Arte
Cuevas de Lascaux
Índice
Introducción............................................................................................................................3
Lascaux, Descubrimiento y Cierre..........................................................................................7
Lascaux, Situación Geográfica e Histórica del Arte Parietal..................................................8
Lascaux, Características generales........................................................................................11
La Escena del Pozo...............................................................................................................13
Lascaux, El Unicornio y los ciervos nadando.......................................................................15
Conclusiones.........................................................................................................................16
Bibliografía...........................................................................................................................18
Introducción
Desde siempre el hombre ha sentido la necesidad de explicar y entender los fenómenos que lo acontecen. Es por ello que a través de diferentes disciplinas busca las respuestas a sus interrogantes.
Durante los miles de años en que no contaba con las herramientas de investigación, de igual manera sucedían acontecimientos que forman parte de nuestra historia. Durante el periodo denominado Prehistoria, existían grupos humanos que estaban generando nuestra cultura. Sabemos poco de la vida (ritos, creencias, tradiciones) y del comportamiento social del hombre prehistórico y existen muchas teorías que tratan de dar una explicación o interpretación, pero cualquier indicio de ello, es arriesgado frente a figuras destruidas, erosionadas o simplemente desaparecidas por la naturaleza. De una u otra forma, por medio de las diversas investigaciones hemos podido conocer, parcialmente, el modo de vida de aquellos tiempos; eran principalmente pueblos nómades ya que realizaban desplazamientos estacionales en función de los recursos aprovechables dentro de un amplio territorio. El hombre todavía tenía que competir con animales por los recursos, lo que no le permitía grandes acumulaciones de posesiones materiales.
Eran sociedades donde todos los bienes eran propiedad común y el reparto de los alimentos se hacía de forma igualitaria, se basaron en un comunismo elemental, que implicaba como base de las relaciones sociales la solidaridad.
Los cazadores-recolectores formaban comunidades de grupos reducidos que vivían de la caza, de la pesca, de la recolección de alimentos silvestres, frutos secos (piñones, nueces y otros), raíces, setas, insectos, etc. Grupos de distintos territorios incluso se necesitaban mutuamente para el intercambio de materias primas, cacerías colectivas y para evitar la consanguinidad (propiciar parejas).
Desde tiempo inmemorial el hombre ha utilizado las cuevas para protegerse de las inclemencias del tiempo. Gracias a las condiciones favorables para la conservación de sustancias normalmente perecederas, el estudio arqueológico de estos lugares ha contribuido de forma significativa a la reconstrucción de nuestra Prehistoria. El tamaño de las cavidades varía desde pequeños abrigos rocosos hasta grandes sistemas de galerías subterráneas. La espeleología, una rama de la geología, es la ciencia que estudia estas cuevas, proporcionando datos de gran interés para la mineralogía, hidrodinámica, biología y otras ramas científicas. Las cuevas se han localizado desde el sur de España y Portugal hasta Rusia, con una frecuencia de distribución muy desigual. Mientras en muchas regiones se trata de casos aislados, destacan el norte de España y los Pirineos franceses por la gran abundancia.
El arte es un invento del hombre físicamente moderno (Homo sapiens sapiens) que empezó a extenderse por Europa hace unos 40.000 años (sustituyendo a su contemporáneo, el hombre de Neandertal) cuando nacen las primeras creaciones artísticas. El hombre moderno, inauguró un nuevo período, el Paleolítico Superior, las capacidades intelectuales de éste hombre, le permitían realizar apropiaciones del espacio inmediato. Dejó constancia de su pensamiento en forma de figurillas y pinturas, incisiones y grabados en una gran variedad de objetos y soportes (piedra, hueso, asta, arcilla, etc.)
El arte parietal de las cavernas ofrece una particularidad excepcional: sus obras permanecen allí donde su autor las ha realizado. Las figuras grabadas, esculpidas, pintadas han querido significar algo, incluso cuando parecen haber sido realizadas sin orden aparente. Se puede observar la intención de comunicar algo. El arte parietal Paleolítico, aporta a nuestra observación informaciones considerables sobre el medio ambiente animal del hombre y son muchos los investigadores que han establecido los beneficios que aportan el conocer la Prehistoria como contexto socio cultural para entender el arte y las obras de hoy. El arte como manifestación de la cultura, y fenómeno social.
Cuevas decoradas, poseen figuras intencionadamente incompletas o ambiguas. La práctica de no dibujar la silueta entera de las figuras era muy frecuente. En estos casos, lo que falta no viene señalado por el pigmento de la pintura o por el surco del grabado: es el relieve de la roca madre el que completa la imagen.
En muchos casos da la impresión de que el animal sale de la misma pared de la cavidad. El arte parietal paleolítico no se desarrolló exclusivamente en cuevas profundas y oscuras. También en lugares donde llega la luz del día.
El número limitado de especies representadas y otras observaciones originaron la opinión generalizada que ve en estos lugares santuarios. Esto viene corroborado por los resultados de numerosas excavaciones que demostraron que los animales más representados no siempre fueron los más capturados.
Composiciones abstractas de signos y símbolos y la ausencia por ejemplo de representaciones de plantas, astros y paisajes dejan claro que el arte Paleolítico no es una simple acumulación de observaciones de la naturaleza.
Aspectos, como los cánones estilísticos aplicados en la representación de ciertas especies y otros dejan incluso pensar que los artistas no plasmaron en las paredes de las cuevas el entorno real, sino un mundo sobrenatural.
La impresión de conjunto sitúa a las obras paleolíticas en la categoría de los mitogramas, es decir de las figuras simbólicas sin referencia a un tiempo y un espacio coordinados, cuya relación con el sujeto no se traduce en una estructura narrativa; los actores son representados, y muchas veces, yuxtapuestos en un espacio sin hilo conductor. La ausencia de linealidad es lo que otorga el carácter al mitograma. Sin embargo, se observa un cierto equilibrio de las figuras entre sí, en relación con el soporte y su ordenamiento espacio temporal ( simetría, perspectiva, animación).
Las teorías más difundidas ven en las representaciones paleolíticas elementos propisorios para la caza, signos de una magia de fecundidad, o un arte por amor al arte, por nombrar algunas. Pero ninguna da una explicación satisfactoria para todos los elementos representados. Si se trata por ejemplo de una magia para conseguir buenos resultados de caza, una hipótesis muy racional para tribus de cazadores-recolectores. Muchas veces se comunica de esta manera mitos, leyendas o acontecimientos de su propia historia. En el paleolítico se ejercían, mediante ritos mágicos, el culto a la fecundidad en general, para hombres y animales.
Arte figurativo o naturalista se transmitía de generación en generación, serie de símbolos abstractos que representan una tradición icnográfica muy elaborada, que corresponden a un mundo de ideas y fondo simbólico difundido y perdurable.
Parece que cada grupo cazador-recolector escogió los temas según razones religiosas y culturales, y la composición singular de figuras y signos en cada una de las cuevas nos impide cualquier generalización. Las condiciones de vida y las preocupaciones de distintas poblaciones eran muy diferentes. Por lo que adoptaban formas de acuerdo al lugar geográfico donde habitaban. A pesar de todo el arte rupestre es una realidad física que se puede y debe documentar, analizar y clasificar: medir tamaños de pinturas y grabados, estudiar las composiciones químicas de los pigmentos, determinar edades, comparar estilos y técnicas, examinar el entorno, relacionar las manifestaciones artísticas con el registro material de excavaciones, etc. Estudiando cada figura y símbolo en detalle, no se debe perder de vista el conjunto y posibles relaciones de distintos componentes que incluso pueden formar escenas de gran interés. Las expresiones artísticas no pueden ser desligadas tampoco del ambiente social, ideológico y económico que las produjo.
Lascaux, Descubrimiento y cierre
La caverna de Lascaux fue descubierta casualmente por cuatro adolescentes el 12 de Septiembre de 1940. Sus nombres eran Marcel Ravidat, Jacques Marsal, Georges Agnel y Simon Coencas.
Los jóvenes se encontraban en un bosque cerca de Montignac, en Dordoña. De pronto su perro se escapó y se ocultó tras una piedra. Uno de ellos lo fue a buscar y al hacerlo notó la existencia de la caverna detrás, entró en ella, precisamente a lo que conocemos como Divertículo Axial y al descender, vio las maravillosas pinturas de sus paredes.
Al darse cuenta de la importancia del descubrimiento, se apresuraron a llamar a uno de sus profesores, el que astutamente advirtió de esto al Abate Breuil.
Gracias a que estuvo cerrada hasta el día de su descubrimiento, las pinturas de su interior se encontraban intactas, tal como habían sido dejadas miles de años atrás.
Luego de la II Guerra mundial, se comenzó a trabajar en la cueva para permitir el paso de los visitantes, visitas que llegaron a alcanzar la cifra de 1200 diarias.
En 1955, se percataron de que la cueva estaba deteriorándose. La causa de ello fue el exceso de gas carbónico producto de la respiración de la gran cantidad de visitantes que diariamente ingresaban en ella, cuya evaporación dañaba las pinturas de las paredes de la caverna. Por eso, el Ministerio de Asuntos Culturales, en ese momento dirigido por André Malraux, decretó el cierre de la cueva el 20 de abril de 1963.
Debido al cierre, las obras parietales de la cueva recobraron su belleza original, ya que la eliminación de las visitas le devolvió las condiciones climáticas bajo las cuales se había mantenido hasta su descubrimiento.
Además se le agregó un sistema de cuidado y preservación, que monitorea la cueva permanentemente para garantizar la mantención de las condiciones óptimas de preservación de las obras.
A pesar de ello, en el 2001, sobre el suelo y zonas deprimidas de la cueva, se comenzó a observar el desarrollo de colonias de microorganismos, hongos y bacterias. Debido a ello, se aplicaron tratamientos con fuguicidas y antibióticos, además del esparcimiento de cal viva sobre el suelo. La situación se encuentra ahora controlada.
En marzo de 1980, la Administración Departamental de Turismo de Dordoña se encargó de la reproducción de las dos salas más representativas e importantes de Lascaux: El Divertículo Axial y La Sala de los Toros.
Desde 1983, Lascaux II tiene sus puertas abiertas al público.
Lascaux, Situación Geográfica e Histórica del Arte Parietal
El período Paleolítico se divide en tres fases principales la primera se llama paleolítico Antiguo; en este período a partir del 500.000 a.C. se reconocen los primeros utensilios: simples guijarros partidos primeramente, luego la talla bifacial y lascas, después de este período sigue el paleolítico Medio cerca del 100.000 a. C. donde se continúa con la industria de la lasca y se comienza el trabajo en hueso y las primeras sepulturas para llegar finalmente el paleolítico Superior alrededor del 35.00 a.C. donde aparece al “homo sapiens” quien se encargaría de continuar con la evolución cultural, en este período se crea el arte, este no nació de la noche a la mañana se trato de un proceso largo donde el hombre tuvo que interactuar con su cuerpo, sus manos, y lo que encontraba a su alrededor rasguñando la pared, jugando con la arcilla pintándose las mano y plasmándolas para luego reconocerlas y comenzar la experimentación hasta llegar a la pintura; como este período es tan rico en diversidad cultural que da pie a una subdivisión para identificar el desarrollo de cada cultura que son: chatelperroniense, auriñaciense, gravitiense, solutrense y magdaleniense.
El desarrollo del arte también lo encontramos en dos divisiones, el arte Mobiliar, aquel que era independiente y como tal podía ser trasladado de lugar y el arte Parietal o Rupestre, que es el que nos importa principalmente, que abarca las manifestaciones de pintura, grabado o relieves que tienen como soporte las paredes rocosas de cuevas. Este arte tiene una extensión geográfica que comprende el área sudoeste de Francia, la cordillera pirenaica y montes cantábricos, esta zona recibe el nombre de Franco- cantábrico.
El por qué de la aparición de este arte todavía no tiene una respuesta definida pues no hay vestigios de porque nació simplemente de que está presente, se cree que pueden ser manifestaciones mágico-religiosas, rituales que propiciaran una buena caza, hay diversas teorías frente a esto pero ninguna da la respuesta definitiva.
El primer descubrimiento de estas cavernas no se reconoció como arte del paleolítico, sino hasta muy después cuando ya se habían descubierto más, que le dieron mayor credibilidad. Estas cavernas luego del cambio de clima quedaron sepultadas o tapadas manteniendo casi perfecto el contenido artístico al interior de ellas, muchas de estas cavernas no eran utilizadas como habitaciones sino como santuarios, y si lo fueron eran solamente utilizadas como refugios en las entradas cerca de la luz donde no encontramos pinturas, pues esta se encuentran en los lugares más recónditos de las cavernas, acentuando aún más la idea de que fueran santuarios.
En el valle de Vézere en la zona de la Dordoña a unos 24 km de Les Eyzies esta una de las cuevas más importantes de la cultura auriñaciense es la caverna de Lascaux sin dejar de encontrar en ella otro estilo de pintura pero no tan desarrollado como el que se encuentra en Altamira, que sería el punto más álgido de la pintura magdaleniense. “El grueso de las pinturas de Lascaux parece pertenecer a la última época del auriñaciense aunque algunas son probablemente más antiguas…por otra parte hay unas cuantas pinturas en lo que podríamos denominar un estilo “proto-magdaleniense”, es decir, pinturas que indican la técnica de los últimos frescos magdalenienses “clásicos”, aunque no idénticos en representaciones”, esto nos indica que tal vez estas cavernas eran utilizadas como santuarios donde distintas generaciones plasmaron en sus paredes ritos y experiencias de vida.
En Lascaux se reconoce la típica “perspectiva retorcida” del período auriñaciense donde el animal esta de perfil y se ven sus dos orejas y cuernos representados de frente o de tres cuartos, sin importar que esto no sucede en la realidad, también el arte auriñaciense es más estático y reposado que el magdaleniense, el arte parietal es un arte naturalista pues el animal es identificable, pero no es realista pues nos encontramos en Lascaux con un ser desconocido que ha sido denominado como un unicornio con cuerpo de felino, no sólo en Lascaux se encuentran estas representaciones, no son abundantes pero están presentes, esto hace pensar a los investigadores que tal vez sean una especie de espíritu de la caverna o también seres encargados de las ceremonias.
En Lascaux como en otras cavernas se desarrolla distintos temas como las representaciones de animales naturalistas; también tenemos las representaciones antropomorfas que se desconoce su real significado, tal vez podrían haber sido especies de hechizaron encargados de los rituales y finalmente representaciones de objetos inanimados, que se derivan en signos que tienen formas de peines también puntos, combinaciones de líneas, que según Leroi-Gourhan serían especie de signos sexuales tanto femeninos como masculinos que apuntarían al tema de la fertilidad y a la complementación de la vida.
Los colores utilizados en Lascaux son negro, castaño, ocre, amarillo, rojo, carmesí, que eran utilizados como crayones o también como pinturas que preparaban moliendo el pigmento mezclándolo con aglutinantes como huevo, médula y grasa para así adherirlas a las paredes, pintaban con los dedos, pinceles fabricados con crin de caballo o pelos de ellos mismos, también utilizaban una técnica llamada “soufflé” que consistía en soplar a través de un palo o hueso hueco la pintura y rellenar así sus dibujos, en la pintura de cavernas no se encuentran los colores azul y verde, no se sabe si no eran utilizados o no permanecieron en el tiempo. No sólo con pintura nos encontramos en las cavernas también se desarrollan los grabados, en algunas representaciones se encuentran conjugados estas dos técnicas demostrando la capacidad artística de los hombres de aquella época, pues con un solo trazo completaban el contorno de un animal.
Lascaux es una caverna donde su arte no esta cerca de la luz solar, es más, se desarrolla en los lugares donde es más dificultosa la labor artística, el techo de la cueva está muy alejado del suelo, cosa que plantea dudas de cómo se realizaron ¿Construyeron algunas especies de escaleras para pintar? ¿Utilizaron herramientas como pértigas que les permitieran llegar y así poder producir con tanta majestuosidad sus pinturas?, y para solucionar el problema de la luz ¿Fabricaron algún tipo de lámparas que les iluminaran?, esto ha sido casi comprobado pues han encontrado vestigios de elementos orgánicos inflamables en los lugares donde pintaban que confirman esta hipótesis.
El arte Parietal como tal desaparece ya con la última etapa del período Magdaleniense, junto con esto también se termina el período Paleolítico dando paso a un nuevo período llamado Mesolítico donde hay muy pocas pinturas pero ya no en cuevas sino en los abrigos rocosos que por las inclemencias del tiempo no se conservan en tan buenas condiciones como si lo hicieron las cavernas que con los distintos cambios climáticos fueron quedando sepultadas y dentro de ellas mismas sedimentos que recubrieron y protegieron lo que allí estaba plasmado, permitiendo así que por casualidad en los tiempos
que le precedieron fueran de nuevo encontradas y apreciadas en todo su esplendor.
Lascaux, Características generales
La cueva de Lascaux, uno de los más asombrosos testimonios del Paleolítico, es una obra de arte de tal magnitud, que en un principio se creyó que era un fraude, sin embargo hoy en día sabemos que ésta constituye una de las máximas expresiones que se tiene del arte rupestre.
La caverna está provista de magnificas pinturas prehistóricas que datan alrededor del año 15000 a 9000 a.C. y que al momento de su descubrimiento en 1940 se encontraban en perfecto estado de conservación, además se piensa que sus autores fueron miembros de la sociedad Magdaleniense, la misma que según se cree inventó el farol de grasa y la aguja de coser.
En el interior de Lascaux, en los veinte primeros metros, un importante declive permite el acceso a un amplio espacio denominado Sala de los Toros, que es la primera sala que encontramos al entrar en la caverna, después de ella está el Divertículo Axial, hacia la
derecha se abre una segunda galería más baja, el Pasaje, que comunica el Divertículo de los Felinos y la Nave con el Ábside, junto a ella en un lugar más apartado encontramos El Pozo, en la misma dirección hay unas salas enarenadas, que no poseen vestigios de origen humano. Estos espacios de la cueva están decorados con unos 1500 grabados y unas 600 pinturas en tonos amarillos, marrones, rojos y negros.
Las pinturas son de temática animalística uros, bisontes, caballos, ciervos e íbices. Aparecen también signos de carácter geométrico y de significado incierto. En la sala de los Toros aparecen pintadas figuras relativamente pequeñas de ciervos y caballos, al lado de enormes toros de unos 5 mts. de longitud. El gran tamaño de las pinturas nos hace pensar que debieron emplearse escaleras y andamios para realizarlas, y en efecto en el interior de la cueva se han encontrado los encajes para los travesaños del andamiaje. Además de esto, tiene gran importancia dentro de la caverna la representación aislada de una figura humana relacionada con un toro al que parece haber herido, esta es la famosísima escena del Pozo, esta es la pintura más dramática que encontramos, de una gran belleza estética.
Entre otros grupos conocidos, de figuras de animales, aparecen unos ciervos en fila india saliendo de un río imaginario, de los cuales sólo se pueden diferenciar el cuello, la cabeza y las astas los ciervos “nadando”.
La pintura revela las técnicas que fueron empleadas, las cuales no difieren de las técnicas actuales como por ejemplo el degradado cromático, la coloración parcial de las patas, vientre y hocicos, y por sobre todo indican un profundo conocimiento del funcionamiento del cerebro de inmovilidad a inmovilidad, es decir, descomponían el movimiento en imágenes sucesivas, además de esto empleaban la perspectiva y algunas figuras eran deformadas para que pudieran ser vistas de todos los ángulos, tal como de hecho se manifiestan.
La Escena del Pozo
Al fondo del Ábside, el camino de la caverna da a lugar a un piso inferior llamado el Pozo, al que hay que descender por medio de una escalera de cuerda. Una pendiente de algunos metros nos lleva a una de las más notables creaciones artísticas de Lascaux y sin duda del paleolítico, esta es la Escena del Pozo, una de las figuras más enigmáticas, cuyo mayor valor radica en su increíble potencial narrativo; como una especie de comic prehistórico. Esto se hace notar en la expresión de los movimientos de los personajes que protagonizan esta maravillosa obra del arte prehistórico, además otra clara evidencia del carácter narrativo de la escena está en el reparto de las figuras y los temas principales escogidos tales como el hombre, el bisonte, y el rinoceronte.
Esta representación antropomorfa ilustra el enfrentamiento supuesto entre un hombre con cabeza de pájaro, como si llevara puesta una máscara, y un bisonte herido de muerte por un venablo y que se pisa las entrañas, mientras un rinoceronte que al parecer hirió al hombre se fuga hacía la izquierda, entre ellos hay un pájaro sujeto a una estaca. Existen varios elementos secundarios, tales como un signo en forma de gancho a los pies de la figura humana que posiblemente representa el arma con que ésta ha herido al bisonte destripado, quien parece estar a punto de cornear a su
adversario, por la posición baja de su cabeza y porque da la impresión de estar azotando el aire con el rabo, lo que traducimos como una muestra clara de la agresividad del animal.
Es indiscutible que en escenas como esta se ha querido representar una especie de conjuro chamanístico. Durante el encantamiento, el hechicero entra en trance y en ese estado vive la muerte del animal. El pájaro sujeto al palo podría significar la corporización del cambio espiritual del hechicero en estado de trance. Horst Kirchner ha observado que este conjunto chamanístico está todavía en vigor entre algunos pueblos siberianos y que todavía en nuestros días cae el hechicero en trance durante el acto ritual, antes de la cacería. Y también entre estos primitivos modernos es un pájaro el símbolo del conjuro.
Lascaux, El Unicornio y los ciervos nadando
“El Licornio o Unicornio”
Esta figura extraña e imposible de asociar a algún tipo de animal realista, pintada en el extremo superior izquierdo de la sala de los toros, a sido estudiada por muchos universitarios en cuestiones de astronomía, entre ellos, de la Universidad de Montpellier, Gérard Jaswniewicz, que aseguran que existe un zodíaco estelar en éstas representaciones. Es decir, que en la cueva se ha simbolizado parte de la bóveda celeste. Dichos estudiosos han llegado a la conclusión de que las estrellas de la constelación de capricornio constituyen un dibujo lineal sobre el que está pintado este “Unicornio”, esto podría estar indicando un carácter mágico de la figura.
“Los ciervos nadando”
En un corredor lateral, dentro del espacio de la caverna conocido como Nave, se encuentra este friso de cinco ciervos que están aproximándose a una orilla, de los que solo emergen el cuello, la cabeza y las astas, el primero supuestamente a salido ya del río imaginario. También aparecen otros numerosos caracteres de una escritura que tal vez nunca llegue a descifrarse. La escena, de gran intensidad vital, amplio sentido del movimiento y poder de captación de lo espontáneo, se cuenta entre las más deliciosas pinturas de esa época. Todo cuanto es característico de este estilo, la captación de la vía momentánea, la supremacía de los valores pictóricos sobre los de dibujo, la plasticidad y vivacidad de los distintos planos es esencial en el arte de Lascaux. La cueva contiene también pinturas de Transición al Magdaleniense Inferior, la época final del paleolítico.
Conclusiones
Después de conocer las características de la caverna de Lascaux, y por ende, tener una visión general del arte parietal, resulta interesante preguntarnos por el rol del arte en la sociedad, y como varían las perspectivas de análisis de éste.
Durante siempre, el arte ha sido más que una simple manifestación personal del artista que lo produce, con esto no quiere decir que su visión no influya, sino más bien, construye una nueva manera de interpretar lo que lo rodea y como en él se integra, para dar a luz una creación. No muy alejado de esto estaban los artistas de la Prehistoria, cuando plasmaban diferentes técnicas de creación. Quizá no de manera tan consiente como podría hacerse hoy en día, pero indiscutiblemente aquellos artistas quisieron dejarnos un mensaje.
El arte es uno de los aglutinantes de la cultura y sus manifestaciones visuales son reflejo de la vida social y espiritual.
Los hombres del Paleolítico bien pudieron haber pintado o grabado danzas o rituales, pero por alguna razón prefirieron a los animales; nos queda mucho por conocer acerca del valor simbólico de las figuras, en particular de la coexistencia de figuras realistas con figuras geométricas; ya que todas las obras están lejos de tener una ejecución impecable, y la distancia con ellas cada vez es mayor. Pero las obras de las cavernas logran transmitir emociones a los espectadores de hoy y aluden a interpretaciones realizadas por otras disciplinas de estudio, no siempre como una creación visual "tradicional" aludiendo al Arte, sino más bien, como vinculo que gracias a ellas mantenemos con nuestros antepasados. Sin embargo, nos seguimos planteando cual será el sentido profundo y los motivos que llevaron a estos hombres a efectuar en las paredes esas imágenes; y cuál es el valor de la caverna como templo o lugar de culto, para los artistas, al preferirlas, y para el resto de la colectividad.
Los elementos pictóricos pueden tener una relación con conceptos tan distintos como por ejemplo; la transmisión del saber y experiencia de una generación a otra (enseñanza), difusión de ideas, información con el fin de inducir o intensificar actitudes y acciones específicas, mantener el orden jerárquico del grupo o simplemente dejar constancia de la existencia del hombre, de sus mitos, leyendas, historia o mundo espiritual.
Detrás del decorado se puede percibir el compromiso de una comunidad con sus artistas durante el proceso de creación. Aun cuando la ejecución se haya efectuado en muchas etapas, supuso una situación económica colectiva y favorable.
Lascaux al igual que otras cavernas no solo demuestra una actividad ligada a la caza, sino también sugiere un testimonio del nivel cultural elevado de la sociedad que la convirtió en creación, y de una economía que les permitió llevar acabo tales obras.
Pero nos hemos saltado, quizá un elemento más importante que las motivaciones, sino saber si existe un verdadero artista, particular e individual, dotado de talento con un valor excepcional en su grupo, o son varios artesanos en conjunto sin ninguna intención, mas que la de entretención, juegos, o actos rituales. Es evidente que el estatus del artista tuvo que variar entre los grupos y las épocas, ya que sus ejecuciones duraron en algunos casos mas de una generación y fueron modificadas mas de una vez.
Fuera cual fuera el objetivo de cada objeto del arte rupestre, la razón de su existencia implicaba el intento de persuadir a través de los sentimientos o de la razón. Dada la imposibilidad de poder demostrar que el contingente parietal tenga una relación única y clara con la caza, la religión, la reproducción u otro concepto, tenemos que admitir que su explicación no es posible mediante teorías simplistas. Tenemos que aceptar que el arte rupestre, es sobre todo un medio de comunicación, formando parte de un proceso complejo de transmisión y recepción de ideas, de información, de mensajes e imágenes, como fenómeno paralelo al habla y al lenguaje corporal del ser humano.
Hoy en día esta mas que asumido, pero debieron pasar miles de años para poder entender esa relación y así aceptar, que el arte paleolítico es un arte moderno pues entra dentro de los movimientos estéticos de nuestro tiempo, ya que se podría entender casi como una obra abierta a múltiples interpretaciones, sin estancarse en una sola y someterlo a criticas lecturas relativistas.
Bibliografía
Título: Los primeros artistas de Europa; Introducción al arte Parietal Paleolítico
Autor: André Leroi - Gourhan
Editorial: Ediciones Encuentro
Edición: Madrid 1983
Título: Orígenes y significado del arte Paleolítico
Autor: Eduardo Ripoll Perelló
Editorial: Silex Ediciones
Edición: Madrid España 1986
Título: El arte rupestre en Europa
Autor: Herbert Kühn
Editorial: Seix Barral S.A.
Edición: Barcelona 1957
Título: Pintura Prehistórica
Autor: A. H. Brodrick
Editorial: Fondo de cultura económica Brevarios
Título: El arte de la época glacial
Autor: Herbert Kühn
Editorial: Fondo de cultura económica Brevarios
Edición: México 1971
Título: Arte Paleolítico
Autor: Peter I. Ucko, Andreé Rosenfeld
Editorial: Guadarrama, Biblioteca para el hombre actual
Edición: Madrid 1967
Título: Fuentes de la pintura. Colección historia general de la pintura Vol. I
Autor: Raoul - Jean Moulin
Editorial: Aguilar
Edición: Madrid 1968
Título: La arqueología Prehistórica
Autor: Annete Laming-Emperaire
Editorial: Ediciones Martínez Roca S.A.
Edición: Barcelona 1984
A.H. Brodrick. “Pintura Prehistórica”.edit. Fondo de Cultura Económica. México. p. 52
Uros: bóvidos salvajes muy parecidos al toro, pero de mayor tamaño
Íbices: cabras montesas, viven en regiones montañosas de altitud incluso superior a los 5000 mts.
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Enviado por: | Elmiranda |
Idioma: | castellano |
País: | Chile |