Sociología y Trabajo Social


Posmodernismo


Instituto Tecnológico de Costa Rica

Escuela de Ciencias Sociales

Ambiente Humano

Trabajo final

Desde la posición teórica del Posmodernismo

Indice

  • Introducción .................................................................................................3

  • Posición teórica: Posmodernismo..................................................................4

  • Definición ...............................................................................................4

  • Origen .....................................................................................................8

  • Características ....................................................................................... 10

  • Cultura ..........................................................................................................11

  • ¿Existencia o no existencia de las instituciones sociales? ........................... 13

  • Grupo Social ..........................................................................................13

  • Sistema Social ........................................................................................14

  • Estructura Social ....................................................................................15

  • El papel de la ciencia y la tecnología............................................................16

  • El poder desde la perspectiva posmoderna....................................................17

  • Comparación Anarquismo-Posmodernismo............................................20

  • Liderazgo y jefatura.................................................................................21

  • Identidad Posmoderna....................................................................................22

  • Personalidad............................................................................................22

  • La identidad.............................................................................................22

  • Feminismo posmoderno y la teoría lesbiana y gay..................................27

  • La búsqueda de identidad del pueblo.......................................................31

  • La Comunicación...........................................................................................32

  • A. Los medios de comunicación....................................................................33

  • Valores y principios.......................................................................................36

  • Actitudes y aptitudes......................................................................................37

  • Actitudes..................................................................................................37

  • Aptitudes..................................................................................................37

  • La percepción..................................................................................................38

  • Motivación......................................................................................................39

  • Conclusión.......................................................................................................40

  • Anexos ............................................................................................................41

  • I. Introducción

    "Soy en el lugar donde se vocifera

    que el universo es un

    defecto en la pureza del no ser"

    -Jaques Lacan-

    La posmodernidad se inicia con un desencanto y desconfianza en la razón ilustrada y la metafísica tradicional, lo que conduce a una debilidad de pensamiento. Esta “posmodernidad débil” ha sido propiciada por un conjunto de pensadores que ponen en tela de juicio los axiomas filosóficos que caracterizaban épocas anteriores.

    Comúnmente se tiende a confundir los términos de posmodernidad y posmodernismo, es por esto que se hace necesario aclarar las diferencias que existen entre estos dos conceptos:

    La posmodernidad es un término que describe la condición cultural e intelectual contemporánea, y como tal hace referencia al discurso intelectual y especialmente filosófico que incide en la multidireccional cultura y sociedad de los últimos tiempos. El término posmodernismo, en cambio, hace referencia a un tipo concreto de discurso, que argumenta o interpreta diversos planteamientos teóricos, y en el cual se instaura la problemática e inquietudes de un nuevo tipo de ficción lejos ya de los cánones tradicionales, a la que suele aludirse con el genérico y no menos problemático término de ficción posmodernista.

    La posmodernidad es un fenómeno cultural mucho más amplio y un término bastante neutro. Se puede afirmar que está en todas partes, en la publicidad, en los edificios, en la narrativa, en la música, en nuestra vida cotidiana, en la forma de vestir, de hablar, etc (Frederic Jameson). La posmodernidad es en cierta medida, la condición de nuestro tiempo. El posmodernismo en cambio, es una serie de argumentaciones, tesis, proposiciones; es una interpretación de la historia y de la política, de la ética y de la relación entre ética y política.

    II. Posición Teórica: Posmodernismo

  • Definición

  • Es difícil hallar una definición de posmodernidad como tal vez se podría encontrar de otras ideologías pues no es sencillo conceptualizar algo que está ocurriendo en este mismo instante. El concepto de posmodernismo, es tan posmoderno que significa muchas cosas. De acuerdo con Capra la humanidad está transitando por uno de los momentos de cambio más importante de su historia, comparable con el surgimiento de la agricultura. El posmodernismo es una clasificación filosófica de este momento histórico de tránsito, propio de un periodo de crisis que afecta sensiblemente a la sociedad.

    Para Humberto Eco el posmodernismo es una tendencia que no debe ser categorizada simplemente como un periodo cronológico (actual) propio de Occidente, sino que es una categoría espiritual o meta histórica que trasciende, va más allá, hace referencia a una situación de crisis propia de cada época. Cuando lo clásico, entendido como un conjunto de experiencias depuradas y decantadas en el tiempo asimiladas e interiorizadas por el colectivo, se convierte en una carga pesada, surge el deseo de liberarse, de abrirse a nuevos caminos. Así, el posmodernismo intenta destruir el pasado, buscar un nuevo lenguaje, pero sin referencias a las que aferrarse.

    El posmodernismo es, para Jameson y para Anderson, la atmósfera simbólica de nuestros días: sus fundamentos sociales son el dominio mundial del capital financiero y la unificación electrónica del planeta. El posmodernismo es también la señal cultural de un cambio en el horizonte existencial de la gente. La vida se desenvuelve ahora únicamente en el presente sin una visión clara de pasado o futuro, un estilo basado en la nostalgia sustituye la memoria social y los relatos utópicos. Tiene la necesidad de cuestionar los grandes ideales de la sociedad válidos desde la época ilustrada y así, tras dudar de la validez de la razón, dice adiós a todo fundamento y a los grandes principios que regían la modernidad para abrirse a una nueva época en la que reina la indeterminación, la discontinuidad y el pluralismo.

    La posmodernidad se puede definir desde un punto de vista de la libertad humana, la libertad de librarse de los mandatos, según los generadores de esta teoría de pensamiento, si hay ya sean reglas, leyes, o todo aquello que haga del ser humano una especie encerrada en mandatos no podrá ser feliz.

    El pensamiento posmodernista guía al ser humano en una vida de libertad, en una libertad que no es destructiva para la actual sociedad, sociedad que no es regida por reglas y por teorías, más bien de una manera destructiva mira a su alrededor medita y crítica tanto la realidad como a las teoría que han surgido para la aparición ya sea de la tecnología y avances en lo humano. Realmente no cree en los descubrimientos de la ciencia ni en la realidad que esta pueda dar, pues el posmodernismo critica a la ciencia a tal punto que su argumento es decir que los cambios tecnológicos se han dado dependiendo de la perspectiva humana que pueda tener cierto individuo al estudiar cualquier cosa que lo rodee en el mundo y el universo.

    Como ejemplo los posmodernos critican la forma de estructurar las sociedades antiguas los llamados antropólogos, pues éstos fabrican la realidad desde su punto de vista para ciertas civilizaciones que existieron anteriormente. Si se es antropólogo y se estudia cierto grupo social que existió tiempo atrás, como ser humano se puede tener atracción como también se puede tener repudio a ciertas costumbres que este grupo pudo haber practicado, y así se genera una historia de vida a partir de los gustos y disgustos que se percibieron al estudiar este grupo social, es decir se genera una historia desde el punto de vista de la persona que estudia a otras personas.

    Relacionado con la falta de verdades absolutas aparece otro elemento distintivo del posmodernismo: el abandono de la razón y el desprestigio de la idea de progreso, la razón ha sido reemplazada por la estética, por los valores creativos; la categoría de interesante (que es estética) ha sustituido a lo verdadero (que es epistemológica). Así el posmodernista no cree en esa realidad pues es un artificio generado por la raza humana.

    Debido a la falta de confianza en la razón hay una pérdida de preocupación por la realización colectiva, y resalta un interés por la realización de uno mismo. Esto se observa en el retorno a lo religioso: hay un "boom" de lo sobrenatural y de las ciencias ocultas (quiromancia, astrología, videncia, cartas astrales, cábalas, etc.). En la posmodernidad, a diferencia de la modernidad, no hay prejuicio en aceptar explicaciones por más irracionales que sean. Además de un retorno de lo irracional; también retorna Dios. El Dios del individuo posmoderno no pude ser demasiado exigente. Puesto que el individuo posmoderno obedece a lógicas múltiples, su postura religiosa también las tiene; estructura su mundo metafísico tomando ideas judaístas, cristianas, hindúes y añadiendo, quizás, una pizca de marxismo y/o paganismo.

    El individuo posmoderno obedece a lógicas múltiples y contradictorias entre sí. En lugar de un yo común lo que aparece es una pluralidad de personajes. Todo lo que en la modernidad se hallaba en tensión y conflicto convive ahora sin drama, pasión ni furor.

    Los posmodernos rechazan las ideologías modernas del siglo XIX, mezclan aspectos de distintas ideologías, actitud que les parece libertaria y creativa permitiendo romper esquemas fijados. El posmodernismo disuelve las ilusiones de la modernidad y a diferencia de la modernidad que era ingenuamente optimista,  lleva una carga pesimista. Además, mientras que el modernismo sólo lograba captar una audiencia de élite, el posmodernismo se muestra capaz de extender su hegemonía por doquier y borra cualquier diferencia entre lo que antaño se denominaba "alta" y "baja" cultura.  Los posmodernistas sostienen desde la "filosofía de la sospecha", el fin del humanismo, del dominio del sujeto trascendental al que identifican con la razón metódica y la destrucción de la subjetividad. Construyen una salida antirracional, en donde el "nuevo hombre liberado", es un ser pasivo y sin proyectos.

    La filosofía de la sospecha absorbe el mundo exterior en forma pasiva, imponiéndosele los objetos que vienen desde afuera. El sujeto no pregunta, y si lo hace, sabe que la respuesta ya ha sido formulada.

    Se dice que el deseo de saber demasiado sólo puede traer males. Opinan que el "pensamiento débil" tiene dos grandes ventajas:

    A.1. Buscar el sentido único para la vida conlleva una apuesta demasiada alta (todo o nada).

    A.2. Todo aquel que cree tener una gran idea trata de ganar para ella a los demás y, cuando estos se resisten, recurrirá fácilmente a la implementación de la fuerza.

    El individuo posmoderno renuncia a buscar un sentido único y totalizante para la vida. La suya es una postura confortable, alérgica a las exigencias radicales. Los posmodernos renuncian a discutir sus opiniones; "vive y deja vivir".

    Los posmodernos buscan crear una nueva forma de pensamiento que permita la liberación del ser humano y que lo libere de la opresión en la que vive. De esta forma busca acabar con las estructuras y sistemas sociales de la época, para promover una nueva forma de desarrollo humano. Debido a esto, es que la posmodernidad busca desarrollar ideas claras acerca de su ideología que reflejen su pensamiento y busquen acabar con el esquema de la modernidad.

    Estas ideas sustentan la posmodernidad, sin embargo, no pueden ser legitimizadas académicamente porque resultaría contradictorio con la condición posmodernista, ya que ésta no necesita legitimizarse porque es una condición que no propone nada ni abraza utopías. Estas ideas posmodernas son las siguientes:

    A.1. La conducta de la sociedad debe guiarse más por los impulsos de los individuos, es decir, por las inquietudes y deseos de éstos, y debe dejar un poco más de lado los sistemas sociales, es decir, los pensamientos e ideas que han sido establecidos anteriormente por la sociedad, ya que no se estaría tomando en cuenta la opinión de cada individuo, sino que se estaría siguiendo con una conducta establecida por unos pocos, pero que rige sobre muchos.

    A.2. La ciencia debería dar un cambio y salirse del esquema de que puede analizar al individuo, no todo en el ser humano es racional y pretender estudiarnos a todos por igual sería un error grave dentro de la cultura posmoderna, debido a que una de las cosas importantes dentro de la posmodernidad es la pluralidad.

    A.3. Es importante rescatar los discursos y opiniones de los otros, dejando a un lado el discurso unívoco que se vivía antes. Esto ya se ha venido dando gracias a la introducción de los medios masivos de comunicación.

  • Origen.

  • Se ha dicho que la idea de la posmodernidad fue diseñada por los ideólogos burgueses, con el problema de que la definición que se le ha dado ha sido demasiado rígida o tiesa, para explicar los cambios que se han operado, entre 1979 y 1991.

    Lo posmoderno en Francia, designó en un primer momento un estilo arquitectónico. Es precisamente desde la arquitectura donde se comienza a nombrarlo como tal. En Inglaterra adquirió una aplicación más extensa donde se reivindica el derecho al eclecticismo, a la remiscencia del barroco, al sincretismo contra la pureza geométrica; el posmodernismo revalida la ambigüedad, la pluralidad, la coexistencia de estilos, algo así como un todo vale.

    Después del triunfo en la arquitectura el posmodernismo se extendió al arte en general, a la sociología, a la filosofía, etc.

    Se considera como la ideología de la sociedad de consumo y del individualismo capitalista.

    El inicio del posmodernismo en lo social no se ha demarcado pero se tienen varias referencias:

    B.1. En 1945 cuando Joseph Hudnut escribe la obra La Casa Posmoderna hace un alegato de la libertad individual frente al control colectivo.

    B.2. Arnold J. Toynbee en su Estudio en la Historia se refiere a la época posmoderna como integradora de modelos sociales diversos (pluralismo).

    B.3. En 1972 Se dejaba atrás el funcionalismo para centrarse en lo estético, incorporando estilos del pasado de forma ecléctica.

    Históricamente, se podría afirmar que la posmodernidad surgió debido a una serie de crisis que se venían dando en diferentes sistemas sociales que operaban (u operan) en los últimos años, uno de los principales es el Sistema Capitalista.

    Actualmente sabemos que el capitalismo ha pasado por diferentes crisis periódicas, un ejemplo es la de la Depresión de 1929. Asimismo una de las razones por la que más se ha pensado que el capitalismo ha entrado en crisis, es que ha hecho que el mundo se divida en dos bandos, los ricos quienes sustentan el poder en sus manos, y son dueños de los principales sistemas de producción, y los pobres que por el contrario están sometidos a los estatutos que los poderosos impongan, pasando por grandes calamidades y situaciones de miseria. Observando estas injusticias humanas es que el posmodernismo busca una salida a este problema, revelándose contra todas las consecuencias que el capitalismo ha provocado.

    Si bien no se puede hablar de un periodo histórico concreto en el que se constituya la posmodernidad, sí se puede afirmar que la posmodernidad empezó a tener sus primeras manifestaciones en la década de los ochentas, cuando se empiezan a hacer mayores cuestionamientos y críticas a los sistemas sociales, políticos, económicos, que operaban en esos momentos.

  • Características

  • La caracterización de la posmodernidad ha sido un proceso bastante complejo, debido no sólo a la novedad de este término, sino también a la gran cantidad de diagnósticos, y cuestionamientos a los que se ha sometido esta nueva situación. Para caracterizar y definir la posmodernidad han existido muchos autores que se evocan cada uno a diferentes puntos de vista; mientras unos piensan que es una continuación de la modernidad, apelando al carácter inacabado del proyecto moderno, otros autores un poco más radicales, piensan que la posmodernidad es una rotura radical con el antiguo paradigma de la modernidad. Estos autores piensan que el proyecto de la modernidad está liquidado.

    Sin embargo se puede decir que los principales rasgos de esta teoría son:

    C.1. Crítica a Europa: critica a la razón europea por haber permitido aberraciones históricas y no considera la cultura europea como modelo.

    C.2. Racionalidad de la ciencia: cuestiona la ciencia como única vía para llegar a la verdad; esto porque se considera a la ciencia como un sistema teórico, y a la teoría como aquello que trata de explicar la realidad pero no lo hace en su totalidad.

    C.3. Trata de instaurar una condición humana sin utopías.

    La critica es la principal arma de este pensamiento, básicamente las criticas surgen debido a que existe un resentimiento a la clase de vida y de pensar del régimen Europeo dado que la Europa a sido la generadora de muchos comportamientos característicos de la ciencia.

    III. Cultura

    La cultura es un conjunto de rasgos distintivos, que engloban tanto lo material como lo espiritual, lo intelectual y lo afectivo, que caracterizan a una sociedad o grupo social en un periodo determinado. Es la totalidad compleja que incluye conocimiento, creencias, arte, derecho, costumbres y cualesquiera otras actitudes o hábitos adquiridos por el ser humano como miembro de la sociedad, es decir, es aquella libertad que nos permite construirnos y definirnos como seres humanos individuales.

    El papel fundamental en el surgimiento de la cultura posmoderna lo tienen las nuevas tecnologías que se apoyan en el lenguaje. Estas son las que han modificado el estatuto del saber, saber que se traduce en cantidad de información y se imbrica de poder. Un saber no universal, sino heterogéneo y que corresponden a los diversos juegos del lenguaje. Se genera una cultura que no es filosófica, más bien se genera una cultura de crítica pues tampoco está de acuerdo con la filosofía.

    La cultura posmoderna se caracteriza por la incredulidad hacia los relatos propios de la modernidad, los relatos marxistas, idealistas, iluministas, y también el relato cristiano y el liberal. Además por tener rasgos anglosajones y estadinenses. Pues esta es una cultura de personas muy sedentarias, las cuales sólo observan y viven en las comodidades a pesar de criticar la forma de haber nacido éstas, es una cultura que vive de lo que otros han hecho e investigado. De hecho para las personas posmodernistas su lugar cómodo de vivencia debería ser la ciudad, dado que sólo ahí se puede obtener beneficios de comodidad y en cierta parte la información para elaborar cada vez más en la mente este sentimiento de destrucción de la modernidad.

    Esta cultura por ser destructiva desde el punto de vista de las teorías y la realidad también se le puede analizar su comportamiento en lo que es su forma de gobierno, aquí se parece mucho al anarquismo, en el tipo de gobierno el anarquismo define su forma de administrar sus bienes, dice que el gobierno no debe de participar tanto en lo relacionado con los bienes de las personas, se puede decir que las personas no necesitan que un gobierno se meta en sus territorios. Además su idea de la vida es vivir sin tener que soportar mandatos, vivir en libertad pero sin caer en un liberalismo absoluto. Así es la forma de pensar de los posmodernistas pero no tan rigurosamente, pues su forma de vida es tener que vivir sin reglas pero si las hay solo las critican, no tienen porque molestarse.

    Este pensamiento al negarse a las demás culturas es a su vez una cultura llena de cibernetismo (de algo que critica), el posmodernismo tiene por decirlo así una cultura virtual, la cual le brinda la información que necesite.

    A pesar de su cultura tecnológica cabe decir que los posmodernistas por estar ligados a tanta información pueden tener en su forma de ser diferentes culturas, pues los medios de información acercan cada vez más las diferentes culturas, y por ende se dan a conocer las diferentes costumbres que se dan en todas éstas.

    Los enunciados posmodernistas explican que existen diferentes culturas al rededor del mundo porque cada cual se construye la propia, por lo cual también nos dicen que no se pueden tomar decisiones basados en promedios y mucho menos tomando la cultura europea como parámetro.

    Una de las experiencia típica de la cultura posmoderna es la percepción del "shock", experiencia disruptiva de la tradicional reflexiva y que W. Benjamín hace 60 años, recortaba al ámbito de la experiencia del arte de vanguardia y al de la tecnología reproductiva y en la actualidad esta presente en todos los campos de la cultura. Si al principio la experiencia del shock fue vislumbrada por Benjamín como transformador de la tradición, en la actualidad se ha convertido en reafirmador de lo existente. Hace tiempo que el shock perdió sus impulsos subversivos para ser parte de las técnicas de la industria cultural y cualquier intento de reavivar su espíritu crítico no tendría ningún sentido. La estética del shock está presente en la realidad más cercana de las personas del mundo de hoy: la de los medios masivos de comunicación. Estética común al video clip, y que no solo remite a un corto producido para una difusión de un tema musical, sino que la televisión, ciertas producciones cinematográficas y literarias reclaman cada vez más parecerse a ese tipo de videos, en donde la caótica proliferación de imágenes fragmentada y desconectadas vuelven imposible una lectura lógica y lineal.

    La cultura posmodernista es aquella que contenga todos los principios que nos rigan de tal manera que nos permita ser personas críticas ante las realidades mundiales, que nos entreguen esa libertad que se ha mantenido oculta durante casi siempre, pero sobre todo que seamos personas individualistas, capaces de dar nuestras opiniones personales sin ningún tipo de temor, para así expresar nuestra verdadera esencia como seres humanos. La cultura posmoderna es en definitiva una pluralidad de subculturas que corresponden a diversos grupos sociales y que adquieren su propia legitimación a existir y a coexistir con otras subculturas con igual o similar reconocimiento social.

    IV. ¿Existencia o no existencia de Instituciones sociales?

    Distintas teorías exponen que las Instituciones Sociales constituyen una compleja estructura que conforma el tejido social a través de las cuales los individuos desarrollan sus acciones, sin embargo el posmodernismo desmiente estas teorías para exponer el concepto que más se acerque a la realidad actual.

    A. Grupo Social

    Con base en diferentes teorías se puede decir que un grupo social es una agrupación de cierto número de individuos unidos que tiene conciencia de pertenecer al mismo, de que entre ellos existen semejanzas que les permiten diferenciarse de quienes no pertenecen al grupo. También se dice que los seres humanos realizan sus actividades desde un grupo social y que para integrarse a cualquier grupo es necesario someterse a un proceso de socialización que inicia en la familia y que continúa al interrelacionarse con los demás.

    Desde el punto de vista posmodernista lo social no tiene gran importancia pues se basa en teorías que guían la realidad, pero que no son exactamente reales. Lo verdaderamente importante es dar la libertad al ser humano de ser social en la forma en que este lo conciba

    En las sociedades actuales (posindustriales, posmodernas) el pasar por un proceso de socialización para pertenecer a un grupo social es innecesario ya que el mundo en el que vivimos se ha convertido principalmente en un ente individualista, donde cada uno piensa diferente y puede creer en lo que mejor le parezca. Además el papel de la familia y la escuela como agentes socializadores se van reduciendo al aumentar la influencia de los medios de comunicación de masas que transmiten componentes de la sociedad global. En definitiva el posmodernismo está en total desacuerdo con la existencia de los grupos, debido a que estarían encasillándolos dentro de ciertos comportamientos que limitan la autenticidad de cada ser humano.

    B. Sistema Social

    El sistema social para el posmodernismo está basado en lo que es la verdad sin tener que

    orientarse en diferentes teorías de las realidad humana, se guían por satisfacer sus necesidades ya sean de carácter fisiológico y psicológico, el sistema social no se define puesto que no hay grupos de personas que quieran revolucionar su forma de pensar de tal manera que intenten generar un monopolio de este sistema.

    Su sistema requiere de información sólo para observar y criticar la realidad. No es como el pensamiento del Realismo Mágico que se forma desde la adulación del un todo poderoso, en este pensamiento se adula a la persona misma dado que se necesita sólo de una persona para poder regir la vida de cada uno. Se concentran diferentes formas de ver la vida, de sentirla y de diferentes formas de actuar, se da una libertad de querer pensar lo que se quiere, realmente el sistema social para el posmodernismo está incluido en cada individuo que representa a este nuevo pensamiento.

    Una posición bastante parecida a la posmoderna es la anarquista. Esta última propone la ruptura de los sistemas en los que exista un soberano o una autoridad, ya que la existencia de un sistema social en el que no halla una jerarquía permite llevar al máximo la libertad individual y la igualdad social.

    Estas son ideas fundamentales en el desarrollo de la ideología anarquista, ya que consideran que los seres humanos tienen una capacidad innata que deben explotar en libertad, sin ninguna coacción que los limite; y por supuesto bajo un soberano no pueden hacerlo, ya que se encuentran inmersos en un grupo en el que no pueden ser totalmente libres.

    De esta forma se puede llegar a afirmar que los anarquistas son también socialistas, ya que todas las principales ramas del anarquismo están opuestas al capitalismo. Este último está basado en la dominación y la explotación. Como señaló Daniel Guerin en su libro Anarquismo, "el anarquismo es realmente un sinónimo del socialismo. El anarquista es primeramente un socialista cuyo fin es la abolición de la explotación del hombre por el hombre".

    El anarquismo no se deriva de las reflexiones abstractas de un intelectual o un filósofo, sino de la lucha directa de los trabajadores contra el capitalismo, de las necesidades de los trabajadores, de sus aspiraciones de libertad e igualdad.

    Un aspecto importante sobre el anarquismo que no se puede pasar por alto es el concepto de organización dentro de una sociedad. En el anarquismo no puede existir la libertad desenfrenada, sino que como en toda sociedad debe existir una organización, ya que sino la vida humana sería imposible. Tal y como lo indica George Barret en Objeciones al Anarquismo: "para llegar al sentido pleno de la vida debemos cooperar, y para cooperar tenemos que llegar a acuerdos con nuestros semejantes. Suponer que tales acuerdos significan limitaciones a la libertad es en verdad un absurdo; al contrario, son el ejercicio de nuestra libertad. Si vamos a inventar un dogma sosteniendo que el llegar a acuerdos es dañar la libertad, entonces la libertad se vuelve tiranía inmediatamente, puesto que prohíbe a los hombres los más ordinarios placeres cotidianos."

    A través de esta cita queda claro cuál es la posición de los anarquistas, quienes buscan una libertad e igualdad para los seres humano, pero que exista una organización.

    Ahora bien, para entender la relación que existe entre posmodernidad y anarquismo había primero que conocer la ideología de esta última. De estas ideologías se puede observar que ambas buscan la abolición de los grupos y sistemas sociales, ya que la existencia de éstos encasillaría la situación del ser humano en un lugar determinado, y no estaría en las facultades de hacer y expresarse como cada persona prefiera, limitando la libertad de la que se habla tanto en la posmodernidad como en el anarquismo. Por lo tanto el sistema social que proponen estas dos teorías es uno tal que no existan grupos sociales, mas sí una organización determinada por todos.

    C. Estructura Social

    La estructura de los sistemas socioculturales es considerada como el resultado de la combinación de elementos como sexo, edad, parentesco, territorio, especialización y dominación. Para que exista una estructura debe de haber primero un sistema social, pero como ya se mencionó antes el sistema se define dentro del individuo mismo.

    Por otro parte la integración y aceptación de distintos valores (morales, ideológicos, culturales...) es uno de los aspectos más apreciados del posmodernismo, pues permite la convivencia pacífica entre diferentes grupos humanos. Dicha consideración igualitaria es un hecho positivo pues rompe con el dogmatismo, fanatismo, etnocentrismo y demás injusticias cometidas por las ideologías modernas.

    V. El papel de la ciencia y la tecnología

    Uno de los factores que ha hecho que se desarrolle la posmodernidad, ha sido la introducción de la ciencia y la tecnología en la sociedad (donde cada vez se hace más presente). Por ejemplo en la ciencia se encuentra un historiador y filósofo estadounidense Samuel Kuhn, quien afirma que la ciencia no puede desarrollarse con viejas teorías, sino más bien que deben adoptarse aquellas que superen a las anteriores, produciéndose así Revoluciones Científicas, las cuales traen consigo más conocimiento, nuevas ideas y planteamientos, es decir, nuevos "paradigmas". Estos paradigmas se involucran dentro de la ideología posmoderna.

    Por otro lado se encuentra la tecnología que también juega un papel determinante en el desarrollo de la posmodernidad. Principalmente los medios de comunicación son los que más han influido, cada persona tiene entretenimiento en sus propias casas, no tiene necesidad de salir a establecer relaciones sociales, con lo que cada ser humano se vuelve más individualista.

    Se puede analizar el papel que juega los medios de comunicación en la conformación de la posmodernidad. Ahora se tiene el Internet brindando la más detallada información de todas las cosas que se puedan imaginar, de este modo se enriquece la posmodernidad debido a que si se tiene suficiente información las críticas se generaran con más peso, además que se puede hacer comparaciones entre teorías pues ya se conocerían por medio de los medios de información actuales.

    Los medios de comunicación también han permitido acabar con el monopolio de las decisiones mundiales, debido a que todas las culturas tienen la oportunidad de expresar sus opiniones con respecto a los fenómenos de la época, abriendo la participación y la existencia de muchos puntos de vista, rompiendo con lo que tradicionalmente existía, y por supuesto conduciéndonos cada vez más al camino de la posmodernidad.

    Según los avances de la actual tecnología se puede observar que la teoría y la realidad han estado muy unidas, y por consiguiente se debe de tomar en cuenta a la hora de definir nuestro propio criterio, acerca de lo que es la sociedad y en que pensamientos se debe avanzar en la vida. El posmodernismo critica todos los puntos de vista de las ciencias pero éstas han llevado a la humanidad a grandes descubrimientos, de hecho las críticas y los cuestionamientos son buenos pues así se puede mejorar los métodos de investigación y los sistemas sociales, pero esto no genera una revolución, no genera un cambio que pueda beneficiar verdaderamente el quehacer humano.

    VI. El poder desde la perspectiva posmoderna

    “Qué es lo singular del discurso hegemónico que hoy expresa la dominación? Lo que aparece como nuevo es algo bastante antiguo. La significación racional del discurso se manifiesta a través de la imposición de la palabra. Palabra vacía, consigna paralizante, sin entender porque estamos en el mundo.”

    • Habermas -

    La palabra vacía con la que se manejan los representantes de los intereses del posmodernismo, paraliza cualquier tipo de acción alternativa, es un envío movilizante, paralizante, es un mensaje que indica el hacer, el quehacer y el pensar. La masa obedece las palabras y sus consignas, y luego las repite.

    "Quien domine la jerga no necesita decir lo que piensa, ni siquiera pensarlo rectamente; de esto le exonera la jerga, que al mismo tiempo desvaloriza el pensamiento".

    Según el Diccionario de la Lengua, Poder significa dominio, imperio, facultad y jurisdicción de la que dispone el individuo para mandar o ejecutar. Capacidad de imponer la propia voluntad sobre los otros.

    Desde el posmodernismo, el poder se traduce en saber, es decir, quien tenga acceso a más conocimiento será quien logre tener más herramientas para someter a los otros y lograr su objetivo. Esta concepción se debe a que se ha dejado de lado aquellas posiciones en donde el poder se consigue con la fuerza, con la riqueza, o simplemente se hereda.

    Hoy día, el auge de las tecnologías y la imposición de los medios masivos de comunicación ha obligado a aquellos que deseen obtener poder o posiciones de mando, a empaparse del conocimiento que se requiere para manejar las nuevas invenciones y de este modo buscar estrategias que le permitan llegar a la mente de la población para lograr de ésta las actitudes deseadas por aquellos que lo solicitan.

    Existen opiniones muy variadas de lo que significa poder. Por ejemplo el novelista y dramaturgo ruso Mijáil Bulgákov señala que "Todo poder es una violencia ejercida sobre las gentes". Se puede observar que esta posición es bastante radical, debido a que trae a colación la palabra "violencia", la cual da la impresión de fuerza o guerra. Si bien es cierto, esta definición de poder en alguna época pudo resultar bastante acertada, hoy, en plena posmodernidad no tendría tanta aceptación, ya que como se mencionó antes el poder se adquiere de otra forma, a través del conocimiento.

    Otra definición sobre lo que significa poder la tiene el periodista y economista Joaquín Estefanía, quien afirma que "el poder es potestad, poderío, prepotencia, preponderancia, dominio, mando, privilegio, pero ante todo es superioridad, ya que argumenta que todo poder es una conspiración contra el débil." Esta definición se podría ajustar un poco más a la definición de poder en la posmodernidad, ya que definitivamente sí se da una conspiración (como él mismo llama) en contra del débil. Sin embargo, el débil en esta caso no es precisamente aquel que no tenga fuerza o riqueza, sino quien no cuente con las herramientas para apoderarse de la información, y que no tiene más remedio que dejarse llevar por lo que la "cultura de masas" le impone a través de los medios de comunicación.

    A partir de la globalización se habla de que el poder ha perdido su carácter jerárquico; actualmente es horizontal y se le representa en forma de "red". Este tipo de poder ya no es autoritario, sino que se ha vuelto manipulador. Se puede observar que esta afirmación tiene mucha relación con lo que se mencionaba anteriormente, el poder ya no viene heredado verticalmente, sino más bien se extiende a todos aquellos que logren alcanzarlo.

    Para lograr alcanzar este poder horizontal se requiere de la capacidad de jugar con las apariencias y con las emociones, se trata de "parecer" justos y decentes, agradables y sutiles pero astutos. En el juego del poder no se mide al hombre por sus intenciones sino por el efecto de sus acciones.

    Un exponente del posmodernismo, Habermas, plantea que el pensamiento posmoderno se halla inundado de un rechazo de las ideas de universalidad, racionalidad, verdad y progreso propio de la modernidad, lo que convierte al "pos" en un "anti" modernismo. Habermas ataca especialmente a quienes están en condiciones de confundir razón y dominación, en la confianza de que al abandonar la razón nos liberaremos de la dominación.

    Como es común desde la teoría posmoderna siempre caben contradicciones; por un lado se nos dice que el poder si existe y por el otro nos asegura que una palabra impronunciable es jerarquía. La relatividad cultural a la que conduce el posmodernismo sostiene que no existe una autoridad externa legítima y además que cualquier afirmación de poseer el conocimiento es considerado como un acto de imposición de poder y es puesto a un lado como posición de intolerancia.

    James Lacan critica al psicoanálisis y a Freud por apoyar posiciones de poder, el posmodernismo implica el predominio de tendencias de las cuales el psicoanálisis queda a contrapelo pues según Lacan, Freud excluyó lo Real y comenta: “ Quienes se sostuvieron conservando la radicalidad de la falta, lograron que el psicoanálisis despertara enorme interés en el mundo. Quienes creyeron “que sabían” no pudieron lograr que ese interés se conservara... por el contrario, decayó al no ser ya capaz de conmocionar en la medida que se aleja de “decir algo” de alguna verdad.”

    Básicamente el poder desde el punto de vista del postmodernismo se puede definir como la concepción de anti-libertad dado que cuando se tiene poder se tiene al ser humano en un estado de opresión de libertad, es un individuo que no puede expresarse como él es no tiene su concepto de vivir dado que se lo han quitado.

    El que tiene poder es el individuo que no se quiere tener dentro de este pensamiento, sin embargo el poder se puede obtener por medio del conocimiento, el posmoderno alimenta su mente con los medios de información, por lo tanto el que está más informado tendrá la capacidad de poder ejercer su poder, lo importante es ejercerlo desde un punto de vista que no moleste a los demás en su vida cotidiana, creer que el poder sea una forma de dar un consejo para que el otro individuo no se sienta oprimido por esta situación.

    Se debe ver el poder como la comprensión de las ideas entre individuos, que se pueda llegar a un acuerdo, nunca querer oprimir al otro.

    A. Comparación Anarquismo-Posmodernismo

    Al hablar de poder en la posmodernidad, no se puede dejar de comparar con la concepción que tiene la posición anarquista sobre este término.

    La anarquía nace por la opresión de los obreros inmersos en un mundo capitalista y explotador.

    Según la Anarquía el poder es el que hace sucumbir al ser humano en la maldad hacia los demás entes sociales, de hecho la definición de la palabra Anarquía nos da su pensamiento, Anarquía significa, sin soberano, sin gobierno. Se nota que este significado nos atrapa en una vida sin poder, opresión, sin un gobierno, aunque se destaque mucho que no se quiera tener gobierno, también se habla que no se debe tener mandato en forma general, pues el poder corrompe.

    El anarquismo se niega rotundamente a la existencia de un soberano en una sociedad, ya que limitaría la libertad que cada individuo tiene de expresarse libremente, esto al encontrarse bajo el mandato de una persona. Según el anarquismo, cada persona ostenta el poder en sus propias manos, ya que es libre de hacer lo que sus instintos le pidan, claro está sin pasar al grado de libertinaje.

    Para los anarquistas, la falta de soberano no debe traducirse en desorden o caos total, ya que dentro de una determinada sociedad debe existir una cierta organización que le permita a los individuos vivir tranquilamente. Sin embargo, esta organización no está liderada por una sola persona, sino por un grupo de individuos que la integran y que ponen a funcionar la sociedad adecuadamente.

    La visión de poder que se da en el posmodernismo, tiene varias similitudes con esta posición. Para el posmodernismo no debe existir un líder absoluto que ostente el poder, ya que al igual que el anarquismo, considera que el poder está en el acceso al conocimiento, y que cada individuo puede accesar a él, dependiendo de las herramientas con las que cuente.

    B. Liderazgo y Jefatura

    Desde la posición posmoderna los líderes son quienes poseen la información. En el último decenio quienes deseen ser líderes más eficaces han tendido a identificar y mejorar los atributos del liderazgo; es decir, las cualidades interiores o personales que hacen al líder eficaz.

    Los atributos de un buen liderazgo caen dentro de tres categorías amplias: quiénes SON los líderes (principios, motivaciones, rasgos personales, carácter); qué SABEN los líderes (destrezas, habilidades, rasgos); y qué HACEN los líderes (conductas, hábitos, estilos, competencias).

    Los líderes no solamente generan dedicación individual sino también capacidad organizacional. La capacidad organizacional se refiere a los procesos, prácticas y actividades que crean valor para la organización. Los líderes tienen que ser capaces de traducir el rumbo organizacional en las directivas, la visión en práctica y el propósito en proceso.

    A todo líder lo identifican una serie de atributos que contribuyen a él, como honestidad, capacidad de inspirar, imparcialidad, capacidad de apoyar a otros. Los líderes de carácter viven los principios practicando lo que predican; poseen y generan en los demás una imagen positiva de sí mismos y exhiben capacidad cognoscitiva y encanto personal en alto grado.

    Para ser líder se deberá tener, entonces, las siguientes cualidades:

    B.1. Inspirar confianza.

    B.2. Poseer carácter e integridad.

    B.3. Ser una persona compenetrada de la ética organizacional, que además de querer y saber

    vivir, posea las virtudes de humildad, sensibilidad y austeridad.

    B.4. Sin ser "técnico", conocer perfectamente los resultados que se pueden lograr a través de las tecnologías específicas que dominan sus liderados.

    • B.5. Concentrar sus fuerzas en lo que es importante.

    • B.6. Ser una persona capaz de corregir rápidamente sus errores.

    • B.7. Ser una persona informada, porque debe estar permanentemente siguiendo, evaluando y juzgando, con sus liderados, los resultados obtenidos por éstos en sus respectivos trabajos

    VII. Identidad Posmoderna

    A. Personalidad

    La personalidad representa a las propiedades estructurales y dinámicas de un individuo o individuos, las cuales se reflejan en sus respuestas características a las situaciones. Esto significa que la personalidad se refiere a propiedades permanentes de los individuos que tienden a diferenciarlos de las otras personas. 

    La personalidad posmoderna es muy llamativa dado que una persona posmoderna no le importa expresarse entre las personas pues no le importa el que dirán, tiene una forma de reaccionar ante los demás pues el posmoderno no cree en lo que creen los demás, no tiene como discutirle a otra persona, sino más bien la ignora, pues de echo es una persona que critica a toda costa las cosas de la vida, ve la realidad de las cosas pero la relaciona con el destino, todo lo que sucede porque tiene que suceder y nada más.

    Aquí notamos otra contradicción pues un posmoderno no tiene una personalidad de líder pues tampoco cree en un liderazgo, ni en organizaciones para cambiar las circunstancias

    B. La Identidad

    "La identidad cultural de los diversos pueblos en la actualidad se va homogeneizando o generalizando según ciertas pautas comunes en marcha hacia una cultura estandarizada. Este proceso es propiciado por los poderes generadores de nuevas necesidades de consumo, que manejan a su vez los medios de comunicación social y la producción ofrecida."

    La identidad no está dada de antemano: se construye, se aprende, evoluciona. No es algo que nace de una vez y para siempre. El problema de la identidad ha sido quizás el problema esencial de nuestra cultura. La identidad es considerada como la faceta más importante de ciertas luchas tanto pacíficas como violentas. Ha estado presente ante el fenómeno de la modernidad y lo está ante la posmodernidad. La identidad se puede definir como la forma de poder distinguir un individuo que pertenezca a un grupo social de otro. Aquí es importante destacar que la identidad posmoderna no esta bien definida pues los seres posmodernos no se encuentran en grupos relativamente notables en cierta parte del mundo o lugar.

    Las identidades constituidas se deshacen: la crisis de alteridad es crisis de identidad, afirma María Cristina Reigadas. Nos vamos alejando de la época en que las identidades se definían por esencias ahistóricas: ahora se configuran más bien en el consumo, depende de lo que uno posee o es capaz de llegar a apropiarse. Las transformaciones constantes en las tecnologías de producción, en el diseño de los objetos, en la comunicación, vuelven inestable a las identidades fijadas en repertorios de bienes exclusivos de una comunidad étnica o nacional."

    La posmodernidad es una época globalizada, estandarizada, donde se busca un estereotipo de pensamiento, en el cual las personas se encuentren enmarcadas dentro de ciertos patrones de comportamiento, que lleven a formar una nueva identidad mundial.

    La identidad posmoderna se genera de la moda, el posmoderno se viste por ejemplo a la moda, pues total se tiene plata y no se tiene que andar sin ropa, se compra lo que se compra pues eso es lo que está en las tiendas. Es decir, la globalización de la economía está definiendo una identidad más vinculada con los bienes a los que se accede que con el lugar donde se ha nacido.

    Para poder hablar más detalladamente de lo anterior, es necesario dar ciertas definiciones para poder explicar lo que se entiende por ellos. La identidad de un pueblo está dada por "lo que un sujeto se representa cuando se reconoce o reconoce a otra persona como miembro de ese pueblo, que constituiría un sí mismo colectivo.

    La homogeneización es un proceso según el cual dos o más elementos se van configurando según pautas comunes, hasta adquirir la misma naturaleza o género.

    Tras el debilitamiento de la razón y la pérdida del fundamento, el hombre comienza a cuestionarse el sentido de la historia, la verdad y la estructura estable del ser y su sujeto, y a partir de estas reflexiones va elaborando una concepción del mundo que lo rodea y de él mismo radicalmente a aquella existente.

    Se da un proceso de suma individualización que permite al individuo elegir de una variada oferta de valores de tipo moral, ideológico, cultural...; permite confeccionarse a modo de rompecabezas su propia identidad individual.

    Realmente las identidades posmodernas no se pueden distinguir dado que una persona que profesa este pensamiento está sumergido en un mundo el cual lo rodea mucha gente y muchos pensamientos que se diferencian de este, por lo que se tiene que ajustar a un modo de vida el cual lo hace ser de una manera de costumbre de vida por ejemplo en la cual esta persona vive. Cabe destacar que estas personas se comunican o por lo menos ven el mundo desde el punto de vista de los medios de comunicación, aquí se presenta una forma de comunicación virtual con la aparición del Internet. Se puede presentar que las personas se conozcan sin tener contacto visual o por lo menos corporal. Por lo que se indefine o por lo menos es más difícil definir su identidad.

    Un factor que ha resultado determinante en la formación o pérdida de una identidad, ha sido el consumismo que ha venido aumentando en los últimos tiempos. Con el paso del tiempo los hábitos de consumo se van modificando, así como también, la forma de poner el producto en contacto con la gente.

    Los medios de comunicación social y el proceso de globalización influyen en este creciente deseo de consumo de los individuos, y por consiguiente también van formando una identidad colectiva de un pueblo, ya sea creándoles nuevas necesidades y haciéndolos dependientes a éstas.

    El problema de la identidad ha sido quizás el problema esencial de nuestra cultura. Ha estado presente tanto en la época romántica, la moderna y por supuesto la posmoderna.

    En la época romántica se daba una visión del yo, que lo caracterizaba como un individuo pasión, alma, creatividad y moral. El yo estaba guiado, para los románticos, por sentimientos éticos, solidaridad, instintos maternales y aún un cierto grado de placer.

    Desde esta época se puede observar cómo el pueblo tenía una identidad volcada totalmente al rescate de los sentimientos, de la conmoción por el otro, de ayuda al prójimo. Esta visión llevaba al pueblo a actuar de una manera en la cual se pensara en los demás, en cómo iban a afectar nuestras acciones a aquellos que estaban cerca de nosotros.

    Esta visión romántica, sin embargo, se ha deteriorado bastante en nuestro siglo y fue en parte reemplazada por una concepción modernista de la personalidad, según la cual los elementos claves del funcionamiento humano son la razón y la observación.

    Las personas no se guían ya por ideales sublimes sino por una razón más bien práctica. Los modernistas creían que los hombres podían descubrir la esencia del universo y de la misma condición humana.

    El ser humano moderno tenía una identidad muy diferente al romántico. Su identidad se volcaba más a la parte racional del ser humano; sus acciones estaban planeadas de una manera muy práctica, y actúan con los demás, partiendo del supuesto de que todas las personas son a su vez lógicas y prácticas.

    La posmodernidad va dejando atrás las visiones románticas y modernas del yo, y va proponiendo un yo saturado por la gran diversidad de relaciones sociales fomentadas por la tecnología.

    En la época actual, los medios de comunicación han dejado de estar en manos de unos pocos y se han vuelto interactivos, permitiendo que cada persona haga y envíe imágenes en lugar de simplemente recibirlas, como antes.

    Según Alvin Toffler, la consecuencia directa de este proceso es una acentuación de la individualidad, es decir, vamos progresivamente haciéndonos más diferentes unos de otros, y ello por dos motivos: primero, porque al ofrecérsenos una gran diversidad de modelos a los cuales identificarnos, configurará un yo único. Segundo, porque al tener cada uno de nosotros la oportunidad de proyectar su imagen al mundo, pretendemos mostrar aquello que nos diferencia y que nos identifica.

    Esta opinión de Toffler calza muy bien dentro de lo que es la formación de la identidad en la posmodernidad. Al encontrarnos cada uno de nosotros frente a tanta invasión de productos, tanta masificación de las opiniones, ideas y pensamientos, buscamos algo que nos diferencie de los demás, algo que nos haga únicos y que nos permita destacarnos de alguna manera, y no convertirnos en simples robots de aquellos que ostentan el poder y que tratan de manipularnos a su antojo.

    Otro autor que nos habla de la identidad en la época posmoderna es Kenneth Gergen. Él habla de cómo las relaciones sociales han ido cambiando en los últimos tiempos. Por ejemplo hace apenas un siglo el contacto social se circunscribía a un espacio físico inmediato, teníamos contacto diario sólo con nuestros vecinos y seres físicamente próximos, pero hoy ya es distinto: merced a las tecnologías de alto nivel podemos relacionarnos en cualquier momento con cualquier persona de cualquier parte del mundo, con la cual se han multiplicado enormemente las relaciones sociales. Esto impuso nuevas formas de vida, nuevas formas de vincularse. El hogar familiar ya no es más aquel nido estructurado sobre la base de relaciones íntimas, sino un lugar de paso, donde cada uno mantiene relaciones con el exterior, con amigos, con usuarios lejanos de Internet.

    De aquí podemos comparar estas dos posiciones, resaltando que Toffler afirmaba que en la era posmoderna el ser humano se tornaba más individualista. Gergen en cambio dice que el ser humano va perdiendo cada vez más su individualidad por obra de las tecnologías. Sin embargo aunque pareciera haber una contradicción entre los diferentes puntos de vista, no la hay, ya que ambas constituyen fases de un mismo proceso: en la medida en el que el yo se satura de nuevas y variadas experiencias siente que se desestructura, que se desintegra y que pierde así su identidad, su individualidad, pero, en una segunda fase, este mismo yo saturado da paso al yo configurador de Toffler, que intenta poner un orden en aquella confusión.

    Los yoes romántico y moderno sí eran individualistas, aunque cada cual a su manera: habían logrado consolidar una identidad, bien basada en la pasión o bien en la razón.

    El yo posmoderno aún está buscando esa identidad, persiguiendo una individualidad pero al mismo tiempo criticando y renegando del individualismo romántico y moderno. El yo posmoderno se opone a estos intentos dogmáticos por definir la esencia humana proponiendo el libre juego del ser, es decir, no dando definiciones a priori de lo que es el hombre sino dejando que éste se desarrolle libremente, pudiendo así encontrar todas sus potencialidades y posibilidades de crecer.

    Esta actitud determinante del yo posmoderno, se ha visto reflejado en muchos casos que últimamente están cobrando mucho auge, como es la formación de la identidad de los grupos minoría que se forman en nuestro país. Por ejemplo los homosexuales y feministas.

    C. Feminismo Posmoderno y Teoría del Género

    El feminismo posmoderno es una tendencia que va de acuerdo con la concepción de mujer según Julia Kristeva, quien dice que: “ mujer no representa tanto un sexo como una actitud.”

    Paulo Navarro comenta que cuando habla de feministas posmodernos se refiere a toda persona (hombre o mujer) con capacidad de distinguir que algo está cambiando, que una filosofía dominante impuesta desde hace siglos se está modificando porque ya no funciona, porque se ha desmitificado o deconstruído.

    C.1. El posmodernismo y la teoría Lesbiana y Gay

    En los años 80 se produjo un repentino entusiasmo por la obra de los Maestros del postmodernismo -Lacan, Foucault y Derrida- seguido de su incorporación a la teoría feminista. En el momento actual el proyecto de elaborar una teoría lesbiana independiente aparece como una empresa extravagantemente separatista. las estrellas de la nueva teoría lesbiana y gay, Judith Butler y Diana Fuss, son ambas mujeres, aunque se dedican a reciclar un feminismo fundamentado en los Maestros postmodernos - en su mayoría gays - que no hiera la sensibilidad de los gays.

    La versión del género introducida por la teoría lesbiana y gay es muy distinta del concepto de género de las teóricas feministas. Se trata de un género despolitizado, aséptico y de difícil asociación con la violencia sexual, la desigualdad económica y las víctimas mortales de abortos clandestinos. Quienes se consideran muy alejadas de los escabrosos detalles de la opresión de las mujeres han redescubierto el género como juego. Lo cual tiene una buena acogida en el mundo de la teoría lesbiana y gay porque presenta el feminismo como diversión, y no como un reto irritante.

    Fijémonos ahora en las autoridades que cita la nueva teoría lesbiana y gay. En las notas de su introducción, Diana Fuss cita a Judith Butler, a Lacan, en varias ocasiones a Derrida, a Foucault y a nueve varones y dos mujeres más. Lo cual resulta verdaderamente sorprendente, teniendo en cuenta el importante corpus de teoría feminista lesbiana original que podría servir de fuente de inspiración; pero estas obras no existen para la nueva teoría lesbiana y gay.

    En la raíz del problema de género en la nueva teoría lesbiana y gay se halla la idea del predominio del lenguaje y de las oposiciones binarias que procede de Lacan y de Derrida.

    El lenguaje adquiere una importancia sin par. Mientras que otras feministas consideran el lenguaje un factor importante, en medio del panorama de otras fuerzas opresoras que perpetúan la opresión de las mujeres - las restricciones económicas, la violencia de los varones, la institución de la heterosexualidad -, para las nuevas abogadas posmodernas de la teoría lesbiana y gay el lenguaje se convierte en un asunto primordial. El lenguaje actúa a través de la construcción de falsas oposiciones binarias que controlan misteriosamente la manera de pensar y, por consiguiente, de actuar, de las personas.

    La feminista posmoderna excluye a los varones del análisis. El poder se convierte, en sentido foucaultiano, en algo que navega por ahí en perpetua reconstitución, sin cometido real y sin conexión alguna con las personas reales. Por consiguiente, Judith Butler adscribe el poder a ciertos "regímenes", afirmando que "los regímenes de poder del heterosexismo y del falogocentrismo persiguen su propio crecimiento por medio de una constante repetición de su propia lógica...":

    El hecho de que la heterosexualidad esté en un continuo proceso de autointerpretación es prueba de que se encuentra en peligro constante: "sabe" de su posibilidad de desaparecer.


    Dentro de la teoría feminista, Butler denomina movimiento "pro-sexualidad" a aquel que mantiene que la sexualidad "se construye siempre en términos del discurso y del poder, entendiendo parcialmente el poder como ciertas convenciones culturales heterosexuales y fálicas". Corrobora esta definición y afirma que resulta imposible construir una sexualidad en los márgenes de estas convenciones:

    Si la sexualidad es una construcción cultural dentro de las relaciones de poder existentes, el postulado de una sexualidad normativa "antes", "en los márgenes" o más allá" del poder representa una imposibilidad cultural y un sueño políticamente inviable que demora la misión concreta y actual de repensar todas las posibilidades subversivas, para la sexualidad y para la identidad, dentro de los propios términos del poder.

    El feminismo en su acepción habitual ha sido declarado imposible. La teoría posmoderna se utiliza para apoyar el proyecto libertario sexual y, más concretamente, el sadomasoquista.
    La mayoría de las feministas de los setenta y de los ochenta probablemente se habrán encontrado luchando en favor de la eliminación del género y de la sexualidad falocéntrica.

    Las ideas de las obras de los Maestros postmodernos resultaron sumamente convenientes porque constituían una justificación intelectual y permitían anular y ridiculizar desde la academia cualquier objeción feminista. En Gender Trouble, Judith Butler demostró que el psicoanálisis de antaño, representado por un trabajo de Joan Riviere de 1929 sumado a unas declaraciones de Lacan sobre la femineidad como mascarada y parodia, pueden ser utilizados por las nuevas teóricas lesbianas y gays procedentes de los estudios culturales en defensa de la representación de la femineidad por las lesbianas como una estrategia política. En otro lugar esta representación es llamada "mimetismo", aunque esta palabra no se adecua al análisis de Butler, dado que sugiere la existencia de un original que es mimetizado.


    Según Luce Irigaray, mimetizar significa "asumir el rol femenino a propósito... para rendir "visible" a través de un juego de repeticiones algo que debe permanecer invisible..." Representar lo femenino significa "decirlo" con ironía, entre comillas, como hipérbole, o como parodia. En el mimetismo y también en el campo, la ideología se "hace" con el fin de deshacerla y así aportar nuevos conocimientos: que el género y la orientación heterosexual que debe asegurarlo son antinaturales e incluso opresivos.

    Sin embargo, Tyler critica esta idea. Apunta que si todo género es una máscara, resultará imposible distinguir la parodia de lo "real". Lo real no existe. De esta manera el potencial revolucionario se pierde.

    Aparte del retorno al género, hay otro aspecto del enfoque posmoderno de los estudios lesbianos y gay que no parece constituir una estrategia revolucionaria claramente útil. Se trata de la incertidumbre radical respecto de las identidades lesbiana y gay. Tanto los teóricos como las teóricas adoptan una postura de incertidumbre radical. Para los incipientes movimientos lesbiano y gay de los setenta, nombrar y crear una identidad eran cometidos políticos fundamentales. Nombrar tenía una especial importancia para las feministas lesbianas conscientes de cómo las mujeres desaparecían normalmente de la historia de la academia y de los archivos, al perder su nombre cuando se casaban. Éramos conscientes de la importancia de hacernos visibles y de luchar por permanecer visibles. La adopción y la promoción de la palabra "lesbiana" eran fundamentales, ya que establecían una identidad lesbiana independiente de los varones gays.

    Las teóricas y los teóricos del postmodernismo lesbiano y gay tratan de erradicar incluso el concepto de una identidad temporalmente estable. Tras este empeño subyacen tres cuestiones políticas.

    La primera es el miedo al esencialismo. No parece ser una cuestión especialmente relevante para las feministas lesbianas, que son conscientes de que su identidad lesbiana es una construcción social deliberada y claramente intencional. Preocupa, sin embargo, sobre todo a los teóricos gays masculinos que se hallan ante una cultura gay mucho más arraigada en la idea de una identidad esencial que la lesbiana. La preocupación de los varones gays por el esencialismo ha derivado en una especial atención de la teoría gay y lesbiana a este tema.

    Las autoras posmodernas anuncian con fervor la importancia de su postura subjetiva, no vayan a pensarse que aspiran a la universalidad o a la objetividad. Las feministas lesbianas desarrollaron su propia versión - al margen de la teoría posmoderna- en los boletines informativos de los ochenta, donde se encuentran descripciones del siguiente orden: "ex-hetero, clase media, obesa obsesa, fem, libra", etc; sin embargo, habitualmente estaban seguras de todos estos aspecto de su identidad.

    La teoría lesbiana actual está generalmente menos dispuesta a cuestionar o abandonar la idea de una "esencia lesbiana" junto con la política de identidad que deriva de esta esencia común. Por otra parte, los teóricos masculinos gays han refrendado rápidamente la hipótesis construccionista social que proclama Foucault, y han desarrollado unos análisis más escrupulosos referentes a la construcción histórica de las sexualidades.

    Podríamos ir un poco más lejos diciendo que las lesbianas y los gays se construyeron en realidad de manera harto diferente; sin embargo Fuss, con su enfoque consecuentemente lesbiano y gay, opta por mostrarse más suave y cautelosa. Si tenemos en cuenta que las teóricas y los teóricos del posmodernismo se consideran campeones de la atención a la "diferencia", resulta interesante observar que en algunas ocasiones se muestren tan tímidos a la hora de constatar estas diferencias políticamente construidas entre hombres y mujeres. Fuss parte de la teoría gay masculina y de los varones posmodernos en general, y mientras que no cita a Faderman, su bibliografía lista diecinueve títulos de Derrida.

    La teoría lesbiana y gay posmoderna logra que quienes no quieren más que utilizar las herramientas del sexismo y del racismo, se sientan no sólo en su derecho, sino además revolucionarios. Los Juegos de roles lesbianos, el sadomasoquismo, la masculinidad del varón gay, el travestismo, el mimetismo, de todo esto puede extraerse todo el placer y el provecho del sistema de la supremacía masculina, en el que el sexo es y no podrá ser nada más que desigualdad de poder. Entonces, disfrutar del statu que se denomina "parodia", para que los intelectuales alarmados por su propia excitación puedan sentirla tranquilamente.

    A las teóricas lesbianas y gays posmodernas que no quieran conseguir su placer de esta manera, las ideas de la incertidumbre radical, de la naturaleza utópica o esencialista de todo proyecto de cambio social, les proporcionan el soporte teórico de un liberalismo y de un individualismo caballeroso

    Estos grupos han vivido mucho tiempo reprimidos por la misma sociedad, impidiendo que se expresen libremente, por lo tanto han vivido toda su vida con una identidad falsa, que no les ha permitido explotar el yo posmoderno que llevan dentro. Por esto ahora han encontrado la oportunidad de desarrollarse libremente aceptando su condición sin prejuicios, y simplemente siendo ellos, y creciendo como personas. Resulta difícil saber si realmente con su condición han encontrado su identidad, sigue escondida, o más bien han pasado ya a ser parte de la identidad colectiva que todos tenemos, producto de la globalización de nuestras vidas.

  • La búsqueda de identidad del pueblo

  • “Cuando no es la identidad cultural la que encierra al individuo en su ámbito cultural y, bajo pena de alta traición, le rechaza el acceso a la duda, a la ironía, a la razón y la vida guiada por el pensamiento cede suavemente su lugar al terrible y ridículo cara a cara del fanático y del zombie.”

    Alain Finkielkraut

    Como respuesta a esta pérdida de identidad, se han buscado alternativas para recuperar algo de lo que se ha perdido. Existen varias medidas que se han tomado al respecto; el fortalecimiento del nacionalismo es una de ellas, en Costa Rica vemos por ejemplo la reconstrucción de la Casona de Santa Rosa como una respuesta a esta crisis y evitar perder lo nuestro. El proteccionismo a la economía regional. Hoy en día vemos cómo los políticos toman más en cuenta al productor nacional y buscan planes para brindarles mayores beneficios.

    Estos actos, que tal vez a nuestra simple vista no son muy importantes, han sido muchas veces tomados como respuesta a esta crisis de identidad que está viviendo el pueblo costarricense, por eso es importante conocer nuestra propia historia, reconocer nuestros valores, practicar la autoestima y la dignidad, para poder así tratar de recuperar un poco de nuestra identidad nacional.

    VIII. La Comunicación

    Todos nos comunicamos; comunicarse es una de esas experiencias sustancialmente humanas que asumimos como parte de nuestra cotidianeidad. Al pensar el fenómeno de la comunicación, frecuentemente nos encontramos con definiciones confrontadas, nociones contradictorias y bastantes significativas.

    Comunicarse suele ser vincularse, poner en común, compartir, intercambiar. La comunicación asumida como un trabajo específico o relacionado con alguna otra tarea de tipo cultural suele transformarse en producción de mensajes, manejo de instrumentos o canales, estrategias informativas.

    La comunicación representa el espacio donde cada cual pone en juego su posibilidad de construirse con otros. Pero transformada en práctica social, comenzó a constituir una esfera de preocupaciones para analistas de diversos orígenes.

    La comunicación es importante para los posmodernos dado que sin ella este pensamiento no se podría definir, pues es indispensable que la comunicación exista tanto entre las personas que piensan igual como las que pertenecen a otra forma de pensamiento, pues solo así se refuerza este pensamiento, en lo que respecta la comunicación y sus medios como la cibernética sirven de mucho para florecer nuevas ideas.

    Según Gianni Vatimo: "La llamada sociedad posmoderna es la sociedad de la comunicación. En el nacimiento de una sociedad posmoderna desempeñan papel determinante los medios de comunicación; esos medios caracterizan a una sociedad como una sociedad más trasparente, más consciente de sí, más ilustrada, incluso caótica.”

    Cuando hablamos de globalización, se piensa en un conjunto de relaciones económicas, políticas y sociales que han modificado sustancialmente a la estructura mundial. Donde más claramente se nota estos cambios son en los medios masivos de comunicación, a partir de los avances tecnológicos y de las modificaciones políticas y económicas operadas en el nivel mundial.

    A partir de este punto es donde se establecen los estereotipos en la vida humana, ya que los medios de comunicación transmiten mensajes masivos, uniformados, estandarizados, los cuales son recibidos en el mismo momento por personas diferentes, en distintos lugares del mundo. Hoy los mensajes son generados y manipulados en un lugar ajeno, por personas ajenas y con intereses ajenos a la comunidad que los recibe. De tal forma que poco a poco estas personas van logrando crear también necesidades ajenas a las que nosotros necesitamos.

    Para resguardar nuestra identidad social y cultural dentro de un mundo globalizado, es necesario comprender y utilizar los avances tecnológicos de acuerdo a nuestros propios intereses.

    A. Los medios de Comunicación

    Más allá de la caracterización sobre la posmodernidad, existen rasgos comunes a todas las descripciones y que permiten denominar la cultura actual con características diferentes a una visión clásica de la modernidad. Uno de esos elementos es el gran desarrollo de los medios de comunicación en las últimas décadas que ha llevado a muchos a denominar la época actual como la de la "cultura de la comunicación". Los modernos medios de comunicación son, en gran medida, los responsables de las transformaciones y los causantes de los fenómenos con los cuales se caracteriza la cultura posmoderna. Desde la visión de la posmodernidad como fin de los grandes relatos hasta la posmodernidad como debilitamiento del pensamiento racional y la visión de una historia unitaria y lineal, el papel de los medios de comunicación ha sido el medio de batalla fundamental a la hora de las argumentaciones.

    A principios de siglo Teodor Adorno pensó que los medios de comunicación social tendrían el efecto de producir una homologación general de la sociedad, haciendo posible e incluso favoreciendo la formación de dictaduras y gobiernos totalitarios capaces de ejercer un control exhaustivo sobre los ciudadanos por medio de una distribución de eslóganes publicitarios, propaganda, concepciones estereotipadas del mundo" (p. 190 de su obra).

    Hoy en día, los medios de comunicación constituyen una herramienta persuasiva que nos permiten mantenernos en continua comunicación con los distintos sucesos sociales, económicos y políticos tanto a escala nacional como internacional. Las sociedades actuales se encuentran permanentemente en comunicación; en ellas, los medios tienen el poder de conectar las partes dispersas en el todo, desempeñando un papel importante en la promoción cultural y la formación. Su acción aumenta en importancia por razón de los progresos técnicos, de la amplitud y la diversidad de las noticias transmitidas.

    Un medio de comunicación es una institución que produce y reproduce una realidad pública, y como dice Mauro Wolf en su obra "Los efectos sociales de los medios", los medios no solo transmiten información sobre la realidad sino que también plasman la realidad del contexto social político. Estos especialistas pueden transformar cualquier hecho real en la materia prima de un mensaje-noticia, en un producto, que a su vez pasa a alimentar el circuito de la información.

    La noticia tiene un sentido y una función que se ha hecho imprescindible como vínculo social e intersubjetivo que permita reunir la pluralidad cultural de los miembros de una comunidad, y generar una historia común, una identidad y un discurso propio en el que puedan reconocerse.

    "Los medios masivos de comunicación son un poderoso medio de socialización, a la par de la familia, la escuela y el trabajo, que modelan los sentimientos, las creencias, entrenan los sentidos, ayudan a formar la imaginación social; en síntesis, fomentan y facilitan ciertas construcciones mentales por donde transcurre luego el pensamiento de las personas en sociedad".

    Si algo caracteriza al siglo XX ha sido el desarrollo de la "cultura de masa", a través de los medios de comunicación que han vivido una expansión enorme y paralela al perfeccionamiento del capitalismo, convirtiendo a la noticia, en esencia una pieza breve y sesgada de la actualidad, en el centro de la cultura popular. Periódicos, radio y más tarde la televisión, se han convertido en los creadores de debates, de ideas compartidas, de cohesión social, de mitos y leyendas.

    Los medios de comunicación social pueden engendrar cierta pasividad en los usuarios, haciendo de éstos, consumidores poco vigilantes de mensajes o de espectáculos. Los usuarios deben imponerse moderación y disciplina respecto a los mass-media. Han de formarse una conciencia clara y recta para resistir más fácilmente a las influencias de los medios.

    Los medios, por un lado, pueden contribuir a la formación de individuos más cultos, mejor informados y más libes, pero por el otro, pueden servir para la difusión de una cultura superficial, rutinaria y consumista; pueden ser utilizados para entender e ilustrar nuestros ocios, como también para alienarnos con falsos señuelos, falsos ídolos y falsas doctrinas.

    La existencia de una sociedad dividida en muchas subculturas, caracterizada por el pluralismo cultural popular avala tal premisa. Para ellos, los medios reflejan los cambios que van ocurriendo en una sociedad en un momento dado, pueden agregar ímpetu y acelerar las cosas, pueden establecer agendas, pueden incrementar el conocimiento, pero nunca tienen ni tendrán la capacidad de uniformar a la gente.

    En las sociedades contemporáneas es cada vez mayor la importancia de los medios masivos y en particular de la televisión. Esta influye sobre la forma de actuar o de pensar de las personas, logra modificar la forma en que los hombres conocen y comprenden la realidad que los rodea.

    "Los medios de comunicación son parte esencial de los procesos de comunicación de las sociedades modernas; aportan interpretaciones de la realidad, que son internalizadas por sus públicos. Las personas pueden desarrollar construcciones subjetivas y compartidas de la realidad a partir de lo que leen, escuchan o miran. Por tanto, su conducta personal como social, puede ser moldeada en parte por las interpretaciones aportadas por los medios ante hechos y temas sociales, con respecto a los cuales los individuos tienen pocas fuentes alternativas de información".

    El proceso de socialización es continuo y generalmente pasa en forma inadvertida. Ni el contenido ni los métodos de socialización son inmunes a la influencia de los medios, la influencia y el cambio pueden tener lugar y de hecho lo tienen. "Los medios de masa, se pueden admitir, constituyen sólo un aspecto del proceso, pero sería muy sorprendente en verdad si no desempeñaran un cierto papel en la modelación de nuestras actitudes respecto de la vida, de nosotros mismo y de los demás".

    Los medios en general, se han convertido en la primera escuela, tanto para la creación y la legitimación de formas de conducta, la visión que el hombre tenga de sí mismo, la sociedad y sus relaciones.

    En la sociedad de los medios de comunicación se abre un propósito de emancipación que cuenta a su base con la oscilación, la pluralidad, y en definitiva la erosión del principio mismo de realidad. Vattimo, refiriéndose a Federico Nietzsche, considera que una realidad ordenada gracias a la razón sobre un único principio es apenas un mito que asegura la humanidad en estado primitivo y bárbaro.

    El efecto positivo de los Medios de Comunicación social es el de estimular el desarrollo de ese elemento emancipador. Pero ¿de qué nos estamos emancipados? : nos liberamos de la idea de una racionalidad central, y se entra a participar de una corriente donde el mundo estalla en una multiplicidad de racionalidades. Este carácter emancipador de la comunicación puede convertirse en un rasgo mayúsculo del conocimiento, unido a esa capacidad de fascinación que se desea evidenciar. Si la búsqueda de emancipación se hace más aguda con la modernidad, la comunicación ofrece la posibilidad de que sus objetos de estudio y sus medios entren en diálogo.

    No es casual que los debates en comunicación hayan vivido un proceso histórico que circula por la comunicación como una ciencia humana, pasando por el método positivo y empírico, hasta llegar al mundo actual, donde las ciencias de la comunicación se integran a partir de toda una serie de objetos supuestamente coherentes entre si, tanto en los paradigmas que la fundamentan como en los problemas y temas que abarca.

    IX. Valores y Principios

    Los valores son reglas de origen social a partir de las cuales cada individuo rige su vida. El aprendizaje de los valores y de las actitudes en un proceso en el que influyen distintos factores y agentes. Aunque los rasgos de personalidad y el carácter de cada cual es decisivo, también desempeñan un papel muy importante las experiencias personales previas, el medio donde crecemos, las actitudes que nos transmiten otras personas significativas, la información y las vivencias escolares, los medios masivos de comunicación etc.

    Actualmente, los valores y principios por los que se guiaba nuestra sociedad no son los mismos. Más aún, no son ni siquiera enseñados por los mismos organismos que antes. Hoy los medios masivos de comunicación llegan a la mente de los niños mucho antes de que éstos vayan a la escuela. La enseñanza de los valores por parte de la familia, cada vez va disminuyendo, y esto se da debido a que los padres se encuentran lejos de sus hijos, ya que se encuentran trabajando o realizando otro tipo de actividades.

    La culpa de que esto suceda no es del seno familiar. Si bien es cierto los padres deben estar muy pendientes de la educación que reciben sus hijos, hoy en día nos encontramos dentro de un mundo que nos imposibilita cada vez más esta labor, los padres necesitan salir a competir por el futuro de sus hijos y de ellos mismos, ya que necesitan tener las herramientas suficientes para poder adquirir un poquito de conocimiento que le permita al menos adquirir un tanto de poder dentro de esta sociedad.

    De esta forma es que la familia bombardeada por tanta televisión, tanta Internet, y tantos medios masivos de comunicación, se deja llevar por los valores impuestos por esta nueva cultura masificada, en donde lo importante es estar a la moda con lo "último" que ha salido al mercado, pero que desgraciadamente cuando lo hemos adquirido vemos que esto "último", ha pasado a ser viejo, porque algo "novedoso y mejor" ha pasado a ocupar su lugar.

    Básicamente los valores que profesa el pensamiento posmoderno son de carácter lógico con su pensamiento, no se ajustan a los valores que ha formado o ha puesto a la disposición de todos la sociedad actual, dado que esta está llena de diferentes ideologías.

    La posmodernidad descubre por si sola y se dedica a criticar los valores y principios actuales,

    genera sus valores y principios viendo de una manera lógica y razonable como se pueden tratar a las demás personas, y como debe de ser el comportamiento ante éstas

    X. Actitudes y aptitudes

    A. Actitudes

    La manera de actuar del posmoderno es de carácter sencillo pero de manera grande se sabe defender dado que no permite contradicciones que los demás puedan hacerle comunicar defiende su pensamiento basándose en que estamos aquí porque somos como cualquier ser que debe nacer, crecer, reproducirse y morir.

    B. Aptitudes

    Los posmodernos son aptos para crear alrededor de ellos un buen flujo de información dado que ellos viven de la información, es necesaria para éstos.

    Los posmodernos tienen la aptitud de manejar los medios de comunicación pues es indispensable para ellos tener bastante información, tienen la aptitud de vivir aislados de las demás personas, por lo que se dijo anteriormente, se crea una forma de vida virtual.

    XI. La Percepción

    La percepción, como vinculo vital de la conexión del hombre al mundo, incluye al sujeto como perceptor, al acto de percibir y el contenido de lo percibido. El sujeto humano perceptor visualiza al mundo como campo vivido, horizontal y este acto une al sujeto con lo percibido. Lo percibido, sus contenidos, que resultan del tal acto, afecta la influencia del sujeto en el mundo. Obtenemos así que la percepción es un todo reflexivo, integral que abarca, al perceptor, el acto de percibir y el contenido de lo percibido.

    La percepción como todo reflexivo e integral es el contexto inminente de localizar todo contenido de pensamiento. Esta percepción está limitada por tres factores, a saber:

    • Los medios de comunicación que encuadran y facilitan la percepción.

    • La jerarquía de los sentidos, es decir, el oído, el tacto, el olfato, el gusto y la vista, que estructura el sujeto como perceptor encarnado.

    • Las presuposiciones epistémicas que ordenan el contenido de lo percibido.

    Estos tres factores están relacionados e interactúan. Este conjunto constituye un campo de percepción. Estudios recientes revelan que los medios de comunicación, la jerarquía de los sentidos

    y las presuposiciones epistémicas cambian con el correr del tiempo.

    El nuevo campo perceptual, de nuestro siglo, está constituido por una cultura electrónica, por la extrapolación del sonido y de la vista, y la sistematización sincrónica de oposiciones binarias y diferencias sin identidad. La revolución perceptual destruyó el campo ideal de una personalidad individual así como la causalidad freudiana del subconsciente ya no es viable, pues la persona contemporánea tiene mucho menos de personalidad integrada, mucho menos de interior. El campo de la percepción determina el contenido del conocimiento. Pero ese campo es, a su vez, determinado por la sociedad como totalidad, pues el conocimiento dentro de la totalidad es mucho más que una simple ideología o superestructura. Es la conciencia intencional dentro del campo perceptual. Pero los medios de comunicación, la jerarquía de los sentidos, y el orden epistémico que constituyen ese campo están determinados por la estructura de la totalidad.

    XII. Motivación

    El elemento revolucionario constitutivo de la posmodernidad, fue la ruptura con la visión teológica del orden social y la constitución de una nueva cosmovisión en la que la razón como atributo del hombre, fue un instrumento de transformación del mundo, por el cual puede pensarse a si mismo en su subjetividad.

    El lenguaje que estaba cargado de ambigüedades y desprovisto de certezas racionales comienza, con Newton y Kant, a depurarse, otorgándosele formas más transparentes, ordenándolo alrededor de lo matemático (lenguaje científico).

    El sujeto pasa a ser conciencia, despojando a las cosas de cualquier misterio.

    En el Renacimiento, la idea de perfección esta en el pasado que hemos extraviado (Nietzsche retomará esta idea a lo largo de su obra). Para los pensadores de las luces la idea de perfección está adelante. La naturaleza le otorga al hombre conocer cada vez más la naturaleza humana buscando la perfección.

    Para la posmodernidad no hay límites. El hombre es el que construye el sentido de su propia acción. No hay una previa articulación externa. Los individuos son dueños de su propia acción.

    La motivación de vivir para un posmoderno es querer pasar la vida sin tener que preocuparse de nada, vivir en un mundo de opresión tecnológica como lo son los tiempos actuales, en el que la gente vive atrapada en un mar de tecnología, y que por consiguiente vuelve al individuo un ser oprimido y estresado, pero que no sucede con el posmoderno, este individuo que no se sorprende de lo que sucede a su alrededor, pues las cosas pasan porque tiene que pasar, y la gente no entiende que le están robando su libertad, se están quedando oprimidos.

    Por lo que lucha el posmoderno es por su libertad, es lo más sagrado que puede tener en su vida, pues de este pensamiento es que nace esta ideología.

    Toda la información que inunda la mente de este tipo de persona por los medio de comunicación es sumamente exagerada y por eso se alientan a saber como piensan los demás individuos que forman esta sociedad para poder criticar y formular nuevas ideas que defiendan su teoría.

    XIII. Conclusión

    El posmodernismo es producto de lo que Marc Augé (1994) define como las tres figuras del exceso:

    A. La superabundancia de acontecimientos del mundo contemporáneo y su consecuente dificultad de comprensión y asimilación.

    B. La superabundancia espacial con medios de comunicación (transportes, satélites...) que acortan distancias que conducen a la aldea global. Y donde la imagen manipulada posee un poder peligrosamente superior a la información portadora.

    C. El proceso de suma individualización que permite al individuo elegir valores -tanto del pasado como presentes- de tipo moral, ideológico, cultural..., confeccionarse a su modo su propia identidad individual.

    A nuestro parecer la teoría posmoderna es un poco contradictoria ya que plantea ideas de libertad individual y de no pertenencia a una organización, cuando sabemos que el solo hecho de compartir una ideología nos hace parte de un grupo.

    Además critica a la ciencia y la cataloga como un peligro para la raza humana cuando en numerosas ocasiones gracias a ella se ha podido mejorar la calidad de vida y las facilidades de los seres humanos.

    En comparación con el anarquismo el posmodernismo disfruta de una libertad desde el punto de vista político, se desea tener bienes, territorios de una manera en la que el gobierno no pueda interponerse con su burocracia. Los dos piensan que si hay mandato hay esclavitud.

    El análisis y la crítica que realiza constantemente hacia el entorno es en vano ya que de nada nos sirve sentarnos a analizar los problemas que estamos viviendo y a señalar las causas de los mismos, si no se quiere mejorar en algo el mundo en que vivimos.

    XIV. Anexos

    Algunos exponentes del posmodernismo y posmodernidad

    Andreas Huyssen
    Beatriz Sarlo

    Félix Guattari

    Fredic Jamenson

    Gilles Deleuze

    Jaques Lacan

    Julia Kristeva

    Jean Baudrillard

    Jürgen Habermas
    Luis Baggilini

    Quesada, Rodrigo. "El Siglo de los Totalitarismos".EUNED. Pág.:127.

    Enciclopedia Microsoft Encarta.

    www.monografías.com.

    Idem.

    www.monografías.com . La Globalización y sus efectos.

    Villoro, Luis. "Estado plural, pluralidad de culturas". Paidós, México.

    www.monografías.com . El yo en la Posmodernidad.

    1

    2




    Descargar
    Enviado por:Karian Leitón A
    Idioma: castellano
    País: Costa Rica

    Te va a interesar