Literatura
Cuentos de misterio e imaginación; Edgar Alan Poe
Resumen: TALES OF MISTERY AND IMAGINATION (Edgar Allan Poe)
1. The Fall Of The House Of Usher.
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Personajes:
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El narrador.
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Roderick Usher (amigo del narrador, vive en la casa Usher, heredada de sus padres).
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Lady Mdeleine (hermana de Roderick, vive con él.
Resumen:
El narrador recibe una carta de su amigo Roderick en la que le dice al narrador que se encuentra muy enfermo y que necesita que vaya a verle. El narrador es el único amigo de Roderick desde la infancia, a pesar de que desde entonces no se veían, y por eso le escribe la carta a él. Cuando el narrador llega a la casa ve que está muy vieja y que es muy misteriosa, y hace al narrador sentirse muy triste.
Entra en la casa y es recibido por un sirviente, y en las escaleras se encuentra con el doctor de la familia, que está muy preocupado. Sube a la habitación de Roderick y le encuentra muy débil, con la cara pálida pero con los mismos ojos e igual de delgado que siempre. Se pusieron a hablar y Roderick le contó a su amigo que tenía una extraña enfermedad que le hacía sentir todo mucho más pesado que al resto de la gente, que le dolía todo y estaba muy delicado, y que pronto moriría.
Mientras hablaban, Lady Madeleine pasó por delante de la habitación, y el narrador se dio cuenta de que estaba enferma, y Roderick le dijo que la enfermedad de su hermana no la conocía ningún médico y que era incurable, que cada vez se volvía más delgada, y que muchas veces cuando dormía estaba muy cerca de la muerte. Esa vez fue la última vez que el narrador vio a Madeleine viva.
El narrador se quedó una temporada acompañando a su amigo, y pintaban, leían y Roderick tocaba la guitarra a veces. Un día, el narrador estaba leyendo cuando Roderick le dijo que Madeleine había muerto, y que había decidido, para que los médicos no investigaran su enfermedad, dejarla una temporada en el sótano de la casa, con lo que el narrador tuvo que ayudar a su amigo a bajar el féretro con el cadáver de Madeleine.
Los días pasaron y Roderick comenzaba a encontrarse cada vez peor, lo que hacía al narrador sentirse triste.
Un día, había una enorme tormenta, y estaban el narrador y Roderick en la habitación de Roderick, el cual estaba muy enfermo. Para ayudar a que se calmase de la tormenta, el narrador se puso a leer un libro, titulado The Sad, Mad Life (la triste y loca vida), cuando de repente comenzó a oír llantos. Comenzó a dar vueltas por la habitación nervioso, cuando se dio cuenta de que habían puesto a Madeleine viva en el féretro, lo que hizo a Roderick ponerse muy furioso y le empezó a llamar loco. El narrador huyó de la casa mientras se derrumbaba, y se dio la vuelta para ver como la luna llena, de un color rojo sangre, iluminaba los restos de la casa Usher.
2. The Black Cat.
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Personajes:
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El narrador.
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La mujer del narrador.
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El gato Pluto.
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Otro gato parecido a Pluto, que era igual que Pluto pero tenía una mancha blanca en el pecho.
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Resumen:
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Personajes:
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Prince Prospero.
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The Red Death.
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Resumen:
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Personajes:
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William Wilson (el narrador).
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William Wilson (el compañero pesado, o amigo en su momento).
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Resumen:
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Personajes:
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El narrador.
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The old man (un anciano).
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Resumen:
El narrador siempre había amado los animales, y afortunadamente, la mujer con al que se había casado también, por lo que tenían la casa en la que vivían llena de animales: perros, gatos, gallinas, y un gato. Ese es el animal que más quería el narrador, un gato llamado Pluto, negro y alargado. Durante varios años habían sido muy amigos el narrador y él, pero de repente el narrador había comenzado a convertirse en un borracho y en un ser muy violento, por lo que comenzó a odiar a sus animales y a pegar a su mujer. Más tarde, aunque le costó más, también comenzó a odiar a Pluto.
Una noche, el narrador llego a casa muy bebido, y Pluto le vio y huyó de él, lo que provocó que el narrador agitara a Pluto, por lo que éste le mordió, y el narrador se cabreó mucho y cogió un cuchillo y le cortó un ojo (se lo quitó).
Entonces el tiempo pasaba y Pluto huía cada vez más de su dueño, que seguía bebiendo cada vez más, y lo pagó con Pluto, ya que un día le ahorcó colgado de un árbol por una cuerda. Esa noche la casa se incendió, y un vecino avisó al narrador cuando estaba durmiendo. Afortunadamente, su mujer y él se salvaron, pero perdieron todas sus cosas.
La mañana siguiente, cuando regresaron a la casa, sólo quedaba la pared de su habitación que daba al cabecero de la cama en pie, y había mucha gente alrededor de la pared. El narrador fue a mirar porqué había tanta gente y vio la silueta de un gato dibujada en la pared, entonces decidió ir al árbol en que había ahorcado a Pluto el día anterior, y vio que no estaba allí, y pensó en algo lógico: el vecino que les había avisado del incendio había cogido a Pluto del árbol y, como estaba muerto, le había lanzado hacia la ventana de la habitación para avisarles de que había un incendio, y la silueta del gato había quedado marcada en al pared.
Se mudaron de casa, y el narrador seguía bebiendo, y buscaba otro gato igual a Pluto, ya que lo echaba de menos. Una noche, estaba bebiendo en su bar favorito cuando vio a un gato igual que Pluto menos en una cosa, tenía una mancha blanca en el pecho. El narrador le dijo al camarero que le compraba el gato, pero éste le dijo que era un gato callejero y que podía llevárselo si quería. Entonces lo llevó a casa, y a su mujer también le gustó, pero el gato comenzó a querer sólo al narrador, y éste a odiarle. También le faltaba un ojo, como a Pluto, y como a Pluto, el narrador le odiaba cada vez más. La marca que tenía en su pecho comenzó a parecerse cada vez más a una horca, lo que provocaba mucho miedo en el narrador, pero a la vez más y más odio.
Un día, tuvieron que bajar el narrador y su mujer al sótano a coger algo, y allí estaba el gato, y el narrador cogió un hacha y, cuando iba a matarle, su mujer le sujetó del brazo, el narrador se dio la vuelta, y mató a su mujer de un hachazo. Entonces pensó qué podía hacer para esconder el cadáver, y decidió esconder el cuerpo entre la pared, ya que era de ladrillo hueco. Quitó los ladrillos, metió allí el cuerpo de la mujer y volvió a colocar los ladrillos de tal forma que no pareciesen nuevos. Esa noche, a pesar de haber matado a su mujer, durmió bien. El gato desapareció desde aquel día, con lo que el narrador se sentía satisfecho.
Un día, llegó la policía a la casa del narrador, para inspeccionar por la desaparición de la mujer, bajaron al sótano y, cuando se iban, contentos porque no había nada, comenzaron a oír maullidos procedentes de la pared. Los policías comenzaron a quitar ladrillos y encontraron al gato sentado sobre la cabeza de la mujer del narrador.
3. The Masque Of The Red Death.
The Read Death era una especie de virus que siempre había temido todo el país. Era llamada así porque dejaba sangre roja, horrible, en el cuerpo de cada persona a la visitaba. Todo el mundo la temía, menos el Príncipe Prosper, que vivía tranquilo su vida mientras todo el mundo se aterrorizaba.
Un día, el Príncipe decidió dar una fiesta en uno de sus castillos, construido para la ocasión, lejos de los límites del país, donde el virus no pudiese entrar, e invitó a miles de sus amigos más fuertes y valientes. Era una gran fiesta, con bebidas, músicos, bailarines…estaba lleno de gente dentro, y fuera estaba The Red Death.
En el castillo había diferentes habitaciones, una de cada color, que no estaban comunicadas unas con otras como en otros castillos, sino que daban a un pasillo común. Cada habitación tenía una ventana del mismo color que daba a ese pasillo común. Había 7 habitaciones, de diferentes colores: azul, morada, verde, naranja, blanca, violeta y negra. En ésta última, la más terrorífica, había un viejo reloj, que cada hora sonaba, y toda la gente del baile se sonreía mutuamente haciendo como que no tuviesen miedo, y volvían a bailar.
Toda la gente iba disfrazada, y cada vez que cambiaban de habitación, el color de sus trajes cambiaba.
A medianoche, sonó el reloj de la habitación negra, y todo el mundo se dio cuenta, por tristeza y malestar, de una extraña persona que no habían visto antes, The Red Death, que se diferenciaba de las demás porque iba vestida de blanco, y su máscara era real, la cara de un hombre muerto.
El príncipe se puso pálido y, de una habitación a otra, comenzó a huir, perseguido por The Red Death, hasta la habitación negra, y a pesar de que el príncipe tenía una espada, el extraño se giró y miró al príncipe, que cayó muerto en el acto.
The Red Death se escondió al lado del reloj. Cuando lo encontraron intentaron quitarle la ropa y la máscara, pero no había nada dentro. Entonces la gente del baile se dio cuenta de que la muerte estaba allí, y no se fue hasta que murieron todos los invitados, cuando solo quedaba la oscuridad en el castillo.
4. William Wilson.
William Wilson no es el verdadero nombre del narrador, pero él quiso llamarse así en esta historia. William Wilson 1 (el narrador) tenía un amigo que conoció en un colegio (William Wilson 2). Ellos eran muy amigos y se parecían mucho, cada vez más, ya que W. W. 2 se copiaba del carácter del 1º, de su forma de vestir, de actuar, etc. Esto sacaba de quicio a William Wilson 1, que una vez quiso matar al otro, una noche, pero que no pudo hacerlo por remordimiento.
Pronto W. W. 1 se trasladó de colegio y olvidó a W. W. 2, donde aprendió a jugar a las cartas y a ganar dinero haciendo trampas. Un día, W. W. 2 fue a visitarle, tapado con una capa.
Más tarde se fue a la Universidad de Oxford, donde siguió jugando a cartas y apostando más y más. En su segundo año conoció a un tal Glendinning, un chico muy rico, al que pretendió engañar jugando a las cartas y apostando dinero. Perdió todo el dinero (W. W. 1 se dio cuenta de que no era tan rico como se rumoreaba), con lo que se puso pálido cada vez más y comenzó a llorar. De repente se abrieron las puertas de la habitación y entró un hombre cubierto por una capa, y le dijo a la gente que W. W. 1 estaba haciendo trampas con las cartas. Todo el mundo se enfadó con él y tuvo que dejar la Universidad de Oxford y se fue hacia Europa. Pronto llegó a Paris, donde volvió a encontrarse con W. W. 2, y en Roma, En Viena, En Berlín y también en Moscú, y siempre echaba a perder los malvados planes de W. W. 1.
Una noche, W. W. 1 fue invitado a una fiesta en Roma en el palacio del Duque Di Broglio, que era muy viejo y aburrido, pero su mujer era muy guapa, y W. W. 1 había quedado con ella en una habitación. Cuando iba hacia la habitación, alguien le tocó en el hombro, se dio la vuelta y vio a W. W. 2, vestido igual que él, pero tapado por una máscara. W. W. 1 le dijo que parase de perseguirle por todos lados, y que fuese a una habitación separada, o sino lo mataría ahí mismo. Entraron en la habitación y W. W. 1 sacó su espada para luchar, al igual que el 2, y el 1 se la clavó una y otra vez en el cuerpo, matándolo, pero llamaron a la puerta y el 1 fue a ver si estaba bien cerrada. Cuando se dio la vuelta, la habitación había cambiado completamente, y había un espejo al fondo. El 1 se miró en él y vio su cara blanca, su cuerpo lleno de sangre, pero era la cara del W. W. 2, cuya cara era la del propio W. W. 1. El W. W. 2 habló, y le dijo al 1 que él había ganado y el otro había perdido, pero que los dos estaban muertos para el mundo, y que el W. W. 1 se había matado a él mismo.
5. The Tell- Tale Herat.
El narrador tenía muy buen oído y siempre había sido una persona muy nerviosa. Podía oír muchas cosas que las demás personas no podían, sonidos del cielo y sonidos del infierno, incluso.
El anciano al que cuidaba el narrador, era una muy buena persona, que nunca le había hecho daño. Pero el narrador le odiaba porque tenía un ojo de un color azul muy intenso, que le sacaba de quicio.
Cada noche, cuando el anciano se iba a dormir, el narrador cogía su linterna y, después de 60 minutos, se ponía a mirar desde la puerta al anciano que dormía para matarle, por su ojo, pero éste estaba cerrado, por lo que no podía.
Una noche, cuando estaba encendiendo la linterna, hizo un ruido y el anciano se despertó, preguntando que quién estaba allí. Durante una hora el anciano estuvo atento a cualquier ruido, y el narrador quieto, escuchando. De repente oyó un ruido seco, y el anciano murió. El narrador, que tenía un oído muy bueno, comenzó a oír los latidos del corazón del anciano, que aún latía, con lo que cogió su cuerpo y lo tiró al suelo, y le tiró la pesada cama encima suya, para que el corazón dejase de latir. Cuando estuvo seguro de que su corazón había dejado de latir, cortó la cabeza, brazos y piernas del cuerpo y los escondió en el suelo, bajo unos tablones de madera.
Entonces 3 policías llamaron a la casa, porque un vecino había oído un grito y les había llamado, y él les explicó que había sido él, que había gritado en un sueño. Pero los policías quisieron entrar en la casa, y después de comprobar que todo estaba en orden, se sentaron en unas sillas en la habitación del anciano, y el narrador puso su silla encima de los tablones bajo los cuales estaba el cuerpo del anciano. Los policías comenzaron a hablar y e narrador empezó a oír un ruido, que cada vez se hacía más y más fuerte. Cuanto más fuerte hablaba el narrador con los policías, más fuerte era el ruido en la cabeza del narrador, hasta que no aguantó más y les dijo a los 3 policías que no hacía más que oír el latido del corazón del anciano, y que su cuerpo se encontraba bajo los tablones de madera del suelo.
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Enviado por: | Sara |
Idioma: | castellano |
País: | España |