Filosofía
Racionalismo y Empirismo
Capitulo VIII - El racionalismo - Descartes.
La nueva época y la crítica al pensamiento medieval.
< XV - Edad Media: concepción religiosa del mundo y la vida centrada en dios: TOCENTRISMO.
> XV - Renacimiento: hacia la naturaleza: NATURALISMO.
Nuevas formas de existencia (política, social, económica y moral), no ocurre lo mismo desde el punto de vista filosófico y científico.
> XVII - Madurez de la Edad Moderna: avance desde el punto de vista filosófico.
El problema del método.
Cuáles son las fallas del método criticado?
Qué ofrece la Edad Moderna en su reemplazo?
Criterio de autoridad
Pensamiento medieval reconocía el “criterio de autoridad”, se admitía que lo dicho por ciertas autoridades (la Biblia, la iglesia, Aristóteles) era verdad por el solo hecho de que tales autoridades lo afirmasen eximiéndose cualquier explicación o crítica ulterior.
Ej.: Cuando Copérnico enunciaba la tesis según la cual la tierra gira alrededor del sol (heliocentrismo), se le objeto que era falsa porque en la Biblia Josué mandó a detener al sol.
Verbalista al método escolástico.
Sólo pueden solucionarse mediante la observación para cualquier otro procedimiento objetivo.
Ej.: el opio hace dormir porque tiene una virtud dormitiva, no significa más que afirmar que el opio hace dormir porque hace dormir.
Silogismo.
Razonamiento deductivo constituido por tres proposiciones o juicios (es decir, afirmaciones o negaciones) tales que, dado los dos primeros (premisas), el tercero (conclusión) resulta necesariamente de aquellos dos.
Ej.: Silogismo consta de 3 términos o palabras.
Premisa mayor: todos los hombres son mortales
Premisa menor: Sócrates es hombre
Conclusión: Luego Sócrates es mortal.
Se llama término mayor al que aparece como predicado en la conclusión (mortal), termino menor al sujeto de la conclusión y Termino medio, al que aparece en ambas premisas pero no en la conclusión (hombre)
Si la premisa es falsa el silogismo también lo será. Ej.: “todos los hombres son negros, Sócrates es hombre, luego Sócrates es negro”.
No permite determinar la verdad de los conocimientos, tiene valor como método de exposición para representar ordenadamente las verdades ya sabidas. Tenia su legitimidad en la Edad Media ya que las verdades estaban dadas por la escrituras o por Aristóteles. Pero no puede servir como fuente para nuevos conocimientos.
La nueva época pretende acabar con “verbales” y proporcionar un método que permita ir a las cosas mismas.
La filosofía de la desconfianza. Descartes
El “Radicalismo” singulariza su pensamiento. “Raíces” la tendencia que se orienta hacia las verdades y profundas “raíces” de algo, hacia los fundamentos últimos.
El hecho de la pluralidad y diversidad de los sistemas filosóficos, los filósofos no se han puesto jamás de acuerdo, la filosofía no ha conseguido solucionar ninguno de sus problemas: ha sido cultivada por los mas excelentes ingenios que han vivido desde siglos, y sin embargo, no hay nada en ella que no sea objeto de disputa y, por consiguiente, dudoso.
No puede soportar lo “dudoso” o simplemente verosímil. El conocimiento debe ser absolutamente seguro o debe ser abandonado como teóricamente insuficiente.
Se propone dar término definitivo a tal estado de las cosas y fundamentar el saber sobre bases cuya firmeza esté más allá de toda sospecha. En un primer momento su pensamiento puede caracterizarse como filosofía de la desconfianza. Porque hasta ahora la filosofía no ha hecho mas que fracasar. Empezar totalmente de nuevo, como si antes nadie hubiese hecho filosofía. Tomo las cosas desde el comienzo. Es esta actitud lo que confiere al pensamiento cartesiano su imperecedera grandeza.
La duda metódica.
El pasado encierra al menos una enseñanza, implícita en sus fracasos: la que debemos cuidarnos en caer en el error, ser críticos de nosotros mismos no solo de lo anterior.
El radicalismo cartesiano manifiesta como preocupación por evitar el error: la duda metódica. No significa dudar simplemente, sino hacer de la duda un método, convertir a la duda en un método.
Quiere alcanzar un saber absolutamente cierto, cuya verdad sea tan firme que esta mas allá de toda posible duda. Busca un conocimiento absolutamente cierto. No puede aceptar lo dudoso. Solo dará por valido lo que sea absolutamente cierto.
Para ver si dudando de todo, forzando la duda hasta sus mismos limites, queda algo que resista a ella.
La duda es metódica porque se usa como instrumento para llegar a la verdad.
Es universal porque habrá que aplicarse a todo sin excepción hasta llegar a que resulte imposible la duda.
Es hiperbólica porque será llevada hasta su último extremo.
Debe retrotraerse el saber a sus fundamentos. Se deberá hacer primero la critica del saber sensible, y luego la del saber racional.
Critica del saber sensible
Todo conocimiento sensible es dudoso. Argumentos para probar que debe ser puesto en duda: ilusiones de los sentidos y en los sueños.
Los Sentidos
Debemos dudar del conocimiento sensible. Es propio de la prudencia no confiar en aquellos que nos engañaron una vez. Las cosas “sensible” resultan dudosas, no podemos saber si los sentidos no nos engañan en todos los casos. En consecuencia, dar de falso todo lo dudoso y desechar el saber que los sentidos proporcionan.
Los sueños
Puede admitirse que los sentidos nos engañan en cosas muy distantes, pero hay cosas que no puede razonablemente dudarse aunque las conozcamos por medio de los sentidos.
En efecto no tenemos ningún indicio cierto, ningún signo seguro o criterio nos permita establecer cuando estamos despiertos o dormidos, el sueño o la vigilia.
Representar en sueños las mismas cosas.
Critica del conocimiento racional
Dos argumentos.
En matemáticas (la ciencia más racional) existe la posibilidad de equivocarse, aun en una operación sencilla como la suma. Cabe la posibilidad de que todos los argumentos racionales sean falaces, de que todo conocimiento racional sea falso.
“Argumento del genio maligno” Nuestro razonamiento o proceso discursivo se apoyan en ciertos “principios” (por ejemplo “todo objeto es idéntico a si mismo” o “El todo es mayor que la parte”) mismos del conocimiento racional, conocidos “intuitivamente”, de modo inmediato, por simple “inspección del espíritu” Puede efectivamente imaginarse que exista un genio o especie de dios, muy poderoso a la vez que muy perverso, que nos haya hecho de forma tal que siempre nos equivoquemos. Descartes no dice que haya efectivamente tal genio maligno. Pero lo que importa notar es que por ahora no tenemos ninguna razón para suponer que no lo haya; es, una posibilidad, por mas remota o descabellada que parezca ser. Y puesto que la duda, según nuestro plan, debe llevársela hasta su limite mismo, si lo tiene; si incluso hay que forzarla, si en verdad se quiere llegar a un conocimiento absolutamente indudable, resulta entonces que la hipótesis del genio maligno debe ser tomada en cuenta, porque justamente representa el punto máximo de la duda, el ultimo extremo que la duda puede llegar. El saber racional se vuelve dudoso. Para Descartes la razón misma se hace un problema, y una de sus tareas será fundamentar la razón.
Capitulo 9 Las reglas del método
Cuatro reglas:
La regla de la evidencia: No admitir como verdadera cosa alguna, como no supiese con evidencia que lo es, es decir evitar cuidadosamente la precipitación y la prevención, y no comprender en mis juicios nada más que lo que se presentase tan clara y distintamente a mi espíritu, que no hubiese ninguna ocasión de ponerlo en duda. Se debe admitir como verdadero un conocimiento solo en caso de que sea evidente (cuando no pueda dudar de él, cuando no haya ninguna ocasión de ponerlo en duda. La evidencia tiene dos caracteres:
Un conocimiento es claro cuando esta presente y manifiesto a un espíritu atento, cuando la idea misma a que me refiero se muestra directamente al espíritu. Ej. Si en este momento tengo un dolor, este dolor es algo “claro”, pero si se me pasa y tengo un recuerdo de él, será un conocimiento “oscuro”
Un conocimiento distinto es si además en este conocimiento de algo no hay nada que no le pertenezca a ese algo. Ej. Seria “distinto“ “el triangulo es una figura de tres lados”, seria “confuso” pensar “el triangulo es una figura” puesto que podría confundirlo con un cuadrado., rectángulo o demás figuras que no son triángulos.
El precepto ordena guardados dos fuertes propensiones:
La precipitación consiste en afirmar o negar algo antes de haber llegado a la evidencia
La prevención equivale a los prejuicios, falsos o verdaderos, que nos han llegado por tradición, educación, factores sociales, y no por la evidencia, pero nada que no hayamos examinado con nuestra propia razón, nada que nos venga fuera de ella.
La regla del análisis nos dice que cuando nos ocupamos de cualquier problema o dificultad, se lo debe dividir, analizar, y seguir con la división hasta que se llegue a algo evidente.
La regla de la síntesis o deducción en todo conocimiento se debe partir siempre de lo mas sencillo, y de allí proceder hacia lo mas complicado, siempre según su orden.
La regla de la enumeración exige examinar con cuidado la cuestión estudiada para ver si no hay algún tema o aspecto que se haya pasado por algo.
Capitulo 11 Existencia y veracidad de Dios.
Descartes pretende demostrar la existencia de Dios mediante 3 pruebas, vamos a referirnos solo a dos:
La idea de dios, la idea de un ente perfecto (idea que tengo independientemente de que yo crea en su existencia o no).
Esa idea de dios que yo tengo ha de haber sido producida por algo o por alguien, necesita una causa, porque yo soy imperfecto (la prueba esta en que dudo), y lo imperfecto no puede ser causa de lo perfecto, ya que en tal caso habría falta de proporción entre la causa y el efecto, y el efecto no puede ser nunca mayor que la causa. Es preciso que esa idea me la haya puesto alguien más perfecto que yo, a saber, Dios. Por lo tanto Dios existe.
Kant dio el nombre de argumento ontológico. Tengo la idea de un ente perfecto (no le puede faltar algo porque si no, no seria perfecto) por lo tanto, tiene que existir, porque si no existiese le faltaría la existencia, sería “inexistente”, y es evidente que eso seria una imperfección. “La existencia necesaria y eterna está comprendida en la idea de un ser enteramente perfecto”.
Dios, substancia pensante infinita (a diferencia de mi, que soy substancia finita), y que es perfecto, no puede ser engañador, no puede ser mentiroso, sino eminentemente veraz; si nos ha hecho con nuestra razón y la ideas innatas, que son el instrumento válidos para el conocimiento. De manera que la veracidad de Dios es la garantía y fundamento de la verdad del conocimiento evidente, claro y distinto. Si nos equivocamos, no ocurre por culpa de Dios sino por nuestra propia culpa, porque nos apresuramos en juzgar antes de haber llegado al conocimiento claro y distinto o nos dejamos llevar por los prejuicios (cf. Regla de la evidencia)
Capitulo IX - El empirismo - Hume.
Capitulo 3 El principio fundamental del empirismo
Todos los materiales del pensar se derivan de nuestras sensaciones externas p internas. Sólo la mezcla y composición de éstas pertene al espíritu y a la voluntad. Todas nuestras ideas, o percepciones más débiles, son copia de nuestras impresiones o percepciones más vivaces.
Dos argumentos:
Cuando analizamos nuestros pensamientos o ideas, por mas complicadas o sublimes que sean, por mas alejadas de la sensibilidad que parezcan, se vera que en ultima instancia se reducen siempre a impresiones.
La idea de dios, con el significado de un ser infinitamente inteligente, sabio y bueno surge al reflexionar sobre las operaciones de nuestro propio espíritu y al aumentar ilimitadamente estas cualidades de bondad y sabiduría.
Hume se pregunta de donde procede tal idea, y observa que ella no es más que la reunión y multiplicación al infinito de ideas de cualidades características de nuestro propio espíritu. Multiplico luego al infinito la idea del saber, y obtengo la idea de sabiduría infinita y perfecta, hago lo mismo con el poder y obtengo poder infinito u omnipotencia., y si hago lo mismo con la bondad obtengo bondad absoluta o perfecta. La suma de estas tres ideas (omnisciencia, omnipotencia y bondad) en una sola idea compleja, y entonces tendré formada la idea de Dios.
Para Hume es una idea construida por el espíritu sobre una base del material que proporcionan impresiones de reflexión.
Quizás la idea de Dios corresponda a una realidad, es posible que haya Dios, pero también es posible que no exista, por lo tanto Dios no es por lo pronto, según Hume, nada mas que una mera idea.
Si ocurre que, por un desperfecto del órgano, una persona no es capaz de experimentar ninguna clase de sensación, tiene la misma incapacidad para formar las ideas correspondientes. Ej. Un ciego no puede formarse noción de los colores ni un sordo de los sonidos.
Pero si se otorgase a cualquiera de ellos el buen uso del órgano de que carecen, el ciego pronto llegaría a alcanzar la idea de color o el sordo la de sonido.
Criterio para determinar la validez de una idea: Toda idea deriva de alguna impresión, pero para que la idea tenga valor objetivo, es preciso que copie o represente exactamente una impresión, es decir, que le corresponda una impresión con el mismo significado que posee la idea, y si se trata de una idea compleja, habrá de corresponderle una impresión a cada uno de sus elementos. Si la impresión faltase, la idea no es valida, no es una idea objetiva, sino carente de significado real producto de la imaginación.
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Enviado por: | Paula |
Idioma: | castellano |
País: | Argentina |