Historia
Segunda Guerra Mundial
INTRODUCCIÓN
En 1939 estalló, en Europa, la Segunda Guerra Mundial, que se convirtió en el conflicto más cruel y devastador del siglo XX.
Su desencadenante fue la expansión nazi y la incapacidad de las democracias occidentales para frenarlo. Sus consecuencias resultaron terribles tanto en el orden material como en el orden moral.
Desde 1945 hasta 1900 el mundo estuvo dividido en dos bloques antagónicos: el socialista, dirigido por la URSS, y el capitalista, liderado por EE.UU. la tensión permanente entre estos dos mundos se tradujo en una situación de constante confrontación, la llamada Guerra Fría. En la década de 1960 la tensión disminuyó y se inauguró un nuevo marco de relaciones internacionales que conocemos como coexistencia pacífica.
También en 1945 se inició el proceso de descolonización y, en menos de veinte años, la mayoría de la colonias consiguieron la independencia. Sin embargo, en muchas de las antiguas colonias, de la metrópoli consiguió mantener buena parte de sus intereses económicos y la mayoría de los nuevos países se vieron abocados a una situación de neocolonialismo.
CAUSAS
En primer lugar, la Segunda Guerra Mundial surgió en función del enfrentamiento entre ideologías que amparaban sistemas político—económicos opuestos. Se enfrentaron tres ideologías contrarias: el liberalismo democrático, el nazi—fascismo y el comunismo soviético. Estos dos últimos sistemas, no obstante ser contrarios entre sí, tenían en común la organización del Estado fuerte y totalitario y el culto a la personalidad de un líder carismático, características opuestas al liberalismo que postula la democracia como forma de gobierno y la libertad e igualdad de los individuos como forma de sociedad.
En segundo lugar estaban los problemas étnicos que, presentes desde siglos atrás, se fueron haciendo más graves al llevarse a efecto las modificaciones fronterizas creadas por el Tratado de Versalles, que afectaron negativamente sobre todo a Alemania y a Austria y redujeron de manera considerable sus territorios. Este hecho fue determinante para difundir en esos pueblos el sentimiento de superioridad de la raza germana —identificada por Adolfo Hitler como “raza aria” de acuerdo con una idea desarrollada en la filosofía alemana del siglo XIX— frente a los grupos raciales, principalmente los judíos que controlaban la economía capitalista, y quienes, según la perspectiva de los nazis, habían dividido a los pueblos germanos e interrumpido su desarrollo económico.
Por otra parte, la insistencia de Hitler por evitar el cumplimiento del Tratado de Versalles provocó diferentes reacciones entre los países vencedores: Francia, que temía una nueva agresión de Alemania, quería evitar a toda costa que resurgiera el poderío bélico de la nación vecina. En cambio, el gobierno británico y el de Estados Unidos subestimaban el peligro que el rearme alemán representaba para la seguridad colectiva; consideraban que el Tratado de Versalles había sido demasiado injusto, y veían con simpatía la tendencia anticomunista adoptada por la Alemania nazi, porque podría significar una barrera capaz de detener el expansionismo soviético hacia Europa, calificado entonces por las democracias occidentales como un peligro mayor y mucho más grave que el propio nazismo. A causa de ese temor al comunismo, el gobierno británico adoptó una política de “apaciguamiento” respecto al expansionismo alemán, bajo la idea de que al hacer concesiones a Hitler podría evitarse una nueva guerra y se obtendría, además, su colaboración contra el peligro soviético.
En tercer lugar, en la década de los años treinta la situación del mundo era muy distinta a la de 1914. A parte de los trastornos ocasionados por la crisis económica iniciada en Estados Unidos, aún persistían los efectos devastadores de la Primera Guerra Mundial, que había producido una enorme transformación en todos los ámbitos de la vida humana y originado grandes crisis en prácticamente todos los países de la Tierra. Además, la secuela de tensiones internacionales que ese conflicto produjo, preparaban el camino para una nueva guerra, no obstante los intentos de la Sociedad de Naciones por evitarla. Por esta razón, puede decirse que la Segunda Guerra Mundial se originó directamente de la Primera; de ahí que ambos conflictos, enlazados por el periodo de entreguerras, constituyan lo que se considera como la “Segunda Guerra de los Treinta Años” en la historia moderna de la humanidad.
CONTENDIENTES
El conflicto opuso, a manera de resumen, a dos bandos: los Aliados y el Eje.
FASES DE LA GUERRA
La Segunda Guerra Mundial fue una guerra total, que se extendió por tres continentes y tuvo en la población civil su principal víctima.
Las victorias del Eje
Con la invasión de Polonia, Hitler inició la guerra relámpago basada en la utilización masiva de divisiones acorazadas (los pazner) y en un importante apoyo aéreo. Este nuevo tipo de guerra permitió el ataque sorpresa y avanzar con rapidez.
Una vez conquistada Polonia, los ejércitos alemanes invadieron la mayor parte de la Europa Occidental (Países Bajos, Bélgica, Dinamarca, Noruega y el Norte y Oeste de Francia). En 1940, sólo Gran Bretaña resistía a Alemania. En 1941 Hitler inició la invasión de la URSS y sus tropas del Afrikakorps (bajo el mando de Rommel) conquistaron el Norte de África.
En diciembre de 1941, Japón destruyó la flota estadounidense en Pearl Harbour. En aquellos momentos el Eje Roma-Tokio parecía invencible.
Europa Bajo el Nazismo
La ocupación nazi tenía como finalidad el sometimiento de los territorios europeos en beneficio de Alemania. En función de ello, los nazis organizaron los territorios conquistados en regiones incorporadas al Reich (Alsacia, Lorena, Luxemburgo, Bohemia...), regiones colonizadas (Polonia Oriental, Países Bálticos...) y Estados satélites (Francia, Ucrania, Países Bajos...).
En todas ellas la industria se reordenó en funciones de los intereses alemanes, se hicieron requisas forzosas de productos de primera necesidad y se obligo a trabajadores a desplazarse a Alemania. La ocupación tambien significo la expansion del terror y la represión sobre la población sometida. Los alemanes encontraron colaboradores entre la población civil, pero muchos de los que no aceptaron el nuevo orden nazi organizaron la Resistencia de forma clandestina.
En todas partes se desencadenó la persecución y consecuente genocidio de los judíos (holocausto), que fueron trasladados a campos de concentración , donde la mayoría de ellos encontró la muerte.
La Gestapo y las SS implantaron un régimen de violencia y terror sobre la población, especialmente sobre los resistentes, que fueron detenidos, torturados y deportados o ejecutados.
El Triunfo Aliado
En 1942 la situación de la guerra empezó a dar un vuelco cuando la URSS y Estaos Unidos entraron e reforzar a los aliados. En junio, lo estadounidenses frenaron a los japoneses en el Pacífico (Batalla de Midway) y los británicos a los alemanes en el Norte de África (El- Alamein). Pero el primer gran fracaso de Hitler tuvo lugar en Stalingrado (agosto 1942-febrero 1943), cuando las tropas alemanas capitularon ante la ciudad y tuvieron que retroceder por primera vez.
A partir de este momento , los aliados empezaron su ofensiva. El desembarco estadounidense de Normandía (junio 1944) permitió el avance angloamericano desde el Oeste, mientras el Ejercito Rojo ruso avanzaba po el Este. El 8 de mayo de 1945 Alemania capituló.
Pero en Asia los japoneses continuaban combatiendo. Para precipitar la rendición japonesa, el presidente Turman de EE.UU. decidió utilizar una arma nueva: la bomba atómica, que fue lanzada sobre Hiroshima y Nagasaki (agosto 1945). El 2 de septiembre Japón capituló. La Segunde Guerra Mundial había terminado.
CONSECUENCIAS
Se calcula que el total de muertos durante la guerra se sitúa en torno a los 55 millones de personas, siendo la URSS, China, Polonia y Alemania los países donde la cifra es mayor. A ello tendríamos que añadir los heridos graves e inútiles de guerra que alcanzan los 35 millones de personas.
Las naciones invadidas o derrotadas son las que experimentaron mayores pérdidas económicas (Alemania, URSS, Francia y Japón); en la mayoría de ellas no se había alcanzado aún en 1950 el nivel económico de la preguerra y especialmente en las del sudeste asiático, pues los países europeos contaron con la ayuda americana y la URSS pudo sustraer de la Alemania invadida gran parte de su maquinaria industrial.
Cambios económicos.- Han sido innumerables y tuvieron importantes aplicaciones para el posterior desarrollo económico. Desde la fisión nuclear, empleada en la bomba atómica, hasta los nuevos dispositivos de comunicación y localización (radar) o las mejoras en los medios de transporte (barco, avión), pasando por la elaboración de productos sintéticos.
Estados Unidos convirtió a países como México, Argentina y Canadá en los grandes abastecedores de los aliados, a través de su mediación.
Cambios políticos.- Quedaron eliminados los regímenes totalitarios de Alemania, Italia y Japón; por el contrario, se impusieron regímenes comunistas en Europa oriental. Europa occidental perdía definitivamente su hegemonía mundial y buscó la alianza con Estados Unidos para protegerse de la amenaza soviética, pues la URSS no desmovilizó sus ejércitos situados en Europa oriental al concluir la guerra.
Cambios territoriales.- La URSS aumentó sus posesiones al incorporar los estados de Estonia, Letonia, Lituania y el norte de la Prusia Oriental. Polonia, en compensación a las pérdidas citadas, recibía los territorios alemanes existentes al este de la línea Oder-Neisse. Bulgaria retuvo la parte sur de la Dobrudja e Italia tuvo que ceder la Venecia-Julia a Yugoslavia y las islas del Dodecaneso y Rodas a Grecia. Por otra parte, Alemania y Austria fueron ocupadas por los aliados, siendo sus territorios repartidos en cuatro zonas para reunificarlas posteriormente (norteamericana, francesa, soviética y británica).
Al terminar la Segunda Guerra Mundial surgió una bipolarización del mundo en torno a Estados Unidos y la URSS, potencias que más tarde se enfrentarían en la Guerra Fría. En Yalta se convocó una conferencia el 25 de abril de 1945 donde se constituyó definitivamente la Organización de Naciones Unidas.
Los propósitos fundamentales de la ONU fueron mantener la paz y la seguridad internacional, fomentar relaciones amistosas entra las naciones y la solidaridad internacional, y por último promover la cooperación internacional para la resolución de problemas de orden económico, social y cultural.
MAPA DE EUROPA TRAS LA 2º GUERRA MUNDIAL
Expansión Alemana entre 1940 y 1942
Mapa de Europa en 1945
LA GUERRA FRÍA Y LA COEXSTENCIA PACÍFICA
Guerra fría, disputa que enfrentó después de 1945 a Estados Unidos y sus aliados, de un lado, y al grupo de naciones lideradas por la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS), del otro. No se produjo un conflicto militar directo entre ambas superpotencias, pero surgieron intensas luchas económicas y diplomáticas. Los distintos intereses condujeron a una sospecha y hostilidad mutuas enmarcadas en una rivalidad ideológica en aumento.
CAUSAS DE LA DESCOLONIZACIÓN
La Gran Guerra abrió el camino para el despertar de los pueblos colonizados. Las nuevas elites indígenas, educadas en Occidente e impregnadas de las ideas de democracia y libertad y a la vez excluidas de los cargos administrativos y políticos, formarán los cuadros de los primeros grupos nacionalistas. Esta naciente idea nacional estará representada en diferentes figuras que jugarán el papel de símbolos: Gandhi apelará a la conciencia religiosa hindú, Burguiba se inspirará en el laicismo transformador de Kemal Ataturk, mientras que Ho Chi Minh planteará la revolución comunista junto a la emancipación nacional.
La modernización económica -infraestructuras, hospitales, escuelas- que llevaron las metrópolis a las colonias tuvo un doble resultado contradictorio, de progreso y de desequilibrio. Los adelantos médicos, unidos al mantenimiento de una alta tasa de natalidad, provocó en el período de entreguerras el inicio de la explosión demográfica. Este aumento de la población se produjo en sociedades que no experimentaron un crecimiento económico significativo. Paro en el campo y hacinamiento en las ciudades fueron los resultados de una sociedad dislocada en la que el descontento social fue pronto aprovechado por los nacionalismos anticolonialistas.
El efecto de la Segunda Guerra Mundial trajo una fuerte aceleración al proceso de crisis de los sistemas coloniales. Los factores que lo explican son varios:
-La rápida derrota de Francia, Bélgica y Holanda supuso un fuerte desprestigio de las metrópolis en sus respectivos imperios coloniales. También el imperialismo inglés derrotado en gran parte de Asia sufrió una situación parecida. Las potencias del Eje trataron, evidentemente, de aprovecharse de esta situación. El ejemplo más claro es la apelación que los japoneses hicieron a los pueblos que conquistaron para unirse y rebelarse contra el dominio de los blancos europeos.
-El Reino Unido y la Francia Libre enrolaron en sus ejércitos a muchos habitantes de las colonias. Un ejemplo lo constituye los más de dos millones de hindúes fueron movilizados por el Imperio Británico, o la mayoritaria presencia de magrebíes en el ejército francés que luchó en Italia junto a los Aliados. La sangre derramada legitimó las reivindicaciones de los pueblos colonizados.
-Las dos grandes superpotencias surgidas de la guerra, EE.UU. y la URSS, defendían posturas anticolonialistas e impulsaron su proceso de emancipación. Los norteamericanos, además de recordar su propio origen nacional, apoyaron la apertura de mercados para sus capitales y productos y el consiguiente fin de las trabas coloniales. Los soviéticos lo hicieron desde su propia ideología anticapitalista y antiimperialista.
-El acuerdo de las dos superpotencias, al que pronto se fue uniendo el voto de los países que iban naciendo en el proceso de descolonización, hizo que la ONU jugara un papel impulsor del proceso descolonizador.
Descargar
Enviado por: | El remitente no desea revelar su nombre |
Idioma: | castellano |
País: | España |