La clasificación de los tipos de mundos responde a la idea de que en la ficción literaria se crean versiones de una realidad que a veces se parece a la nuestra y otras no.
Según el tipo de realidad que representan
Su tema es la creación.
Presenta acontecimientos que corresponden a los orígenes de la vida.
Su tono es solemne y sagrado.
Explica lo sobrenatural.
Sus personajes: dioses, semidioses, héroes y seres humanos. Seres o entidades superiores.
Todo lo que ocurre se da en una lógica en la que lo sobrenatural es normal. (En el mundo ficticio).
El mundo representado aparece como real, cotidiano, pero en él ocurren hechos inverosímiles más propios del mundo de los sueños.
Sus límites son confusos y difíciles de diferenciar. La clave está en identificar quiebres para interpretar los textos leídos.
Los hechos que ocurren rompen con la lógica del mundo representado a partir de acontecimientos fantásticos o inexplicables.
Reproduce la realidad tal como es, en su sencillez, siendo el más objetivo y semejante al mundo real.
Presenta situaciones comunes y corrientes de la vida familiar y social.
Tiene un efecto realista que permite conocer las costumbres y tipos humanos de una época o sociedad determinada.
Según el efecto perseguido.
Es un mundo totalmente diferente al real.
Tiene sus propias leyes, como por ejemplo el cuento de hadas.
Lo que ocurre se hace “normal” dentro de una lógica diferente a la real. Ya que en este tipo de relatos todo es posible, hechos extraordinarios, mágicos, sobrenaturales, etc., son verosímiles dentro de este mundo.
El mundo representado puede estar en cualquier época o lugar.
Las acciones pueden transgredir el orden natural del tiempo y lugar.
No es racional y sus historias se plantean a partir de estados febriles, de locura del narrador o de hechos inexplicables.
Existen elementos comprobables y otros inexplicables, cuestionados incluso por los personajes, pero que poco a poco van siendo aceptados.
La lógica del mundo representado sufre un quiebre.
Representa o imita al mundo real tratando de ser objetivo.
Los hechos reflejan una realidad que ocurre en un tiempo y lugar determinados, describiendo formas de vida, vestimentas, hábitos y problemas sociales.
El lenguaje empleado es coloquial y de época.
La historia se hace creíble por medio de un efecto de autentificación basado en la descripción minuciosa de vestimentas, personas, elementos tecnológicos, ambientes, espacio, tiempo, etc.
*El efecto perseguido es aquel que sirve para hacer más creíble o lógico el mundo ficticio representado a los lectores.