Me gustaría empezar esta reflexión tomando una frase de un libro de Geertz, la cual esta en el prologo que dice "los malos poetas toman prestado... los buenos poetas roban", en esta reflexión no buscare ser ni un mal ni un buen poeta, bajo esta máxima tratare de ser un pésimo poeta.
Comenzare afirmando que, el estudio de una materia tan interesante como es el Islam, hace que podamos tener una visión más global de esta Religión la cual abarca no solamente lo religioso sino también lo político y la vida diaria de la mayoría del mundo islámico.
Para el mundo occidental la religión puede que no abarque gran parte de nuestra vida cotidiana, de ahí se explica un poco el choque que podemos tener con esta forma de vida, en un articulo de Javier Otaola, encontré una definición que hace un teólogo Suizo, Hans Kung, sobre las funciones de la religión, la cueles son "conferir sentido, fundamentar normas y formar comunidad." Tanto las religiones de occidente (católica) y El Islam realizan estas funciones y tal vez, aun algunas más omitiendo otras, pero no cabe duma que la Umma, es una comunidad que ha sido formada por su religión de una manera fuerte y que tal vez (por no afirmarlo y comprometerme) es más unida que la comunidad cristiana de occidente, demostrando así con este simple ejemplo que los musulmanes tiene un parámetro de unión religioso que puede ser visto como peligroso para el mundo occidental por carecer de este.
Aquí me gustaría referirme a lo escrito por Emilio Menéndez en un articulo publicado en 1996, en el cual nos pregunta "... ¿ Y si aquello que hemos definido como fundamentalismo no fuese sino otro de nuestros fantasmas, producto de una mente atormentada por las emanaciones del propio imaginario?, ¿ Y si se tratase sólo de nuestra necesidad de darnos un enemigo.?" Comparto lo expresado por este autor, el manejo que se le a querido dar al mal llamado fundamentalismo de algunos países musulmanes por parte de los medios, manipulados por las naciones industrializadas buscando después de terminar con la guerra fría, crear diversos enemigos tal vez ficticios tal vez no, para mantener ejércitos que día a día son menos necesarios en un mundo con tendencias muy marcadas hacia la globalización.
Menéndez hace mención de los países desarrollados y en vía de desarrollo y sobre el "abismo" que él llama norte/sur, que a mi modo de entender lo expresado por el autor sé esta transformar es occidente/oriente, es el que tienden las sociedades ricas e industrializadas al considerarse portadoras de la razón universal. Ante esto, las sociedades tercermundistas tienden a afirmar su identidad a través de la Religión.
Creo
Geertz Clifford, Observando el Islam
Javier Otaola, El Islam y Nosotros, Revista Claves No.68, 1996
Emilio Menéndez, Islam, Islamismo y Democracia, Revista Claves No.68, 1996