Arte


Surrealismo pictórico


El Surrealismo

A lo largo del siglo XIX, los progresos técnicos, el desarrollo de la economía y el continuo avance de las ciencias habían forjado un tipo de sociedad occidental que se asentaba en una creencia que les parecía firme e inmutable: la fe en el progreso de la ciencia como elemento imprescindible un desarrollo humano que parecía ilimitado e incuestionable.

Sin embargo, las teorías de algunos pensadores y científicos como Nietzche, Einstein y Freud pusieron en cuestión la bondad del progreso basado en un desarrollo incontrolado de la técnica, la validez de principios éticos y morales no cuestionados hasta el momento y la importancia de la parte no racional de la persona, quebrando con ello la confianza y la seguridad de las hasta aquel momento optimistas sociedades de Occidente. Los malos presagios que auguraban que el desarrollo de la tecnología no tenía por qué ir necesariamente ligado al progreso y bienestar se confirmaron plenamente en el período 1914 - 1918, durante la cual una espantosa guerra sembró el horror y la muerte por todo el continente europeo

Tras la guerra, nació un mundo distinto. Por un lado, la URSS, Italia, Alemania y, en menor medida, otros países, vieron nacer y desarrollarse filosofías que dieron lugar al establecimiento de regímenes autoritarios; por otro, el sistema capitalista, basado en la iniciativa privada y la inhibición del Estado en la economía, entró en profunda crisis con sus secuelas de paro y miseria, y por último, el sistema democrático sufrió un cierto desprestigio al ser incapaz de garantizar seguridad y bienestar. Todos estos profundos cambios no fueron ajenos al mundo del arte. A partir de entonces, el artista, en buena medida racionalista, academicista y confiado, dejó su lugar a otro con inquietudes distintas, más escéptico y receloso ante un porvenir incierto e inquietante. El nuevo artista reniega de la misión que hasta ese momento realizaban sus colegas: la de plasmar la realidad. Lo que le interesa, por el contrario, es trasladar a sus lienzos o a la piedra sus inquietudes, su visión del mundo, sus sueños. En definitiva, el artista dejó de ser un fiel transmisor de lo que veía para convertirse en un creador. Aunque surgieron movimientos de índole diversa, todos tenían un denominador común: la convicción de que el arte debía encontrar nuevos derroteros, liberarse de normas y formalismos pasados y de ser el resultado de las vivencias e inquietudes de cada autor. A estos movimientos se les conoce como vanguardias del siglo XX. Uno de ellos es el surrealismo.

El surrealismo nació oficialmente en 1924, con la publicación del "Manifiesto del surrealismo", obra del escritor francés André Bretón. Aunque el propio Bretón lo llegó anegar, el surrealismo, que no sólo abarca el arte sino también la literatura, el cine (un perro andaluz, de Buñuel), la fotografía... Nació estrechamente ligado al movimiento dadaísta

Surgido tras la I Guerra Mundial y con una decidida orientación nihilista, el dadaísmo significó ante todo una abierta manifestación contra toda forma de arte tradicional, y llegó incluso al rechazo de cualquier forma de arte producida por formas convencionales... Y en este punto de rechazo y ruptura con el pasado se entronca con el surrealismo. La diferencia está en que el surrealismo sustituyó el nihilismo dadaísta por una experimentación científica, con ayuda de la filosofía y la psicología. Esta conexión entre ambos movimientos explica que muchos de los componentes del dadaísmo (Ernst, Arp, Picabia, Ray) se adhiriesen posteriormente al surrealismo y que muchas obras se puedan encuadrar perfectamente en ambos movimientos.

El surrealismo fue definido por el propio Bretón como "automatismo psíquico puro, por el cual se propone expresar verbalmente, por escrito, o bien de otra manera, el funcionamiento real del pensamiento, en ausencia de todo control ejercido por la razón, fuera de cualquier preocupación estética o moral". El impacto que causó en los medios intelectuales de la época no fue inferior al escándalo provocado por el dadaísmo. Los surrealistas criticaban la pérdida de la libertad en los creadores, debida a que el pragmatismo, la rutina, el peso de la educación, "las buenas maneras" coarten al individuo de tal manera que no es necesario que exista una coacción física: la propia autocensura se encarga de limitar la capacidad de creación del individuo al no ser capaz de romper sus ataduras y dejar que la imaginación vague sin lazos ni trabas de clase alguna. El creador es, pues, un alienado de la sociedad, de la que sólo puede librarse mediante la exaltación de lo irracional, de la locura, del sueño; es decir, mediante la oposición de "otro mundo" al establecido y dominado por las clases dirigentes. Es esta la razón por la que algunos surrealistas se adhieren al marxismo, pues piensan que es el instrumento capaz de destruir el orden social y crear una nueva sociedad.

En el primer "Manifiesto del surrealismo", la pintura apenas fue objeto de atención. De hecho, los pintores que más tarde se integraron en el grupo mantuvieron, en principio, una cierta distancia, recelosos de perder su independencia.

En 1927, aparecieron una serie de artículos de Bretón con el título de "Surrealismo y pintura", en los que trataba de las vías por las que el pintor conseguía adentrarse en el mundo surrealista: la vía del automatismo y la del mundo de los sueños

Automatismo significaba para los surrealistas el mecanismo por el que las ideas y las asociaciones de imágenes surgían al exterior a través de la palabra, la escritura o la imagen de manera rápida, espontánea, fluida, sin hacer caso para nada de la coherencia y el sentido. Así aparecieron diferentes técnicas en el campo de las artes visuales como el collage, los fotomontajes y el frottage (procedimiento por el cual se pasa un lápiz sobre el lienzo extendido sobre una superficie rugosa), cuyos resultados eran la aparición de un conjunto de imágenes yuxtapuestas, en apariencia faltas de sentido.

En cuanto a la vía de la exploración onírica, no se trataba del estudio de símbolos de los sueños, sino de la plasmación de imágenes oníricas, que podían proceder de sueños diferentes o podían recordarnos tan solo ciertas características de los mismos.

La complejidad del movimiento surrealista, que más que una doctrina o escuela era una toma de postura frente a la realidad que les tocó vivir, explica la variedad de estilos. Los hubo que se inclinaron por un surrealismo figurativo (Ernst, Dalí, Magritte, Delvaux), mientras otros como Masson, Miró y Tanguy optaron por la abstracción.

Salvador Dalí

Pintor, creador plástico y escritor español nacido y muerto en Figueres, 1904 -1989. Se formó inicialmente en la Escuela de Dibujo de su ciudad natal junto al maestro Juan Núñez. En 1921 se trasladó a Madrid, matriculándose en la Escuela de Bellas Artes de San Fernando. En la Residencia de Estudiantes entabló amistad con Luis Buñuel, Federico García Lorca, Rafael Barradas y otros artistas y escritores.

Durante este período inicial su pintura estuvo marcada progresivamente por influencias cubistas y metafísicas, Naturaleza muerta (1924, Madrid, colección particular). Por otra parte, es evidente la influencia de Picasso en el Retrato de su hermana (1925) o del Retrato de su padre (1925, Barcelona, Museu d'Art Modern). En otros dos cuadros parece inclinarse por un realismo parejo al del pintor catalán Feliu Elias. Dentro de la misma línea se sitúa la famosa Cesta de pan (1926, San Petersburgo, Florida, Museo D.).

En 1925 llevó a cabo su primera exposición individual, en las galerías Dalmau de Barcelona. Hacia 1927 su obra manifiesta un cambio de orientación estética. También sus actividades adquirieron un tono más polémico y combativo, como la proclamación del Manifesto groc junto a S. Gasch y L. Montanya (1928) o sus artículos en L'Amic de les Art.

En 1929 se estableció en París donde entró en contacto con el grupo surrealista, de cuya obra ya era conocedor. Así, se relacionó Arp, Eluard y Gala (Elena Diakonova), mujer de este último que se convertiría en su compañera y musa hasta su muerte en 1982. Obras de estos años son, El gran masturbador (1919), Retrato de Paul Éluard (1929) o Persistencia de la memoria (1931, Nueva York, Museo of Modern Art), así como los trabajos preparatorios para otra película de Luis Buñuel: L'age d'or. En 1933 fue expulsado del grupo surrealista por Bretón, quien criticó su actitud con el anagrama Avida Dollars compuesto con las letras de su nombre.

En 1934 realizó los primeros estudios del cuadro Premonición de la guerra civil española (Filadelfia, Museum of Art). De los grandes maestros del Renacimiento tomó el estudio de las proporciones y la temática religiosa, patentes en obras como El Cristo de san Juan de la Cruz (1950, Glasgow, Art Museum), La Madona de Port Lligat (1945, Wisconsin University), Leda atómica (1949, Figueres, Museo Dalí), Equilibrio interactivo de una pluma de cisne (1946), Cabeza rafaelesca estallando (1951) o Corpus hipercubicus (1954, Nueva York, Museum of Modern Art). El virtuosismo y su técnica minuciosa se aparejan a su aprecio por el arte realista y pompier, al cual rinde culto en, La batalla de Tetuán (1962). a partir de la obra de Fortuny.

En su producción escultórica predomina la combinación de elementos reales con otros oníricos, con ello pretende impactar al público. Utiliza otras esculturas, (Venus de Milo), a las que añade diversos objetos. También hizo numerosas obras en joyería: San Narciso, Cristo. La obra daliniana abarca también el grabado, la ilustración, el cartelismo, la escenografía, la manipulación de objetos, etc. De su actividad como escritor, pueden destacarse La vida secreta de Salvador Dalí (1942) o El mito trágico del Angelus de Millet (1.963).

En 1974 se inauguró en su ciudad natal el Teatro-Museo Dalí. Otro museo dedicado a su obra se encuentra en San Petersburgo, Florida.

Salvador Dalí creó un método propio que denominó "crítico paranoico" para "materializar las imágenes de la irracionalidad concreta". En sus obras, dotadas de una técnica extraordinaria gracias a la calidad del dibujo y el color, abunda la mezcla de detalles provenientes de la observación de la realidad con otros originados por los sueños. El resultado es un conjunto de imágenes delirantes, a veces desagradables, enigmáticas o escatológicas ("El gran masturbador", "La persistencia de la memoria").

Surrealismo pictórico

René Magritte

Pintor belga. (Lessines, 1898 - Bruselas, 1967). Se formó en la Academia de Bruselas. Tras realizar sucesivas búsquedas abstractas, futuristas y cubistas, se orientó hacia el surrealismo bajo la influencia de G. de Chirico, a cuyo movimiento se unió en París desde 1927 hasta 1931. En sus cuadros reproduce con técnica absolutamente académica objetos y personas convencionales agrupados de manera paradógica. Con posterioridad pasó por un período neoimpresionista así como por experiencias futuristas y abstractas, antes de volver a su verdadera vocación: un arte en el que la apariencia rigurosamente objetiva provocara inquietud o sorpresa. Inspirada en lo absurdo (El movimiento perpetuo), en la parodia (Esto no es una pipa) o en lo insólito (Filosofía en el gabinete), y basada en la técnica fría, su pintura reflexiona sobre temas metafísicos.

René Magritte pintó obras capaces de producir un fuerte impacto visual, en las que aparecen asociaciones de imágenes desconcertantes, como en el cuadro "La isla del tesoro", en el que unas palomas con el cuerpo de vegetal y raíces clavadas en tierra simbolizan el angustioso contrasentido de la naturaleza humana.

Surrealismo pictórico

Ives Tanguy

Pintor estadounidense de origen francés .(París, 1900 - Woodbury, 1955). En 1925, bajo la influencia de G. de Chirico, se adhirió al surrealismo. Tanguy representa el estudio más avanzado del surrealismo en el descubrimiento de mundos desconocidos. En 1939 se instaló en EEUU, donde pintó lienzos de gran formato. Hacia 1950 tuvo lugar una brusca metamorfosis en su obra y comenzó a pintar cuadros de complejidad compositiva "La multiplicación de los arcos" (1954). Entre sus obras figura "A quatre heures d'été, L'espoir", etc.

Ives Tanguy recreó en sus obras un mundo inquietante, poblado de formas en las que algunos de sus críticos han querido ver evocaciones gráficas de la teoría de la evolución. En su cuadro "Cita de las paralelas", el pintor nos representa un paisaje desolado y misterioso en el que abundan minerales y huesos que sorprenden e impactan al espectador.

Surrealismo pictórico

De Chirico

Pintor italiano (Volo, 1888 - Roma, 1978). Nació en Grecia, fundador de la "Escuela Metafísica". Del surrealismo derivó hacia el academicismo. En 1911 se instaló en París, pero permaneció ajeno a las vanguardias. Su encuentro con ellas en 1916 dio lugar a la teorización de la pintura metafísica.

Sus obras, ejecutadas con una técnica minuciosa, se pueblan de objetos de uso corriente (maniquíes), colocados en un contexto ajeno a ellos, como ciudades desiertas o ruinas. Algunos de sus cuadros más característicos son "Las musas inquietantes" (1916), "Retrato premonitorio de Apollinaire", "Hector y Andrómaca" y "Gran interior metafísico" (estos tres, de 1917).

Surrealismo pictórico

Delvaux

Pintor belga. Nació en Antheit, Lieja, en 1897. A los 21 años, el pintor Courten convenció a los padres de Delvaux para que lo enviaran a estudiar a la Academia de Bellas Artes de Bruselas, donde posteriormente fue profesor (1950-1962). Empezó pintando casi exclusivamente paisajes, para pasar a practicar una especie de realismo impresionista. En los años treinta notó la influencia del expresionismo flamenco, y, bajo la influencia de De Chirico y Magritte, una década más tarde, ya participaba en exposiciones surrealistas.

Considerado uno de los grandes maestros del surrealismo, junto con Dalí y Magritte. Su técnica, casi académica, contrasta con su afición por los temas misteriosos y por la plasmación de un mundo onírico y personal en el que la mujer se configura como un ser arcano, a veces sometido a metamorfosis vegetales, en una atmósfera inquietante marcada por un cierto erotismo ("Esqueletos", "Jardín nocturno", "La tentación de San Antonio"). A causa de la pérdida progresiva de la vista, Delvaux dejó de pintar desde 1986, y su última gran exposición retrospectiva fue en París, en 1992. Falleció el 20 de julio de 1994 a los 96 años, en Furnes, Bélgica.

Surrealismo pictórico

André Masson

André Masson basó su obra en la liberación total de la acción de pintar, dejando que el fluido de gestos y trazos fuese totalmente espontáneo sin intervención alguna de la mente. Fue el creador de dibujos sobre arena, consistente en rociar arena sobre un lienzo en el que se había extendido de manera aleatoria cola de pegar. Tras arrojar la arena sobre el lienzo, se agitaba y la arena quedaba adherida a la cola formando imágenes que luego el pintor completaba (Las constelaciones).

Joan Miró

Joan Miró se unió al surrealismo después de haber experimentado en el modernismo, fauvismo y cubismo. Su carácter le fue conduciendo hacia un tipo de pintura muy personal en la que crea un mundo propio de colores vivos y figuras cada vez más esquematizadas que aparecen trasladarse por el lienzo, a imagen y semejanza de un microcosmos (El bello pájaro descifra lo desconocido a una pareja de enamorados).

Max Ernst

Max Ernst, llegó al surrealismo procedente del expresionismo y el dadaismo. Su pintura, muy influenciada por De Chirico, sobre todo en lo que se refiere a la estructura y tratamiento de la luz, fría e intensa, es laque mejor representa las imágenes inquietantes del surrealismo. Fue capaz de crear un mundo alucinante, alternativo a lo cotidiano (Napoleón en el desierto); todo ello, junto a su trabajo de investigación y búsqueda de nuevas técnicas, le convierten, posiblemente, en el mejor representante del surrealismo.

1




Descargar
Enviado por:Andreita
Idioma: castellano
País: España

Te va a interesar