T13- Cianobacterias

En libros sale también como Cyanophyta, pero en realidad son bacterias. La gran mayoría son organismos fotosintéticos, todos procariotas y con pared celular con mureína (Gram -). Hay formas unicelulares (habituales en zonas marinas) y cenobios (células en matriz de mucílago). No hay formas flageladas.

Los pigmentos importantes son clorofila a y ficobilinas (las más comunes son ficocianinas, que dan color verdeazualdo; aunque también las hay con ficoeritrinas). No están en cloroplastos porque no tienen (son procariotas); en su lugar los almacenan en unos orgánulos del citoplasma llamados ficobilisomas. Su sustancia de reserva es la cianoficina. No se conoce reproducción sexual; usan multiplicación vegetativa por división celular o formación de homogonios (propágulos).

Dentro de los cenobios (principalmente tricoides, células encadenadas rodeadas por vaina de mucílago) se distinguen dos tipos de células especializadas: los heterocistes y los acinetos.

Los heterocistes son translúcidos e intervienen en la fijación de nitrógeno; los acinetos son células opacas al microscopio y son células de resistencia que se forman en condiciones adversas. Acumulan sustancias de reserva y pueden separarse del grupo y resistir, para después generar nuevas cadenas de células.

Entre las cianobacterias que forman cenobios trocoides están Nostoc y Ondullatoria. Entre los palmeloides están Microcystes (formas curiosas) y algunas con aspecto de colonia, pero que siguen siendo cenobios por la vaina de mucílago, como Eucapsis.

Las unicelulares forman parte del picoplancton marino (plancton formado por células procariotas pequeñas; entre 0,2 y 2 µm). Algunas cianobacterias han desarrollado estromatolitos, deposición de capas de carbonatos sobre las cianobacterias. Algunos tienen edades de 3,5 m.a.; lo que los sitúa como los organismos más antiguos y se considera que los que tienen entre 2,5-2 m.a. fueron la primera fuente de oxígeno. Nos proporcionan información importante sobre cambios climáticos.

Las cianobacterias siempre están en los embalses y pantanos, pero a concentración baja. El problema surge cuando proliferan por aumento de nutrientes; especialmente las especies de Anabaena o Aphanizomenon, que aumentan la toxicidad del agua. Provocan neurotoxicidad (sistema nervioso) o problemas al sistema hepático que conducen a la muerte. Consideradas armas biológicas. Afortunadamente al proliferar el agua adquiere olor desagradable.

Las cianobacterias toleran muchísimos contaminantes, por lo que se podrían usar para descontaminación. Ej: aguas del lago de la casa de campo. Provocan alergias y afecciones cutáneas.

Algunas cianobacterias como Nostoc participan en líquenes, sobre todo en los gelatinosos. Otros se unen a otros organismos, como ejemplares de Anabaena no tóxicas con helechos acuáticos del género Azolla (el primero fija nitrógeno, el segundo protege de depredadores). En cultivos de arroz se planta siempre Azolla. Otro ejemplo está en las raíces con aspecto de coral del género Cycas.