina de pescado, a veces con metopas decoradas intermedias, mientras que en el interior aparecen la girola o deambulatorio, para permitir la contemplación de las reliquias.

    El concepto de lo maravilloso en el arte Románico.

    El Arte Románico,adquiere un enorme sentido de lo maravilloso por ser un arte funcional que no está hecho para ser visto sino para existir y para ser practicado; la fé hace que la iglesia se considere un lugar sagrado que hay que cuidar y preservar por sobre todas las cosas; por ello se hizo necesaria la sustitución de las cubiertas de madera, por bóvedas de piedra, para evitar los daños causados por los incendios; por ello se recurrió a diversos procedimientos, en los que se usó una nave central apoyada por naves laterales o por tribunas, cuya bóveda en cuarto de esfera quedaba apuntalada en el muro de la nave formando de este modo una especie de contrafuerte continuo con unas bóvedas de medio punto transversales, cuya tensión quedaba retenida por los dos extremos macizos de la entrada y el crucero; o una línea de cúpulas que repartían las fuerzas de empuje entre los cuatro ángulos, igualmente se estableció una circulación, por las naves laterales y el deambulatorio en los tres niveles, las aberturas estaban bien repartidas para distribuir la luz gradualmente en el lugar y a veces en el momento deseado; el uso de rejas impedía a los no católicos la entrada en el santuario, pero le permitían ver las grandeza de las ceremonias; contemplar los ornamentos, los cálices, los incensarios, el altar mayor románico ó una piedra cúbica erigida a una altura adecuada, en la que se desarrollaba el sacrificio eucarístico; pero sobretodo le permitía contemplar la presencia de Dios en su casa, para ello estaba la decoración románica que respondía a estas necesidades, ya que las esculturas, pinturas, herrajes y vidrieras servían para resaltar o aligerar la arquitectura, para ello se esculpieron bases y capiteles para el edificio; las fachadas son adornadas con las famosas estatuas - columnas, ubicadas en los pórticos de acuerdo con su función arquitectónica.

    Lo maravilloso en el Arte Románico se convierte en un tema en sí mismo; ya que resalta la belleza y grandeza de los diferentes materiales que utiliza. La madera conserva todas sus fibras y el metal está cincelado; “el esmalte es una transmutación alquímica. Este arte pone su inteligencia y los dones del artesano al servicio de la creación para mejor servir a sus potencialidades. De esta forma no sólo será menos peligroso para su entorno, sino que al situarse en la prolongación de la creación, expresará el misterio mejor que lo podría hacer un reflejo solamente realista”.

    De esta manera el Románico se convierte en un arte de lo sagrado, demostrado hasta con la introducción de escenas historiadas en los capiteles, los cuales tenían únicamente temas ornamentales. Pero incluso en el fresco, estos artesanos no pretendían solamente hacer del cuadro un mundo sagrado visto desde el exterior, es en este sentido en el que debe entenderse el simbolismo románico. Se trata de un “simbolismo, de otro lado fundamental, que actúa de entrada a partir de las mismas formas y de su efecto natural. Pero son la naturaleza y la historia misma las que se ordenan y se juntan para llegar a ese misterio de salvación que está en la creación del mundo y en su redención; misterio que no es otro, en definitiva, que Dios, Creador y Salvador en su Verbo Divino”.

    La reforma Cluniacense

    Aunque el ambiente era propicio para un renacimiento monástico, la importancia histórica de Cluny consistió no tanto en potenciar o encabezar el retorno a los ideales benedictinos en una serie de monasterios, como en unirlos en una sola estructura, lo que permitiría sentar las bases de una nueva unidad del mundo cristiano, que encontraría en la centralización pontificia su otro pilar básico. De forma paralela, aunque sin presentar la uniformidad institucional cluniacense, se desarrollaría en Alemania un movimiento de renovación monástico de importancia equiparable en el que, a diferencia de Cluny, la vinculación a determinados linajes aristocráticos resultaría altamente beneficiosa. Ambos movimientos junto a otros de rango menor localizados en Flandes e Italia, constituyen la primera gran oleada de renovación monástica del tronco benedictino que se plasmaría, con el tiempo, en el nacimiento de nuevas órdenes.

    El 11 de septiembre del 909 Guillermo III de Aquitania, concedió a un monje de apellido Bernon, un espacio en la región de Borgoña para la edificación de un monasterio, el cual se acogió a la directa protección de la sede de Roma, lo que le proporcionó una gran independencia respecto de cualquier poder laico o eclesiástico, esto “le permitió a Cluny convertirse en la principal de las ordenes monásticas europeas hasta bien entrado el siglo XII; estos privilegios le permitieron al monasterio sustraerse tanto a la autoridad de la diócesis correspondiente como a la del rey de Francia, sentando así las bases de una verdadera supranacionalidad”. Desde el punto de vista organizativo Cluny tuvo además la suerte de contar durante sus periodos fundacional y de madurez, con la presencia de una serie de abades de valor excepcional y una extraordinaria longevidad, lo que no hizo sino favorecer el desarrollo de la orden y permitió acentuar la estabilidad del movimiento.

    La abadía de Cluny, en su máximo apogeo “llegó a contar entre 400 y 700 monjes, era el centro de todo y poseía una autoridad indiscutida sobre los monasterios dependientes. A fines del siglo XI se calcula que la orden contaba con 850 casas ó monasterios en Francia, 109 en Alemania, 52 en Italia, 43 en Gran Bretaña y 23 en la Península Ibérica, agrupando a más de 10.000 monjes.”

    Los monasterios se hallaban divididos en prioratos cuyo superior era designado por el abad de Cluny, y que debían pagar un importante impuesto anual, que Cluny enviaba a su vez a Roma, como signo de sumisión de cada una de las abadías subordinadas; y Abadías; en las que predominaba la estructura piramidal, similar en todo a la del tipo feudal, por lo que estas casas dependían de manera idéntica de la abadía madre. “Este verdadero imperio monástico era regido con mano de hierro por los abades de Cluny, elegidos por ellos mismos. Sus viajes frecuentes a Roma y el hecho de que numerosos Pontífices salieran de las filas de la Orden, hacia que los abades de Cluny fuesen considerados como segundos jefes de la Cristiandad”.

    Cluny más que un género de vida, se convirtió en una peculiar forma de entender la espiritualidad, con un objetivo originario, que no era otro que el de volver al espíritu y a la regla benedictina caracterizada por la castidad, la obediencia y la estabilidad, así mismo potenció el rezo litúrgico por encima de cualquier otra consideración. El "Opus Dei u oficio divino monástico, centrado en la celebración coral de la eucaristía se convirtió pronto en la principal actividad monástica, que orientó el género de vida de los cluniacenses”.

    Las reglas de la orden exigían una moderna ascesis que se plasmaba tanto en el régimen alimenticio como en la ausencia de trabajos físicos. La especialización litúrgica impidió un verdadero desarrollo intelectual, “por más que los escritores de la orden realizasen una permanente y febril actividad de copia de manuscritos, y aunque Cluny llegó a disputar con Montecassino, la primacía de las bibliotecas de Occidente entre los siglos X y XII, su escuela monástica jamás alcanzó un puesto de relevancia”.

    La contribución de Cluny a la reforma general de la Iglesia, “parece indudable ya que si bien se trata de fenómenos distintos, la reforma gregoriana y reforma cluniacense coincidieron en su objetivo fundamental de devolver a la Iglesia su libertad frente a los poderes laicos; sin embargo hay importantes diferencias entre ambos movimientos, la primera es que Cluny jamás rechazó el sistema de la iglesia propia, sino que lo utilizó a su favor mediante la cesión a la orden de los derechos de los propietarios de tierras; tampoco Cluny actuó como tal en la querella de las investiduras apoyando al Papado, ni intervino en el espinoso asunto de las relaciones monarquía episcopado. Sin embargo, por la simple reforma impuesta en sus monasterios, por el papel de los intelectuales vinculados directa o indirectamente a la orden, en el asunto del concubinato y la simonía, por su positiva acción educadora de la clase dirigente y sobre todo, por su directa vinculación a Roma, cuyo primado moral siempre defendieron, los cluniacenses constituyeron globalmente un elemento fundamental en la consolidación de la reforma gregoriana.

    A pesar de sus grandes aportes, el poder que ejercía Cluny empezó a demostrar graves síntomas de debilitación desde principios del siglo XII. Son varias las causas que parecen explicar este debilitamiento, pero sin duda la más importante parece estar en la rigidez de su propia estructura. La excesiva centralización orgánica de la orden, que hacía descansar todo en la figura del abad del monasterio fundacional, impedía la más mínima flexibilidad entre las distintas casas, paralizando así a toda la orden. Otro elemento a destacar fue el de la ordenación, imparable desde fines del siglo XI, de gran numero de monjes atraídos más por el prestigio y la seguridad que la orden ofrecía que por una verdadera vocación; además la aparición de fenómenos como el Cister o la Cartuja fueron el producto de la decadencia de Cluny, a esto se agrega el cambio general de orientación del monaquismo occidental, más favorable desde principios del siglo XII a los aspectos eremíticos y ascéticos, que permitió el nacimiento de las nuevas órdenes.

    La expansión del Románico.

    El Arte Románico fue la primera manifestación que unió, dentro de una misma línea artística, a la mayor parte de los países de Europa occidental, siendo el primer estilo internacional dentro de la historia del Arte.

    Durante la época románica se realizan muchas construcciones, que responden al clima político, social, económico y religioso de Europa, esto propicia el desarrollo del Románico. Dentro de estos factores, es de destacar el factor religioso, ya que fue el que en mayor medida contribuyó al nacimiento y propagación del nuevo arte.

    Dentro de este panorama religioso, fueron la orden de Cluny y las peregrinaciones las que impulsaron y difundieron el Románico por toda Europa. “Durante la época del Románico, la orden benedictina de Cluny, va a sufrir importantes reformas y va a fortalecerse dentro del panorama cultural, económico y religioso. Es una orden monástica que va ha hacer posible unidad artística que caracteriza al arte Románico. La orden funda por toda Europa gran número de construcciones o casas filiales que siguen el mismo principio arquitectónico y decorativo dictado por la casa madre o casa matriz”. Estas casas filiales se caracterizan por repetir los mismos esquemas arquitectónicos y decorativos que responden a las necesidades litúrgicas de la orden cluniaciense y que influyen no solo en los monasterios de la orden, sino también en las demás iglesias y monasterios de Europa.

    La característica fundamental de la orden de Cluny y construcciones filiales, va a ser la gran altura y longitud de sus naves y el gusto por el lujo en cuanto a la ornamentación y materiales. La orden va a dictar en gran medida las ideas estéticas que debe seguir toda construcción religiosa y van a propagar e impulsar el nuevo estilo, estilo Románico, a lo largo del territorio europeo.

    Los cluniacienses impulsan la primera Cruzada y las peregrinaciones a Roma y a los Santos Lugares, pero sobre todo impulsan la peregrinación a Santiago de Compostela, y a través de las distintas vías de peregrinación van a construir iglesias y monasterios en los cuales se repiten los mismos modelos arquitectónicos, escultóricos y pictóricos. Las peregrinaciones y el auge que adquiere ahora el culto a las reliquias, van a atraer a gran número de población que quería venerar los restos de Cristo y de los santos.

    Las vías de peregrinación se convirtieron en una zona de difusión cultural de extraordinaria importancia, en torno a las cuales se van a levantar numerosas iglesias, abadías, monasterios, y toda una serie de servicios creados para satisfacer las necesidades de los peregrinos.

    A través de las vías se introducen corrientes artísticas que influyen en la creación del Arte Románico. Ya desde principios del siglo XI existen tres vías principales de peregrinación: la ruta a Tierra Santa, la ruta a Mont-Saint-Michel y la ruta a Santiago de Compostela. La ruta que iba a Tierra Santa parte de Roma y aquí se podían visitar las tumbas de los apóstoles Pedro y Pablo. Una vez hecha esta parada, cruza Italia de Norte a Sur y embarcaban hacia los Santos Lugares y visitan las construcciones del Gólgota y del Santo Sepulcro. Esta ruta introducirá en Europa el arte Oriental y el arte Clásico. El Mont-Saint-Michel está situado en la costa de la Bretaña Francesa, y era un santuario dedicado al Arcángel San Miguel. La Ruta Jacobea o camino a Santiago será tratada con mayor detenimiento en otro capítulo.

    El esplendor Románico coincide con la época de las cruzadas y peregrinaciones que permitieron entrar en contacto con formas procedentes del mundo Bizantino y comunidades orientales como Siria y Palestina, que influirán en el desarrollo y evolución del nuevo arte. De ellos se tomarán elementos decorativos y constructivos. Se toma la temática de animales afrontados o aves con cuellos enlazados, que pasan a formar parte de la iconografía románica. En cuanto a elementos constructivos, se van a tomar sistemas de plantas, como la central, que pasa a formar parte de las construcciones románicas. Se toman también abovedamientos, cúpulas en los cruceros o bóvedas de ojiva o crucería, columnas empotradas, arcos lobulados, que hasta entonces eran desconocidas en Europa, y que pasan a formar parte de la arquitectura románica.

    Toman también la influencia clásica, fundamentalmente miran hacia Roma. Esto es debido a las peregrinaciones que tenían lugar hacia esta ciudad. También la influencia clásica de la antigua Roma viene dada por las construcciones prerrománicas, que toman como modelo este mundo clásico. Ejemplo de ello es el arte Carolingio, que se caracteriza por intentar asimilar en su arquitectura el arte romano, tanto en el empleo de sistemas de construcción, en los cuales tiene una gran importancia el estudio de la transmisión de cargas y fuerzas, de ahí a que este arte se caracterice por tener en sus fachadas un frente flanqueado por torres que contrarrestan los empujes de la bóveda, y que pasará a formar parte de las fachadas de las iglesias románicas. El empleo de bóvedas de medio cañón y bóvedas de arista para cerrar algunos tramos de los edificios pasa a formar parte también de la arquitectura románica. Sin embargo, a diferencia del arte Carolingio, el Románico logra abovedar todo el edificio.

    La influencia prerrománica también procede del arte Visigodo, de este tipo de arte, el Románico toma fundamentalmente el sistema iconográfico, y que pasa al arte Románico para decorar capiteles, fachadas, claustros o el interior del templo.

    Francia y las Escuelas Arquitectónicas

    La evolución del Arte Románico en Francia se ha orientado en cuatro direcciones: Geográfica, Histórica, Estructural y Mixta.

    La dirección geográfica es bastante inexacta, porque la arquitectura francesa excede los límites geográficos, además de que se ve afectada por factores políticos, cuadrillas volantes, uniformidad cluniacense. La dirección Histórica también es de muy difícil aplicación, ya que es imposible la exacta datación de los monumentos y determinar cuál es modelo y cuál la copia. Máxime teniendo en cuenta que el numero de restos que nos ha llegado es fragmentario. La Estructural, es inviable ya que los monumentos se hallan a grandes distancias entre si; la más viable es la Mixta ya que se halla en busca de combinar las tres direcciones anteriores para un mejor estudio; es gracias a esta última dirección que se han logrado ubicar las tres grandes escuelas ubicándolas incluso por región

    LA ESCUELA NORMANDA

    Esta escuela posee gran riqueza en la articulación del muro, normalmente en tres pisos pero que anuncian el cuarto piso que aparecerá en el gótico. Son edificios de gran altura y esbeltez, con una gran mucha luz debido por un lado a la riqueza en la articulación del muro pero también porque en un principio iban a tener cubiertas de madera; así mismo renuncian a la girola. En la ornamentación se emplean casi exclusivamente la decoración geométrica y muy poco la vegetal.

    Así mismo, hay la alternancia de soportes en la separación de naves, que no va a tener una función constructiva sino que va a ser únicamente para dar un ritmo a la arquitectura, que se vuelve muy modulada. La fachada occidental suele estar flanqueada por dos torres, elemento que organiza la llamada "fachada en forma de H", que tendrá un gran desarrollo y que pervivirá después del Románico, siendo por ejemplo modelo de fachada a lo largo del gótico clásico en los dominios reales.

    Iglesia de la Trinidad en Caen

    La Trinidad de Caen también es conocida como la abadía de las mujeres, ya que fue una construcción por orden de la duquesa Matilde para albergar su panteón e iba a estar regida por mujeres. Además, de estar junto a la iglesia de San Esteban, “es un edificio expiatorio ya que los duques habían contraído un matrimonio consanguíneo sin el consentimiento papal y de esta manera querían expiar sus culpas. Fue empezada en el año 1062, fue consagrada en el 1066 y en el 1083 ya debían estar muy avanzadas ya que en este año Matilde fue enterrada en el presbiterio, aunque esta es la zona que ha sido más reformada”.

    El primitivo presbiterio estaba formado por cinco ábsides escalonados, cuatro abiertos al crucero y el central a la nave. La capilla mayor estaba cubierta con bóveda de arista, al igual que las naves laterales, pero estas fueron reformadas en los siglos XVI y XIX. La nave central debía estar cubierta por una bóveda de cañón de madera, pero hacia el 1120 se sustituye por una cubierta con bóvedas nervadas. No hay alternancia de soportes, las naves se separan con pilares compuestos. La articulación del muro es muy rica, con un piso de arcadas, un falso triforio más un piso de ventanas.

    Las torres cobran una gran importancia, en los pies adquieren una gran altura aunque no hay ni macizo occidental ni pórtico, y tenían cubierta plana. La torre del cimborrio también es importante.

    LA ESCUELA BORGOÑA:

    En esta región el edificio más destacado es el gran monasterio de Cluny. Sirvió de guía para los edificios de la orden, los cuales se hicieron a imagen y semejanza, en los cuales las influencias de la casa matriz son evidentes. Son características de lo cluniacense la longitud y altura de las naves, el abovedamiento completo, el deambulatorio, el doble crucero y la riqueza de materiales. Al principio utilizaron la bóveda de arista en las naves laterales. Ante la necesidad de construir bóvedas mayores, se tuvo que recurrir a los arcos diagonales para contrarrestar el empuje de dichas bóvedas. El principal monumento borgoñón es la Iglesia Sainte Madeleine du Vezelay

    Iglesia Sainte Madeleine du Vezelay

    Vezelay era uno de los centros de peregrinación más importantes de Borgoña, ya que allí se veneraban las reliquias de María Magdalena. Se comenzó a construir a finales del siglo XI desde los pies, pero a mediados del XII se detuvo su construcción y las obras tardaron en reanudarse, por lo que la cabecera ya es gótica, por lo que la nave central se cubrió con arista.

    “Se accede a la iglesia a través de un gran atrio porticado con tres tramos y tres naves, a continuación del cual se desarrollan las tres naves con diferencia de altura, todas ellas cubiertas con bóveda de aristas, la central con los tramos separados por arcos fajones con alternancia de dovelas, que se debió dar por la influencia de algún edificio del Bajo Imperio romano que hubiese en la zona. Posee articulación del muro en dos pisos, arcadas y ventanas, separados por una cornisa horizontal ornamentada. Queda un amplio espacio desarticulado que hace que tenga un aspecto demasiado macizo. La bóveda de arista permitió abrir una gran ventana en cada tramo, lo que hace que sea una iglesia muy luminosa. Las naves están separadas por pilares cruciformes con pilastras semicirculares adosadas. El crucero está marcado en planta, pero sólo la parte inferior es románica”.

    En el exterior, a los pies, hay dos torres, una de ellas desmochada. Los arbotantes son posteriores. La portada occidental fue realizada por Violet le Duc en el siglo XIX. Sin embargo, la portada que da a la iglesia fue realizada por el maestro de Cluny en las dos primeras décadas del siglo XII y en el tímpano está representada la Venida del Espíritu Santo.

    LA ESCUELA DE AUVERNIA

    Esta escuela surgió a finales del siglo XI, en la zona de Auvernia, estaba conformada por un grupo de iglesias monásticas inspiradas en las iglesias de peregrinación, que tenían como característica en común la planta de cruz latina con tres naves de dos pisos en un primer piso se ubicaban las arcadas y en el segundo habían tribunas, con aberturas bajas para no permitir que entre tanta luz como en las iglesias de peregrinación, y en el techo, una bóveda de cañón; además había la presencia de un bajo presbiterio, un deambulatorio con cuatro absidiolos ó pequeños absides formando un deambulatorio y un antecoro profundo, tambien poseían un transepto de cinco partes más alto en los tres tramos centrales.

    Sainte - Foy du Conques

    La abadía de Sainte-Foy du Conques era una iglesia abacial situada en la comunidad francesa de Conques, en el departamento del Aveyron, fue considerada como una obra maestra del arte románico del sur de Francia.

    Su construcción fue comenzada entre 1041 y 1052, fue construida en base a una planta de cruz latina con tres naves, un abside profundo con tres capillas a modo de girola, las naves estaban cubiertas con boveda de cañón y arcos de medio punto que caían sobre pilastra; así mismo el transepto se hizó más largo que las naves, por un desnivel en terreno; este hecho fue aprovechado, y se le colocaron dos naves. En el exterior, sobre la fachada alta donde la austeridad y fortaleza no era tan ligera por las piedras policromas, lateralmente, nada interrumpió la verticalidad de los contrafuertes que se elevaban hasta los revestimientos. En el contorno del edificio, se observa la cabecera y la suntuosidad de su elevación piramidal; allí la triple elevación de los volumenes, reflejaba la estructura interior de la iglesia, la cual era muy moderada, el coro estaba formado por un deambulatorio

    Las Iglesias de Peregrinación y el Camino a Santiago

    "A Santiago voy, caminando con fé y mis pasos van marcando, es ruta peregrina que un día tú puedes coger, a Santiago si vas un camino verás, el que conduce a los hombres por un sendero divino de amor y de fraternidad. Viejo camino de fé el mundo entero te sigue. Sendero donde las almas hacen siglos dejan fé. Contigo se va feliz recorriendo tu camino que te dan el corazón. Camino que marcó Dios. Camino Compostelano."

    Después de las catedrales, las iglesias más grandiosas en el Arte Románico, fueron las que se levantaron en las principales ciudades de las distintas rutas de peregrinación, en especial aquellas que se hallaban directamente en la vía. Las amplias dimensiones de estas iglesias de peregrinaje eran fruto de la exigencia de albergar multitudes y su disposición debía ser la adecuada para evitar las aglomeraciones; si bien esto es cierto, la suntuosidad de este tipo de construcciones no se debió ni exclusiva ni primordialmente a las supuestas masas de peregrinos que abarrotaban las iglesias, ya que en la época románica la grandiosidad era lo que provocaba el estremecimiento de lo sublime y la emoción más religiosa de los fieles.

    La más importante de estas iglesias de peregrinación es la de Santiago de Compostela, la cual llego a convertirse en el santuario del mundo cristiano más visitado, superando con mucho a Roma y Jerusalén. “Santos, reyes, caballeros, burgueses, artesanos y campesinos, con o sin cortejo, a pie o a caballo, dejando relatos del viaje o anónimamente, se acercaron a Compostela”.

    El primero de los peregrinos en recorrer la Ruta Jacobea; nombre con el se le conoce al Camino a Santiago; fue Gotescalco obispo de Le Puy, que se dirigió a Compostela, en el año 950, al frente de una gran comitiva. Cesáreo abad de Montserrat, lo hace en 959. En 1065 llega a Compostela una gran peregrinación desde Liège. El conde de Guines y el obispo de Lille peregrinan a Compostela en 1084. Ya en el siglo XI las peregrinaciones se habían incrementado notoriamente, pero es en el Siglo XII donde se da el mayor el apogeo de las peregrinaciones.

    Los peregrinos generalmente salían de Francia y lo hacían en grupo para protegerse mutuamente; las salidas eran desde cuatro puntos distintos: La Vía Tolosana que salía de Arles, La Vía Podense que salía de Le Puy, La Vía Lemovicense que salía de Vezelay y La Vía Turonselle que salía de Orléans; los peregrinos que seguían la ruta de Arles atravesaban los Pirineos por el puerto de Somport. Las otras tres rutas cruzaban los Pirineos a través del paso de Roncesvalles y se fusionaban a la altura de Ostabat; al llegar a España, estas rutas se unían en dos rutas principales: El Camino Aragonés para los que cruzaban los Pirineos por el paso de Somport, y el Camino Francés para los que venían del paso de Roncesvalles; otra ruta más seguía los puertos españoles norteños y la España meridional, para luego seguir un antiguo camino romano llamado la Vía Traiana que los llevaba hasta la ciudad de Compostela, punto final de la peregrinación.

    Igualmente existían dos caminos llamados los caminos lusos, que eran usados por los peregrinos venidos de Portugal y otras zonas, de estos caminos lusos uno era el llamado del interior, el cual, entraba por Villarreal y Chaves, llegando a Galicia por Verín y Orense y el otro camino era el más occidental, que partía de Lisboa.

    El camino inglés era el usado por los peregrinos procedentes de Inglaterra, Irlanda, Escocia e Islandia, partía de los puertos de Plymouth, Bristol, Galway, Dublín y Skaltholt y arribaban al puerto de La Coruña en Galicia. Desde aquí, el camino sigue por los municipios de Culleredo, Cambre, Carral, Ordes y Oroso hasta llegar a Santiago. En ocasiones, los peregrinos británicos desembarcaban en Ferrol, Noia y otros puertos.

    El punto de llegada de todos estos común era la Catedral de Santiago de Compostela, “un milagro pétreo que nació para recibir y acoger a los miles de peregrinos que a través del Camino de Santiago se acercaban a la tumba del Apóstol, un anhelo hecho piedra que mostraba el esplendor de un conjunto histórico y monumental único en el mundo”.

    Esta red de caminos que llevaban a Santiago, por su función difusora de las manifestaciones culturales y a la vez creadora de una identidad común entre los pueblos del viejo continente, fue ratificada como Primer Itinerario Cultural Europeo en 1987 por el Consejo de Europa, y más tarde Patrimonio Cultural de la Humanidad.

    EL ROMÁNICO EN ITALIA Y ESPAÑA

    ITALIA

    El Arte Románico tiene muchas variaciones regionales, una de ellas es la del Arte Románico Italiano, el cual tiene el origen de su desarrollo en la aparición de un estilo Lombardo ó Protorrománico proveniente de la región italiana de Lombardía; “este estilo tenía una gran tradición constructiva heredada desde Roma, con influencias del arte paleocristiano y bizantino, con algunas mejoras gracias a los maestros de obras, los cuales se encargaron de conservar, generación tras generación, la tradición constructiva romana pero con nuevas técnicas, lo que hizo del lombardo un estilo muy novedoso que rápidamente se extendió por el Imperio Alemán y también fuera de este, como en Cataluña y Normandía”.

    Una de las peculiaridades este estilo en Italia es la escasa presencia de deambulatorio y capillas radiales. Además, el frente de las fachadas no esta flanqueado por torres, ya que las torres campanario se van a situar separadas del templo formando una unidad independiente con respecto a la planta de la iglesia; así mismo de forma independiente al templo se encuentra el baptisterio, un templo generalmente de planta circular en la que se aplicaba el bautismo. Igualmente predomina la horizontalidad frente a la verticalidad. No son construcciones tan altas como en Francia. Esto se debe a la influencia del mundo clásico.

    En el románico italiano se distinguen tres zonas clásicas la zona norte, la zona centro y la zona sur

    En la zona norte se origina el primer románico, o románico lombardo, a finales del s. X y abarca hasta la primera mitad s. XI. Las primeras obras románicas fueron abandonas y será a partir de finales del s. XI o principios del XII cuando se reanuden estas construcciones, que se caracterizan por mezclar las formas constructivas y decorativas del primer románico con las formas procedentes de Alemania, en estas construcciones va a estar muy presente la influencia alemana en la que se introducen elementos en la fachada la presencia de diversos pisos de galerías, y también por la presencia de pórticos que se apoyan sobre leones o figuras agachadas.

    En la zona centro destacan las escuelas de Pisa, Florencia y Roma. La característica principal va a ser el fuerte arraigo a las tradiciones clásicas, debido al fuerte peso que tuvo la tradición romana en esta zona.

    La escuela de Pisa es una escuela de origen temprano, aproximadamente de principios del s. XI, y va a tener gran influencia no solo en la ciudad de Pisa, sino también en regiones cercanas.

    “Las fachadas de las iglesias pisanas se caracterizan por estar articuladas por medio de arquerías, arcos ciegos y galerías, que forman una especie de celosía en el muro de las construcciones, dando lugar a frentes muy dinámicos debido al contraste de luces y sombras que se producen en estas galerías; además las construcciones pisanas se caracterizan porque en su mayoría son de planta basilical, de tres naves, a excepción de la Catedral de Pisa, que tiene cinco naves; otra característica de esta escuela es el empleo de mármoles de distintos tonos, normalmente blanco y verdes que crean composiciones a base de líneas horizontales que a la vez que decoran el muro, acentúan la horizontalidad de la iglesia”.

    En la Escuela de Roma, los edificios repiten modelos de la antigüedad y se inspiran en las antiguas basílicas paleocristianas formadas por tres naves longitudinales que rematan en una triple cabecera. En estas iglesias se utiliza como elemento de sostén la alternancia de pilar compuesto y columna. Otra característica es la presencia de dos cuerpos o niveles en altura: arquerías de arcos de medio punto y el cuerpo de ventanas. Las ventanas se sitúan casi a la altura de las cubiertas, dejando un espacio entre los niveles, el cual se decora con pinturas. Domina el muro frente al vano. Se cierran con cubiertas adinteladas de madera. La decoración interna se basa en la alternancia de mármoles polícromos formando mosaicos de dibujos geométricos que invaden las paredes, el pavimento y las columnas.

    Catedral de Módena

    Se llevó a cabo a finales s. XI y principios del XII. La planta es basilical, de tres naves, separadas por la alternancia de pilar compuesto y columnas. Tiene triple cabecera semicilíndrica, una por cada una de las naves. La cabecera central, es de mayor tamaño y está sobre elevada ya que debajo se encuentra una cripta.

    “Aparecen tres cuerpos o niveles en altura: el primero es el cuerpo de arquerías, formada por arcos de medio punto que descansan en pilares compuestos y columnas; el segundo es el cuerpo de tribunas con una falsa tribuna, carece de suelo, su función es decorativa y aligera el muro; y el tercero es el cuerpo de ventanas. En un principio, la nave central se cerró con cubiertas de madera y bóvedas de arista para las naves laterales, pero en el S. XV, ya en época gótica, se sustituye por una bóveda de arista”.

    En cuanto a la fachada, se puede ver que el exterior está articulado por medio de una pequeña galería situada en la parte superior, decorada con arcos de medio punto que descansan en pequeñas columnas. En los pies del templo y en uno de los laterales se abren pórticos formados por arcos de medio punto apoyados en columnas y apoyadas estas a su vez sobre leones, este tipo de pórtico se debe a influencia alemana.

    En la cabecera de la catedral, en el exterior, aparece una pequeña galería que recorre toda la parte alta. El campanario está situado en uno de los laterales de la cabecera y constituye un edificio independiente, no introducido en la misma planta. Este campanario está formado por la sucesión de varios pisos en altura, señalados por bandas lombardas.

    El Grupo de Pisa

    Está compuesto por la Catedral, el Baptisterio, il Campanile ó Torre Inclinada y el Campo santo.

    La Catedral se inicia en el año 1063 para conmemorar una victoria de los pisanos frente al Islam. El arquitecto constructor fue Boschetto, que hizo el proyecto de la catedral de Pisa, y las obras se concluyen por otro arquitecto, Rainaldo, quien hizo la fachada del templo. Es una obra de grandes dimensiones. El material que se emplea es el mármol, blanco y verdea, dispuesto en hiladas que acentúan la horizontalidad del templo. El edificio se origina en planta la unión de tres basílicas al separar cada brazo del crucero. Tiene planta de cruz latina, formada por cinco naves longitudinales y tres naves transversales en los brazos del crucero. La nave central se cubre con cubiertas adinteladas de madera, y bóvedas de arista para cerrar las naves laterales. El espacio central, situado frente al ábside, se cubre con una cúpula elíptica, realizada en piedra y ladrillo, que se lleva a cabo en torno al año 1090. En el exterior de esta cúpula, aparecen algunos elementos góticos como la arquería exterior de la cúpula. En el interior se suceden tres cuerpos o niveles, el primero es un cuerpo de arquerías, con arcos de medio punto que apoyan en columnas clásicas. Muchos de los capiteles son corintios, reaprovechados de edificios romanos; el segundo cuerpo es el de tribunas y el tercero es el de ventanas, que se abren casi a la altura de la cubierta adintelada de madera. A pesar de tener estos tres cuerpos, es una construcción muy horizontal, debido a las hiladas de mármol blanco y verde que acentúan la horizontalidad del edificio. La fachada continúa con esta alternancia de hiladas de mármol, que además crean un juego de color. Cuenta con triple portada, que está articulada por medio de arcos ciegos sobre columnas. En la parte alta, aparecen esas galerías pequeñas que se adaptan a la forma de cubierta en vertiente, que forman esa celosía en el muro y que ayuda a aligerar el peso del muro de los pies de la iglesia a la vez que lo decora. Tanto la fachada principal como el resto de la catedral se decoran con la combinación de arcos ciegos sobre columnas, que hemos visto en el primer nivel, que acogen en su interior mosaicos polícromos, de forma geométrica, y también en las enjutas, siendo el único elemento decorativo del exterior.

    La Torre Inclinada de Pisa está alejada de la planta del templo, como era costumbre en la arquitectura bizantina paleocristiana, fue construida por el arquitecto Bonano de Pisa en colaboración con el arquitecto germano, Guillermo. “Es del último cuarto del S. XII, si bien las obras se tardaron y se terminó en 1271, esto se debió a que en los inicios de su construcción se advirtió una inclinación de la torre debido a la mala cimentación y al consecuente hundimiento del terreno, el cual es arcilloso lo que provoca que el edificio se mueva lentamente y los dos últimos pisos de la torre no se hagan paralelos, sino con forma de cuña para intentar compensar la inclinación de la torre”. Además se incrustan bases y cimientos más fuertes y robustos para evitar que la torre ceda. Es una torre cilíndrica, formada por la sucesión de siete pisos, con un último cuerpo o remate también cilíndrico de menor tamaño destinado a albergar las campanas. El primer piso está decorado con una sucesión de arcos ciegos sobre columnas que repiten la misma disposición de los de la fachada de la iglesia. También es idéntica la decoración del resto de los pisos formados por arquerías de galerías enanas.

    El Baptisterio fue iniciado en 1153 por el arquitecto Deotisalvil; tiene planta circular, con una nave en el interior y otra que circula todo el edificio y una galería abierta en la parte alta. En el espacio central se encuentra la pila bautismal y el edificio se cubre con una cúpula cónica, esta se cubre con otra cúpula semiesférica de la que sobresale la punta del cono de la cúpula original. En el exterior, el muro aparece ornamentado con arquerías ciegas sobre columnas y en la época gótica se añaden a las arquerías unos pináculos. Está rodeado por una especie de deambulatorio de dos niveles, con bóvedas sostenidas por pilares y columnas alternativamente. Un siglo después se añadieron adornos góticos. La cúpula, por su parte, data del siglo XIV. El conjunto se completa con el Campo Santo, decorado en el exterior por arcaturas y en el interior por un pórtico ubicado dentro de un recinto rectangular.

    ESPAÑA

    El Arte Románico en España va a íntimamente relacionado con la peculiar situación política y geográfica en los siglos XI y XII; esto va a imponer una serie de condicionantes especiales, con respecto a otros estados vecinos. La convivencia, a menudo bélica y en otras ocasiones pacífica con el mundo musulmán limita la difusión geográfica de la arquitectura románica a los territorios reconquistados, es por esta razón que el Románico Español sólo se desarrolla en la mitad norte peninsular. “Esta peculiar situación le dotará de una infinita variedad y riqueza, ya que se irá desarrollando en una tierra en lucha constante con otra cultura, poseedora de otra religión y de una estética tan poderosa como la occidental. Desde este punto de vista, el arte románico español se presenta como la afirmación de occidentalidad de un pueblo, un arte beligerante, de unidad cristiana y europea, frente al enemigo musulmán y su estética oriental”.

    En España, este estilo se desarrolla a partir de dos focos: el Camino de Santiago y Cataluña. El Camino de Santiago tendrá un destacado papel en la génesis y formación del estilo mediante las edificaciones que se erigen a lo largo del mismo. A lo largo de esta ruta de peregrinación, se introducirán en España todas las soluciones francesas, y pasarán a Europa las influencias españolas.

    En Cataluña, la existencia de la Marca Hispánica, ligada a la Europa Cristiana, hizo que se conservasen formas constructivas tradicionales que acabaron desarrollando, junto con la arquitectura de los maestros de los maestros italianos, “lo que se ha dado en llamar el primer románico español, que se caracteriza por el empleo rústico del aparejo de sillería y la decoración de paramentos mediante arquillos ciegos ó las denominadas bandas lombardas, esto hará que el románico se nutra de toda esa cultura, ya que las dos áreas no se mantuvieron aisladas, sino que existió un continuo intercambio, que acabará manifestándose en la decoración, en los temas y en las técnicas utilizadas”.

    El Primer Románico se desarrolla a lo largo de las décadas finales del siglo X y durante parte del XI. Como características distintivas de este primer periodo están el empleo de piedra cuadrada pero no pulida, las cabeceras son adornadas con pequeños arcos y bandas rítmicamente dispuestas, los templos se cubren con bóvedas pétreas de cañón, las naves son más amplias y elevadas y se emplean los pilares como sustentación, en lugar de la columna. Uno de los ejemplos más destacados esta en la Seo de Urgel. Este estilo se extenderá hacía el Pirineo aragonés donde tenemos obras tan representativas como la de San Juan de la Peña.

    El desarrollo del Románico Pleno, constituye la época dorada del estilo por su calidad y belleza; se extiende en la última mitad del siglo XI y la primera del XII; vino procedente de Francia y fue transmitido principalmente por las rutas de peregrinación. Es un estilo de líneas y volúmenes armónicos, ricos en escultura en fachadas, puertas, ventanas, canecillos, etc.

    Durante el siglo XI, a través del Camino de Santiago, el románico se extenderá por las tierras noroccidentales de Castilla; es el Románico de las grandes rutas jacobeas que, partiendo de ciudades francesas como Arlés, Le Puy, Vézelay y Orleáns, recorría el norte de España pasando por ciudades como Jaca, Leyre, Sangüesa, Puente la Reina, Eunate, Estella, Santo Domingo de la Calzada, Burgos, Frómista, Carrión, Sahagún de Campos, León, Ponferrada, y tras atravesar Galicia, llegaba a Santiago de Compostela. Estas rutas se extienden en una serie de monumentos que se presentan como la gran síntesis española del románico internacional, integrando en él todo el sustrato cultural heredado del arte hispánico prerrománico. El siglo XII va a ser, ante todo, el siglo de la popularización y nacionalización del románico. Tanto en Castilla como en Cataluña, no queda aldea sin su correspondiente iglesia románica, a las que se unirán las grandes construcciones de monasterios y catedrales.

    En este segundo románico, especialmente para sus manifestaciones más tardías, tendrá una importancia determinante la introducción de la Orden del Cister en España con un programa arquitectónico desornamentado. En Galicia la construcción de la catedral de Santiago determina las restantes construcciones, aunque se irán popularizando y permanecerán durante un largo tiempo. Uno sus ejemplos más destacados es la iglesia de Santa María la Real. En Castilla y León el modelo más influyente es San Martín de Frómista; esto se refleja en la iglesia leonesa de San Vicente en Ávila. En Zamora, el románico de su catedral, junto a la de Salamanca, presenta igualmente elementos románicos. Fundamentalmente, serán las provincias de Soria y Segovia las productoras de una nueva y especial tipología de iglesia románica: son iglesias de una sola nave con galería porticada adosada en su lado meridional. Desde Soria y Segovia se extenderán a toda Castilla encontrándose ejemplo de este la iglesia de San Miguel, en San Esteban de Gormaz.

    El Románico, totalmente popularizado, permanecerá como estilo constructivo de innumerables iglesias rurales en todo el reino de Castilla a lo largo de una buena parte del siglo XIII. Incorpora en su estructura, los elementos arquitectónicos que habían sido utilizados en la arquitectura cisterciense, como son la bóveda nervada o los arcos apuntados. La estructura románica como modelo constructivo se mantendrá en siglos posteriores en estas comarcas rurales.

    Catedral de Santa Marìa de Seo de Urgel

    La construcción de la Catedral de Santa María de Seo de Urgell fue iniciada durante el siglo XII. Tenía planta de cruz latina, con tres naves, un gran ábside central con un absidiolo interno, cuatro ábsides laterales, y crucero muy alargado que terminaba con dos torres; así mismo, la cabecera tenía un ábside semicircular, en el que se abría una profunda exedra y otros cuatro ábsides en el muro del crucero; todo ello cubierto con bóveda de cañón en la nave central y de aristas en las laterales, con arcos de medio punto, que caían sobre pilares cruciformes con capiteles que presentaban temas vegetales, así como figuras de animales. En el exterior destacaba la fachada principal flanqueada por dos torres y tres puertas de entrada, la central rematada con un frontón con decoración visigoda, tambien la galería de arcos apoyados en columnas pares que decoraba el ábside central.

    Catedral de Santiago de Compostela

    Esta iglesia es la realización máxima del románico español y meta final del famoso Camino de Santiago. Empezó a construirse en el año 1075 sobre la tumba del apóstol Santiago el Mayor, descubierta en el año 813.

    En el siglo XI, se emprendió la construcción de la gran catedral, en la que se reunieron todas las soluciones técnicas descubiertas hasta el momento. El edificio está casi en su totalidad construido en granito de Galicia. La planta es de cruz latina con tres naves en el sentido longitudinal y tres en el crucero, las cuales dan entrada a la girola. La nave principal está cubierta con bóveda de cañón; las naves laterales, que son más bajas con bóvedas de crucería; las naves están separadas por pilastras macizas con columnas adosadas; un elegante pasillo con balcones se extiende sobre estas naves laterales rodeando todo el templo. Los grandes ventanales dan al interior una nota adecuada de luz. Sobre el cruce del transepto se alza la cúpula octogonal apoyada sobre tambor y circundada por una galería con balaustrada de piedra, columnas bizantinas y rasgados ventanales. En el medio de la iglesia, por medio de un sistema de poleas en un armazón de hierro, pende el gran Botafumeiro

    La capilla mayor conserva su estructura románica, con añadiduras barrocas posteriores que se ven en las antiguas columnas y pilares de granito, las cuales están recubiertos de finos mármoles y de jaspes. El altar es de mármol y está revestido de plata en la cortina. El sagrario, la capilla con la imagen del apóstol, los púlpitos de bronce, las rejas, el baldaquino y las lámparas forman un recargado conjunto de un riquísimo barroco.

    Debajo de esta capilla, y más concretamente del altar, se halla la cripta a la que se desciende desde ambos lados de la girola. En ella se encuentra la tumba de apóstol, cuyo sepulcro romano está cubierto por una urna de plata cincelada en el siglo XIX sobre modelo románico. En el centro de la nave central se encuentra el coro, con sillería tallada en el siglo XVI en estilo grecorromano, en él se hallan colocados dos grandes órganos.

    La sacristía presenta una portada plateresca con buenos relieves, a través de ella se accede al gran claustro, uno de los más hermosos que existen en España. De planta cuadrada, fue construido en el siglo XVI según planos del arquitecto Juan de Álava.

    El exterior de la catedral tiene magnificencia y celebridad, el famosísimo Pórtico de la Gloria, es una excelencia en cuanto a iconografía, es la joya escultórica más preciada del templo y la cumbre del románico español. Fue labrado en granito de la región por el maestro Mateo en el siglo XII y está ejecutado con una extraordinaria profusión de figuras exentas o adosadas a las columnas: Cristo, apóstoles, santos, profetas, ángeles, fieles, monstruos simbólicos, instrumentos músicos, flora, fauna, escenas de pasajes de la Biblia y de los Evangelios; así mismo los rostros, las posturas, los ropajes son de un tal realismo que sólo les falta el movimiento para ser una escena viva.

    La fachada más antigua de la catedral es la de las Platerías, esta gran portada es románica, con dos pisos y dos puertas de acceso separadas por un haz de columnas; encima de cada una de estas puertas hay un tímpano con escenas de la vida y pasión de Cristo y diversas figuras en las jambas; sobre ambos arcos de medio punto corre unido un friso de figuras de perfecta armonía.

    Otra de las fachadas es la de la Quintana, que da acceso a una plaza con su mismo nombre. Corresponde a la cabecera del templo catedralicio y en ella se halla la Puerta Santa; tiene doscientas figuras maravillosamente talladas; en el centro, una columna de varias articulaciones sostiene el tímpano, y ante ella, en otra columna, la imagen sedente de San Santiago. En el tímpano aparece un Cristo entronizado, rodeado de ángeles enmarcados por cuarenta ejércitos celestiales; en las arquivoltas, los veinticuatro ancianos del Apocalipsis tocando instrumentos musicales. Y los pilares, a derecha e izquierda, están rodeados de columnas profusamente esculpidas con las figuras del Antiguo y Nuevo testamento. Todo el conjunto de esta monumental fachada forma un gigantesco retablo de piedra, suma y síntesis del arte barroco. La base de la fachada está elevada del nivel del suelo, y a ella se llega por una majestuosa escalinata doble a dos vertientes proyectada por el arquitecto Fernando de Casas y Novoa. El conjunto de esta composición posee gran armonía y equilibrio. El cuerpo central está flanqueado por dos torres. La profusa decoración es de sorprendente factura y se debe especialmente a artífices compostelanos.

    Catedral de Zamora

    La Catedral de Zamora fue construida a mediados del siglo XII; como una gran construcción de tres naves, crucero y tres ábsides; con una torre robusta a los pies del templo; así mismo poseía un juego de arquerías ciegas con columnas estriadas y cornisas con arquillos o pequeños arcos; que formaban una elegante articulación con las arquerías, impostas, y esculturas; además poseía una portada compuesta por tres arcos que descansaban en dos largas columnas de fuste estriado; así mismo tenía una torre campanario, recia y pesada, de planta cuadrada que constaba de cinco cuerpos y un gran cimborrio, que descansaba sobre un tambor cilíndrico en el que se elevaba una cúpula gallonada a la que se adosaron cuatro torrecillas, decoradas con escamas.

    El Monasterio de Santo Domingo de Silos

    Este monasterio se remontaba a la época visigótica, tenía una iglesia románica, desaparecida por completo con tres naves y cinco ábsides; sin embargo lo más interesante es la presencia de un claustro ó galería que servia de lugar de meditación a los monjes, era de dos pisos, con forma rectangular y 16 arcos de medio punto en los lados más largos, y 14 arcos en los otro lados, estos arcos descansaban sobre columnas dobles con capiteles; mucho de ellos tienen temas vegetales; así mismo hay la presencia de aves y animales pertenecientes a los bestiarios, los cuales seran analizados más adelante.

    Escultura

    “En la época románica se produce un cambio importante en la escultura, ya que los siglos XI y XII se caracterizan por un renacimiento escultórico; esto debido a que la escultura había estado en decadencia desde los últimos tiempos del Imperio Romano. Con este renacimiento triunfa la escultura, ya que se produce una armonía entre el edificio y la ornamentación escultórica”.

    En la época románica, el arquitecto también cumplía las funciones de escultor, con lo cual, el ejercicio por parte de una misma persona de estos dos oficios va a ser lo que proporcione esta armonía entre la estructura arquitectónica y lo esculpido.

    En esta época aparece y tiene su desarrollo un nuevo tipo de escultura: la escultura monumental; cuyos sus inicios se dan en los capiteles en los que se incluyen temas religiosos para su decoración, y en los que se sigue manteniendo la hoja de acanto, que aparece junto a temas bíblicos y va a ser a partir de la segunda mitad del S. XI cuando se lleven a cabo las obras escultóricas más importantes y más logradas, con capiteles historiados, en los cuales ya no está presente la hoja de acanto, así mismo desaparecen las formas vegetales, y a partir de la última época del románico, la figura se adapta a la forma cúbica del capitel.

    La Escultura Románica va a nacer para cumplir una función muy importante, la didáctica, ya que Enseñaba a los fieles, por lo general analfabetos, los dogmas y principios del Cristianismo. En un mundo teocéntrico, dominado culturalmente por la Iglesia, las imágenes debían instruir y excitar a la piedad a los fieles, enseñándoles los caminos para llegar al otro mundo. El hombre, creado por Dios, pecador y condenado al trabajo, debía huir de este mundo para salvarse imitando la vida de Cristo y de los santos, que se le ofrecían como modelo. Estos seres excepcionales, llenos de virtudes, habían logrado huir del placer y los vicios de la vida cotidiana y vencer al Maligno. Los hombres debían hacer lo mismo para evitar sufrir horribles castigos en el Infierno; el papel que va a jugar la iglesia en este sentido va a ser primordial, sobre todo va a tener una gran importancia la orden de Cluny. Esta orden monástica utiliza la escultura como medio de enseñar a la población y adoctrinar dentro de la religión a las masas de población inculta. De ahí que la escultura invada todo el edificio, por dentro y por fuera, sobre todo en el exterior, donde se acumulan las representaciones escultóricas en torno a las portadas esculpidas características de los templos románicos.

    Todas estas obras van a tener una finalidad didáctica, eran obras para ser explicadas por el abad o el párroco y ser enseñadas al pueblo”. Sin embargo, a pesar de que la finalidad doctrinal va a ser la principal, hay proyectos escultóricos más complejos en cuanto a la iconografía, que estaban dirigidos a la minoría, constituida por las capas altas de la iglesia que tenían mayor instrucción y preparación. Son sobre todo temas religiosos, que están rodeados por inscripciones que ayudan a interpretar las escenas que representan.

    La localización de estas obras se concentra principalmente en las fachadas de las iglesias, el interior del templo, y en los claustros. Estas dos últimas zonas tuvieron un gran auge y desarrollo en la época del Románico Pleno. Destacan los altorrelieves de las portadas, que gozan de mayor importancia dentro del campo escultórico. Se decoran los tímpanos, arquivoltas, parteluz y jambas en los cuales se multiplican los relieves escultóricos e incluso en ocasiones la escultura llega a cubrir casi la totalidad de la fachada principal del templo, además de estas zonas, se encuentran esculturas en los canecillos o modillones que soportan el alero del tejado del templo. “La escultura de estas zonas tiene un carácter más popular, teniendo el escultor cierta libertad temática, en cuanto a temas obscenos, crítica a la iglesia y crítica a las costumbres de la época”. No solo la decoración se centra en las portadas, también vamos a ver decoración en la propia puerta, principalmente se decoran las puertas de las iglesias. Se llevan a cabo en madera o bronce, que aparecen enmarcados por un ribete o cenefa vegetal que divide la puerta en recuadros en cuyo interior se representan temas bíblicos del antiguo y del nuevo testamento.

    Estas primeras obras gozaron de una gran difusión, se expandieron por toda Europa gracias a la orden de Cluny y a las peregrinaciones a Santiago de Compostela; así mismo se extienden por toda Europa los programas iconográficos, permitiendo por toda Europa el desarrollo de la escultura monumental.

    A partir de estas primeras manifestaciones escultóricas, la decoración pasó a colocarse en las grandes portadas de los templos. La escultura de estas zonas se caracterizó por seguir la estética de lo feo, de lo monstruoso, con el fin de impresionar al fiel y adoctrinarlo. La belleza formal no existe como culto, independientemente de que los resultados sean bellos, sino que dentro del programa románico, está reservada a lo divino: la representación bella del bien frente a la fea del mal. Esta estética de la fealdad, sirvió a la representación del horror: el pecado se representó en su faceta más repugnante, para intentar llamar la atención de las conciencias.

    En estas portadas se verá como se multiplican los temas que aluden al mal y al pecado, como la lujuria, la avaricia, que eran pecados mortales muy castigados y criticados en la época y que se representan en estas portadas con el fin de representar la repulsa ante el pecado de la carne y el rechazo por el afán del dinero.

    dependencia de la escultura con la arquitectura.

    La Escultura Románica tuvo su importancia en el edificio eclesial, esto se hizo posible gracias a la incorporación de escultores en las cuadrillas ambulantes de maestros de obras, los cuales irán incorporando la decoración esculpida a la propia arquitectura en capiteles, frisos, cimacios, molduras, arcos, tímpanos, etc.

    Esta estrecha colaboración entre escultores y arquitectos hizo posible que en el siglo XII, la escultura de tipo monumental no pudiese imaginarse fuera de su soporte vital, la arquitectura eclesiástica; en la que se creaban la mayor parte de las escenas decorativas. La particularidad de depender del soporte arquitectónico, hizo que esta escultura adquiriera dentro de él sus formas precisas, ajustándose las figuras a la estructura del capitel, alargándose en las jambas o empequeñeciéndose en las dovelas de un arco. Esta dependencia y el carácter didáctico de la decoración, hizo que existiera una despreocupación por la belleza formal, la simetría y la proporción, primando un principio de claridad expositiva frente a una ilusión espacial o una acción dramática, esto hizo que la simplificación en los métodos de representación permitiese expresar el mundo sobrenatural mediante un simbolismo muy sutil.

    Uno de los elementos que van a caracterizar la dependencia de la escultura monumental es el empleo de la llamada ley de jerarquía, según la cual, se debe representar a un mayor tamaño los personajes principales, es decir Cristo, la Virgen y los Santos. Esta ley de jerarquía fue una de las influencias paleocristiana y bizantina, que la aplicaron en su momento y que en la época románica pervivió en las representaciones escultóricas. Cuando aparecía la figura de Cristo, este ocupaba el lugar principal y en torno a él, se disponían de menor tamaño el resto de los personajes. El empleo de esta ley tenía la función de alejar a la divinidad de los hombres, evitando la familiaridad con estos personajes y fomentando el respeto.

    Otra de las características es la ley de adaptación al marco arquitectónico. Esta ley trajo consigo el que los personajes, los animales y objetos representados se acomodaran al lugar arquitectónico que ocupaban, ya fuese un fuste, capitel, jamba, arquivolta, etc. Si el marco arquitectónico tenía forma cuadrada, las figuras aparecían achaparradas y si por el contrario, el marco resultaba excesivamente largo, la figura se alargaba también con respecto al canon que debía tener, esto se lograba con un elemento esencial, el horror vacui o la tendencia a llenar todos los espacios con elementos decorativos. De este modo, la escultura inundaba todo el marco arquitectónico en el cual se localizaba.

    También apareció como característica, la tendencia de las figuras al esquematismo, tanto en las representaciones animales como en las humanas, e incluso en las representaciones vegetales, ya que la escultura de esta época se caracterizó por volver la espalda a la naturaleza y lo que interesaba era captar la idea, sin respetar el tamaño y peso de las cosas o figuras representadas.

    Los Programas Iconográficos.

    El principal objetivo que rigió la escultura románica fue el de comunicar y transmitir ideas mediante meticulosos temas iconográficos dirigidos a un público analfabeto; estos programas iconográficos que se encontraban iglesias y catedrales se convirtieron en verdaderas Biblias de piedra.

    En el comienzo del románico prevalecieron las escenas del Antiguo Testamento pero luego adquirieron fuerza las historias del Nuevo Testamento; las escenas de la Natividad, la Anunciación, y la visita de los reyes, adquirieron especial importancia, pero la escena más usada es la del Juicio Final con Cristo en Majestad ó Pantocrátor bajando desde los Cielos por la mandorla, un marco en forma de almendra que rodea a Cristo, rodeado por los cuatro evangelistas en forma de Tetramorfos y en ocasiones aparece el peso de las almas; la figura de María era frecuente con el Niño sentado en sus rodillas bendiciendo.

    En la época románica, aparece por primera vez la representación de los bestiarios, que se apodera del mundo románico que los sacraliza convirtiendo a los animales, tanto reales como imaginarios, en portadores de virtudes o perversiones, por lo que su aparición en capiteles, canecillos, tímpanos, etc. es reinventada y usada con sentido de enseñanza y advertencia.

    Los bestiarios fueron creados por combinación de partes de animales diferentes, su estampa, en ocasiones atroz, se reforzaba mediante lucha con hombres indefensos, con el objetivo de conmover para renegar del pecado, ya que el románico usó ciertos animales con predilección para manifestar el bien y otros como formas del mal y del diablo.

    Entre los animales que representaban el bien están las aves en general, a menudo por comparación con el alma, ya que pueden ascender y alejarse de lo terrenal en busca del Cielo, y en ocasiones se les representa picando sus patas para poder despegar de la tierra y poder volar hacia el cielo. También el león o el águila por su fuerza y nobleza suelen representar valores positivos, inclusive al propio Cristo. Es frecuente encontrar leones, águilas y grifos unas criaturas con alas de águila y cuerpo de león, en las enjutas de las portadas, como guardianes del templo. Un ave especialmente representada como ejemplo del bien es la cigüeña, por su carácter de ave de buen agüero. En el grupo de los animales frecuentemente relacionados con el mal solemos encontrar al mono, como caricatura grotesca del hombre, la serpiente, símbolo por antonomasia del pecado y del demonio, la liebre y el conejo asociados con la lujuria por su fertilidad, el jabalí y el cerdo por ser la lujuriosos, sucios y perezosos, la cabra, el macho cabrío, etc.

    Iglesia de Saint - Genis - des - Fontaines

    Es una de las obras más tempranas que se conservan dentro de la escultura monumental Francesa. Se trata de un dintel que forma parte de la portada del templo y contiene en su interior una inscripción en la que se data la obra 1020. Esta obra guarda un gran paralelismo con la miniatura de época visigoda, lo cual es evidente con la presencia de arcos de herradura y también presente en la técnica empleada en los paños pegados al cuerpo y en los pliegues concéntricos con los que se llevan a cabo las vestimentas de los Santos, Ángeles y Cristo.

    El Tema es el Cristo Majestad rodeado por la mandorla mística que es sostenida a ambos lados por ángeles. En torno al tema central se sitúan 6 santos, 3 a cada lado, que están enmarcados con arcos de herradura. Solo se identifica a San Pedro, por llevar la llave en la mano. Todo el dintel aparece enmarcado por un friso vegetal tallado con gran perfección comparado con el resto. Los rostros y ropajes están a penas insinuados. Esta torpe elaboración contrasta con la riqueza y calidad del friso. La técnica empleada es bastante sencilla, no hay proporción en los cuerpos ya que las cabezas son más grandes que el cuerpo. El modelado es mucho más simple ya que con unos cuantos trazos se resuelve la composición.

    Iglesia Abacial de Saint Pierre en Moissac.

    La iglesia abacial de Moissac es uno de los conjuntos monásticos más importantes de Francia. Esta iglesia tiene un claustro, uno de los más antiguos que se conservan en el territorio francés, que a pesar de haber sido modificado en el S. XIII conserva aun los capiteles y las columnas originales de la época románica. Es un claustro que se lleva a cabo en torno al año 1100. Esta fecha aparece en uno de los pilares del claustro. Presenta una decoración escultórica tanto en los capiteles como en los machones ó pilares que actúan como contrafuerte, situados en zonas de mayor refuerzo o esquinas.

    Los temas predominantes en los capiteles son fundamentalmente temas bíblicos, monstruos, demonios, y una decoración formada por bandas geométricas y tallos con hojas. En los machones se representan a los Apóstoles San Pedro y San Pablo. El modelado es suave y los cuerpos están realizados de manera torpe, las figuras ocupan todo el frente, son de gran tamaño, y están enmarcadas con arcos de medio punto sobre columnas.

    La portada de esta iglesia de San Pedro de Moissac es de una época más tardía que la escultura del claustro, fue llevada a cabo aproximadamente sobre 1130 y se concluye en 1135. El tema principal se localiza en el tímpano, en él que se llevan a cabo escenas del Apocalipsis; estos relieves no solo se llevan a cabo en la portada, sino también en los muros laterales de la fachada, en el parteluz y en las jambas. Destaca el dintel, distinto al resto de la escultura en cuanto al tema y el material. El material es más claro que el resto de la portada y no se representan temas figurados sino motivos naturales como las rosetas. “Es en el tímpano donde se encuentra la decoración más rica, ya que representa a Cristo en Majestad ó Pantocrátor, rodeado por un tetramorfo y alrededor los 24 ancianos del Apocalipsis, que se colocan en tres bandas superpuestas con formas onduladas. Estos 24 ancianos dirigen su mirada a Cristo, y están representados con distintas posturas, dando la sensación de movimiento, dinamismo en contraposición de la inmovilidad de Cristo, representado inmóvil y con rasgos de hieratismo en el rostro. Este hieratismo es evidente, es un Cristo todopoderoso, alejado de los hombres”.

    Está presente también la ley de jerarquía, Cristo es de mayor tamaño y de modelado más grueso que el resto de la composición. Algunos llevan una cítara, cada uno con un atributo distinto que les diferencian. La escultura también decora el parteluz o columna que soporta el tímpano; aquí se suceden monstruos y animales diabólicos que simbolizan el mal y el pecado. En las jambas se representa a San Pedro y San Pablo. En las bandas laterales de los muros se suceden distintas escenas dispuestas de dos formas distintas, o bien frisos corridos o enmarcados en galerías de medio punto. Se representan varias escenas, hay escenas que representan la visitación a María, también hay escenas de la infancia de Cristo, localizadas en el muro derecho. “En la parte de la izquierda se representan parábolas, la del rico Epulón y el pobre Lázaro, que simboliza la salvación del pobre y la condenación del rico. También en este lado de la izquierda se representa la lucha contra los distintos pecados, lujuria y avaricia”.

    Saint Lazare de Autun

    En esta iglesia se encuentran grandes realizaciones escultóricas, las cuales se realizaron en el año 1140, dato que aparece en la portada junto al nombre del maestro escultor que la llevó a cabo, Gislebertus.

    En el tímpano se halla representado el juicio final con el peso de las almas; en el centro y a mayor tamaño se encuentra el pantocrátor, cumpliendo así la ley de jerarquía, reafirmada por el hieratismo en el rostro y el carácter majestuoso con que se representa a Jesús. A la izquierda de Cristo se representa a los condenados en el infierno, y a la derecha los benditos, los justos, en esta composición el artista se recrea en los pecadores en los artista pone una mayor imaginación, hay una contradicción entre los personajes de la derecha y de la izquierda, ya que llama la atención el movimiento de las figuras de la izquierda frente a la calma de los que entran en el paraíso a la derecha. El artista representa a los personajes que están en el infierno con una mayor expresividad en los rostros, se retuercen de dolor, incluso se incluyen temas anecdóticos como el demonio equilibrando las almas y otro demonio desequilibrando la balanza.

    En esta misma iglesia, tenemos otro relieve fundamental por su gran riqueza decorativa, Es un dintel que se localiza en otra de las puertas del templo y en el cual se representa a Eva en el paraíso, cogiendo la manzana, esta obra se halla fragmentada, ya que la parte que estaría representado Adán se ha perdido; la postura del personaje llama mucho la atención, ya que está casi tumbada, reptando a modo de serpiente, tratando de simbolizar la caída en el pecado. Eva aparece aquí representada como una penitente que se arrastra, para remover la conciencia del fiel, alejarle del pecado original que cometió al coger la manzana.

    Portada de la Iglesia de Santa Fe de Conques

    Esta iglesia se encuentra en la vía de peregrinación que sale de Puy. Es una iglesia del S. XII. El tímpano, realizado en 1130, constituye una de las representaciones más importantes del Juicio Final con respecto a los relieves franceses. En el centro, en mayor tamaño, aparece un pantocrátor apocalíptico, rodeado de la mandorla mística. Detrás una gran cruz sostenida en la parte alta por dos ángeles y otros dos a sus lados con trompetas que anuncian la llegada del fin del mundo.

    En tono a la escena principal y en bandas horizontales se representan escenas explicadas por medio de inscripciones. A la derecha de Cristo se representa a los benditos para estar en el cielo y a la izquierda, al grupo de los condenados al infierno, en el que domina el horror, el mal...

    En la banda inferior, “hay dos formas arquitectónicas separadas por un muro, en la parte derecha, está san Pedro recibiendo a los elegidos abriéndolas puerta del cielo. Los elegidos están cubiertos con galerías. En el centro está Abraham, que acoge a los elegidos. En la parte de la izquierda se representa a los condenados introducidos en el infierno a través de la boca de un gran monstruo que los engulle. En los atributos terrenales aparece; un caballero que cede su montura, un usurero que tiene una bolsa con dinero colgado del cuello que le ahoga, escenas de lujuria, mentira, falsificación de monedas; en el infierno domina el caos, las figuras monstruosas y grotescas en contraposición de las escenas del cielo, cuyas figuras tienen mayor belleza formal, reforzado con el orden y serenidad que proporcionan los arcos sobre los personajes, dando sensación de quietud”.

    Pórtico de la Gloria de la catedral de Santiago de Compostela

    El Pórtico de la Gloria de la Catedral Compostelana, era la obra cumbre de la Escultura Románica; fue elaborada por el Maestro Mateo, arquitecto y constructor de la época, que supo plasmar en piedra un denso mensaje teológico con un fuerte mensaje catequético que respondía a su condición de fachada principal de la Iglesia meta del Camino de peregrinos, por lo que era un mensaje dirigido a ellos,.recordándole a través de su caridad y de su arte lo que estaba simbolizando con su esfuerzo y sacrificio.

    El Maestro Mateo supo resumir en este pórtico, “el significado simbólico del Santuario Apostólico, representada en la Jerusalén Celestial; asi como el corona su peregrinación abrazando la columna sobre la que descansa la estatua sedente de Santiago, así también la humanidad entera coronará el esfuerzo de su historia resucitando e incorporándose al Reino de Dios en plenitud, realizado en la magnífica iconografía del Pórtico de la Gloria”,

    Para su elaboración, el maestro Mateo se basó en el Apocalipsis de San Juan, según la cual el templo apostólico es el símbolo de la nueva Jerusalén que desciende del Cielo como una esposa que va al encuentro con su prometido. Se trataba pues de una representación de la ciudad Celestial, representada con símbolos provenientes del Apocalipsis de San Juan.

    En el tímpano se representaba una escena con una imagen mayestática e hierática de Cristo, las cicatrices de las llagas en manos y pies, con unas vestiduras que querían demostrar su realeza y su sacerdocio, a su lado ocho ángeles llevaban los instrumentos de la pasión: la columna de la flagelación, la Cruz, la corona de espinas, los tres clavos y la lanza; un pergamino y una jarra, que aludían a la sentencia y lavatorio de manos de Pilato; y por último una caña, esponja y una tabla en la que se leía la inscripción INRI; al lado de esta escena se encontraban los cuatro evangelistas, que escribían los evangelios sobre cada uno de sus símbolos ó tetramorfos, junto a ellos aparecían dos ángeles con incensarios.

    Así mismo, aparecían veinticuatro ancianos que representan a los sacerdotes del antiguo templo de Jerusalén, los cuales se sentaban en una especie de sofá y dialogaban entre si vistiendo túnicas blancas y sobre sus cabezas llevaban una corona de oro. En los espacios curvos del tímpano para plasmar la descripción de los elegidos, se encontraban treinta y ocho figuras humanas divididas en dos paneles “en el inferior estaban las 12 tribus de Israel y en el superior, la turba celeste que nadie podía contar, y que estaba delante del trono y del Cordero”.

    Esta gran iconografía apocaliptica descansaba sobre columnas, en las que habían figuras que pertenecían tanto al Antiguo como al Nuevo Testamento, en el lado izquierdo se hallaba un Moisés con las Tablas de la Ley en su mano; junto a los profetas Isaías; Daniel y Jeremías; y en el lado derecho estaban San Pedro, con las llaves en la mano; San Pablo, Santiago, y San Juan; igualmente el maestro Mateo, expresó la presencia de los llamados ángeles de la guarda, que por encima de las figuras de los apóstoles y profetas acompañaban a los que perdieron la gracia divina; también aparecían un par de ángeles serafines que estan de pie ante el trono de cristo; en los ángulos del pórtico habían cuatro ángeles que tocaban las trompetas de apocalipsis y congregaban a los elegidos de los cuatro puntos cardinales, los cuales se representan en las puertas laterales.

    Pintura

    En la época románica la pintura alcanzó un alto nivel, lo que le permitió estar estrechamente unida y subordinada a la arquitectura; esta dependencia se dió a través de la pintura mural ó al fresco, la cual “estaba sometida a un proceso de abstracción como el resultado de un poder expresivo en el que hablaban las figuras a través de una seriedad implacable, sirviéndose del gesto para manifestar sus pensamientos. El esquema de las figuras y de las escenas era por demás sencillo. El artista prescindió casi del paisaje, tampoco se interesó por la perspectiva, aunque si buscó el graduar la profundidad del cuadro por medio de franjas paralelas de diversos colores”.

    La pintura mural románica era una pintura bidimensional, sometida a un soporte que estaba determinado por la arquitectura; “las figuras se iban construyendo según ejes verticales y horizontales de simetría y el espacio se fue convirtiendo en algo bidimensional, en el que la línea era el elemento predominante, dando forma a las figuras y definiendo las zonas donde se aplicarían los colores”.

    La decoración mural románica fue usada para decorar las partes de la iglesia; en la cabecera generalmente se ubicaba un Pantocrátor, colocado dentro de una mandorla, sostenida por ángeles o rodeada por un tetramorfo; otras veces se presentaba una Virgen con el niño en el regazo bendiciendo. Por la bóveda y los muros de la iglesia se repartían diferentes escenas de forma rectangular con temas del Apocalipsis, del Génesis, Nuevo Testamento.

    Las características representativas de la pintura románica eran las mismas que en la escultura: había hieratismo, rigidez, frontalidad, e inexpresión en los rostros, ya que la finalidad era la de separar lo religioso de lo terrenal; sin embargo, habían escenas de carácter más popular como las representaciones de vidas de santos, en los que el pintor se permitía una mayor expresión en el rostro, y un mayor movimiento en esas escenas narrativas; todas estas imágenes aparecían rodeadas de inscripciones que aclaraban quién era la figura representada y sus virtudes, de modo que sirviera de modelo de vida a los fieles.

    Una parte importante fue la pintura miniada, la cual adquirió un gran auge, gracias a la decoración de libros de gran tamaño con decoración a página llena, bordes, viñetas y las iniciales en gran tamaño envolviendo una escena dentro de un gran tallo para realzar los comienzos de cada capítulo. Los fondos de las escenas eran generalmente planos y hechos a bases de laminillas de oro pegadas.

    PINTURA MINIADA EN LOS Libros

    La producción de libros aumentó enormemente durante el Románico, experimentando una multiplicidad de variaciones hasta entonces nunca vista, sobre todo entre los libros de contenido religioso. En lugar preeminente estaban los libros de uso litúrgico y, entre ellos, los más lujosos eran los evangeliarios.

    El evangeliario, era el libro litúrgico más importante, “contenía los textos completos de los cuatros evangelistas en lo que se conoce como orden canónico: San Mateo, San Marcos, San Lucas y San Juan, estos textos, siempre estaban precedidos por unas listas que enumeraban los pasajes que coincidían en los distintos evangelios, estas concordancias estaban enmarcadas por columnas y arcos que sustentaban un frontispicio; y cada evangelio estaba antecedido por una imagen del respectivo evangelista representado por su símbolo tetramórfico, enmarcado con estructuras arquitectónicas, así mismo el evangeliario era encuadernado lujosamente”. Un tipo particular de evangeliario era “el libro de perícopos ó misal, este contenía solamente los textos de los evangelios previstos para leerse en las misas de los domingos y días festivos establecidos por el calendario litúrgico; su estructura era muy similar a la de los evangeliarios, pero presentaban imágenes alusivas a las festividades eclesiásticas o a los santos y patronos más destacados”.

    “El sacramentario era otro libro litúrgico importante, contenía las oraciones y fórmulas de consagración que se leían en las misas de los distintos ciclos litúrgicos. Cada texto se iniciaba con una T que por su aspecto cruciforme, permitía su iluminación con un crucifijo, la imagen canónica, en el siglo XIII, fue sustituido por el misal, que comenzó a usarse tanto en la misa como en el coro. El antifonario, un libro importante, contenía las partituras y textos de los cantos litúrgicos dialogados; utilizado ya desde el siglo II, este libro contenía ilustraciones con escenas de las vidas de Jesús y de la Virgen María y también imágenes de algunos de los santos más importantes que se celebran en el año litúrgico”.

    Además de estos libros litúrgicos, fue generalizándose el uso de libros religiosos para seglares; uno de ellos era “el salterio llamado así porque contenía los 150 salmos, este estaba destinado para el uso en el coro, luego se uso como libro de oraciones y más tarde evolucionó como libro de horas”. Mientras el salterio estaba ilustrado con escenas bíblicas, los libros de horas solían presentar unas iluminaciones muy lujosas, acordes con el gusto y las posibilidades económicas de los fieles.

    Evangeliario de Enrique el León

    El Evangeliario de Enrique el León, fue un manuscrito iluminado en pergamino púrpura, realizado entre 1175 y el 1188 por encargo del duque Enrique y su esposa Matilde, para ser consagrado a la virgen María de la catedral de Brunswick. Este manuscrito, fue elaborado con adornos naturalistas en la decoración lo que le daba aspecto de volumen y profundidad a las letras que estaban escritas en tinta de oro y plata; se encontraba dividido en tres planos ó niveles, en un primer plano se observaba la coronación de los duques Enrique y Matilde, rodeados de una serie de personajes eclesiásticos, en el segundo plano se observaban los tetramorfos de los evangelistas, además de otros cuatro personajes; que rodeaban una representación de Cristo entronizado y en el último nivel dos ángeles sostenían la escena anterior.

    Frescos y Retablos

    La pintura románica usaba la técnica del fresco, herencia directa de las técnicas romanas y paleocristianas, “la cual se ejecutaba al agua sobre un revoque ó solución de cal y arena húmeda aplicada en los muros, la cual absorbía el color y adquiría la solidez de la piedra; a la que luego se agregaba la pintura en un procedimiento más complejo, que se utilizaba para la aplicación de colores mates y brillantes sobre revoques múltiples; el resultado se asemejaba a un fresco, que por secarse muy rápido, no tenía posibilidad de retoques”; por ello primero se debía esbozar en el muro el dibujo para fijar los contornos exteriores con una gruesa línea negra, y en los interiores con líneas más delgadas los rasgos más pequeños; esto permitía dirigir la aplicación del color, el cual era intenso, puro, plano, sin gradaciones tonales, elaborados naturalmente, sin sombras, y poco variados ya que solo se usaban los tonos rojos, amarillos, azules, ocres, verdes y blancos.

    Así mismo apareció una forma de pintura con un soporte de tabla, esta pintura era ejecutada por los mismos artistas que pintaban los frescos. Esta modalidad artística obligó a algunos cambios en los muebles litúrgicos, apareció uno frontal que decoraba el frente y los costados de la mesa del altar; este frontal dio origen al retablo, una pieza que se colocaba detrás y por encima del altar, con escenas representadas en los frontales, las cuales, eran las mismas de la pintura mural.

    En base a estas técnicas, se da el desarrollo de la pintura románica, que se fecha casi toda en el siglo XII, y en parte del S. XIII

    En toda Francia se localizaron numerosos centros desde los que se difundió la pintura mural románica, la cual por sus características particulares fue dividida en tres grupos: un primer grupo era tradición francesa, ubicado en el oeste y el centro de Francia, con colores más bien mates sobre fondo claro; el segundo grupo estaba en la región de Borgoña y el sureste de Francia en donde se encontraron pinturas de fondo azul; y el tercer grupo, en Auvernia, tenía fondos más bien oscuros. Las pinturas murales más importantes del románico francés eran las del ciclo de frescos que decora la bóveda de cañón de la nave central de la iglesia del monasterio de Saint- Savin - sur- Gartempe; esta obra era conocida como la capilla sixtina del románico por la calidad y cantidad de sus pinturas.

    En Italia se pueden observar tres grupos distintos: Montecasino en el sur, Roma en el centro y Milán en el norte, estos tres grupos artísticos tenían en común la herencia bizantina. En Montecasino, la Basílica de San Angelo in Formis, posee un extenso grupo de frescos en las paredes de la nave central hay un grupo de frescos de temas bíblicos del antiguo y el nuevo testamento.

    En España, el principal conjunto de pinturas románicas se concentraba en el este, y sobre todo en la Cataluña; se trataba del conjunto de obras mejor conservadas de todo el período que hoy en día no se encuentran en sus lugares de origen, ya que desde principios del siglo XX, muchas fueron trasladadas de las iglesias a algunos museos de Cataluña. La pintura mural románica española poseía dos fuentes estilísticas: una de influencia Árabe y otra de influencia Bizantina; la influencia musulmana, surgió del arte mozárabe, utilizado por los cristianos sometidos a los musulmanes, las características de la pintura mozárabe son la composición plana de la estructura pictórica, sin referentes espaciales, los colores de fondo intensos y un tratamiento igualmente plano de las figuras, que destacan por un alargamiento de las cabezas; cuyo ejemplo existente es la escena que representa el combate de David y Goliat en la iglesia de Santa María de Tahull. El origen de la otra fuente, esta en las obras de modelos más o menos inmediatos fueron las pinturas que tenían una gran familiaridad artística con la Roma Bizantina, esto se observaba en los peinados, la caída de los pliegues y las joyas de las vestimentas.

    Bóveda de la Iglesia Monástica de Saint - Savin - sur - Gartempe

    Se trata del conjunto de pinturas románicas francesas mejor conservadas, es una serie de 36 escenas del Antiguo Testamento, que “si bien, no seguía el orden cronológico de la Biblia; permitía diferenciar tres tipos de pinceles diferentes, por lo que el ciclo presentaba una gran uniformidad tanto formal como de contenido, la finura en los detalles reflejaba la vida cotidiana medieval, haciendo que las imágenes casi hablasen al espectador” un ejemplo de ello, era la escena de la construcción de la Torre de Babel, la cual ofrecía numerosa información sobre los métodos de construcción usados, lo que la convirtió en un retrato de la arquitectura medieval, allí se observaban “los albañiles, quienes trasportaban sobre sus hombros los sillares y los pasaban a un arquitecto, con una escuadra en la mano, que estaba sobre la torre; junto al arquitecto puede verse a un albañil con un cubo subido por una polea, mientras Dios se aproximaba y castigaba su acto de soberbia con la confusión de lenguas”.

    Iglesia de San Angelo in Formis

    En el ábside lateral derecho se observa un fresco de la virgen con el niño, y abajo dos ángeles. En el ábside principal se representa un pantocrator con los tetramorfos; los arcángeles Gabriel, Miguel, Rafael. En la pared occidental se encuentra un gran fresco horizontal, con el Juicio Universal.

    En el Juicio Universal, en una mandorla, Cristo esta sentado en el trono, con la mano derecha, invita a los elegidos, en un primer registro aparecen unos ángeles tocando las trompetas anunciando el apocalipsis; en un segundo registro una hilera de ángeles se halla sobre los apóstoles, rodeando a cristo, tres ángeles sostienen carteles, y en último registro los condenados en el infierno

    Iglesia de Santa María de Tahull

    La imagen más importante mostraba un pantocrator ó cristo en majestad, el cual se encuentra en el Museo de Nacional de Arte de Cataluña. Se trataba de una figura descomunal, rodeada con la mandorla como signo de la perfección divina, lo que imponía reverencia y temor.

    En esta imagen, la intensidad de la mirada de Cristo es sobrecogedora, ya que se trata de un cristo juez, bendiciente y dominador, revestido de gloria en su trono, que “sostenía en su mano izquierda un libro con las palabras Ego sum lux mundi, y apoyaba sus pies sobre el mundo; a este pantocrator lo acompañaban, el Tetramorfos, el hombre, el toro, el águila y el león, que constituye el conjunto de los símbolos de los cuatro evangelistas.

    Debajo del Pantocrátor, en la altura intermedia del ábside, entre el Cielo y la Tierra, se presentaba el cortejo celestial de los Apóstoles y la Virgen, separados entre sí por una escueta arquería, estos personajes eran portadores de los símbolos de la verdad y de la redención, por ello la Virgen lleva en sus manos una copa con la sangre de Jesús; se trató de uno de los frisos más ricos en la combinación y matización de los colores, en donde predominaban los rojos, azules, blancos, ocres y verdes.

    Programas iconográficos.

    El programa iconográfico del pintor románico no era tan rico como el del artista gótico. Hasta el siglo XII se conservaban los temas más antiguos, algunos tomados de ambos Testamentos y otros de los evangelios apócrifos ó prohibidos.

    Los principales temas son: Los Apocalipsis; ciclos de vida de Cristo: Anunciación, Visitación, Natividad, Epifanía, figuras de Apóstoles, de Ángeles y arcángeles, serafines, etc. La Virgen es representada en pie o sentada como Trono del Señor; con menor frecuencia aparecen: Génesis, Paraíso terrenal, Diluvio, Torre de Babel, Historias de Abraham e Isaac, José, Moisés, el rey David, del Antiguo Testamento, y, del Nuevo: Vida pública de Jesús, Pasión, Resurrección, Ascensión y Pentecostés, así mismo aparecen escenas de la vida o martirio de los santos. También aparecen escenas alegóricas sobre el destino del alma, la posada de las almas, la lucha del Bien y del Mal, de las Virtudes y los Vicios.

    ARTE GOTICO

    Desde mediados del siglo XII y durante todo el siglo XIII se produjeron en Europa grandes cambios, ya que se trató de una época en la que “se desarrolló un importante aumento demográfico, que estuvo acompañado de un crecimiento económico, que se apoyó en el auge del comercio; intensificando así la actividad comercial, lo que transformó radicalmente la estructura económica europea, especialmente la del mundo mediterráneo, esto propició el desarrollo de una nueva clase social: la burguesía, esta clase social tuvo una organización jurídica y económica, también se dio el surgimiento de los gremios de profesionales”.

    Por otro lado, la iglesia mantuvo su preeminencia dentro de la sociedad, acentuando su papel en el poder político y pedagógico; se dió la creación de nuevas órdenes religiosas, como, el cister los carmelitas, dominicos y franciscanos, los cuales se ubicaban en las ciudades para ayudar y evangelizar a los pobres, por ello las ciudades se convirtieron en el centro de la vida religiosa, intelectual y artística.

    “Así mismo se dio el surgimiento de las universidades, las cuales se fundaron en las ciudades más importantes de Europa: París, Amiens, Toulouse, Cambridge, Oxford, Bolonia, Salermo y Salamanca, que tuvieron su gran desarrollo en el s. XIII; con ello la enseñanza dejo de ser única y exclusivamente para los religiosos, y se comenzó a impartirla a los laicos. Dentro de las universidades se creó un ambiente cultural que propició el renacimiento escolástico, con el resurgimiento del pensamiento filosófico con la traducción de los trabajos de Platón, Aristóteles y otros sabios griegos, los cuales se estudiaron en un intento por conciliar la filosofía con la fe cristiana; por ello se dio la difusión del pensamiento aristotélico, el cual se difundió por toda Europa a través de Santo Tomás de Aquino, el teólogo que más influyó en el ambiente universitario, a raíz de ello aparecen las enciclopedias”.

    En la parte artística, el término Gótico fue usado por primera vez en el renacimiento para referirse al arte bárbaro, calificándolo como carente de buen gusto; para “Giorgio Vasari el verdadero arte creado en Grecia y Roma, desapareció durante la Edad Media por causa de la barbarie gótica para volver a renacer de nuevo en Italia desde Giotto hasta Miguel Ángel”. Esta concepción peyorativa se mantuvo durante los siglos posteriores, hasta comienzos del s. XIX; fue entonces cuando el gótico comenzó a ser valorado en su justa medida y considerado como una tendencia artística independiente del Románico, con la personalidad y el espíritu de una época determinada.

    El Arte Gótico denominaba al arte producido en Europa entre los siglos XII y XVI, esto no implicó que hubiera una ruptura entre estilo y estilo, puesto que durante un tiempo el Gótico se desarrolló a la par del Renacimiento, la misma convivencia de estilos se dió desde sus inicios, ya que, mientras en Francia empezaban a producirse las primeras obras góticas, en el resto de los países europeos continuaban produciéndose formas artísticas propiamente románicas.

    El largo desarrollo del estilo gótico trajo profundos cambios formales, que produjo una separación en grupos que abarcaban todo su desarrollo, porque si bien la difusión europea del estilo se realizó a partir de las catedrales francesas, no hubo una unidad estilística ya que en otros países como Inglaterra desarrollaron un fuerte carácter nacional, mientras que los territorios de Italia no admitieron el estilo gótico y pronto lo sustituyeron por el estilo renacentista.

    Arquitectura:

    En el Arte Gótico, al contrario del Arte Románico se apreciaban actitudes diferentes e incluso opuestas; si el románico significaba recogimiento, oscuridad, predominio de masas sobre vanos, el gótico implicaba todo lo contrario, luz, color, elevación, expresividad y naturalismo, es por ello que el gótico fue constituyéndose sobre el románico, tomó de él algunas soluciones constructivas, para crear una arquitectura infinitamente más complicada que la románica.

    La catedral fue la máxima aportación del estilo gótico. En su construcción intervinieron todos los estamentos sociales, ya que todos los ciudadanos aportaban dinero para poder llevar a cabo la obra, esto provocó que la catedral gótica se convirtiera en la imagen de Dios, ya que la iglesia se sirvió del lujo y de la suntuosidad para mostrar el poder divino.

    El gótico incorporó una serie de elementos que le sirvieron para mostrar su suntuosidad; el uso de la bóveda de ojiva tuvo un perfeccionamiento técnico, ya que apareció como un refuerzo de la bóveda de arista al colocarle nervios, que se fueron incrustando en la bóveda, la cual fue apuntada con una clave en la intersección de los nervios como refuerzo, las fuerzas fueron transmitidas a unos pilares preparados para recoger el peso de las bóvedas; los contrarrestos se hicieron más eficaces para sostener el empuje de las bóvedas más altas, lo que provocó la aparición del arbotante o arco de transmisión exterior, el cual descargaba todo el peso de la bóveda sobre un contrafuerte exterior, que hacia las veces de un canal por el cual discurrían las aguas del tejado, llevándolas lejos del tejado, y depositándolas en una gárgola ó pequeño canal, a través del cual se arrojaban las aguas lejos de las paredes del edificio. Los contrafuertes exteriores tenían unas terminaciones puntiagudas, llamadas pináculos, que garantizaban la unión entre el contrafuerte y el arbotante,

    El uso de todos estos elementos de transmisión de fuerzas y contrarrestos permitió aligerar los muros del edificio, ya que prevalecieron los vanos y huecos que fueron cubiertos con vidrieras, que cumplían una doble función: por un lado cerrar el espacio interior del edificio protegiéndolo de las inclemencias del tiempo, y por el otro, permitir el paso de la luz, que al atravesar los vidrios de colores, se convertía en una luz no natural de carácter trascendental y místico, además de cumplir una función pedagógica ya que se desarrollaron importantísimos programas iconográficos que al igual que la escultura y la pintura, tuvieron como misión la evangelización de los fieles.

    Las fachadas adquirieron un gran desarrollo, adquirieron formar de paños o lienzos rectangulares en los que la decoración se extendía ampliamente, rebasando el estrecho marco de las portadas. La fachada principal estaba apoyada en torres laterales, formadas por la sucesión de diversos pisos en altura y rematadas con un cuerpo piramidal llamado aguja. La fachada estaba en cuatro alturas: la primera, era donde se encontraban las portadas, las cuales son ojivales, pero con un mayor número de arquivoltas y de estatuas en las jambas, en el segundo nivel se encontraba un enorme rosetón que se situaba en el centro, marcando la altura máxima de la nave central justo donde empezaba la bóveda; en el tercer nivel se disponía una tribuna o pequeña galería que se abría al exterior mediante una arquería continua y en el último nivel, es donde se elevaban las dos torres laterales.

    La Reforma Cisterciense y Las Formas Iniciales Del Gótico En Fontenay, Poblet y Fossanova.

    La reforma cisterciense, que nació como un deseo de eliminar todo el peso que ejercía en la vida temporal, comenzó cuando el abad cluniacense Roberto de Molesme, junto con un grupo de monjes de su comunidad, se propuso retomar la observancia estricta de la primitiva regla de san Benito, para ello erigieron una nueva abadía en Cîteaux, donde dedicaron su vida al trabajo manual y a la contemplación ascética con igual empeño, poniendo en práctica el lema benedictino “Ora et labora”; en el 1100 la orden del cister logró su reconocimiento por parte del papa Pascual II, quien les otorgó la protección de la Santa Sede; “en el 1119, san Esteban Harding, dotó al Císter de una regla propia llamada la Carta de Caridad, en la que se establecían normas de total pobreza, de obediencia a los obispos y de dedicación exclusiva al culto divino”. En 1113, se expandió el ámbito monástico a las ciudades de Ferté, Pontigny y Morimond y Claraval. La llegada de San Bernardo a la orden del cister, le dio un impulso considerable a su crecimiento, ya que en 1153, contaba con 343 monasterios, que se solían asentar sobre terrenos estériles pero con gran cantidad de agua que los propios monjes utilizaban.

    Si durante el siglo XI los monjes cluniacenses asumieron un gran protagonismo dentro de la iglesia, ocupando sus más altos cargos y dignidades, “en el siglo XII ese papel lo desempeñaron los cistercienses, los cuales dieron a la orden una gran prosperidad, que hizo que la organización perfecta del trabajo terminará en riqueza y la orden fuera víctima del defecto cluniacense que en origen censuró, es decir que la primitiva austeridad y humildad cisterciense se fue perdiendo en beneficio de un cada vez mayor esplendor en la forma de vida, una grandiosidad en sus abadías.

    Esta grandiosidad provocó el nacimiento de un nuevo estilo de arquitectura: la cisterciense ó protogótica, en la que predominó la austeridad frente a la riqueza arquitectónica de la orden de Cluny; de ahí la sencillez de las estructuras y la escasez de decoración reducida a la más pura geometría. Se disminuyeron las dimensiones, se ahorró masa, decoración, líneas y materiales; así mismo, los cistercienses usaron el arco apuntado, la bóveda de ojivas y el rosetón, mostrándose muy inclinados a las configuraciones rectas en planos y alzados. Los arcos ojivales se descargaban en unas ménsulas o columnas que no llegan al suelo, teniendo sus ejemplos en las abadías de Fontenay, Poblet y Fossanova

    Abadía de Fontenay

    La abadía de Fontenay fue fundada en 1118 por san Bernardo de Claraval y consagrada por el Papa Eugenio III en 1147, se trataba de una de las primeras abadías cistercienses.

    Construida entre 1127 y 1150, la iglesia de esta abadía, poseía una arquitectura con gran sobriedad, austeridad y homogeneidad, sin ningún tipo de decoración que pudiera distraer a los monjes. La planta era de tipo basilical con tres naves, flanqueadas por arcadas con un transepto saliente sobre el cual se abrían a cada lado dos capillas rectangulares, y un coro. La gran nave central se comunicaba con las naves laterales, por medio de grandes arcadas, cuyos arcos descansaban sobre pilares cuadrados ó pilastras con capiteles de motivos vegetales y formas geométricas simples. Las naves laterales eran dos capillas laterales con arcos transversales. El transepto poseía dos barras sobre arcos que se abrían sobre las capillas laterales. El ala sur se comunicaba con la abadía y las habitaciones de los monjes por una escalera, ubicada en la parte norte del transepto, en cuya entrada se hallaba una triple arcada.

    Otra parte importante de la abadía era el claustro ubicado al sur de la abadía. Se trataba de la parte central de la abadía, que servía como lugar para meditación y de comunicación con el resto de las dependencias monacales, fue construido en el Siglo XII, estaba compuesto por cuatro galerías divididas en ocho partes, rodeadas por arcadas a todo lo largo de un gran jardín central; cada parte se abría sobre el jardín a través de una arcada que se unía a las demás por medio de columnatas rematadas con capiteles de una gran simplicidad con decoraciones vegetales; en el interior, cada una de las cuatro galerías se diferenciaban por sus arcos y sus muros laterales.

    Abadía de Poblet

    El Monasterio de Santa María de Poblet fue un punto de referencia como prototipo de abadía cisterciense española, fue edificado por el conde Ramón Berenguer IV y donado a los monjes cistercienses en el siglo XII.

    El conjunto de edificaciones de esta abadía, ofrecía un aspecto medieval con tres recintos amurallados, y constituido por una parte conventual con su iglesia, claustro, sala capitular, refectorio y palacio abacial. Las características son las mismas que las de la abadía de Fontenay

    “La Iglesia era de planta basilical de tres naves separadas entre sí por una arcada que estaba sostenida por siete columnas, poseía un transepto con un crucero, ambos formaban parte de un gran ala que comunicaba por el lado izquierdo con la sala capitular y por el derecho con una gran capilla redonda encerrada en un cuadrado; así mismo poseía un ábside sobresaliente con un deambulatorio de siete capillas”. El claustro estaba dividido en cuatro galerías que encerraban un gran jardín, con una pequeña capilla en su interior

    Abadía de Fossanova

    La iglesia era de planta de cruz latina de tres naves divididas por pilastras y arcadas con transepto; las cuales, al igual que la torre y el triforio estaban cubiertas por bóveda de crucería, también la fachada tenía un portico con columnas adosadas; así como un rosetón formado por 24 nervaduras coronadas con pequeños arcos. La sala capitular, cubierta con bóveda de crucería, que descansaba sobre pilastras dobles adosadas a los muros.

    El Nacimiento Del Arte Gótico en la Île-de-France.

    El Arte Gótico se constituyó en la île de France, zona bajo el dominio real francés, que “se ubicaba entre Compiégne y Bourges, teniendo a París como centro y ciudad del rey. El territorio en el que surgirían en rápida sucesión las impresionantes catedrales del nuevo estilo gótico era mínimo comparado con la actual Francia, y el poder del rey era correspondientemente escaso. Su potencialidad política y económica era mucho menor que la del duque de Normandía, quien al mismo tiempo era rey de Inglaterra, pero también lo era en relación con sus vecinos del sudoeste y este, los condes de Champaña, sin embargo lo que la destacó de otros señores feudales y la hizo expandirse fue su autoridad espiritual, gracias a su unción con los santos óleos”.

    El abad Suger, un gran personaje en el ámbito político, económico y religioso, supo sacar ventaja de ello; ya que gracias a su amistad con Luis VI, y más tarde con Luis VII, logró ser nombrado Abad de Saint Denis en 1122 y administrador del reino en 1147

    En Saint Denis, emprendió la restauración de la abadía que se encontraba en total abandono, a través de una amplia renovación de la iglesia abacial, con el fin de devolverle su esplendor original; para ello Suger y su arquitecto se convirtieron en los iniciadores de una nueva configuración de la arquitectura sacra, combinando en forma concluyente el arco apuntado con elementos nuevos como la bóveda de nervaduras. Con ello comenzó un “maravilloso equilibrio dinámico que caracterizaba la concepción de las catedrales góticas, siendo reflejado en la continuidad de las arquerías que a diferencia de las románicas se hicieron más apuntadas. La iglesia gótica se encontró en la primera fase de su creación original, por lo que transformó todo su sistema constructivo en un juego de fuerzas y energías que despertaron la impresión de que se desarrollaba un conflicto dramático”. La inclusión de nuevas formas no hizo más que acentuar la impresión de un movimiento infinito e ininterrumpido, que obligaba al espectador a mirar la obra desde distintas perspectivas para lograr apreciarla en su conjunto.

    Iglesia Abacial de Saint-Denis.

    Se trataba de un antiguo centro de peregrinación cristiano, ya que en esta zona estaba enterrado San Denis evangelizador y santo patrono de Francia. Fue reconstruida en 1122 por el Abad Suger, quien decidió reformar la iglesia de la abadía, tomando elementos propios del románico de la región normanda como el arco apuntado y la bóveda de ojiva, los cuales combinó con una serie de elementos novedosos que caracterizarán al estilo gótico; debido a problemas de índole económico, lo que se propuso fue una ampliación del nártex y la cabecera. La primera obra que se propuso fue adosarle a occidente tres grandes portadas, flanqueadas por torres y un nártex dividido en 6 tramos cubiertos por medio de una bóveda de crucería, soportada por grandes pilares y encima del nártex se colocó una tribuna, la cabecera estaba elevada sobre la cripta de San Denis a la que se agregó una girola doble, una rodeando la cabecera central y otra dando acceso a las capillas radiales unidas. La doble girola estaba formada por columnas de mármol, sobre las que se apoyaban los arcos apuntados y se cubrían con bóvedas de crucería, en toda la cabecera prevalecieron los espacios abiertos, diáfanos, con un mayor uso de los vanos sobre los muros.

    Las Soluciones Góticas Y Nuevos Elementos Estructurales.

    En el arte gótico se presentaron innovaciones técnicas y constructivas notables, que permitieron levantar estructuras esbeltas y ligeras con medios y materiales sencillos.

    En el gótico se hizo necesaria una solución a los problemas de fuerzas que tenía el románico, por lo que se cambio el arco de medio punto por el de ojivas ó arcos apuntados, ya que permitía dirigir la carga del edificio desde su punto más alto hacía enormes pilares, esto permitió hablar entonces de una de una arquitectura estructural, ya que “la magia del gótico residió en el manejo invisible de las fuerzas donde los elementos que podían soportar el peso parecían ser más ligeros para ejercer esta función; este equilibrio no hubiera sido posible si la concepción de los segmentos que debían ejercer la fuerza, no hubiese precedido al alzado total del edificio, entonces la catedral gótica se convirtió en un monumento eminentemente estructurado, planificado y calculado, esto es muy interesante ya que muchos de los conceptos físicos sobre los que se basó la arquitectura gótica, fueron estudiados en el siglo XVI”

    Otro elemento importante fue el desarrollo de la altura vertical, en donde los arcos podían elevarse haciendo de la catedral gótica, una construcción emblemática que representaba la imagen de una “Jerusalén celeste, que ofrecía una invitación a la elevación espiritual y era una manifestación del poder y de la grandeza de Dios y de la iglesia”.

    El desarrollo de los vitrales se dio por la reducción de los muros al mínimo, esto permitió abrir grandes vanos en las fachadas, permitiendo que los artistas de la época pudieran dar rienda suelta a su imaginación creando un arte desconocido hasta la fecha.

    El uso de los vitrales en el gótico, se desarrolló principalmente en la zona sur del Loira, donde la luminosidad permitía vanos limitados que daban un gran juego de contrastes entre luces y sombras. Al norte, también se utilizaron juegos de sombras en los vanos más grandes que debían ser distintos para dejar penetrar la luz. El problema era que los arcos de medio punto no permitían hacer los vanos lo suficientemente grandes para dejar entrar la luz tan buscada y deseada por el gótico, ya que el soporte lateral de las fuerzas era muy importante y no se podían elevar los arcos sin tocar los muros, ya que ellos soportaban todo el peso resultante, para evitar esto, en el gótico, el uso del arco de ojiva permitió canalizar las fuerzas y concentrarlas sobre los pilares, así los muros no soportaban tanto el peso de la estructura y entonces se podían hacer vanos al exterior, esto permitió que la luz fuera abundante y se pudiera jugar con los colores de los vitrales; estos últimos no dejaban ver el exterior. Estos vitrales eran muy didácticos para los fieles, ya que representaban escenas bíblicas, la vida de los santos o la vida cotidiana de la edad media; pero más que una representación iconográfica, lo importante fue la doble simbología que adquirió la luz en el periodo gótico, ya que fue vista como algo divino y como algo físico. La luz divina, tenía la función hacer entrar la presencia divina en las catedrales, a menudo se asociaba la sombra con la presencia del demonio, de esta forma cuando un fiel entraba en la catedral, se sentía protegido del mal, delimitando un microcosmos celeste en el corazón de la iglesia.

    El Gótico Temprano En Francia

    Este período, desarrollado en el siglo XIII, aparece como una continuación de las obras emprendidas por el Abad Suger en Saint Denis, también se lo conoce como de las catedrales, ya que es en este momento cuando empiezan a surgir estos grandes edificios religiosos, los cuales fueron concebidos con tres grandes portadas, flanqueadas por torres; así mismo contaban con un nártex dividido en seis tramos cubiertos por medio de una bóveda de crucería soportada por grandes pilares con una tribuna de estilo románico; también se introdujo una cabecera muy desarrollada y una girola doble formada por columnas de mármol, cubierta con bóvedas de crucería, sobre las que se apoyaban los arcos apuntados; estas fueron las novedades introducidas por Suger en Saint Denis, las cuales se usaron en las primeras catedrales, que constituyeron las primeras realizaciones arquitectónicas del gótico francés.

    Catedral de Notre Dame de Paris

    Su construcción se inició hacia 1160, fue pensada por su primer constructor ó maestro como un nuevo edificio muy ligado a la monarquía francesa, que pretendía asentar en ella la capitalidad del Dominio Real en París. Este primer maestro dirigió la construcción de la cabecera diseñada como una capilla de planta semicircular rodeada por una girola doble, y un amplio desarrollo del coro, así mismo poseía una.arcada de separación de naves, ventanales y tribunas; las cuales fueron reformadas en el siglo XIX, ya que no al no estar abiertas con ventanales al exterior, el edificio era un lugar mucho más oscuro.

    El segundo maestro de Notre-Dame, culminó las obras de construcción, ya que agregó en el exterior de la cabecera arbotantes para armonizar la cabecera con el resto del edificio, a la vez que terminó el coro y realizó la fachada, esto dió lugar a una ruptura en la continuidad lineal de las naves, que solo era perceptible al observar el trazado de la planta; así mismo se hizo un alzado cuatripartito, con un muro con arcadas de separación de naves, tribunas abovedadas, rosetones y un cuerpo de ventanales. Las tribunas poseían una función estructural, y estaban abiertas por ventanales en el muro exterior, se colocó un gran rosetón y se ampliaron las torres.

    Catedral de Notre Dame de Laon

    Su construcción se inició en el año 1160, a fines del siglo XII ya tenía terminada su fachada oeste, y el resto de la construcción se trabajó durante todo el s. XIII; se trataba de una iglesia de planta de cruz latina, tenía tres naves longitudinales y un crucero bastante profundo formado por tres naves transversales en las cuales se abrían tres grandes portadas, en los brazos del crucero; así mismo, el edificio se hallaba dividido en cuatro cuerpos o niveles en altura, el primer nivel era de arquerías, el segundo de tribunas, el tercero se correspondía con el triforio y el nivel superior era el cuerpo de ventanas; también poseía una cabecera cuadrada, muy desarrollada sin girola; El edificio estaba cubierto con bóvedas de crucería sexpartitas, unas bóvedas que tenían dos nervios diagonales y uno transversal, que la dividían en seis partes, para el tramo en la nave central y crucería simple para cerrar las naves laterales, “como elemento sustentante se usaron columnas que llevaban adosadas pequeñas columnas en la cabecera, en el resto del edificio no se adosaron las pequeñas columnas; así mismo en la fachada se presentó una división en varios niveles para darle más altura al edificio; una triple portada, bastante abocinada ó profunda, rematadas con gabletes, unos triángulos que se situaban encima de las portadas y que permitían multiplicar el número de esculturas en las arquivoltas y jambas”. Estas portadas formaban el primer cuerpo o nivel en la altura de la fachada. El segundo cuerpo estaba destacado por el rosetón, que señalaba la altura máxima de la nave central en la cual se situaba la bóveda. A los lados del rosetón aparecían ventanas de arcos apuntados. El tercer cuerpo estaba formado por tribunas con una arquería calada; el último nivel estaba formado por el cuerpo de las torres que terminaban en una terraza.

    El Gótico Internacional En Francia, Inglaterra, España, Italia Y Alemania

    Aunque el desarrollo del arte gótico se dió en el norte de Francia, la influencia que tuvo esta fase en el resto de Europa fue enorme, ya que gran parte de las obras más notables se realizaron en Inglaterra, España, Alemania e Italia; sin dejar de lado su desarrollo en Francia, donde no siguió una misma línea constructiva como había ocurrido hasta entonces, esto se dió por la aparición de múltiples arquitectos, quienes propusieron gran variedad de soluciones constructivas, pero manteniendo algunos rasgos en común; se eliminó la tribuna del segundo nivel dejando el triforio, y se propuso una división de tres pisos o niveles, ganando así más altura, a través de un amplio piso de ventanales organizado mediante una estructura dividida por parteluces decorados con motivos vegetales, y un nivel de arquerías lo que le proporcionó una luz casi vertical.

    Gótico Francés

    GÓTICO CLÁSICO

    En Francia, esta etapa abarcó un período que iba desde finales del siglo XII hasta la primera mitad del siglo XIII, aquí aparecieron las grandes catedrales francesas de época gótica; las cuales se organizaron a partir de una planta de cruz latina de tres o cinco naves longitudinales, con un desarrollo monumental de la cabecera, con girola y capillas radiales; como elementos sustentantes se usaron los pilares, tanto cuadrados como en forma de cruz, con columnas adosadas, alternándolos con esos pilares compuestos; que se apoyaban en una base, generalmente de forma octogonal, con el fin de facilitar la circulación de los fieles, así mismo poseían un atrio con dos torres flanqueando el edificio; las naves tenían arcadas de separación, con un triforio y cuerpo de ventanales; cubiertas con bóvedas sexpartitas, que se disponían usualmente sobre un tramo cuadrado, la nave central estaba más elevada para permitir un mayor tamaño de los vanos laterales dándole una mayor luminosidad del interior del templo. En el exterior, contrafuertes, arbotantes y pináculos se multiplicaron a lo largo de toda la cabecera, el crucero y cuerpo de las naves.

    Catedral de Notre Dame de Chartres

    Se trató de un edificio muy antiguo, que se convirtió en el santuario mariano más importante de Francia; ya que conservaba una imagen muy antigua de la virgen; además de conservar la Santa Túnica.

    Este primer edificio sufrió un incendio en 1134, en el que sólo se perdió el pórtico; por lo que se construyó un nuevo acceso a occidente que contaba con la llamada Portada Real, denominada así porque sólo se abría una vez al año cuando el rey entraba en la catedral con motivo de la Asamblea Real. En 1196 sufrió otro incendio, del que solo quedo la Portada Real; “dice la leyenda que en un primer momento la población de Chartres creyó que la Santa Túnica había resultado calcinada, sin embargo, al iniciarse las tareas de desescombro se descubrió que la túnica se había conservado sin ningún daño en la cripta, como una indicación de que la Virgen les estaba sugiriendo que reconstruyeran y renovaran el antiguo edificio”, por lo que se emprendió la construcción de una catedral de grandes dimensiones, con una financiación muy costosa. Las obras comenzaron entre 1196 y 1197, y en 1260 se terminaron las obras.

    Esta iglesia, “poseía una planta de cruz latina de tres naves; con tres absidiolos en la cabecera; y con un coro muy desarrollado; con pilares como apoyo en todo el edificio, debido a ello, se usaron las bóvedas cuatripartitas sobre tramos de planta rectangular, lo que proporcionó una ventaja constructiva, ya que, en caso de caerse solo se caería uno y no todo el edificio”. El alzado estaba compuesto por arcadas de separación entre la nave, el triforio y el cuerpo de ventanales. El triforio era ciego, más pequeño y reducido en tamaño que la tribuna, lo que permitió ampliar el tamaño de los ventanales.

    Catedral de Notre Dame de Amiens

    Su construcción se inicio en 1220, tenía un crucero formado por tres naves transversales que formaban el cuerpo central del templo. “La nave central estaba cubierta con bóveda de crucería cuatripartita y el resto de las naves se cubrieron con bóvedas de crucería simple; en el interior se observaban tres niveles uno de arquerías, otro de triforio, el cual se hizo más reducido a favor del último nivel el de ventanales; así mismo poseía una amplia cabecera y una única girola con capillas radiales adosadas unas a otras”

    La fachada se expandió para aumentar cada vez más su altura por la presencia de gabletes; así mismo se introdujo una arquería calada que se correspondía con el triforio del interior, también la escultura se multiplicó por toda la fachada ya que no solo se entraba en la portada, sino también en el rosetón, el cual estaba cada vez más decorado con dibujo conseguidos con curvas.

    GÓTICO RADIANTE

    Esta fase se desarrolló en la segunda mitad del s. XIII, presentó algunas novedades con respecto a la fase anterior, comenzaron a aparecer edificios más altos, más iluminados y más decorados, así mismo la decoración del interior de las ventanas y los rosetones se hizo más fina, menuda y rica.

    Así mismo, en la evolución de la arquitectura gótica francesa, el progresivo aumento de los vanos creó un ambiente interior sacralizado y simbólico a través de la luz coloreada que pasaba a través de las vidrieras, en forma de medallones, dispuestas en las ventanas de las capillas subsidiarias y de las naves laterales; estos medallones ilustraban episodios bíblicos y de la vida de los santos, eran imágenes monumentales, perceptibles desde el suelo, elaboradas con colores como el azul oscuro, el rojo rubí brillante, amarillos y naranjas.

    Sainte Chapelle

    Se trató de una capilla, construida entre 1241 - 1246, que fue consagrada en el año 1248; para albergar la corona de espinas de Jesús, una de las reliquias más preciadas.

    La Santa Capilla estaba en medio del palacio real y estaba destinada a recibir una de las reliquías de la crucifixión, la corona de Espinas La edificación de la Sainte Chapelle no fue solamente un acto de piedad; fue tambien un acto político. La iglesia, de dos niveles, fue consagrada el 26 abril 1248. Se puede suponer que ella estaba acabada en esa fecha, sin embargo se ignora en que año se inicio la construcción.

    La capilla inferior servía al culto procesional. Las reliquias estaban guardadas en la capilla superior; en la gran sala del consejo; así mismo se le agregaron otros elementos al edificio como el anexo, construido sobre el lado norte, el cual fue destruido 1777; en el lado sur, se colocó una escalera para que el público pudiera acceder a la parte alta, también se construyo una tribuna para recibir a los religiosos y a la nobleza.

    Gótico Ingles

    Inglaterra perteneció al grupo de naciones que en la segunda mitad del siglo XII adoptaron el estilo gótico francés; esto se dió gracias a los lazos históricos que unieron ambos países. “El trono inglés fue ocupado en 1154 por Enrique I, perteneciente a la dinastía Plantagenet. En torno a su tierra de origen, la Francia occidental, este monarca logró ampliar sobre el continente la esfera de dominio británico. Inglaterra había pertenecido a Normandía desde la conquista normanda del 1066, a ello se agregaron las posesiones de Leonor de Aquitania en el sudoeste de Francia, que se divorció del rey francés en 1152, para casarse con Enrique Plantagenet. De esta forma, en la segunda mitad del siglo X Inglaterra dominaba toda la mitad oeste de Francia, lo que equivalía a un territorio mucho mayor que el que poseía el propio soberano francés”; esta situación cambió cuando Juan Sin Tierra, hijo de Enrique, tuvo enfrentamientos con Francia y con el Papa, lo que le hizo perder tanto la Normandía como la mayor parte de los territorios occidentales franceses; y en la época de Enrique III, se perdió el Poitou, y sólo le quedaron a Inglaterra sus tierras de la Francia meridional; por ello las relaciones con este país quedaron interrumpidas. El conflicto con Francia estalló definitivamente con la Guerra de los Cien Años, por la sucesión del trono francés; lo que debilitó notablemente poder de la corona británica; que logró estabilizarse con Enrique VII y hijo Enrique VIII, quien introdujo la Reforma en Inglaterra.

    Estos hechos permitieron que las primeras manifestaciones del gótico francés aparecieran en Inglaterra; Una de sus características fue la sustitución de las molduras de los pilares por pequeñas columnas y la aparición de arquerías ciegas guarnecidas de calados en los triforios; por esto las arquerías de las bóvedas fueron tomando la forma de estrellas y telarañas que cubrían todo el espacio; más adelante las bóvedas adquirieron una complejidad extremada, ya que se prefirió el uso de bóveda estrellada, la cual, se aplicó en toda su intensidad; además desapareció el triforio y las torres tomaron un desarrollo que no tiene nada que ver con el francés, porque se hicieron más pequeñas con una ornamentación eminentemente geométrica.

    Catedral de York

    La catedral anglicana de York era una iglesia con planta cruciforme de cruz latina de tres naves y un crucero muy corto con dos naves más, el interior estaba divido en tres niveles un primer nivel en arcadas que servían de separación de las naves un segundo nivel con triforio y el tercer nivel de ventanales; todo ello se hallaba cubierto con bóveda de crucería cuatripartita, formada por arcos de crucería que caían sobre columnas; las cuales depositaban su peso en contrafuertes exteriores, tambien tenía dos transeptos en forma de cubo, uno al norte y otro al sur; en el transepto norte había una ventana de cinco partes, de 16 metros de alto cada una; así mismo poseía una torre central, un gran presbiterio y una linterna con un gran coro, además tenía tres torres que sostenían las campanas.

    Catedral de Canterbury

    La Catedral de Canterbury era una de las más viejas y más famosas estructuras abaciales cristianas de Inglaterra. “La planta de la cripta mostraba una iglesia de cruz latina con tres naves, para poder reunir a toda la gente que venía a contemplar las reliquias de santo Tomas Bequet, arzobispo de Canterbury”.

    En 1174, hubo un incendio que destruyó el coro de la catedral, por lo que se hicieron una serie de ampliaciones sin tocar la estructura de la cripta; la primera de ellas fue la prolongación del coro hacía oriente, así mismo se crearon nuevos pilares frontales, cuya forma variaba entre redondos y cuadrados, para el coro; así mismo la altura de nave central no era más alta que la de la cripta y se hizo necesaria la construcción de una galería de circulación para el claristorio, tambien se dividio el interior en tres niveles, uno de arcadas que dividía las naves, otro con una tribuna de arcadas gemelas y el último nivel era de ventanales, el cual estaba cubierto con boveda de crucería sexpartita, que se apoyaba en el exterior en arbotantes muy bajos.

    Gótico Español

    El reino de España fue el que mejor asimiló la nueva arquitectura procedente de Francia, ya que la influencia francesa sobre la arquitectura española se remontó hasta el siglo XI, con el arte románico de las iglesias de peregrinación, que continuó con la difusión de la arquitectura de los monasterios cistercienses.

    Este estilo estuvo representado por las grandes catedrales urbanas en las que se percibían características arquitectónicas y decorativas propias de la cultura hispana, como la introducción de elementos visigóticos como la escasa iluminación y la supresión de arbotantes, lo que se tradujo en exteriores macizos y sin la tendencia a la verticalidad propia del gótico francés.

    PROTOGÓTICO.

    Esta fase estaba caracterizada por la fusión de las últimas formas del románico con las formas cistercienses lo que dio lugar a una serie de edificios con unas características como el mismo tipo de planta, la decoración restringida, la sustitución de las bóvedas de cañón por bóvedas de nervaduras y los muros sólidos.

    Catedral de Ávila

    La catedral de Ávila, “fue edificada con tres naves de cuatro tramos, un amplio crucero y una cabecera formada por la capilla mayor, una girola de doble nave y de desigual anchura, dos capillas radiales y un ábside interior formado por un semidecágono y dos tramos más paralelos y rectos; así mismo tenía cinco capillas centrales exteriores en el muro del cimborrio el cual estaba cubierto con bóveda de ojiva, que caían en columnas con capiteles historiados”.

    Luego se agrego un ábside poligonal con tres cuerpos superpuestos, de gran altura y esbeltez. El primer cuerpo estaba formado por arcos apuntados y abocinados hacia la girola. En el intermedio se colocaron ventanales con arquillos interiores de herradura; y en el último nivel cada muro llevaba un nuevo ventanal; así mismo, el abovedamiento estaba formado por nervios coincidentes en una clave común.

    GÓTICO PURO

    En esta fase del gótico se generalizaba el uso de la bóveda de crucería con arcos apuntados que permitían hacer catedrales más esbeltas, ya que el arco podía alargarse y reducir sus empujes haciendo cubiertas más ligeras, lo que permitía abrir los muros, tambien desaparecio la tribuna románica y los empujes laterales que ésta resolvía se envían a los arbotantes, arcos que transmiten el empuje de la cubierta a los pilares exteriores. Las grandes vidrieras son una muestra del interés del gótico por comunicarse con el pueblo. Así mismo, la sensación de verticalidad se corresponde a la idea del Jerusalén celeste, en comparación contra la sensación de acogimiento y seguridad a los fieles creada en el románico

    Catedral de León

    Tenía planta de de cruz latina, con tres naves, un crucero triple y girola con cinco capillas radiales. En el interior de esta iglesia, destacaban los redondos pilares que llevaban adosadas medias columnas sobre las que arrancan los arcos que separaban las naves, los nervios que apoyaban las bóvedas y las ojivas. Los cuatro pilares del crucero eran de centro cuadrado, estaban revestidos de columnillas que se prolongaban hasta formar los arcos torales ó formadores de las bóvedas y las ojivas; sobre las que se abría la galería del triforio de la que arrancaban los ventanales, ocupando todo el espacio entre pilares.

    EL GÓTICO MEDITERRÁNEO

    El gótico mediterráneo se centró sobre todo en las construcciones del Reino de Aragón, donde el gótico adoptó cualidades particulares relacionadas con la diferencia de altura entre nave central y naves laterales, con lo que se redujo la función de los arbotantes que llegaron incluso a desaparecer, se reforzó la función de los contrafuertes; las cubiertas se hicieron planas y se abrieron pequeños ventanales.

    La Catedral de Barcelona

    La construcción de la catedral de Barcelona se inició en mayo de 1298, era de planta de cruz latina de tres naves con la misma altura, las cuales se prolongaban hasta llegar a la altura del coro; así mismo poseía una galería superior, que le daba una mayor amplitud y una gran iluminación; además tenía un solo ábside, un deambulatorio, una girola con 10 capillas radiales, un presbiterio con su altar mayor, además de la cripta y un falso crucero.; tambien se le construyó, sobre el atrio de la entrada principal, un gran cimborrio cubierto en madera, y dos torres laterales.

    Gótico Italiano

    El gótico tuvo un menor desarrollo en la arquitectura italiana, ya que entró muy tarde; y tuvo que darle paso al arte renacentista cuando aun se valía de la sencillez románica y de la bóveda de crucería, a la que no supieron sacar todo su provecho como sucedió tanto en España como en Francia.

    A comienzos del siglo XIII Italia experimentó una doble influencia artística, la bizantina y la gótica; el influjo bizantino apareció como consecuencia de la toma de la ciudad de Constantinopla, lo que propició un gran desarrollo del comercio con oriente a través de los puertos italianos de Venecia y Génova; esto permitió que una gran cantidad de artistas llegara a Italia, cuya influencia se reflejó en artes como la miniatura y la pintura mural.

    Así mismo la influencia gótica se presentó en la arquitectura utilizada por la orden cisterciense y las nuevas órdenes monásticas como franciscanos y dominicos, quienes impusieron en la arquitectura gótica de Italia su particular concepción del espacio, así como soluciones estructurales de enorme sencillez.

    Duomo ó Catedral de Milán

    El duomo de Milán era una iglesia de cruz latina de cinco naves escalonadas en altura y separadas por una arcada con formada por ocho arcos, con un crucero de otras tres naves, un deambulatorio ubicado cerca del coro, un transepto sobresaliente y un presbiterio poco profundo con girola sin capillas radiales, cerrado poligonalmente. La nave central se hallaba dispuesta en dos pisos el de arcadas y el de ventanales de dimensiones reducidas.

    Gótico Aleman

    En Alemania, la cual formaba parte del Sacro Imperio Romano Germánico, el gótico apareció a lo largo del siglo XIII, como una asimilación por parte de los arquitectos alemanes, quienes desarrollaron una versión simplificada del estilo que se ajustaba a los gustos más sencillos de los cistercienses y las órdenes mendicantes, lo que le permitió demostrar que era adaptable a las exigencias del ladrillo, que era el material de construcción alemán por excelencia; lo que le permitió desarrollar características particulares como naves altísimas en las que predominaban la impresión de verticalidad, grandes ventanas, y torres terminadas en agujas apuntadas que le daban una impresión de ligereza; igualmente las molduras que transmitían las presiones llegaban hasta el suelo; en la ornamentación geométrica, predominó el calado de la piedra sobre todo en las fachadas, arbotantes y contrafuertes.

    Catedral de Estrasburgo

    La catedral de Estrasburgo se comenzó en 1240, con una planta de cruz latina de tres naves con un crucero una deambulatorio y dos capillas adosadas a los muros; así mismo la construcción de la catedral de estrasburgo comenzó con el transepto norte de estilo romanico; mas tarde con la aparición de unos arquitectos que venían de Chartres, apareció una contribución de estilo gótico a la iglesia, por lo que esta catedral conectó las influencias romanicas y góticas, ya que, mientras que el coro y el portal sur, todavía tenían características romanicas, el resto de la iglesia poseía características góticas; sobretodo el frente oeste que se encontraba adornado con millares de figuras; también en el interior el cual, se hallaba dividido en tres niveles arcadas, triforio y ventanales, todo ello, se hallaba cubierto con boveda de crucería cuatripartita, la cual depositaba su peso en gruesos pilares, que a su vez la descargaban sobre gruesos contrafuertes ubicados en el exterior.

    Gótico Tardío En Francia, INGLATERRA, Alemania Y España

    El Gótico Tardío fue una fase en la que la arquitectura perdió su papel básico de centro de las artes ya que todos los esfuerzos artísticos sólo se destinaron a experimentar en el campo de la decoración, de allí que a este período se conociera como período flamígero, ó gótico florido, debido al exceso decorativo, y a la complicada red de elementos vegetales que cubrían los edificios de esta época.

    “Los edificios fueron levantados en base a la planta de salón ó sin naves, ya que dejaba espacio entre los contrafuertes para capillas funerarias, y daba cabida a más fieles. La cabecera se convirtió en la zona más importante del templo, y permitió una nueva organización del espacio interior, las cabeceras se hicieron más oscuras y se cubrieron las ventanas, así mismo la luz pasó a un segundo plano; y los arcos usados fueron los decorativos como “el conopial, el ojival, el polilobulado, el carpanel, etc; también las bóvedas fueron de carácter estructural, ya que les aumentaron el número de nervios secundarios, dando lugar a bóvedas mucho más decorativas, como las estrelladas, estas bóvedas caían sobre pilares muy adelgazados y estilizados”.

    Francia

    Esta última fase del gótico francés, apareció en el año 1350 y se prolongó hasta fines del siglo XV. Durante este periodo, las innovaciones son raras. La estructura de los edificios es básicamente la misma, “solo que la decoración evolucionó hacia una ornamentación exuberante que formaba unas pequeñas llamas que podían resaltar en los muros y ventanales. La altura se simplifico con una elevación de dos ó tres niveles pero con un triforio ciego; la bóveda de ojiva se hizo más compleja y decorativa”.

    Catedral de Notre Dame de Ruan

    La Catedral de Notre Dame de Ruan era una construcción gótica de planta de cruz latina de tres naves, la gran nave mayor aparentaba tener cuatro pisos por la falta de división entre arcadas y tribunas, así mismo se le agregó un crucero, transepto, cabecera saliente y dos capillas radiales; así mismo toda la iglesia estaba cubierta con bóveda de crucería cuatripartita tambien se le agregó un gran cimborrio, un gran roseton, una torre norte cuya construcción comenzó en 1145, y una torre sur, la cual comenzó a construirse en 1485.

    INGLATERRA

    En Inglaterra, el término gótico perpendicular se usó para nombrar las creaciones arquitectónicas producidas en Inglaterra entre los años 1350 y 1500, las cuales estaban caracterizadas por la bóveda de abanico mucho más decorativa

    Abadía de Westminster

    La iglesia de este conjunto conventual, respondió a un plano que contenía un doble transepto, una planta muy alargada de cabecera plana; además la nave central se levantaba en tres cuerpos arcadas, triforio a modo de galería falsa y ventanales que dejaban pasar la luz; así mismo tenía columnatas finas unidas para dar idea una mayor altura, también tenía un abside redondo con capillas radiadas y contrafuertes.

    ESPAÑA

    GÓTICO ISABELINO.

    En esta fase, el arte gótico español alcanzó su máxima plenitud en las construcciones religiosas después de “que los Reyes Católicos pretendieran consolidar el país como un estado moderno unificado, lo que propició el nacimiento de un arte que pudiera representar la unidad de las coronas, este arte recibió el nombre de Isabelino en honor a la reina Isabel; por otra parte, la presencia de numerosos artistas provenientes de Flandes u Holanda y Centroeuropa, determinó el nacimiento de una serie de técnicas que caracterizaron a este estilo por la complicación infinita de las nervaduras en las bóvedas, la utilización de todo tipo de arcos, y la abundante decoración con finos labrados”. Las últimas construcciones góticas españolas coincidieron en el tiempo con las primeras renacentistas, en las que se utilizaron de manera aleatoria los dos estilos, los cuales eran validos y novedosos, puesto que durante la producción del gótico de la época de los Reyes Católicos se entendió que hubo un abandono en las formas tradicionales, lo que se tomo como una expresión del pensamiento humanista, por ello se hizo imposible entender el Renacimiento español sin el gótico final.

    Catedral de Sevilla

    “Era la catedral más grande del mundo; tuvo su origen en la antigua mezquita de Sevilla, construida por el rey almohade Abd-al-Rahman II, ya que con la reconquista Sevilla se cristianizó y muchas de sus mezquitas se convirtieron en iglesias y campanarios”.

    Esta iglesia tenía planta de salón ó rectángular, determinada por la gran sala de oraciones de la antigua mezquita, con cinco naves, la central más alta que las otras, además poseía cabecera plana, crucero alineado y capillas laterales entre los contrafuertes; así mismo en el exterior la nave central tenía bóvedas con un acentuado peralte para evacuar el agua de la lluvia; tambien destacaban las portadas que coronaban cada uno de los accesos de este monumental edificio. La más antigua es la llamada Puerta del Perdón, situada al norte y que era el acceso principal de la antigua mezquita.

    El elemento más representativo de esta catedral es la Giralda, el alminar de la antigua mezquita, el cual fue mandado construir por el emir al-Mumin Abu Yacub en 1184. Esta torre estaba formada por dos paralepípedos superpuestos coronados con una cúpula y una punta metálica; en 1558 a 1568 se le añadieron el Cuerpo de Campanas de la catedral y la veleta giralda, de allí tomó el nombre la torre.

    Esta torre estaba constituida por varios cuerpos diferenciados, el cuerpo musulmán era el más antiguo, fue construido en 1184, para su construcción se emplearon los restos de algunos edificios y sillerías romanos, no se le agregaron escaleras, sino 35 rampas. Luego tiene el cuerpo de campanas, y encima un cuerpo de azucenas de bronce en sus esquinas; luego se le agregó otro cuerpo de arquitectura renacentista formado por un cuerpo de bolas de bronce, estrellas cúpula y cupulín y sobre éste una estatua de la Fe.

    Catedral de Salamanca

    La ciudad de Salamanca poseía dos catedrales una vieja, la cual, era un gran edificio basilical con planta de cruz latina y tres naves, un crucero marcado sobre las naves laterales y una cabecera formada por tres ábsides semicirculares precedidos por tramos rectos

    Las obras de esta iglesia comenzaron por el ábside mayor, cuyo espacio se cubrió con una bóveda que alcanzaba los muros altos del crucero y los tramos rectos de los ábsides; luego se agregó la llamada “Torre del Gallo, un gran cimborrio gallonado dispuesto sobre pechinas, el cual se elevaba sobre el tramo central del crucero desde donde alzaba en un tambor perforado mediante un doble orden de vanos abiertos cubierto con un casquete nervado y gallonado.”

    La Catedral Nueva se adoso a la catedral Vieja en 1513; se trataba de una iglesia con planta rectangular, de tres naves, donde además se ubicaron numerosas capillas entre contrafuertes, el techo fue cubierto con bóvedas estrelladas. En el crucero se úbico un magnífico cimborrio que se alzaba sobre pechinas con un tambor cilíndrico, que remataba en una linterna.

    Alemania

    Catedral de Colonia

    La catedral de Colonia era uno de los monumentos arquitectónicos más conocidos de Alemania, y “fue la estructura más alta del mundo hasta la construcción del monumento de Washington en 1884”. La construcción de esta iglesia gótica comenzó en 1248 y debido a una serie de interrupciones, fue acabada en 1880.

    Si bien esta iglesia tenía algunos elementos góticos como la planta de cruz latina de cinco naves, entre las que destacaba la central por su altura y estrechez, reforzando la sensación de verticalidad; el abovedamiento usado en las naves fue una construcción de acero muy moderna, la cual fue colocada en el siglo XVII; así mismo, en el exterior se colocaron una gran cantidad de contrafuertes, arbotantes y pináculos, en los que sobresalían sus elevadas agujas caladas de clara inspiración francesa;

    Sin embargo la obra de arte más importante que se encuentra en esta catedral es el sarcófago de unos de los reyes magos, un sarcófago dorado grande que se fechó a partir del siglo XIII, elaborado a modo del relicario más grande del mundo occidental, para que púdiera contener los restos de uno de los tres hombres que visito a Jesús.

    Escultura

    La escultura gótica siguió el precedente románico, con una amplia difusión de imágenes cuyo fin era adoctrinar a los fieles en los dogmas de la fe religiosa y decorar las fachadas de las catedrales. La escultura de los siglos XII y principios del XIII tuvo un carácter predominantemente arquitectónico. Las figuras más destacadas son las estatuas colosales de las jambas ó pilastras laterales de las portadas y las de los parteluces de los vanos de entrada; estas recibieron el nombre de estatuas - columna por estar adosadas a estos soportes; sin embargo muchas veces tendió a liberarse del marco arquitectónico, como una escultura exenta o de bulto redondo. Por otro lado, el relieve alcanzó su mayor gran esplendor en los retablos en los que estaba claro el horror vacui, las sillerías de coro y los sepulcros de grandes personajes.

    “Una de las características de esta escultura fue el convencionalismo en el tratamiento de los pliegues de los ropajes, que fueron reemplazados por volúmenes más sólidos y naturales; así mismo muchas de las estatuas se liberaron del soporte arquitectónico, convirtiéndose en estatuas de bulto, muy parecidas a las romanas”, con el típico rostro de las figuras góticas: forma triangular, mentón destacado, ojos almendrados y una marcada sonrisa.

    Al mismo tiempo se desarrollaron imágenes votivas de pequeño tamaño, con representaciones de la Piedad ó la Virgen con el Niño, entronizada ó amamantando al bebe Jesús, la llamada Virgen de la Leche, en las que se apreciaban los cambios iconográficos que se produjeron en el mundo gótico, como una mayor humanización y naturalismo.

    Virgen con el Niño de Sainte-Chapelle

    Se trató de una estatuilla de 41 cms, hecha en marfil policromado, realizada en 1250. El aspecto de sus ropajes, el rostro triangular con ojos alargados y la sonrisa ligeramente burlona, permitían situarla en el momento del florecimiento pleno del estilo gótico monumental del arte parisino, a mediados o durante el tercer cuarto del siglo XIII.

    María con el niño Nino Pisano Pisa. Museo Nazionale di San Matteo

    Se trató de una estatuilla de mármol policromado realizada en 1343; representaba a la virgen María lactando al niño Jesús; un tema que se conoce como la virgen de la leche; que por las características que presentaba en el rostro triangular con ojos alargados y la sonrisa ligeramente burlona y el aspecto de sus ropajes, lograban una composición llena de armonía y una gran ternura que la trasfiguraban en una unión superior, fantastica y emotiva.

    Piedad de la Catedral de Freiberg

    Era una estatuilla de madera policromada realizada a comienzos del Siglo XV, pertenece al “grupo de imágenes de visperas que se caracterizan por una exquisita expresión del sufrimiento interior. El rostro juvenil de la virgen se ve lleno de un gran dolor, lo que concuerda con los pliegues del vestido que carga; así mismo el cuerpo de Cristo descansa horizontal en los brazos de su madre, frente a esto la cabeza cae hacia atrás, expresión subrayada por el terrible naturalismo con el cae vertical el cabello”.

    Retablo de la Iglesia de la Cartuja de Miraflores

    Este retablo de madera policromada fue realizado por el escultor Gil de Siloé entre 1496 y 1499, para la Cartuja de Miraflores de Burgos, y fue sin duda una obra maestra que sorprendió por la riqueza ornamental que tenía y por la complejidad de formas y símbolos que la componían. Esta obra en su estructura general se apartó de los modelos habituales en los que el sentido narrativo llevaba un orden secuencial establecido en torno a una línea visual, que aunque estaba inscrita en un gran rectángulo, la disposición de los motivos en enmarques circulares alcanzó una singular originalidad.

    El tema central fue una crucifixión, en donde la figura de Cristo crucificado estaba inscrita en un gran círculo, en alusión a la Eucaristía; y a los pies de la cruz se hallaban las figuras de la Virgen y San Juan; y en el interior de este gran círculo otros cuatro circulos más pequeños representaban escenas de la Pasión, y en el exterior, también inscritos en círculos, fueron colocados los evangelistas; así mismo, en la parte inferior se representó la Anunciación y el Nacimiento enmarcados en círculos, y en los laterales se encontraban estatuas orantes y los escudos de armas de los reyes enterrados en la capilla, Juan II de Castilla y su esposa Isabel de Portugal; el resto de las figuras no respetaban una proporción uniforme, sino que varíaban de tamaño en función de su emplazamiento e importancia.

    Programas Iconográficos

    Los programas iconográficos eran prácticamente los mismos que en el periodo románico ya que se representaban temas religiosos como la vida de Cristo; sobre todo las escenas de la Pasión, con imágenes de Cristo crucificado; así como temas marianos o escenas de la Virgen, como madre, bella, idealizada que mostraba una gran humanización.

    Pintura:

    La pintura fue “el arte que tuvo el cambio más radical en el gótico, ya que perdió su lugar natural, el muro, para ubicarse sobre nuevos soportes tales como la tabla y el retablo, además la técnica más utilizada fue la del temple, y más adelante la del óleo, que le daba un mayor colorido y permitía un acabado más minucioso; igualmente el gran reto del último período de la pintura gótica fue la conquista de la tercera dimensión, la representación naturalista de los objetos y el abandono de los convencionalismos abstractos románicos”.

    El desarrollo de la pintura gótica tuvo varias fases, una primera etapa correspondió a la pintura conocida como gótico lineal, la cual apareció hacia el 1200 ó duoccento, en esta fase los temas que dominaban eran los religiosos, los cuales tenían una función eminentemente didactica; además se caracterizaban por tener un fondo dorado, así mismo las figuras tendían a ser planas, con colores vivos y aún tenían muchos convencionalismos románicos como el uso de la línea negra para separar los espacios de colores, también hubo un predominio del naturalismo, y los temas se trataron con sencillez.

    La segunda etapa correspondió a la pintura italogótica del siglo XIV ó treccento, la cual fue el germen de la pintura moderna, ya que desapareció la línea negra, surgió el claroscuro y hubo una gran preocupación por el volumen y la profundidad, esto condujo a un mayor estudio de la perspectiva y la reproducción de los estados anímicos y los sentimientos. “En esta época se podían distinguir tres escuelas: la escuela romana, cuyo máximo representante fue Pietro Cavallini; la escuela florentina, cuyos máximos representantes fueron Cimabue, que mantuvo ciertos elementos de la tradición bizantina y consiguió éxitos innegables en el conocimiento de la perspectiva, el volumen y la monumentalidad de sus figuras; y Giotto di Bondone del que se hablara más adelante y la escuela en Siena, que se caracterizó por la elaboración de un arte cortesano, colorista, cromático e irreal, con los fondos dorados de tradición bizantina; además ofrecía una visión idealizada de la realidad, su máximo representante fue Duccio di Buoninsegna.”

    CIMABUE

    Cimabue nació en 1240 en Florencia, fue uno de los primeros pintores que revolucionaron la pintura gótica ya que fue un pionero en el movimiento hacia la busqueda del naturalismo, pues “sus figuras demostraron proporciones y sombras más realistas; así mismo fue considerado como uno de los fundadores del arte moderno ya que fue el maestro de Giotto; en 1272 se hallaba en Roma, lo que le permitió entrar en contacto con la corriente clásica representada por Cavallini”.

    Cimabue fue comisionado para pintar dos enormes frescos para la Basilica de San Francisco de Asis, estos estaban ubicados en las paredes de los transeptos y los temas escojidos fueron la Crucifixion y el descendimiento de la cruz; ambas pinturas tenían una cruz en el centro y estaban llenas de numerosas figuras. Desafortunadamente hubo un incendio en la basílica y estos frescos resultaron seriamente dañados

    Madonna en Majestad

    Era la única obra de Cimabue que se conservó, “pertenecía a la colección de la Galeria de los Uffizi”, esta obra tenía una gran composición en temple sobre madera en la que se observaba a la Virgen con el Niño, entronizados en un trono monumental decorado con incrustaciones geométricas, acompañada de ocho ángeles distribuidos de forma simétrica y, en la parte baja, enmarcadas por arcos se observaban las figuras de cuatro profetas.

    “La realización pictórica de esta obra fue de una minuciosidad tal que parecía responder al horror vacui, ya que los ropajes de la Virgen y del Niño estaban recorridos por haces de líneas doradas que describían las aristas de los pliegues”; las alas de los ángeles, por su parte, desplegaban los distintos colores del arco iris, igualmente el tratamiento de los rostros respondía a un deseo de manifestar su entidad corpórea, mediante sombras hechas con un fino trazo, que se aplicaron sobre un color uniforme; también conservaba los elementos compositivos simétricos y la iconografía de los modelos bizantinos, pero buscaba a la vez una tercera dimensión, que se obtenía con la perspectiva que daba el trono, cuya importancia le permitió transportar la imagen divina a un espacio indefinido, haasta llevarla a través de una doble hilera de ángeles para conferir al trono la radiante grandeza de un palacio celestial, esto le dío una especial importancia que se atribuía al trono, el cual, constituía el elemento arquitectónico de su pintura y que asumía el papel de envoltura de la Madonna.

    DUCCIO DI BUONINSEGNA

    Duccio nació en Siena y se convirtió en uno de los precursores del estilo renacentista, que llevó a la cumbre el arte medieval italiano de tradición bizantina. Sus trabajos, de carácter religioso, se caracterizaron por la sensibilidad del dibujo, la habilidad de la composición, la calidad decorativa similar a los mosaicos y una intensidad emocional mayor que la del modelo bizantino que seguía. Si bien fue discipulo de Cimabue, la pintura de Duccio pudo parecer menos conmovida y menos conmovedora que la de su maestro, pero, en realidad, sólo era menos dramática; así mismo estaba relacionada con el contenido narrativo y dramático que deseaba expresar en sus obras.

    Madonna Rucellai

    Fue elaborada entre 1308 y 1311 y fue la única obra firmada por Duccio; se trató de un gran retablo al temple sobre madera pintado; el cual se encontraba en la galería de los Uffizi.

    La composición constaba de una parte frontal que mostraba a una Virgen sentada en el trono con el Niño Jesús rodeada por ángeles de rodillas, sobre un fondo de oro de tradición bizantina; si bien la Madonna Rucellai era muy similar a la Madonna de Cimabue, Duccio le dio a su obra un tono espiritual totalmente diferente, en el que ya no se volvió a encontrar el mismo afán arquitectónico en la composición, ya que, la Madonna parecía lejana como en las imágenes bizantinas, y los ángeles que la rodeaban ya no formaban un elemento de gracia, aquí aparecio un sentido de la belleza, es decir una forma armoniosa y expresiva, en la que si bien el trono no tenía respaldo, un velo coloreado detrás de la Virgen se contraponía con una finísima relación de tonos que se unían al azul del manto, el cual no presentaba resaltes, ya que estaba determinado por la forma el contorno finísimo y la línea serpenteante del borde dorado, así mismo, la perspectiva del trono la presentaba simultáneamente de frente y de lado, y los ángeles no formaban columnas vivientes a los lados del trono; ya que aparecían arrodillados uno sobre otro, como si este espacio sin profundidad pudiese sostenerlos.

    Los nuevos programas Iconográficos.

    Los temas usados eran de tipo religioso, en los que destacaban las narraciones sobre la vida y la pasión de Cristo y la Virgen; tambien aparecío un nuevo tipo de tema el del retrato, el cual se ubico junto a motivos heráldicos y visiones de la vida campesina.

    El estilo Internacional.

    La última etapa de la pintura gótica correspondió al llamado gótico internacional, el cual “surgió de la síntesis del estilo italiano de la escuela de Siena en la corte de Borgoña. El resultado fue un estilo elegante, artificioso y extravagante, que tratara de glorificar a una nobleza feudal que se está extinguiendo, y que se convirtió un estilo protegido por la nobleza y los reyes, el cual se caracterizó por su afición al lujo, los colores brillantes, el uso fondo dorado, el dibujo curvilíneo, las pocas preocupaciones espaciales y por ser un estilo un tanto decorativo”. El gótico internacional se extendió por toda Europa con Jean Fouquet y la escuela flamenca, la cual comenzó una búsqueda colectiva de la perfección técnica y dibujística, que la hizó muy minuciosa en los detalles. Los pintores flamencos se apartaron de la estética internacional acercándose a la realidad natural y a la armonía de las formas, así mismo utilizaron la pintura al óleo, lo que permitió una gran riqueza cromática ya que la luz se independizó del color, comenzaron con la busqueda de la perspectiva debido a la obsesión por el detalle, así mismo se desarrolló toda una iconografía religiosa de carácter simbólico, aunque en un ambiente burgués, lo que permitió ubicar las escenas en un espacio natural continuo, sobre todo en interiores y de vida cotidiana, esta escuela tuvo su máximo representante en Jan Van Eick y pero quizás quien marcó este período fue Hieronymus van Aeken llamado el Bosco, que utilizó temas alegóricos con los que creó un mundo fantástico con un profundo carácter religioso y burlesco.

    JEAN FOUQUET

    Jean Fouquet, el fundador de la escuela francesa, nació en Tours en 1420, donde estudió arte, luego continuó sus estudios en París e Italia, donde comenzó a realizar retratos y pinturas religiosas, caracterizados por colores claros y resplandecientes, un dibujo vigoroso, con un gran sentido del humor, además de una gran precisión en los detalles y una técnica exquisita.

    Retrato de Carlos VII rey de Francia (Museo del Louvre, París),

    JAN VAN EICK

    Jan van Eyck pintor flamenco nacido en Maastricht en 1390, fue el fundador del Ars nova un estilo pictórico del gótico tardío en el siglo XV, que anunciaba el Renacimiento Nórdico de Europa, este periodo del arte flamenco se caracterizó por el naturalismo de vívidos colores al óleo, la meticulosidad de los detalles, la precisión de las texturas y la búsqueda de nuevos sistemas de representación de la perspectiva, en la que no recurrió tanto a la perspectiva a través de un punto de fuga como los renacentistas, sino que logró dar cierta impresión de tridimensionalidad mediante la llamada técnica de las veladuras o “el uso de tenues capas de óleo aplicadas unas sobre otras y todas sobre un soporte que constaba de una tabla de madera, pulida y pintada de blanco, con lo que se lograba una mayor reflexión de la luz con el consecuente brillo de la pintura y una sugestión de profundidad”; así mismo, siempre se ha atribuido a Van Eyck la invención de la pintura al óleo, en realidad la invención que realizó Van Eyck fue la de la fórmula del óleo con secado rápido una técnica que permitía entre otras cosas una buena composición mediante veladuras.

    Retrato del Matrimonio Arnolfini

    Esta obra era un oleo sobre madera, en la que el artista desplegó un inusitado juego nde planos visuales, ya que la mirada del marido salía del cuadro, pero no se fija en el espéctador sino en una determinada persona, lo mismo sucede con el perro que esta en primer plano, el cual mira hacía arriba.

    HIERONYMUS VAN AEKEN, EL BOSCO

    El Bosco nació en Holanda en 1450, era hijo de pintores que formaban parte del respectivo gremio. En 1480 se casó con Aleyt van der Mervenne, proveniente de una familia noble acomodada, lo que le dio una gran libertad para elegir los temas de sus obras, en las que abundaba el sarcasmo y la imaginería de tipo onírico, además de lo grotesco, ya que, en esta época a raíz de la inquisición, había una cosmovisión medieval repleta por la creencia en hechiceras, la alquimia y la magia, así mismo abundaron los rumores apocalípticos, lo que provocó que El Bosco intentara dar un mensaje moralista, satírico anticipandose al humanismo de la Edad Moderna.

    El Bosco, técnicamente pintaba alla prima, es decir, con la primera pincelada de óleo, sin demasiados retoques ni pinceladas, sin embargo, hacía un concienzudo y detallado proyecto antes de la ejecución; innova, asímismo, en la gama de colores, con tonalidades más contrastadas y atrevidas; así mismo se destacaba por representar a personajes santos como sujetos comunes y vulnerables lo que les hacia más cercanos al espectador.

    Triptico del carro de heno

    Este tríptico era un oleo sobre madera, elaborado en 1500 y se encontraba en el Museo del Prado; el panel izquierdo mostraba el pecado de los ángeles rebeldes, la creación de Eva, el pecado de Adán y Eva y su expulsión del Paraíso; en el panel derecho estaba ubicada una imagen del infierno, mientras que en el panel central se veía un carro de heno que era arrastrado en dirección al infierno del panel derecho, mientras una multitud luchaba por coger pajitas de heno del carro; luego el papa, el emperador alemán y el rey francés seguían de cerca sobre sus caballos, detrás de ellos se encontraba un monje, unas religiosas, un mendígo ciego, gitanos, un curandero y un juglar se entregaban a actividades pecaminosas y fraudulentas. En la parte superior del panel aparecía Cristo en una nube, que alzaba los brazos en un gesto de misericordia y mostraba las llagas de sus manos para recordar que murió para liberar al mundo del pecado; pero nadie parecía hacerle caso, excepto un ángel que estaba sentado encima del carro.

    Esta obra contenía un gran mensaje que se hallaba centrado en la figura de Cristo situada por encima del carro, “el pecador podía consolarse y reconfortarse meditando sobre la pasión y las llagas de Cristo, ya que cada día Cristo mostraba sus estigmas a Dios Padre para recordarle que todo pecador arrepentido puede ser perdonado. Así pues, el panel central del tríptico, que si bien no representaba el Juicio Final si hacía referencia a él, ya que no insistía en el carácter pecaminoso de la humanidad, sino en la salvación y la redención a las que el género humano siempre podía aspirar gracias a la muerte de Cristo en la cruz”.

    Giotto y el nuevo concepto de la pintura.

    Giotto di Bondone “fue el gran patriarca y fundador de la pintura moderna europea, ya que rompió con la tradición bizantina y se adentró en el mundo nuevo, vivo y naturalista que ya había alcanzado la escultura gótica; si bien Giotto todavía se movía en un ámbito medieval, se convirtió en el puente que enlazó con el nuevo espíritu del Renacimiento, del que fue precursor y casi primer exponente; ya que el provocó que el artista tuviera una nueva consideración histórica y social”.

    Este artista le dió un nuevo concepto a la pintura, porque “la doto de un naturalismo que se adelantó en muchos aspectos al renacimiento; ya que tomo el mundo que tenía a su alrededor y trató de reflejarlo lo más fielmente posible, alli las escenas que se hallaban delante del espectador dejaron de ser algo distante, deshumanizado y construido a base de rígidas fórmulas; y se convirtieron en algo real que sucedía delante del espectador y le invitaban a participar en ellas, esta sensación de realidad estaba dada por el poder crear la ilusión de profundidad en una superficie plana”, así mismo el descubrimiento de la perspectiva cambió todo el concepto de la pintura, pues creó alrededor de los personajes, todo un ámbito en el que se movían y que les reforzaba en su realidad, igualmente, sus figuras sólidas tenían volumen corporeidad, aire y espacio; esto contribuyó a que las composiciones se caracterizaran por una admirable claridad y armonía en el esquema y una monumental disposición de las masas, con una estructura lógica que suponía la subordinación de todo elemento secundario al centro dramático de la narración, en donde el paisaje recien descubierto, desterraba los fondos dorados del trecento, aunque empleaba aún algunos elementos convencionales bizantinos como el pintar las montañas en forma de rocas de perfiles angulosos con colores reducidos en cantidad pero riquísimos en sus gradaciones, algo desconocido hasta él.

    Giotto nació en Colle di Vespingano al norte de Florencia era hijo de un labrador y fue considerado el primer artista de muchos que contribuyó a la creación del Renacimiento Italiano. Su primer gran trabajo fue en Asís, en la basílica de San Francisco, entre 1290 y 1295, en donde pintó 28 frescos que representaban la vida de San Francisco en la zona inferior; para ello se basó en las fuentes literarias, así mismo inventó un nuevo lenguaje artístico naturalista, sencillo y directo, muy de acuerdo con las doctrinas del santo. En estas obras narraban sucesos acaecidos hacía relativamente poco tiempo y en ella aparecían representados casi ellos mismos, sus ciudades, edificios conocidos; eran algo cercano y humano en el que había una perfecta armonía entre los fondos arquitectónicos y paisajísticos y las figuras humanas, integrándolas en un ambiente urbano o rural que las completaba y las hacía vivir.

    Entre 1302 y 1306, Giotto elaboró una de sus obras más importantes en los frescos de la Capilla de los Scrovegni o Capilla de la Arena en Papua, en donde se reveló su arte en toda su plenitud; en esta obra los frescos estaban dispuestos en tres franjas o zonas superpuestas y representaba un ciclo de escenas de la vida de Jesús, el ciclo se iniciaba en la zona superior de la pared derecha, con seis escenas de la vida de San Joaquín y Santa Ana; luego seguían otras seis, en la pared de la izquierda, con la vida de la Virgen que terminaba en un arco de triunfo, al lado del cual había una figura de la Anunciación y en la parte de arriba una imagen de Dios dándole al arcángel Gabriel el mensaje para la Virgen, lo que servía de lazo de unión con las escenas de la franja intermedia, en las que se desarrollaban escenas de la vida de Cristo hasta la traición de Judas, la cual terminaba en la parte más baja con los episodios de la Pasión; y en la parte más baja en un podio que imitaba placas de mármol, se enmarcaron figuras alegóricas de las Virtudes y los Vicios; así mismo, la bóveda representaba un cielo estrellado y varias imágenes con los bustos de Cristo, la Virgen y profetas; así mismo en esta capilla, Giotto logró su plenitud, ya que acentuó el volumen de las figuras, su monumentalidad e integración en el paisaje gracias a que los perfiles eran más difuminados; también el dramatismo de las escenas, se hizo más contenido que antes por su potencia y sobriedad; así mismo el paisaje, más convencional y geométrico, reforzó con su volumen, el de las figuras, creando una mayor gama de colores.

    Luego pintó la Madonna in maestá de la Galeria de los Uffizi, esta obra creada para la iglesia de Ognisanti, era una obra gran calidad artística, en la que la figura de la Virgen era sólida, naturalista y perdió la rigidez bizantina; tambien pintó la Capilla de la Magdalena de la iglesia de San Francisco de Asís, decorandola por completo de frescos con historias de la vida de la santa.

    En 1320, decoró las cuatro capillas de la iglesia de Santa Croce de Florencia, de la que sólo se conservan los frescos de las capillas Peruzzi y Bardi; en ellas representó episodios de la vida de San Juan Bautista en la Peruzzi y de San Juan Evangelista en la Bardi. En 1328 en Nápoles trabajando para Roberto de Anjou, pero se han perdido todas las obras de este periodo. Desde 1335 hasta 1336 trabajó en Milán para el duque Azzone Visconte en unos frescos hoy perdidos; luego volvió a Florencia donde murió el 8 de enero de 1337.

    Francisco predicando a los pájaros

    Esta fue una de las obras más interesantes de todas las representaciones llevadas a cabo por Giotto, en el ciclo de la vida del santo de Asís. La obra estaba basada en una Leyenda que decía que "Estando el beato Francisco en Bevagna predicó a muchos pájaros los cuales, exultantes, alargaban el cuello, batían las alas, abrían los picos, le tocaban la túnica; y todo esto lo veían sus compañeros que le esperaban en el camino". Giotto, representó en la escena a San Francisco con un acompañante, que expresaba con su rostro la perplejidad de lo que está aconteciendo, también sus manos caracterizaban su reacción. Giotto ambientó la escena en plena naturaleza, con un paisaje de rasgos muy breves que sirvió de marco excepcional y convincente para la representación del sermón de San Francisco; así mismo los colores apagados potenciaban la fuerza volumétrica de las figuras, a la vez que las relacionaban con una gama cromática de tonos parecidos, igualmente los pájaros se arremolinaban ante las palabras dirigidas por el santo, unos en el suelo, otros en el tronco del árbol de la derecha, algunos volando libremente alrededor de los dos franciscanos. “La importancia de esta escena, estaba dada por dos factores, uno era su localización, ya que al estar ubicada en la entrada de la basílica, estaba determinada a ser un auténtico símbolo del camino por el que optó San Francisco en su vida y el otro factor fue la metáfora de la invitación al espíritu de pobreza y amor a los componentes de la Naturaleza que representaban su orden, así mismo la escenas era altamente emotiva y clarificadora para el fiel que iba al templo de Asís para adorar al santo”

    El Anuncio a Santa Ana

    Este fresco se sitúaba en el registro superior del muro sur de la nave de la capilla Scrovegni. En ella Giotto representó una escena que “destacaba principalmente por la caja espacial donde se desarrolla el suceso, allí el artista abrió los muros del edificio para que se pudieran ver los sucesos”. El tema principal del escenario fue el motivo de “Ana que, arrodillada en el centro de su habitación, escuchó por boca del ángel el anuncio de su futura concepción”, así mismo llamó la atención la cantidad de detalles anecdóticos que ilustraban la escena. Algunos de los más llamativos fueron los diferentes elementos decorativos tanto de la casa de la santa como de su habitación, como por ejemplo, el frontón decorativo del frente, las molduras igualmente decoradas, el tejado, el artesonado del techo, la barra de la que colgaban unas cortinas, el arcón, incluso la disposición de la aureola. Todo ello cumplía dos funciones, por un lado el artista cubrió gran parte del espacio y profundidad que ha dado a la escena; por otro llevó un suceso milagroso a la cotidianeidad del mundo presente, con lo que se daba sensación de realidad. Fuera de la casa, sentada bajo las escaleras, se situó un personaje que hilaba con tranquilidad. Su presencia cumplía un papel importante, ya que, Giotto trazó una fuerte diagonal imaginaria a partir de las cabezas de los tres protagonistas, situando a Santa Ana en el punto central de esa línea. De esta manera, ha conseguido cierta tensión, otro elemento que destacaba era la cama vacía del fondo, que se relacionaba con el momento de la concepción sin mácula del milagro, y que a la vez funcionaba además como prefiguración de la encarnación de Cristo en María.

    Madonna in Maestá de los Uffizi

    En 1305 se le encargó a Giotto la realización de un retablo que decoraría el altar mayor de la iglesia florentina de Ognissanti, el tema escojido por el artista fue la Madonna in Maestá, es decir la Virgen y el Niño rodeada por ángeles.

    “La pintura presentó a la Virgen, sentada en su trono, con el Niño apoyado en sus rodillas, colocados sobre un trono que presentaba un desarrollo absolutamente arquitectónico, ricamente ornamentado con motivos de carácter gótico en todos sus frentes, incluso en el pedestal del primer término, sobre el que fue levantado; el espacio estaba creado por una estructura que le daba la solemnidad e importancia que tenía el argumento de la obra”, así mismo, la Virgen presentaba una volumetría excepcional, dada por el suave modelado de los pliegues de su túnica, que caían con peso hacia el suelo dandole forma a unas gruesas piernas, tambien destacaba la calidad que consiguió el autor en cada uno de los ropajes de la madonna, desde los finos ribetes dorados de la túnica, hasta las diversas matizaciones de blanco, dejando trasparentar el pecho de la Virgen, a su lado, la figura del niño Jesús también presentaba una fuerte corporeidad, vestido con finas telas y bendiciendo con la mano, la cual se convirtió en el centro de toda la composición, junto al corazón de la Madre, a ambos lados del grupo central, se colocaron grupos de santos con rostros perfectamente caracterizados y dirigiendo sus miradas hacia la Virgen, incluso se podían ver hasta los que se encontraban por detrás de los brazos del trono, lo que daba una mayor idea de profundidad espacial. Más abajo, en un primer plano, “dos ángeles arrodillados ofrecían jarrones con lirios y rosas a María, como símbolo de su pureza, lo que le proporcionaba a la obra una gran elegancia, tanto por la luminosidad que se alcanzaba por el fondo de oro como por las orlas de los santos”, igualmente, la confluencia de miradas se dirigía hacia el núcleo compositivo, con lo que se establecía una relación entre todos los personajes, y la mirada de la Virgen, que se dirigía hacia el exterior del cuadro e invitaba al espectador a formar parte de la representación.

    conclusion

    La Edad Media fue un periodo de la historia europea que transcurrió desde la desintegración del Imperio Romano de Occidente, en el siglo V, hasta el siglo XV. El término desde su origen indicaba una parálisis del progreso, por lo que la edad media fue considerada un periodo de estancamiento cultural, ubicado cronológicamente entre la gloria de la antigüedad clásica y el renacimiento. La culminación a finales del siglo V de una serie de procesos de larga duración, entre ellos la grave dislocación económica y las invasiones y asentamiento de los pueblos germanos en el Imperio Romano, hizo cambiar la faz de Europa, esto provocó que durante los siguientes 300 años, Europa occidental mantuviese una cultura primitiva instalada sobre la compleja y elaborada cultura del Imperio Romano, el cual nunca llegó a perderse u olvidarse por completo.

    Durante este periodo no existió realmente una maquinaria de gobierno unitaria en las distintas entidades políticas, si bien en este momento comenzó la formación de reinos a través del desarrollo político y económico el cual era fundamentalmente local; aunque el comercio regular desapareció casi por completo la economía monetaria nunca dejó de existir de forma absoluta ya que, en la culminación de un proceso iniciado durante el Imperio Romano, los campesinos comenzaron a ligarse a la tierra y a depender de los grandes propietarios para obtener su protección y una rudimentaria administración de justicia, en lo que constituyó el germen del régimen señorial; así se formaron los principales vínculos entre la aristocracia guerrera, entre ellos los lazos de parentesco tambien empezaron a surgir las relaciones feudales; estos vínculos con la tierra, prestaciones militares y otros servicios tuvieron su origen en la antigua relación romana entre patrón y cliente o en el llamado comitatus. Todos estos sistemas de relación impidieron que se produjera una consolidación política efectiva.

    Hacia mediados del siglo XI Europa se encontraba en un periodo de evolución desconocido hasta ese momento. La época de las grandes invasiones había llegado a su fin y el continente europeo experimentaba el crecimiento dinámico de una población ya asentada. Renacieron la vida urbana y el comercio regular a gran escala y se desarrolló una sociedad y cultura que fueron complejas, dinámicas e innovadoras. Este periodo se ha convertido en centro de atención de la moderna investigación y se le ha dado en llamar el renacimiento del siglo XII.

    Durante el siglo XIII se sintetizaron los logros del siglo anterior. Las relaciones comerciales integraron a Europa gracias especialmente a las actividades de los banqueros y comerciantes italianos, que extendieron sus actividades por Francia, Inglaterra, Países Bajos y el norte de África, así como por las tierras imperiales germanas. Los viajes, bien por razones de estudio o por motivo de una peregrinación fueron más habituales y cómodos. También fue el siglo de las Cruzadas; estas guerras, iniciadas a finales del siglo XI, fueron predicadas por el Papado para liberar los Santos Lugares cristianos en el Oriente Próximo que estaban en manos de los musulmanes. Concebidas según el Derecho canónico como peregrinaciones militares, los llamamientos no establecían distinciones sociales ni profesionales. Estas expediciones internacionales fueron un ejemplo más de la unidad europea centrada en la Iglesia, aunque también influyó el interés de dominar las rutas comerciales de Oriente. La alta edad media culminó con los grandes logros de la arquitectura gótica, los escritos filosóficos de santo Tomás de Aquino y la visión imaginativa de la totalidad de la vida humana, recogida en la Divina comedia de Dante Alighieri.

    Si la alta edad media estuvo caracterizada por la consecución de la unidad institucional y una síntesis intelectual, la baja edad media estuvo marcada por los conflictos y la disolución de dicha unidad. Fue entonces cuando empezó a surgir el Estado moderno, aún cuando éste en ocasiones no era más que un incipiente sentimiento nacional, y la lucha por la hegemonía entre la Iglesia y el Estado se convirtió en un rasgo permanente de la historia de Europa durante algunos siglos posteriores. Pueblos y ciudades continuaron creciendo en tamaño y prosperidad y comenzaron la lucha por la autonomía política. Este conflicto urbano se convirtió además en una lucha interna en la que los diversos grupos sociales quisieron imponer sus respectivos intereses. Una de las consecuencias de esta pugna, particularmente en las corporaciones señoriales de las ciudades italianas, fue la intensificación del pensamiento político y social que se centró en el Estado secular como tal, independiente de la Iglesia.

    La única institución medieval europea con carácter universal fue la Iglesia Cristiana la cual basada en la persona de Jesús de Nazareth nació como una rama de las religiones proféticas; esta religión sufrio persecuciones y alcanzó su oficialización en el 313 a través del Edicto de Milán, lo que le dió un dominio total en el Imperio Romano durante toda la edad media ya que la Iglesia católica, organizada en torno a una estructurada jerarquía con el papa como indiscutida cúspide, constituyó la más sofisticada institución de gobierno en Europa occidental. El Papado no sólo ejerció un control directo sobre el dominio de las tierras del centro y norte de Italia sino que además lo tuvo sobre toda Europa gracias a la diplomacia y a la administración de justicia mediante el extenso sistema de tribunales eclesiásticos. Además las órdenes monásticas crecieron y prosperaron participando de lleno en la vida secular. Los antiguos monasterios benedictinos se unieron en la red de alianzas feudales. Los miembros de las nuevas órdenes monásticas, como los cluniasences y cistercienses, disecaron zonas pantanosas y limpiaron bosques; otras, como los franciscanos, entregados voluntariamente a la pobreza, pronto empezaron a participar en la renacida vida urbana. La Iglesia ya no se vería más como una ciudad espiritual en el exilio terrenal, sino como el centro de la existencia. La espiritualidad altomedieval adoptó un carácter individual, centrada ritualmente en el sacramento de la eucaristía y en la identificación subjetiva y emocional del creyente con el sufrimiento humano de Cristo. La Iglesia se veía a sí misma como una comunidad espiritual de creyentes cristianos, exiliados del reino de Dios, que aguardaba en un mundo hostil el día de la salvación, esto ocasionó la aparición de una nueva espiritualidad que en la baja edad media fue el auténtico indicador de la turbulencia social y cultural de la época. Esta espiritualidad estuvo caracterizada por una intensa búsqueda de la experiencia directa con Dios, bien a través del éxtasis personal de la iluminación mística, o bien mediante el examen personal de la palabra de Dios en la Biblia. En ambos casos, la Iglesia tanto en su tradicional función de intérprete de la doctrina como en su papel institucional de guardián de los sacramentos no estuvo en disposición de combatir ni de prescindir de este fenómeno, por ello toda la población, laicos o clérigos, hombres o mujeres, letrados o analfabetos, podían disfrutar potencialmente de experiencias místicas concebidas como un don divino de carácter personal que resultaba totalmente independiente del rango social o del nivel de educación pues era indescriptible, irracional y privado. Por otro lado, la lectura devocional de la Biblia produjo una percepción de la Iglesia como institución marcadamente diferente a la de anteriores épocas en las que se la consideraba como algo omnipresente y ligado a los asuntos terrenales. Cristo y los apóstoles representaban una imagen de radical sencillez y al tomar la vida de Cristo como modelo de imitación, hubo personas que comenzaron a organizarse en comunidades apostólicas que en ocasiones se esforzaron por reformar la Iglesia desde su interior para conducirla a la pureza y sencillez apostólica, mientras que en otras ocasiones se desentendieron simplemente de todas las instituciones existentes. Esta situación de agitación e innovación espiritual desembocaría en la Reforma protestante; las nuevas identidades políticas conducirían al triunfo del Estado nacional moderno y la continua expansión económica y mercantil puso las bases para la transformación revolucionaria de la economía europea. De este modo las raíces de la edad moderna pueden localizarse en medio de la disolución del mundo medieval, en medio de su crisis social y cultural.

    En el ámbito cultural, la edad media supuso un resurgimiento intelectual al prosperar nuevas instituciones educativas como las escuelas catedralicias y monásticas. Se fundaron las primeras universidades, se ofertaron graduaciones superiores en medicina, derecho y teología, ámbitos en los que fue intensa la investigación: se recuperaron y tradujeron escritos médicos de la antigüedad, muchos de los cuales habían sobrevivido gracias a los eruditos árabes y se sistematizó, comentó e investigó la evolución tanto del Derecho canónico como del civil, especialmente en la famosa Universidad de Bolonia. Esta labor tuvo gran influencia en el desarrollo de nuevas metodologías que fructificarían en todos los campos de estudio. También se produjeron innovaciones en el campo de las artes creativas. La escritura dejó de ser una actividad exclusiva del clero y el resultado fue el florecimiento de una nueva literatura, tanto en latín como, por primera vez, en lenguas vernáculas, parta ello se trabajó principalmente en la conservación y sistematización del conocimiento del pasado, se copiaron y comentaron las obras de autores clásicos.

    Este gran aporte se vio manifestado en la rama artística la cual presento una evolucion que se inicio con el Arte Paleocristiano el cual podía entenderse como una evolución del arte romano tardío, al que la religión cristiana le incorporo un nuevo espíritu al arte y lo cargó de símbolos, convirtiendolo en un arte simple, estilizado, renunciando a la perspectiva y a la profundidad espacial, eliminando las proporciones y las rasgos del cuerpo humano para acentuar los aspectos religiosos. El fondo predominó sobre la forma y la expresividad venció a la estética. Al hablar de períodos dentro del arte paleocristiano, se reconocen claramente dos etapas: la primera alcanza desde el siglo II al 313, fecha del Edicto de Milán en el que se otorga libertad al cristianismo; y la segunda que abarca desde el 313 hasta el siglo VII. El primer momento se caracteriza por la persecución y el recogimiento mientras que durante el segundo el cristiano toma la calle y sus monumentos pueblan todo el espacio. Las catacumbas fueron la construcción arquitectónica más característica de este primer periodo; estas eran unos cementerios excavados formados por un amplio número de galerías que conducían a amplias cubiculos. En las paredes de éstas se abrían los arcosolium donde eran depositados los restos de los muertos. La arquitectura paleocristiana tras el Edicto de Milán suele subdividirse en dos grupos la del Imperio Romano de Oriente y la del de Occidente. En occidente se uso la adaptación de la basílica romana convirtiendola en el tipo de iglesia habitual, esta construcción se trataba de un edificio de planta rectangular o basilical con tres naves separadas por columnas con un ábside semicircular, en la que la nave central era mas alta las laterales y se encontraba techada con cubierta de madera; la fachada solía tener tantas puertas como galerías con un nartex o atrio a los pies del templo; otro tipo de gran edificio occidental fue el baptisterio con una planta circular o poligonal con galerias bajas, inspirándose en modelos romanos; en donde, la pila bautismal solía estar en el centro del edificio enmarcada por columnas. En el Imperio Romano de Oriente la arquitectura paleocristiana recibió la influencia del arte griego por ello los templos presentaban planta de cruz griega, aunque muchos eran octogonales o circulares, al igual que los baptisterios, así mismo las cubiertas más utilizadas fueron las bóvedas y las cúpulas sobre pechinas; estas influencias llegaron a occidente a través del exarcado bizantino de Ravena, en donde se crearon edificios de planta circular con dos pisos, techados coronados con una cúpula monolítica en la que se conjugaban elementos orientales con romanos; así mismo aparecieropn edificios con planta de cruz griega, con un interior techado con bóvedas de cañón y cerrada por una cúpula, con paredes de ricos mosaicos; en los que se utilizaban figuras paganas con un claro simbolismo cristiano así mismo se incorporaron temas propios cristianos como el Crismón, el Cordero, el Ancora o el Pez, los cuales simbolizaban a Cristo, todo esto dara origen al nacimiento de una temática que hacía referencias continuas al Cristianismo, la cual se trataba de oraciones representadas, con una iconografía totalmente simbólica

    La evolución del arte paleocristiano motivó la aparicion del Arte Bizantino, el cual mantuvo importantes rasgos de la cultura greco-latina, pudiendo considerarse al arte bizantino un arte puente entre la antigüedad y el futuro Renacimiento. En Bizancio, si bien no se crearon valores nuevos, se supo asimilar y fundir las influencias que llegaron desde los Imperios Romanos de Oriente y Occidente. Entre los siglos V y VII se desarrolló la llamada Primera Edad de Oro Bizantina, en la que el arquitecto bizantino comenzo a jugar constantemente con las cúpulas y con las plantas; así mismo entre los siglos IX al XII apareció una Segunda Edad de Oro, enmarcada en medio de una crisis iconoclasta donde las imágenes fueron prohibidas y el arte vivió un periodo de decadencia en el que la arquitectura bizantina mantuvo la grandeza romana y la elegancia griega, utilizando el elemento oriental como unión, para ello se usó una cúpula sobre pechinas, así mismo se uso el ladrillo como material para crear las bóvedas de aristas dandole la suntuosidad decorativa; tambien se uso la planta de cruz griega, envuelta en un espacio cuadrangular, lo que permitió el uso y disfrute de cúpulas y bóvedas. A partir del siglo IX la iconografía bizantina estuvo basada con escenas del ciclo evangélico o de la Virgen, las cuales eran representadas en el mosaico el cual se convirtió en el verdadero protagonista en la decoración ya que la pobreza de los materiales constructivos exigía la utilización de un revestimiento que otorgara riqueza a la edificación, lo que solo fue logrado por el mosaico.

    Con la caída del Imperio romano de Occidente a manos de los pueblos invasores, se produjeron una serie de cambios que propiciaron el surgimiento de un nuevo tipo de arte conocido como Prerrománico, el cual apareció como una de las aventuras estéticas más complejas y fascinantes del devenir de la humanidad; este estilo tuvo gran autonomía de formas y soluciones estrechamente ligadas al Arte Bizantino. Su mayor desarrollo se dio en Europa, donde su peculiar y sorprendente trayectoria dejó para la historia un arte magnífico, el cual aparecio en una época que se extendio desde la caída del Imperio Romano y se prolongó hasta la llegada de la Época Románica; este estilo se dividió en dos períodos el Visigodo, y el Carolingio.

    Los godos eran un pueblo barbaro que junto con los Suevos, Alanos y los Vandalos invadieron parte de Europa, y se establecieron en la Aquitania y parte de Francia. Las manifestaciones artísticas de este pueblo, en especial las de carácter arquitectónico, se debieron a dos tradiciones diferentes, una de tipo cristiano primitivo y otra visigoda elaborada en españa, la unión de ambos componentes le permitio tener un estilo propio, con personalidad definida que en la arquitectura se identificó por el uso del arco de herradura; en este estilo se representó una gran línea de fusión de elementos de distintas culturas, donde el elemento dominante fue el romano, ya que, los Visigodos se hallaban profundamente influenciados por el arte romano al que le incorporaron los elementos bizantinos.

    El Imperio Carolingio hizo del estado franco un núcleo estable, con una firme estructura administrativa, un poderoso ejército aliado con la Iglesia, las finanzas y con algunos elementos culturales como la escritura y la lengua; lo que provoco que se tratase del momento de mayor equilibrio de todos los poderes, por lo que se logró inaugurar un período de esplendor político y también cultural, llamado Renacimiento Carolingio, el cual nació de la cultura romana por la necesidad de preparar intelectualmente a clérigos, monjes y personal administrativo; para ello se crearon escuelas monacales, catedralicias o episcopales y una gran escuela palatina, en donde se enseñaba a leer y se impartían clases de lógica, gramática, retórica, geometría, música y astronomía; sin embargo el mayor esfuerzo se centró en la producción de libros y la creación de bibliotecas, las cuales se enriquecieron no solo con copias de libros de los grandes padres de la iglesia, sino también con libros de la antigüedad clásica como Cicerón, Plinio y Tito Livio, para ello se creó la llamada caligrafía carolingia de letras pequeñas, redondeadas y separadas entre sí, que facilitaba enormemente la copia, la difusión y la lectura de estos libros.

    A partir del siglo XI, apareció la llamada plena Edad Media y la baja Edad Media en la que aparecieron los estilos Románico y Gótico, los cuales tuvieron su nacimiento en Francia y poco a poco se fueron extendiendo por todo el continente con mayor o menor rapidez gracias a las peregrinaciones y los contactos existentes en la época. Ambos estilos artísticos fueron eminentemente religiosos ya que fue el momento en el que la Iglesia manifiestó con claridad su poder económico, político y espiritual.

    El Arte Románico tuvo su origen en Francia e Inglaterra, su cronología abarcó desde finales del siglo X hasta el XII, aunque en algunas zonas se extendió hasta el XIII. La arquitectura románica fue eminentemente religiosa ya que creó un tipo de templo abovedado con planta preferida de cruz latina con una o varias naves longitudinales que finalizaba en una cabecera con ábsides; poseía tambien una nave tranversal o crucero que atravesaba las naves longitudinalmente y algunas naves laterales rodeaban la capilla mayor creando una girola o deambulatorio, elemento típico de la iglesia de peregrinación cuyo objetivo era que los peregrinos contemplacen las reliquias allí guardadas, así mismo la nave crucero y las laterales solían estar rematadas con capillas que se ubicaban habitualmente entre los contrafuertes ó elementos externos que servían para distribuir las presiones; estas naves estaban cubiertas por bóvedas de cañón en el crucero y de cuarto de esfera en los ábsides, las cuales descansaban en arcos de medio punto que solían caer en pilares cruciformes para sustentar los arcos de la bóveda, la nave central era más elevada para poder abrir ventanas que dieran mayor luminosidad al templo, así mismo sobre las naves laterales se sitúaba un segundo piso o tribuna que servía habitualmente para alojar a los peregrinos, igualmente el crucero solía estar cubierto con un tipo de bóveda más elevada llamada cimborrio; un elemento importante en el templo románico era la parte exterior, la cual estaba integrada por un campanario que se ubicaba generalmente en la fachada principal, la cual tenía un aspecto abocinado ya que estaba constituida por una serie de arcos o arquivoltas dispuestos de manera decreciente, decorados con estatuas. El arco de la puerta tenía un tímpano donde generalmente aparecía la escena principal de la decoración escultorica; en algunas iglesias la decoración se extendía a toda la fachada del templo, la cual se definía por las diferentes regiones en cuyas escuelas se desarrollaron elementos propios basados en la escultura románica que representaba la reacción más completa frente al naturalismo clásico; las figuras alcanzaban una tremenda espiritualidad y la anatomía quedaba relegada a un segundo plano ya que los ropajes dominaban al cuerpo, sin embargo el estilo alcanzó una significativa evolución que le condujo al naturalismo gótico. Los escultores románicos realizaron su trabajo dependiendo por completo de la arquitectura ya que debían adaptar sus figuras a las proporciones del templo por lo que la escultura adquirió gran monumentalidad, esta adaptación le otorgó una función pedagógica ya que su objetivo fue enseñar a los fieles el camino de la salvación y por ello aparecían en los relieves románicos numerosas figuras identificadas con el pecado y los fieles debían identificar cuales eran las escenas que contemplaban, convirtiendo a los templos en auténticas Biblias historiadas; esto hizo que la escultura adquiriera mayor relieve en la portada del templo, especialmente en el tímpano donde se sitúaba el tema del pantocrator rodeado de tetramorfos, junto a los veinticuatro ancianos que contemplaban la escena desde las arquivoltas; esta escena que representaba el juicio final se convirtió en un tema característico del tímpano románico que podía abarcar la decoración en las arquivoltas y los capiteles en los que se solían representar esculturas al igual que en las jambas donde aparecían grandes estatuas adosadas; estas esculturas eran relieves muy planos y las escenas eran poco complicadas ya que los personajes usaban ropajes ajustados al cuerpo con plegados de trazos sencillos; mas adelante el estilo presentó una apreciable evolución y las figuras adquirieron mayor volumen y se dió una mayor comunicación entre las figuras lo que presagiaba el gótico. La pintura románica mantuvo la actitud antinaturalista de etapas anteriores al igual que mantuvo la ausencia de perspectiva. El dibujo y los colores planos se yuxtapusieron para crear intensos contrastes cromáticos ya que la figura centró toda la atención del artista y el fondo se hizó liso y líneas gruesas de color negro o rojo configuraban la silueta de la figura mientras que el modelado de los rostros se conseguía a base de manchas rojas redondeadas en mejillas, barba y frente. Al igual que la escultura, la ubicación de la pintura en el templo también estaba localizada, el centro era la capilla mayor donde en la bóveda se representaba al Cristo en Majestad rodeado de los evangelistas, aunque también podía aparecer la Virgen. La superficie cilíndrica del ábside estába reservada a santos o profetas y en la parte del zócalo se sitúaba una composición decorativa mientras en los muros laterales del templo se pintaban historias distribuidas en grandes zonas subdivididas en cuadros.

    El Arte Gótico se ubicaba desde los últimos años del siglo XII hasta entrado el siglo XVI y aparecio como una evolución del Romanico; en el se apreciaban actitudes diferentes e incluso opuestas, si el Románico significo recogimiento, oscuridad y predominio de masas sobre vanos, el Gótico implicó todo lo contrario, luz, color, elevación, expresividad, naturalismo. El promotor de las construcciones góticas fue el abad Suger quien recogió en sus pensamientos estas ideas que reflejaban a la perfección el cambio sustancial que conllevaba este estilo artístico, un cambio que también se produjo en la sociedad y en la economía. En el Gótico apareció la catedral como un nuevo monumento que le permitió alcanzar su máxima expresión arquitectonica así la convirtió en un edificio urbano y con esa concepción se levantaba. Los cambios constructivos más importantes se manifiestaron en la bóveda de crucería y los arbotantes. La bóveda de crucería logró localizar sus empujes sobre cuatro puntos de arranque lo que le permitió cubrir todo tipo de espacios a la vez que se ganaba mayor altura. El arbotante era una especie de puente que transmitía las presiones desde el arranque de las bóvedas altas hasta los ligeros contrafuertes del exterior, lo que permitió abrir mayores vanos de luz en la estructura del edificio; otro elemento importante fue el arco apuntado u ojival el cual permitía elevar aun más la altura del edificio, con estos tres elementos los arquitectos góticos lograron revolucionar la construcción; asi mismo la planta del templo gótico se trataba de una planta de cruz latina de tres a cinco naves, con la nave mayor más elevada y las laterales en altura decreciente, tambien se experimentaron cambios especialmente en la zona de la cabecera ya que las capillas, los ábsides y las girolas dejaron de ser semicirculares para hacerse poligonales, igualmente la tribuna románica se convirtió en una simple galería que se formaba a través de los pilares, las puertas de acceso al templo solían colocarse en los brazos y pies de la cruz, continuando con el abocinamiento románico solo que ahora los arcos eran apuntados; los tímpanos continuaron siendo decorados aunque ahora se distribuían las figuras en zonas horizontales mientras las figuras de las arquivoltas se disponían en el sentido de la curva; la forma apuntada de la portada solía completarse con el gablete o moldura angular que la corona, asi mismo se colocó un gran rosetón, que aportaba iluminación y cromatismo al interior del templo el cual se unió a las ventanas que adquirieron gran importancia y en el interior de los vanos aparecieron tracerías caladas que se rellenaron con vidrieras policromadas. El Gótico al igual que el Románico ofrece variantes regionales, se podía hablar de las escuelas francesas donde destacaban las catedrales de Notre-Dame de París, Sens, Chartes, Laon, Reims y Amiens o la Saint-Chapelle; tambien estaba la escuela española con las catedrales de León, Burgos, Toledo, Barcelona o Sevilla; estaba tambien la escuela alemana con la catedral de Colonia, Estrasburgo o Ulm; la escuela inglesa tenía las catedrales de Gloucester, Salisbury; o la escuela italiana la cual fue la primera que reaccionó contra el Gótico tradicional como en la catedral de Santa María de las Flores de Florencia mientras que la catedral de Milán es la más cercana al Gótico Europeo. La escultura gótica estuvo definida por el interés hacia la naturaleza manifestado por los artistas, por ello conservó el carácter monumental y grandioso de herencia románica pero con figuras que se hallaban dotadas de mayor expresividad y mas cercanas a lo humano, ya que reflejaban sentimientos, en los que la Virgen amamantaba al Niño y el Crucificado se retorcía de dolor; este afán expresivo llevó al artista gótico a interesarse por la anécdota y lo secundario, tratando en ocasiones lo satírico incluso lo obsceno, por ello se podía hablar de varias etapas en el desarrollo escultórico del Gótico, siendo la primera de composiciones grandiosas y claras, con escasos pliegues angulosos en los ropajes; a mediados del siglo XIV las figuras se hicieron más alargadas y aumentaron las curvas, especialmente en los ropajes; ya en el siglo XV apareció cierta reacción hacia la curva y la figura humana se hizo más naturalista, convirtiéndose los rostros en auténticos retratos. La pintura Romanica, debido al escaso desarrollo del muro, se ubicó en las vidrieras y en las miniaturas de los códices; la pintura gótica tuvo varios períodos ó étapas: el primer estilo pictorico se denominó gótico lineal ya que manifiestó una especial atracción hacia las líneas que definían los contornos, mas tarde se desarrolló un nuevo estilo llamado Gótico Italiano en el que destacaba la figura de Giotto, verdadero precursor del Renacimiento. A finales del siglo XIV se desarrolló el Estilo Internacional donde las influencias italianas se fundieron con las francesas y flamencas, obteniendo más que interesantes resultados. Por último durante el siglo XV dos regiones incorporaron fundamentales aportaciones a la pintura ya que se abandono el estilo gótico y se abrazó al Renacimiento.

    GLOSARIO

  • ABACIAL: adj. Perteneciente o relativo al abad, a la abadesa o a la abadía.

  • ABACO: Parte superior en forma de tablero que corona el capitel.

  • ABAD: Superior de un monasterio de hombres, considerado abadía.

  • ABADÍA: Iglesia y monasterio con territorio propio regidos por un abad.

  • ABOCINADO: Arco de forma semejante a la de la bocina. Ver anexo 2

  • ABOVEDADO: Adj. Corvo, combado.

  • ABROGAR: Abolir, derogar.

  • ABSIDE: Parte del templo, abovedada y comúnmente semicircular, que sobresale en la fachada posterior, y donde se instalaban el altar y el presbiterio.

  • ABSIDIOLOS: Ábside más pequeño que el principal.

  • ACANTO: Planta de la familia de las Acantáceas, perenne, herbácea con hojas anuales, largas, rizadas y espinosas.

  • ADOSADAS: Columna que está pegada a un muro u otro cuerpo de la edificación.

  • ADVOCACION: Denominación de las correspondientes imágenes, de los santuarios y días en que se veneran, de las entidades acogidas a su patrocinio, etc.

  • AGUJA: Remate agudo y calado de una torre.

  • ALAMANES: Conjunto de tribus germanas establecidas al borde sur medio e inferior del río Elba, a lo largo del río Meno.

  • ALANOS: Grupo de origen iranio incluido en la familia de los sármatas, pastores nómadas muy belicosos de diferentes procedencias, que hablaban la lengua irania y compartían con ellos la misma cultura en muchos aspectos.

  • ALBIGENSE: Se dice del hereje de una secta que tuvo su principal asiento en la ciudad de Albi durante los siglos XII y XIII.

  • ALEGORIA: Representación simbólica de ideas abstractas por medio de figuras, grupos de estas o atributos.

  • ALERO: Parte inferior del tejado, que sale fuera de la pared y sirve para desviar de ella las aguas llovedizas.

  • ALJÓFAR: Perla Pequeña.

  • ALMA: Cosa que se mete en el hueco de algunas piezas de poca consistencia para darles fuerza y solidez, como el palo que se mete en hacheros de metal, varas de palio, etc.

  • ALMANDINAS: Granate de color rojo intenso.

  • ALMOHADE: Dinastía que destrono a la Almorávide y fundo un nuevo imperio que dominó el norte de África y España.

  • ALMINAR: Torre de las mezquitas, por lo común elevada y poco gruesa, desde cuya altura convoca el almuédano a los mahometanos en las horas de oración.

  • ALQUIMIA: Conjunto de especulaciones y experiencias, generalmente de carácter esotérico, relativas a las transmutaciones de la materia, que influyó en el origen de la ciencia química. Tuvo como fines principales la búsqueda de la piedra filosofal y de la panacea universal.

  • ALTAR: En el culto cristiano, especie de mesa consagrada donde el sacerdote celebra el sacrificio de la misa.

  • ALTORRELIEVE: Aquel en que las figuras salen del plano más de la mitad de su bulto.

  • ALVÉOLO: Cavidad, hueco.

  • ANÁSTASIS: Termino filosofico para explicar la muerte y resurrección de una persona o lo que para la mitología griega es el descenso al averno.

  • ANGLICANA: Perteneciente o relativo al anglicanismo, religión predominante en Inglaterra.

  • ANTECORO: Pieza que da ingreso al coro.

  • ANTIFONARIO: Libro en el que se contienen las antífonas de todo el año.

  • APAREJO: Forma o modo en que quedan colocados los materiales en una construcción.

  • APOCALIPSIS: Ultimo libro canónico del nuevo testamento. Contiene las revelaciones escritas por el apóstol Juan, referentes en su mayor parte al fin del mundo.

  • APOCRIFO: Dicho de un libro a autor sagrado, que no esta sin embargo atribuido en el canón de la Biblia.

  • APOLOGISTA Persona que realiza discursos en defensa o alabanza de alguien o algo.

  • APÓSTOL: Cada uno de los doce principales discípulos de Jesucristo a quienes envió a predicar el evangelio por todo el mundo. Tambien referido a San Pablo y San Bernabé.

  • APUNTALAR: Sostener.

  • ARCA: Caja, comúnmente de madera sin forrar y con tapa llana que aseguran varios goznes o bisagras por uno de los lados y uno o más candados ó cerraduras por el opuesto.

  • ARCADA: Conjunto o serie de arcos en las construcciones, especialmente en los puentes.

  • ARCAICA: Cosa Muy antigua ó anticuada.

  • ARCANGEL: Espíritu bienaventurado, de orden medio entre los Ángeles y los principados.

  • ARCATURA: Arcada figurada, principalmente la voladiza sobre columnillas ó modillones que reemplaza a los canecillos en algunos tejados de finales del romanico.

  • ARCO: Elemento estructural y de soporte de forma curvada. Hay diferentes tipos de arcos, estos se clasifican por su utilidad. Los diferentes arcos se encuentran explicados en el anexo 2.

  • ARBITRIO: Facultad que tiene el hombre de adoptar una resolución con preferencia a otra.

  • ARBOTANTE: Arco extendido diagonalmente sobre el tejado de los colaterales, entre la parte alta de los contrafuertes y las paredes exteriores del claristorio; su forma es recta por su lomo o mojinete y en segmento de arco por su intradós, apuntalamiento exterior de la bóveda de la nave central.

  • ARGAMASA: Mortero hecho de cal, arena y agua que se emplea en las obras de albañilería.

  • ARISTA: Línea que resulta de la intersección de superficies que forman una bóveda. Ver anexo 3.

  • ARMADURAS: Conjunto de armas con que se revestían para su defensa los que iban a combatir.

  • ARMAZON: Pieza o conjunto de piezas unidas que presta estructura o sostén a algo.

  • ARMONIA: Conveniente proporción y correspondencia de unas cosas con otras dándoles perfecto equilibrio.

  • ARQUERÍA: Serie de arcos.

  • ARQUETA-RELICARIO: Arca o caja pequeña, realizada con materiales nobles e incrustaciones de gemas, dedicada a guardar o custodiar reliquias tesoros u otros objetos de gran valor.

  • ARQUITRABE: Piedra horizontal sobre otras dos verticales. Dintel.

  • ARQUIVOLTAS: Curva de un arco.

  • ARRIANISMO: Secta hereje que a diferencia de los cristianos negaba la consustancialidad del verbo.

  • ARTICULACION: Unión entre dos piezas rígidas que permite el movimiento relativo entre ellas.

  • ASCENSIÓN: Acción o efecto de ascender a un sitio más alto; por ende implica la subida de Cristo a los cielos.

  • ASCETISMO: Profesión en la que se practica la perfección espiritual.

  • ATRIO: Galeria delante de una iglesia.

  • AULICO: Perteneciente o relativo a la corte o al palacio.

  • AUREA: Parecido al oro o de color dorado.

  • AUREOLA: Resplandor, disco o circulo que suele figurarse detrás de la cabeza de las imágenes sagradas.

  • AUTO DE FE: Castigo público a los condenados por el tribunal de la inquisición.

  • AUVERNIA: région del centro de Francia que abarca los départements de Puy-de-Dôme, Cantal, Haute-Loire y Allier. Su capital es Clermont-Ferrand.

  • BACULO: Palo o cayado que usan los obispos cristianos como pastores espirituales del pueblo creyente.

  • BAJORRELIEVE: Aquel en que las figuras resaltan poco del plano.

  • BALAUSTRADA: Serie u orden de columnas pequeñas que junto a los barandales forman las barandillas o antepechos de los balcones.

  • BALCON: Hueco abierto al exterior desde el suelo de la habitación con barandilla por lo común saliente.

  • BALDAQUINO: 1. Especie de dosel o palio hecho de tela de seda. 2. pabellón que cubre el altar.

  • BAPTISTERIO: Iglesia bautismal; capilla bautismal.

  • BARON: Titulo de dignidad, de más o menos preeminencia según los diferentes países.

  • BARROCO: Se dice de un estilo de ornamentación caracterizado por la profusión de volutas, roleos y otros adornos en que predomina la línea curva.

  • BASAS: Asiento sobre el que se asienta la estatua o columna. Hay diferentes tipos de columnas, las cuales se clasifican por su utilidad. Las diferentes columnas se encuentran explicadas en el anexo 4.

  • BASÍLICA: Iglesia notable por su antigüedad, extensión o magnificencia.

  • BAUTISMO: Primero de los sacramentos del cristianismo con el cual se da el ser de gracia y el carácter cristiano.

  • BEATO: Dicho de una persona beatificada por el papa.

  • BESTIARIO: En la literatura medieval, colección de relatos, descripción de imágenes reales o fantásticos.

  • BIBLIA: Sagrada escritura, ósea los libros canónicos cristianos del Antiguo y Nuevo Testamento.

  • BISEL: Corte oblicuo en el borde o en la extremidad de una lámina o plancha, como en el filo de una herramienta, en el contorno de un cristal labrado.

  • BOGOMILLAS: Secta hereje macedonica que afirmaba que el nacimiento de Jesús no era una mera apariencia, rechazaban a los profetas, al Antiguo Testamento y a las epístolas de Pedro, y negaban el culto a la Virgen, santos, cruz, iconos y a los sacramentos.

  • BORGOÑA: Antigua provincia de Francia.

  • BOTAFUMEIRO: Nombre del gran incensario de la catedral de Santiago de Compostela.

  • BÓVEDA: Cerramiento superior de un recinto en superficies curvas, hecho de piedra o ladrillo. Hay diferentes tipos de bóvedas las cuales se clasifican por su utilidad. Las diferentes bóvedas se encuentran explicadas en el anexo 3.

  • BUDISMO: Doctrina filosófica y religiosa, derivada del brahmanismo fundada en el siglo VI AC; por el buda Gotaza.

  • BURGUESÍA: En la Edad Media, clase social formada especialmente por comerciantes, artesanos libres y personas que no estaban sometidas a los señores feudales.

  • BUROCRACIA: Administración ineficiente a causa del papeleo, la rigidez y las formalidades superfluas.

  • CABECERA: Testero de la iglesia o parte en que se halla el altar principal.

  • CABUJON: Piedra preciosa pulimentada y no tallada, de forma convexa.

  • CALIFATO: Territorio gobernado por un califa ó príncipe sarraceno.

  • CALIZ: Vaso sagrado de oro o plata que sirve en la misa para echar el vino que se va a consagrar.

  • CALIGRAFÍA: Arte de escribir con letra bella y correctamente formada según diferentes estilos.

  • CAMAFEO: Figura tallada de relieve en ónice, marfil u otra piedra dura y preciosa

  • CAMARA: Sala o pieza principal de una iglesia.

  • CAMPANA: Instrumento metálico, generalmente en forma de copa invertida que suena al ser golpeado por un badajo o por un martillo exterior.

  • CAMPANARIO: Torre, espadaña ò armadura donde se colocan las campanas.

  • CANECILLOS: Modillón.

  • CANON: Modelo de características perfectas.

  • CANÓNICA: Se dice de los libros y epístolas que se contienen en el canon de los libros auténticos de la sagrada escritura.

  • CANTOS: Extremidad o lado de cualquier parte o sitio.

  • CAPILLA: Edificio contiguo a una iglesia o parte integrante de ella con altar y advocación.

  • CAPITALIDAD: Cualidad de ser una población cabeza ó capital de partido, de provincia, región o estado.

  • CAPITEL: Cabeza de la columna cuya forma y ornamento varia libremente en la arquitectura según órdenes prefijados. Hay diferentes tipos de columnas, las cuales se clasifican por su utilidad. Las diferentes columnas se encuentran explicadas en el anexo 4.

  • CARGA: Peso sostenido por una estructura.

  • CARIDAD: En la religión cristiana una de las tres virtudes teologales que consiste en amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a nosotros mismo.

  • CARPANEL: Tipo de arco que consta de varias porciones de circunferencia tangentes entre si y trazadas desde distintos centros.

  • CARTUJA: Monasterio o convento perteneciente a la orden de la cartuja, fundada por San Bruno en 1086.

  • CASQUETE: Parte de la superficie de la esfera, cortada por un plano que no pasa por su centro.

  • CASTIDAD: Virtud de quien se abstiene de todo goce carnal.

  • CATACUMBAS: Cementerios subterráneos en los cuales los primitivos cristianos, especialmente en Roma, enterraban sus muertos y practicaban las ceremonias del culto.

  • CATARO: Perteneciente o relativo a varias sectas herejes que se extendieron por Europa durante los siglos XI y XIII y propugnaban la necesidad de llevar una vida ascética y renuncia al mundo para aceptar la perfección.

  • CATECÚMENOS: Persona que se esta instruyendo en la doctrina y misterios de la fé católica con el fin de recibir el bautismo.

  • CATEDRAL: Iglesia del obispo en la que se encuentra su cátedra.

  • CATEDRALICIAS: Pertenecientes o relativas a las catedrales.

  • CATEQUETICOS: Perteneciente ó relativo a la catequesis ó instrucción en las cosas de la religión.

  • CELOSÍA: Enrejado de listoncillos de madera ó de hierro que se pone en las ventanas de los edificios y otros huecos análogos para que las personas que estan en el interior vean sin ser vistas.

  • CELTAS: Grupos de pueblos indoeuropeos establecidos antiguamente en la mayor parte de la Galia, en las Islas Británicas y en buena parte de España y Portugal, asi como en Italia del norte, Suiza, Alemania del oeste y sur, Austria, Bohemia y la Galacia en Asia Menor.

  • CENEFA: Dibujo de Ornamentación que se pone a lo largo de los muros, pavimentos y techos, que suele consistir en elementos repetidos de un mismo adorno.

  • CENTURIA: En la milicia romana compañía de cien hombres.

  • CESAROPAPISMO: término referido a las relaciones entre Iglesia y Estado, que supone la unificación en una sola persona de los poderes político y religioso.

  • CIMACIO: Miembro suelto, con ábaco de gran desarrollo, que va sobre el capitel, con aumento del plano superior de apoyo.

  • CIMBORRIO: Cuerpo cilíndrico que sirve de base a la cúpula y descansa inmediatamente sobre los arcos torales.

  • CIMENTACIÓN: Acción o efecto de poner los cimientos de un edificio u obra.

  • CISTERCIENSE: Perteneciente o relativo a la orden del Cister fundada por San Roberto en el siglo XI.

  • CLARISTORIO: Conjunto de ventanas, en primer lugar, las de la zona alta de una iglesia basilical.

  • CLAROSCURO: Distribución de la luz y de las sombras en una obra.

  • CLAUSTRO: Galeria que cerca el patio central de una iglesia o convento.

  • CLAVE: Piedra con que se cierra el arco o bóveda.

  • CLUNIACENSE: Perteneciente o relativo al monasterio o congregación de Cluny, en la región de Borgoña que seguía la regla de San Benito.

  • CODICE: Libro anterior a la invención a la empresa.

  • COFRADÍA: Congregación o hermandad que forman algunos devotos con autorización competente, para ejercitarse en obras de piedad.

  • COLUMNA: Soporte vertical de gran altura respecto a su sección transversal. Hay diferentes tipos de columnas, las cuales se clasifican por su utilidad. Las diferentes columnas se encuentran explicadas en el anexo 4.

  • COMARCA: División de territorio que comprende varias poblaciones.

  • CONCILIO: Junta o congreso de los obispos y otros eclesiásticos de la iglesia católica, o de parte de ella para deliberar y decidir sobre las materias de dogma y de disciplina.

  • CONDADO: Territorio o lugar a que se refiere el titulo nobiliario de conde y sobre el cual este ejercía antiguamente señorío.

  • CONOPIAL: Arco muy rebajado y con una escotadura en el centro de la clave que lo hace semejante a un pabellón o cortinaje. Hay diferentes tipos de arcos los cuales se clasifican por su utilidad. Los diferentes arcos se encuentran explicados en el anexo 2.

  • CONSAGRACIÓN: Transustanciación del pan y el vino en el cuerpo y la sangre de Cristo.

  • CONSTRUCCIÓN: Acción o efecto de construir o edificar de una nueva planta una obra de arquitectura o ingeniería, un monumento o en general cualquier obra pública.

  • CONSUETUDINARIO: Que es de costumbre; el Derecho Consuetudinario es el introducido por la costumbre.

  • CONTRAFUERTE: Muro vertical sobresaliente al exterior, en forma de pilar cuadrangular; los contrafuertes reducen su masa hacia arriba por medio de pequeños planos inclinados, los goterones.

  • CONTRARRESTO: Paliar o neutralizar el efecto de algo.

  • COPTO: Cristiano de Egipto, en su mayoría son eutiquianos, pero los hay católicos con su rito especial.

  • CORNISA: Moldura de coronamiento de una pared

  • CORO: Presbiterio; cabecera interna de la iglesia; lugar donde se celebra la misa; parte comprendida entre el cuadrado del crucero y la terminación oriental del templo.

  • CORREINADO: Gobierno simultaneo de dos reyes en una nación.

  • COSMOCRATOR: Representacion de cristo como dueño del mundo

  • COSMOVISION: Manera de ver e interpretar el mundo.

  • CRUCERÍA: Sistema constructivo propio del estilo gótico en el cual la forma de bóveda se forma mediante el cruce de arcos ojivales. Hay diferentes tipos de bóvedas las cuales se clasifican por su utilidad. Las diferentes bóvedas se encuentran explicadas en el anexo 3.

  • CRUCERO: Espacio en que se cruzan la nave mayor de una iglesia y la que la atraviesa.

  • CRUCIFIJO: Efigie o imagen de Cristo crucificado.

  • CRUCIFIXION: 1. Acción o efecto de crucificar. 2. En la escultura y pintura composición que representa la crucifixión de Jesucristo.

  • CUADRILLAS: Grupo de personas reunidas para el desempeño de algunos oficios o para ciertos fines.

  • CUBIERTA: Parte exterior de la techumbre de un edificio, protegiéndolo de las inclemencias del tiempo.

  • CÚPULA: Boveda en forma de una media esfera u otra aproximada con que suele cubrirse todo un edificio o parte de el.

  • CUPULIN: Cuerpo superior a modo de linterna, que se añade a la cúpula ó media esfera.

  • CURIA: Una de las divisiones del antiguo pueblo romano.

  • DACIA: País de la Europa antigua

  • DEAMBULATORIO: Nave comúnmente anular que rodea el coro o presbiterio, muchas veces prolongación de los colaterales.

  • DECORACIÓN: Conjunto de elementos que adornan un ambiente.

  • DECURIA: Cada una de las diez porciones en las que se dividía la antigua curia romana.

  • DEMOGRAFICO: Perteneciente o relativo al estudio estadístico de una colectividad humana, referido a un determinado momento o a su evolución.

  • DERRAME: Espesor del muro puesto de manifiesto por un vano abierto en plano inclinado o embudo.

  • DESCENDIMIENTO: Bajada que se hizo del cuerpo de Cristo, desde la cruz.

  • DIABOLICO: Perteneciente o relativo a cada uno de los Ángeles rebelados contra Dios y arrojados por el al abismo.

  • DIALECTICA: Arte de dialogar, argumentar o discutir.

  • DIFUMINAR: Desvanecer o esfumar las líneas o colores con el difumino o trozo de algodón que sirve para difuminar.

  • DIMENSIÓN: Longitud, área o volumen de una línea, una superficie o un cuerpo.

  • DOGMA: Proposición que se asienta por firme y cierta y como principio innegable de una ciencia.

  • DOVELA: Piedra labrada en forma de cuña para formar arcos o bóvedas.

  • DUCADO: Territorio o lugar sobre el que recaía este titulo o en el que ejercía jurisdicción un duque.

  • ECUESTRE Perteneciente o relativo al caballero o a la orden o ejercicio de la caballería.

  • ECUMENICO: Universal que se extiende a todo el orbe.

  • ELEVACIÓN: Altura.

  • ELÍPTICA: De forma de elipse o parecido a ella.

  • EMIR: Príncipe o caudillo árabe.

  • EMPUJE: Esfuerzo producido por el peso de una bóveda sobre las paredes que la sostienen.

  • ENCOMIENDA: Dignidad dotada de renta competente, que en las ordenes militares se daba a algunos caballeros. Lugar, territorio y rentas de esta dignidad.

  • ENCUADERNAR: Juntar, unir, coser varios pliegos o cuadernos y ponerles cubiertas.

  • ENGARZAR: Trabar algo con otra u otras cosas, formando una cadena.

  • ENGASTAR: Encajar o embutir algo en otra cosa.

  • ENJUTAS: Triangulo curvilíneo de los varios que forman el anillo de la cúpula.

  • ENTALLE: Piedra dura grabada en hueco, en especial la que se usa como sello.

  • EPIFANÍA: Manifestación, aparición. Festividad que celebra la iglesia anualmente el 6 de enero.

  • EPISCOPAL: Perteneciente o relativo al obispo.

  • EREMÍTICA: Perteneciente o relativa al ermitaño.

  • ERMITAÑO: Persona que vive en soledad como el monje y que profesa la vida solitaria.

  • ESBELTEZ: Cualidad de esbelto, alto, delgado y de figura proporcionada.

  • ESCENOGRAFÍA: Delineación en perspectiva de un objeto, en la que se representan todas aquellas superficies que se suelen descubrir desde un punto determinado.

  • ESCOLASTICO: Perteneciente o relativo a la escuela escolástica, en la que dominan las enseñanzas de la doctrina de Aristóteles, concertada con las respectivas doctrinas filosóficas.

  • ESCUDERO: Hombre que por su sangre es noble y distinguido.

  • ESMALTES: Barniz vítreo que por medio de la fusión se adhiere a la porcelana, loza, metales y otras sustancias elaboradas.

  • ESPACIO: Extensión que contiene toda la materia existente.

  • ESPADAÑA: Campanario de una sola pared, en la que estan abiertos los huecos para colocar las campanas.

  • ESPIRITUALIDAD: Cualidad de las cosas espiritualizadas ò reducidas a la condición de eclesiásticas.

  • ESQUEMATISMO: Representación grafica o simbólica de las cosas materiales e inmateriales.

  • ESTEPA: Erial plano y extenso.

  • ESTÉTICA: Artística, de aspecto bello y elegante.

  • ESTIGMA: Marca o señal en el cuerpo, signo de la pasión de Cristo.

  • ESTRIADA: Columna que tiene estrías.

  • ESTRIBOS: Macizo de fabrica que sirve para sostener una bóveda y contrarrestar su empuje.

  • EUCARISTÍA: Sacramento instituido por Jesús, mediante el cual, por las palabras que el sacerdote pronuncia, se transustancian en la consagración el pan y el vino en el cuerpo y la sangre de Cristo.

  • EVANGELIARIO: Libro de liturgia que contiene los evangelios de cada día del año.

  • EXCOMUNIÓN: Acción o efecto de declarar a alguien fuera de la comunión ò trato con otra u otras personas.

  • EXEDRA: Construcción descubierta, de planta semicircular, con asientos fijos en la parte interior de la curva, y respaldos tambien permanentes.

  • EXENTA: Dicese de la escultura o columna aislada de todo soporte.

  • EXEQUIAS: Honras fúnebres.

  • EXPIATORIO: Que se hace por borrar las culpas.

  • EXUBERANTE: Muy abundante copioso

  • FACHADA: Paramento exterior de un edificio, generalmente el principal

  • FAJONES: Arco Adherente a una bóveda. Hay diferentes tipos de arcos los cuales se clasifican por su utilidad. Los diferentes arcos se encuentran explicados en el anexo 2.

  • FATIMÍ: Dicese de los descendientes de Fátima, hija de Mahoma.

  • FEALDAD: Cualidad de feo. Grotesco

  • FEUDALISMO: Sistema feudal de gobierno y de organización de la propiedad.

  • FEUDATARIO: Persona sujeta y obligada a pagar un feudo.

  • FIGURA: Forma exterior de un cuerpo por la cual se diferencia de otro

  • FILIGRANA: Obra formada en hilos de oro y plata, unidos y soldados con mucha perfección y delicadeza.

  • FLAGELACIÓN: Acción de maltratar con azotes.

  • FLANDES: Antigua zona perteneciente a los países bajos, en la actual Holanda

  • FRANCOS: Pueblo germano de la franconia y el bajo Rin, que conquistaron Francia y le dieron su nombre

  • FRESCOS: Pintura que se hace en paredes y techos con colores disueltos en agua de cal y extendidos sobre una capa de estuco fresco.

  • FRISO: Decoración mural arquitectonica, escultorica ó pictórica extendida en la horizontal.

  • FRONTISPICIO: Fachada o delantera de un edificio, mueble u otra cosa.

  • FRONTÓN: Remate triangular de una fachada o de un pórtico: Se coloca tambien encima de puertas y ventanas.

  • FUSTE: Parte de la columna que media entre la basa y el capitel. Hay diferentes tipos de columnas, las cuales se clasifican por su utilidad. Las diferentes columnas se encuentran explicadas en el anexo 4.

  • GABLETE: Remate formado por dos líneas rectas y ápice agudo, que se ponía en los edificios de estilo ojival: Piñón

  • GALIA: Región de Europa occidental actualmente ocupada por Francia, Bélgica, el oeste de Suiza y las zonas de Holanda y Alemania al oeste del Rin.

  • GALERÍA: Pieza larga y espaciosa, con muchas ventanas, o sostenida por columnas o pilares, que sirve para pasear o colocar en ella cuadros, adornos u otros objetos.

  • GALLON: Cada uno de los segmentos cóncavos exteriores de ciertas bóvedas rematados en redondo por su parte más ancha.

  • GARGOLA: Conducto por donde se vierte el agua de los tejados, sobresaliendo del contrafuerte o pared en forma de animal fantástico.

  • GEOPOLÍTICA: Estudio desde el punto de vista geográfico y político de una región.

  • GERMANO: Natural u oriundo de Germania, antigua región de Europa Central.

  • GIROLA: Conjunto de capillas de la cabecera de una Iglesia.

  • GIRALDA: Torre o alminar de la Catedral de Sevilla.

  • GÓLGOTA: nombre del monte a las afueras de Jerusalén en el cual fue crucificado Jesús, según la tradición Cristiana.

  • GREMIO: Corporación formada por los maestros, oficiales y aprendices de una misma profesión u oficio, regida por ordenanzas o estatutos especiales.

  • GROTESCO: Ridículo, extravagante.

  • HÁBITO: Vestido o traje que cada persona usa según su estado, ministerio o nación y especialmente el que usan los religiosos o religiosas.

  • HEBRAICO: Hebreo, que practica la ley de Moisés.

  • HECHICERA: Mujer que práctica la hechicería o superstición.

  • HEGEMONÍA: Supremacía que un estado ejerce sobre otro.

  • HELENISTA: Judío que hablaba la lengua y observaba los usos de los griegos.

  • HELICOIDAL: En figura de Hélice.

  • HENO: Hierba segada y seca para el alimento del ganado.

  • HERALDICO: Perteneciente o relativo a los blasones.

  • HEREJE: Persona que niega alguno de los dogmas establecidos por una religión.

  • HERRADURA: Arco que tiene más de media circunferencia y cuyos arranques vuelan tanto como la imposta. Hay diferentes tipos de arcos, los cuales se clasifican por su utilidad. Los diferentes arcos se encuentran explicados en el anexo 2.

  • HIERATISMO: Cualidad hierática de la escultura y pintura religiosa: cualidad de solemne.

  • HILADAS: Serie horizontal de ladrillos o piedras en un edificio.

  • HINDUISMO: Religión predominante en la India derivada del vedismo y el brahmanismo antiguos.

  • HISTORIADO: dicho de una obra artística decorada con escenas relativas al suceso que representa.

  • HORROR VACUI: Tendencia a llenar todos los espacios, generalmente con motivos o elementos decorativos.

  • HORIZONTALIDAD: Cualidad de horizontal.

  • HUNOS: Pueblo mongoloide, de lengua altaica, que ocupo en el siglo V, el territorio que se extiende desde el Volga, hasta el Danubio.

  • INTRADOS: Superficie interior de un arco o bóveda. Hay diferentes tipos de arcos, los cuales se clasifican por su utilidad. Los diferentes arcos se encuentran explicados en el anexo 2.

  • JACOBEA: perteneciente o relativo al apóstol Santiago.

  • JAMBAS: Elemento vertical, que a guisa de pilar, sostiene un arco o dintel.

  • JERARQUÍA: Gradación de personas, valores o dignidades.

  • JUDAÍSMO: Profesión de la ley de Moisés.

  • JUGLAR: Persona que por dinero y ante el pueblo cantaba, bailaba o hacia juegos y truhanería.

  • LAICO: Persona que no posee orden clerical.

  • LEGION: Cuerpo de tropa romana compuesto de infantería y caballería que vario mucho según los tiempos.

  • LENGÜETA: Tabique pequeño de ladrillo con que se fortifican las embocaduras de las bóvedas o se separan los cañones de algunas chimeneas.

  • LIBRO DE HORAS: libro en que se hallan las horas canónicas.

  • LIENZO: Tela de lino, cáñamo ó algodón.

  • LINTERNA: Edículo de iluminación sobre una bóveda.

  • LIRA: Instrumento musical utilizado por los antiguos, compuesto de varias cuerdas tensas en un marco, que se pulsaban con ambas manos.

  • LITURGIA: Orden y forma con que se llevan a cabo las ceremonias de culto en las distintas religiones.

  • LOBULADO: Que tiene forma de lóbulos u ondas que sobresalen del borde de una cosa. Hay diferentes tipos de arcos, los cuales se clasifican por su utilidad. Los diferentes arcos se encuentran explicados en el anexo 2.

  • LÓCULO: Lugar de las catacumbas donde se colocaban los muertos.

  • LUJURÍA: Vicio consistente en el uso ilícito o en el apetito desordenado de los deleites carnales.

  • MACHON: Pilar de Fabrica.

  • MAGIARES: Pueblo de lengua a fin al finlandés que habita en Hungría y Transilvania.

  • MAL: Lo contrario al bien, lo que se aparta de lo lícito y lo honesto.

  • MAMPARA: Panel o tabique de vidrio, madera u otro material, generalmente móvil que sirve para dividir o aislar un espacio.

  • MAMPOSTERIA: Obra hecha con mampuestos colocados y ajustados unos con otros sin sujeción a determinado orden de hiladas o tamaños.

  • MANDORLA: Marco en forma de almendra que en el arte Romanico y Bizantino circunda las imágenes de Cristo en Majestad.

  • MANUSCRITO: Papel o escrito a mano que tiene algún valor ó antigüedad.

  • MARCA: Provincia o distrito fronterizo. Marca Hispánica.

  • MARCIAL: Perteneciente o relativo a la guerra, la milicia o los militares.

  • MARFIL: Materia compacta, dura y blanca de que principalmente estan formados los dientes de los vertebrados, que en la corona esta cubierta por el esmalte y en la raíz por el cemento; generalmente se usa para la elaboración de joyas como camafeos.

  • MÁRMOL: Piedra caliza metamórfica, de contextura opaca y cristalina, susceptible de buen pulimento y mezclada frecuentemente que le dan colores diversos o figuran manchas o vetas.

  • MARTYRIUM: Santuario cristiano consagrado a un mártir

  • MAYESTATICA: Perteneciente o relativo a la majestad.

  • MECENAS: Persona que patrocina las letras y las artes.

  • MEDALLÓN: Bajorrelieve de forma redonda u ovalada.

  • MENDICANTE: Dicese de las religiones que tienen por instituto pedir limosna.

  • MÉNSULA: Tablero horizontal adosado a la pared.

  • METOPAS: Elemento frecuentemente decorado con relieves que se encuentra entre canecillo y canecillo.

  • MINIADA: Pintada Ilustrada en miniatura.

  • MISAL: Se dice del libro en que se contiene el orden y el modo.

  • MODILLONES: Miembro voladizo sobre el que se asienta una cornisa o alero, o los extremos de un dintel.

  • MOLDURAS: Parte saliente de perfil uniforme que sirve para adornar o reforzar obras de arquitectura, carpintería y otras artes.

  • MONACATO: Estado o profesión de monje. Institución monástica.

  • MONJE: Individuo de una de las ordenes religiosas, sujeto a una regla común y que vive en un monasterio.

  • MONOFISITA: Perteneciente o relativo a la herejía monofisita que negaba la doble naturaleza de Cristo.

  • MONOGRAMA: Cifra que como abreviatura se emplea en sellos, marcas, etc.

  • MOZARABE: Se dice del individuo de la población hispánica que, consentida por el derecho islámico como tributaria, vivió en la España musulmana hasta el siglo XI, conservando su religión cristiana e incluso su organización eclesiástica y judicial.

  • MUSULMAN: Que profesa la religión de Mahoma. Perteneciente o relativo a Mahoma y su religión.

  • NARTEX: Vestíbulo o sala porticada del atrio.

  • NAVE: Cada uno de los pasillos entre muros o filas de pilares.

  • NERVADA: tipo de boveda provista de nervios. Hay diferentes tipos de bóvedas, las cuales se clasifican por su utilidad. Las diferentes bóvedas se encuentran explicados en el anexo 3.

  • NERVADURA: Elemento de refuerzo o soporte frecuentemente con forma de moldura compuesta, que sobresale en los bordes de los elementos de una bóveda.

  • NERVIO: Arco que cruzandose con otro u otros sirve para formar la boveda de cruceria. Hay diferentes tipos de bóvedas, las cuales se clasifican por su utilidad. Las diferentes bóvedas se encuentran explicados en el anexo 3.

  • NORMANDÍA: es una región geográfica del Norte de Francia

  • OBISPO: Prelado superior de una diócesis o distrito de jurisdicción espiritual.

  • OFERENTE: Persona que ofrece algo.

  • OJIVAL: Arco formada por dos angulos de circulo iguales que se cortan en un de sus extremos y volviendo la concavidad el uno al otro. Hay diferentes tipos de arcos, los cuales se clasifican por su utilidad. Los diferentes arcos se encuentran explicados en el anexo 2.

  • ÓLEO: Pintura que se obtiene por disolución de sustancias colorantes en aceite secante.

  • ONIRICO: Perteneciente o relativo a los sueños.

  • ORANTE: Dicho de una figura humana representada en actitud de orar.

  • ORATORIO: Lugar destinado para retirarse a hacer oración a Dios.

  • ORFEBRERÍA: Arte de labrar objetos oro, plato y otros metales preciosos o aleaciones de ellos.

  • ORNAMENTO: Adorno, compostura, atavio que hace vistosa una cosa.

  • OSTROGODO: Se dice del individuo de aquella parte del pueblo Godo que estuvo establecida al oriente del Dniepery fundo un reino en Italia.

  • PALIO: Especie de dosel colocado sobre cuatro o más varas, abajo el cual se lleva procesionalmente el santisimo sacramento o una imagen.

  • PANTOCRATOR: En el arte Bizantino y Románico, representación del Salvador sentado, bendiciendo y encuadrado en una curva cerrada en forma de almendra.

  • PAPIRO: Lamina sacada del tallo de la planta de papiro y que empleaban los antiguos para escribir en ella.

  • PARTELUZ: Pilar que divide en dos el hueco de los portales góticos, apoyando el dintel, y usado muchas veces para la exposicion de una escultura.

  • PARTITURAS: Texto de una composición musical correspondiente a cada uno de los instrumentos que la ejecutan.

  • PASILLOS: Pieza de paso, larga y angosta, de cualquier edificio.

  • PATENA: Platillo de oro, plata o de otro metal, dorado, en el cual se pone la hostia de la misa, desde acado el paternóster hasta el momento de consumir.

  • PECHINA: Triangulo esferico que permite la transición de una planta cuadrada a otra circular para asentar una cúpula semiesférica.

  • PEDRERIA: Conjunto de piedras preciosas.

  • PENACHO: Adorno de plumas que sobresale en los cascos de los caballeros.

  • PENTECOSTES: Fiesta de los judios instituida en memoria de la ley que Dios les dio en el Monte Sinai, que se celebraba cincuenta dias después de la pascua del cordero. Festividad catolica de la venida del espíritu santo.

  • PERALTADO. Aquello que en la altura de un arco, bóveda o armadura excede el semicírculo. Hay diferentes tipos de arcos, los cuales se clasifican por su utilidad. Los diferentes arcos se encuentran explicados en el anexo 2.

  • PEREGRINACION: Ir en romería a un santuario por devoción o voto.

  • PERSECUSIÓN: Acción o efecto de perseguir; por ende cada una de las crueles y sangrientas persecuciones que ordenaron algunos emperadores romanos contra los cristianos en los tres primeros siglos de la iglesia.

  • PERSPECTIVA: Arte que enseña el modo de representar en una superficie los objetos, en la forma y disposición con que aparecen a la vista.

  • PILAR: Soporte vertical diferenciado de la columna por no estar sometido a ningún órden ni sistema fijo de proporciones y carecer de entásis puede tener o no basa y capitel y además es discrecional: cilíndrica, cuadrada, octogonal, oblonga o compuesta.

  • PILASTRA: Columna de sección cuadrangular. Hay diferentes tipos de columnas, las cuales se clasifican por su utilidad. Las diferentes columnas se encuentran explicadas en el anexo 4.

  • PINACULO: Remate puntiagudo, de forma piramidal, como agujilla, terminado en un florón y generalmente con sus aristas enriquecidas.

  • PLANTA: Figura que forman en sección horizontal los muros, tabiques y columnas de un edificio al nivel de los cimientos o de cada piso. Hay diferentes tipos de plantas, las cuales se clasifican por su utilidad. Las diferentes plantas se encuentran explicadas en el anexo 5.

  • POLICROMO: De varios colores.

  • PONTIFICADO: Dignidad de pontífice.

  • PONTIFICE: Prelado supremo de la iglesia catolica romana.

  • PORTADA: Ornato que se hace en las fachadas principales de los edificios suntuosos.

  • PÓRTICO: Sitio cubierto y con columnas que se construye delante de los templos y otros edificios suntuosos.

  • PREDICAR: Publicar, hacer patente y claro algo.

  • PREEMINENCIA: Privilegio, exención, ventaja.

  • PRESBITERIO: Espacio central y sobreelevado que cierra el crucero, dotado con un altar y, en ocasiones, la silleria reservada a los religiosos para sus rezos y canticos.

  • PRIMACIA: Superioridad, ventaja o excelencia.

  • PRIORATO: Casa en la que habitan algunos monjes pertenecientes a un monasterio principal, cuyo abad nombra el superior inmediato llamado prior para que los gobierne.

  • PROCESIONAL: Perteneciente o relativo a una procesión.

  • PROCLIVE: Que esta inclinado hacia delante o hacia abajo.

  • PROFANO: Que no es sagrado ni sirve a usos sagrados, sino puramente secular.

  • PROFETAS: Poseedor del don de la profesía.

  • PÚLPITO: Plataforma pequeña y elevada con antepecho y tornavoz que hay en algunas iglesias para predicar desde ella, cantar la epistola y el evangelio y hacer otros ejercicios religiosos.

  • RADIAL: Capillas de la girola ordenadas radialmente a partir del centro de la cabecera.

  • REFECTORIO: En las comunidades y en algunos colegios habitación destinada para juntarse a comer.

  • RELICARIO: Lugar donde estan guardadas las reliquias. Caja o estuche comúnmente precioso para custodiar reliquias.

  • RELIQUÍA: Aquello que por haber tocado el cuerpo de un santo es digno de veneración.

  • RELIEVE: Labor o figura que resalta sobre el plano.

  • RENACIMIENTO: Epoca que comienza a mediados del Siglo XV, en que bse despertó en occidente vivo entusiasmo por el estudio de la antigüedad clásica griega y latina.

  • REPUJAR: Labrar a martillo chapas metalicas.

  • RESURRECCIÓN: Acción de volver a la vida a un muerto.

  • RETABLO: Obra de arquitectura hecha de piedra, madera u otra materia, que compone la decoración de un altar.

  • RETORICA: Arte de bien decir, de dar al lenguaje escrito o hablado eficacia bastante para deleitar, persuadir, o conmover.

  • REVESTIMIENTO: Capa o cubierta con que se resguarda o adorna una superficie.

  • REVOQUE: Capa o mezcla de cal y arena u otro material analogo con que se revoca.

  • ROSETÓN: Gran ventana circular subdivida por radios y/o tracería.

  • SACRAMENTARIO: Libro liturgico que contenía las oraciones y fórmulas de consagración que se leían en las misas de los distintos ciclos litúrgicos.

  • SACRO: Sagrado.

  • SAETERA: Ventanilla estrecha de las que se suelen abrir en las escaleras y otras partes.

  • SAGRARIO: Parte interior del templo, en que se reservan o guardan las cosas sagradas como las reliquias.

  • SALMO: Composición o cántico que contiene alabanzas a Dios.

  • SALTERIO: Libro canonico donde se guardaban los salmos.

  • SAMBENITO: Capotillo o escapulario que se ponía a los penitentes reconciliados con el Tribunal Eclesiastico de la Inquisición.

  • SANTOS OLEOS: Aceite usado por la iglesia en los sacramentos y otras ceremonias.

  • SANTUARIO: Templo en que se venera la imagen o reliquia de un santo de especial devoción.

  • SARCOFAGO: Obra para dar sepultura a un cadáver.

  • SECULAR: Que se sucede o repite cada siglo.

  • SEDENTE: Que esta sentado.

  • SELYÚCIDA: Dinastía turca uguz que reinó en los actuales Irán e Iraq así como en Asia menor entre mediados del siglo IX y finales del siglo XIII. Llegaron a Anatolia, procedentes del Asia Central, a finales del siglo X, causando estragos en las provincias bizantinas y árabes.

  • SEÑORIO: Dominio o mando sobre algo.

  • SEPTUM: Nave que separa la parte semipública de la zona del presbiterio

  • SERAFIN: Cada uno de los espiritus bienaventurados que forman el primer coro.

  • SILICE: Mineral formado por silicio y oxigeno. Si es anhidro, forma el cuarzo, si es hidratado el opalo.

  • SILLAR: Cada una de las piedras labradas, por lo comun en forma de paralelepipedo, que forma parte de una construcción de sillería.

  • SILLAREJO: Sillares pequeños.

  • SILLERIA: Fabrica de sillares.

  • SIMBOLOGÍA: Estudio de los símbolos.

  • SIMONÍA: Compra y venta deliberada de beneficios y prevendas eclesiásticas.

  • SOBERANIA: Autoridad suprema del poder público.

  • SOBRIEDAD: Cualidad de sobrio.

  • SODOMÍA: Practica de todo genero de actos deshonestos.

  • SOLDADO: Persona que sirve a la milicia.

  • SOPORTE: Apoyo ó sostén.

  • STOA Ó ESTOA:

  • SUEVOS: Individuos pertenecientes a una liga de varias tribus germanicas que en el siglo III, se hallaba establecida entre el Rin, el Danubio y el Elba, y en el siglo V invadio las Galias y parte de la Hispania.

  • SUSTENTACIÓN: Acción de sostener algo para que no se caiga ó se tuerza.

  • TAMBOR: Muro Cilindrico que sirve de base a una cúpula.

  • TASA: Precio máximo o mínimo fijado oficialmente para una mercancía.

  • TEMPLE: Procedimiento pictórico en que los colores se diluyen en liquidos glutinosos o calientes.

  • TEMPLO: Edificio o lugar destinado pública y exclusivamente a un culto.

  • TEOCENTRISMO: Concepción ideológica en la cual Dios es el centro del Universo, todo fue creado por él, es dirigido por él y no existe ninguna razón más que el deseo de Dios sobre la voluntad humana. El teocentrismo abarca todo lo que existe, incluso la razón científica, ya que todo lo explica por la voluntad divina y mística de Dios.Era la ideología central de principios de la era cristiana y la Edad Media hasta el periodo del Renacimiento, en el cual se tomó a Dios como factor pero no como causa única del mundo.

  • TEOCRACIA PONTIFICIA: Doctrina llamada plenitudo potestatis por la cual el Papa es el único Vicarius Christi, título usado por algunos monarcas. Quien poseía la monarquía absoluta era el Papa, en la Iglesia todo dependía de él como cabeza del cuerpo místico, él no recibe ni fuerza ni autoridad de los miembros, sino que es la cabeza la que la infunde sobre los miembros; por lo que la autoridad suprema en la tierra es una e indivisa y le corresponde a la Iglesia con el poder de las dos espadas, la espiritual y la temporal y concluía el pontífice que toda criatura humana está sometida al Pontífice por necesidad de salvación.

  • TEOLOGÍA: Ciencia que trata de Dios, de sus atributos y perfecciones.

  • TESELA: Cada una de las piezas con las que se forma un mosaico.

  • TESTERO: Frente o principal fachada de algo.

  • TETRAMORFO: Símbolo de los evangelistas consistentes en cuatro figuras humanas con cabeza de animal.

  • TIMPANO: Campo triangular comprendido entre las dos cornisas inclinadas de un frontón y la horizontalidad de su base, que en los templos de la antigüedad se decoraba con relieves o estatuas; en la arquitectura medieval se denominan así el campo enmarcado por el arco y el dintel de un pórtico, que puede estar igualmente decorado con relieves y mosaicos.

  • TOBA: Piedra caliza muy porosa y ligera, formada por la cal que llevan en la disolución las aguas de ciertos manantiales y que van depositandola en el suelo o sobre las plantas u otras cosas que se hallan a su paso.

  • TORAL: Cada uno de de los cuatro arcos en que estriba la media naranja de un edificio. Hay diferentes tipos de arcos, los cuales se clasifican por su utilidad. Los diferentes arcos se encuentran explicados en el anexo 2.

  • TORRE: Edificio más alto que ancho y que en las iglesias sirve para colocar las campanas.

  • TORREON: Torre grande, para la defensa de una plaza o castillo.

  • TRANSEPTO: Brazo menor de la cruz latina en las iglesias que tienen esta planta. El transepto en si tiene dos brazos norte y sur, separados por el cuadrado del crucero.

  • TRANSVERSAL: Que se halla o se extiende atravavesado de un lado a otro.

  • TRASCENDENTAL: Que se comunica o extiende a otras cosas. Que tiene gran importancia.

  • TRASDOS: Superficie exterior convexa de un arco o boveda, contrapuesta al intrados. Hay diferentes tipos de arcos, los cuales se clasifican por su utilidad. Los diferentes arcos se encuentran explicados en el anexo 2.

  • TREPANO: Instrumento que sirve para agujerear. Por extensión, escultura hecha a trépano, que es la que presenta profundas incisiones para dar efecto de gran relieve de claroscuro, formado a modo de calados.

  • TRIBUNA: Galeria elevada abierta a las naves, sobre los colaterales o construida como edículo especial en una parte cualquiera de la iglesia, desde la que determinados grupos participaban del oficio divino aislados del resto de los fieles.

  • TRIFOLIO: Decoración basada en motivos vegetales de tres hojas como el trebol.

  • TRIFORIO: estrecho pasadizo abierto entre las paredes de la nave central, entre las arcadas y el claristorio, y abierto por arcadillas en la nave central; posteriormente, tambien abierto en ventanas al exterior.

  • TRILOBULADO: Arco basado en la tracería de tres lóbulos. Hay diferentes tipos de arcos, los cuales se clasifican por su utilidad. Los diferentes arcos se encuentran explicados en el anexo 2.

  • TRIPARTITO: Dividido en tres partes, órdenes o clases o formado por ellas.

  • TRIPTICO: Tabla dividida en tres hojas, de las cuales las laterales se doblan hacia el centro.

  • TRONO: Asiento con gradas y dosel, que usan los monarcas y otras personas de alta dignidad, especialmente en los actos de alta ceremonia.

  • TÚNICA: Vestidura exterior amplia y larga.

  • UNIVERSIDAD: Institución de enseñanza superior que contiene diversas facultades y que confiere los grados academicos correspondientes.

  • VALDENSE: Perteneciente a la secta hereje fundada por Pedro de Valdo, que predicaba que todo clerigo que practicara voluntariamente la pobreza podia ejercer las funciones del sacerdocio.

  • VÁNDALO: Se dice de un individuo perteneciente a un pueblo barbaro de origen germanico oriental, procedente de escandinavia.

  • VANO: Parte del muro o fábrica en que no hay sustentación o apoyo para el techo o bóveda

  • VASALLAJE: Vinculo de dependencia y fidelidad que una persona tenía respecto a otra, contraido mediante ceremonias especiales, como besar la mano el vasallo al que iba a ser su señor.

  • VELADURA: Tinta transparente que se da para suavizar el tono de lo pintado.

  • VELETA: Pieza de metal, ordinariamente en forma de saeta que se coloca en lo alto de un edificio de modo que pueda girar alrededor de un eje vertical. Impulsada por el viento y que permite señalar la direccion de este.

  • VERA CRUZ: Cruz en la que fue ejecutado Jesús, que se supone fue descubierta hacia el año 326 por la emperatriz Elena, madre de Constantino, y luego distribuida en multitud de pequeñas reliquias

  • VICIO: Falta de rectitud o defecto moral en las acciones.

  • VIKINGO: Navegantes escandinavos que entre los siglos VIII y IX realizaron incursiones por las isals del atlantico y por casi toda Europa occidental.

  • VIÑETA: Dibujo o estampa que se pone para adorno en el principio o el fin de los libros y capitulos y algunas veces en el contorno de las planas.

  • VIRGEN: Persona que no ha tenido relaciones sexuales; por antonomasia la virgen María.

  • VIRTUD: Fuerza, vigor o valor.

  • VISERA: Parte del yelmo, movible, por lo común, sobre dos botones laterales para alzarla y bajarla, y con agujeros o hendiduras para ver, que cubría y defendía el rostro.

  • VISPERA: Día que antecede a otro determinado, especialmente si es fiesta.

  • VITRAL: Vidriera de colores.

  • VOCACIONAL: Perteneciente o relativo a la vocación

  • VOLUMEN: Corpulencia y volumen de algo

  • VOTIVO: Ofrecido por voto o relativo a el.

  • YELMO: Parte de la armadura antigua que resguardaba la cabeza y el rostro, y se componía de morrión visera y babera.

  • YUXTAPONER: Poner algo junto a otra cosa o inmediata a ella.

  • ZOROASTRO: Nombre de un personaje histórico o mítico)del que se sabe poco o nada de forma directa, y las pocas referencias a él están rodeadas de misterio y leyenda.

  • anexo 1 (TOMADO DE Ching, Francis D.K. Diccionario Visual De La ARQUITECTURA)

    Tipos de arcos

    Arco de Medio Punto o Formarete: El centro de la circunferencia está a la altura de las impostas, por lo tanto su flecha es igual a la mitad de su luz.

    Arco Rebajado: Cuando la flecha es menor que la semiluz.

    Arco Peraltado: Cuando la altura de su flecha es mayor que su semiluz. El realzado es Cuando el peralte es rectilíneo. Así son los arcos asturianos.

    Arco de Herradura: Cuando el peralte no es rectilíneo sino curvilíneo.

    Arco Apuntado u Ojival: Las 2 curvas forman ángulo en la clave. Según donde esté situado el centro, se llaman:

    Arco Carpanel o Apainelado: Con 2 centros en la línea de las impostas y otro por debajo de ella.

    Arco Lobulado: Lo importaron de Oriente. En el mundo de la simbología se dice que es la representación simbólica del mundo del que nacen otros mundos o del cielo del que surgen otros cielos.

    Arco Abocinado: Aquel cuya luz aumenta o disminuye de una a otra cara del muro en el que se abre el hueco.

    Arco conopial: Arco formado por cuatro segmentos de arco de círculo, dos de los cuales están invertidos.

    Arco fajón o perpiaño: Arco embebido en la bóveda de una nave y resaltado por su interior que sirve para reforzarla

    Arco formero: Cada uno de los arcos que soportan una bóveda vaída.

    Arco toral: Cada uno de los cuatro arcos que definen el espacio del crucero y que sostienen la cúpula o el cimborrio.

    ANEXO 2 (TOMADO DE Ching, Francis D.K. Diccionario Visual De La ARQUITECTURA)

    TIPOS DE BOVEDAS

    Bóveda De Cañón: Bóveda de forma semicilíndrica originada por una generatriz semicircular y una directriz recta. Se emplea para cubrir espacios longitudinales, como las naves de las iglesias o sus transeptos. Fue muy utilizada en la arquitectura romana y luego en la prerrománica y románica.

    Bóveda de arista: Es la formada por la intersección de dos bóvedas de cañón iguales que se cruzan perpendicularmente. Se forma sobre la base de dos arcos de medio punto. Las líneas de intersección o aristas son arcos de elipse que se encuentran en el vértice superior. Supuesta la igualdad de las bóvedas secantes, el espacio que cubre una bóveda de arista es un cuadrado perfecto.

    Bóveda esférica o cúpula: Es la formada por un casquete semiesférico que suele descansar sobre un muro circular o sobre pilares dispuestos formando un círculo.

    Bóveda vaída o baída: Está formada por un hemisferio cortado verticalmente por dos pares de planos paralelos entre sí y perpendiculares a los otros dos. Por su configuración final es muy apropiado para cubrir espacios cuadrados.

    Bóveda de horno: Es la formada por un cuarto de esfera. Su proyección horizontal es semicircular, por lo que es apropiada para cubrir ábsides o espacios similares. Muy utilizada en la arquitectura románica.

    Bóveda gallonada: Está compuesta por modillones, segmentos cóncavos que semejan los gajos de una naranja. La unión de estos elementos da lugar a aristas entrantes que convergen en el centro de la bóveda.

    Bóveda de crucería: Es una bóveda formada por una serie de arcos o nervios con función estructural. Los espacios que se originan entre ellos constituyen los plementos, una especie de losas curvas de piedra que tienen misión de relleno. La forma y disposición de los nervios puede ser muy variada y compleja, llegando en el gótico tardío a complicadas soluciones geométricas dando origen a las bovedas estrelladas, cuatripartitas, sexpartitas, etc; ya que se diferenciaran por la ubiccaion de los nervios.

    ANEXO 3 ( TOMADO DE Ching, Francis D.K. Diccionario Visual De La Arquitectura )

    PLANTAS:
    DE CRUZ LATINA DE CRUZ GRIEGA

    'Arte medieval y Religión'
    'Arte medieval y Religión'

    baSILICAL centralizada

    'Arte medieval y Religión'
    BIBLIOGRAFIA

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    Ob.cit. Pág 7, Pág 1345

    Ob.cit. Pág 12, Pág 665

    Ibíd., pág 670

    Comby, Jean. La Historia de la Iglesia. Tomo I, Pág 16

    La Biblia. Mt 16, 18-20

    Ídem Mt 28, 19-20

    Ídem. He 2, 1-4

    Ídem He 2, 41

    Ob.Cit. Pág 23: Pág 43

    Ob.Cit. Pág 23, Pág 21

    Dice Indro Montanelli que Agripina asesinó a Claudio al administrarle un plato de Setas venenosas. Ob.Cit Pág 13, Pág 294

    Ver Capítulo III, Pág 46

    González, Justo L. Historia del Cristianismo Tomo I. Pág 378

    Constantino se convierte al cristianismo en el 312, y un año después en el 313, en su Edicto de Milán, decreta la oficialidad del cristianismo. Ob. Cit. Pág 23, Pág 74

    Ídem, Pág 75

    En la Edad Media, se creó en Europa una importante red de asilos, hospitales y orfanatos que dependían de la iglesia y que eran mantenidos gracias a los donativos y a las colectas que se hacían en ellas, para poder cumplir así una de las normas de la regla de San Benito, la practicar la caridad con el hermanos enfermo y desvalidos. Ob. Cit. Pág 23, Pág 59

    El anacoretismo era la entrega total a la contemplación y la penitencia; mientras que el cenobitismo era la vida profesada de manera monástica. Ob. Cit pág 23, Pág 75

    Ídem pág 80

    Para mayor información ver capitulo VI: Arte Románico, bajo el subtitulo reforma cluniacense

    Ob. Cit Pág 23, Pág 89

    Las reformas aparecieron en dos partes: como un intento de imitación del ideal monástico, tal como se practicaba en Cluny; y como un intento de centralizar el poder de la iglesia en el papa, esto último ocasionaría la llamada guerra de las investiduras, ya que hasta ese momento los reyes practicaban la Simonía, es decir, realizaban la venta de cargos eclesiásticos; Gregorio VII como jefe máximo de la iglesia, produjo una reforma en este sentido, ya que prohibió estos nombramientos, ocasionando la mencionada disputa. Íbidem, Pág 94

    Íbidem, Pág 144

    Íbidem, Pág 167

    actual Urfa, en Turquía. enciclopedia Wikipedia en www.wikipedia.com

    Actual capital del Líbano. Ídem Libano

    Guerra Santa. Real Academia de la Lengua Española. Diccionario de la Lengua Española; tomo 6

    Sucesor de Zengi Ob.Cit. Pág 34 Las Cruzadas

    Balduino IV era conocido como el rey leproso, debido a la grave enfermedad que padecía. Buscador Google en www.google.com

    Los venecianos pidieron a cambio que los cruzados se detuvieran en Zara ciudad que los húngaros les habían arrebatado y que se las devolvieran. Ob.Cit. Pag 12. Pág 679

    Llamado San Luis Ob.Cit.Pág 23, Pág 78

    Llamada entonces Orden de San Juan de Jerusalén y Rodas. Ob. Cit. Pág 34 Los Caballeros Hospitalarios.

    La designación de Orden del Temple es la traducción del nombre al francés “les pauvres chevaliers du temple” siendo muy extendida dados los amplios lazos Templarios con Francia. Ob.Cit. Pág 23, Pág 394

    Nueve en total: Hugo de Payens, Geoffroy de Saint-Omer, Andrés de Montbard, Archamband de Saint-Aigman, Payer de Montidier, Godofredo Visón, Gondemaro, Hugo Rigaud Rolando. Ob.Cit. Pág 34.

    Esta cruzada fue promulgada por Inocencio III, los ambiciosos nobles del norte de Francia, so pretexto de suprimir la herejía, se lanzaron sobre el sur del país, en el año 1210 ciento ochenta albigenses fueron quemados vivos. Ob.Cit. Pág 23, Pág 396

    El siglo IV se caracterizó por las Herejías Trinitarias. Las dos más importantes fueron el Arrianismo, que negaba la divinidad de Cristo, y los pneumatómacos ó maratonianos, que negaban el Espíritu Santo. Ob.Cit. Pág 12, Pág 648

    Ob. Cit. Pág 23, Pág 174

    Ob. Cit. Pág 23, Pág 200

    Todavía esta reliquia se conserva en este lugar. Ob. Cit. Pág 23, Pág 234

    Esta ruta continua vigente hoy día. Ver Capitulo VI Arte Románico, bajo el subtitulo Las Iglesias de Peregrinación y El Camino a Santiago

    Ob.Cit Pág 23, Pág 180

    Nombre del camino de Santiago. Ob.Cit. Pág 36 Camino a Santiago.

    Procomio en Toman Rolf. Románico. Pág 20

    Gombrich Ernest. Historia del Arte. Pág 133

    Ídem. Pág 145

    Ramírez, Juan Antonio. Historia del Arte 2 La Edad Media. Pág 7

    Ob.Cit.Pág 50, Pág 23

    Ídem, Pág 39

    Mayor información sobre los arcos en el Glosario

    Ob.Cit. Pág 24 Mt 27, 57

    Ob.Cit. Pág 24 He 8, 2

    El arcosolio, es un nicho que servía de tumba a toda una familia. El sarcófago es un sepulcro de piedra o de mármol, ordinariamente adornado con esculturas en relieve o con inscripciones. La forma es una tumba excavada en el suelo de las criptas, de los cubículos o de las galerías. Los cubículos eran pequeñas piezas, verdaderas tumbas de familia, con capacidad para varios lóculos. La cripta es una pieza más grande. Istituto Saleciano San Calissto-Roma en http:/ /www.catacombe.roma.it/indice_sp.html

    Ob. Cit Pág 52

    Ídem,

    Íbidem

    Ob.Cit. Pág 24 Jn 10: 11

    Ob.Cit. Pág 23, Pág 83

    Fletcher Banister. Historia de la arquitectura Europa y El Mediterráneo: De La Roma Antigua Al Fin Del Medioevo, Pág 287

    Termino filosófico que se refiere al descenso al inframundo para luego volver de el. Ob.Cit: Pág 36 Anástasis

    Ob.Cit. Pág 49, Pág 288

    En las catedrales e iglesias, espacio transitable ubicado detrás del presbiterio que da ingreso a otras capillas situadas en el ábside. Ob.Cit.Pág 35, Tomo 4

    Parte Exterior Saliente, generalmente abovedada y de planta poligonal ó semicircular, de la zona posterior del altar mayor de una iglesia. Ching, Francis Diccionario Visual De Arquitectura

    Plazaola Juan. Arte e Iglesia Pág 27

    Personas que se instruyen en la doctrina y misterios de la fé católica con el fin de recibir en bautismo. Ob. Cit, pág 35 Tomo 3.

    En un principio conocida como Mausoleo de Constantina, hija de Constantino, es hoy llamada Basílica de Santa Constanza; Ob.Cit.Pág 23, Pág 125

    Lugares destinados para albergar el cuerpo de un mártir. Este tipo podía estar al aire libre o incluso dentro de las catacumbas. Por lo general, en el imperio bizantino, el Martyrium era un edificio de dos plantas, con ábsides, cubierto con bóveda de cañón ó de sección circular y en el piso inferior, una cripta subterránea con el cuerpo del mártir, y en el superior la estructura era abovedada donde se colocaba el altar para el banquete funerario. Ob.Cit.Pág 56, Pág 290

    Mayor información sobre la bóveda y los tipos usados ver el Glosario.

    Ob.Cit. Pág 49, Pág 292

    Ob.Cit. Pág 49, Pág 291

    Obra de fábrica curvada que sirve para cubrir el espacio comprendido entre dos muros o varios pilares. Ob. Cit Pág 58, Pág 45

    Estas eran construidas mediante hiladas concéntricas de ladrillo, a modo de coronas de radio decreciente reforzadas exteriormente con mortero, y eran concebidas como una imagen simbólica del cosmos divino. Ídem Pág 46

    Obras realizadas con piedras ó vidrios pequeños llamados teselas, que en conjunto forman escenas bíblicas. Ob.Cit.Pág 50, Pág 32

    Ob.Cit. Pág 49, Pág 283

    La Planta Centralizada es aquella que se desarrolla en torno a un punto central, las plantas circulares y cuadradas corresponden a este tipo de planta; la planta basilical es más común, es diseñada con una nave central y dos laterales, es también llamada de cruz latina. Toman Rolf. El Románico. Pág 20

    La iconostasis es una especie de cancela perforada por vanos y repleta de iconos, la tribuna estaba destinada a las mujeres en el piso superior. Ob.Cit, Pág 58

    El triforio es una galería que rodea el interior de la iglesia sobre los arcos de las naves y que suele tener ventanas de tres huecos. Idem

    Ob.Cit Pág 49, Pág 23

    Ob.Cit. Pág 49, Pág 43

    Iglesia donde se guardaban las reliquias reales. Ob.Cit.Pág 56, Pág 65

    Moldura o banda decorativa en la cara de un arco o ventana que sigue la curvatura del intradós.

    Ob. Cit. Pág 58

    Ob. Cit. Pág 56, pág 73

    Ob. Cit. Pág 50, Pág 43

    Idem, Pág 49, Pág 234

    Cristo entronizado sobre el Universo Ob.Cit. Pág 62, Pág 466

    Ob. Cit. Pág 59, Pág 31

    El tema se refiere a la aparición de los tres ángeles que tuvo Abraham antes de la destrucción de Sodoma y Gomorra Ob.Cit. Pág 24, Gn 18, 2

    Ob. Cit. Pág 50, Pág 30

    Que tiene carácter solemne. Ob.Cit. Pág 35, tomo 6

    San Marcos como un León; San Mateo como un Ángel; San Juan como un Águila; y San Lucas como un Toro Ob. Cit. Pág 62, Pág 468

    Secta hereje que negaba la doble naturaleza de Jesucristo. Ob. Cit. Pág 35 Tomo 7

    Hauser Arnold. Historia Social del Arte y la Literatura. Tomo I, Pág 155

    Ob.Cit. Pág 7, Pág 1280

    Tribus Bárbaras de Origen Germano que invadieron la Península Ibérica. Ob.Cit: Pág 35, Tomo 2

    Ob.Cit.Pág 8, Pág 14

    Ob.Cit.Pág 12, Pág 634

    Ob.Cit.Pág 49, ¨pag 235

    Ob.Cit. Pág 48. Pág 110

    La Corona de Suintila fue robada en el año 1921 y jamás recuperada Ob. Cit. Pág 34. La Corona Votiva De Recesvinto

    Ob.Cit.Pág 34, Cruz de la Victoria

    Ob.Cit.Pág 36, Cruz de la Victoria

    Ob.Cit. Pág 50, Pág 43

    Todos los términos como abovedamientos de medio cañón, arista o cúpulas, cruceros, ábside, sillarejo, la mampostería, el ladrillo, los tipos de arco, los tipos de bóveda; vanos, saeteras, presbiterio, dovela, trasdós e intradós, soporte, columna, pilar. y capiteles; se encuentran definidos y explicados en el glosario y en los anexos.

    Ob.Cit. Pág 34 San Juan de los Baños

    Ídem

    Ob.Cit. Pág 34. San Juan de Los Baños

    Santa Colomba virgen y Mártir Ob.Cit. Pág 34. Santa Comba de Bande

    Ob. Cit Pág 34. San Pedro de la Nave.

    Técnica basada en el corte oblicuo en el borde o extremidad de una lámina o plancha de piedra ó cristal. Ob.Cit. Pág 35, Tomo 2

    Ob.Cit Pág 77, Pág 205

    Ob.Cit. Pág 50, Pág 168

    Entonces el rey dio orden de traer a Daniel y de arrojarle al foso de los leones. El rey le dijo a Daniel: que tu Dios al que sirves te libere. Al día siguiente y para sorpresa del rey Daniel aún está vivo en la fosa de los leones. La sorprendente explicación que dio Daniel fue que vino un ángel y le cerró las bocas a los leones para protegerlo. Dn 6, 16, Ob.Cit. Pág 24

    Al llegar al lugar que Dios le había indicado, Abraham levantó un altar y colocó la leña sobre el, luego tomo a su hijo Isaac y lo colocó encima y tomo el cuchillo para degollar a su hijo, en ese momento el ángel Dios lo llamó y le dijo: Abraham no toques a tu hijo, pues ahora veo que temes a Dios. Ob.Cit.Pág 24 Gen 22, 9 -12

    Ob. Cit Pág 34 Quintanilla de las Viñas

    Se cree que fueron realizados por el mismo que elaboró los de dicha iglesia Ídem

    Actualmente corresponde a los territorios de Francia, Holanda y Suiza. Ob. Cit. Pág 36. Galia

    Ver en los anexos la lista de los reyes de Francia

    Ob. Cit. Pág 8, pág 13

    Idem. Pág 17

    Ob. Cit. Pág 8. Pág 18

    estas estaban gobernadas por duques o marqueses, que tenían poder sobre un ejército, las marcas eran la Marca Hispánica, la Marca Sajona, la Marca Bretona, la Marca Lombarda y la Marca Ávara. Ob. Cit. Pág 8, pág 21

    Ob.Cit. Pág 49. Pág 234

    Ídem. Pág 236

    Ob.Cit. Pág 62. Pág 23

    Pijoan José. Historia del Arte Tomo 3. Pág 45

    Gonzalez, Carmen. Arte Medieval; en www.rincondelvago.com

    Ob.Cit, Pág 100. Pág 121

    Hintzen-Borren Brigitte. Roma Arte y Arquitectura. Pág 234

    Océano. Enciclopedia Autodidáctica Océano. Pág. 573

    Órdenes religiosas que tienen por objetivo pedir limosna. Comby, Jean. La Historia de la Iglesia, Tomo II. Pág 23

    Ob.Cit. Pág 56. Pág 109

    Ob.Cit. Pág 49. Pág 256

    Ob.Cit. Pág 49. Pág 256

    Ob.Cit. Pág 23. Pág 146

    Ob.Cit.Pág 27. Pág 176

    Idem

    Ob.Cit.Pág 23. Pág 145

    Ob.Cit.Pág 23. Pág 146

    Ob.Cit.Pág 27.Pág 177

    Idem.Pág 178

    Ob.Cit.Pág 100. Pág 57

    Galería que cerca el patio principal de una iglesia o convento. Ob.Cit.Pág. 35, Tomo 3

    Ob.Cit. Pág 48.Pág 67

    Ob.Cit.Pág 102. Sainte Madeleine du Vezelay

    Ob.Cit.Pág 36. Camino a.Santiago.

    Ob.Cit.Pág 36 Historia del Camino a Santiago

    Ob.Cit.Pág 62. Pág 76

    EncIclopedia Arteguia en www.arteguia.com

    Ob.Cit. Pág 123. Arquitectura Románica

    Ob.Cit.Pág 123. Arte Románico en Italia

    Ob.Cit.Pág 100. Pág 67

    Ob.Cit.Pág. 123 Arte Romanico en España

    Se trataba de una gran región fronteriza creada por Carlomagno, regida por condes librementes nombrados y depuestos por el rey. Ob.Cit. Pág 8, Pág 31

    Ob.Cit.Pág. 123 Arte Romanico en España

    Por investigaciones realizadas, se sabe que los restos no son los del apóstol Santiago, sino los de un mártir de la época paleocristiana. Ob.Cit Pág 36. Santiago de Compostela

    Un gigantesco incensario que se acciona en las grandes solemnidades que a lo largo de los brazos del crucero alcanza una altura de vaivén que casi roza las bóvedas. Ob.Cit Pág 36. Santiago de Compostela

    Ob.Cit Pág 100. Pág 70

    Ob.Cit Pág 100. Pág. 75

    Ob.Cit Pág 50. Pág 67

    Colección de relatos fantásticos de animales. Ob.Cit Pág 35, Tomo 2

    Ob.Cit Pág 62. Pág 255

    Ob.Cit Pág 50. Pág.258

    Ob.Cit Pág 48. Pág 234

    Ob.Cit Pág 24. Ap 21-2.

    Ob.Cit Pág 24. Ap 21-6.

    Ob.Cit Pág 77.Pág 334.

    Ob.Cit Pág 102. Pintura Románica

    Ob.Cit Pág 62. Pág 358.

    Ob.Cit Pág 34. Misal

    Ob.Cit Pág 50. Pág. 244

    Ob.Cit Pág 102. Salterio

    Ob.Cit Pág 62. Pág 367.

    Ob.Cit Pág 36. Saint - Savin - sur - Gartempe

    Ob.Cit.Pág 62. Pág 459

    Ob.Cit.Pág 106.Pág 1209

    Ob.Cit.Pág 106.Pág 1222

    Vasari es considerado, el primer Gran Crítico y Biógrafo del Renacimiento. Ob.Cit.Pág 49.Pág 559

    reza y trabaja Ob.Cit.Pág 34. Orden del Cister.

    Ob.Cit.Pág 34. Orden del Cister.

    Ob.Cit.Pág.100. Pág 87

    Rolf Toman. El Gótico. Pág 123

    Idem Pág 126

    Íbidem Pág 132

    Ob.Cit 161. Pág 144

    Ob. Cit Pág 106, pág 122

    Esta reforma fue dirigida por el arquitecto Viollet-le-Duc. Ob.Cit.Pág 161. Pág 125

    Ob.Cit.Pág 161. Pág 137

    La túnica que llevaba la Virgen al dar a luz a Jesús Ob.Cit. Pág 123. Románico en Francia

    Ob. Cit Pág 100. Pág 99

    Ob. Cit Pág. 56. Pág 144

    Ob. Cit Pág. 50. Pág 76

    Ob.Cit Pág 106, pág 694

    Ob. Cit Pág 161. Pág 276

    Ob. Cit Pág.102 Catedral de Avila.

    Ver capitulo V Período Carolingio

    Ob.Cit.Pág 161. Pág 290

    Ob. Cit Pág 56. Pág 267

    Ob. Cit Pág.50 Pág 329

    Ob.Cit.Pág 77. Pág 198

    Ob.Cit.Pág. 56 Pág 189

    Ob.Cit.Pág 36. La Giralda

    Ob.Cit.102. Catedral de Salamanca

    Ob.Cit 36. La Torre del Gallo.

    Ob.Cit.Pág 36. Catedral de Colonia

    Ob.Cit.Pág 161. Pág 340

    Es una de las imágenes más conmovedoras del arte cristiano, es la representación de la Madre de Dolores y del cuerpo llagado del redentor; la cual refleja un profundo suplicio humano que mueve al espectador a la compasión. Idem. Pág 351

    Ob.Cit.Pág 161. Pág 352

    Ob.Cit.Pág 123. Pintura Gótica

    Ob.Cit.Pág 100. Pág 102

    Ob.Cit.Pág 7. Cimabue

    Idem. Madonna en Majestad

    Ob.Cit.Pág.50 Pág 153

    Ob.Cit.Pág 161. Pág 477

    Ob.Cit.Pág 7. Jan Van Eick

    Ob.Cit.Pág 49.Pág 344

    Ob.Cit.Pág 49. Pág 321

    Ob.Cit.Pág 36. Giotto di Bondone

    Ob.Cit.Pág 36. San Francisco de Asís

    Ob.Cit.Pág. 36 Obras de Giotto en la Basílica de San Francisco de Asís

    Ob.Cit.Pág. 7. Giotto Di Bondone. El Anuncio a Santa Ana

    Ob.Cit.Pág. 100.Pág 115

    Ob.Cit.Pág 7 Giotto di Bondone. Madonna in Maestá

    Ob.Cit.Pág 100. Pág 117

    191

    266




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    Enviado por:Master En Humanidades
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