Biografía
Miguel de Cervantes
BIOGRAFÍA DE MIGUEL
DE CERVANTES.
El linaje de los Cervantes se remonta al siglo XI durante el reinado de Alfonso VII cuando Alfonso Nuño se
distinguió en la lucha contra los Moros, en campañas tan efectivas como fueran las del Cid Campeador cincuenta
años antes, durante el reinado de Alfonso VI.
En recompensa por sus esfuerzos y triunfos, el Rey Alfonso VII concedió a Alfonso Nuño la alcaldía de Toledo y
extensos terrenos alrededor de dicha ciudad, en uno de estos terrenos, a unas dos leguas (10 Km.) construyó un
castillo que nombró "Cervatos", ya que era descendiente directo de la cuna de "Cervatos" en el Norte de Castilla
la Vieja, bordeando con León y Asturias.
A la muerte de Alfonso Nuño, en una batalla en 1143, el castillo pasó como herencia a su hijo mayor, Alfonso,
quien de acuerdo con las costumbres de entonces, decidió adoptar como apellido, el nombre de su territorio
(Cervatos) junto al de su familia. A su muerte, su hijo mayor, Pedro heredó el castillo y siguiendo el ejemplo
paterno, continuó usando el apellido Cervatos.
Cualquiera que haya visitado Toledo, pudo fijarse en las ruinas de dicho castillo en la cumbre del monte, encima
del sitio donde el puente de Alcántara cruza el acantilado del Río Tajo. Las ruinosas paredes del castillo, hacen un
admirable contraste con el Alcázar de Toledo remontándose sobre los tejados de la ciudad, en el otro lado del
acantilado.
El hermano menor de Pedro, Gonzalo, no estando de acuerdo con que su hermano se adueñara del castillo y del
nombre, que aunque tomado del castillo, era también su nombre de cuna, y el de las antiguas posesiones
territoriales en Castilla la Vieja, y para diferenciarse, cambió su apellido a "Cervantes"
Gonzalo y aparentemente, su hijo, siguieron al Rey Fernando III en la gran campaña contra los Moros durante los
años 1236-48 durante la cual rescataron para los Cristianos, las ciudades de Córdoba y Sevilla, acorralando a lo
Moros en el reino de Granada. Entre los descendientes de Gonzalo, algunos se casaron con miembros de varias
familias de la nobleza Española y entre los descendientes de estos, hubo soldados, magistrados, abogados y
dignatarios de la Iglesia.
De la parte de la familia Cervantes que quedaron en Andalucía, Diego de Cervantes, comandante de la Orden de
Santiago, se casó con Juana Avellaneda y Saavedra, tuvieron varios hijos, uno de ellos, fue Juan y uno de los
hijos de este, Rodrigo se casó con Doña Leonor de Cortinas, de cuyo matrimonio, nacieron varios hijos, entre
ellos Miguel, nuestro autor.
Habiendo quedado toda la familia en la pobreza, Rodrigo de Cervantes, el padre de Miguel, nuestro autor, se
ganaba la vida trabajando de practicante (curando heridas), ¡vivían muy pobremente! Muy poco se sabe sobre la
vida de Miguel de Cervantes, el autor de la obra clásica Don Quijote de la Mancha La fecha exacta de su
nacimiento no se encuentra en ningún archivo, pero si se sabe que nació en Alcalá de Henares, cerca de Madrid,
y que fue bautizado en la iglesia de Sta. María, el 9 de Octubre de 1547. Era el segundo barón y cuarto de los
hijos de Rodrigo de Cervantes y Leonor de Cortinas.
Miguel era muy presumido de joven, durante su niñez, en algún sitio, vio al famoso actor-empresario y
dramaturgo Lope de Rueda, (al cual menciona en el prefacio de sus obras) y quien posiblemente despertó en el la
pasión por el teatro. En realidad se saben pocos detalles de los primeros veintiún años de su vida, Puede que
atendiera alguna escuela en Valladolid y quizá la de los Jesuitas en Sevilla. No se conocen las fechas, excepto que
en 1567-68 estaba registrado como estudiante en una escuela de Madrid, donde el profesor de bellas artes, Juan
López de Hoyos, lo menciona como su estimado alumno. Es posible que dejara sus estudios para hacer el
servicio militar en Flandes. En 1569 escribió a sus padres pidiendo una Fe de Bautismo, para poder alistarse en la
Fuerzas Armadas. se cree que entonces estaba de ordenanza del Cardenal Aquaviva.
Se alistó en la Legión Extranjera y fue destinado a Italia, Cervantes participó en la batalla naval de Lepanto (el 7
de Octubre de 1571). Esta batalla fue el punto culminante de su carrera militar, aunque enfermo y con mucha
fiebre, participó en la batalla y recibió tres tiros, uno de ellos en el brazo izquierdo, a causa del cual, perdió el uso
de la mano izquierda.
Miguel de Cervantes fue todo un caballero y un valiente soldado, siempre dispuesto a dar su vida por defender su
Patria, su Rey y sus compañeros como demuestra claramente la siguiente narración, que detalla su malograda
carrera militar:
Miguel fue uno de los que embarcaron en Messina en Septiembre del 1571, bajo el mando de Don Juan de
Austria; en la mañana del 7 de Octubre cuando se enfrentaron con los Turcos, él estaba enfermo con fiebre, sin
embargo insistió en tomar su puesto, aunque le aconsejaron los superiores y compañeros, que debía de
permanecer en la enfermería.
Su Galeón, "La Marquesa" se encontró en el centro de la batalla en Lepanto y durante la cual, Cervantes recibió
tres tiros, dos en el pecho y uno en el brazo izquierdo, a estas heridas, perdió el uso permanentemente de la mano
izquierda. debido a lo cual fue desde entonces conocido por el mote "El Manco de Lepanto" Le costó siete
meses reponerse, a pesar de tener una naturaleza muy fuerte y disfrutar de mucha jovialidad y buen humor. La
perdida de su mano izquierda, no fue suficiente para disuadirle de continuar en su deseo de una carrera militar y
en Abril del 1572, se incorporó a la compañía de Manuel Ponce de León en el Regimiento de Lope de Figueroa,
donde se cree estaba alistado su hermano Rodrigo.
Juntos, los dos hermanos, lucharon durante los tres años siguientes, participando en la batalla naval de Navarino
(el 7 de Octubre del 1572); la captura de Túnez el 10 de Octubre del 1573 y la fracasada expedición de relevo
de la Goleta en el Otoño del 1574, con periodos de servicio en Palermo y Nápoles.
En Septiembre del 1575, durante un corto periodo de paz, los dos hermanos, salieron licenciados de Nápoles
para España en la Galera "Sol" junto con, entre otros, Pedro Carrillo de Quesada, luego gobernador de Goleta,
Miguel levaba con él cartas de Don Juan de Austria y del Virrey de Sicilia, donde recomendaban al Rey, pusiera
Miguel de Cervantes al mando de una compañía.
Durante el viaje, el día 26 de Septiembre, se encontraron con un escuadrón de galeras Argelinas y depuse de
cierta resistencia fueron vencidos y aprisionados en Argel. A través de un cautivo rescatado, mandaron a decir a
sus padres en la situación y condición en que se encontraban. Al momento, en Alcalá, la familia hizo hecho y por
hacer para conseguir dinero para sus rescates, su padre vendió todas su posesiones y sus hermanas cedieron sus
dotes personales, con lo cual reunieron 300 coronas, las cuales mandaron a trabes de unos frailes Franciscanos
que se encaminaban a Argel.
El Virrey de Argel, habiendo encontrado en Miguel las dichas cartas, dirigidas al Rey y al Duque de Sesa, penso
que su esclavo pudiera ser una persona de buena posición social, decidió no aceptar el rescate por el valor
acordado, decidieron entonces, ofrecer ofrecer todo el dinero al dueño de Rodrigo, el cual se conformo con la
cantidad ofrecida. Acordaron entre los hermanos que Rodrigo volviera desde España con un barco, el cual
pudiera escapar Miguel con los mas compatriotas posible.
En seguida de libertar a su hermano, convenció a la mayoría de sus compañeros escaparse y juntos alcanzar
Oran, una posición Española, a pie. Por desgracia después de caminar todo un día, el Moro que había accedido
a servirles de guía, les abandonó y no les quedo otro remedio que dar la vuelta. El próximo intento a escapar fue
mas desastroso, en un jardín a la orilla del mar, con la ayuda del jardinero, un Español, construyó un escondrijo,
donde fue llevando, uno a uno, a catorce de sus compañeros de esclavitud, donde los mantuvo en secreto por
durante varios meses y mandándoles alimentos a trabes de un renegado conocido por el nombre del Dorador.
Tan loco como dicho proyecto parezca, casi fue un suceso, el barco en que su hermano Rodrigo prometió volver
para rescatarlos, apareció en la costa y bajo el manto de la noche empezó a recoger esclavos, de pronto, los
marinos se asustaron al ver pasar un barco pesquero y se retiraron inmediatamente. Al intentar otra vez el rescate
poco después, varios de ellos fueron cogidos prisioneros, mientras los esclavos que en el jardín esperaban ser
libertados y comenzar el viaje a España, se vieron al momento rodeados de soldados Turcos a pie y a caballo. ¡El
Dorado los había traicionado!
Cuando Cervantes vio lo que les había sucedido, convenció a sus compañeros para que le culparan a él de todo,
que declararan sin temor, que él, y solo él, era quien había planeado todo y que nadie sabia nada de lo ocurrido.
Cuando lo mandaron declarar a él ante el Virrey, dijo lo mismo, lo amenazaron con torturas y cortarle las orejas y
nariz, un pasatiempo favorito del los Argelinos, pero nada le hizo cambiar su historia. El resultado fue que el
jardinero fue colgado por su dueño y los otros esclavos detenidos por el Virrey, quien poco después los devolvió
a sus respectivos dueños, quedándose él Virrey con Miguel de Cervantes, por quien pagó 500 coronas a su
dueño.
El Virrey convencido de que un hombre tan hábil y con tanta energía como Cervantes, era my peligroso para
quedar en manos ajenas, incapaces de contenerlo, por lo tanto, Cervantes fue encadenado y puesto en la prisión
de su castillo. Si el Virrey creyó que de esta forma dominaría al indómito Cervantes, pronto sufrió su primer
desengaño, cuando al poco tiempo, Cervantes, valiéndose de un Moro, mandó una carta al gobernador de Oran,
pidiendo le mandara una persona de confianza, para escaparse, junto con otros tres caballeros que con él estaban
cautivos en la misma prisión. Por desgracia, el Moro que llevaba el mensaje, fue detenido a la salida de Argel y
por orden del Virrey ejecutado inmediatamente, y Cervantes fue condenado a recibir dos mil (2,000) estacazos,
cuya sentencia hubiera dado fin a la vida de nuestro autor si la providencia no hubiera intervenido en su favor de
manera inexplicable, pues fue perdonado.
Después de este atentado, lo debieron tener mucho mas vigilado, ya que pasaron cerca de dos años hasta que
pudo atentar a escaparse de nuevo, esta vez su plan era el comprar una embarcación bien armada, en
complicidad con un renegado Español y dos mercaderes Valencianos con residencia en Argel, en dicha
embarcación, pensaba escapar, junto con unos sesenta compañeros de cautiverio. Cuando tenían todo preparado
para escapar, un tal Doctor Blanco de Paz, cura y compatriota, informó al Virrey del atentado.
Cervantes, debido a su buen carácter, a su deseo de aliviar el sufrimiento de sus compañeros de cautiverio y por
ser muy caritativo, estaba muy bien mirado y era muy respetado por todos sus compañeros de cautiverio. Blanco
de Paz, probablemente ciego de celos, trató de destruir a Cervantes, aun que con él destruyera a todos los otro
cautivos.
Los mercaderes Valencianos, temiendo que con torturas hicieran confesar a Cervantes, poniendo sus vidas en
peligro, trataron de persuadirle a escapar a bordo de un barco que en ese mismo día, salía para España, a lo cual
Cervantes respondió que no tuvieran temor alguno, que no había forma de tortura que le hiciera traicionarles, que
no podía dejar a sus compañeros abandonados, que recibieran castigos y torturas mientras él se salvaba, y esto
diciendo, se entregó al Virrey y se culpó de todo, para salvar a sus compañeros de los castigos pendientes,
diciendo que solo él, con la ayuda de cuatro hombres, que ya habían salido de Argel, habían planeado el escape,
y que sus compañeros de esclavitud, no sabían nada del atentado.
Como era de esperar, el Virrey quiso forzarlo a confesar quien eran sus cómplices, y durante el interrogatorio,
prepararon el cadalso, donde lo iban a ejecutar, una cuerda fue puesta al rededor de su cuello, y con las manos
atadas a la espalda, otra vez le invitaron a descubrir a sus cómplices, a cambio de cuya información le ofrecieron
el perdón. Cervantes mantuvo siempre la misma respuesta, ¡Solo yo con la ayuda de cuatro hombres que ya
salieron de Argel, hicimos los preparativos y planeamos todo! Viendo que no podían hacerle cambiar su historia,
otra vez lo encarcelaron y mas encadenado aun.
La familia Cervantes, aun que en la pobreza, seguían tratando de conseguir dinero para su rescate y finalmente la
suma de trescientos (300) ducados que habían reunido, entregaron al Fraile Redentorista Juan Gil, quien se
embarcaba para Argel entonces. A su llegada, se enteró El Virrey iba a ser trasladado a Constantinopla, pidió
mas del doble por el rescate de Cervantes. Tenia que llevar con el a todos sus esclavos, por lo tanto, el caso de
Cervantes era de mucha importancia para todos sus compañeros de cautiverio, por suerte, el ultimo día, ya con
Miguel encadenado y a bordo de la galera que transportaría todas sus posesiones, el Virrey accedió a rebajar el
precio del rescate a la mitad, con lo cual, el Padre Gil logró pedir prestada la diferencia y el día 19 de Septiembre
de 1580, después de cinco años menos dos semanas de cautiverio, Miguel de Cervantes fue puesto en libertad.
Al poco tiempo, Cervantes descubrió que Blanco de Paz, que decía ser un oficial de la Inquisición, estaba
preparando evidencias falsas, con las cuales acusar a Cervantes de mala conducta a su llegada a España. Para
descubrir su juego y ponerle en ridículo, Cervantes preparó una lista de veinticinco (25) preguntas, cubriendo
todo el periodo de su cautiverio. Basándose en dichas preguntas, pidió al padre Gis tomara declaración a testigos
delante de un notario, a solo once personas de entre todos los cautivos en Argel se les pidió declarar, no solo
contestaron las preguntas preparadas, sino que dieron muchos mas detalles, los cuales ponían bien en claro las
buenas aciones de Miguel de Cervantes y lo mucho que le admiraban y respetaban y cuanto bien había hecho a
todos los cautivos que le pidieron ayuda o consuelo, comportándose como un buen padre y hermano de todos e
irremplazable compañero.
A su llegada a España, Cervantes encontró su regimiento preparado para marchar a Portugal para mantener los
derecho del Rey de España a la corona de Portugal. Miguel que venia sin dinero y sin trabajo, no le quedó otro
remedio que alistarse de nuevo. Salieron en la expedición de Las Azores en 1582 y el año siguiente, y al terminar
la guerra, volvió a España en el Otoño del 1583, trayendo con él, el manuscrito de romances, la "Galatea" y
probablemente la primera parte de "Persiles y Sigismunda" también trajo las notas para su biografía y con él venia
una niña que se cree fue el producto de un amor con una señora de la nobleza de Lisboa, cuyo nombre no nos fue
revelado, ni tampoco la calle donde vivía.
Lo cierto es que en 1605 vivía en la casa de Miguel de Cervantes Doña Isabel de Saavedra, quien es descrita en
un documento oficial como la hija de Miguel de Cervantes que tenia entonces veintidós (22) años de edad.
Siendo manco, Miguel no esperaba ascender en el ejercito, y menos ahora que Don Juan de Austria había
muerto, no le quedaba a quien pedir ayuda para lograr un ascenso, alguien que conociera la historia de su servicio
militar, mas como ya se acercaba a la edad de cuarenta, la vida en el ejercito no ofrecía buen futuro. Su
reputación como poeta era un poco conocida, por lo tanto decidió probar su suerte en el campo literario,
presentando para imprenta, como primera obra su "Galatea" la cual fue publicada en su ciudad natal, Alcalá de
Henares en 1585, seguro que esto le dio prestigio ayudándole a hacerse mas conocido, aunque no le fue de
mucha ayuda monetaria.
Mientras Cervantes continuaba sus esfuerzos literarios, se casó con Catalina Palacios Salazar y Vozmediano
nacida en Esquivias, una moza 18 años mas joven que él, la cual trajo con ella muy poco dote. Aunque Cervantes
y su mujer no tuvieron hijos, dos años antes, Cervantes había tenido una hija, el nombre de la cual era Isabel.
Después de la muerte de su padre, las responsabilidades de Cervantes crecieron, al tener que hacerse cargo de
su dos hermanas, una sobrina y la criada de estas.
La necesidad forzó a Cervantes a buscar empleo, y en 1588 le nombraron proveedor de la flota, responsable de
adquirir comestibles para abastecer “La Armada Invencible ”. Mientras que su nueva posición le dio la
oportunidad de familiarizarse con las costumbres e historietas de la provincia (descrita en Don Quijote), fue
temporalmente detenido por incautar mercancía perteneciente al diácono de la Catedral de Sevilla, y después con
errores y deficiencias en las cuentas, fue encarcelado al menos dos veces (1592 y 1597) Estas experiencias
justifican la leyenda de que la primera parte de Don Quijote fue escrita en la cárcel.
Este fue un periodo de calamidades para Cervantes. En Mayo del 1590, pidió al Rey le concediera una posición
en el las Indias (América), pero le fue negada, diciéndole que buscara algo mas cerca de casa. Su suerte no era
mejor en literatura. En 1595 gano el primer premio (tres cucharillas de plata) en un concurso de poesía en
Zaragoza, y tres años después su canción “El entierro del Rey Felipe II en Sevilla” atrajo alguna atención, pero el
resto de sus poemas no fueron ni publicados, y anduvo mudándose de una ciudad a otra.
Estaba Cervantes en sus cincuenta cuando escribió “Don Quijote”, que es considerada la primera novela
moderna, licencia para publicarla le fue concedida en Septiembre del 1604 y en Enero del año siguiente la
primera parte fue publicada por la librería Francisco Robles en Madrid. La novela tuvo un éxito inmediato. Pocas
semanas después aparecieron tres ediciones falsificadas que fueron publicadas en Lisboa. La segunda edición
legal (con pequeñas revisiones) fue publicada en Madrid, con derechos reservados en Aragón y Portugal, y otras
dos publicaciones aparecieron en Valencia en el mismo año. El libro se publicó en Bruselas (1607 y 1611), en
Madrid (1608) y en Milán (1610) con una primera traducción al Ingles por Thomas Shelton en 1612.
Cervantes se hizo famoso de la noche a la mañana, pero sus dificultades económicas continuaron. En 1605 fue
acusado de participar en una pelea donde hubo puñaladas y el y su familia fueron encarcelados por mas de una
semana. Los rumores fueron, que el escritor vivió escondido por los próximos tres años ya que nadie supo donde
estuvo durante este tiempo.
Desde 1609 hasta el 1616 en que murió, Cervantes vivió en Madrid. En 1609 fue invitado a hacerse miembro de
la nueva fraternidad de los "Esclavos del Santo Sacramento" y por entonces su mujer se internó en el convento de
la orden de San Francisco. En 1612 el autor se hizo miembro de otro nuevo club literario, " Academia Selvaje ".
Estos últimos años en Madrid forman el periodo mas prolifero de su actividad literaria, resultando en sus 12
novelas ejemplares (1613) el poema burlesco “Viaje del Parnaso” y la prosa después, incluida en el Parnaso
(1614). Fue en aquel mismo año cuando la copia de “Don Quijote” escrita por Alonso Fernández de Tordesillas
fue publicada, la cual convenció a Cervantes a completar la Segunda Parte del Quijote, en (1615). Al igual que la
primera parte, la segunda fue publicada inmediatamente en Bruselas y en Valencia (1616) y en Lisboa (1617) y
también la primera traducción al Francés en 1618. Las dos partes aparecen juntas desde 1617 hasta el presente.
“Ocho Comedias y Ocho intermisiones” salieron en 1615 y
“Los Persiles y Sigismunda” fue publicada después de su muerte en 1617.
Cerca del final de su vida, Cervantes se hizo miembro de la orden de San Francisco, y fueron los Franciscanos
quien le dieron sepultura, situada de acuerdo con varios documentos en el “Convento de la Trinidad” en la calle
de Cantarranas en Madrid.
Miguel de Cervantes murió de hidropesía el 23 de Abril del 1616.
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Enviado por: | Guillo |
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País: | España |