Política y Administración Pública


Políticas comunitarias



INTRODUCCIÓN (LAS POLÍTICAS COMUNITARIAS)

El concepto de política comunitaria común (o política común) responde a todo el conjunto de actuaciones comunitarias tendentes a regular, con mayor o menor extensión e intensidad, un ámbito material. Según esta amplia interpretación, cualquier materia sobre la que existiese normativa comunitaria, tendría las características de política común. Así podríamos hablar de Política Agrícola Común, Política Industrial Común, Política Energética Común, o Política Común de protección a los Consumidores.

En un plano más estricto, podríamos calificar de política común sólo a aquellos conjuntos de acciones que se hallan denominados expresamente así en los propios textos comunitarios. De esta manera serían políticas comunes en sentido estricto la Política Agrícola, la de Transportes y la Comercial, recogidas con tal consideración en el Tratado constitutivo de la CEE.

Existen otras políticas que han sido posteriormente incorporadas a los Tratados, como la Política de medio ambiente lo fue en el Acta Única Europea.

Estas políticas comunes se caracterizan por pretender una ordenación común completa de un ámbito no tanto material como funcional. Para ello, además de establecerse unas reglas mínimas en los Tratados, se atribuye a las Instituciones comunitarias unos poderes muy amplios para desarrollar sus previsiones.

Vamos a analizar en este trabajo una de las políticas con mas relevancia en la Comunidad, y en espacial en nuestro país, la Política Agrícola

No obstante existen unas políticas sectoriales comunitarias que han cobrado una especial relevancia tras la aprobación del Acta Única Europea, como la de investigación y desarrollo, política regional, política de salud pública, de protección a los consumidores, política energética, etc

POLITICA AGRICOLA COMUN:

La Política Agrícola Común (PAC) fue instaurada en 1962 para responder en aquel momento a las preocupaciones más urgentes de una Comunidad que apenas producía el 80% de su consumo total (frente al 120% actual). Su objetivo era desarrollar la producción para reducir la dependencia alimentaria y compensar las importaciones a las que Europa debía recurrir en otros ámbitos como energía, materias primas, etc

Ya el Tratado de Roma prevé en su artículo 3-d) la instauración de una política común en el sector de la agricultura como medio para conseguir uno de los objetivos primordiales de la Comunidad establecidos en el artículo 2. Este Tratado de Roma dedica a esta política los artículos 38 a 47.

Hoy en día la PAC es la principal política común de la Unión Europea, tanto a nivel financiero ( supone un 60% del presupuesto comunitario ) como a nivel jurídico (80% de las normas que se dictan son de carácter agroalimentario ).

a). Objetivos, principios e instrumentos de la PAC.

Los cinco objetivos fundamentales de la PAC se establecen en el artículo 39 del ya citado Tratado de Roma y son:


  • Aumentar la productividad agraria.

  • Garantizar el abastecimiento alimentario.

  • Asegurar una renta equilibrada a los agricultores.

  • Estabilizar los mercados agrarios.

  • Asegurar el suministro a los consumidores a precios razonables.

Estas finalidades se pueden agrupar en tres categorías:


De carácter social, tendentes a garantizar un nivel de vida equitativo a los agricultores, así como suministros a precios razonables para los consumidores.

De carácter económico como el incremento de la productividad agrícola o la estabilidad de los mercados;

De carácter político, que persiguen garantizar la seguridad de los abastecimientos.

La PAC se basa en tres principios fundamentales:


Unidad de mercado. Supone la creación y mantenimiento de un mercado único agrario, con la libre circulación de productos agrarios dentro de la Comunidad y con la supresión total de los derechos aduaneros. Esto permitió aplicar unos precios de garantía comunes.

Preferencia comunitaria. Los productos agrarios de la Comunidad serán más baratos que los mismos productos importados de terceros países. Para ello se establecen una serie de aranceles, exenciones y controles en las fronteras que encarecen los productos importados. Se pretende que a igual calidad entre productos se dé preferencia a los productos comunitarios.

Solidaridad financiera. Los gastos de la PAC se financian a través del presupuesto comunitario y concretamente a través del Fondo Europeo de Orientación y Garantía Agraria ( FEOGA ).

La PAC, a partir de estos tres principios básicos, se instrumenta en dos grandes ejes:


La política de regulación de los mercados agrarios a partir de las llamadas Organizaciones Comunes de Mercado (OCM), financiada por la sección de Garantía del FEOGA,


La política de estructuras agrarias, financiada por la sección Orientación del FEOGA.

b). Las Organizaciones Comunes de Mercado.

Cada uno de los principales productos agrarios tiene una OCM, que son un conjunto de normas que regulan la intervención en los mercados agrarios y las ayudas de cada producto. Estas normas varían permanentemente en función de la evolución de los mercados y son comunes para todos los Estados miembros.

En la actualidad, las OCM cubren el 95% de la producción agraria comunitaria, quedando excluidos únicamente dos productos de importancia: la patata y el alcohol agrícola. Establece los productos que forman parte de ella y las fechas de inicio y fin de la campaña de comercialización.

Las OCM se componen de los siguientes apartados:



Régimen de precios. Para cada OCM se establecen unos precios institucionales, siendo el más importante el precio de garantía, de compra o de intervención. Estos precios se establecen anualmente y son iguales en todos los países de la Unión Europea para garantizar su libre circulación. Estos precios se fijan en moneda comunitaria y luego se transforman en moneda nacional de cada Estado miembro.

Instrumentos internos para regular el mercado. A partir de una definición precisa técnica y comercial de cada producto y de su seguimiento a través de los mercados representativos, se conoce la evolución de cada producto y se pueden establecer los mecanismos de intervención en caso de hundimiento de precios: compras directas para la intervención, ayudas al almacenamiento y subvenciones para la exportación (restituciones).

Régimen de ayudas. Pueden ser ayudas directas a la renta, ayudas a la transformación, ayudas al consumo, etc., en función del sector de que se trate.

Régimen de intercambios con países terceros. Se trata de garantizar para cada sector el principio de preferencia comunitaria que en todo caso vienen condicionados por los acuerdos preferenciales y por los acuerdos del GATT. Se establecen, según el sector una serie de mecanismos de control para las importaciones: exacciones reguladoras derechos de aduanas, precios mínimos de entrada, etc.. Para fomentar las exportaciones se establecen los mecanismos para las restituciones a la exportación.

Dentro de las OCM podemos distinguir tres tipos principales de organización:

Organización de precios comunes es el sistema más completo, cuya regulación se refiere al sistema de precios, mecanismos de intervención, comercio exterior etc..En la actualidad cubre el 70% de los productos, entre ellos cereales, azúcar, productos lácteos, carne bovina y ovina, algunas frutas y hortalizas, vinos de mesa, etc

Organización basada en la protección exterior: abarca alrededor del 25% de las producciones, siendo las principales los vinos de calidad, las restantes frutas y hortalizas, flores, huevos y aves, etc..

Organización basada en un sistema de ayudas complementarias: están reservadas a productos para los que la Comunidad es deficitaria, permitiendo así mantener un precio relativamente bajo al consumo, garantizando una cierta renta a los productores. Esta modalidad es aplicada al 10% de la producción destacando el trigo duro, aceite de oliva, tabaco, etc

c). La financiación de la PAC. EL FEOGA.

Como ya hemos mencionado, la solidaridad financiera es uno de los principios básicos de la PAC, por el que los gastos ocasionados por las medidas adoptadas en esta política serán sufragados conjuntamente por todos los Estados miembros a través del presupuesto comunitario. Así el Tratado de Roma prevé en su artículo 40-4, como instrumento de financiación la creación de uno o varios fondos de orientación o de garantía agrícola.

La Comunidad creó, en 1962, un único fondo que bajo el nombre de “Fondo Europeo de Orientación y Garantía Agrícola” (FEOGA),diseña las grandes líneas de financiación. Posteriormente, en 1964 se produce la división del Fondo en dos secciones:


Sección Garantía, relativa a los mercados agrícolas.


Sección Orientación, relativa a las estructuras agrarias.

A partir de 1971,el FEOGA pasó a regirse por el Reglamento 729/1970, de 21 de abril.

La Sección- Garantía financiará las restituciones a la exportación, las distintas medidas de intervención en los mercados agrarios, ayudas directas a la renta y las medidas complementarias de jubilación anticipada ,medio ambiente y forestación a raíz de la reforma de la PAC de 1992. La sección de Garantía es la de mayor volumen y representa más del 90% del total del presupuesto del FEOGA. Este presupuesto ha aumentado mucho en los últimos años , siendo una de las razones que provocaron la reciente reforma de la PAC. Las actuaciones que financia el FEOGA-Garantía son, en la mayoría de los casos al 100% comunitarias.

En el conjunto de la Comunidad, los capítulos más importantes del FEOGA-Garantía son por orden de importancia: cultivos herbáceos (el 41%), carne de vacuno (el 13,2%), leche y derivados (el 10,2%), azúcar (el 4,7%), aceite de oliva (el 4,3%), frutas y hortalizas (el 4,2%),ovino y caprino (el 3,3%), etc..

La Sección-Orientación se concibió como instrumento de política estructural, para lo cual financiará las acciones comunes tendentes a modificar las estructuras agrarias en la forma necesaria para el buen funcionamiento del Mercado Unico, sin que esas acciones sustituyan a las actividades realizadas por el Banco Europeo de Inversiones ni por el Fondo Social Europeo. Las actuaciones de la Sección-Orientación suelen estar cofinanciadas por el Estado miembro al que se dirige.

Por último hay que destacar que a pesar de la importancia del presupuesto del FEOGA, éste representa el 54% del total del presupuesto comunitario.

d). La reforma de la PAC.

A lo largo de su existencia, la PAC ha atravesado diferentes etapas en su evolución. La agricultura europea ha evolucionado más en los últimos cincuenta años que en los dos milenios anteriores. No obstante, a estos progresos innegables se corresponden nuevos problemas. Muchos surgieron tras la crisis económica de los años setenta y se vieron agravados por la propia regulación comunitaria de carácter muy proteccionista frente al exterior y a las excesivas garantías brindadas a los agricultores comunitarios.

También los onerosos excedentes crónicos han disparado las críticas así como una disparidad cada vez más marcada entre la producción y las preferencias del consumidor. El aumento de la oferta, la disminución de la demanda y el coste de las existencias obligaron a la Comunidad a aumentar sus exportaciones, lo que condujo a una guerra comercial con precios artificialmente reducidos, mercados más especulativos y tensión entre los exportadores mundiales. Por último la intensificación creciente de la producción multiplicó los problemas de medio ambiente, de calidad de las aguas y del suelo, de protección de la fauna y de la flora, etc..

En este difícil contexto, la reforma de la PAC de 1992 tuvo por objeto armonizar la oferta y la demanda, mediante la reducción de la producción, la conservación del medio ambiente y la utilización más racional de la tierra, con el objetivo de reducir los precios.

La reforma de la PAC, aprobada el 21 de mayo de 1992 por el Consejo de Ministros de Agricultura, se centraba en un cambio para mantener los ingresos de los agricultores, concediéndoles ayudas directas a la renta, en vez de mantener los precios de los productos agrarios por encima de los del mercado mundial.

En cuanto a la Sección-Garantía, en los últimos años sus gastos no han disminuido en valores reales, pero sí ha disminuido su parte relativa en el presupuesto europeo, pasando de un 64% en 1988 a un 50% en 1996.

Por lo que se refiere a las acciones estructurales llevadas a cabo por la Sección Orientación del FEOGA se han multiplicado en los últimos años, contribuyendo a mejorar las estructuras y las condiciones de producción, transformación y comercialización de los productos.

La reforma de la PAC trajo una reducción de los precios institucionales que se realizó de forma progresiva a lo largo de diversas campañas y que ha tenido en cuenta las siguientes condiciones:


  • La reducción de precios no debía desincentivar la producción, ni impedir la mejora técnica de las explotaciones.

  • No debían olvidarse los objetivos prioritarios de la PAC desde sus inicios: preferencia comunitaria, solidaridad financiera y unidad de mercado.

  • Las medidas de acompañamiento de la reforma, deberían permitir un desarrollo rural equilibrado, estimular la incorporación de jóvenes a la actividad agraria, y proteger y mejorar el medio ambiente.

El desarrollo de la reforma de la PAC estará basado en una serie de orientaciones:

  • Atención a la calidad más que a la cantidad.

  • Control de la producción en sectores excedentarios. A partir de unos límites de producción los productores no podrán beneficiarse de los mecanismos de apoyo y ayudas.

  • Apoyo directo al agricultor mediante pagos compensatorios.

  • Apoyo a la industria de transformación.

  • Atención especial a la protección del medio ambiente.

  • Mantener una posición competitiva de la agricultura comunitaria en los mercados internacionales.

El periodo de transición de la reforma de la PAC finalizó en julio de 1995 y se caracterizó por una disminución de la tasa de retirada de tierras, resultante de la entrada en vigor, en ese mismo mes, de los nuevos acuerdos del GATT sobre el comercio internacional, por la adhesión a la Unión Europea de tres nuevos Estados miembros y el acercamiento de la Europa del Este.

Las perspectivas de la PAC para los próximos años se dirigen al aumento de la importancia de los criterios medioambientales y de calidad, aumento de las ayudas a los jóvenes agricultores, y apoyo a la agricultura menos intensiva.

Las posibles ampliaciones de la Unión hacia la Europa del Este acentúan la necesidad de afrontar esos desafíos y acelerar la adaptación de la agricultura a las nuevas exigencias de una sociedad cada vez más preocupada por la salud de los consumidores y la calidad del medio ambiente La rápida adaptación de los agricultores europeos a las reformas de la PAC y al nuevo GATT, pone de manifiesto que la agricultura de los Quince es capaz de responder a cambios a veces radicales y de sacar el mejor partido de ellos.




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Enviado por:Guillermo Valdés
Idioma: castellano
País: España

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