Antropología Social y Cultural
Simbología del caballo
La Tertulia Tienes la Palabra
“Francia Vélez”
Medalla “Luis Beltrán Guerrero”
Contertulias:
Beatriz de Cancelado, Edda Cavarico, Flor Prieto, Graciela de Soto, Leonor Albornoz, Néstor Gómez, Olga Ma. Esquivel, Soffia Reyes, Virginia Laverde, Zorayda Mejia. Asistente, Clara López.
El Caballo
en la Literatura colombiana
Ensayo de la contertulia Edda Cavarico
Presentación
Anecdóticamente encontré en una lectura referencias a la nobleza del caballo y me surgió la inquietud de averiguar por qué “el caballo es el símbolo del pueblo”, partiendo de la crítica de arte. Como la Literatura tiene por principio estudiar la Literatura colombiana, decidí valorarlo desde distintos aspectos creativos de las expresiones artísticas, incluyendo la cultura popular para reconocer famosas canciones y coplas pueblerinas, tradicionales; por ejemplo: “Con mi caballo y mi rejo/ me siento más lisonjero / que el cura y el sacristán,/ el dotor y el estanquero”. (dotor = doctor)
En cuanto Literatura histórica, la referencia a caballos famosos hace parte de la valoración del momento: de Bolívar, los que le regalaron y los que montaron los patriotas. En la colonización de Antioquia y Santander, lo mismo que en la expansión “paisa”, hay referencias pero fue la mula más importante por sus características físicas, de género e inteligencia. Están referidos en la Literatura costumbrista muy de “refilón”. Más bien, en la Literatura testimonial colombiana, contemporánea, sobre al narcotráfico, el caballo hace parte de la verdad y la leyenda de la vida y hábitos de los más famados narcotraficantes como el de “el mejicano” que buatizó Tupac Amarú y los “Resorte” que fueron marcados con un 8a correspondiente a los Ochoa.
Presento agradecimientos a los amigos: Inés Blanco, Silvio Vásquez, Guillermo Quijano, Virginia Laverde y Néstor Gómez, quienes me aportaron información.
La evolución del caballo
Las primeras pruebas paleontológicas fechan su presencia hace 60 millones de años. En el período Eoceno, media 30 cmts de alto; evolucionó adaptativamente en estatura y dentición y, en otras características, por razones de sobre-vivencia al cambiar el alimento y protegerse de ser atacado e ingerido por especies más grandes. Tenía 4 dedos en las patas anteriores y 3 en las posteriores; se unieron y formaron el casco para mayor estabilidad. En la era cuaternaria surgió como “equus”.
Desde épocas antiguas hasta hoy, es carne comestible para los humanos, inclusive de mayor precio comercial que la vacuna. Poco a poco el ser humano lo domesticó: unos, los arios; otros los escitas en el Caucaso.
Los especímenes actuales surgieron de las formas salvajes que todavía existen en Mongolia; otros son el caballus gmelini o tarpán. Entre las razas más cotizadas están: la árabe, la inglesa de pura sangre ,la anglo, la normanda y la irlandesa.
Nota: Libretiando para radio encontré el siguiente registro -por demás sorprendente- referido a excavaciones arqueológicas en sur América; dice: “…la osamenta de un mastodonte joven al lado de del cráneo de un caballo focilizado y de un esqueleto humano en la caverna….” publicado en “Las culturas prehispánicas”. Lehmann Henri, traducido por Mariana Payró. Editorial Universitaria de Buenos Aires./
En Perú, el completo arqueológico de 8 pirámides, de la cultura Chavin, denunciado en 1972, fue denominado “Caballo muerto” pero no pude ubicar la razón; en otros trabajos lo denominan “Huaca de Reyes” y “Altar de Reyes”; está decorado con cabezas humanas en arcilla, grandes, felinas.
Simbología del caballo
(Desde la considerada como época primitiva hace parte del ritual y de lo mágico)
Según un trabajo de León Deneb, publicado por la Internet, a manera de resumen, coincidiendo con lo que afirman varios teóricos, es el animal que el ser humano quiso tener para sí, desde cuando lo conoció, porque lo atrajo su belleza: la figura, la fuerza muscular que se aprecia en su carrera, la estética armónica de las formas, el ritmo y la caída de las crines y la cola, sin contar la nobleza que lo caracteriza….Afirma el ensayista que el simbolismo se puede resumir así:
* Sabiduría celeste
* Palabra verdadera
* Belleza resplandeciente, y
* Su rapidez se asocia con el paso del tiempo
Advierte que muchas veces la simbología incluye al caballero como espíritu dominador que cabalga sobre la materia.
Jung, el teorizante sobre sicoanálisis, comenta la posibilidad simbólica de que represente a la madre y no duda que expresa el lado mágico del ser humano, la intuición del inconsciente.
En la pintura internacional
En general los historiadores del caballo a través de la pintura y la escultórica, lo registran desde los momentos míticos asociándolo con: el fuego, el agua, el aire, el sol, el destino, el símbolo de vida y regeneración. Una mira rápida puede ser:
Está plasmado en las cavernas de fecha desconocida en la antigüedad, como arquetipo de los demás caballos; en la de Lascoux están pintados 364 caballos.
El caballo acompaña al arte pictórico en todos los tiempos; por ejemplo:
-
Ramses III, Dinastía XX, acompaña las escenas de caza de toros
-
En los rastros de la Nínive, del Siglo VII. A de C, encontraron un bajo-relieve
-
En Gracias, en el Templo de Zeus, en Olimpia, aparece en una escena de la preparación de las carreras. Año 540 A de C.
-
Está en la tumba del Varón de Tarquinia, abrevando
-
En la estatuaria como la dedicada a Marco Aurelio, 121 - 180 D d C, en la Plaza del Capitolio , en Roma
Entre los pintores más conocidos, lo registraron:
-
Tintorero, en su obra Adoración de los Magos
-
Ticiano, en el retrato de Carlos V
-
Botticelli, el caballo blanco que complementa la escena de la Historia de Nastagio
-
Bosch, plasmó en el fondo de su obra terrorífica de castigo, la imagen de algunos caballos.
-
Rubens, pintor pasional y voluptuoso a quien le atribuye la leyenda que pintaba con sangre, los consagró en el Rapto de las doncellas
-
Y, uno de los más conocidos es Picasso que los plasmó en sus obras vinculadas a lo tauros (mitología) y a los toros (corridas españolas), pero el que más trascendió en la Historia reciente de España con la guerra civil del 36 es la obra Guernica en la que los caballos están desmembrados, rotos, patéticos, detenidos en un relincho que es el mismo grito del pueblo arrasado por las bombas, simbolizado en el grito de dolor de la madre que corre con su hija muerta en los brazos; parece que a partir de allí, el caballo como símbolo se equipara al valor del pueblo y lo representa.
Algunas Pintores colombianos:
En el siglo XIX, por encargo del Libertador Simón Bolívar, José Ma. Espinosa, abanderado del general, tomó apuntes durante las batallas independentistas y luego concibió las escenas al óleo. “Bolívar” (montado en “Palomo”), es una obra del pintor Arturo Michelena. Es también relevante, recordar la escultórica ecuestre dedica al Libertador .
Hacia 1914, Andrés de Santamaría pintó la obra “En la playa de macuto” que registra a una mujer cabalgando y la acompaña, posiblemente, su empleada. Hace parte de la
colección del Museo Nacional.
La obra “Serenidad” elaborada en 1922 por Eugenia Peña, está olvidada.
Hacia la mitad del siglo XX surge David Manzur quien a lo largo de su carrera toma el caballo como elemento expresivo del momento que consagra en la obra.
En la escultórica del maestro Rodrigo Arenas Betancur, el caballo quedó consagrado como figura central de los monumentos al Libertador, comenzando con el Bolívar desnudo, en la plaza de Pereira, el Pantano de Vargas y otros.
Botero….El caballo- 1998/ Hombre a caballo- 1998/ Mármol (sin fecha) / Escultura en bronce/ Parque Renacimiento, Bogotá.D.C./ Oleo, Pedrito (caballo de madera)
En cuanto a otras formas de expresión plástica, reseño el Videorama del Puente de Boyacá, que registra a los caballos “libertadores”.
Los caballos en los billetes de Colombia:
Bono: un caballo en actitud de combate (1822)
Moneda de $1000= 1979 con reproducción del monumento de Arenas Betancur
1983- moneda de $2000, escena de la una batalla del pintor Espinosa
1988, moneda, imagen de Córdoba- Valor $10=
Un comentarista de arte, por la Internet describe así la presencia del caballo en la obra pictórica: “Trota sobre los lienzos de los sueños”….. En resumen su explicación es la presencia diferencial entre la noche donde aparece en negro y significa la tierra; y el día donde es blanco y mira al cielo. Por eso, lo califica de símbolo ambivalente: positivo - negativo/ vida - muerte/ todo - nada/ celeste - terrestre.
En la Literatura tomada como la leyenda histórica:
Tomando como Literatura, por lo metafórico, el texto de la Biblia AP, 19 - 11,dice: “…Vi el cielo abierto ; y he aquí un caballo blanco y el que lo montaba se llamaba Fiel y Verdadero, y con justicia juzga y pelea”.
Algunas referencias registradas en la Historia de la Literatura, pueden partir de Aquiles, quien sacrifica caballos para que lleven a Patroclo por el Hades (lo invisible)
-
El cortejo de Dionisio va a caballo
-
Deméter, engendra un caballo
-
Pegaso, es un caballo alado que nació de la sangre derramada por Medusa, cuando Perso le cortó la cabeza.
-
Fábulas de Fedro- está calificado como “fuerza y razón”; es Literatura clásica antigua, de la narrativa romana; un de ellas se titula “El lobo y el caballo”
-
Son muchos los seres mixtos hombre-caballo: centauros, silenios, sátiros….
-
En Roma, dicen que sacrificaban caballos y/o les cortaban la cola para que las cosechas fueran abundantes.
-
Los chamanes (no especifica el trabajo de dónde) cabalgaban y ataban su caballo al lecho, cuando moría, para que condujera su alma. Igualmente el bastón de los chamanes empieza con una cabeza de caballo o una figura parecida.
-
Otras deidades que tuvieron caballo o cabalgaron fueron: Kalti y Mahoma. En la cultura indu, Visnú en su décima encarnación se hizo caballo La leyenda de Buba afirma que a los 29 años se fue cabalgando y dejó en el hogar a su esposa e hijo; el caballo regresó solo. En su prédica, Buda, diferencia cuatro tipos de caballo: 1- El que con solo ver la sombra del látigo, arranca. 2- El que arranca cuando el látigo apenas lo roza y se pliega al jinete. 3- arranca cuando el látigo le golpea. 4-Arranca solo cuando el látigo se clava en sus huesos. El primer templo del Budismo chino se llama “Templo del caballo blanco.
Algunos nombres de caballos famosos a más de Rocinante, el perseverante y fiel caballo de Don Quijote, están en la Literatura y en la Historia:
-
Bucéfalo, el caballo de Alejandro Magno, 320 a de c
-
Celer, el del emperador romano Vero, solo se alimentaba de almendras y pasas y lo mantuvo en la sala de su palacio.
-
Para todos es inolvidable en Caballa de Troya, así fuera de madera
-
Gravi, el caballo de Sigifredo, personaje de la leyenda nórdica
-
Babieca, el del Cid campeador
-
Lemri, el del Rey Arturo
-
El Morcillo, acompañó a Hernán Cortés en el sometimiento de los nativos
-
El Bayo, igualmente acompañó en el sometimiento de la conquista de tierras ameritas a Pedro de Heredia
-
El Muro, acompañó a Bolívar en la campaña del Perú
-
Tordillo, fue el caballo que montó en sus recorridos el héroe libertario, Sucre
-
Siete leguas, uno de los 100 caballos de Pancho Villa
El caballo como objeto del poema:
1- Ampliando la consulta por la Internet, es más fácil hallarlo en países donde la cultura está vinculada más profundamente al animal; por ejemplo en Argentina, los poetas Hugo Franco Rivella, de Rosario, escribió: “Los caballos negros como diamantes del infierno…” Y también: “Los caballos hacen posible la ronda entre los peces…..”
En un trabajo de Luis de Góngora se lee: “Entre los sueltos caballos /De los vencidos cenetes que por el campo buscaban/ Entre la sangre lo verde, aquel español de Oran…..
También con facilidad se encuentra registrada la “Oda al caballo”, escrita por Pablo Neruda: “Aquel caballo sólo y amarrado/ en un pobre varreso/ de mi patria,/ aquel pobre caballo/ es un recuerdo….”
Figura igualmente, Juan Ramón Jiménez con su prosa poética “El poeta a caballo” y la publicación de la revista Caballo verde, dedicada a la poesía, publicada en 1936.
Rafael Alberti en algún poema se refiere a “quien cabalga el caballo…..” Y, César Vallejo escribió: “Esta noche desciendo del caballo…..”
2- En Colombia no es fácil encontrar poemas dedicados al caballo; tampoco en la narrativa; sin embrago, aplicando al texto la acepción de literatura histórica, tenemos la mención a los caballos de los libertadores, comenzando por Bolívar con “El palomo”. Les anteceden los frailes cronistas que refirieron la presencia del caballo durante el sometimiento a los nativos.
Entre las fábulas que Pombo trabajó, está La yegua y la faldera; ninguna al caballo.
José Manuel Marroquín escribió “El Moro”, narrativa que hace parte de las estampas de la sabana de Bogotá; el animal viaja por la sociedad conformada por clases sociales conoce al caballo y lo maltrata con el despotismo, sin sentido noble que debería más en el hombre que en el animal; más que un personaje, es el símbolo de la obra.
En el Tomo 1 de Poesía colombiana, Charry Lara registra del poeta Julio Arboleda, lo siguiente: “Ven mi alazán! Y rápido se arroja/ sobre el corcel: le aguija con fuerza/ y atraviesa veloz por la maleza….”
Menéndez y Pelayo dijo de sus versos “huelen a pólvora; parecen rugidos de león más que obras de arte”, en el poema referente al caballo, dice:” que no descansa quien dolor no siente” (el caballo)
José Santos Chocano escribió “Los caballos de los conquistadores;.” Ya que estamos entre citas costeñas, está registrado en la Internet el poeta Quest, de Cartagena, fechado en 1995, con el siguiente texto referido al caballo: “Por entre las cercas de palo y alambre/ meten la cabeza medio adormecidos/ le sigue de moscas Zumbando un enjambre/ ellos pobrecitos -transidos de hambre…”
José Eustasio Rivera escribió “Los Potros”. Según el crítico Luis Carlos herrera, el conjunto de sonetos de Rivera, son de “impecable factura técnica. Rivera se destaca como artífice inagotable del soneto”, concepto compartido por Fernando Charry Lara; ese poema dedicado a los caballos fue seleccionado por un jurado internacional como
el mejor soneto colombiano.
El Poeta colombiano nacido en Palmira, Valle, a finales del S XIX, que escribió el Himno a la Bandera, Ricardo Nieto, de poesía sentimental y corte religioso, escribió el poema “La oración a los caballos viejos” que según Rogelio Echavarría es todavía recitado en tertulias de poetas y que para el autor era la metáfora de ellos; comienza :
Por los callejones y las alquerías
que el sol ilumina con leves reflejos,
recordando siempre sus mejores días
pasan renqueando los caballos viejos,
llenos de amarguras y melancolías...
Por entre las cercas de palo y alambre
meten las cabezas, medio adormecidos,
les siguen de moscas zumbando un enjambre
y ellos pobrecitos- transidos de hambre,
se quedan mirando los prados floridos...
A Jorge Mateus, poeta de comienzo del siglo XX, la revista Cromos en la edición de mayo de 1919 le publicó el poema “Mi caballo negro” que dice: “Por bosques y peñascos/ hace mucho resuena/ el tropel sonoro de sus cascos;/ es el potro salvaje/ que prefirió a servir en la faena/ pisotear a sus anchas el paisaje….”
Alberto Angel Montoya, jinete y dueño de caballo, no parece que le hubiera dedicado un poema; definitivamente su arrogancia lo ahogo en la importancia de ser “conquistador” de mujeres y bebedor; sin embargo encontré una cita en que le endilgan esta frase: “El hombre solo es completo a caballo”. Además, como anécdota del poeta con el caballo, en una biografía afirman que cuando murió el suyo, con la piel mandó a forrar un asiento y permanecía, de día, sentado ahí; cuando retrató al óleo su cabeza, le pegó un tiro en el oído y la mantuvo colgada sobre la pared, al espaldar de la silla. Entre los poemas conocidos está “A una amazona”.
En otra referencia citan a Jorge Guillen con su poema “Unos caballos”. Es posible que entre los deportistas del caballo, jinetes y apostadores da las carreras, hayan
escrito algún poema o relato sobre un ejemplar que lo llevara montado; o, le hizo ganar y perder dinero. Una muestra es el Tango popular en las rocolas (radiolas) de Antioquia, entre los bailarines y escuchas asiduos, aquel que comienza “Por una cabeza…….” que hizo famoso Carlos Gardel .
El sonetista colombo-español, Manolo Boix, dedicó uno a Rocinante, que comienza:
“Silueta de rocín enflaquecido/ un muelle de osamenta en los costados/ y unos arreos raídos y oxidados/ para llevar al loco más querido….”
Silvio Vásquez para la reunión de la Tertulia el 9 de octubre escribió un poema al caballo colombiano más famoso y costoso hasta la fecha, Don Danilo.
Parecía un caballo?- Por información del amigo Silvio Vásquez, supe que el periodista guatemalteco Rafael Arévalo Martínez con el titulo, “El hombre que parecía un caballo”, en 1914 publicó una biografía de Miguel Ángel Osorio Benítez -Barba Jacob- que fue tan leída como cuestionada, al punto de calificarla de “biografía de ficción”, Rogelio Echavarría en su obra “Quien es quien en la poesía colombiana”; y, como cada critico lee con su sentimiento, en el Manuel de Literatura Colombiana, Fernando Ayala Poveda, la califica de “semblanza exquisita y dolorosa sobre el espíritu torturado de éste viajero de la noche” (Porfirio Barba-Jacob). Otros,
consideran que la mejor biografía del poeta y periodista la publicó Fernando Vallejo
en 1984. En cuanto a la valoración de la producción literaria de Porfirio, su amigo Federico García Lorca dijo: es “el primer lírico del primer cuarto de siglo americano”.Y, el crítico Daniel Arango Jaramillo calificó su poesía -reconociendo que puede haber otros líricos- diciendo: “dudo, en cambio de que alguno nos comunique con fuerza igual y con iguales iluminaciones ciertos abismos del corazón del hombre”.
Carrera de caballos: En Colombia, en lo que pudiéramos determinar literatura periodística en cuanto Crónica social publicada en la revista Cromos, aparece en los relatos de las carreras del Hipódromo La Merdes registrada la presencia del Presidente Pedro Nel Ospina, en 1922.
Sin embrago, tal vez, en la zona de los Llanos orientales es donde mejor se cría y convive con el caballo; con frecuencia es el objeto de los poemas-canción porque hace parte de su cotidianidad y el vínculo entre el animal y el jinete es -como la de todos- estrecha; se leen el pensamiento; se hablan; dialogan. Por ejemplo esta composición de un recitador del Meta, que dice: “Me gusta montá a caballo/ pa mirarlo corcobiá/ sacudile su bejuco……” . Pero, en general, no es el caballo objeto de canciones, como lo demuestra entre la obra “Aires y notas colombianos”, que entre 431 canciones, una tan siquiera, le esté dedicada.
Y, recientemente Shakira escribió una canción titulada “Poema a un caballo”: Estas demasiado lejos para acercarte/ y demasiado alto para mirara hacia abajo/ Pendiente siempre de tus dosis diarias….
Nota: Si tomamos la letra de algunos Tangos, como poesía ingenua, encontramos la canción que hizo popular Carlos Gardel, referente a las carreras de caballos; dice:…..Por una cabeza….
La tradición colombiana registra una clasificación que hace parte de la jerga de los llamados “caballistas”, afamados en los últimos años por la historia negativa del narcotráfico que vertió parte de su orgullo en tener caballos como Don Danilo -cuyo cadáver fue sometido a taxidermia- y hace parte del registro de la leyenda de los hermanos Ochoa Vásquez famosos en la historia delicuencial de Antioquia y el mundo . Un poco menos famosos fueron los caballos del “Mejicano” y los de las
pesebreras de Pablo Escobar; todos, eso sí, registrados en los Corridos que
encargaron a compositores “norteños” (amejicanados), colombianos.
El argot los clasifica así: de carga, de pura sangre (pedigrí de los criollos afamados), de paso (adiestrados con movimientos corporales danzantes particulares de Colombia), el mulero (enamoradizo de las mulas) y, el padrón (del cual se vende el semen con registro legal, para inseminación de yeguas).
El Coplero colombiano:
Guillermo Abadía Morales, folclorista colombiano, profesor de la Universidad Nacional, en trabajo de campo compiló las coplas populares en distintas regiones y las clasificó en Piadosas, Amorosas, Humoristas, Filosóficas y Descriptivas.
Entre las Descriptivas están:
De los caballos que tengo
el mejor es este potro,
que pa levantar un casco
le pide permiso al otro.
Se jué mi caballo bayo
para el potrero de enfrente
a llevarle a la potranca
su copita de aguardiente. (jué = fue)
En la literatura infantil internacional: Revisando libros de cuentos es fácil encontrar al caballo como protagonista, sea solo o como vehículo del encanto en especial vinculado con las hadas; dos editoriales lo confirman: Grupo Norma, Proyecto Parramón, con la reedición del libro “El gran libro de las brujas”; en una de sus páginas se lee:..”se encaminó hacia un remoto lugar, montado en un caballo de doce alas…”/ Ediciones Saeta con la obra “Monstruos, duendes y espíritus de España”, en el cuento titulado “Follet”, se lee:….”quien siente predilección por subirse a los caballos y dar verridos mientras galopa?...”
La escritora argentina Mirta Pegito, que incluye entre sus temas a los animales, escribió “MI caballo”, que al comienzo dice: “ Súbete a mi caballo/ que inventaremos un mundo….”
Poemas al Ajedrez: El poeta Bibianovsky escribió: “La dama siempre dispuesta/ a apoyar su batallón;/ El rey solo se acuesta/ cuando hay una rendición.7 Un caballo sin falseta/ no tiene controlación/ y como lo dice el poeta/ verán que tiene razón….”
Poemas de Edda Cavarico
Azabache
En cada embestida se juega la vida
los pases, cuando más, lo rozan
Sus admiradores gritan: OLEEEEE….
Aplausos fuertes celebran las banderillas
Otros quites….otras palmas!
JEE…JEE…JEE….azuza el matador
Tras burladeros se esconden los peones
La única estocada
entra hasta la empuñadura
Caballo y jinete triunfan!
Orejas….rabo… pitos, palmas…
Azabache se frena en la mitad de la plaza
relincha y grita:- Faltó nobleza…
no era necesario mutilarlo!
Al trote
Aprendí de ti, la solidaridad
Valoré en ti, la inteligencia
Desde tu lomo comprendí
la naturaleza
a tu crin aferrada
agudicé la sensibilidad
Mientras te herraba conocí la responsabilidad
En tus ojos….en la pupila…
leí tu nobleza.
♦♦♦♦♦♦♦♦♦♦♦♦♦
Gracias por leerlo.
Será grato que lo complementemos entre todos, pues no es un tema fácil de explorar:
EDDA CAVARICO
Descargar
Enviado por: | Edda Cavarico |
Idioma: | castellano |
País: | Colombia |