Música
Piano
Colegio Cahuala
Departamento de música
INTRODUCCIÓN
El Piano es un instrumento de cuerda con un 
teclado derivado del clavicémbalo y martillos 
y cuerdas derivados del dulcémele. Difiere de 
sus predecesores sobre todo en la utilización 
del sistema del martillo impulsado hacia las 
cuerdas por la tecla, que permite al 
intérprete modificar el volumen mediante la 
pulsación fuerte o débil de los dedos. Por 
esta razón el primer modelo (1709) se 
denominó gravicembalo col piano e forte 
('clavicémbalo con suave y fuerte'). Fue 
construido por Bartolomeo Cristofori (1655-
1731), fabricante de clavicémbalos florentino, 
al que se considera inventor del instrumento 
en 1698. Dos de sus pianos han llegado 
hasta nuestros días. La caja de uno, fechada 
en 1720, está en el Museo Metropolitano de 
Arte de Nueva York; la otra, de 1726, está en 
el Museo de la Universidad Karl Marx de 
Leipzig.
Desarrollo
Desde la antigüedad hasta el piano de 
Cristofori
Para conocer el origen del instrumento que 
nos ocupa debemos remontarnos a la 
consideración de algunos otros instrumentos 
musicales más antiguos de los cuales el 
piano es, de alguna manera, una evolución.
El más antiguo instrumento musical que inicia 
la línea evolutiva que culmina en lo que hoy 
conocemos como piano es la Cítara. Este 
instrumento es originario de Africa y del 
sudeste de Asia y se remonta a la Edad de 
Bronce (alrededor del año 3000 a.C.). 
Consistía en un conjunto de cuerdas 
dispuestas a cierta altura sobre una 
pequeña tabla, que eran puestas a vibrar 
mediante las uñas de los dedos o algún otro 
elemento punzante. 
Utilicemos un poco nuestra imaginación y 
tratemos de pensar en un instrumento 
musical que sea como una gran cítara, con 
una gran cantidad de cuerdas que, en lugar 
de ser puestas a vibrar por las uñas de los 
dedos o por algún elemento punzante, son 
puestas a vibrar mediante la percusión de un 
pequeño martillo sobre las mismas. El 
instrumento imaginado será un piano.
Un instrumento posterior a la cítara, aunque 
con ligeras variaciones, fue el Monocordio. Su 
construcción se basaba en la colocación de 
una sola cuerda (de allí su nombre: 
Mono=una Cordio=cuerda) 
considerablemente más larga que las de la 
cítara, vibrando sobre una pequeña caja de 
resonancia construida de madera. Sobre 
este instrumento fue que Pitágoras, el 
famoso filósofo griego, realizó sus estudios 
sobre las relaciones entre los intervalos 
musicales, entre otros.
El siguiente paso evolutivo lo constituyó el 
Salterio, un instrumento construido sobre los 
principios de la cítara pero con una forma 
trapezoidal en función de las distintas 
longitudes de sus cuerdas. Poseía una 
rudimentaria tabla armónica y pequeños 
puentes tonales. La forma trapezoidal del 
salterio es la que más tarde se hace 
presente en el diseño de los primeros 
harpiscordios. Una variación del salterio la 
encontramos en el que, siguiendo 
básicamente los mismos principios de 
construcción que el salterio, estaba pensado 
para que sus cuerdas no sean tocadas con 
las manos o con algún elemento punzante 
sino para que sean percutidas.
El piano tal cual lo conocemos hoy en día se 
basa, entonces, en los principios de 
construcción de los instrumentos 
mencionados, cuyas cuerdas no son ya 
tocadas con las manos sino percutidas por 
martillos. 
Hay una serie de elementos constitutivos de 
todos ellos que, si bien han ido variando de 
forma, tamaño y material de construcción, se 
hallan presentes en el piano. Estos 
elementos se pueden resumir en los 
siguientes: un bastidor, esqueleto o 
estructura, un variado número de cuerdas 
tensadas a través de él que vibran a una 
determinada altura de una tabla o caja que 
se ocupa de amplificar su sonido. En los 
instrumentos más antiguos, salvo en el 
dulcimer, estas cuerdas, afinadas 
convenientemente y de muy distintas 
maneras a lo largo de la historia y de las 
regiones geográficas, son tocadas con los 
dedos.
La idea de interponer algún tipo de aparato 
mecánico entre las cuerdas y los dedos, de 
tal modo que aquellas no tengan ya que 
tocarse directamente con los dedos, no es 
tan antigua y conforma uno de los últimos 
pasos en la evolución del piano. Se supone 
que los primeros intentos en este sentido 
tuvieron lugar alrededor de los siglos XII y 
XIII.
Entre estos instrumentos encontramos al 
Clavicordio, un instrumento en el cual las 
cuerdas eran puestas a vibrar mediante un 
pequeño clavo o aguja metálico. Este clavo o 
aguja era puesto en movimiento desde un 
teclado accionado por los dedos. Este 
teclado, mediante sistemas más o menos 
complejos de piezas de madera o metal, 
resortes y paños, transmitía su movimiento 
al clavo o aguja. Este último "enganchaba" la 
cuerda y la liberaba inmediatamente 
poniéndola a vibrar.
Un desarrollo posterior aunque 
contemporáneo al Clavicordio produjo un 
instrumento llamado Harpiscordio. La 
diferencia que encontramos entre ambos es 
que en este último las cuerdas eran puestas 
a vibrar mediante un plectro o con la 
nervadura de plumas de aves.
Alrededor del año 1695 un italiano llamado 
Bartolomeo Cristofori comenzó a construir un 
instrumento que, aunque básicamente era 
de una especie similar al Clavicordio y al 
Harpiscordio, incluía en el diseño de su 
mecanismo un concepto revolucionario. 
Puesto que tanto el Clavicordio como el 
Harpiscordio ponían a vibrar las cuerdas 
mediante algún tipo de púa o plectro, las 
cuerdas comenzaban a vibrar siempre con el 
mismo volumen y tono independientemente 
de cuan rápida o lentamente se presionaran 
las teclas. En el instrumento desarrollado por 
Cristofori el elemento que ponía las cuerdas 
a vibrar era una pieza de madera con la 
forma de un martillo cuya punta estaba 
recubierta de cuero. Esto no producía un 
sonido metálico y estridente como en el 
Clavicordio y el Harpiscordio sino un sonido 
mucho más dulce y sostenido. Además, el 
mencionado martillo tenía un sistema de 
escape mediante el cual era posible variar 
tanto el volumen como así también el tono 
del sonido. En este instrumento estaba 
notablemente aumentada la capacidad 
expresiva musical ya que en él no era 
solamente posible producir un determinado 
sonido siempre al mismo volumen y tono, 
como se mencionó acerca de los dos 
instrumentos que anteceden al piano, sino 
que también era posible producir sonidos con 
más o menos volumen que otros y producir 
una muy ligera variación tonal. Y todo esto, 
claro está, era posible hacerlo desde el 
teclado, según como éste se tocara. 
Movimientos rápidos y bruscos de la tecla 
producían sonidos de gran volumen y 
brillantes; movimientos lentos y apaciguados 
producían sonidos de menor volumen y más 
dulces en cuanto al tono.
Este fue entonces el primer piano que se 
construyó. El señor Bartolomeo Cristofori lo 
llamó "Forte-Piano", nombre que no 
significaba nada más que hacer referencia a 
lo que acabamos de decir como sus 
principales características: que el 
instrumento podía producir sonidos fuertes 
(forte) y suaves (piano). Hoy en día 
utilizamos más comúnmente la palabra Piano 
para referirnos a este instrumento.
Bartolomeo Cristofori construyó tres pianos 
en toda su vida, el más antiguo de los cuales 
se conserva en el Museo Metropolitano de 
Arte de New York y data de.
Desde los primeros pianos del italiano hasta 
los pianos actuales muchas mejoras y 
avances se han hecho, pero el concepto y la 
idea fundamental para su construcción 
continúan siendo las mismas. Se han 
optimizado materiales para lograr una mejor 
calidad de sonido, se ha aumentado 
paulatinamente el número de notas para 
ampliar la capacidad musical del instrumento 
y se ha mejorado el diseño para lograr una 
mejor perfomance. Pero el concepto 
fundamental de Forte-Piano como un 
instrumento capaz de lograr sonidos fuertes 
y suaves permanece siendo el mismo.
Desde el piano de Cristofori hasta el piano 
moderno
Como recientemente mencionamos, el piano 
de Cristofori fue el primero en poseer un 
sistema de mecanismo con martillo que podía 
lograr tanto sonidos fuertes como suaves. En 
1711 Scipione Maffei describe uno de los 
primeros pianos de Cristofori como un 
"harpiscordio (gravicémbalo) con fuerte y 
suave".
Hacia 1726 Cristofori introduce un nuevo 
elemento en sus pianos, el sistema "una 
corda" que permanece hasta nuestros días. 
Se basaba en la posibilidad de permitir al 
ejecutante mediante un comando especial 
desplazar el mecanismo de tal modo que 
cada martillo golpee sobre una menor 
cantidad de cuerdas de lo que habitualmente 
hace para lograr un sonido muy suave. En 
los pianos modernos actuales el "una corda" 
permite que el martillo del piano golpee 
sobre solo una cuerda de cada grupo.
Las primeras composiciones específicas para 
pianos hacen su aparición en 1732. Son las 
famosas 12 sonatas para piano de Giustini.
Juan Sebastián Bach toma contacto por 
primera vez con un piano hacia el año 1750. 
El piano estaba construido por Gottfried 
Silbermann quien construía pianos desde 
1725.
Este señor era un constructor de órganos de 
la ciudad de Freiberg, en Saxonia. Tomó 
contacto con el piano de Cristofori hacia 
finales de la década del 20 lo que lo movió a 
construir los suyos propios. Bach se puso en 
contacto con él y le pidió que alivianara el 
mecanismo y que reforzara el volumen del 
sonido en las octavas superiores. Silbermann 
concretó el pedido lo que produjo que Bach 
se convirtiera en Agente de ventas de estos 
pianos.
Desde el taller de Gottfried Silbermann se 
desarrollaron las famosas escuelas de 
construcción de pianos conocidas como la 
"Escuela alemana" y la "Escuela inglesa".
Dos discípulos de Silbermann llamados 
Johannes Zumpe y Americus Backers 
emigraron a Londres donde desarrollaron un 
piano que poseía el mismo mecanismo que el 
de Cristofori aunque con notables 
modificaciones. Este mecanismo 
evolucionado fue el más tarde se llamó 
"Mecanismo inglés".
Otro discípulo de Silbermann llamado Stein, 
tal vez el más notable de ellos, realizó otras 
variantes al mecanismo original de un 
diseñador llamado Schroter. Este mecanismo 
fue el que más tarde se conoció como 
"Mecanismo alemán o Vienes".
Entre los años 1760 a 1830 hubo una gran 
expansión en la construcción de pianos. En 
1762 se produce el primer concierto de piano 
en toda la historia realizado por Henry Walsh 
en Dublin. El piano cuadrado, una variante 
especial del piano de cola, hace su debut en 
1776 por construcción de Sebastián Erard.
En 1773 se publican las famosa sonatas para 
piano Opus 2 de Muzio Clementi que 
intentan utilizar al máximo los recursos del 
piano. En 1775 se construye el primer piano 
en los Estados Unidos de América en una 
fábrica instalada en Filadelfia.
En 1795 se desarrolla en Londres en primer 
piano vertical. Su diseñador era William 
Stodart.
En 1808 Sebastián Erard, un diseñador de 
pianos Francés de origen alemán, patenta su 
famoso mecanismo de simple repetición y 
presenta el agrafe que permitía permanecer 
a las cuerdas en su exacto lugar luego del 
golpe de martillo. En 1810 Sebastián diseña 
el mecanismo de pedales tal como llega 
hasta nuestros días. En 1822 introduce su 
mecanismo de doble repetición que permitía 
una gran velocidad de repetición entre sus 
teclas.
En el año 1828 Ignaz Bösendorfer funda su 
fábrica en Austria. Estos pianos se 
encuentran actualmente entre los más 
destacados del mundo. El año 1853 marca 
un hito en lo que se refiere a formación de 
fábricas de pianos que hoy son de renombre. 
El alemán Heinrich Steinweg emigra a los 
Estados Unidos de América y funda Steinway 
and Sons en New York. Julius Blüthner funda 
su fábrica en Leipzig y Carl Bechstein hace lo 
suyo en Berlín.
En 1863 Steinway diseña y construye el 
piano vertical moderno con cuerdas cruzadas 
y una sola tabla armónica. En 1874 
perfecciona el pedal Sostenuto. En ese 
mismo año J. Blüthner patenta su famoso 
sistema aliquot que incrementa la resonancia 
de las cuerdas al introducir una cuarta 
cuerda adicional a cada grupo de tres, 
aunque más elevada. Esta cuerda no es 
percutida por el martillo sino que vibra en 
simpatía.
En 1880 Steinway abre una sucursal en 
Hamburgo comenzando a pelear el mercado 
europeo con sus dos fuertes contrincantes: 
Bechstein y Blüthner.
A partir de ese año ya se puede hablar de 
piano moderno, tal como lo conocemos hoy 
en día. Si bien encontramos desarrollos 
posteriores de diseño, estos no han sido 
revolucionarios.
Descripción física (estructura moderna)
El piano moderno tiene seis partes 
fundamentales (en la explicación siguiente 
los números entre paréntesis hacen 
referencia al diagrama de la estructura del 
instrumento): (1) El bastidor suele ser de 
hierro. En el extremo posterior se sitúa el 
cordal donde se sujetan las cuerdas. En el 
frente está el clavijero, en el que se 
distribuyen las clavijas de afinación. 
Alrededor de éstas se enrolla el otro extremo 
de la cuerda. La tensión se regula girando 
cada clavija. (2) La tabla armónica, pieza 
delgada de madera de picea con un veteado 
muy regular, situada debajo de las cuerdas, 
refuerza el sonido mediante la vibración por 
simpatía. (3) Las cuerdas, fabricadas de hilo 
de acero, en las que aumenta el grosor y la 
longitud desde el agudo al grave. Las notas 
agudas disponen de dos o tres cuerdas 
afinadas al unísono. Las graves tienen una 
sola cuerda fortalecida al entorcharse en 
espiral un alambre fino. (4) La pulsación es el 
verdadero mecanismo requerido para 
impulsar a los martillos contra las cuerdas. La 
parte más visible del mecanismo es el 
teclado, hilera de teclas que se accionan con 
los dedos. Las teclas de las notas naturales 
se hacen de marfil o plástico, las de las notas 
alteradas de ébano o plástico. (5) Los 
pedales son palancas que se pisan. El pedal 
fuerte (derecho) levanta los apagadores 
para que las cuerdas continúen vibrando 
cuando las teclas se han dejado de pulsar. El 
pedal sordina (izquierdo) acerca los martillos 
a las cuerdas para que las golpeen con más 
suavidad, o los mueve hacia un lado para 
reducir el contacto. Algunos pianos tienen un 
pedal tonal en el centro que sostiene las 
notas producidas por las teclas pulsadas 
cuando el pedal está pisado. La utilización de 
los pedales produce variaciones en la calidad 
del sonido. En muchos pianos verticales al 
pisar el pedal de sordina se interpone una 
tira de fieltro entre los martillos y las cuerdas 
con lo que se produce un sonido tenue. (6) 
Según la forma del mueble los pianos se 
clasifican en de cola, rectangular y vertical. El 
cuadrado o de mesa no es muy común. Para 
el uso doméstico se suele utilizar el vertical, 
mejor para estancias pequeñas. Los pianos 
de cola se construyen en varios tamaños, 
desde el gran cola de 2,69 m de largo, hasta 
el colín, de menos de 1,8 metros.
 
Entre los pianos verticales se 
incluye el piano doméstico del siglo XIX, del 
que el gran piano vertical es un tipo mayor. 
Los modernos pianos de espineta y consola 
son verticales pequeños emparentados con 
el cuadrado. En los pianos verticales las 
cuerdas se sitúan vertical o diagonalmente 
desde el extremo inferior del instrumento. En 
los verticales y los colines las cuerdas graves 
se sitúan en diagonal respecto de las 
agudas, más pequeñas. Con ello se ahorra 
espacio y se distribuye la tensión al mismo 
tiempo. La tensión conjunta de las cuerdas 
de un piano gran cola de concierto es de 
unas 30 t, en el vertical de unas 14 
toneladas.
Mecanismo de pulsación 
Cuando la tecla del piano se pulsa, las 
palancas que hay en el otro extremo suben y 
elevan otra palanca que lanza un martillo 
contra las cuerdas de una determinada nota. 
Al mismo tiempo un apagador se separa de 
esas cuerdas para que puedan vibrar. Lo 
siguiente es una explicación detallada de 
cómo funciona el mecanismo. Los números 
entre paréntesis hacen referencia al 
diagrama en el que se muestra el mecanismo 
de un piano de cola.
La tecla (1) es una palanca que pivota (2) 
sobre una articulación elevadora. Cuando el 
pianista pulsa la tecla, la parte trasera 
asciende y la fuerza de la palanca (3) de la 
tecla presiona hacia arriba el batidor (4), que 
actúa como bisagra. El lado libre del batidor 
sube llevándose una pieza en forma de L 
llamada sostén del amortiguador o palanca 
de escape (5) y el brazo o palanca de 
repetición (9).
La articulación elevadora empuja al rodillo 
(6), un rollo de fieltro sujeto al brazo del 
martillo (7), y éste sube. El movimiento hacia 
arriba de la articulación se detiene cuando su 
extremo saliente golpea el botón regulador 
(8). El martillo sube rápidamente desde la 
articulación y golpea las cuerdas 
correspondientes. El brazo de repetición (9) 
también asciende, pero sólo hasta el 
extremo donde la articulación lo atraviesa y 
toca el tornillo descendente situado en la 
cabeza del martillo (10); esta palanca 
permanece arriba hasta que la tecla se 
suelta.
El martillo cae hacia atrás, pero sólo en 
parte. Se detiene por la junta articulada 
golpeando el brazo de repetición que estaba 
arriba (9). La articulación elevadora (5) 
puede entonces volver bajo el mango del 
martillo, elevado a su posición original. Al 
mismo tiempo el balancín o soporte posterior 
(11) hace que el martillo rebote contra las 
cuerdas.
Si la tecla se suelta, el martillo se mueve y la 
palanca de repetición queda elevada. Si el 
intérprete presiona de nuevo la tecla que ha 
pulsado antes la articulación elevadora (5) 
puede una vez más empujar al rodillo y al 
mango del martillo hacia arriba. Este sistema 
permite una rápida repetición de las notas 
antes de que la tecla y el martillo tengan 
tiempo de volver a sus posiciones originales. 
Fue una mejora importante en los 
mecanismos más simples y primitivos del 
piano y muy explotada por virtuosos como 
Johann Nepomuk Hummel y Franz Liszt.
Mientras tanto, la parte trasera de la tecla 
también ha empujado hacia arriba al asta del 
apagador (12) que levanta a éste de las 
cuerdas de la tecla. Cuando ésta permanece 
en parte suelta, el apagador retrocede, se 
posa en las cuerdas y silencia su sonido.
 
Cuando la tecla se suelta del todo todas las 
partes del mecanismo vuelven a sus 
posiciones originales por la fuerza de la 
gravedad. A diferencia de los pianos de cola, 
los modelos verticales no pueden depender 
de la gravedad para hacer que todo vuelva a 
su lugar. En un piano de cola el mecanismo 
se asienta horizontalmente sobre la tecla, en 
uno vertical se adapta para que se asiente 
más o menos en vertical. Ya que no puede 
depender por completo de la gravedad, 
incluye varios muelles y pequeñas tiras de 
tela para devolver el mecanismo a su lugar.
Pianistas célebres 
El piano ha sido siempre un instrumento de 
virtuosos. Los compositores tocaban sus 
propias obras en los siglos XVIII y XIX, entre 
ellos Wolfgang Amadeus Mozart, Ludwig van 
Beethoven, Frédéric Chopin y Franz Liszt. La 
notable pianista alemana Clara Schumann 
interpretaba las obras de su esposo Robert 
Shumann. El final del siglo XIX estuvo 
dominado por el compositor e intérprete ruso 
Anton Rubinstein. A principios del XX muchos 
instrumentistas viajaron por Europa 
Occidental y Estados Unidos. Destacan el 
polaco Ignacy Jan Paderewski y los polaco-
estadounidenses Josef Hofmann y Arthur 
Rubinstein así como la venezolana María 
Teresa Carreño. En el periodo de 
entreguerras sobresale el compositor e 
intérprete ruso Serguéi Rajmáninov, el 
austriaco Artur Schnabel, la inglesa Myra 
Hess, el alemán Walter Gieseking y la 
brasileña Guiomar Novaes. Después de la II 
Guerra Mundial, en 1945, aparecieron 
pianistas soviéticos como Emil Gilels y 
Sviatoslav Richter. El chileno Claudio Arrau 
fue maestro en un amplio repertorio. Con 
ellos podemos citar al intérprete y pedagogo 
checo Rudolf Serkin, al virtuoso soviético 
Vladimir Horowitz y a la española Alicia de 
Larrocha. Otros pianistas destacables de 
esta época son el anglo-austriaco Alfred 
Brendel, causante de varias controversias 
estéticas por su enfoque musicológico, el 
canadiense Glenn Gould, que grabó con 
mucho éxito la obra de Bach, los 
estadounidenses Van Cliburn y Murray 
Perahia y el soviético Vladimir Ashkenazy. En 
la actualidad, con un nivel de calidad técnica 
que sigue aumentando, han proliferado los 
concursos internacionales que sirven como 
lanzamiento a los artistas jóvenes.
Wolfgang Amadeus Mozart (1756-1791)
Fue un compositor austríaco del periodo 
clásico. Uno de los más influyentes en la 
historia de la música occidental.
A pesar de su corta vida y malograda 
carrera, Mozart se encuentra entre los 
grandes genios de la música. Su inmensa 
producción (más de 600 obras), muestra a 
una persona que, ya desde niño, dominaba 
la técnica de la composición a la vez que 
poseía una imaginación desbordante. Sus 
obras instrumentales incluyen sinfonías, 
divertimentos, sonatas, música de cámara 
para distintas combinaciones de 
instrumentos, y conciertos; sus obras 
vocales son, básicamente, óperas y música 
de iglesia. Sus manuscritos muestran cómo, 
salvo cuando hacía borradores de pasajes 
especialmente difíciles, primero pensaba la 
obra entera y luego la escribía. Su obra 
combina las dulces melodías del estilo 
italiano, y la forma y contrapunto 
germánicos. Mozart epitomiza el clasicismo 
del siglo XVIII, sencillo, claro y equilibrado, 
pero sin huir de la intensidad emocional. 
Estas cualidades son patentes sobre todo en 
sus conciertos, con los dramáticos contrastes 
entre el instrumento solista y la orquesta, y 
en las óperas, con las reacciones de sus 
personajes ante diferentes situaciones. Su 
producción lírica pone de manifiesto nueva 
unidad entre la parte vocal y la instrumental, 
con una delicada caracterización y el uso del 
estilo sinfónico propio de los grandes grupos 
instrumentales.
Chopin, Frédéric (1810-1849)
Fue un compositor y pianista polaco adscrito 
al movimiento romántico, considerado como 
uno de los más grandes compositores de 
música para piano. Nació el 4 de marzo de 
1810 en Zelazowa Wola, cerca de Varsovia. 
Hijo de padre francés y madre polaca, 
comenzó a estudiar piano a los cuatro años; 
a los ocho ofrecía un concierto privado en 
Varsovia. Más tarde estudió armonía y 
contrapunto en el conservatorio de dicha 
ciudad. También fue precoz como compositor; 
su primera obra publicada data de 1817. Dio 
sus primeros conciertos como virtuoso el año 
1829, en Viena, donde vivió durante los dos 
años siguientes. Excepto durante breves 
ausencias, a partir de 1831 vivió en París, 
donde se convirtió en un prestigioso 
profesor, pianista y compositor. En 1837 
inició una relación íntima con la escritora 
francesa George Sand. En 1838 enfermó de 
tuberculosis y se trasladó a Mallorca, en las 
islas Baleares. Allí, en la cartuja de 
Valldemosa, Sand lo atendió en su 
enfermedad hasta que las continuas 
disputas entre los dos condujeron a su 
ruptura el año 1847. A partir de entonces su 
actividad concertística se limitó a varios 
recitales en Francia, Escocia y Gran Bretaña. 
Murió en París el 17 de octubre de 1849, 
víctima de la tuberculosis.
Prácticamente todas las composiciones de 
Chopin son para piano. Aunque expatriado, 
siempre fue leal a Polonia, un país 
desgarrado por las guerras; sus mazurcas 
reflejan los ritmos y melodías del folclore 
polaco y las polonesas están marcadas por 
el espíritu heroico de su patria. La influencia 
que sobre él ejerció el compositor de ópera 
italiano Vincenzo Bellini también se puede 
apreciar en sus melodías. Las baladas, 
scherzos y estudios (cada uno de ellos 
centrado en un problema técnico específico) 
son muestra de su amplísima obra para 
piano solo. Su música, romántica y lírica, se 
caracteriza por las dulces y originales 
melodías, las refinadas armonías, los ritmos 
delicados y la belleza poética. Influyó 
notablemente sobre otros compositores, 
como el pianista y compositor Franz Liszt y el 
compositor francés Claude Debussy. Sus 
obras publicadas incluyen 55 mazurcas, 27 
estudios, 24 preludios, 19 nocturnos, 13 
polonesas y 3 sonatas para piano. Entre sus 
otras obras destacan los Conciertos de 
juventud, en mi menor y fa menor opus 11 y 
opus 21, respectivamente (ambos para piano 
y orquesta; en los dos se aprecia la 
influencia, tanto en su forma como en la 
melodía, de los conciertos para piano de 
Johann Nepomuk Hummel), así como una 
sonata para violonchelo y piano y 17 
canciones.
Claudio Arrau (1903-1991) 
Pianista chileno. Como niño prodigio dio su 
primer recital a los cinco años. Sus padres se 
trasladaron a Santiago de Chile con el fin de 
asegurarle una buena educación hasta que 
el gobierno le concedió una beca para 
estudiar en Berlín. Con diez años entró en la 
clase de Martin Krause, alumno de Franz 
Liszt, en el Conservatorio Stern de Berlín. Al 
año siguiente dio un concierto en la ciudad 
antes de hacer una gira por Alemania y 
Escandinavia. Muy pronto obtuvo varios 
premios y realizó una gira de conciertos por 
Europa con 16 años. Cuando volvió a 
América del Sur, en 1921, ya era un 
renombrado concertista de piano. Más tarde 
regresó a Berlín, esta vez como profesor del 
Conservatorio Stern y en 1927 ganó el 
Premio Internacional de Ginebra. A mediados 
de los años treinta se embarcó en un 
ambicioso proyecto relacionado con la música 
de Johann Sebastian Bach; entre 1935 y 
1936 dio en Berlín 12 conciertos en los que 
interpretó la integral de la música de Bach 
escrita para teclado. En 1940 abandonó 
Alemania para fundar su propia escuela en 
Santiago de Chile. En su gira americana de 
1941, la segunda que realizaba en este 
continente, lo recibieron con gran 
entusiasmo. Arrau fue aplaudido en varias 
capitales de América Latina como Buenos 
Aires, México o La Habana. Tras ella se 
asentó en Estados Unidos, donde realizó 
numerosas grabaciones discográficas de la 
música para piano de Johannes Brahms y 
Liszt, entre otros compositores. Sus 
interpretaciones de Ludwig van Beethoven 
causaron especial admiración. Grabó la 
integral de sus 32 sonatas en tres 
ocasiones, la última cuando ya tenía más de 
ochenta años.
CONCLUSIÓN
Después de finalizar este trabajo, podemos 
decir que fue muy interesante estudiar este 
instrumento, ya que nos dimos cuenta que 
tan antiguo es, cuando se hablaba de 3000 
años antes de Cristo. Y las tantas 
evoluciones que tuvo. Fue avanzando de a 
poco, cuando sorpresivamente entre los 
años 1760 y 1830 se expandió por todo el 
mundo
También nos hemos dado cuenta que el 
piano es uno de los pocos instrumentos, si 
no es el único, que tiene un mini-motor en 
cada tecla para que se produzca el sonido. Y 
cada detalle de este mecanismo sirve para 
algo puntual y de igual importancia, como por 
ejemplo la intensidad o la duración. El 
bastidor, la tabla armónica, las cuerdas, el 
teclado, los pedales, y la caja de 
resonancia... cada uno con su función 
específica. 
También se demuestra que no es nada fácil, 
a diferencia de otros instrumentos, aprender 
a tocar profesionalmente, ya que necesita 
una preparación de niño, y mucho interés. 
Como fue en el caso de compositores y 
genios de la música como Beethoven, 
Mozart, Bach, Chopin, Arraul, entre otros.
 
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| Enviado por: | Fernando Brahm | 
| Idioma: | castellano | 
| País: | México | 
