La publicidad en la que se utiliza como objeto a la mujer, también incita a ésta para que compre el artículo, porque creen que se van a transformar en mujeres bellas y jóvenes, como las que anuncian las cremas faciales, mostrando las mejoras al utilizar este producto. Pero debemos ver la realidad, y no caer en el engaño que nos muestra este tipo de anuncios, porque la mayoría de las veces estos productos no nos pueden cambiar nuestra apariencia actual. Esto lo suele mostrar la publicidad que anuncia, productos para la imagen exterior, como los de yogures, o las ya nombradas cremas faciales......

Muchas veces, la publicidad, nos dice que debemos cambiar nuestro aspecto exterior y nuestra forma de ser, no tener límites, y poder hacer lo que más deseemos, sin ningún tipo de impedimento.

Caemos en estas tentaciones, sin pensar lo importante que es ser tu misma, porque no podemos vivir del engaño, ya que eso no nos conduce a ninguna parte, solo te hace vivir en un mundo de fantasía, ya que en la publicidad todo parece mucho más sencillo y más gratificante, que la vida real en la que todos vivimos.

Actualmente, la discriminación no es tan llamativa, utilizan mensajes subyacentes, que no por menos obvios dejan de ser peligrosos; puede que muestren un poco menos el sentido de la utilización de la mujer, pero a la larga los resultados son los mismos. Los anuncios no son tan burdos, son más sutiles, por eso cada vez tenemos que ser más cuidadosos, sobre todo con los mensajes que te quieren mostrar, porque a veces están tan bien hechos y tan bonitos, que ni te enteras; Otros además aparentan una igualdad que es irreal.

También existe otro tipo de publicidad sexista, pero que no muestra el cuerpo como objeto sexual, sino que muestra a la mujer como la persona idónea para realizar los trabajos del hogar, y la solución para que ellas puedan disfrutar de mayor tiempo libre y tengan que realizar menos esfuerzos, son los avances que realiza el hombre con los electrodomésticos. Algo no menos preocupante es la indiscriminación, porque la mujer siempre se siente infravalorada, ya que muestra a ésta como la persona que debe realizar todos los trabajos que el hombre no desea ejecutar, y a éste siempre lo muestra como la persona inteligente que hace lo posible por avanzar, mostrando a la mujer como alguien que es menos inteligente, que prefiere limpiar antes que ayudar al hombre en el avance de la tecnología.

Aquí las mujeres se sienten heridas, porque las muestran como personas incapaces de hacer las mismas actividades que el hombre, y estos piensan que ellas únicamente sirven para ser amas de casa y poco más.

Además los hombres usan el sexo contrario como algo que debe permanecer en casa y siempre estar a disposición de ellos. Otros por el contrario no piensan de esta manera, les parece bien que utilicen el tiempo para trabajar o alguna otra cosa, sin ser necesariamente esclavas de él.

Lo que debemos hacer es unirnos y mentalizarnos todas/os de que la publicidad sexista hace mucho daño a la mujer, porque nos insulta y nos demuestra que en realidad, según ellos servimos para poco mas que la satisfacción del hombre. Luchar contra los publicistas, revelándonos y mostrando nuestro desacuerdo hacia este tipo de publicidad seria lo más conveniente, porque sabemos perfectamente que hay muchas formas de anunciar los artículos, sin insultar a la mujer.

Debemos convencernos a nosotras mismas y también a las mujeres que aparecen en ese tipo de anuncios, deben negarse a trabajar en publicidad que pueda herir los sentimientos de cualquier ser humano, especialmente la mujer, ya que es la que más casos se encuentran de este tipo.

Seguro que si todas pusieramos de nuestra parte, ésta situación cambiaría, ya que la gente se sentiría mas sensibilizada con este tema, que aparentemente es inofensivo pero que a la larga puede tener fatales consecuencias.