Esta patología radica en la incertidumbre que sufre el actor social al tener que desempeñar una situación determinada. Esta incertidumbre puede darse en el propio sujeto o en las expectativas de sus compañeros de rol.
Un claro ejemplo es el jefe respecto a los demás: puede actuar como un compañero, como amigo, como controlador de castigos, como modelo a seguir, como experto del trabajo, ...;
También podría aparecer aquí el profesor: ya que puede ejercer diversos roles, como experto, como ayuda al alumno, como órgano sancionador, como amigo, .....;
Para solucionar este rol hay que dejar clara la función que se desempeña con ese rol. Esto se puede hacer o bien imponiendo las determinadas expectativas y el concepto que tenga el actor social del rol. O bien solicitando a los compañeros de rol que digan sus exigencias y preferencias del rol.
PATOLOGÍA Nº 2: Incompatibilidad del rol
Este rol se refiere a la a la oposición o contradicción entre las expectativas de distintos sectores de los compañeros de rol. Esto es que el actor social desempeña el rol de la forma que él cree más correcta, pero sus compañeros de rol opinan que es una manera incorrecta. También ocurre este rol cuando las expectativas o exigencias obligan al actor social a desempeñar un rol que choca con su forma de ser, sus aptitudes y preferencias.
Siguiendo con el ejemplo del profesor podría ocurrir este rol cuando sus alumnos le “obligan” a hablar más lento o a repetir constantemente, con lo que el profesor no puede manifestar su forma de hablar, además de ser interrumpido continuamente.
Una forma de solucionar esta patología es que el actor social pida a sus compañeros de rol que se pongan de acuerdo en sus expectativas o bien dar preferencia a un subrol que considera de mayor importancia
PATOLOGÍA Nº 3: Conflicto de rol
Es la necesidad en que se encuentra un actor social de desempeñar dos ó más de un rol en una determinada situación, con lo que se produce el conflicto. Los dos roles no tienen que ser conflictivos por si mismos pero los son cuando se producen conjuntamente.
Por ejemplo se produce con la mujer casada y con hijos, que además se dedica al mismo tiempo a desempeñar un trabajo profesionalmente. El mismo caso se da también en la gente pluriempleada, que cada trabajo por si sólo no es conflictivo pero al hacerse simultáneamente se produce una incompatibilidad. (Ej. Un estudiante que trabaje de repartidor en una empresa de comida a domicilio)
Para solucionar este conflicto se suele hacer una degradación de alguno de los roles o se realiza una segmentación de los roles para que los roles no se falseen.
PATOLOGÍAS Nº 4 Y 5: Sobrecarga e infracarga del rol.
Consisten en el número excesivo de roles asignados a una misma posición social y la falta de correspondencia entre la definición oficial de un rol y el concepto que tiene de él el actor social que lo desempeña.
Un ejemplo es el estudiante que acaba sus estudios y que tiene grandes expectativas, pero que tiene que trabajar en algún trabajo de poca monta ante la escasez de trabajos cualificados. Otro ejemplo es la persona que abandona sus estudios sin acabarlos y decide trabajar y en ese trabajo se le sobrecarga y se le asignan un número muy elevado de tareas. (Ej. Un periodista que trabaja antes de acabar la carrera en un periódico local realiza además de su trabajo el trabajo que no quieren realizar sus compañeros).
Para solucionar estas patologías hay que hacer una distinción. En el caso de la infracarga el actor social afectado tiende a retrasar las operaciones, informar mal, bloquear distintas actividades y todo ello para compensarse por su perdida de poder y responsabilidad. En el caso de la sobrecarga suele reasignarse las prioridades y responsabilidades del actor social.
BIBLIOGRAFÍA
“ Para comprender la sociología” Juan González - Anleo
2ª edición. 1991. Editorial Verbo Divino (Navarra)
- Apuntes de Sociología de 1º de Relaciones Laborales (1999)