Literatura


¿Qué es conocimiento?; José Ortega y Gasset


1. INTRODUCCIÓN

1.1. Presentación de la obra

Esta obra es una reimpresión de los artículos que escribió Ortega en un diario llamado “El Sol”, en concreto una serie de artículos que aparecieron publicado entre el 18 y 25 de enero, 1 y 22 de febrero y 1 de marzo de 1931 bajo el título “¿Qué es conocimiento?”.

También aparecen en este libro el curso entero que impartió Ortega entre los años 1929 y 1930 en el local de la “Revista de Occidente” ante un reducido grupo de oyentes en el mes de diciembre de 1929.

Este libro está formado por cuatro partes:

  • La parte primera de este libro contiene el texto del curso que hemos mencionado anteriormente, al que tituló “Vida como ejecución (El ser ejecutivo)”.

  • La segunda parte de este libro contiene el curso que impartió Ortega durante el mes de abril de 1930 en la Universidad de Madrid al que tituló Sobre la realidad radical”.

  • La tercera y cuarta parte del libro corresponde al curso de 1930/31 al que Ortega tituló “¿Qué es la vida?”.

1.2. Resumen de la obra

La primera parte titulada “Vida como ejecución” (EL SER EJECUTIVO) contiene una serie de problemas que podríamos mencionar que es el prólogo de la obra, ya que a partir de estos problemas se desarrollará la obra.

Después de estos problemas empieza esta parte, proponiendo la siguiente pregunta ¿qué es filosofía?. Lo primero que nos dice el autor es que la filosofía es una cierta ocupación. Todas las ciencias particulares buscan verdades domésticas, reposos arbitrarios, e implican una búsqueda de la verdad plena. Buscar la verdad plena, es decir sus condiciones, es filosofía.

La verdad plena es todo aquello que no suponga otras verdades, que todas las demás la supongan.

Ahora ya podemos referirnos a las historia para simplificar las dos grandes posiciones del pasado: realismo e idealismo

  • Para la tesis realista es preciso derivar la existencia del mundo como secundaria de la existencia primaria del pensamiento.

  • La tesis idealista, por el contrario, añade al mundo el pensamiento. El idealismo no hace más que restar la porción innecesaria, el mundo, y deja el resto, es decir, el pensamiento. Esta tesis es la más firme hasta ahora conocida.

En la segunda parte titulada ”Sobre la realidad radical” es una continuación de la primera parte, ya que comienza también hablando de la filosofía, diciéndonos otra definición diferente, “es algo que el hombre hace”, luego nos dice Ortega que la filosofía es un conjunto de actividades que comienzan siempre por preguntarse uno a sí mismo. La respuesta que damos a esa pregunta, suele llamarse conocimiento, en cambio para Aristóteles el conocimiento son los mecanismos de la psique humana que el hombre, quiera o no, ejercita.

Para Ortega la teoría del conocimiento es una radical confusión que lastra toda la historia de la filosofía. La pura verdad es que el hombre siente un extraño afán por conocer y que le faltan las dotes; es decir, que le falta precisamente la naturaleza. Pero ¿por qué se mueve a conocer, a preguntar?. Para Aristóteles esto se debe a que la naturaleza del hombre está integrada también por una facultad que lo incita a usar.

En la tercera parte “¿Qué es la vida?” se basa en dar varias definiciones y ver todo lo que lleva consigo el término vida. Para Ortega la vida es siempre de alguien, de un viviente. Este alguien, este viviente es sólo uno de los dos grandes y radicales componentes de la vida cuyo otro componente es la circunstancia, contorno o mundo.

Para que exista realmente vida hace falta que el hombre se encuentre en medio de una circunstancia o mundo, ya que un hombre no tiene ser, no existe aparte de lo que le rodea.

El hombre y el mundo están hechos el uno para el otro. Nuestro ser no tiene carácter substante, no consistimos cada cual, aparte, en sí y por sí. Vivir es estar, existir en el mundo y el mundo, viceversa, es originaria y formalmente contorno para el que vive.

La vida es algo que no nos es dada hecha, sino que hemos de hacerla.

Por último Ortega nos da su última definición de vida, que es: la vida es, en su más primaria esencia, interrogación o lo que es lo mismo, inseguridad; o lo que es igual imposibilidad de contentarse con las cosas, con lo que está ahí ahora.

La cuarta y última parte titulada “¿Atisbos de la historia de la filosofía”? se trata la historia filosófica y también de la historia milenaria del conocimiento.

A principios de la era filosófica se interpretaba el conocimiento de suerte tal que en él lo ponía todo el objeto. El sujeto no hacía nada: simplemente padecía, su papel era pasivo. Se creía sin más, qu el conocer consistía en que la cosa pasaba de su realidad, o de estar en sí, a estar en la mente.

Las notas más ingenuas y primitivas del conocimiento decían:

  • El conocimiento es una copia.

  • El contenido del conocimiento es el ser de una cosa es lo mismo que la cosa

Estas notas eran las que prevalecían sobre los años 600 al 300 a.d.C. , para ellos el conocimiento es recepción y copia.

Platón analiza las cosas que están ahí, buscando algo en ellas que pueda significar su ser. Pero ser para Platón no es cualquier cosa, es lo permanente, inmutable, idéntico. Para Platón el ser no está ahí en la cosa, estos es, en el mundo, sino que está más allá, fuera del mundo en un lugar sobreceleste.

1.2. Biografía de José Ortega y Gasset

¿Qué es conocimiento?; José Ortega y Gasset
José Ortega y Gasset nació el 8 de mayo de 1883 en el seno de una familia de la alta burguesía ilustrada madrileña. Su vida la dedicó a la filosofía y al ensayo español. Fue hijo de José Ortega y Munilla. Recibió la educación de los jesuitas de Miraflores de Palo (Málaga), ingresó en la Universidad de Madrid y se doctoró en filosofía en 1904. De 1905 a 1907 amplió sus estudios es Leipzig, Berlín y Marburgo. Gasset fue discípulo de Hermann Cohen, fundador de la escuela de Marburgo una de las figuras más importantes del neokantismo.

De regreso a España, ganó la cátedra de metafísica de la Universidad Central en el año 1910. Cuatro años después apareció uno de sus libros más significativos, Meditaciones del Quijote, germen de su filosofía y de su actitud cultural germanizante, y pronunció la conferencia “Vieja y nueva política”. En 1915 fundó la revista España y en 1923 la Revista de Occidente. En 1931, al advenimiento de la República, fue elegido diputado. Opuesto a la dictadura del general Miguel Primo de Rivera (1923-1930), colaboró en la caída de la monarquía de Alfonso XIII y el advenimiento de la II República. Con este fin creó la Agrupación al Servicio de la República, grupo político en el que participaron otros intelectuales como Gregorio Marañón o Ramón Pérez de Ayala, y en nombre del cual fue elegido diputado a las Cortes Constituyentes de 1931. Descontento con la orientación radical de la Constitución de 1931 (en especial por la aprobación del Estatuto de Autonomía de Cataluña) abandonó su puesto de diputado.

Con el estallido de la Guerra Civil española en 1936, Ortega abandonó el país y residió en Francia, Países Bajos, Argentina y Portugal antes de su regreso en 1945..Permaneció alejado de la cátedra, de la que fue jubilado en 1952. Fundó en Madrid, con su discípulo Julián Marías, el Instituto de Humanidades (1948). Gran parte de su pensamiento se encuentra diseminado en artículos publicados en los principales periódicos de su tiempo. Ortega vió en el periódico un medio adecuado para crear un clima intelectual colectivo y para introducir en España el pensamiento europeo, por otra parte, su sentido de lo histórico le llevo a convertirse en El Espectador (título de una de sus mas destacadas producciones (8 volúmenes, 1916 - 1928) e intérprete de su época. Todo ello contrivbuyo a que se convirtiera en la figura intelectual mas influyente de los años de entreguerras. Su pensamiento filosófico paso por diversas etapas:

  • Objetivista, de influencia neokantiana (1902 - 1910)

  • Perspectivista, que culmina en El tema de nuestro tiempo (1923)

  • Racionalvitalista, que comienza con el artículo “Ni vitalismo ni racionalismo” (1924). Otras obras pertenecientes a esta etapa son: “Reflexiones de un centenario” (1929), “En torno a Galileo” (1933), “Historia como sistema” (1936), “Ideas y creencias”(1940), “Prólogos” (1945) y “¿Qué es filosofía?” (1958).

Mayor vigencia ofrecen sus Ideas sobre la novela (1925), los ensayos críticos dedicados a Baroja y Azorín, o su lúcida interpretación del realismo cervantino en “Meditaciones del Quijote”.

Posteriormente regresó ocasionalmente a España, por la cercanía de su familia y para promover iniciativas con el Instituto de Humanidades, con un "apeadero" en Madrid, donde muere el 18 de octubre de 1955.

1.3. Contexto histórico, político y social de la obra y del autor.

Contexto histórico

La vida histórica del autor comienza el 8 de mayo de 1883 en la ciudad de Madrid y finaliza el 18 de octubre de 1955.

Esta obra se enmarca entre los años 1929 que es el año del curso “Sobre la realidad y radical” y el año 1931, año en el que se publican los diversos artículos que aparecieron en el diario “El sol”.

Contexto social

La cuestión social que envolvía a la República giraba en torno a la actitud de los grandes sindicatos tanto católicos como socialistas y anarquistas. El sindicato socialista, la UGT, era en 1908 un pequeño sindicato. Tres motivos hicieron aumentar su número de afiliados:

  • El primero de ellos fue la idea, copiada del Partido Radical, de las casas del pueblo, especie de clubs socialistas.

  • El segundo motivo fue la alianza táctica con los republicanos de clase media.

  • El tercer motivo fue la guerra de 1914-1918 que dio a España prosperidad, mayor conciencia política y mayor interés por los asuntos del resto de Europa.

En 1920 la UGT tenía 200.000 miembros. Su secretario general y fundador, Pablo Iglesias, murió en 1925 siendo sustituido por su principal lugarteniente, Francisco Largo Caballero. No tuvo nada de extraño que Largo Caballero fuera el primer ministro de Trabajo en 1931 ya que durante mucho tiempo la UGT había sido respetada por la burguesía a causa de su disciplina. Largo Caballero no era un orador. Creía en los comités no en las teorías e incluso había accedido a colaborar con la dictadura de Primo de Rivera. Esto se explicaba debido al temor morboso que tenía a ceder a terreno a sus rivales en la clase obrera, los anarquistas, quienes, aunque desorganizados, eran mucho más numerosos que los socialistas.

El carácter del anarquismo español se basaba en la idea de que el Estado, puesto que implicaba las ideas de obediencia y autoridad, era malo. En su lugar había que crear comunas autónomas que harían pactos entre sí. La Semana Trágica condujo a la formación, en 1910, de la primera federación de trabajadores a nivel nacional, la Confederación Nacional del Trabajo o CNT, que desde el principio estuvo dominada por los anarquistas. Las interminables crisis gubernamentales de la monarquía hacían creer a los anarquistas que su hora estaba próxima. Al parecer, la CNT tenía ya 700.000 miembros en 1918 y florecían más de 200 periódicos y publicaciones. El poder alcanzado por la CNT dentro de la clase obrera española en Barcelona y Andalucía al final de la primera guerra mundial presentaba un problema en sí mismo, pues sembraba la disensión entre los puristas, que no se conformaban más que con una revolución social completa, y los del ala más moderada o sindicalista postulada por Ángel Pestaña y Juan Peiró que, aunque tuvieran los mismos objetivos para el futuro, creían que era interesante conseguir algún alivio a corto plazo que mejorara la mala situación de los obreros.

Los líderes anarquistas más violentos, entre los que se contaban una famosa banda llamada "Los Solidarios" se reunían en Francia. Entre estos hombres aparecieron una serie de líderes anarquistas legendarios, sobre todo Buenaventura Durruti y Francisco Ascaso. "Los Solidarios" al volver del exilio en 1931 se vincularon rápidamente a la FAI, Federación Anarquista Ibérica, fundada en 1927 y destinada a oponerse al revisionismo anarquista.

En 1931 la CNT estaba dividida por razones de doctrina, de geografía y de edad. Los obreros de las ciudades, sobre todo de Barcelona, podían considerarse sindicalistas. Los anarquistas rurales, sobre todo en Andalucía, seguían representando una idealización de su propio pueblo, cuyos habitantes cooperarían para formar un gobierno propio y autosuficiente. La mayoría de anarquistas creían que la CNT no era sólo una organización revolucionaria, sino además el esquema de una futura sociedad ideal. Era natural que recelaran de los cambios laborales y los comités de arbitraje o comités paritarios de Largo Caballero, de los que creían, tanto en tiempos de Primo de Rivera como de la República, que constituían una amenaza para su razón de ser. En realidad, muchas veces todo lo que tenían los anarquistas para mantenerse era "la Idea" de la revolución libertaria. Olvidaban que los seguidores de "la Idea" nunca eran la mayoría de la clase trabajadora.

Por último se presentaban en España los sindicatos católicos cuyos miembros eran hostiles al ateísmo y a los argumentos revolucionarios. Su principal organización era la Confederación Nacional Católica Agraria que limitaba sus actividades a Castilla y Navarra y no se dedicaban tanto a la ideología. Era evidente que en el Levante español y en Andalucía su influencia era nula debido a la poderosa influencia que allí tenía el anarquismo que se negaba a cooperar en cualquier medida de legislación social.

Contexto político de la obra

La obra de Ortega fue realizada en un contexto político en el que estaba presente la Dictadura de Primo de Rivera, que fue reconocido jefe de estado en septiembre de 1923. Debido a esto se anuló la Constitución de 1876 y todos los poderes pasaron a un Directorio militar. Primo de Rivera intentó organizar el nuevo Estado según las fórmulas que habían triunfado en Italia.

Durante su mandato aplicó una política represiva contra anarquistas y comunistas, contra los movimientos nacionalistas, catalán y vasco y contra los políticos liberales, e intentó canalizar la vida política española a través de un único partido (Unión Patriótica), que tuvo escaso éxito.

Entre sus logros hay que señalar la pacificación de Marruecos (1925) y su política de obras públicas.

Primo de Rivera presentó la dimisión el 28 de enero de 1930, y Alfonso XIII encargó al general Berenguer la formación del nuevo Gobierno, que restableció la Constitución de 1876. Sin embargo, la monarquía estaba ya desacreditada y se organizó una fuerte oposición (pacto de San Sebastián y levantamiento de la guarnición de Jaca). Al dimitir el general Berenguer, fue sustituido en febrero de 1931 por el almirante Aznar, quien convocó elecciones municipales (12 de abril), que dieron el triunfo en las grandes ciudades a la coalición de republicanos y socialistas.

Alfonso XIII, siguiendo el consejo de sus ministros y altos jefes militares y resuelto a evitar una confrontación civil, decidió abdicar, y el 14 de abril quedó proclamada la II República española.

Contexto político del autor.

Ortega debió convivir durante su vida en España con varios mandatos que se fueron sucediendo en nuestro país. Estos fueron:

  • La I República y la Restauración, cuando el nació, sobre el año 1885 sucedió la muerte de Alfonso XII, con lo que se tuvó que encargar de la regencia su esposa María Cristina(1885 - 1902), que tuvo que enfrentarse con las graves consecuencias de las pérdidas coloniales de Cuba y Filipinas. Ante este desastre, la mayor parte de la sociedad española tomó conciencia de la debilidad del país y de la necesidad de grandes transformaciones. Pero las reformas del Gobierno se redujeron a simples proyectos, mientras los problemas fundamentales del país quedaban completamente abandonados.

  • La época de Alfonso XIII (1902 - 1931) en la que tuvo lugar la I Guerra Mundial, que trajo como consecuencia el desquiciamiento de la sociedad española, que desembocó en la crisis de 1917. De 1917 a 1923 las tensiones se agudizaron. Se produjeron revueltas campesinas en Andalucía, y en Cataluña el sindicalismo obrero obtuvo grandes éxitos reivindicativos. La CNT organizó a su vez grupos armados, y el terrorismo hizo acto de presencia en Cataluña, para extenderse después a las demás regiones españolas.

  • La Dictadura de Primo de Rivera, de la cual ya hemos hablado anteriormente.

  • La II República y la Guerra Civil, durante los tres primeros años, la nueva República, presidida por Alcalá Zamora y con Azaña como jefe de Gobierno, intentó sentar las bases de un estado democrático en cuyo marco quedaran garantizadas las autonomías regionales, la separación de la Iglesia y el Estado y un amplio programa de reformas. Pero a partir de las elecciones de noviembre de 1933 los partidos de centro-derecha obtuvieron una mayoría aplastante. El viraje hacia la derecha que dio el nuevo Gobierno, con la anulación de muchas medidas de la etapa anterior, provocó las sublevaciones de Asturias y Cataluña (octubre de 1934), cuya represión vino a representar el primer acto de la guerra civil que se iniciaría el 18 de julio de 1936.

El 1 de abril de 1939 finalizó la guerra civil con la victoria de las fuerzas del Movimiento Nacional.

  • El régimen de Franco, en temas interiores fueron promulgadas una serie de leyes que desarrollaron los principios del Movimiento. En cuestiones exteriores España se enfrentó con una situación internacional sumamente desfavorable por las perspectivas bélicas en Europa. Durante la II Guerra Mundial se mantuvo neutral y únicamente fue enviado al frente ruso la División Azul de voluntarios españoles.

Al término de la II Guerra Mundial, España sufrió un aislamiento diplomático internacional y le fue negada la entrada en la ONU, situación que perduró hasta 1955 en la que España ingresó en la ONU.

Este ingreso en la ONU coincide con la muerte de José Ortega y Gasset.

2. ESTRUCTURA DE LA OBRA

2.1. Partes de la que consta

Esta obra está estructurada en las siguientes partes:

  • Prólogo: que son una serie de problemas, a partir de los cuales se irá luego profundizando a lo largo de las 184 páginas del libro.

  • Desarrollo: son las respuestas a los problemas que se plantean en el prólogo.

2.2. Análisis de las ideas centrales y complementarias

Ideas centrales

  • Filosofía, tiene varias definiciones que son:

    • Filosofía es una cierta ocupación intelectual.

    • Filosofía es un conjunto de actividades que comienzan siempre por preguntarse uno a sí mismo.

  • Vida, la vida es siempre de alguien, de un viviente. Este alguien, este viviente es sólo uno de los dos grandes y radicales componentes de la vida cuyo otro componente es la circunstancia, contorno o mundo.

  • Ente, el que es, son propiedades subjetivas de las cosas.

  • Conocimiento, tiene varias definiciones:

    • El conocimiento es, y no puede ser más que conocimiento de las cosas.

    • El conocimiento son los mecanismo de la psique humana que el hombre, quiera o no, ejercita.

    • El conocimiento es aquel hacer del hombre que empieza con hacerse una pregunta esencial del tipo: ¿qué es tal o cual cosa?.

    • El conocimiento es aquel estado mental del hombre que coincide con lo que las cosas son.

Ideas complementarias

  • Teoría: es pensar y pensar es hacerse de algo un objeto o mirarlo, por tanto colocarse fuera de él, formar de él su aspecto.

  • Yo: el que vive, aunque la palabra “yo” tiene diversas significaciones terminológicas diferentes, según el punto de vista del filósofo. En esta obra, Ortega también utiliza el sentido más vulgar de la palabra “yo”, es decir, Fulano o Fulana de Tal.

  • Absoluto: es lo que existe con independencia de toda otra cosa.

  • Ser: el ser de las cosas no es algo de las cosas solas y por sí. El ser sobreviene a las cosas cuando y porque el hombre se pregunta por él.

2.3. Análisis de las expresiones y términos más importantes

  • Fenomenología: ciencia de los fenómenos físicos o psíquicos, en su génesis y en sus manifestaciones en el tiempo y en el espacio.

  • Cogitatio: que tiene facultad para pensar

  • Entitativa: exclusivamente propio de la entidad.

  • Inmanente: que es inherente a un ser o a un conjunto de seres, y no es resultado de una acción exterior a ellos.

  • Teorética: intelectual, especulativo. Relativo al teorema

  • Skepsis: perderse en la duda.

  • Lato: dilatado

  • Toto coelo: distinto

  • Sintomático: relativo al síntoma.

  • Sensu stricto: inteligencia

  • Avizor: el que avizora. Avizorar = acechar.

  • Somática: dícese de lo que es natural o corpóreo en un ser animado.

  • Noética: Estudio o teoría del pensamiento o del conocimiento

  • Kategorein: lo que es la realidad

  • Escolasticismo: nombre que en general se le da a la filosofía escolástica.

  • Angosta: estrecho, reducido

  • Linaje: descendencia de un arte pasa común, los miembros de la cual son los que establecen los lazos de parentesco.

  • Prurito: Sensación particular que induce irresistiblemente a rascarse. Puede ser:

  • Arcano: dícese de las cosas secretas, recónditas. Secreto muy importante. Misterio, cosa oculta.

  • Locuela: modo y tono particular de hablar de cada uno.

  • Ab initio: usar facilidades

  • Homo faber: hombre

3. OPINIÓN PERSONAL

Este libro me ha resultado muy difícil de comprender, debido a la excesiva utilización de tecnicismos que apenas había oído anteriormente. A pesar de esto creo que este libro es una buena herramienta de trabajo para las personas que como yo estamos empezando a tratar el tema de la filosofía ya que este libro profundiza mucho en los principales pilares de esta materia como son: el conocimiento, la historia de la filosofía, la vida, el ser, etc.

Este libro trata los temas de una forma que a muchas personas jamás se nos hubiera ocurrido hacerlo, ya que son unas teorías muy rebuscadas intelectualmente y que para las personas de a pie nos resultan muy complejas y difíciles de comprender.

En fin, yo creo que la filosofía está hecha para personas muy bien capacitadas intelectualmente y con gran capacidad de pensamiento.

¿Qué es conocimiento?

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Enviado por:Luis Javier Gomez Martinez
Idioma: castellano
País: España

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