ENTRE LA SELVA Y EL ASFALTO

El actual Zoo de la Casa de Campo se inauguró en 1972, y desde entonces ha llevado a cabo una importante labor de estudio y conservación de las especies amenazadas de extinción en estado libre, además de enriquecer su colección gracias a regalos y donaciones de otros países. Desde 1987, además, el Zoo ha crecido en interés.

El Zoo de Madrid tiene su origen en la antigua Casa de Fieras del Retiro, fundada por Carlos III hacia 1770. Situada junto al Jardín Botánico, su finalidad principal era exhibir a los animales que llegaban de las colonias americanas, junto con algunos ejemplares autóctonos de la fauna ibérica y otros pocos procedentes de Asia y Africa.

Tras la Guerra de la Independencia, la Casa de Fieras fue trasladada por Fernando VII hasta el lugar que ocupa en la actualidad, donde permaneció como el principal parque zoológico de Madrid hasta la inauguración del Zoo de la Casa de Campo

El verdadero promotor y creador del nuevo Zoo de Madrid fue el ingeniero de caminos D. Antonio Lleó de la Viña, bajo cuya dirección y coordinación se construyeron las actuales instalaciones. En la construcción del recinto, optó por el cemento como material de integración con el entorno que junto con la vegetación que lo adorna lo convierten en una mezcla estética que parece que cada año se valora más; ésto se alejaba bastante de los conceptos de entornos naturales que aplicaban entonces otros parques zoológicos.

El actual Zoo de la Casa de Campo se inauguró en 1972, y desde entonces ha llevado a cabo una importante labor de estudio y conservación de las especies amenazadas de extinción en estado libre, además de enriquecer su colección gracias a regalos y donaciones de otros países. Desde 1987, además, el Zoo ha crecido en interés mediante la construcción de un gran Delfinario, dotado con las más modernas instalaciones para albergar tanto delfines como leones marinos. Cuenta con un aforo de 3.000 personas que pueden disfrutar de las exhibiciones de estos animales, y varios miradores de cristal colocados en los muros de la piscina hacen posible seguir sus movimientos dentro del agua.

La última gran instalación en incorporarse a las atracciones que ofrece el Zoo de Madrid ha sido el Aquarium, inaugurado el 16 de mayo de 1995 y dedicado a la fauna y la flora de los mares tropicales. Este acuario pertenece a los denominados "de nueva generación", que se caracterizan por su especialización. En éste, es la fauna tropical, y en él se han aplicado las más sofisticadas técnicas para lograr el óptimo mantenimiento de sus habitantes, y ocupa un área de 3.000 metros cuadrados.

“PARQUE PARA RECORRER”.

El Zoo abarca una extensión de 20 hectáreas. Con un recorrido que mide unos 7 kilómetros, sin contar los otros 60 kilómetros de conducciones de agua, gas y electricidad que circulan debajo de sus asfaltados paseos. Ofrece al público más de 4500 ejemplares representativos de 445 especies, que se exhiben en las cinco áreas del zoológico dedicadas a la fauna de los cinco continentes, así como el complejo de animales acuáticos, el Zoo Chico, el pabellón de Naturaleza Misteriosa y Reptilario, el Delfinario y el Aquarium.

La infraestructura del Zoo abarca edificios para la dirección, cocina y almacén, calefacción, cuarentena y servicios veterinarios, central depuradora de aguas, garaje, talleres y dependencias para el personal. En cuanto a los servicios para el público, se pueden mencionar entre otros las fuentes de agua potable, distribuidas por paseos y plazoletas; la cafetería central y su restaurante, los bares situados en diversas zonas del Zoo, las tiendas de recuerdos y regalos y las zonas de juegos.

Las instalaciones que albergan a los animales están diseñadas para mostrar a éstos en un estado de libertad, buscando la recreación de su territorio. La mayoría de ellas disponen de un recinto enrejado destinado a proporcionar alojamiento al animal en determinadas circunstancias de su vida (aislamiento de hembras gestantes, madres con crías, individuos agresivos, etc.). Todos los animales, aun los más inofensivos, se encierran por la noche, lo que permite un mejor control de la alimentación, limpieza y atención sanitaria. Uno de los elementos más importantes para llevar a cabo esta labor es el edificio de la Fauna Africana de invierno, obra única en su género, que permite la exhibición de las especies africanas en presentación interior, con acondicionamiento de aire y control de temperatura

EL CUIDADO DE LOS ANIMALES

El cuidado de las colecciones zoológicas es siempre un trabajo complejo y delicado, que ocupa un lugar importantísimo en la compone principalmente de la alimentación, la higiene y... ¡los cuidados psíquicos!

La alimentación se basa en una dieta equilibrada, adecuada a la estación, edad y condición del animal. De las cocinas del Zoo de Madrid salen todos los días no menos de setenta y cinco dietas actividad diaria del Zoo de Madrid. Se diferentes; un tapir, por ejemplo, puede consumir al día un kilo y medio de pienso, tres kilos y medio de fruta y otros de alfalfa, mientras que un guepardo necesita diariamente de un kilo y medio a dos y medio de carne de vaca o pollo y casi medio litro de leche, más un corrector vitamínico.

El plan de higiene y prevención sanitaria de los animales es riguroso, e incluye desinfecciones, vacunas y análisis periódicos, así como una eficaz medicina veterinaria.

En cuanto a los cuidados psicológicos, son necesarios especialmente en los animales dotados de mayor inteligencia, En general consisten en brindarles un nexo afectivo con una persona u otro animal (como en los gorilas jóvenes), una ocupación física y mental (terapia de trabajo, como en el caso de las focas y papagayos) o simplemente un entretenimiento periódico, como en el caso de los monos, a los que se reparte la comida varias veces al día.

Las medidas anteriores y el cuidado con que se aplican permiten que el Zoo Aquarium de la Casa de Campo tenga un índice de reproducción en cautividad del 80%, que supone un verdadero éxito y lo convierte en uno de los más importantes del mundo en ese apartado.

EL DELFINARIO

Está compuesto por un amplio complejo destinado a la protección, reproducción y exhibición de una de las especies más fascinantes de mamíferos acuáticos, los delfines. Para ello, cuenta con las instalaciones precisas para atender las exigencias de estos animales, que representan el grado más alto de adaptación al medio acuático: Una gran piscina de forma arriñonada, cuyas dimensiones son de 36 metros de longitud por 10 de anchura media por 5 de profundidad, con una capacidad de más de 2 millones de litros de agua. Además, cuenta con dos piscinas cubiertas, una para entrenamiento y otra de cuarentena, destinada a la atención médica de los animales.

Estas instalaciones están mantenidas por un complejo sistema de depuración de agua y calefacción, que permite mantener constantes la temperatura y salinidad del agua, y rodeadas por servicios auxiliares tales como laboratorios, cocinas y cámaras frigoríficas.

EL AQUARIUM

Ha sido construido sobre un espacio de planta cuadrada de 50 metros de lado en forma de pirámide truncada, y está culminado en su parte superior central poruna pirámide acristalada, también cuadrangular.

Consta de 35 acuarios de exposición cuyo volumen está ocupado por casi dos millones de litros de agua marina de óptima calidad, fabricada con sal importada dotada de todos los elementos minerales necesarios. Para el mantenimiento de las condiciones de esta agua, así como para la alimentación y cuidados de los animales, así como una sala de cuarentena cuyos acuarios sobrepasan una capacidad de 20.000 litros.

El Aquarium se completa con una sala de conferencias con capacidad para casi un centenar de personas y en la que se proyecta vídeos didácticos del mundo marino, tienda de recuerdos, puntos de información interactiva para ampliar hasta los más mínimos detalles lo observado y un gran espacio en la planta superior dedicado a exposiciones temáticas del mundo zoológico y de la naturaleza.