Literatura
Rimas y Leyendas; Gustavo Adolfo Bécquer
Bécquer
1-Biografía del autor.
Poeta Español del romanticismo (Siglo XIX), nació en Sevilla el miércoles 17 de febrero de 1836, en el número 9 de la calle Ancha de San Lorenzo, en una casa que en la actualidad no existe. Su verdadero nombre era Gustavo Adolfo Claudio Dominguez Bastida, pero prefirió el apellido de sus antepasados. Cuando él tenía 5 años murió su padre, después, a los once, moriría su madre. La verdad es que su vida no fue una buena vida. De familia de pintores porque su padre fue el pintor José María Domínguez Insausti, intenta meterse en ese mundo de la pintura pero no le agrada. Y entonces se da cuenta que lo que le gusta es la poesía. José María Domínguez Insausti su padre casado con doña Joaquina de la Bastida y Vargas, y de este matrimonio nacieron ocho hijos.
En 1846, consigue entrar en el Colegio de san Telmo, donde conoce a Narciso Campillo y Julio Nombela, que comparten su afición por la poesía. Con Narciso Campillo escribe el drama Los conjurados que representaron en el colegio. Deciden llenar entre los tres un cofre con poemas que ofrecer a los editores madrileños. Al clausurarse el colegio al año siguiente, y dado que sus padres habían muerto durante su infancia, es recogido por su madrina, la culta dama Sevillana doña Manuela Monnehay, en cuya casa encuentra una rica biblioteca que lo encamina, definitivamente, hacia la literatura. No obstante, manejará siempre con soltura y gracia los lápices de dibujante. En 1852, comienza a publicar en el periódico sevillano La Aurora. En1854 se traslada a Madrid. Se introduce en el mundo del periodismo, colabora en El Porvenir, La España musical y literaria y El correo de la moda. La necesidad lo lleva, incluso, a colaborar, siempre bajo seudónimo, en libretos de zarzuela, género que despreciaba. Así, bajo el nombre de Adolfo García escribió La novia y el panteón, que fue un rotundo fracaso, y La venta encantada, basada en el Quijote.
En 1857 emprende una obra importante, la Historia de los Templos de España.
En1860, gracias a Rodríguez Correa, le consigue un empleo fijo de redactor en un gran periódico centrista español, El Contemporáneo. Se dedicaba a hacer: biografías de políticos a destajo, traducciones, chupatintas en una oficina pública, dibujos, zarzuelas, etc.
Encuentra en Madrid un nuevo ambiente poético del que saldrán, finalmente, las Rimas becquerianas.
En colaboración con Rodríguez Correas, llevó a los escenarios El nuevo Fígaro (1862) y Clara de Rosemberg. En 1863, participó en el proyecto de una Historia de los templos de España, en 1857. En este mismo año, los síntomas de la tuberculosis que acabaría con él comienzan a ser evidentes. Al año siguiente debe volver a Sevilla a reponerse. En 1854 también triunfa O'Donnell, la «Vicalvarada». En 1859 vuelve a Madrid, y en 1861 entra a trabajar como redactor en El Contemporáneo. Es el mismo año en el que contrae matrimonio con Casta Esteban Navarro, hija de un médico soriano afincado en Madrid. La había conocido en la consulta de su padre, a la que Bécquer acudía para tratarse de una enfermedad venérea contraída en sus años bohemios. La pobreza del poeta -el periodismo nunca lo sacará de pobre- y las enormes diferencias de carácter entre los cónyuges hicieron del matrimonio una experiencia difícil, sobre la que la crítica se ha extendido en divagaciones tan peregrinas y discordantes entre sí como ajenas a la valoración de la obra del poeta que, eso parece seguro, no dedicó a su esposa sino un poema de circunstancias ("Tu aliento es el aliento de las flores", número LXXXII del Libro de los gorriones) por el que no hubiera pasado, probablemente, a la historia. El matrimonio tuvo tres hijos y parte de la crítica asegura, sin que sepamos por qué, que la paternidad del tercero es dudosa. . Fue infeliz en su matrimonio con Casta a causa de que el amor de su vida se encontraba en otra mujer. Son años fructíferos en los que el poeta publica la mayoría de sus rimas y leyendas y se hace un nombre, además de poder mantener una familia con hijos. Pero en la intimidad de sus escritos el poeta se duele del fin de sus ilusiones. También son años difíciles porque por culpa de su enfermedad cada vez se encuentra peor. Con su familia y acompañado de su hermano Valeriano, recientemente separado de su mujer, y de los hijos de éste, se retira porque necesita reposo en 1864 al Monasterio de Veruela, monasterio cisterciense desamortizado y en el que haya instalada una hospedería en las antiguas celdas. Desde allí remitirá al periódico sus famosas cartas Desde mi celda, en las que, además de hacer reportajes sobre tipos y paisajes, hace un repaso de su vida pasada y actual, marcada por un profundo desencanto. De las colaboraciones enviadas por Bécquer a El Contemporáneo se entresacaron las nueve Cartas desde mi celda. El poeta colabora, además en El Museo Universal y, desde 1870, en La Ilustración de Madrid, de la que será también director literario. En 1867 le consigue el cargo de censor de novelas que le hubiera permitido llevar una vida digna de no haber sido cesado por la revolución que destronó a Isabel II en 1868. El 1868 será un mal año para el poeta. Casta le es infiel y Gustavo se separa de ella quedando los dos hijos a su cargo. La huella de la "Gloriosa" en la vida de Bécquer no se limita -no sería poco- a la pérdida del empleo: durante los disturbios acaecidos en Madrid en los días de la revuelta, la casa de González Bravo fue saqueada y en el saqueo se perdió un manuscrito que el poeta había entregado a su protector con sus poemas a fin de que le ayudara a publicarlo. La pérdida del manuscrito obligó a Bécquer a reconstruir de memoria su obra en el manuscrito que hoy conservamos: el llamado Libro de los gorriones que, corregido en parte por sus amigos, serviría de base a la publicación realizada tras la muerte del poeta.
En el 23 de septiembre de 1870 muere su hermano Valeriano, al que estaba profundamente unido. La enfermedad avanzaba y no se la cuidaba (el día antes de la última recaída, un veintidós de diciembre se había empeñado en viajar en la parte descubierta de un tranvía, bajo la nieve) lo condujeron muy pronto al sepulcro. Rodríguez Correa, que ha prosperado mucho, se lleva al poeta y los hijos a un lujoso piso en la calle Claudio Coello, en el barrio de Salamanca.
Pero el poeta ya no resiste el golpe. Mientras agoniza, pide a Ferrán que queme sus cartas («serían mi deshonra»), que publiquen su obra («Sí es posible, publicad mis versos. Tengo el presentimiento de que muerto seré más y mejor conocido que vivo») y que cuiden de sus niños. Murió a las diez de la mañana, después de pronunciar las terribles palabras, reveladoras del desencanto que le embarga, «Todo mortal». En Sevilla había eclipse total de sol. Inmediatamente, los amigos, especialmente Ferrán y Correa, iniciaron los trabajos para editar y financiar la publicación de las Obras Completas del malogrado amigo, que en sucesivas ediciones fueron incorporando la mayoría de los textos que hoy conocemos del poeta, afortunadamente salvados del olvido.
No parece haber sido Casta la inspiradora de sus verso (no hubiera sido poca novedad que un romántico transido de absoluto hubiera cantado a su doméstica y burguesa esposa). La búsqueda entre las conocidas del poeta dio como resultado únicamente un amor juvenil, Julia Espín y Colbrandt, hija de un profesor del conservatorio madrileño, sobrina política de Rossini (su madre era hermana de la primera mujer del compositor, la soprano madrileña Isabel Colbrandt), a la que Bécquer trató durante sus primeros años en Madrid cuando asistía a las tertulias de la casa de los padres de Julia, donde, habitualmente, se interpretaba música (Gustavo Adolfo tocaba el arpa). Posteriormente, Julia siguió los pasos de su tía Isabel cantando por toda Europa y no nos consta que continuase relación alguna con el poeta. Respecto a la supuesta Elisa Guillén, es de sobra sabido a estas alturas que el episodio de la "dama de rumbo" vallisoletana no fue sino una superchería tramada por el poeta vallisoletano Fernando Iglesias Figueroa, quien trató, con indudable éxito, de medir su pluma con la de su maestro. Las dos rimas dedicadas a Elisa ("¿No has sentido en la noche..." y "Para que los leas con tus ojos grises") aparecieron en tres
Volúmenes de Páginas desconocidas de Gustavo Adolfo Bécquer, publicadas entre 1922 y 1924, repletos. La superchería fue confesada años después por el propio autor. Todo ello no es óbice para que algunos críticos poco avispados continúen incluyendo ambas rimas en el corpus becqueriano y el nombre de Elisa Guillén en la vida del poeta.
La poesía de sus rimas es frágil, sensitiva y a veces muy tierna. Los temas líricos que abarca son el Amor, el dolor y la muerte. Constantemente asaltado por un sentimiento de desprecio hacia sí mismo, pero muchas veces colmado de júbilo por efectos del amor.
(biografía basada en varias extraídas de Internet, expresadas y redactadas de nuevo propiamente)
2- Movimiento literario al que pertenece: el Romanticismo. Explica sus características principales. Diferencias entre Bécquer y otros románticos españoles.
Algunas características sobre el Romanticismo son la exaltación de los sentimientos personales y del individuo frente a la colectividad, así como el rechazo de las reglas unido a la defensa de la libertad creadora constituyen la esencia del espíritu romántico, que prende con fuerza en toda Europa en el siglo XIX.
La Libertad del hombre está demostrada en sus poesías y los románticos viven a parte del resto de la humanidad.
En el romanticismo los escenarios son de paisajes exóticos aunque a veces religiosos, están basados en la naturaleza, la noche, la montaña, la luna, el mar, etc. Así acompaña y resalta el estado de ánimo del autor.
En lo popular pues el pueblo constituye el origen y el destino de la creación literaria.
Predomina lo subjetivo y lo sentimental frente a la razón y se dejan llevar más por sus sentimientos y los expresan continuamente.
La prosa romántica se desarrolló en torno a dos géneros: la novela histórica y el costumbrismo. El Romanticismo se forjó como reacción contra el Neoclasicismo precedente. Y esta reacción fructificó en unos temas, unos escenarios y unos estilos distintos. La literatura romántica gira en torno a dos núcleos temáticos: él yo personal y lo castizo.
El yo personal: Los románticos hicieron de su propio yo el tema principal. Frente al pudor de los neoclásicos. Los poetas románticos hacen gala de un gran individualismo y una extrema subjetividad. Los propios sentimientos frente a la sociedad y la defensa de la propia liberad.
Lo castizo: El espíritu nacionalista que recorrió Europa a consecuencia de las guerras Napoleónicas se manifestó en el interés hacia la historia, las tradiciones y las costumbres propias de cada pueblo, del que son muestras el desarrollo de la novela histórica, el costumbrismo y los romances.
Los escenarios
En el romanticismo la acción se enmarca con frecuencia en una naturaleza abrupta, hostil y llena de fuerza. Los paisajes lúgubres, el mar embravecido, las tormentas, la noche, los cementerios, las ruinas... constituyen típicos escenarios románticos que contribuyen a crear ambientes y subrayar los sentimientos melancólicos o exaltados de los personajes.
El estilo
El Romanticismo se caracteriza por un estilo vivo, que busca sobretodo sorprender o sobrecoger al lector. Los románticos se sirven con frecuencia de una rica adjetivación, y utilizan continuas exclamaciones, interrogaciones, hipérboles y otras figuras.
Diferencias de Bécquer con otros poetas románticos.
Cuando Becquer empezó a escribir, en España se cultivaba una poesía de tono elevado y grandilocuente. Bécquer rompió con esa tendencia y se interesó por la poesía como expresión de los propios pensamientos, utilizando formas breves y sencillas. El romanticismo intimista.
El lenguaje poético de Bécquer se caracteriza por su aparente sencillez. El poeta se despoja de la retórica y la brillantez de los primeros románticos y, en un proceso de depuración, utiliza una expresión breve y precisa. Bécquer evita los esquemas cultos y prefiere las estrofas de tipo popular- coplas, seguidilla- y la rima sonante. Gusta también de emplear recursos populares como la reiteración de elementos o el paralelismo. La nota característica de su pesia es el intimismo, la sincera expresión del mundo interior del poeta. Puede ser considerado como el primer poeta rigurosamente contemporáneo. La sencillez métrica de sus versos y la densidad de su expresión constituyeron un modelo cuya influencia puede rastrearse en la poesía del siglo XX.
Sus rimas son asonantes con formas métricas sencillas y con libre tema para escoger.
Las obras de Bécquer sin duda coinciden con un aumento de los sentimientos frente a la razón
3- Rimas y Leyendas. Características de su obra.
Rimas
Las Rimas se presentan habitualmente precedidas mentode la "Introducción sinfónica" que, probablemente, Bécquer preparó como prólogo a toda su obra.
Sobre su obra de las Rimas son poesías breves, de tono popular y gran musicalidad, que
forman en conjunto un cancionero centrado en dos temas básicos: la poesía y el amor.
La forma que presentan las Rimas evidencia que se trata de poemas de inspiración popular aunque exquisitamente elaborados por el poeta. La rima elegida es la rima asonante en los versos pares, típica de la poesía tradicional. En cuanto a la medida hay una gran variedad de metros cortos y largos, he incluso suelen alternar distintos metros dentro de un mismo poema.
Bécquer logra que cada rima tenga una unidad poética total en contraste con la brevedad del “argumento” en que se apoya. A veces este argumento es solo un estado de ánimo. Las rimas de Bécquer se refieren a situaciones humanas que nunca dejan de ser actuales; despojadas, como están, de las adherencias concircunstanciales; muchas de ellas son hoy tan válidas como cuando se escribieron
Por su temática, las rimas, suponen una onda mirada hacia el mundo interior del poeta. Los temas de las rimas son la poesía, el amor, la desesperación, la angustia y la muerte.
Leyendas
Sobre las Leyendas son un conjunto de relatos en prosa sobre tradiciones populares. Algunas son fuertemente imaginativas. En algunos casos se trata de recreaciones que el poeta hizo basándose en leyendas recogidas en sus viajes por España; en otras, son invenciones del propio Bécquer siguiendo los esquemas del relato tradicional al escribir sus leyendas Bécquer tenía el propósito de dar a conocer las tradiciones Españolas y evitar que cayeran en el olvido.
Las leyendas de Bécquer están frecuentemente ambientadas en épocas remotas o en lugares exóticos. A través de ellas, el autor nos introduce en el mundo de lo misterioso y lo sobrenatural, en un mundo donde una bruma difusa confunde lo real y lo irreal.
Tanto por su lenguaje como por su lirismo, las leyendas pueden ser consideradas como verdaderos poemas en prosa.
Bécquer recrea el género; las técnicas de descripción arqueológica, las expresiones de lo sublime terrorífico; tiende, sin embargo a la verosimilitud realista, a respetar la economía y los modos del relato popular y, sobre todo, a crear un ambiente de maravilla lírica, similar al del cuento de las hadas.
Acerca las leyendas a la forma más sencilla de un largo cuento en prosa y también el afán noticiero de un artículo propio de la nueva ciencia del folklore. Esta prosificación de una materia literaria más común entonces en el verso no le hace perder dignidad literaria; y eso en dos sentidos. En uno de ellos, el imaginativo, la invención creativa de Bécquer se muestra de manera intensa y soñó está apoyada en lo más necesario para el encuadre histórico. Y en el otro las narraciones se acercan al costumbrismo viajero que fue propio de los hermanos Bécquer, pues cada una de ellas se sitúa en diferentes lugares del conjunto de España, con referencias muchas veces a un viaje, excursión o estancia en un lugar que no es el habitual. De esta manera el propio Bécquer se entromete en el argumento, y como él se introduce también en los lectores, que, sintiéndose hombres modernos del siglo XIX, se entretienen en estos relatos.
Las leyendas no se narran siguiendo una manera novelesca, objetiva, sino mediante una mezcla de las dos posiciones: el escritor dice haber llegado hasta ellas de algún modo, a través de una experiencia personal, y este marco de la pesquisa para dar con la información, se integra en el relato legendario; es como un periodista que anduviese en busca de novedades... no del día, sino de otros tiempos, y que fuese comentador el mismo de la noticia del pasado. Bécquer saca la leyenda de las formas que hasta entonces habían aparecido, la desprende del corsé romántico, de la sonora versificación, y la deja suelta, como danzando en la libertad de una prosa que en esto sí que quiere ser poética. Estas leyendas, junto a las otras Narraciones, representan casi un tercio de su obra total.
4- Elige una rima, la que más te guste y comenta su contenido. Explica por qué la has elegido.
LXVII
(18)
¡ Qué hermoso es ver el día
coronado de fuego levantarse,
y, a su beso de lumbre,
brillar las olas y encenderse el aire!
¡ Que hermoso es tras la lluvia
del triste otoño en la azulada tarde,
de las húmedas flores
el perfume aspirar hasta saciarse!
¡ Que hermoso es cuando en copos
la blanca nieve silenciosa cae,
de las inquietas llamas
verlas rojizas lenguas agitarse!
Que hermoso es, cuando hay sueño,
dormir bien...y roncar como un sochantre
y comer...y engordar...¡y que desgracia
que esto solo no baste!
Comentario
He elegido esta poesía porque ahora mismo estoy en mi casa de Lérida en el campo, y esa poesía me recuerda a esta mañana cuando me levanté y miré por la ventana.
Demuestra el bien vivir y el disfrutar de la vida, beber, engordar...Se encuentra a gusto y transmite una gran ilusión y satisfacción provocada por el buen tiempo que le inspira a escribir esta poesía. En cabeza de las 3 primeras estrofas se encuentra una anáfora, ¡Que hermoso es... versos 1,5 y 9) con lo que exalta el amanecer, la lluvia y el fuego de la chimenea en un día de nieve. En esta poesía demuestra el buen animo que tenía en el momento que la escribió o se inspiró no como en muchas otras poesías suyas que se basan en temas tristes o desdichados.
5- Elige una leyenda y comenta los siguientes puntos:
El gnomo (leyenda aragonesa)
Argumento.
El tía Gregorio era el más viejecito del lugar y les cuenta a las muchachas del pueblo las que van a buscar el agua a la fuente, les cuenta una historia aconsejándolas de que no vayan a buscar el agua por la noche a la fuente esa historia trata de lo siguiente:
Que unos espíritus diabólicos que durante la noche bajan de las montañas y pueblan el vació, hormiguean en llanura, saltan de roca en roca, juegan entre las aguas o se mecen el las ramas de los árboles. Ellos son los que forman y empujan las bolas de nieve, los que hacen que llueva , los que destrozan todo a su paso...
Por muy malos que sean aun hay unos peores los gnomos que intentan encandilar los corazones de las muchachas con dulces palabras engañándolas pues. Ellos guardan preciosos tesoros se cuenta que una vez un pastor fue al bosque y se adentró en los escondrijos de los gnomos y descubrí todos estos tesoros que nombro y cuando se quiso dar cuenta sin saber porque se encontró de nuevo en el camino pero sin ninguna de las riquezas que antes tenía entre las manos.
Esta historia hace que las muchachas pese a todo no se lo acaben de creer y vuelvan a sus casa pero Marta y Magdalena dos hermanas que de eso no se creían nada decidieron ir cada una por su parte a la fuente ya muy tarde, allí se encontraron mientras Marta que no conocía el temor y Magdalena temblaba solo con el ruido de las hojas bajo sus pies. Allí pues en la fuente escucharon que el agua y el viento les hablaban, Magdalena con el agua y Marta con el viento. Entonces apareció un gnomo que se metió tras las aguas de la fuente y Marta lo siguió mientras Magdalena se quedaba allí. Solo se sabe que después de aquello se encontró el cántaro de agua de Marta en la fuente roto y de Marta no se supo más nunca.
-Quién explica la leyenda
Está explicada por Bécquer como escritor omnisciente en tercera persona.
Lo conoce todo e incluso nos describe el a los personajes con lo cual ya los conocemos y Bécquer no está metido en la historia que el narra.
-Planteamiento, nudo y desenlace: resume cada una de sus partes.
Planteamiento
Incluye desde que el viejo les cuenta su historia a las muchachas del pueblo y las aconseja sobre los peligros que trae ir a la fuente por la noche.
Nudo
Magdalena y Marta deciden ir a la fuente y allí escuchan que el viento y el agua les habla, ellas conversan un rato con ellos hasta que aparece un gnomo y Marta lo sigue y desaparece para siempre.
Desenlace
Después de no volverse a saber más de Marta desde entonces las muchachas van y vuelven temprano a la fuente para que las sombras no se las lleven.
-Personajes: cómo son, cómo los caracteriza el autor, cómo te los imaginas tú. Habla de su físico y de su personalidad.
Los personajes te los explica Bécquer de el viejecito Gregorio lo describe así:
Tenía casi noventa navidades, pelo blanco, la boca risa, los ojos alegres y las manos temblonas. De niño fue pastor; de joven, soldado. Después cultivó una pequeña heredad, patrimonio de sus padres, hasta que, por último, le faltaron las fuerzas y se sentón tranquilo a esperar la muerte que ni temía ni deseaba. Nadie contaba un chascarrillo con más gracia que él, ni sabía historias más estupendas, ni traía a cuento tan oportunamente n refrán, una sentencia o un adagio.
La opción pues que uno crea de el es la que Bécquer mismo explica, pero el carácter yo me lo imagino pues un viejecito tranquilo que disfruta siendo simpático y contando historias a las muchachas del lugar.
A Marta la describe con estas palabras:
Marta era altiva, vehemente en sus inclinaciones y de una rudeza salvaje en la expresión de sus afectos. No sabía ni reír ni llorar, por eso ni había llorado ni reído nunca. Tenía los ojos más negros que la noche y de entre sus pestañas diríase que a intervalos saltaban chispas de fuego como de carbón ardiente. Enjuta de carnes, quebrada de color, de estatura esbelta, movimientos rígidos y cabellos crespos y oscuros, que sombreaban su frente y caían por sus hombros como un manto de terciopelo. Se había encerrado para sufrir en un egoísta y altivo silencio.
Magdalena era humilde, amante, bondadosa, y en más de una ocasión se la vio llorar y reír a la vez como los niños. La pupila azul de Magdalena parecía nadar en un fluido de luz dentro del cerco de oro de sus pestañas rubias. Y todo era en ellas armónico con la diversa expresión de sus ojos. Era blanca, rosada, pequeña, infantil en su fisonomía y sus formas y con unas trenzas rubias que rodeaban sus sienes, semejantes al nimbo dorado de la cabeza de un ángel. Lloraba a solas cuando sus lágrimas se agolpaban involuntariamente a sus ojos.
Así pues yo me las imagino como el las describe más un carácter de Marta muy cerrado y propio, en cambio a Magdalena diría yo que es un poco más delicada y devil phisicamente, aunque Marta sea fuerte exteriormente, yo creo que también es devil emocionalmente por dentro al igual que su hermana.
-Escoge el momento más emocionante de la leyenda y coméntalo: que pasa, por qué crees que es el más interesante, etc.
En el momento que Marta y Magdalena hablan y conversan con el agua de la fuente y el viento de los montes, me gusta porque lo que dicen es sabio y es una bonita conversación la que mantienen, me gusta la forma con la que expresa Bécquer aquí lo que puede llegar a sentir tales elementos como el agua o el viento que no tienen sentimientos ni capacidad de pensar pero que las muchachas los escuchan y los comprenden aunque algunos pensamientos del agua o del viento sean impuros y intenten que las muchachas hagan cosas que no quieren o no crean convenientes. Eso es lo que creo yo.
Descargar
Enviado por: | Aska |
Idioma: | castellano |
País: | España |