Bellas Artes


Bauhaus


BAUHAUS

Antecedentes

LA INDUSTRIALIZACIÓN

Los antecedentes de la Bauhaus los encontramos en las consecuencias que tuvo la industrialización ocurrida primero en Inglaterra y más tarde en Alemania durante el siglo XIX y los cambios que originó en las condiciones de vida y producción de los artesanos y la clase obrera. Esta creciente industrialización tuvo su principal crítico en el escritor ingles John Ruskin que propuso renunciar al trabajo con máquinas y retornar a un pasado donde la producción tuviera un rostro más humano; esta época la sitúa en el periodo medieval como refleja su libro The stones of Venice. Su más importante seguidor y admirador fue el polifacético William Morris que se encargó como tarea convertir en realidad las ideas de Ruskin. Para esto montó unos talleres donde se ponía en practica la forma de producción artesanal de la Edad Media llegando a ser tan influyentes que dieron paso a un estilo: Arts and Crafts (Artes y oficios). Asimismo un hecho importante de la época fue la reforma de la enseñanza de oficios y la impartida en Academias que se orientó hacia una mayor expresión subjetiva del artesano intentando de esta manera entroncar sus trabajos con la esencia del pueblo. Mientras, en el continente, intentaban emular los progresos británicos en el campo de la producción a través de una reforma de los sistemas educativos. Esto dio lugar a la aparición de Museos e Instituciones que fueron el germen para diferentes escuelas. El gobierno prusiano, después de escuchar informes sobre el éxito ingles y seguir las recomendaciones de Hermann Mutheius decide ampliar con talleres las Escuelas de Artes y Oficios prusianas y llamar como profesores a artistas de reconocido prestigio. Es así como se reforma la Academia de Düsseldorf, la de Berlín y la Escuela de Arte de Weimar entre otras con una diferencia fundamental que consiste en el apoyo a la producción con máquinas al contrario que lo que sucedía en Inglaterra con las escuelas agrupadas en torno al movimiento Arts and Crafts.

Asimismo y con el fin de apoyar el nacimiento de un lenguaje estilístico propiamente alemán se crea la Werkbund (Liga de Talleres) en lo que fue la más importante fusión de arte y economía del período anterior a la Primera Guerra Mundial. El arquitecto Walter Gropius fue nombrado miembro de la Liga en 1912 tras haber alcanzado renombre con la edificación de una fábrica de zapatos cerca de Hannover. El ambiente de los años previos a la Primera Guerra Mundial desencadenó la dimisión del fundador y director de la Escuela de Arte de Weimar el arquitecto belga Henry van de Velde por causa de fuertes tendencias xenófobas hacia su persona. Walter Gropius (1883-1969) de 31 años, fue una de las tres personas que recomendó al Gran Duque de Saxe-Weimar como su posible sustituto. Durante los años de la guerra la escuela permaneció cerrada y no fue sino hasta después del final del conflicto armado, que Gropius fue confirmado como nuevo director. Se había decidido fusionar las tres artes aplicadas que orientaban la Escuela de Artes y Oficios de Weimar con una escuela de las bellas artes y forman la Academia de arte de Weimar. Gropius llamó a la nueva escuela Das Staatliches Bauhaus, y se abrió el 12 de abril de 1919 en una época en que Alemania se encontraba en un estado de Gran efervescencia. La catastrófica derrota en la guerra para terminar con todas las guerras condujo hacia una violenta lucha económica, política y cultural. El mundo prebélico del Kaiser estaba muerto y la búsqueda para construir un orden social nuevo penetró todos los aspectos de la vida. En el manifiesto de la Bauhaus, publicado en los periódicos alemanes, se estableció la filosofía de la nueva escuela: La construcción completa es el objetivo de todas las artes visuales.

Antes, la función más noble de las bellas artes era embellecer los edificios, constituían componentes indispensables de la gran arquitectura. Hoy las artes existen aisladas... Los arquitectos, los pintores y escultores deben estudiar de nuevo el carácter compositivo del edificio como una entidad... El artista es un artesano enaltecido. En los escasos momentos de inspiración, la gracia divina motiva que su trabajo florezca como arte trascendiendo su voluntad consciente. Pero el perfeccionamiento de su oficio es esencial para cualquier artista. En esto reside la fuente principal de la imaginación creativa. Gropius buscó una nueva unidad entre el arte y la tecnología reconociendo las raíces comunes tanto de las bellas artes como de las artes aplicadas, ya que él se adhirió a la generación de artistas con el fin de resolver los problemas de diseño visual creados por el industrialismo. Como Gropius pensaba que sólo las ideas más brillantes eran lo suficientemente buenas como para justificar su multiplicación por medio de la industria, se esperaba que un diseñador instruido artísticamente pudiera "hacer vivir un espíritu dentro del producto inerte de la máquina”.

La Bauhaus de Weimar

Los primeros años de la Bauhaus están impregnados de un fuerte espíritu comunitario. Tanto alumnos como profesores colaboraban para la construcción de la "catedral del futuro" aunque esta visión utópica no impedía que se aceptaran encargos de muebles, objetos o tapices que acercaban la realidad productora a la Escuela y donde se cimentó la importancia y el mérito de la Escuela.

LOS PROFESORES

La idea de Gropius era la de que los profesores que impartieran las materias fueran de reconocido prestigio y los primeros que se incorporaron al proyecto fueron el pintor y docente Johannes Itten, el pintor Lyonel Feininger y el escultor Gerhard Marcks. Itten llegó a ser el más influyente ya que fue el que desarrolló el curso preparatorio y el centro del proyecto pedagógico de la Bauhaus. En el año 1919 y por deseo de Itten se incorporó al cuadro de profesores el pintor expresionista Georg Muche. Paul Klee y Oskar Schlemmer entraron a formar parte del profesorado de la escuela en 1921 así como Lothar Schreyer que se encargaría del taller de teatro. En 1922 Wassily Kandinsky que estaba considerado como el máximo representante de la pintura abstracta fue invitado por el Consejo de maestros a unirse al proyecto y así, en un plazo de tres años Gropius reunió a un elenco de artistas de vanguardia con el propósito de que el arte volviera a formar parte de la vida cotidiana.

LAS CLASES DE JOHANNES ITTEN

Johannes Itten fue el personaje central de la primera época de la Bauhaus, provenía de la enseñanza privada e impresionó profundamente a Gropius que le invitó a dar una conferencia en el acto de inauguración de la escuela para pasar poco después a formar parte del cuadro de profesores. Su método pedagógico se basaba en los pares de opuestos: intuición y método; vivencia subjetiva y reconocimiento objetivo. La búsqueda de ritmo y su creación armónica ocupaban la parte central de sus clases que se orientaban en torno a tres premisas: los bocetos de la naturaleza y la materia; el análisis de viejos maestros y la clase de desnudo. En la realización de bocetos Itten buscaba que los alumnos expresaran la esencia y contradicciones de los elemento. Asimismo incluía la enseñanza del contraste, la forma y el color. Los contrastes se articulaban también a través de pares de opuestos, respecto a las formas se comenzaba con el estudio de las figuras elementales (círculo, cuadrado, triángulo) y la relación entre estas y los colores jugó un destacado papel en los años posteriores a través de las clases de Paul Klee y Wassily Kandinsky.

En el análisis de los viejos maestros se intentaba buscar las líneas principales, las curvas, el movimiento, el ritmo del cuadro o su construcción intentando liberar lo esencial de entre el complicado todo. Y en lo referente al estudio del desnudo señalar que el objetivo era también encontrar el ritmo interno de la figura humana. La diferencia radical entre el curso introductorio de Itten y los que se impartían en las academias clásicas de artes y oficios, era que en estas los alumnos copiaban objetos y por el contrario Itten enseñaba leyes del color, ritmo y forma de la composición que ayudaban a que el alumno desarrollara su propia sensibilidad artística.

Profundamente respetado por sus alumnos, solía vestirse con un traje "Bauhaus" que el mismo había diseñado y partidario de la enseñanza Mazdaznan (muy extendida en Alemania y que propugnaba una alimentación vegetariana, ejercicios respiratorios, y ayunos entre otras cosas) se rodeó en la escuela de un grupo fiel de seguidores, entre los que se encontraba el pintor Georg Muche, con los que ponía en práctica su ideario.

LOS TALLERES

Con las dificultades propias del tiempo de posguerra los talleres planeados por Gropius iban poco a poco tomando forma. El taller de encuadernación era propiedad del maestro encuadernador Otto Dorfner y el de telares de Helene Börner que cerraron tratos con la escuela para enseñar a los aprendices y aunque al principio los estudiantes podían practicar inmediatamente en los talleres, el alto consumo de material llevo al Consejo de Maestros a tomar la decisión, a partir de octubre de 1920, de instaurar como obligatorio el semestre preparatorio de Itten y solamente quien hubiera superado este curso podía continuar en la escuela. Asimismo tomaron la decisión de dotar a cada taller con un maestro de forma de manera que cada alumno podría acudir a dos personas: el maestro de forma y el de artesanía. De esta forma las clases paralelas con un artista y un artesano proporcionaban al alumno una enseñanza más completa.

Si bien al principio casi todos los talleres se encontraban bajo la influencia de Itten, poco después cedió el de escultura a Schlemmer, el textil a Muche, el de encuadernación a Klee y el de carpintería a Gropius. Solamente permanecieron a cargo de Itten los de metal, pintura mural y en vidrio quien poco a poco y con cada cambio organizativo iba perdiendo influencia

CLASES DE ARQUITECTURA Y URBANIZACIÓN

Si bien Gropius se había esforzado durante tiempo en conseguir una sección de arquitectura en la Bauhaus distintas trabas burocráticas se oponían a su proyecto, hasta que en mayo de 1920 pudo concretarse, aunque no de forma sistemática, bajo la dirección de Adolf Meyer. En 1923, con motivo de la primera gran exposición de la Bauhaus, se expusieron maquetas de colonias y casas modelo pero fue un encargo privado del contratista Adolf Sommerfeld que encargo a Gropius la construcción de una casa de madera de teca el que brindo a este la posibilidad de apoyar económicamente a la Bauhaus mediante la contratación de obras y de formar el primer taller comunitario. La Casa Sommerfeld fue el primer gran proyecto en común de la Bauhaus y el ejemplo más hermoso de crear una obra de arte unitaria. La decoración exterior e interior esta inseparablemente unida al edificio que evidencia, al lado de las formas expresionistas, la influencia de las casas de la pradera que construía el arquitecto americano Frank Lloyd Wright.

EL CONFLICTO GROPIUS - ITTEN

La ejecución del primer proyecto de envergadura de la Bauhaus provocó el enfrentamiento entre Gropius e Itten. Itten no era partidario de buscar el contacto con la industria y rechazaba los encargos por principio mientras que Gropius los veía como una parte importante que ayudaba al sostenimiento de la escuela y por ello no cejaba en el empeño de buscar posibles clientes. Así en abril de 1923 Itten abandona la Bauhaus y se traslada a dar clases a un centro de la secta Mazdaznan en Herrliberg dejando expedito el camino para un nuevo concepto de educación en cuyo centro no se encuentra ya el individuo sino el logro de nuevos productos industriales. La consecuencia de esta decisión fue el paulatino abandono de la artesanía y el cambio de rumbo de la filosofía expresionista de la Bauhaus en busca de su unión con la tecnología y la industria.

LA INFLUENCIA DE DE STIJL

El artista holandes Theo van Doesburg fue el impulsor definitivo del abandono de las posturas expresionistas en la Bauhaus. Fundador del movimiento De Stijl junto con el pintor Piet Mondrian, siguió con interes el trabajo desarrollado en la Bauhaus y en abril de 1921 se estableció en Weimar esperando obtener una plaza como profesor y donde impartió un curso de De Stijl. Él deseaba dar clases, pero Gropius sintió que Van Doesburg era demasiado dogmático al insistir en una geometría estricta y un estilo impersonal. Pensaba evitar enérgicamente la creación de un estilo Bauhaus o la imposición de un estilo a los estudiantes. Incluso como extranjero Van Doesburg causó un fuerte impacto en la Bauhaus por permitir que su casa se convirtiera en un lugar de reunión para estudiantes y profesores de la Bauhaus, así como por enseñar los principios De Stijl. Las áreas del diseño de mobiliario y la tipografía fueron especialmente influenciadas por la corriente De Stijl. Los alumnos de la Bauhaus pronto se entusiasmaron con la personalidad de Theo y su curso fue un éxito además de que su estancia en Weimar benefició, sin lugar a dudas, el proceso de desarrollo de la escuela.

Si bien Doesburg en la correspondencia que intercambió con los rectores de la Bauhaus criticaba la falta de un "principio general" en esa época Gropius ya andaba buscando un denominador común y los diseños claramente constructivistas De Stijl aceleraron el viraje de la Bauhaus hacia un estilo nuevo. ¿Qué fue lo que originó este cambio?. En primer lugar el papel de la artesanía en la empobrecida Alemania de posguerra y en segundo la idea de Gropius de que la escuela debía ser productiva para asegurar la independencia económica del Estado. Ni que decir tiene que este cambio de orientación fue de vital importancia en la historia de la Bauhaus. La escuela se propuso la creación de formas adecuadas a la industria y a la época algo que hasta el momento no despertaba mucho interés.

MOHOLY-NAGY

Como consecuencia de estos nuevos objetivos, en ese mismo año, quien reemplazó a Itten como director del curso preliminar fue el constructivista húngaro Moholy-Nagy. Experimentador incansable, Moholy-Nagy exploró la pintura, la fotografía, la película cinematográfica, la escultura y el diseño gráfico. El uso de materiales nuevos como el plexiglás, las técnicas innovadoras como el foto montaje y el fotograma, así como medios visuales, incluso el movimiento cinético, la luz y la transparencia fueron abarcados por este pensador extraordinario. Joven y claro al hablar, la presencia de Moholy-Nagy en la facultad tuvo una marcada influencia en la evolución de la enseñanza y la filosofía de la Bauhaus, ya que el director pugnaba por una unidad nueva entre el arte y la tecnología. La pasión de Moholy-Nagy por la tipografía y la fotografía inspiraron el interés de la Bauhaus en la comunicación visual y la condujeron a realizar experimentos importantes en la unidad de la tipografía y la fotografía. Moholy-Nagy veía el diseño gráfico, especialmente al cartel, evolucionar hacía la tipografía. A esta integración objetivo de la palabra y la imagen, para comunicar un mensaje con independencia absoluta, la llamó nueva literatura visual.

El nombramiento de Moholy así como las reformas llevadas a cabo en los planes de estudio (el curso preparatorio pasa a durar un año en vez de seis meses y las clases de Klee y Kandinsky así como la enseñanza de la forma pasan a formar parte de la educación artística básica) dan inicio a una nueva etapa en la historia de la Bauhaus.

LAS CLASES DE PAUL KLEE

A pesar de que Paul Klee carecía de experiencia didáctica y prácticamente había aprendido todos sus conocimientos de forma autodidacta, aceptó dar clases en la Bauhaus como una oportunidad para cambiar su técnica, el estilo y el contenido de su arte y al mismo tiempo desarrollar una didáctica del arte que se ajustara a la clase de forma. Klee transformó el aprendizaje de la forma en un aprendizaje pictórico de la forma utilizando para ello la pintura sobre madera para al año siguiente tocar el aprendizaje del color utilizando para ello sobre todo sus primeros cuadros. El propio Klee describía su clase así: "Veo mi tarea aquí desde el principio, y a medida que pasa el tiempo la entiendo mejor: la transmisión de mi experiencia traducida en formas ideales (pintando y dibujando), experiencia que gira en torno a la construcción de lo unitario partiendo de la multiplicidad. Transmito esta experiencia en parte mediante síntesis (es decir, muestro mis trabajos), en parte mediante análisis (o sea, descompongo los cuadros en sus partes esenciales)". Al mismo tiempo Klee se esforzaba en distanciarse del método de Itten que apuntaba a una iniciación espontanea de la creación artística.

LAS CLASES DE WASSILY KANDINSKY

Kandinsky comenzó a trabajar en la Bauhaus a mediados de 1922 y tomó a su cargo el taller de pintura mural así como una clase de Morfología del Color. Al igual que Klee, Kandinsky desarrolló sistemáticamente sus clases partiendo también de la síntesis y el análisis. En 1912 en su libro Sobre lo espiritual en el arte, Kandinsky ya se había ocupado del carácter de determinados colores y cómo el aprendizaje del color había tenido un papel secundario en las clases de Itten , el anuncio de su curso de color vino a llenar un hueco importante. artiendo de los colores rojo-amarillo-azul y las formas círculo-triángulo-cuadrado, Klee estudio la interacción de las formas y el color. Asimismo a través del dibujo analítico invitaba a sus alumnos a descubrir las líneas principales y la tensión compositiva de una naturaleza muerta hasta obtener la estructura coherente de un cuadro abstracto. Este dibujo analítico se ha de entender como una especie de sistematización de sus años de lucha por la pintura abstracta.

EL TALLER DE CERÁMICA

En el curso de 1920 la Bauhaus entró en contacto con el maestro alfarero Max Krehan un artesano establecido a treinta kilómetros de Weimar y dispuesto a colaborar con la escuela. Cinco estudiantes se comprometieron a trabajar y a alojarse allí durante dos años. Los alumnos se proveían de los materiales en el bosque y aprendían todo lo relativo al oficio. En 1923 y ante la decisión de convertir en productivos a todos los talleres de la escuela, el taller de Krehan pasó a formar parte de la Bauhaus y se pasaba a la creación en serie, con algunas voces en contra como la del maestro Krehan, pero aunque se amplió la capacidad y se racionalizaron los procesos productivos, la falta de material, de espacio y de un horno adecuado, llevaron a la desaparición del taller.

EL TALLER TEXTIL

Fue el destino de muchas de las mujeres que acudieron a la Bauhaus. Hombres y mujeres veían las labores textiles como una actividad inherente a la mujer, arrastrando con ello una división sexista del trabajo que venía del siglo XIX. Georg Muche se hizo cargo de este taller y aunque aconsejaba a las alumnas en la decisión de que diseño hacer, las daba una gran autonomía. Este taller colaboraba especialmente con el de carpintería y al igual que los demás, combinó su actividad educativa con la producción comercial. Las alumnas tenían que adquirir algunos de los conocimientos técnicos fuera de la Bauhaus y dos de las mejores Gunta Stölzl y Benita Koch Otte asistieron a diversos cursos de tinte y ligamentos que más tarde difundieron en la escuela. Las novedades estilísticas del taller llegaban de la clase de historia del arte, así era que primero Itten y más tarde Klee determinaban la producción textil llegando a componer los tapices como si se trataran de cuadros abstractos.

EL TALLER DE MUEBLES

Walter Gropius se hizo cargo en 1921 de la dirección del taller de muebles. El aspecto completamente novedoso de los muebles de la Bauhaus es el resultado del análisis funcional del mismo. Por ejemplo después de estudiar el acto de sentarse se llega a las siguientes exigencias:

a) Asiento y respaldos elásticos.

b) Posición inclinada del asiento.

c) La columna vertebral debe quedar libre.

Las innovaciones que se ejecutaban en todos los muebles importantes se justificaban con análisis de este tipo. La total renuncia a un justificante artístico de la forma corresponde a la ideología de la Bauhaus de esta época, de acuerdo con la cual el arte debía ceder a favor de la artesanía y la técnica. Muchos muebles eran pintados con tonos claros para acentuar su carácter concentró en la producción.

LOS TALLERES DE PINTURA EN VIDRIO Y MURAL

Se instalaron un taller de pintura en vidrio y uno de pintura mural, pero el de vidrio se convirtió en 1924 en parte del taller de pintura mural siendo la causa probable de esto la escasa productividad del mismo. Paul Klee se hizo cargo durante un tiempo de la dirección artística pero no actuó como tal. Los logros más importantes de este taller se deben a Josef Albers que en el segundo semestre de 1923 se hizo cargo tanto de la dirección del mismo como de impartir las clases de taller. Sus primeros cuadros de vidrio realizados aprovechando restos delatan la influencia de Itten y Klee.

Se pueden distinguir tres puntos clave en el trabajo de este taller:

A) Realización de encargos para otros talleres de la Bauhaus.

B) Trabajos sencillos de pintado o planificación de color para edificios.

C) Configuración libre de paredes.

En abril de 1924 Kandinsky presento un plan de trabajo para el taller de pintura mural que abarcaba una gran variedad de ejercicios prácticos y teóricos. Su interés se centraba en la relación entre forma y color. Kandinsky reparte entre los alumnos una encuesta en la que debían relacionar formas y colores básicos. La mayoría se decidió por el orden triángulo-amarillo, círculo-azul, cuadrado-rojo.

LOS TALLERES DE ESCULTURA Y TALLA

Al frente de ambos estaba el maestro artesano Josef Hartwig, que también diseñaba. El maestro de forma de ambos talleres era Schlemmer y en un informe de 1922 relata una falta de perspectiva para ambos talleres sin apenas encargos y sin posibilidades de trabajo en relación con la idea Bauhaus. De hecho el balance de ambos talleres arroja en su mayor parte servicios para el resto de talleres. Por ejemplo se realizaban maquetas en escayola para obras de Gropius: un rascacielos en Chicago y el teatro de Jena. También Itten y Schlemmer mandaban ejecutar allí objetos en escayola, y muchos de los trabajos para el escenario teatral se realizaban allí.

EL TALLER DE ENCUADERNACIÓN

Tanto la impresión como la encuadernación eran asignaturas tradicionales de las escuelas de artes y oficios. El taller de encuadernación era propiedad privada del maestro artesano Otto Dorfner, uno de los más relevantes de Alemania y a el acudían tanto alumnos de la Bauhaus como ajenos a la escuela. Paul Klee se había responsabilizado del curso de forma en el taller pero pronto surgieron diferencias de criterio entre él y el maestro Dorfner y una vez terminado el contrato que unía a este con la Bauhaus, Dorfner expuso su negativa a prolongarlo con lo que la escuela perdió interés en un taller típicamente artesano que no ofrecía la menor posibilidad de modernización.

EL TALLER DE IMPRENTA

Durante el período de Weimar el taller de imprenta estuvo dirigido por Lyonel Feininger como maestro de forma y Carl Zaubitzer como maestro de taller. Al comienzo se enseñaba a los aprendices las técnicas de impresión xilográfica y calcográfica, pero a finales de 1921 cuando Gropius impuso la necesidad de hacer trabajos por encargo esto cambió. Fue entonces cuando surgió la idea para la elaboración de un cartapacio en cinco entregas que incluía a los maestro de la Bauhaus, artistas italianos, rusos y maestros alemanes. El taller siempre tenia encargos para hacer e incluso artistas ajenos a la Bauhaus imprimían en el sus trabajos. En 1923 se puso en pie una editorial que publicó el cartapacio de maestros y el libro para la exposición de 1923 pero aun así no pudo mantenerse durante mucho tiempo.

LA EXPOSICIÓN BAUHAUS DE 1923

El gobierno concedió un crédito a la Bauhaus con la condición de que realizara una exposición donde mostrara sus progresos. Gropius puso toda la escuela a trabajar en el proyecto y el Consejo de Maestros decidió presentar en la exposición una casa modelo en la que participarían todos los talleres. El pintor Georg Muche aportó el diseño y tanto su construcción como equipamiento debería mostrar lo más avanzado de la técnica. Detalles, que en la actualidad damos por sobreentendidos, se presentaban como autenticas primicias de la Bauhaus: apenas existían los pasillos, todas las habitaciones se agrupaban en torno a la más grande, el baño era fácilmente accesible y la cocina fue la primera cocina moderna con amplias superficies de trabajo lisas y fáciles de limpiar y dotada de los más modernos aparatos eléctricos.

Y como toda innovación la casa recibió tanto buenas acogidas como reproches significativos. Gropius inauguró la exposición que se celebró desde el 15 de agosto hasta finales de septiembre y donde se celebraron conferencias, se interpretó música y se expusieron todo tipo de trabajos de los diferentes talleres y aunque el éxito económico fue menor de lo esperado el impacto propagandístico fue enorme.

Con motivo de la exposición la Bauhaus se había propuesto presentar una nueva apariencia. Las palabras mágicas eran "nueva tipografía" que estaban llenas de la influencia de los grabados De Stjil y el constructivismo ruso. Negro, blanco y rojo eran los colores principales. Lo que era significativo para el contenido se destacaba o se subrayaba. La página impresa ya no era simétrica, sino compuesta en equilibrio asimétrico; bloques, bandas y líneas eran ineludibles. Fue Moholy-Nagy, quien conocía la vanguardia constructivista y la introdujo en la Bauhaus, el que dio el impulso decisivo a la nueva tipografía.

LA ARQUITECTURA EN LA BAUHAUS DE WEIMAR

El primer proyecto que se encomendó a Gropius como director de la Bauhaus fue la reforma del teatro estatal de Jena. Este es el primer edificio en el que Gropius y Meyer abandonan el estilo expresionista, como la casa Sommerfeld, y se orientan hacia la arquitectura de De Stijl y de Le Corbusier. Respecto a la enseñanza de la arquitectura, durante los años 1922 a 1925 Gropius tampoco pudo hacer realidad la integración en el programa educativo de un curso de arquitectura debido a problemas internos pero no obstante Adolf Meyer continuó dando clase en calidad de maestro supernumerario y Ernst Schumann ofreció nuevamente en 1924-25 un curso de dibujo técnico y construcción. Gropius proyectaba la creación de una colonia en el campo en la que convivirían profesores y alumnos, para ello creó una comisión en la que se discutió la configuración de las viviendas e incluso se encargó los planes de la colonia al arquitecto húngaro Fréd Forbát, pero las innumerables pegas de las autoridades regionales y estatales impidieron su realización.

EL FIN DE LA BAUHAUS DE WEIMAR

La victoria de la derecha en las elecciones en Turingia, enemigos declarados de la Bauhaus significó el principio del fin de la escuela. La paulatina reducción del presupuesto estatal destinado a la Bauhaus impedía cualquier proyecto de futuro y ante esta situación los profesores dieron un paso políticamente espectacular: En una conferencia de prensa dieron a conocer que consideraban su contrato con la región turingesa finalizado a partir de marzo de 1925.

Y aunque Gropius intentó salvar la situación ofreciendo al gobierno de Turingia la posibilidad de fundar una sociedad limitada que se hiciera cargo del trabajo productivo para limitar el gasto del gobierno a financiar la formación teórica y los gastos de los profesores, la decisión política de acabar con la Bauhaus ya estaba tomada. Destacar del período de la Bauhaus en Weimar la eficacia demostrada del "sistema de dos maestros" que permitía unir teoría y práctica, y las soluciones estéticas que determinarían el diseño de las décadas de los veinte y los treinta.

La Bauhaus de Dessau

La fama adquirida por la Bauhaus en Weimar hacia suponer que pronto llegarían ofertas de diversas ciudades para que la escuela se instalara en alguna de ellas, pero al final la única oferta verdaderamente consistente fue la realizada por la ciudad de Dessau. Dessau era una ciudad con grandes fábricas, como la aeronáutica Junkers, y complejos químicos. La escasez de viviendas era grande y la ciudad carecía de un plan de desarrollo de la misma, y las ideas de Gropius sobre racionalización y tecnificación en la construcción de viviendas, fue acogida con gran entusiasmo por la autoridades de la ciudad. Pronto Gropius recibió el encargo de la realización de una colonia modelo en Dessau-Törten. El nuevo edificio escolar y las casas para los profesores se convirtieron en el compendio de la arquitectura moderna en Alemania. La Bauhaus llegó a ser una especie de centro de peregrinación, visitado mensualmente por cientos de alemanes y cada vez más extranjeros. El edificio donde se impartían las clases estaba formado por tres alas cuyos compartimentos se hallaban claramente divididos de acuerdo con la función a la que estaban destinados. Además de una sección de aulas, una de talleres y una administrativa, contenía un anejo de cinco pisos el llamado edificio-taller. En el primer piso de este edificio se instalaron un aula magna, un escenario y el comedor escolar; el piso podía transformarse en una superficie corrida, para celebraciones. El equipamiento del mismo procedía en su totalidad de los diferentes talleres de la escuela.

LAS CASAS DE LOS MAESTROS

En un pequeño pinar al lado del edificio principal de la Bauhaus, Gropius construyó las casas de los maestros: tres casas para profesores, cada una con dos viviendas y talleres, y una casa independiente para si mismo. Al principio Klee y Kandinsky habitaron una casa, Muche y Schlemmer otra y Feininger y Moholy-Nagy la tercera. La decoración interior de las mismas se realizó a partir de las indicaciones de colorido de los propios maestros y en especial la de Gropius, en extremo representativa, era mostrada a los visitantes ilustres como ejemplo de los postulados de la escuela.

LA COLONIA TÖRTEN

El trazado de la colonia se debe a Gropius. Se trataba de una colonia de viviendas que constaba únicamente de casas independientes de un solo piso y con jardín y para la cual se emplearon materiales prefabricados y estandarizados para rebajar sus costes.

Eran casas baratas y se llegaron a hacer hasta tres fases, y aunque en las dos últimas resolvió algunos problemas que había tenido en la primera como la poco efectiva calefacción, estos fallos fueron enarbolados por los detractores de Gropius y llegaron a afectar incluso a su sucesor Hannes Meyer, que no obtuvo más que un pequeño encargo estatal. Los talleres de la Bauhaus habían erigido una vivienda modelo en Törten cuyo mobiliario podía ser adquirido en la propia escuela.

LAS REFORMAS ESCOLARES DE 1925 Y 1927

Con el punto de mira puesto en transformar la Bauhaus en un negocio productivo, Gropius llevó a cabo una serie de reformas que condujeron a la reducción del número de talleres a seis: carpintería, metal, pintura mural, textil, grabado e impresión y escultura. Cuatro de ellos dirigidos por antiguos alumnos, los llamados "jóvenes maestros": Hinnerk Scheper a cargo de la pintura mural, Marcel Breuer de la carpintería, Joost Schmidt del taller de escultura y Herbert Bayer del taller de grabado e impresión. Asimismo se fundó una sociedad limitada que sirviera de base para la explotación económica de los productos de la escuela, aunque los ingresos por estos no igualaron a las expectativas, y la Bauhaus añadió a su nombre el subtítulo de "Escuela Superior de Diseño" al tiempo que los antaño aprendices pasaron a denominarse estudiantes y los maestros profesores. Por fin se crea una sección de arquitectura propiamente dicha, a cargo del arquitecto suizo Hannes Meyer y esto da pie a una reforma de toda la docencia, instaurando a la arquitectura como un grupo autónomo al que se subordina los talleres de metal, textil, carpintería y pintura mural y creando otro grupo al que se denomina publicidad que engloba al taller de grabado e impresión y más la fotografía.

LOS CURSOS PREPARATORIOS DE JOSEF ALBERS Y MOHOLY-NAGY

Los cursos preparatorios de Josef Albers y László Moholy-Nagy A los cursos preparatorios que Klee y Kandinsky continuaron dando en Dessau se unió el que, a partir del otoño de 1923 y durante el primer semestre, impartía Josef Albers y en el que incluía visitas a artesanos y la elaboración de todo tipo de objetos sin apenas herramientas con el fin de que los alumnos captaran las características esenciales de los materiales y los rudimentos de la construcción. Mientras el objetivo primordial de las clases de Albers era utilizar el material con creatividad y economía, las clases de

ejercicios de Moholy-Nagy se concentraban en la forma en el espacio.

LAS CLASES DE PAUL KLEE Y WASSILY KANDINSKY

Las clases de Paul Klee y Wassily Kandinsky en Dessau Durante casi toda su actividad en la Bauhaus de Dessau, Paul Klee dirigió la formación de los alumnos del curso preparatorio del segundo semestre. Su especialidad era la enseñanza de la forma pictórica y en el se incluía la enseñanza del color. A diferencia de Kandinsky cuyas propuestas de ejercicios en dibujo analítico y aprendizaje del color se repetían continuamente, Klee desarrollaba continuamente las tareas realizando primero algunas demostraciones que posteriormente los alumnos debían resolver por medio del dibujo y el color. Se trataba, en el sentido más amplio, de las reglas de la composición de superficies y aplicación del color. También la clase de Kandinsky se incluía en el campo de aprendizaje del color. Al contrario que los trabajos de las clases teóricas y prácticas de Klee, que se sustraen a cualquier intento clasificador, podemos dividir las tareas de la clase de Kandinsky en cuatro grandes grupos:

- sistemas de color y secuencias.

- correspondencias entre color y forma.

- interrelaciones de los colores.

- color y espacio

Se partía normalmente de los colores primarios rojo, azul y amarillo, así como del negro y el blanco. Kandinsky se orientaba en la teoría del color de Goethe, en la que la pareja cromática azul-amarillo es considerada la de más fuerte oposición.

La Bauhaus con Hannes Meyer

El período de Hannes Meyer como director de la Bauhaus se minimiza a menudo, y eso que su mandato duro tres meses más que el de su sucesor Mies van der Rohe. Su compromiso político llevo al alcalde de Dessau a cesarle en 1930 ante el temor de que las actividades comunistas de los estudiantes de la Bauhaus pudieran costar votos.

Meyer en principio se hizo cargo de la sección de arquitectura y estuvo dirigiendo esta sección aproximadamente un año, tiempo durante el cual no obtuvieron ningún encargo, para a comienzos de 1928 ser propuesto por Gropius, por sus conocimientos y dotes didácticas como nuevo director de la Bauhaus propuesta que pronto ratificaron tanto el Ayuntamiento de Dessau como el Consejo de Maestros.

LA NUEVA ORGANIZACIÓN DE LA BAUHAUS

Meyer estaba decidido a transformar radicalmente la organización de la escuela y sus primeras decisiones fueron estas:

Ampliación de la instrucción básica. Se elevó la remuneración de Klee y Kandinsky y se acordó que este daría clase en los semestres primero y cuarto, Klee en el segundo y Schlemmer en el tercero. Para los estudiantes que ya trabajaban en los talleres se repartía la educación entre los dos polos, el artístico y el científico. Lo novedoso era la clara división entre arte y ciencia, así como la tendencia científica del diseño, que Meyer aseguró gracias a una serie de nuevos profesores y profesores invitados. Meyer subdividió la sección de arquitectura en aprendizaje y ejercicio de la construcción. La sección de arquitectura era la más importante de la Bauhaus y en torno a ella se organizaban las demás secciones. Se reguló de nuevo la base financiera de los talleres y se reorganizó el trabajo interno de tal modo que aumentaron los ingresos tanto de los estudiantes como de la escuela. Asimismo se abrió la Bauhaus a los alumnos menos dotados aunque a la larga esta decisión saturó los talleres y hubo de recurrirse a un cupo limitado.

La Bauhaus con Mies van der Rohe

Mies van der Rohe tenía ya entonces la reputación de ser uno de los destacados arquitectos alemanes del vanguardismo. Como Gropius, había trabajado en el estudio de Peter Behrens y había destacado a comienzos de los años veinte con diseños visionarios para rascacielos de cristal. En 1923-24 había sido uno de los iniciadores de la revista radical G (Gestaltung). En 1926-27 dirigió la planificación de la colonia Weibenhof en Stuttgart, en la que habían tomado parte casi todos los arquitectos modernos, y que se había erigido como gran demostración de la nueva forma de construir y vivir y en 1929 fue elegido por el gobierno alemán para construir el pabellón alemán en la Exposición Universal de Barcelona.

EL NUEVO CURSO EN LA BAUHAUS

Ante la convocatoria de una huelga por los estudiantes, frustrados por la destitución de Meyer, van der Rohe respondió, apoyado por las autoridades de Dessau, con el cierre inmediato de la escuela y la anulación de los estatutos vigentes en ese momento. Cada uno de los alumnos de la Bauhaus, si deseaba seguir en ella, debería solicitar una nueva admisión y se retiró la vivienda, con efecto inmediato, a aquellos que disponían de los 26 talleres para estudiantes. Al mismo tiempo cinco de los estudiantes extranjeros más aventajados y pertenecientes al círculo de colaboradores de Hannes Meyer fueron expulsados sin la menor justificación. El nuevo estatuto entró en vigor el 21 de octubre. El poder de decisión se concentraba ahora prácticamente en el director; no era necesario escuchar a los estudiantes, que habían perdido su representación en el Consejo de Maestros. Se prohibía todo tipo de actividad política e incluso se prohibía fumar. El estudio se redujo a seis semestres y la arquitectura constituía ahora, todavía más que bajo Meyer, el centro del programa. La Bauhaus se convirtió en una escuela de arquitectura que contaba con algunos talleres. En la hasta entonces floreciente producción de los talleres tuvo lugar un cambio decisivo. Mies suprimió la producción y decidió que los talleres debían realizar únicamente modelos para la industria. La Bauhaus dejó de ser productora y no admitía contratos. Con ello satisfacía Mies una de las exigencias de la artesanía de la ciudad, que veía competencia en la escuela, pero retiraba a los estudiantes la posibilidad de ganar algo de dinero durante su formación o de financiarse el estudio con su trabajo. Muchos alumnos criticaron esta medida como socialmente dura, pues, además, permanecían habían elevado notablemente.

LAS CLASES DE ARQUITECTURA DE HILBERSEIMER Y VAN DER ROHE

Estas clases se impartían a tres niveles. El primero lo formaban los conocimientos básicos sobre la construcción, calefacción, materiales, etc y eran impartidas por ingenieros y profesores. En un segundo nivel se encontraban las clases del arquitecto y urbanista Ludwig Hilberseimer en las que se planteaban sistemáticamente problemas teóricos de la construcción de colonias. Y en el cuarto trimestre los estudiantes pasaban ya a tener clase con Mies van der Rohe en el que era primordial el estudio del diseño a través del dibujo así como

aplicar una profunda analítica. La más importante tarea, que Mies planteaba una y otra vez, consistía en diseñar una "casa de un piso y techo plano en un patio", pues afirmaba que quien era capaz de diseñar una casa, es también capaz de solucionar cualquier problema de construcción.

Bajo Mies desapareció por completo un aspecto central de la educación Bauhaus: el engranaje entre teoría y práctica. Esta característica había sido siempre lo especial de la educación Bauhaus y Meyer la había hecho efectiva. Ahora predominaba la teoría. Mies no daba demasiada importancia a las candentes cuestiones sociales. La arquitectura era para él arte, análisis del espacio, la proporción y el material.

LOS TALLERES DE PUBLICIDAD Y FOTOGRAFÍA

Durante la era Meyer, el taller de publicidad se había ocupado principalmente de la organización y realización de exposiciones. Joost Schmidt no pudo elaborar un programa de estudios regular en este taller hasta que Mies eliminó el trabajo para exposiciones y prácticas.

Hasta que la Bauhaus se trasladó a Berlín, Joost dio clases en la que se conjugaban ejercicios de combinaciones de texto y fotografías y espacios tridimensionales en perspectiva. En lo referente a las clases de fotografía Walter Peterhans enseñaba a sus alumnos sobre todo la realización de fotografías técnicamente perfectas.

LOS TALLERES DE TEJIDO Y MONTAJE

Después de la dimisión de Gunta Sölzl ocurrida en el otoño de 1931, Mies colocó en su lugar a la arquitecta de interiores Lilly Reich. Aunque Lilly Reich había analizado en profundidad el efecto de los textiles en el espacio, y alcanzado en este campo resultados hasta hoy sin rival, carecía de conocimientos técnicos sobre tejeduría. El taller se concentraba en diseñar muestras de estampados para imprimir y en recopilar colecciones para empresas.

EL FINAL POLÍTICO EN DESSAU

Las elecciones de 1930 significaron la entrada en la escena política de los nacionalsocialistas de Hitler y Turingia fue la primera región en la que estos accedieron al poder. Mientras en la Bauhaus las fuerzas de izquierda se habían organizado, y a pesar de las numerosas expulsiones realizadas por Mies, resistieron hasta comienzos de 1933; los alumos de derechas o nacionalsocialistas no se manifestaron en la escuela hasta las últimas semanas berlinesas. En 1931 y 1932 continuaron los éxitos electorales de los nacionalsocialistas llegando a disponer de la mayoría absoluta en el parlamento y el gobierno fue derribado. Los nazis de Dessau ya se habían pronunciado a favor del cierre de la Bauhaus antes de la victoria electoral. Poco más tarde el nuevo primer ministro nacionalsocialista hizo una visita a la escuela y mandó elaborar un dictamen cuyo fallo fue completamente negativo par la Bauhaus. Además el gobierno regional sustituyó a dos magistrados por dos hombres del partido para así asegurarse la mayoría en la votación de la moción nazi para la disolución de la Bauhaus. Sólo el alcalde Hesse y los cuatro comunistas votaron en contra. La Bauhaus tenía que ser disuelta a finales de septiembre de 1932.

LA BAUHAUS EN BERLÍN

Tras el cierre en Dessau, la Bauhaus obtuvo dos ofertas de sendas ciudades socialdemócratas interesadas en recibirla: Magdeburg y Leipzig. Pero, ya meses antes del cierre, Mies había decidido trasladar la Bauhaus a Berlín como escuela privada. Mies instaló la escuela en una fábrica de teléfonos abandonada y la duración de la carrera sería de siete semestres y el precio de la matrícula más alto. La base financiera para el proyecto procedía del dividendo de las licencias y el ahorro de los honorarios de los profesores, que por contrato correrían con cargo a Dessau hasta 1935. Pero un poco más tarde, tras la toma del poder por los nazis, la fiscalía de Dessau constituyó un comité investigador para buscar pruebas contra el alcalde de la ciudad, acusado de apoyar a la Bauhaus. Se procedió a un registro por parte de la Gestapo de la sede de Berlín y en algunas cajas se "encontraron" revistas comunistas que precipitaron el precintado de la escuela.

En los días siguientes Mies van der Rohe se entrevisto con varios responsables para que levantaran el precinto a la escuela pero no lo consiguió. Para las mismas fechas se promulgó una ley que subordinaba las escuelas privadas al Consejo Provincial de Instrucción Pública y por lo tanto las autoridades podían supervisar el profesorado de las mismas. Mies solicitó el permiso de apertura de una escuela de arte privada y en la contestación a la misma, las autoridades pusieron objeciones sobre determinados profesores. Asimismo, la retribución de los honorarios de los profesores, comprometida desde Dessau hasta 1935, fue anulada. El 19 de julio de 1933 se reunieron los maestros en el taller de Lilly Reich. Mies informó sobre la situación financiera y política e hizo la propuesta de disolver la Bauhaus. Todos los presentes aprobaron esta medida. Esta decisión surgió en una situación de extrema opresión política y económica pero, al mismo tiempo, significó un último manifiesto por la libertad de pensamiento.




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Enviado por:Pink
Idioma: castellano
País: Chile

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