A través del siguiente trabajo, podremos señalar los puntos en común entre el canto X de “La Odisea” (Homero) y “Circe” (Julio Cortazar). Para justificar las semejanzas, nos referimos, específicamente, a los mismos textos.
Lo primero que surge a través de la lectura de las obras, es la figura femenina. Circe (La Odisea) y Delia Mañara (“Circe”) tienen un objetivo en común: Engañar a los hombres, envenenarlos y tenerlos bajo su dominio. Delia logra el sometimiento físico y psicológico; Circe logra sólo el físico.
“Tenían la cabeza, la voz, el cuerpo y las cerdas del puerco, pero su espíritu seguía siendo el mismo de antes. Y lloraban cuando se vieron encerrados (...)” (La Odisea, Canto X).
“Pero Héctor se tiró en Puerto Nuevo, un domingo de madrugada. Fue entonces cuando Mario oyó los primeros chismes. La muerte de Rolo Médicis no había interesado a nadie desde que medio mundo se muere de un síncope.” (Circe. Página 94).
Otro punto a comparar entre las dos obras es el entretenimiento de las protagonistas: el tejido y el bordado.
“Y escucharon a Circe, que cantaba con una hermosa voz en su morada, mientras tejía una divina tela, tal como son las labores ligera, graciosa y espléndida de los dioses.” (La Odisea, Canto X)
“(...) era más dulce con Mario, lo hacía sentarse cerca de la ventana y le explicaba proyectos de costura o de bordado.” (Circe. Pág. 94)
Tanto Circe como Delia muestran su dominio y encantamiento sobre los animales:
“Y hallaron en un valle, sitio en un descampado, los palacios de Circe, elevados obre piedras pulidas. Y en sus alrededores vagaban lobos monteses y leones, pues Circe habíalos domesticado administrándoles pérfidas mixturas; y no solo no se arrojaban sobre los hombres, sino que se les acercaban moviendo sus largas colas (...)” (La Odisea. Canto X)
“Un gato seguía a Delia, todos los animales se mostraban siempre sometidos a Delia, no se sabía si era cariño o dominación, le andaban cerca sin que ella los mirara. Mario notó una vez que un perro se apartaba cuando Delia iba a acariciarlo. Ella lo llamó (era en el Once, de tarde) y el perro vino manso tal vez contento hasta sus dedos. La madre decía que Delia había jugado con arañas cuando chiquita.” (Circe. Pág. 94)
“Y las mariposas venían a su pelo (...) pero Delia las ahuyentaba con un gesto liviano.”
La semejanza más importante es la forma de envenenamiento que realizaban sobre los hombres que las rodean. Delia con Rolo y Héctor y Circe con los compañeros de Ulises.
“Mezcló luego vino de Pramnio con queso, harina y miel dulce, pero puso el veneno en el pan, con el fin de hacerles olvidar el suelo de su patria.” (La Odisea. Canto X)
“Su mejor receta eran unos bombones a la naranja rellenos de licor, con una aguja perforó uno de los que traía Mario para mostrarle como se los manipulaba.” (Circe. Pág. 99)
“Los Mañara la miraban como queriendo leerle la receta, la alquimia minuciosa de quince días de trabajo.” (Circe. Pág. 101)
“Ella le hizo muchas bebidas. Pero Rolo tenía miedo por el corazón. El alcohol es malo para el corazón.” (Circe. Pág. 101)
Los dos personajes masculinos comparten el mismo destino: no caer en el hechizo de Circe y Delia. Ulises es advertido y ayudado por Hermes, a través de una pócima; mientras que Mario se da cuenta solo del terrible engaño.
“Pero yo te liberaré de ese peligro; yo te salvaré. Toma este excelente remedio (...) Después de decir esto, el Matador de Argos me dio el remedio, que arrancó de la tierra y me explicó su naturaleza. Su raíz era negra y su flor semejante a la leche.” (La Odisea. Canto X)
“(...) Mario acercó el bombón a la boca, iba a morder, bajaba la mano y Delia gemía como si en medio de un placer infinito se sintiera de pronto frustrada (...) La luna calló de plano en la masa blanquecina de la cucaracha, el cuerpo desnudo de su revestimiento coriáceo, t alrededor, mezclado con la menta y el mazapán los trocitos de patas y alas, el polvillo del caparacho triturado.” (Circe. Pág. 114)
Lo que diferencia a ambos textos es el desenlace. Ulises se quedará con Circe en la isla durante un año, luego de demostrar su dominio sobre ella; Mario, ante el descubrimiento de las intenciones de Delia, la abandona.
“Y allí quedamos un año, comiendo carnes abundantes y bebiendo dulce vino. Pero al cabo del año, cuando las horas terminaron su carrera, cuando pasaron los meses y se extinguieron los días, entonces mis compañeros me llamaron para decirme: -¡Desdichado! Acuérdate de tu patria, si todavía es tu sino seguir viviendo y volver a entrar en tu magnífica morada t en el suelo patrio.” (La Odisea. Canto X)
“Cuando le tiró los pedazos en la cara, Delia se tapó los ojos y empezó a sollozar (...) entonces los dedos de Mario, se cerraron en su garganta como para protegerla de ese terror que le subía del pecho (...)Aflojó el apretón y la dejó resbalar hasta el sofá, convulsa y negra, pero viva.” (Circe. Pág. 114-115)
Conclusión:
A partir de este análisis podemos reafirmar la influencia que tuvo la obra de Homero sobre Julio Cortázar. Circe es el modelo a seguir proyectado en Delia, mientras que lo mismo sucede con Ulises y Mario.
Finalmente todo gira en torno al “encanto” que surge a partir de los protagonistas en los dos textos: “El amor y el engaño van de la mano”
Bibliografía:
“La Odisea”. Homero. Biblioteca de la literatura universal. Clarín. 2000
“Bestiario”. Julio Cortázar. Editorial Sudamericana. 1994