Operaciones de ennoblecimiento textil
Fibra de sisal
GENERALIDADES.
IMPORTANCIA.
El Sisal es una planta xerófila originaria de la Península de Yucatán en México, cuyo nombre científico es Agave sisalana y pertenece a la familia de Agavaceae. Su nombre vulgar se deriva del antiguo puerto de Sisal ubicado en el golfo de México por el cual se comenzó a exportar esta planta. Es cultivada por que de sus hojas se extraen fibras utilizadas para fabricar cordeles, mecates, telas para sacos, decoración y hasta puede fabricarse papel. Como planta textilera le siguen en importancia el algodón y al lino.
El Sisal (Agave sisalana Perrine) es una planta monocotiledóneas cuyas hojas producen una fibra dura, gruesa, de color crema o amarillo pálido, de 1 a 1,5 metros de longitud. Provee más del 65% del mercado mundial de fibras duras. Cerca del 60% de la producción se emplea en la fabricación de cordeles y de costales. Las hojas contienen hecogenina, una sustancia que se utiliza en la síntesis parcial de la droga cortisona. De los residuos del Sisal puede producirse pectato de sodio y también cera. Las varas de la inflorescencia se usan en África para la construcción de viviendas, y su médula como relleno para colchones (Sánchez, 1991). Según Maiti (1995) el Sisal es una de las principales fuentes de fibras duras en el mundo que representa alrededor del 70% del mercado mundial. La fibra se obtiene de la hoja y es empleada en la fabricación de cuerdas. Cuando es de baja calidad, se usa para rellenar muebles y fabricar papel. En Estados Unidos se le usa para la fabricación de cuerdas marinas debido a su alta resistencia a la salinidad. Las mayores zonas de producción abarcan Brasil, el este de África e Indonesia.
Mujica y Marval (1998) comentan que en Venezuela las fibras largas de Sisal obtenidas se usan para la fabricación de sacos, mecates, alfombras, hamacas y cordeles, mientras que las fibras cortas que quedan en el bagazo, se usan para preparar rellenos de asientos, colchones y almohadas. Estos autores consideran que este cultivo tiene una gran importancia social en las zonas semiáridas del Estado Lara, donde los agricultores tienen pocas alternativas de producción y el Sisal tiene gran importancia en los ingresos que la economía local recibe. En el Estado Lara está concentrada el 90% de la producción nacional de Sisal.
ORIGEN Y CLASIFICACIÓN.
El Sisal o Agave sisalana Perrine, tiene su origen en la Península de Yucatán en México, donde forma parte de la vegetación xerófila natural, de donde se extendió por razones tropicales del mundo debido a sus propiedades textileras y como planta ornamental en jardines y áreas verdes en general. Otros autores como Remussi (1956), Sánchez (1991) y Maiti (1995) concuerdan con ese origen.
Según Remussi (1956) esta planta recibió su nombre de una hierba que crece en Yucatán llamada Zisal Xiu, cuyo nombre se dio al pueblo y puerto donde se embarcó por muchos años la fibra para los mercados extranjeros. Hoyos (1998) explica que el nombre científico Agave se deriva del griego agayos que significa admirable, noble, y lo utilizó Linneo en 1753 para designar al genero de plantas en donde se encuentra el Sisal y otras plantas productoras de fibra como el henequén.
Sánchez (1991) afirma que el Sisal y las plantas relacionadas como el henequén, pertenece a la familia Agavaceae y al género Agave, que comprende unas 300 especies nativas de las zonas tropicales y subtropicales de América. Antiguamente se la clasificaba dentro de la familia Amaryllidaceae, razón por la cual algunos autores como Remussi (1956) y Maiti (1995) afirman que pertenece a esta familia de plantas.
DESCRIPCIÓN BOTÁNICA.
Según Sánchez (1991), el Sisal es una planta xerófila con un tronco corto y grueso del cual emerge una roseta de hojas compactadas. Hoyos (1998) la describe como una planta herbácea acaule o con tronco muy corto y grueso del cual emerge un macizo de hojas de color verde intenso dispuestas en forma de roseta, en cuyo ápice llevan una larga y aguda espina de color marrón negruzco. La vida de la planta suele ser de 8 a 9 años y termina con la floración.
RAÍCES.
Son fibrosas, fasciculadas y emergen adventiciamente de la base del tallo. Las raíces de anclaje se extienden horizontalmente hasta 3 m. Las raíces de alimentación se originan de las de anclaje y tienen numerosos pelos radicales (Sánchez, 1991).
TALLO.
Es corto y grueso, con una meristema apical y una roseta compacta de unas 100 hojas. Puede llegar a alcanzar una altura de más de un metro, con un diámetro de 20 cm. De las yemas localizadas en la base del tallo se producen 5 a 10 rizomas. Los rizomas producen bulbos, que a su vez originan nuevas plantas (Sánchez, 1991).
HOJAS.
Se conocen con el nombre de pencas, tienen una longitud de 75 a 150 cm y 10 a 15 cm de ancho, son sésiles, rígidas, suculentas, con márgenes rígidos en ocasiones cóncavas y con una espina terminal lignificada. Contienen fibras esclerentimáticas con función de sostén encerradas en un parénquima muy acuoso, protegido por una epidermis recubierta de una sustancia grasosa de color glauco (Hoyos, 1998; Maiti, 1995). Remussi (1956) menciona que las fibras de las hojas están constituídas por fascículos de 4 a 5 mm de largo y 15 a 30 mm de diámetro. Según Sánchez (1991) los haces de fibras están formados por células fusiformes, fuertemente compactas entre sí, de 3 mm de largo y 20 o 30 mm de diámetro.
INFLORESCENCIA.
Constituída por un escapo floral, erecto, de 4 a 6 m, que a partir de cierta altura emite una cantidad de ramitas con numerosas flores, inflorescencia tipo panícula (Sánchez, 1991).
FRUTOS Y SEMILLAS.
Los frutos son cápsulas con varias semillas. Las semillas son delgadas, aplanadas, negras y de forma triangular con bordes redondeados (Sánchez, 1991).
BULBILLOS.
Normalmente se forman sobre la panícula, después de la caída de las flores: Se originan a partir de las yemas presentes unos pocos milímetros debajo de la línea de abscisión de las flores. Están formados por una meristema con 6 u 8 hojas pequeñas y raíces adventicias rudimentarias. Crecen hasta 10 cm y en tres meses caen. Se usan como órganos de propagación del Sisal (Sánchez, 1991).
NATURALEZA DE LA PLANTA Y DE LA FIBRA.
El Sisal es una planta de grandes y alargadas hojas, de cierta rigidez, que crecen a partir de un tallo, o base, común. Su denominación proviene del nombre del puerto de Yucatán (México) desde donde se exportaba antiguamente, aunque el nombre maya era “Yacci” (Dewey, 1941).
Según la clasificación de las plantas productoras de fibra realizada por Goulding en 1917 (Kirby, 1963), el Sisal es, desde el punto de vista morfológico, una planta cuya fibra se obtiene del sistema fibro-vascular de las hojas, es decir es una planta de fibra de hojas; desde el punto de vista del uso de la fibra, el Sisal se considera una planta de fibra “dura” utilizada para cordelería (Es decir, fundamentalmente, una planta no textil), si bien tiene algún uso para hacer telas gruesas o “bastas” (Sacos, agrícolas fundamentalmente).
Biológicamente, el Sisal es una planta xerófila, es decir adaptada a zonas secas, al tener la característica de almacenar agua en sus tejidos en tiempo de sequía. Sin embargo, su desarrollo en áreas con una estación seca mayor de 6 meses deja de ser comercial (Kirby, 1963).
El Sisal tiene una relación muy estrecha con el henequén, pues ambos son del mismo género de planta (Agaves), tienen el mismo origen geográfico (Península de Yucatán, México) y apariencia semejante, exceptuando detalles como el color (Verde para el Sisal y grisáceo para el henequén), presencia o no de espinas en los lados de las hojas (El henequén las tiene, el Sisal no) y el alto del tallo basal: 1,50 m aproximadamente para el henequén, contra menos de un metro para el Sisal (Enciclopedia Británica, 1974/b).
Las diferencias más importantes, desde el punto de vista del rendimiento económico, entre estas dos especies son las relativas a las condiciones de clima y suelo en que se desarrollan, y la calidad de la fibra producida. En general estas características favorecen el Sisal (Agave sisalana Perrine) frente al henequén (Agave Fourcroydes), lo que ha dado como resultado una mayor distribución geográfica, y producción, del cultivo del Sisal, como se detallará en la sección correspondiente.
Ahora bien, aunque el Sisal resiste abundantes lluvias y temperaturas sub-tropicales, se desarrolla bien sólo con lluvias de hasta un máximo de 178 cm anuales, y temperaturas promedio mayores de 25ºC (Lock, 1962). El drenaje del suelo debe ser intermedio, pues sino, como en el caso de los suelo arcillosos, provoca la podredumbre de la base (Rodríguez, 1969).
Por otro lado la fibra del Sisal el 1/3 más fuerte que la del henequén (Enciclopedia Británica, 1974/a), resiste mejor los microorganismos que se desarrollan en el agua del mar, y también los incendios (Orellana, 1945). Adicionalmente, el desarrollo del Sisal es más rápido que el del henequén, lo que permite que el corte de las hojas pueda comenzar a los 2 ½ a 3 años para el Sisal; en cambio en el henequén se comienza a los 5 o 6 años, y además el número de hojas desarrolladas por año es mayor en el Sisal /Enciclopedia Británica, 1974/b). El Sisal puede cultivarse en mayor diversidad de suelos que el henequén, y resiste mejor ciertas plagas de estas plantas (Hongos, escarabajo Max, etc). Por último, debido a que el henequén posee espinas en las hojas, su cultivo se hace más difícil. La única ventaja del henequén frente al Sisal es su mayor resistencia a las sequías (Dewey, 1941).
En términos cuantitativos la ventaja del Sisal sobre el henequén puede ser inferida de los experimentos de G.W. Lock en 1957 en Tanzania, en los cuales el Sisal rindió 15,3 TM/Ha en 5 años frente a 9,8 del henequén; es decir un 56% más (Kirby, 1963). Más aún, para el híbrido de alto rendimiento 11648 (No introducido en Venezuela) se podría obtener más de 30 TM/Ha de una fibra de calidad semejante, aunque ligeramente menor (Kirby, 1963).
Una planta de Sisal bien desarrollada sostiene de 75 a 150 hojas verdeoscuras que miden de 75 a 150 cm de largo por 10 a 15 cm de ancho, de bordes sin espinas en general. En el extremo de la hoja se presenta una espina de color castaño oscuro de 20 a 25 cm de largo, por 4 a 5 cm de espesor. Las hojas brotan de la base del tallo, o rosetón folífero central. De los 6 a los 10 años (O incluso más) de sembrada la planta, el centro del rosetón desarrolla un vástago floral que alcanza una altura de 3 a 7 m. Este vástago presenta ramas delgadas, con flores amarillas en los extremos. De estas flores se generan los bulbillos que sirven para la propagación. Como es una planta monocárpica, es decir de una sola floración, muere al poco tiempo de desarrollar el vástago con los bulbillos (Dewey, 1941).
Las hojas alcanzan un peso medio de 0,4 a 0,8 Kg. (Bell y Machin, 1977). El rendimiento en fibra larga varía del 2,5 al 4% del peso de las hojas verdes, con un promedio de 3%. En las mejores plantaciones de África Oriental se obtienen hasta 2,8 TM de fibra/Ha y por año (Enciclopedia Británica, 1974/b).
La fibra que se obtiene de estas hojas es más lustrosa, blanca, fina y resistente que la cualquier otro Agave. Llega a tener 1,5 m de largo, con un promedio de 1m aproximadamente. La fibra está constituída por fascículos de fibras de 15 a 30 micrones de diámetro; cada hoja tiene unas 100 fibras individuales (Remussi, 1956). Lo anterior vale para la fibra llamada larga, pues la corta sólo alcanza algunos cm de largo, y es mayormente perdida al tratar de sacarla de la hoja.
La fibra es, según P.I. Wilson (1951), una sustancia compleja llamada ligno-celulosa, cuya composición química promedio (en seco) es: Celulosa 78% en peso; Carbohidratos, hemicelulosas y pectinas 10%; Lignina 8%; Ceras y resinas 2%; Cenizas y pérdidas 2%. El contenido normal de humedad después del secado es 10-12% (Lock,1962).
El contenido de Lignina en la fibra parece que tiene que ver de una manera directamente proporcional con la rigidez de la fibra. De tal modo que al variar del 6 al 12% el contenido en Lignina a medida que nos acercamos al tallo, la fibra es más rígida. La espina de la punta, por otra parte, tiene 33% de Lignina, en promedio. El efecto de los rayos ultravioletas en la Lignina es lo que hace que el color blanco original de la fibra vaya amarilleándose.
PRINCIPALES USOS Y APLICACIONES DE LA FIBRA DEL SISAL.
USOS DE LA FIBRA.
El Sisal, hasta ahora, es fundamentalmente una planta productora de la principal fibra dura vegetal utilizada para la elaboración de cuerdas de todo tipo.
Generalmente la desfibración se hace en máquinas raspadoras y se obtiene como producto fibras, que procesadas industrialmente permiten obtener hilos para engavillar, utilizados en máquinas segadoras, en la fabricación de bolsas o sacos para envasar productos diversos, (bramantes de embalar), en la confección de alfombras, esterillas, hamacas, sogas, cordeles, uso como material de reenforzamiento para plásticos y mampostería de yeso, etc.
Las fibras cortas, que quedan en el bagazo se utilizan para preparar material de relleno para asientos, colchones y almohadas. El bagazo, representado por la pulpa que queda después de extraídas las fibras, que comúnmente plantea problemas para su eliminación, puede aprovecharse para extraer materias gelatinosas, así como ceras y grasas, por medio de solventes puede ofrecer una fuente de recursos. Del bagazo se ha obtenido por destilación un gas combustible y productos secundarios: ácido piroleñoso, ácido acético, alquitrán y carbón vegetal.
El aprovechamiento de las sustancias pulposas para la fabricación de materiales para tabiques de construcción es perfectamente factible, y lo mismo puede decirse de la utilización del jugo o de las sustancias que contiene.
Una vez despojados los troncos de sus últimas hojas se emplea como combustible. Se han hecho ensayos para extraer alcohol, pero el costo de producción es mayor que el que se obtiene empleando otros productos sacarinos.
Un nuevo uso del Sisal, es para la producción de papel; pues ésta fibra posee un alto contenido de celulosa, bajo contenido de Lignina y presenta células fibrosas bastante largas.
Cabe mencionar que el Sisal también constituye una materia prima que permitiría producir “papel ecológico”, pues en vez de deforestar los bosques se estarían cultivando zonas semiáridas para obtener la materia prima que se va a convertir e pulpa de papel. Esta posibilidad convertiría a la pulpa de Sisal en un producto atractivo en los mercados Europeos y Norteamericanos, donde muchas personas preocupadas por el medio ambiente prefieren utilizar papel que no provenga de la deforestación de los bosques.
APLICACIÓN DE LA FIBRA.
CABUYA.
Es una cuerda simple de simple manufactura, la cual se usa para amarrar y cuya resistencia media a la ruptura está estimada en 36 Kilos; su manufactura está normalizada a un promedio de 374 metros por kilo.
MECATE.
Se requiere de una manufactura más delicada y su resistencia a la tracción es superior. Exige una resistencia media a la ruptura de 113 Kilos aproximadamente y 1 Kilo de mecate puede contener hasta 153 Kilos. Para amarrar volúmenes grandes y pesados se emplean mecates con diámetros mayores. Así pues, la resistencia es proporcional al diámetro, y por lo tanto son seleccionados de acuerdo a la función específica a la cual van a ser destinados. Se ha comprobado, que las fibras de Sisal poseen una calidad superior en la fabricación de cuerdas para uso marítimo, pues en las condiciones del agua de mar, las cuerdas o mecates hechos de otra fibra se deterioran en un menor tiempo.
SACOS.
Tiene gran utilidad en el embalaje de productos agrícolas principalmente, por su fácil y cómodo transporte; además de su alta resistencia a la manipulación, poseen muy poca devaluación. Los sacos de Sisal no pueden ser considerados en rigor como competidores del saco de yute, puesto que no pueden competir en precio en el producto indiano.
ESTOPAS.
En los últimos años cantidades considerables de residuos del desfibrado de Sisal, han sido empleados como estopa en la confección de acolchonados para asientos de automóviles; con la aceptación de que llena mejores requisitos que el algodón, como lo son, su elasticidad, flexibilidad y menor precio.
PAPEL.
En Inglaterra actualmente se fabrica un papel especial llamado “Sisal Kraft” a base de estopa de fibra. El papel está formado por 6 camadas mecánicamente prensadas, de hojas de papel de Kraft, previamente tratadas con asfalto; las camadas internas son de fibras cruzadas de Sisal. Este papel es ampliamente usado en la industria de la construcción, como aislante térmico e impermeabilizante.
ZONAS DE CULTIVO.
La península de Yucatán (Tierra de origen del Sisal), está comprendida entre los 17º49' y 21º36' de latitud norte; zona ésta completamente semiárida y en la cual el Sisal encuentra un medio óptimo para su desarrollo.
Su cultivo se desarrolla dentro de una faja que comprende las zonas tropicales y sub-tropicales con alturas que oscilan desde 0-1500 m sobre el nivel del mar en las condiciones de clima y suelo más diversas; tanto es que, en Iowa, encontramos plantaciones que reciben más de 2500 mm de precipitación media anual.
El Sisal, por su naturaleza, como planta tropical, se desarrolla preferentemente en localidades donde prevalecen temperaturas relativamente elevadas durante la mayor parte del año; es por esto que puede ser cultivada con éxito dentro de una faja comprendida hasta los 25º de latitud al Norte ó al Sur de la línea ecuatorial. Además, como es una planta económica, requiere condiciones climáticas compatibles con el buen desarrollo y una alta productividad.
Para que su cultivo sea justificable lucrativo, la planta debe desarrollarse en el menor tiempo posible; pero el número y tamaño de hojas, la calidad y cantidad de fibras, dependen evidentemente de condiciones de temperatura y precipitación; cuando éstas no son adecuadas, retardan el ciclo y la producción resulta antieconómica.
En Venezuela el Sisal es cultivado en el Municipio Urdaneta del Estado Lara, una zona semiárida en la que existen limitaciones ambientales para la producción agrícola. En dicha zona, en la que existe un alto nivel de pobreza, muchas familias (unas 3000) reciben sus ingresos de la actividad sisalera.
Los productos de Sisal en Venezuela han venido enfrentando un problema desde hace algunos años: la falta de mercado debido a que se ha sustituido al Sisal por fibras sintéticas en la fabricación de mecates, cordeles y sacos. Esta situación ha generado un empeoramiento de las condiciones económicas de las personas que dependen del Sisal como fuente de ingresos. Por esta razón se hace necesario la búsqueda de otros usos de la fibra de Sisal para proporcionar nuevos mercados para esta fibra.
LAVADO DE LA FIBRA.
La importancia de las máquinas raspadoras grandes, consiste en que el lavado de la fibra se puede realizar económicamente y en mismo acto de beneficio. Por lo regular para esta labor se necesitan aproximadamente de 40000 a 30000 litros de agua clara por hora, lo cual incluye la necesaria para la limpieza del equipo y el acarreo de los desperdicios por arrastre ó gravedad. Cuando las disponibilidades de agua son limitadas, como las de nuestras zonas sisaleras, la cantidad anterior se puede reducir a unos 15000 litros, requiriendo para ello una fuente natural ó subterránea de un gasto ó producción de 8 a 4 litros por segundo, cuyo mínimo es factible conseguir.
SECADO DE LA FIBRA.
Luego de transportar la fibra húmeda al patio de secado con el debido cuidado, el productor o varios obreros, especialmente mujeres, la extienden en capas delgadas en la red de alambre del patio, a razón de un kilogramo por metro lineal, no mezclando sus extremos. La fibra no se ha de secar excesivamente, bastando solo de 4 a 8 horas, según sea lavada ó corriente.
En cuanto al secado, lamentablemente la mayoría de las fincas carecen de verdaderos patios de secado, realizándose la labor en simple magueyes soportados por estantes de madera tan pequeños que la fibra llega a pegar en el suelo, absorbiendo su humedad, color y polvo. Es frecuente también tirar la fibra recién beneficiada en el suelo y transportarla al patio sin la menor protección y cuidado. Estos métodos rudimentarios deben descartarse, acogiéndose a las Centrales o bien colocando la fibra en fardos, encerados o trailers y secarla en patios resguardados con rompevientos, piso cubierto y sobre todo provistos de una red de alambre liso inoxidable, soportado en estantes de madera ó ángulos de metal de 1,5 por 6 cm, fijados en concreto cada 6 m, en calles de 2 m de ancho. Los estantes tienen un travesaño de 40 cm que va colocado a 20 cm de su extremo superior. La red de alambre está formada por 3 líneas extendidas sobre la parte superior de los estantes y extremos de los travesaños, lo cual le da una configuración semicircular, que permite el secado sin dobleces agudos, que debilitan su resistencia y entorpece su hilado.
CLASIFICACIÓN DE LA FIBRA.
Esa labor consiste en seleccionar las distintas calidades o grados de una determinada fibra, que para el caso del Sisal está regida por su longitud, resistencia, olor humedad, presencia de manchas y defectos de beneficio tales como: polvo y adherencias de la corteza de la hoja, conocido como anillos.
La fase más apropiada para realizar la clasificación es cuando haya concluido su beneficio, o en su defecto, cuando se hace el corte de las hojas o cosecha. En el beneficio, ocurre cuando la fibra sale de la máquina automática, ya lavada y raspada ó el obrero en la maquinita portátil, ha raspado la otra mitad de la hoja. Aquí se seleccionan las distintas madejas o manojos individuales, según las distintas clases de fibra, que agrupadas en bultos son transportadas al patio de secado, en donde ya seca, se continúa la clasificación. En todas estas fases, la fibra debe ser bien tratada y acomodada, conservando los extremos la misma dirección, es decir, no mezclando las puntas con la base de las madejas o manojos. Igualmente, la clasificación de la fibra puede realizarse en el momento de la cosecha o corte de las hojas, las cuales se van clasificando siguiendo prácticamente las mismas normas. En esta labor, es bueno conocer que la planta de Sisal en todo su ciclo desarrolla 250 hojas, de las cuales 170 a 210 son de valor económico, por estar libre de rasgaduras, manchas y tener especialmente una longitud superior a los 70 cm. La cantidad de hojas desarrolladas por las plantas, depende respectivamente del material de propagación, del tipo, inicio y lapso de corte apropiado.
La clasificación en el campo es poco práctica y por lo regular queda deficiente debido a razones tradicionales y al mayor tiempo que invierten los obreros para concluir su tarea de corte y selección.
Resumiendo, la clasificación depende mucho de la cosecha y beneficio correcto o inicialmente de la esmerada selección del material de siembra usado, que como se indicó antes, ha de ser vigoroso, sano y de igual tamaño. Esta práctica conduce a la obtención de una plantación de tamaño uniforme, con hojas y fibra de igual característica; por lo tanto, es la primera acción al respecto por parte del productor. Cuando se adoptan estas excelentes prácticas, la clasificación resulta más fácil y económica, colocándose la fibra a mejores precios.
Para su mejor comercialización nacional e internacional, la clasificación de la fibra debe estar regida mediante normas o patrones respectivos, establecidos por las Asociaciones o Gobierno Nacional y no de acuerdo con el parecer de cada productor. En nuestro caso, se realiza en base a las exigencias de las industrias y mediante una clasificación para su Programa Nacional de Precios mínimos y pignoración que está llevando a cabo el Banco Agrícola y Pecuario. Tal es la siguiente:
Fibra Clase “A”: Fibra de 90 cm o más, limpia, sin herencias y polvo natural, resistente y de color blanco cremoso.
Fibra Clase “B”: Fibra de 80 cm o más, resistente, con escasas adherencias y polvo natural, color blanca cremosa, permitiéndose ligeramente manchas rojizas o verdosas.
Fibra Clase “C”: Fibra superior a los 70 cm, de color ligeramente amarilla, con escasas manchas, adherencias y polvo natural.
Para dar una idea exacta de las normas de una clasificación internacional, de seguida indicaremos parte de la adaptada por las Asociaciones de cultivadores de Sisal del África Oriental y la de London, desde el año de 1965, la cual es factible en nuestro medio:
Grado Uno: Fibra justamente cepillada, con longitud promedio de 105 cm, carente de defectos de desfibrado y empaque, tales como ripio, nudos y zonas endurecidas, color blanco cremoso a crema.
Grado “A”: Fibra cepillada, de características similares a la anterior, pero de color ligeramente amarillo, con pocas manchas y ligeramente descolorida.
Grado “2”: Fibra cepillada, con longitud mayor de 75 cm carente de defectos de beneficio, con presencia de ripio o estopa, nudos, zonas endurecidas y puntas pegadas. De color blanco cremoso a crema.
Grado 3L (Longitud 3): Fibra justamente cepillada, longitud superior a los 90 cm, con escasos defectos de beneficio o “limpieza” y presumiblemente libre de estopa ó ripio, nudos y zonas endurecidas. De color blanco cremoso o amarillento, con mayor proporción de manchas y fibras descoloridas que las permitidas en el Grado “A”.
Grado “3”: Fibra cepillada, características similares a la anterior, con longitud superior a los 60 cm. Su color puede variar entre blanco cremoso a ligeramente amarillo, con alta proporción de manchas y fibras descoloridas que la anterior.
Grado SCWF: Se refiere a una fibra corta, limpia y blanca. Es decir, fibra con longitud superior a los 45 cm, cepillada, carente de estopa, nudos y zonas descoloridas. De color crema a blanco cremoso.
Calidad extra: se refiere a aquellas fibras requeridas para propósitos especiales según sea su longitud, textura, color, limpieza y empaque respectivamente. Esta clasificación contempla también la del ripio de Sisal proveniente de las máquinas cepilladoras.
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Grado Uno (o primera clase): Se refiere al aprovechamiento de las máquinas cepilladoras; bien cortado, libre de franjas, sin cepillar, carente de nudos y franjas sin desfibrar.
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Grado Dos (o segunda clase): De color oscuro, libre de nudos y materias extrañas, permitiéndose haces de fibra sin cepillar y corte irregular.
CEPILLADO.
Ya seca y parcialmente clasificada, la fibra se le somete al proceso de cepillado para despegar sus distintos filamentos, liberarla del polvo y adherencias naturales que le hayan quedado todavía, tornándose así, más suave y limpia, factores coadyuvantes para su más fácil y mejor comercialización.
El cepillado de la fibra no es una práctica vigente entre nosotros, debido a la poca exigencia del mercado nacional o bien porque es realizada por las industrias y Centrales de Beneficio.
El cepillado puede ser mecanizado ó a mano; este último se conoce también como “batido” ó “peinado” de la fibra, por cuanto se ejecuta golpeándola varias veces con un madero delgado ó haciéndola pasar entre clavos sobresalientes fijados a una tabla colocada en la pared u otro soporte. La mecanizada se lleva a cabo en pequeñas máquinas constituídas esencialmente por un cilindro de un metro de diámetro con longitud variable, según sea para uno o varios operarios.
Al cilindro van insertadas varias cuchillas o ángulos de metal que al girar sobre un eje horizontal, montado sobre rolineras, origina la labor. Su parte exterior está constituída por una lámina delgada de metal la cual tiene una abertura horizontal o “boca” por donde se introduce la fibra en forma diagonal para su cepillado.
Para realizar bien esta labor se requieren obreros bien adiestrados y una correcta graduación de la máquina para evitar accidentes de trabajo, despeinado, enroscado y mayores desperdicios de la fibra.
ALMACENAJE Y EMPAQUE.
Luego del cepillado, el Sisal puede ser almacenado o empacado seguidamente, en estas labores se concluye la clasificación de la fibra. En cuanto al almacenado, la fibra debe ser colocada en sobre piso de madera o estibas para aislarla de la humedad y partículas extrañas, a resguardo del fuego e infiltraciones de agua. Como se viene indicando, los extremos de la fibra deben conservar su misma dirección.
Para su mejor presentación y economía de espacio o carga útil, la fibra debe ser empacada a cierta presión, en máquinas empacadoras que trabajan a 197 Kg. por centímetro cuadrado. Las pacas pueden ser de 150 cm por 60 cm ó 122 por 38 cm para 200 y 125 Kg. de fibra, respectivamente. Tales características son exigidas por las Compañías de Navegación para su mayor facilidad en sus labores de carga y descarga.
PRODUCCIÓN NACIONAL DEL SISAL.
EMPRESA SISALTEX.
Esta compañía cubre el 100% de la producción nacional de productos realizados con el sisal; dentro de su plantación, el promedio de altura de las plantas varia entre 1.70 a 1.80 metros de altura.
Para la extracción de la fibra de sisal, se utiliza una máquina rotativa donde se introduce la hoja y esta procede a ser golpeada con una cuchilla punta roma, con la finalidad de quitarle la concha verde, el bagazo de adentro y el agua, hasta que a la final nos queden unos filamentos que seria en sí la fibra de sisal, cuya longitud puede ir desde los 70 centímetros hasta 1.20 metro.
El trabajo de SISALTEX, es el de unir y entrelazar las fibras para poder hacer el producto corrido de hilos de sisal, con un par de milímetros de espesor para los hilos utilizados en los cordeles, mecates, sacos, etc.
PROCESOS PARA LA TRANSFORMACION DE LA FIBRA DE SISAL.
El primer paso para la transformación de la fibra de sisal, es el de la recolección de la materia prima, en donde llega el sisal sin clasificarlo del campo y con un solo precio de venta, el cual oscila en 220 Bs./Kg. El proceso consiste en llevar la materia prima a la preparación, para lo cual la compañía consta de tres (3) máquinas preparadoras y cuya función va a ser la de entrelazar el sisal. El sisal posee la particularidad de poderlo entrelazar y formar un hilo largo o mecha de sisal.
Después de preparadas las fibras, vienen tres (3) pasos siguientes:
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Recibir la fibra.
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Comenzar a mejorarla.
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Darle el acabado final en lo que se refiere a la preparación y limpieza.
Ya preparada la fibra se traslada a un segundo departamento que es el de estiraje, en el cual preparamos un sisal bastante grueso. Una vez preparado se empieza a reducir el diámetro hasta un diámetro final que seria el hilo de sisal; para realizar esta operación la empresa consta de seis (6) máquinas, cada una con un estiramiento diferente.
En cada máquina que introducimos 10 bultos vamos a sacar otros 10, luego estos 10 bultos se vuelven a pasar por una segunda máquina sacando 10 bultos más, es decir, de un (1) bulto grueso se llega a uno (1) delgado; ya en ese punto se tiene el material preparado para hacer los hilos donde van a ser destinados según su grosor: si es para sacos, si es para cordeles ó si es para mecates. Esto se logra cambiando las combinaciones de piñones en la máquina de hilandería.
Después del estiraje, se lleva a un cuarto departamento que es el de hilandería, donde se divide en tres líneas de producción: una línea para los sacos, otra para los cordeles y una última para los mecates.
SACOS.
Para la fabricación de los sacos, seguidamente de la hilandería se pasa al bobinado de los hilos con la intención de preparar bobinas grandes, las cuales, son más cómodas para trabajar ya que la urdidora permite hacer carretes de ocho (8) pulgadas; luego se agarra ese hilo y se pasa a una bobina grande para comenzar a trabajar. De la bobinadora de hilo se pasa al departamento de tejeduria donde ese hilo se convierte en tela que generalmente se utiliza para sacos de papas, café, cacao o cualquier tipo solicitado por el cliente. Por ultimo se pasa al departamento de corte y costura en donde se le da un acabado final para luego ser empaquetado y despachado.
Para la fabricación de sacos de papas se utilizan 140 hilos, para los sacos de maíz, cacao, etc. se utiliza 180 hilos y para sacos más compactos se utilizan 200 hilos.
SISALTEX posee un distintivo que registro hace 30 años, el cual es utilizado para diferenciarse de las demás fábricas o compañías que trabajaban con las fibras de sisal, dicho distintivo consta de los colores rojo y azul los cuales van a estar presentes en todos sus productos terminados.
Para teñir las fibras de sisal que se van a poner como distintivo se utilizan colorantes importados, ya que los nacionales no cumplen con las condiciones que se requieren para el teñido de la fibra.
CORDELES.
En la parte de cordeles, una vez que se posee el hilo de sisal, se pasa al departamento de retorción. La retorción va a depender de la solicitud del cliente (cordeles de un cabo, de dos cabos, tres cabos, etc.) estos cabos se pasan a retorción, se bobinan en el departamento de bobinado, se le da el tamaño que el cliente desee (bobina de 1 kilo, 2 kilos, etc.). Dependiendo de las exigencias del cliente se hace el bobinado, luego se empaqueta y por ultimo se despacha.
MECATES.
En lo que se refiere a los mecates el retorcido es diferente, en el caso de los cordeles se retuercen 1, 2, 3 hasta 4 hilos máximos, en la parte de mecates tenemos mecates bastantes gruesos, entonces la cantidad de hilos a torcer son mayores. Se retuercen, se construye el mecate, se empaca y se despacha.
ACOLCHONADO.
Para realizar este acolchonado de sisal se utiliza el sobrante de la producción en general y se hace en una línea de producción paralela a la de los sacos, mecates y cordeles. Dicho acolchado es usado en empresas que fabrican colchones, para colocarlo alrededor de la estructura de los resortes, esto se hace colocando una lámina acolchada por la parte superior y otra por la parte inferior de dicha estructura; después le hacen su relleno y lo forran con una tela decorativa.
Estas láminas se colocan con la finalidad de proteger, ya que el sisal como es fuerte y compacto no permitirá que los resortes se salgan. Lo común que se utiliza en el mercado para realizar estos acolchados, es hacerlo de algodón el cual se hace con desperdicios de telas, enredo de goma espuma o cualquier otro desecho.
Esta línea de producción se diferencia de las anteriores, que en vez de unir el sisal para hacer un hilo, lo desmenuza, con la intención de hacer puras fibras cortas y así colocar lajas de la misma una arriba de la otra como capas y después tejerlas. Esta línea se divide en: el picado del sisal, el primer paso de carda, el paso de transportadores, el tejido, el corte y el empaquetado.
OTRAS UTILIDADES DE LA FIBRA DE SISAL.
La fibra de sisal también es utilizada en la elaboración de páginas, pero no es muy rentable ya que la apariencia de las mismas no es refinada, también sirve para hacer los techos rasos, el soporte de las lijas pulidoras de los pisos de granito, el forrado de paredes, los guantes de baño, los guantes para la celulitis, los adornos artesanales, etc.
En cuanto al bagazo, aún no se le ha conseguido uso alguno, ya que posee poco nivel proteínico. Se ha intentado utilizarlo como alimento concentrado, como relleno, pero no funcionó; la idea era mezclar la alfalfa (pasto que se le da al ganado).
Con relación a la tierra, este no tiene ninguna utilidad porque no posee nutrientes, lo que se hace es utilizarlo a la hora de preparar el terreno para la siembra del sisal, se coloca una capa de bagazo y se deja un mes llevando sol, esto se hace con la intención de conservar el calor el cual es transmitido a la tierra y así matar a cualquier tipo de plaga que haya en el suelo, luego esta capa se retira y se prepara la tierra para la plantación del sisal.
El único problema que puede presentar el sisal es que si al cortarlo, quitarle la hoja y almacenarlo, el mismo se moja este se daña ya que es un material biodegradable, mientras se mantenga en un lugar seco no hay ningún problema.
ESQUEMA DEL PROCESO DE TRANSFORMACION DE LA FIBRA DE SISAL EN PRODUCTO TERMINADO.
Fibra de Sisal.
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Enviado por: | Luis Guillermo López Martín |
Idioma: | castellano |
País: | España |