Psicología


Ramas psicológicas


Psicología industrial  

     Los psicólogos selección de personal, en la entrevista y realización de tests a los candidatos, en la elaboración de cursos de formación y en el mantenimiento de un ambiente laboral adecuado; otros investigan desempeñan diversas tareas en organizaciones empresariales y lugares de trabajo: en el departamento de personal o recursos humanos, en asesorías para la contratación y para los departamentos de marketing (mercadotecnia) y publicidad de las empresas, o directamente para este tipo de agencias; por último, también se dedican a investigar la organización metódica del trabajo y a acondicionar el equipo o espacios laborales adaptándolos a las necesidades y potencialidades de los usuarios. 

Tambièn hacen aplicación de diversas técnicas psicológicas a la selección y adiestramiento de los trabajadores de una organización empresarial y a la promoción de condiciones y técnicas de trabajo eficientes, así como a la satisfacción laboral de los propios trabajadores. Este campo de la psicología aplicada cobró importancia en Estados Unidos durante la II Guerra Mundial, cuando se hizo necesario reclutar y formar a los muchos trabajadores que necesitaba la expansión industrial de la época.

La selección de trabajadores para una tarea concreta consiste esencialmente en detectar las aptitudes y rasgos de personalidad más idóneos para el puesto y a partir de ahí (análisis de tarea) seleccionar las pruebas necesarias para determinar qué candidatos se ajustan mejor a ese perfil idóneo. El desarrollo de pruebas de esta clase ha sido, durante bastante tiempo, un campo básico de la investigación psicológica.

Cuando el trabajador está en su puesto y ha sido formado, el principal objetivo del psicólogo industrial es encontrar el modo en que la tarea concreta sea acometida con un mínimo de esfuerzo y un máximo de satisfacción individual. La función del psicólogo, en consecuencia, difiere de la del experto en eficiencia, que da prioridad al incremento de la productividad.

Las técnicas psicológicas empleadas para aminorar el esfuerzo necesario para realizar un trabajo determinado incluyen un detallado estudio de los movimientos requeridos para el trabajo, el equipamiento usado, y las condiciones en que se realiza. Estas condiciones incluyen la ventilación, la climatización, la iluminación, la ausencia de ruidos, y cualquier otra circunstancia que afecte al confort o al ánimo del trabajador. Tras hacer tal estudio, el psicólogo industrial a menudo determina que el trabajo en cuestión puede realizarse con menor esfuerzo si se modifican las rutinas utilizadas en la tarea, se cambia la posición de las herramientas, o se mejoran las condiciones ambientales.

Los psicólogos industriales han estudiado también los efectos de la fatiga sobre los trabajadores para determinar la modalidad de la jornada laboral que genera una mayor productividad. En algunos casos, tales estudios han demostrado que la producción total de una tarea puede mejorarse reduciendo el número de horas de trabajo o incrementando el número de periodos de descanso durante la jornada. Los psicólogos industriales pueden también sugerir que haya exigencias menos directas para la mejora general de los resultados del trabajo, como mejorar los canales de comunicación entre la dirección y los empleados.

Psicología de la educación  

Los psicólogos de la educación trabajan en los problemas derivados del aprendizaje y la enseñanza; por ejemplo, investigan nuevos métodos para enseñar a los niños a leer o a resolver problemas matemáticos, con el fin de hacer el aprendizaje escolar más efectivo. Los psicólogos infantiles, por ejemplo, han sido influidos por las observaciones y los experimentos del psicólogo suizo Jean Piaget, El Psicólogo educacional es el profesional que está en condiciones de optimizar la relación enseñanza-aprendizaje en sus diversos ámbitos, evaluando las condiciones que permiten el cumplimiento de los objetivos (metas y valores) educacionales que pueden provenir del maestro, del alumno, de la escuela y/o del sistema educativo; o proponiendo y conduciendo: los programas correctivos pertinentes.

Los problemas más relevantes en nuestro medio, sin pretender agotarlos o jerarquizarlos, son los siguientes:

  • Deserción escolar : Es necesario identificar los mecanismos psicopedagógicos e institucionales facilitadores de la deserción escolar y planificar las estrategias correctivas.

  • Déficit en las áreas de Matemáticas : Es necesario el diagnóstico que permita identificar sus factores y procesos asociados que posibiliten el desarrollo de programas correctivos en íntima vinculación con la didáctica de la enseñanza de las matemáticas, las cuales deben elaborarse a partir de las propuestas psicológicas.

  • Migración y Bilingüismo: problema que debe ser abordado planteando estrategias de inserción y adaptación activa a la sociedad, que acoge al nuevo miembro, sin que involucre la pérdida de la identidad cultural del individuo.

  • Analfabetismo: Cuya motivación debe diferenciar las diversas comunidades culturales de nuestra sociedad, elaborando las técnicas y programas adecuados a cada una de ellas para disminuir su incidencia.

  • Problemas de la juventud : Los jóvenes son ignorados en las estructuras institucionales. Debe promoverse movimientos juveniles de orientación vocacional y profesional, técnico y científico, social, deportivo y artístico, capaz de imbuir en los jóvenes ideales y principios que los orienten hacia la autorrealización con el consiguiente rechazo a la drogadicción y la delincuencia.

Psicología clínica            

            Muchos psicólogos trabajan en hospitales, clínicas y consultas privadas, aplicando diferentes tipos de terapias a las personas que necesitan ayuda psicológica. Entrevistan y estudian a los pacientes y realizan tratamientos que no son médicos (con fármacos) ni quirúrgicos (mediante operaciones).

            Una contribución especial de la psicología clínica es la terapia de conducta, basada en los principios del aprendizaje y el condicionamiento, con la que los terapeutas intentan modificar la conducta del paciente eliminando los síntomas negativos mediante el descondicionamiento sistemático o el refuerzo gradual de un comportamiento alternativo más positivo.

Un paciente con fobia a los perros, por ejemplo, puede ser desensibilizado si progresivamente se le recompensa (refuerza) con una conducta de aproximación gradual a estos animales en situaciones no amenazadoras para el individuo. En otras formas de terapia, el psicólogo puede ayudar a los pacientes a comprender mejor sus problemas, buscando nuevas formas para enfrentarse a ellos. 

Psicología social  

            La psicología social comprende diversas teorías que pueden ser clasificadas como teorías del equilibrio. Son las que se ocupan, tanto en la teoría como en la práctica, de cómo y por qué cambian los individuos sus actitudes. Si, por ejemplo, una audiencia escucha un discurso de una persona considerada respetable, normalmente esperan ideas con las que estén de acuerdo. Si éste no es el caso, la audiencia pasará a desestimar al orador, o cambiará de actitud y participará de las ideas expresadas. En suma, los oyentes modificarán sus actitudes hacia el orador o hacia sus ideas, buscando el equilibrio. Del mismo modo, las personas tienden a equilibrar o reconciliar sus propias ideas con sus acciones. Al margen de este tipo de cuestiones, la psicología social también ha estudiado, entre otros temas, la conducta de masas y los fenómenos de grupo. 

Psicología comunitaria

La llamada  psicología comunitaria se crea originalmente en los Estados Unidos, asentándose posteriormente en algunos países de America Latina, entre ellos Chile. La idea de lo comunitario  proviene de la comuna, de lo común. La comuna habla de un territorio, de una geografía  que  destaca sectores, que recorta espacios los que a su vez engloban sujetos.

La psicología comunitaria, en tanto pone el énfasis en lo "común" comienza por borrar  toda diferencia  esencial. Aquí se presenta un problema metodológico: El trabajo psicológico se realiza siempre sobre una singularidad, lo que lleva implícito el asunto de las diferencias. La singularidad no debe confundirse con  el individuo. Pueden existir otras singularidades como  la familia, el grupo, la institución, etc.


La acción del psicólogo comunitario está siempre sometida  a la injerencia, a la interferencia, a la determinación de su ubicación en esa pírámide institucional en la cual se halla inserto. Con ello estoy señalando tan solo que  la posibilidad de la llamada psicología comunitaria, de sus acciones y de sus proyecto  es absolutamente dependiente de lo institucional y que de esto último, la psicología comunitaria no habla.


No interesa  puntualizar  el problema en  lo meramente técnico sino es para poder dar cuenta de que la ausencia de una técnica muestra la falta de un objeto específico de trabajo.

La psicología comunitaria carece de una teoría que funde su accionar, de una metodología  coherente con ella y de un encuadre de trabajo que le posibilite el recorte de un espacio propio en función del punto de vista particular que ha asumido. No es posible que  se llame  psicología comunitaria a cualquier cosa que se haga en el territorio de la comuna.



Aceituno (1993:33)  constata " ... esta práctica se caracteriza por la ausencia de sistematización de experiencias, por la ausencia de evaluaciones globales, por la dificil relación programática-institucional, por la inmediatez de su ejercicio, por la ausencia de definiciones políticas pragmáticamente entendidas. No existen o son muy escasos los textos donde se planteen los modelos teóricos a la base y sólo en el último tiempo  han surgido intentos de organización inter-institucional."

    Ahora bien, si la psicología comunitaria no cuenta con una teoría, ni con una metodología propia, si además no define un proyecto político, y si tiene problemas para especificar sus logros, sólo cabe pensarla como un lugar mas de trabajo.


La psicología comunitaria  ha quedado  sin marcos referenciales propios, y se trata de un espacio de aplicación  de un campo profesional sin más, es evidente entonces que  está sujeta a los avatares de las coyunturas  sociales y políticas de cada momento histórico particular.

La psicología comunitaria  aparece  como la 5ta. area de inserción laboral posible. Así, se agrega a las  tradicionales clínica, social, educacional y laboral, todas ellas con  la especificidad que determina una particular relación entre  el objeto de estudio (la salud, lo colectivo, lo educativo y el trabajo)  y el establecimiento en el cual se realiza (el hospital o el consultorio, los agrupamientos humanos, masa, sociedad, la institución educacional y la empresa o el servicio. En esta lógica, la psicología comunitaria carece tanto de objeto de estudio como de establecimiento; más bien aparece con pocas posibilidades de diferenciarse  por momentos de la psicología clínica y de la psicología educacional y sobre todo  no se visualiza  ninguna  distancia  con la psicología social. Podría afirmarse que  toda la psicología llamada comunitaria no es más que psicología social, sufriendo entonces también las vicisitudes de ésta.

Bibliografía:

*Aceituno, Roberto (1993) La psicología comunitaria en Chile. Proposiciones para una intervención  ideológica, elementos para una discusión, Psicología comunitaria y salud mental en Chile, UDP, Santiago de Chile.

 

* Alfaro, Jaime (2000) Discusiones en Psicología comunitaria, UDP, Santiago  de Chile.

* Foladori, Horacio (2002) La institución de las organizaciones no gubernamentales y su "crisis", Revista Praxis  Nº 4, UDP (en prensa)

o para establecerla en cada deporte.

 




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Enviado por:Estefania
Idioma: castellano
País: México

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