PARA ENCONTRAR LA FELICIDAD FUERA DE LA CAVERNA

“En una caverna oscura están varios prisioneros atados, desde la infancia; no pueden ver la luz del día ni los objetos y personas del exterior. Sólo captan unas sombras que se proyecta al fondo de la caverna.”(Gutiérrez, 2008: 45)

A mí me parece que los hombres muchas veces queremos estar encadenados por que queremos seguir viviendo en un mundo imaginario, pero en el mal sentido, los hombres no nos planteamos la posibilidad de un horizonte mas libre, no hay confianza en nosotros mismos que nos da miedo de emprender la realidad que se vive fuera de la caverna que es un lugar donde ni siquiera la felicidad puede ser real; donde nadie puede ser feliz mas que el error y el engaño, la superficialidad, es donde habita la ignorancia de uno mismo.

La caverna es un lugar de los sentidos de la materialidad de las cosas, la sensualidad, del placer de los cuerpos, de la carnalidad, de la cotidianidad de la competencia, del hacer y el deshacer de lo efímero de lo que pasa, de lo que ocurre y de lo que ocurre y desaparece, de las siluetas de lo que los hombres llevamos por dentro que no deja huella que suceden una a otras , que se borran y se disuelven no trasciende de lo cual le da mucho trabajo salir hacerlo no es fácil sino necesariamente tortuoso, desafiante, los hombres debemos exigirnos en lo máximo forjar nuestro carácter, de su resistencia y perseverancia. La caverna es el gran obstáculo, a gran prueba a superar, es el lugar de lucha tanto para salir como para iluminar cuando se regresa, pero también es el único lugar desde el cual el hombre puede partir hacia la verdad y esa verdad la tenemos en nosotros mismos, el lugar desde el cual remeterse y despojarse de sus mismas cadenas y tendrá la oportunidad de cambiar para que pueda realmente ser feliz en este mundo lleno de tantas complejidades que lleva al ser humano a no sentirse realizado y feliz ,por que la caverna es el lugar del No-ser de un acontecer que es siempre un aparecer que es siempre distorsión, un aparecer falso, la falta de conciencia , la caverna es el lugar de la ignorancia y, más específicamente , de la ignorancia en tanta prisión por que real mente el hombre quiere seguir viviendo en ella.

“Si a uno de estos hombres se libra de las cadenas y se le obliga a salir, primero quedaría deslumbrado y después poco a poco iría distinguiendo los objetos, y después vería directamente la luz del sol. “ (Chávez, 2007:68)

Creo que el que logra poco a poco liberarse de todas las cadenas que tiene en su alma lograra sentirse feliz, pero esa libertad debe estar muy bien encausada por que el peor enemigo de la libertad es la ignorancia. Que hoy en día existe, debemos por eso tener cuidado de las decisiones que tome el ser humano sin reflexionar alguna, es muy importante considerar que cada persona tiene una concepción diferente a lo que vemos y sentimos escuchamos y más íntimamente en nuestros pensamientos ya que nuestra educación varia entorno en que forma nos educaron y por esta razón muchas veces es un obstáculo para que el hombre pueda ver claramente la luz.

Cuando uno piensas en uno mismo, se ciega su libertad, pues buscará el ser humano únicamente en su provecho personal y se olvidara de los que le rodean y se hace insensible de lo que realmente pasa en la sociedad.

“Examina pues qué pasaría si fueran liberados de sus cadenas y curados de su ignorancia, piensa que cada uno de ellos fuera forzado a levantarse y a volver el cuello y marchar mirando a la luz y al hacer todo esto fuera incapaz de percibir aquella cosas cuyas sombras había visto antes.” .(Díaz, 2004:38)

Estoy de acuerdo que la felicidad esta fuera de la caverna por allí esta la verdad y la idea del bien pero la lucha va ser primero dentro de la caverna, por salir, por enfrentar la insoportable luz de la verdad. Solo una vez fuera el interior de la caverna se convierte en desgracia, en falsa felicidad. Solo una vez fuera la desgracia de la lucha y el dolor se transmuta en plenitud verdad máxima revelación dentro de ella su misma felicidad.

Los seres humanos hemos tendido siempre a perseguir la felicidad como una meta o un fin, como un estado de bienestar ideal y permanente al que llegar sin embargo, parece ser que la felicidad se compone de pequeños momentos de detalles vividos en el día a día, y quizá su principal característica sea la futilidad, su capacidad de aparecer y desaparecer de forma constante a lo largo de nuestras vidas.

Pero lo seres humanos estamos siempre inquietos de dónde buscar la felicidad, si en acontecimientos externos y materiales o en nuestro interior, en nuestras propias disposiciones internas.

Pero muy pocos de nosotros disfrutamos plenamente de algo. Es muy pequeño el júbilo que nos despierta la visión de una puesta de sol, o ver una persona atractiva, o a un pájaro en el vuelo, o un árbol hermoso, o una bella danza. No disfrutamos verdaderamente de nada. Pero el disfrute pleno de algo es mucho más profundo. La felicidad, de la misma forma que el amor, no son cosas que podamos perseguir, llegan. Pero si las buscamos, nos evadirán.

Una cosa clara para Platón. Desde el punto de vista de la verdad, no hay felicidad dentro de la caverna por que no hay concepto de felicidad que permita tener momentos felices o situaciones felices o una vida feliz.