Percepción de letras aisladas.

La percepción de letras está vinculada al procesamiento del lenguaje. En dicha percepción intervienen propiedades visuales del

estímulo, como la luminosidad, el tamaño o la forma global.

El proceso de percepción y reconocimiento de letras está fundamentado en el análisis de los segmentos que componen los estímulos.

Selfridge identificó los procesadores de información de cada etapa como demonios, describiendo varios tipos.

El demonio que trabaja en la primera etapa del proceso es el demonio de la imagen, encargado de detectar la imagen presentada y transmitirla a los demonios de la segunda etapa, los de las características, que son los detectores de segmentos, y cada uno de ellos se ocupa de detectar una determinada característica. Cuando la detectan, pasan esta información al siguiente nivel, los demonios cognitivos, que identifican las letras que tienen en su estructura el grupo de segmentos detectados por los demonios del nivel precedente. La información sobre las letras identificadas es transmitida al nivel superior, donde el demonio de la decisión, utiliza esta información para decidir a qué letra corresponde el patrón percibido.

El Modelo de Acción Interactiva de McClelland y Rumelhart o el modelo de Activación y Verificación de Paap, Newsome, McDonald y Schvanevelt, han reemplazado a los demonios cognitivos de Seldfridge por verdaderos detectores de letras.

Esta nueva descripción propone la interacción de dos tipos de códigos en el reconocimiento de letras: por una parte, el análisis de sus segmentos, y por otra, el código nominal de cada letra, que relacionan una determinada combinación de características con el nombre de la letra, y posiblemente con su representación fonológica.

El objetivo de esta práctica es el de verificar esta confluencia de distintos códigos mediante la adaptación de un experimento de Jacobs y Grainger, estudiando la influencia de estos en el reconocimiento de letras aisladas.

Para estudiar estos dos factores se utilizará el paradigma de la facilitación enmascarada. Las condiciones experimentales son las siguientes:

Finalmente, se incluirá una condición en la cual los estímulos target son caracteres no alfabéticos, precedidos por caracteres no alfabéticos.

La hipótesis es que los códigos nominal y formal actúan de forma independiente, y con efectos aditivos sobre la percepción de letras.

Según esta hipótesis, el tiempo de reacción de las condiciones 1 y 2 será más breve que el de la 3, puesto que en 1 y 2, la información de los dos códigos en el prime y el target coincide. En la condición 3, el prime sólo aporta información nominal, por lo que el tiempo de respuesta es más largo. En la condición 4, el tiempo de respuesta es aún más largo, porque el prime no aporta ninguna información sobre el target.

El programa se basa en nuestra discriminación dicotómica en tiempo real sobre los caracteres que van apareciendo uno a uno en la pantalla, para obtener los tiempos de respuesta en cada una de las cinco condiciones detalladas anteriormente.

Resultados obtenidos:

Concluyendo, podemos observar que el tiempo de respuesta de la condición 3 es mayor que los anteriores, y el de la 4 es a su vez aún mayor.

A pesar de su vinculación con el procesamiento del lenguaje y naturaleza de percepción visual, las propiedades visuales del estímulo, en algún momento capaces de alterar la respuesta, no se han visto reflejadas en la realización de la práctica, debido a que la orientación de los segmentos es una propiedad que ha sido considerada más importante, ya que nuestro sistema visual está preparado para detectar líneas en distintas orientaciones, aunque como hemos comprobado en el experimento, los detectores de letras son otro factor importante a la hora de identificar los caracteres, como se afirma en el Modelo de Acción Interactiva de McClelland y Rumelhart o el modelo de Activación y Verificación de Paap, Newsome, McDonald y Schvanevelt.

El tiempo transcurrido entre la presentación del estímulo y la respuesta del sujeto varía en función de factores que favorecen o entorpecen el procesamiento del estímulo, y por lo tanto, es una buena medida para evaluar cómo determinadas variables (como el estímulo facilitador) afectan a este procesamiento.

Percepción

de letras aisladas.

Práctica 5.