Literatura
Once minutos; Paulo Coelho
Existe un nuevo cronometro para el sexo:
Once Minutos
Las siguientes paginas están orientadas al casi meticuloso análisis de la novela “Once Minutos” del llamado “Alquimista de la Palabra”: Paulo Coelho, aun consciente de mis propias limitaciones pretendo analizar su obra y presentar la naturaleza sagrada del sexo y del amor que con gran sensibilidad nos muestra el autor, invitándonos a enfrentar nuestros propios prejuicios y demonios, porque así es mejor: Sexo y Amor juntos de la mano.
Coelho, considerado por muchos como el peso pesado de la literatura fast food, esta vez nos entrega Once minutos, novela que está a la altura del mito, conteniendo toda esa salsa que Coelho prepara muy bien: hay un poco de filosofía antigua (Platón) por acá, un poco de literatura pop (las enseñanzas de El principito) por allá, lo suficiente del perverso Marqués de Sade con el sadomasoquismo implicado, incluso algo del historiador griego Heródoto y el siempre presente aire de “esto lo podría haber pensado yo”. Podríamos decir que estos son motivos más que suficientes para llevar de vuelta al podio al imbatible prócer carioca identificado con la espiritualidad y la autoayuda, esta vez a ha dado un giro significativo al sexo en esta novela.
"Realizo un abordaje del sexo a partir de mi propia visión", asegura el novelista brasileño.
Podemos aseverar que Coelho no teme que el tema pueda espantar a sus lectores más fieles o a los conservadores, sabemos con anterioridad que el ya había tratado acerca del sexo en "Brida" y en "Verónica decide morir", pero en ellas el abordaje del tema fue más espiritual que carnal.
Ahora bien:
Once Minutos es el titulo de esta novela. En un primer momento podríamos decir que estas palabras no nos otorgan pistas claras acerca del contenido de la obra .pero este aspecto ha sido muy bien sintetizado por Coelho y esta inspirado en la novela Los siete minutos, de Irving Wallace, publicada en los años 70. Este antiguo best-seller trata de una larga batalla legal a propósito de la prohibición de un libro que describe minuciosamente los siete minutos de duración de una relación sexual. Como tal obra jamás existió, Paulo Coelho imaginaba cuál sería su contenido, hasta que se decidió a escribirlo. La idea fue abandonada, pero quedó como inspiración del título (cambiado a Once Minutos por considerar el escritor que la estimación de Wallace era demasiado conservadora), y como el intento de hablar de la asociación y disociación de los placeres del cuerpo y el alma.
Después de abordada esta información lo que llegamos a apreciar es que el titulo de la novela “Once minutos" -proviene de el tiempo que según los cálculos del escritor brasileño Paulo Coelho dura un contacto sexual habitual- y representa una obra que está centrada en la historia de una joven prostituta que intenta recomponer la relación entre su cuerpo y su alma.
Coelho dice que no ha querido escribir "un libro teórico sobre el sexo, sino describir las emociones y los sentimientos que se apoderan de los personajes cuando el amor nace en sus corazones".
La sexualidad ha perdido perspectiva paradójicamente cuando tanto y tanto se ha dicho sobre ella. Cuanta más normativa, cuantos más manuales de cómo hacer feliz en la cama a un hombre o a una mujer, más lejos de la propia sexualidad, más lejos del propio instinto espontáneo.
Y en Once minutos queda flotando la idea de que, más allá de la individualidad del emprendimiento, lo importante es la convicción de seguir tu propia voz.
El lado positivo de Once minutos es el abandono del imaginario soñador y evanescente propio del clásico Coelho, dándole un protagonismo a personajes de carne y hueso.
Lo que sabemos es que es que el novelista dice que además de las experiencias de la mujer, una prostituta que conoció en Ginebra cuando concedía autógrafos en una librería y que en pocos días le contó toda su vida, la novela incluye sus propias experiencias. El brasileño alega que necesitó 55 años y un mes para escribir la nueva obra: "55 años de experiencias y un mes para colocarlas en el papel".
Al escribir esta novela Coelho reconoce que, pese a que quiso mantener la tónica de toda su obra y referirse a la espiritualidad a través del sexo, no pudo trabajar con algo tan abstracto. "Preferí localizarlo en un contexto más duro y real", nos dice. "Durante toda la vida vi el sexo de formas muy diferentes y contradictorias. Para intentar comprender mi propio recorrido, soñaba con un libro al respecto", aseguró.
Pero “Once minutos” no es solamente lectura. A lo largo del libro se descubre y se aprende a reflexionar sobre la sexualidad inserta en la misma historia; esa palabra que, en palabras del autor, significa “tener el coraje de vivir las propias paradojas, la propia individualidad y la propia voluntad de entrega”.
Así, lejos de pretender que `Once minutos' sea un análisis de las relaciones sexuales, el propósito del autor es reflejar en su último trabajo, su propia reflexión sobre la sexualidad y su papel en la vida.
Nuestra sexualidad en estos tiempos está en crisis, aunque los indicadores externos gozan de buena salud. Nuestra protagonista da muestra de ello: Algo iba muy mal en la civilización; y este algo no era la deforestación amazónica, ni la capa de ozono, ni la muerte de los pandas, ni los alimentos cancerigenos, ni la situación de las cárceles como gritaban los periódicos. Era exactamente en lo que ella trabajaba: el sexo. Libros, manuales, vídeos, debates televisivos hablan de sexo, sin embargo nadie se proyecta al conocimiento espiritual de las almas.
Vivir la sexualidad es claramente tocar el núcleo de lo que uno es, las técnicas son lo de menos, los rituales se crean con la imaginación y con la misma imaginación se trascienden, pero sin amor, sin amor el sexo pierde su esencia y se transforma en una acto mecánico, y se reduce a sexo por placer.
Coelho escribe con el estilo característico del boom de la literatura latinoamericana, esta ocasión utiliza una focalización cero a través de su narración ya que nos entrega a manos llenas la información con los por menores de las vivencias de los personajes.
Once minutos es una novela que habla del amor, esa palabra tan gastada cuya esencia es maltratada cotidianamente por las acciones humanas. Es un libro que explora la naturaleza del sexo y del amor, la intensa y difícil relación entre cuerpo y alma, y como alcanzar la perfecta unión entre ambos. Once minutos ofrece al lector una experiencia inigualable de lectura y reflexión.
Identificando al narrador al novela podemos afirmar que se trata de un narrador heterodiegético u omnisciente en tercera persona del singular que nos presenta situaciones cotidianas de todos los personajes y otras un tanto intimas de Maria, la protagonista, lo cual se deja evidenciar desde el primer párrafo: “ Erase una vez una prostituta llamada Maria...”
Paralelamente a la narración esta el diario de Maria en donde el narrador hace un radical cambio a de papeles tornándose homodiegético, un narrador - protagonista, aquí la joven anota conclusiones sacadas de su adversa peregrinación lo cual se demuestra a través del siguiente extracto: “Mi objetivo es comprender el amor. Sé que estaba viva cuando amé y se que todo lo que tengo ahora, por más interesante que pueda ser no me entusiasma...”
La obra está llena además de descripciones de los encuentros sexuales entre la joven y sus clientes. Descripciones que fueron sacadas de manuscritos de una prostituta y sus compañeras a las que el propio autor conoció cuando le llegaron sus historias.
Introduciéndonos de lleno a la novela encontramos a los personajes en un orden muy bien delineado.
Tenemos en primer lugar a:
Maria.- Nuestra protagonista, podemos describirla como una bella brasileña que vive en un pequeño pueblo del interior, el nordeste de Brasil para ser más específicos. Desde sus primeros escarceos amorosos de la adolescencia se siente desengañada y, poco a poco, se va armando de una coraza que le impida sufrir.
Podría casarse fácilmente, pero no quiere hacerlo sin antes hacer realidad su sueño de viajar a Río de Janeiro; ahorra durante dos años y parte hacia la gran ciudad. Allí capta la atención de un empresario suizo quien, con promesas de fama, acaba llevándola a un club nocturno de Ginebra.
Así es cómo María se convierte en prostituta y, como tantas otras mujeres con trayectorias semejantes a la suya, se aleja cada vez más de la idea de la felicidad.
La vida de María se verá resumida a la búsqueda del amor, del sexo, a la prostitución y al dinero. El aprendizaje que extraerá de sus duras experiencias modificará para siempre su actitud ante sí misma y ante la vida.
El libro describe las experiencias y los pensamientos de María, que sale cada noche con tres hombres, cediéndoles 11 minutos de su vida —tiempo exacto según los cálculos del autor para una relación en la que el hombre alcanza el placer y la mujer no—, sin quebrarse del todo emocional y psicológicamente, aunque se siente incómoda por su falta de pasión y tornarse una persona calculadora.
El personaje, según Coelho existe en la vida real, es una muchacha de 21 años (tenía unos 30 cuando él la conoció), con escasa preparación intelectual, sale de su pueblecito en el interior de Brasil hacia Río con ideas de éxito y allí conoce a un suizo que la hace firmar un contrato, que no lee, y éste se la lleva a trabajar a Suiza en condiciones casi de esclavitud. Para liberarse de esa situación, opta por la prostitución.
Según el autor María sigue la misma lógica que el pastor del Alquimista "Ha comprendido que los obstáculos no deben desanimarnos, pues están ahí para ayudarnos a ir más lejos en persecución de nuestro sueño".
María madurará enseguida y comenzará a olvidar esos sueños de amor que invadían su adolescencia. Su pensamiento se basará entonces en conseguir el máximo dinero a través de su cuerpo y se verá obligada a elegir entre el camino del sexo por el sexo o arriesgarlo todo para descubrir la posibilidad del sexo con amor.
Porque, pese a la historia triste que en el libro se plantea, siempre hay atisbos positivos de la vida. El relato nos anima a enfrentarnos, al igual que la protagonista, a nuestros propios perjuicios.
En esta odisea personal Maria conoce el amor verdadero, lo que es destacable en el libro es la forma en como acompañamos a Maria durante una segura evolución, lo cual se refleja claramente a través de los siguientes párrafos, hagamos la comparación:
Esta es Maria a inicios del relato:
“Aunque mi objetivo sea comprender el amor, y aunque sufra por culpa de las personas a las que entregue mi corazón, veo que aquellas que tocaron mi alma no consiguieron despertar mi cuerpo, y aquellos que no tocaron mi cuerpo no consiguieron llegar a mi alma.”
Y esta es Maria a finales de la novela:
“Y me fui, con él. Y no fueron once minutos, sino una eternidad, era como si los dos hubiésemos salido del cuerpo y caminásemos, en profunda alegría, comprensión y amistad por los jardines del paraíso. Yo era una mujer y hombre. El era hombre y mujer. No se cuento tiempo duro, pero todo parecía estar en silencio, en oración, como si el universo y la vida hubiesen dejado de existir, y se hubiesen transformado en algo sagrado, sin nombre, sin tiempo.”
Por otro lado tenemos un importante personaje que es preciso remarcar dentro de la obra seria:
Ralf Hart, nuestro personaje es un pintor de las grandes esferas sociales
de Suiza, en la novela encarna el amor puro y verdadero que Maria desconoce y del cual ha estado en búsqueda constante en el transcurso del libro. La descripción de este personaje es de vital importancia para el análisis de este ensayo ya que se constituye como catalizador de la situación de decadencia espiritual de la joven que ha encontrado en la prostitución, una profesión que la evade del mundo y sus propios sentimientos.
La función de Ralf Hart suaviza y equilibra los aspectos duros de la novela, pues este personaje es amor, tolerancia, exploración del alma y del cuerpo. Hart rescata a Maria del infierno de la humillación en el que se encontraba adoptando el papel de príncipe azul en este cuento de hadas de la prostitución. Existe entre ambos un nexo que los une y es la búsqueda del amor encarnado en el sexo, una situación tan manoseada entre ellos dos, situación que al fin encuentra puerto en la exploración, podemos decir que Ralf es un hombre inteligente, cosmopolita, que sabe lo que quiere y lo que busca en la vida pero en otros aspectos se enamora entregando el todo por el todo, es preciso anotar que las escenas que vive con Maria son mas que encuentros sexuales: milagrosas uniones del alma, se percibe a sensibilidad del lector ese clímax extraordinario de pasión y amor, desde el momento en que conoce a la protagonista Ralf descubre la “luz interior ” de la vida que ella tiene y en esa forma tan especial de encontrar la belleza del alma que captura con su romanticismo, se trata de ver mas allá en una evidente critica a la sociedad actual que vanagloria el físico de las personas, olvidándose que no solo somos cáscara sino esencia.
-
Por favor, no hables - dijo el hombre-. Estoy viendo tu luz.
Nunca nadie le había dicho eso. “ Estoy viendo tus senos duros”, “ estoy viendo tus senos bien torneados ” , “ estoy viendo esa belleza exótica de los trópicos , o, como mucho, “ estoy viendo que quieres salir de esta vida , ¿ Por qué no me das una oportunidad y arriendo un departamento para ti?”, Estos eran los comentarios que estaba acostumbrada a oír pero...¿ tu luz? Acaso se refería al aterdecer”.
-
Tu luz personal-completo el, dándose cuenta de que ella no había entendido nada.
Coelho confiesa que este personaje es un álter ego suyo, el extremo de que coloco en él muchas de sus percepciones y sentimientos. Y es como él se da a conocer en esta atmósfera de romanticismo entre mezclado con las mas cruda realidad.
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“Podría haberme acercado, pero soy romántico, incurable romántico , y creí que seria mejor tomar el primer puente aéreo para Paris, pasear un poco por el aeropuerto, esperar tres horas , consultar un sinfín de veces el horario de los vuelos, comprar tus flores, decir la frase que dice Rick a su amada en Casablanca, e imaginar tu cara de sorpresa”
Personajes Secundarios.-
La Madre de Maria.- Es costurera y en una rápida vista podemos notar que no
esta conforme con el destino que eligió vivir, podemos describirla como el tipo de persona de persona que soñó muchas cosas pero termino convertida en ama de casa a merced de los pocos recursos que disponía, también podemos ver que la madre de Maria es del tipo de persona materialista, que con la excusa de querer el “ bien” para su hija la manda sin preguntar, ni titubear a buscar trabajo en el extranjero para ver si se encuentra un “ buen partido” y los saca de una vez de la pobreza.
También excusa sus actitudes diciendo para si misma que desea que su hija tenga un futuro distinto al suyo.
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“Querida, es mejor ser infeliz con un hombre rico que ser feliz con un hombre pobre, y allí tienes muchas mas posibilidades de ser una rica infeliz. Además, si no sale bien, tomas un autobús y vuelves para casa.”
El Padre de Maria.- A penas si hace aparición en la novela, lo poco que sabemos de el es que se trata de un vendedor ambulante, que sorprendió a Maria masturbándose durante su adolescencia y le profirió una severa paliza para que no vuelva a hacer cosas prohibidas según aseveraban. Es un ausente participe de la evolución de Maria de niña a adolescente y de adolescente a mujer. En sus esporádicas apariciones podemos concluir que se trata de un hombre de poco carácter que se halla bajo la sombra de su esposa y que hace lo que ella dice. Este párrafo lo demuestra:
El padre comento con Maria:
-Pero si tiene mi edad.
La madre le pidió que no interfiriese en la felicidad de su hija.
Mailson.- Lo conocemos como una clase de agente/interprete/representante, es el quien actúa como nexo entre un empresario extranjero llamado Roger y Maria, podemos decir que mediante el nuestra protagonista cae en la trampa de la promesa de trabajo decente en el extranjero con grandes divisas y lo único que termina siendo es una bailarina de cabaret con un sueldo tan paupérrimo que no le hace abasto ni para retornar a su país, es en esta situación que se transforma en prostituta.
Mailson solo cumple con las ordenes de su jefe quien esporádicamente hacia viajes al Brasil para reclutar muchachas para sus fines, podríamos describirlo como un hombre que esta del todo inserto en este negocio y que incluso sabe que táctica usar para hacer caer a la muchacha, el uso de discursos trillados que repite constantemente para llevar a cabo su farsa, algo que actualmente es bastante cotidiano.
-“Si yo fuera tu, aceptaría. Este hombre es un importante empresario artístico, y ha venido a descubrir nuevos talentos para trabajar en Europa. Si quieres, puedo presentarte a otras personas que aceptaron la invitación, se hicieron ricas, y hoy están casadas y con hijos que no tienen que sufrir asaltos ni problemas de desempleo.”
Milan.- Es el propietario del bar-discoteque “ Copacabana” de la “Rue de Verne”, podríamos definir a este hombre como un proxeneta que trata con el comercio carnal, trata a las mujeres como verdadera mercancía que le genera divisas, es un hombre muy estricto con el “ trabajo” y establece reglas puntuales acerca de la transacción o prestación de cuerpos, el Copacabana es un lugar exclusivo y para evitar las sospechas de la policía se reviste a modo de una simple discoteca pero todos los clientes saben que pueden encontrar, el procedimiento es claro el cliente debía invitar un trago a la muchacha y esta escogería el mas caro de la lista, luego bailar , volver a la mesa e ir al hotel, el precio habitual el de trescientos cincuenta francos de los cuales cincuenta eran propiedad de él.
- “He olvidado algo: el tiempo desde que pides la bebida hasta el momento de salir no debe sobrepasar de ninguna manera los cuarenta y cinco minutos, y en Suiza con relojes por todos lados, hasta los yugoslavos y los brasileños aprenden a respetar nuestro horario. Recuerda yo alimento a mis hijos con tu comisión.”
Ese era el negocio, y Milan que además era casado era el experto, pero con la poca experiencia de Maria en la ciudad, el hecho de encontrarse sola en un país diferente y sin amigos la hace acercarse a el como alguien cercano en quien confiar al margen del comercio.
Nyah, la filipina.-Es una compañera de trabajo de Maria, de las pocas sociables, pues mas que un negocio es una competencia, quien tiene mas clientes, quien gana mas dinero y hay clientes que son fijos para algunas por lo que esta prohibido salir con algunos.
Nyah aconseja a Maria desde el momento de su llegada, le hace alcances como los anteriormente mencionados y podría decirse que es una compañera muy cercana que podría ser como casi una amiga ya que Maria no tenia conocía a nadie en ese lugar y menos en Suiza, es con ella con quien conversa antes del trabajo en un intento de hacer su vida menos amarga.
La Bibliotecaria Heidi.- Es una mujer sensible y dulce pero normalmente seria, única amiga de Maria en Suiza, aunque ella no lo supiera, una persona con una enorme energía pese a ser una mujer adulta y casada. Heidi desconoce la profesión de Maria, ya que nuestra protagonista se muestra en un modo diferente ante ella, por una parte esta el hecho de que Maria es un afán de distracción va a la biblioteca antes de entrar al mundo de la prostitución y al verse involucrada no piensa decírselo, frecuenta la biblioteca para buscar información acerca de administración de haciendas, ya que su sueño es tener una propia, es en ese ínterin que se hace amiga de Heidi, siempre tenían conversaciones largas que le hacían perder la noción del tiempo y la hacían escapar un poco del sórdido mundo que vivía, Maria siempre olvidaba las profesiones que le decía a Heidi pero prefería eso a contarle que era una prostituta. Aconseja bien a Maria en todo momento y fomenta en ella el hábito constante de la lectura y el conocimiento.
-
Hija Mía, eres joven, tienes toda la vida por delante. Lee. Olvida lo que te hallan dicho sobre los libros y lee.
Heidi es una mujer un tanto reservada, con un matrimonio sólido y muy moralista pero casi al final de la novela nos sorprende hablando de sexo y no solo eso si no que destapa su lado oculto y narra una de sus aventuras con otro hombre. Bueno esto confirma una vez más que nunca se llega a conocer por completo a las personas.
Recursos Retóricos.-
A continuación entregare algunas las figuras literarias presentes en la obra de Paulo Coelho:
Gradación:
“Cuando practicas el sexo, es por abundancia, porque el vaso de vino esta lleno que desborda naturalmente, porque es absolutamente inevitable, porque acepta la llamada de la vida, porque solo en ese momento, solo en ese momento, consigue perder el control.”
Metáfora:
Maria haciendo referencia a lo que estaba empezando a sentir por Ralf Hart y su miedo a invadir su libertad:
“Un animal hecho para volar libre e independiente para alegrar a quien lo observase. Un día una mujer lo vio y se enamoro de él.”...Y la mujer tuvo miedo. Miedo de no volver a sentir nunca más aquello con otro pájaro. Y sintió envidia, envidia de la capacidad de volar del pájaro.
Personificación:
“Yo no soy un cuerpo que tiene alma, soy un alma que tiene una parte visible llamada cuerpo.”
Símil
“(...) llego a la conclusión de que el sexo ha sido utilizado como droga, para huir de la realidad, para olvidar los problemas, para relajarse, y como todas las drogas es una práctica nociva y destructiva.”
Paradoja
”Hoy estoy convencida de que nadie pierde a nadie, porque nadie posee a nadie. Esa es la verdadera experiencia de la libertad: tener lo más importante del mundo, sin poseerlo.”
Contradicción.-
“Tiempo de abrazar. Tiempo de separar”
Interrogación.-
“¿Esta cansado del sexo? Yo también, y sin embargo ni él, ni yo sabemos lo que es.
Sentencia.-
“He descubierto porque un hombre paga por una mujer. Quiere ser feliz.”
Uno de los aspectos mas resaltantes que Coleo impregna a su obra en relación con vivencias personales es el Camino de Santiago de Compostela.
Quiero darles a conocer un dato interesante y es que durante un viaje al el campo de concentración de Dacha- Alemania, Paulo tiene una visión en la que se le aparece la figura de un hombre. Dos meses más tarde, le encuentra en una cafetería de Amsterdam, se acerca a él y conversan un largo rato en el que intercambian opiniones y vivencias. El hombre, cuya identidad Coelho nunca ha querido revelar, le sugiere un reencuentro con el catolicismo. Paulo empieza a estudiar el lenguaje simbólico del cristianismo. Le propone, también, hacer el Camino de Santiago (una ruta medieval de peregrinaje entre Francia y España.
Coelho siempre ha confesado que su punto de partida fue el camino de Santiago, que hizo en 1986 y en el que descubrió que la sabiduría estaba en la gente corriente y que Dios era “democrático” y no como el que le predicaron en su época de colegio de jesuitas, este aspecto esta presente en varias de sus obras, Paulo nombra el Camino de Santiago en “ El Alquimista”, “ El Peregrino de Compostela” es así como el autor nos deja ver que papel tan importante jugo el Camino durante su vida y “ Once Minutos no podía ser la excepción, fijémonos atentamente en este fragmento de la novela:
“Salieron por el Camino de Santiago, era una subida y una bajada que terminaba en el río, que terminaba en el lago, que terminaba en las montañas, en un remoto lugar de España (...) todos peregrinos en busca de esa ciudad mitológica, Santiago de Compotela, que tal vez ni siquiera exista, que tal vez era una leyenda en que la gente necesita creer para darle sentido a su vida...”
El espacio en donde se desarrolla la novela nos lleva al Nordeste de Brasil, Coelho no da el lugar exacto pero si pistas para notar que se trata de un pueblo del interior del país:
(...) su ciudad en el interior del Brasil tenia un solo cine, una discoteca, una sucursal bancaria, por eso Maria no dejaba de esperar el día en que su príncipe azul llegara sin avisar, arrebatara su corazón, y partiera con el a conquistar al mundo.
A través de la obra también hacemos un viaje imaginario a Río de Janeiro, que es donde Maria es incitaba a dejar su país a la búsqueda de nuevos horizontes.
También esta Géneve o Ginebra como podemos evidenciar en el siguiente párrafo:
“Se dirigió hasta uno de los grandes paneles que había en varios sitios de Géneve, aquella ciudad tan amable con los turistas, a la que no le gustaba verlos perdidos.”
Incluso nos lleva a Paris que es donde termina el libro.
“Mientras el aparato se acercaba al lugar de desembarque, se pregunto si valía la pena pasar un día en aquella ciudad, solo para sacar fotos y contarles a los demás que había conocido Paris.”
Coelho nos hace un maravilloso recorrido por estos hermosos lugares mediante la descripción pero sin caer en el detallismo tedioso que desanima al lector, siempre nos hace soñar, agregaría yo.
El tiempo climático en la novela abarca varias estaciones, desde el verano donde Maria frecuenta las playas de Río de Janeiro hasta invierno casi al final del libro, lo cual se demuestra en este párrafo que hace referencia a la vez que Ralf y Maria van caminan sobre el Camino de Santiago:
“ Lo siguiente que recordó fue a Ralf cogiendola en brazos, quitándose la chaqueta, y poniéndola sobre sus hombros. Debía tener demasiado frío, pero poco importaba...”
Del tiempo histórico podemos decir que este libro está ambientado en pleno siglo XXI, aunque Coelho no precisa fecha exacta, la descripción de sitios, es decir la ambientación de los mismos y la existencia de objetos como el celular pueden denotarlo.
“Compró un teléfono móvil, de los de tarjeta (ya que no tenia domicilio fijo), y los días siguieron, espero la llamada para el trabajo.”
Acerca del tiempo cronológico diremos que Coelho abarca un periodo de once años con su obra en el transcurso de su obra, ya que esta empieza a los once años de Maria y concluye a los veintidós, es decir, acompaña toda la evolución que implica la metamorfosis de Maria.
“Se enamoro por primera vez a los once años, mientras iba desde su casa a pie a la escuela primaria local”
En síntesis en tiempo que perdura la novela es lineal, lo cual es evidenciado a lo largo del libro pues como mencione antes partimos de la niñez de la Maria y la acompañamos en una evolución que la convierte en una mujer fuerte sin omitir el sufrimiento y otros infortunios que cedieron camino a su cambio.
En esta ocasión en autor hace uso del espacio físico mediante los lugares que nos invita a recorrer como el espacio psicológico que se encuentra en la mente y los pensamientos de Maria, haciendo un recorrido tanto exterior como interior de la protagonista, permita que nos revistamos en sus sentimientos y nos enfundemos en su identidad y así es como describimos que el tiempo es continuo:
“Como todas las prostitutas, había nacido virgen e inocente, y durante su adolescencia había soñado con encontrar al hombre de su vida (...)”
En este punto es preciso acotar que Coelho hace uso de un tipo de dialogo directos, estilo que nos permite interactuar de modo particular con los personajes.
-“Que el dolor es amigo de la mujer”
-Ese es el peligro.
-Que el dolor tiene un límite.
-Esa es la salvación, no lo olvides.
Y terminamos por afirmar que Coelho hace uso de su estilo directo, simple, poético y en ocasiones coloquial que hace que sea uno de los más leídos en estos tiempos. Pertenece a la escuela latinoamericana contemporánea de la segunda mitad de siglo y defiende su posición con un estilo real maravilloso.
Critica Personal
Lo primero que tengo que decir es que quede encantada con el nuevo libro de Coelho, su temática me atrajo de principio a fin y sobre todo causo en mí un ánimo de reflexión. Podría calificar la novela Once Minutos, como una historia de amor y de sexo, una reflexión sobre el cuerpo y el alma y de cómo alcanzar la unión perfecta entre ambos. El libro no se centra en el estudio de la prostitución, en su análisis sociológico, como quiere dejar claro el autor, sino en la búsqueda o el encuentro del cuerpo y el alma.
De todas formas el libro ilustra, a veces con detalle, la luz y la sombra de la sexualidad femenina; llama por su nombre a casi todas las obsesiones y las reticencias de una mujer dispuesta o no a la entrega y, a través de voces no siempre válidas, comunica mensajes que debemos conservar en nuestro repertorio. Coelho nos hace pensar, como no solemos hacerlo, en la necesidad de “evitar las cosas que acaban convirtiendo el amor en esclavitud”, como tampoco en que el dolor seduce “cuando se viste de sacrificio” y mucho menos nos preguntamos “por qué estará el mundo tan preocupado por las apariencias”.
Ex hippie, ex mago negro y demás, Coelho ha protagonizado una biografía vertiginosa. Fue compositor comprometido de canciones, lo que le acarreó ser detenido en 1974 por la dictadura brasileña y torturado. A renglón seguido (1974-1981), trabajó de ejecutivo en una multinacional discográfica hasta que se dedicó a escribir.
Una de las cualidades de la literatura de Paulo Coelho es, para muchos, su capacidad para relajar el espíritu y aprender a ver “el vaso medio lleno” siempre. Este parece ser también el objetivo de `Once minutos'; un libro para conocer la esencia de la sexualidad en Érase una vez una prostituta llamada María", así comienza, literalmente, el nuevo libro del multimillonario escritor Paulo Coelho.
Para la crítica es una “picante historia de sexo”. Quizá el secreto de la masiva aceptación popular de Coelho este, precisamente, en la aplastante sencillez argumental y narrativa, que facilita la lectura de para todo tipo de lectores exigentes o no con los productos literarios. En sus novelas, salvo algunas excepciones, apenas hay violencia y sexo. También hay que tener en consideración su estilo, bastante lírico y almibarado, repleto de mensajes filosóficos y optimistas sobre la vida y la necesidad de la religión.
El mensaje que se repite en sus narraciones, es que todos podemos ser mucho mejores, que tenemos derecho a que nuestros sueños se hagan realidad y que en cualquier momento de nuestra vida tenemos la posibilidad de fundirnos con la Totalidad, logrando la ansiada fusión íntima de nuestra Alma con el Mundo.
Coelho ahora respira tranquilo y con satisfacción, pues así sea para coincidir con él o para rechazar su propuesta, los lectores continúan rindiéndose a su producción.
Coelho no es un escritor más: su influencia excede el ámbito literario y se ha convertido para muchos lectores en una referencia espiritual y existencial, algo así como una mezcla de gurú, psicólogo y analista de los problemas de nuestro tiempo. Sus novelas (ver servicio 158/98) se sitúan en la órbita de la New Age, manejando un cóctel de anhelos vagamente espirituales y sincréticos con referencias a cuestiones de actualidad, válidas para lectores de todas las latitudes.
Conclusiones
Once minutos es una novela que explora la naturaleza del sexo y del amor, la intensa y difícil relación entre cuerpo y alma, y cómo alcanzar la perfecta unión entre ambas.
En esta novela tienen menos peso las divagaciones espiritualistas. Coelho vuelve a adoptar un suave y empalagoso tono didáctico, con el que llega fácilmente a esos lectores que no se quedan sólo en la ficción, les facilita las cosas, pues de vez en cuando, sobre todo en las páginas del diario de Maria, se incluye una buena parte de las ambiguas moralejas que quiere transmitir.
La conclusión de Paulo Coelho al terminar su obra fue: “Que siempre intentamos seguir un manual del sexo, y eso es un error. Once minutos es una reflexión, pero uno no aprende de la sexualidad leyendo. Hay que practicarla, hay que vivirla. Para mí sólo existen tres cosas totalmente prohibidas: la pedofilia, el incesto y el estupro. Aparte de eso, creo que toda pareja tiene libertad para ejercer las mil y una maneras de hacer el amor, desde que haya amor.”
A plena luz del siglo XXI vemos como el sexo ha sido convertido en algo totalmente profanado y no por ello menos requerido en todas partes, el sexo esta en todo, en la gente, en la publicidad, en las películas, en los libros, es la base de la vida pero a pesar de los ideales liberales y la evolución de los tiempos existen aun sectores reacios de la sociedad para los que el sexo es tabú.
Sin embargo, la causa en cuestión es que liberales o no, la gente no ha sido capaz de de dar a conocer sus temores como nos plantea Coelho. No han sido capaces de entender sus cuerpos, ni decir: “Heme aquí, este es mi cuerpo”, hablar sin restricciones, ni vergüenza de sus deseos.
Este planteamiento se encuentra a los largo del libro. Almas que se comunican, lugares distantes, aventura, sufrimientos, preocupaciones y casi nunca alguien decía;
“mira querido, entiende mejor el cuerpo de una mujer”, es una de las citas del libro.
A estas alturas el sexo se ha convertido en algo mecánico, efectos del propio instinto, una mera cuestión carnal, de requerimiento fisiológico como podría decirse.
Esta el hecho de fingir un orgasmo, la masrtubación como excusa para no incluir un tercero , el miedo a involucrar los sentimientos, el hecho de equiparar el amor al sufrimiento, las pocas ganas de comprometerse, de involucrarse.
Coelho nos exhibe en una vitrina de páginas una búsqueda del amor en el sexo, una unión de almas más que de cuerpos. Entregarse por completo sin miedos, ni reservas manifestar sentimientos, deseos, decir: Esto es lo que necesito para ser feliz. Para alcanzar la plenitud mediante la unión de almas.
Once minutos nos invita a reflexionar, a entender que la búsqueda del amor encarnado en el sexo no esta lejos si no a manos de todos, basta con buscar en uno mismo. Coelho es cuidadoso, lo sabemos, cabe destacar la manera tan independiente y a la vez tan conjunta con que trata el sexo y el amor. El amor: divino, imborrable. El sexo: placer, incitación, emociones encontradas. Y finalmente Sexo y Amor: Placer sublime e interminable.
¿Pero es tan difícil hablar de sexo estos días? ¿Es posible evitar que alguien se ruborice en torno a la sola idea?
Incluso para alguien cuya vivencia personal provenga del patrón de hogar donde la madre, maravillosa y trabajadora pero terriblemente reservada no ha sido capaz de proferir la palabra sexo en publico y muchos menos frente a sus hijos, eso lo dejaremos al padre...la palabra sexo esta en todas sus conversaciones y es verdad toca el tema de modo real, pero constantemente se le oye decir que “ El amor no existe” y que el mismo se reduce a una simple conveniencia de sentimientos, dar y recibir y en ese minuto yo me detengo...¿ Que idea mas loca?
Pero ¿como es que llegamos a esta conclusión? Coelho nos propone respuestas y es que todos hemos ligado severamente el amor al dolor, es a causa de esto que la gente evita amar y sin amor el sexo sublime esta descartado. Esta obra exalta el conocimiento del cuerpo, el espíritu y la perfecta unión de ambos.
Once minutos tiene los mismos defectos y las mismas cualidades que hicieron que los libros de Paulo Coelho sean detestados por los críticos y devorados por los lectores". El Autor Paulo Coelho, con más de 43 millones de libros vendidos, no es sólo uno de los autores más leídos del mundo, sino también uno de los escritores con mayor influencia ideológica de hoy en día. Lectores de más de 150 países, sin distinción de credos ni culturas, le han convertido en uno de los autores de referencia de nuestro tiempo. Que les puedo decir nuestra sociedad no enseña a amar, ni con el cuerpo ni con el alma.
¿Sexo con amor? , ¿Sexo? o ¿Amor? He ahí el dilema.
Bibliografía
COELHO, Paulo. Once Minutos. Editorial Grijalbo. 2003
Paginas Web:
-
Diario electrónico “ El Tiempo”: Agosto 15 de 2003
ELTIEMPO.COM
Programas de Televisión:
-
“El Camino de Santiago con Paulo Coelho” en CANAL INFINITO.
-
“Paréntesis con Paulo Coelho” en PEOPLE AND ARTS.
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Enviado por: | Teresa Mendoza Osorio |
Idioma: | castellano |
País: | Chile |