Ética y Moral


Eutanasia o suicidio asistido


LA EUTANASIA

La Cámara de Diputados debate en estos días una iniciativa de ley sobre la eutanasia y los derechos de los enfermos en estado terminal, o sea, de quienes van a morir en un plazo breve porque los recursos médicos son incapaces de mantenerlos con una vida digna. Dentro y fuera de la Cámara de Diputados ha habido numerosas opiniones en pro y en contra de la iniciativa, generadas por “expertos“ y por el público en general. Lo que he oído y leído al respecto me hace pensar que si queremos llegar a algo concreto es necesario que todos hablemos de lo mismo y en lenguajes que nos ayuden a entendernos.

El presente ensayo va dirigido principalmente a quienes se interesan en el análisis racional de los sucesos para tratar de entenderlos. Voy a entrar en materia con una reflexión que estoy, “Te empiezas a complicar maestro“. Pienso que el asunto de la eutanasia debería ser mucho más fácil de comprender que, por ejemplo, la clonación. Prácticamente todos nos hemos enfrentado a la muerte de una persona amada, lo cual lleva a muchos a pensar en una eutanasia que termine con el sufrimiento de su ser querido. Contrariamente, muy pocos han escuchado la palabra clonación, y no saben bien a bien de qué se trata.

La eutanasia implica la terminación intencional, por parte de un médico, de la vida de un paciente terminal que lo solicita. Es un proceso que se inicia con la petición voluntaria y reiterada del enfermo, quien tiene un padecimiento intratable y con una calidad de vida ínfima e incompatible en su opinión (del enfermo) con su dignidad personal. Lo anterior se basa en el principio ético de la autonomía individual.

Hay cuando menos dos formas de eutanasia: activa y pasiva. La primera es la terminación de la vida de un enfermo por medio de alguna acción dirigida a ello, vg. aumentar la dosis de medicamentos contra el dolor. La segunda es por omisión, vg. suspender acciones médicas destinadas a prolongar la vida, entre ellas, apagar un respirador o cesar una alimentación artificial. La forma pasiva, de hecho, se realiza desde hace mucho tiempo de manera encubierta e incluso abierta, y tiene la aceptación de muchos médicos.

Hay discusión sobre si son realmente diferentes las formas activa y pasiva de la eutanasia. Para algunos la pasiva es dejar que la naturaleza siga su camino natural, ante la imposibilidad de tener medidas terapéuticas eficaces, pero la activa es un crimen pues hay intención de matar. En realidad, el paciente muere de ambas formas. En mi opinión, se hila muy delgado cuando se piensa que hay diferencia sustancial entre elevar la dosis de morfina para disminuir el dolor, a sabiendas de que el paciente tiene altas probabilidades de fallecer, y hacer exactamente lo mismo pero con la intención de que el enfermo muera dignamente.

Los argumentos de los que se oponen a la eutanasia no son solamente religiosos. Uno de los de más peso es que al legalizar la eutanasia se entraría a una pendiente resbaladiza que llevaría de manera inevitable a abusos, en el sentido de matar enfermos sin que ellos lo soliciten y por decisión del médico. En lo personal creo que es un temor infundado pues la experiencia de varias décadas de eutanasia legal en Holanda y de menos tiempo en Bélgica y el estado de Oregon en los Estados Unidos, señala que esto no ha ocurrido hasta el momento.

Otro argumento en contra de la eutanasia es que los cuidados médicos paliativos, o sea, los que tienden a disminuir los malestares del enfermo terminal, conducen según algunos especialistas, a que el paciente salga de su depresión y a que se arrepienta con frecuencia de haber solicitado la eutanasia. Me parece que los cuidados paliativos (sedantes) deben preceder a la eutanasia y ser complementarios al procedimiento, pero no substitutos. También pienso que siempre habrá pacientes que insistirán en que se les ayude a morir pese a que hayan sido beneficiados por el tratamiento paliativo, y creo que ellos también tienen derecho a ser escuchados.

¿Qué es la Eutanasia?

Actualmente existe mucha confusión sobre lo que es la eutanasia, es por ello que primeramente abordaremos algunas definiciones de eutanasia que nos ayuden a precisar este concepto.

Etimológicamente la palabra eutanasia viene del griego: eu = bien, y thanatos = muerte. Y significa primariamente "buena muerte", "muerte apacible", sin sufrimientos, esto es, el "Bien morir". "La eutanasia es el acto de proporcionar una muerte indolora a las personas que sufren enfermedades incurables". El motivo de "piedad" sobreentendido en la definición anterior aparece más explicita en "acabar intencionalmente por piedad la vida de otro ser humano"

En un documento religioso se ha declarado que "Por eutanasia se entiende una acción o una omisión que, por su naturaleza o en la intención, causa la muerte con el fin de eliminar el dolor."

Del campo médico y sociológico llegan otras definiciones. El Doctor Dérobert citando a Littré afirma que por eutanasia puede entenderse "la muerte dulce y sin sufrimiento que se da a los enfermos incurables, cuya evolución de la enfermedad es fatal y que están torturados con dolores físicos intolerables y persistentes, que los medios terapéuticos no pueden atenuar".

El moralista español Gonzalo Higuera entiende por eutanasia " la práctica que procura la muerte, o mejor, abrevia una vida para evitar grandes dolores y molestias al paciente, a petición del mismo, de sus familiares o, sencillamente, por iniciativa de tercera persona que presencia, conoce e interviene en el caso concreto del moribundo". En la actualidad en término de eutanasia ha evolucionado y la definimos como "el acto de poner término a la vida de un ser humano a petición suya con el fin de acabar con sus sufrimientos".

Adistanasia

La adistanasia consiste en dejar de proporcionar al enfermo los medios que sólo conducirían a retrasar la muerte ya inminente. Equivale a respetar el proceso natural del morir.

El 14 de septiembre de 1952 el Papa Pío XII condenaba las medidas terapéuticas "que degradan al hombre a la condición de un mero ser sensorial o autómata viviente". El mismo Pío XII en 1957 hablaba claramente de que no se puede en conciencia imponer la reanimación. En el mismo sentido se pronunció el Cardenal Villot en la carta que en nombre del Papa dirigió a la Federación Internacional de las Asistencias Médicas Católicas en 1970.

La Carta de los derechos de los pacientes es un documento que más que favorecer la eutanasia defiende la adistanasia: el derecho del enfermo a no prolongar irracionalmente su vida.

Ortotanasia

Del griego orthos: recto, justo y tanathos: muerte. Gonzalo Higuera la define como aquella postura que "tiende a conocer y respetar el momento natural de la muerte de cada hombre y sus concretas circunstancias, sin querer adelantarlo para no incidir en la eutanasia, no tampoco prolongar artificialmente cualquier tipo de vida con medios improporcionados, siempre dejando actuar e intervenir la relativa libertad de conducta que permite y exige la racionalidad humana, frente a una pasividad meramente animal".

La Eutanasia para la Iglesia Católica

Juan Pablo II

Durante la 54ª. Sesión de "aggiornamento" cultural organizado por la Universidad del Sacro Cuore, el Papa Juan Pablo II habló sobre la eutanasia en su elocución sobre el tema "El valor de la vida"., el 6 de septiembre de 1984. El Sumo Pontífice reiteró la obligación del creyente de defender la intangibilidad de toda vida inocente, y de oponerse inflexiblemente a las presiones de la cultura dominante para legalizar la eutanasia. El Pontífice atacó el problema de fondo: la eutanasia es sólo una consecuencia de las características negativas de una cultura muy en boga y que prescinde de la trascendencia: La costumbre de disponer de la vida humana desde su nacimiento. La tendencia a apreciar la vida personal sólo en la medida en que es portadora de riqueza y placer. La estimación del bienestar material y del placer como bienes supremos y, en consecuencia, la concepción del sufrimiento como mal absoluto que debe evitarse a toda costa y por todos los medios. La concepción de la muerte como un fin absurdo de una vida que podría todavía dar placer, o como la liberación de una vida que se piensa ya "desprovista de un sentido porque está destinada a continuarse en el sufrimiento". El Sumo Pontífice llamó con urgencia a un compromiso serio y constante de los auténticos valores cristianos, pues de los contrario se descenderá progresivamente a niveles mas inhumanos en la convivencia social de los hombres.

Eutanasia a nivel mundial

En el mes de abril de 2001, Holanda se convirtió en el primer país en el mundo en legalizar la eutanasia, proporcionando a los pacientes terminales el derecho a terminar con sus vidas a través de una inyección letal (suicidio asistido). La nueva ley menciona que los doctores ya no serán enjuiciados al dar al paciente una muerte piadosa "mercy killing". Aplican estrictas condiciones, con comités regionales de revisión de casos, médicos y expertos en ética cuidadosamente juzgarán cada solicitud realizada por el paciente. Una segunda opinión será necesaria.

En los Estados Unidos de Norteamérica, el reporte anual del 2001 demuestra una vez mas que la Ley sobre Morir con Dignidad - Suicidio Asistido funciona en el Estado de Oregon: -"El 6 de febrero, el Departamento de Servicios Humanos de Oregon realizó su cuarto reporte anual en el uso de la Ley de Morir con Dignidad. Este reporte anual incluye: 21 pacientes usaron la Ley en 2001. "pérdida de autonomía y disminución de habilidades para mejorar sus condiciones que hacen su vida placentera" fueron las dos mas frecuentes razones para terminar con su vida. La mayoría de los pacientes prefirieron morir en sus hogares. Los 21 pacientes tenían seguro médico."

Por otra parte el debate sobre la eutanasia es fuerte en otros países

En Francia, el Ministro de Salud el Dr. Bernard Kouchner, mencionó que utilizará la aprobación de Holanda para presionar la legalización en su país. En Australia, una región, el territorio del norte, fue el primer lugar en el mundo que legalizó la eutanasia en 1996, antes de que la ley fuera replanteada y rechazada nueve meses después. En Inglaterra, una mujer paralizada ganó el derecho a morir en un controvertido caso. -"El pasado 22 de marzo de 2002, la Corte Inglesa aprobó a la Sra. B, una mujer paralizada que quería tener el derecho legal de negarse al tratamiento médico respectivo. Entrada en los 40´s, la Sra. B era mantenida viva por medio de un ventilador, su condición física era deplorable. Con un 1% de oportunidad de mejorar su condición, la mujer quien estaba con todas sus facultades mentales solicitó a los médicos que apagaran el ventilador. Este caso confirma en Inglaterra que la decisión del paciente debe de ser el centro de todo tratamiento -"

Voy a cerrar estas consideraciones con preguntas, y no con declaraciones. Están dirigidas a las personas que tienen objeciones religiosas a la eutanasia. Si fuera cierto que la eutanasia desafía la voluntada divina ¿no sería mejor que fuera la justicia divina quien tomara las medidas pertinentes? Privar de su autonomía a personas que piensan diferente ¿no es jugar a ser Dios?

BIBLIOGRAFÍA

  • http://www.cronica.com.mx/nota

  • http://www.cronica.com

  • Dr. Rubén Lisker, Consejo consultivo de ciencias

  • http://tanatologia.entornomedico.org/modules.

  • (Congregación para la Doctrina de la Fe. Cfr. Ecclesia 1190, 1980,29).

  • (Derobert, L. en Cahiers Laënnec, Juin 1949).

  • (Higuera G. Distanasia y moral: experimentos con el hombre, Santander, 1973, 252).

  • Víctor M. Pérez Valera en su libro- "Eutanasia, ¿piedad?, ¿delito?" Editorial Jus (pag 64)

  • Léuthanasie, probléme de cultura et de foi, allocution du Pape á una session de ´Université Catholique Italienne, en La Documentación Catholique, 4 nov., 1984. No. 1883, 1018-20.

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    Dr. Rubén Lisker, Consejo consultivo de ciencias

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    * Léuthanasie, probléme de cultura et de foi, allocution du Pape á una session de l´Université Catholique Italienne, en La Documentación Catholique, 4 nov., 1984. No. 1883, 1018-20.

    http://tanatologia.entornomedico.org/modules




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    Enviado por:Romeo
    Idioma: castellano
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