INTRODUCCIÓN.

En 1992 se firma el Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica y Normal (ANMEB), del cual se derivan cuatro políticas del estado mexicano: la descentralización de la enseñanza básica; la renovación curricular y la producción de materiales y libros de texto; las reformas al magisterio; y la participación social en la educación.

El método que Latapí usa para la elaboración de su libro es, además de información documental, entrevistas con cuatro funcionarios públicos que encabezaron la SEP; con la intensión de conocer como fue percibida y la evolución que tuvieron las políticas del estado bajo su paso por la secretaría.

Siendo Ernesto Zedillo quien logra la consolidación del ANMEB y su aceptación por la SEP, el SNTE y gobiernos estatales.

Fernando Solana, uno de los primeros en manejar estas políticas, consideró un “error grave” haber regresado a la SEP, donde su periodo duró escasos seis meses; sin embargo, por su experiencia anterior y su relación a la educación, aporta datos de interés para el desarrollo del libro.

José Ángel Pescador da opiniones definidas, con respecto a datos concretos, acerca de las políticas del ANMEB en las que participo, así como de otros asuntos.

Mientras que Miguel Limón Rojas, por su variedad de puestos en la administración pública, muestra cierto interés y cercanía en lo referente a educación.

Y, finalmente, Reyes Tamez Guerra, que siendo el actual titular de la secretaria, debe basar sus contenidos en el Programa Nacional de Educación, dando una perspectiva del estado actual de la educación básica durante la presente administración.

Todos los invitados, con excepción de Ernesto Zedillo, aceptaron ser entrevistados por el autor, con la promesa de éste de publicar textualmente la versión que cada uno aprobara. Y donde ninguno sabría las opiniones de los demás, ni del mismo autor.

El Acuerno Nacional para la Modernización de la Educación Básica (ANMEB) fue decretado el 18 de mayo de 1992; las instancias que lo suscriben son: el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), la Secretaría de Educación Pública (SEP), gobiernos estatales y el poder Ejecutivo.

Tiene como principal objetivo elevar la calidad de la educación pública; esto para mejorar el crecimiento económico del país y establecer el fortalecimiento de la democracia. De los cuales deriva planes y programas de estudios para una mayor calidad y establecer una mayor jerarquía y competitividad educativa entre escuelas públicas y escuelas privadas.

Solo que desde el año 1992 al 2004, se ha mantenido sin cambios en lo sustancial de esas políticas, lo cual es contrastante con la costumbre de que cada nuevo gobierno federal debe elaborar su propia versión de una “reforma educativa”, que, en sus propios términos, debe resaltar los cambios en ella, y no la continuidad con gobiernos anteriores.

Aquí se entiende por política a ciertos modos constantes de proceder a los que se otorga prioridad; y políticas de Estado a aquellas que muestran un carácter más irreversible, por implicar un mayor compromiso del Estado.

Para ello, el Estado debe involucrarse con sus propuestas y formulaciones; debe tener base en la legislación, ya sea constitucional, ley secundario u otra disposición, y no depender exclusivamente de la voluntad del gobierno en turno; que los grupos ciudadanos que se vean afectados por ella, la conozcan y acepten; que existe algún tipo de rendición de cuentas.

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Véase en Consejo Nacional Técnico de la Educación, “Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica”, Conalte, México, 1992.

Véase en P. Latapí, “Educación y pluralismo político”, Proceso, 1098, México, 15 de noviembre de 1997.

Por ejemplo, la Ley General de Educación esta aclarada y aceptada por la legislación, y puede deducirse lo siguiente:

Las estrategias para alcanzar la equidad educativa (Atr. 33).

La función compensatoria de la federación (Art. 34).

La participación social en las escuelas (Art. 65-73).

Las disposiciones sobre evaluación (Art. 47. IV).

La obligación de dar a conocer los resultados de las evaluaciones (Art. 50).

Aportación a la educación recursos crecientes en términos reales (Art. 27).

Entre otros.

Por supuesto, la política de Estado no es irreversible, puede ser modificada por instancias gubernamentales, según su naturaleza, y pueden ser aceptadas como de Estado; esto para temer mayor estabilidad temporal, confiabilidad, respeto por su cumplimiento y compromiso de todos los actores involucrados en ella.

Con ello, podemos identificar en el ANMEB, cuatro políticas de Estado:

La descentralización de la enseñanza básica o federalización.

Los ex secretarios y el secretario actual, afirman lo fundamental y lo cambiante de la federalización, donde se ha seguido construyendo una nueva relación entre la federación y el estado; sin embargo, sigue imperando el poder central federal.

El énfasis en el aspecto administrativo, así como los estados en materia educativa, la distribución de los recursos federales, que eran negociaciones históricas entre la SEP y el SNTE.

Los gobiernos estatales harán lo conducente para que, cada vez en mayor grado, los municipios estén directamente encargados de dar mantenimiento y

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Véase en http://www.condde.org.mx/reglamentacion/ley_gral_educacion/cap1.htm 19 de junio de 2006.

equipamiento a las escuelas sirviéndose de los recursos que reciban del gobierno estatal y atendiendo a las recomendaciones de dichos consejos municipales.

La transferencia debiera haber sido antecedida por un esfuerzo inicial de racionalización de las formulas de distribución y la previsión de procesos graduales de ajuste, basados en criterios comunes y consensados por todos los actores.

Lo fundamental, en materia de federalismo, plasmado en el ANMEB en el periodo de 1995-2000 eran iniciativas cambiantes, como: reuniones periódica de la SEP con secretarios estatales de educación y delegados de la secretaria de los estados; la Sep alentó estrategias para programas dirigidos a niños migrantes.

Gubernamentalmente se logro que muchos gobiernos estatales fortalecieran sus equipos técnicos y que comprendieran que eran ellos los que debían ir definiendo el ámbito y características de su soberanía educativa.

El secretario Tamez propone, en el Programa Nacional de Educación, “perfeccionar el diseño y la aplicación de criterios equitativos de distribución del gasto destinado a la educación como la participación de la federación y los estados”. Sin embargo, las metas no se han cumplido en los plazos establecidos y no se ha dado a la población las razones del incumplimiento, ni se ha dado un nuevo plazo.

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Véase en http://www.wenceslao.com.mx/sindicato/anmeb.htm 17 de junio de 2006.

Véase en M. Ulloa y P. Latapí, El financiamiento de la educación básica en el marco del federalismo, FCE, México, 2000.

Véase en P. Latapí, La SEP por dentro. Las políticas de la Secretaría de Educación Pública comentada por cuatro de sus secretarios (1992-2004), FCE, México, 2004, p. 95.

La renovación curricular y de los libros de texto.

No solo se ha mantenido la política educativa del ANMEB sino que se ha enriquecido con el paso de los años, esto con respecto a la formación de técnicos, y la producción de libros de texto y materiales educativos.

El ANMEB planteaba la reformulación curricular de toda la educación básica, empero se centro solo en educación primaria, dejando de lado preescolar y secundaria.

Para la primaria, se aplicará un Programa Emergente de Reformulación de Contenidos y Materiales Educativos, cuyos objetivos específicos son: (1) Fortalecer en los seis grados el aprendizaje y el ejercicio asiduo de la lectura, la escritura y la expresión oral. Se hará énfasis en los usos del lenguaje y la lectura y se abandonará el enfoque de la lingüística estructural, vigente desde principios de los años setenta. (2) Reforzar a lo largo del ciclo el aprendizaje de las matemáticas, subrayando el desarrollo de la capacidad para relacionar y calcular las cantidades con precisión, y fortalecer el conocimiento de la geometría y la habilidad para plantear claramente problemas y resolverlos. En la enseñanza de la materia se desechará el enfoque de la lógica matemática, también introducido hace casi 20 años. (3) Restablecer en la primaria el estudio sistemático de la historia, la geografía y el civismo, en lugar del área de ciencias sociales. (4) Reforzar el aprendizaje de aquellos contenidos relacionados con el cuidado y la salud del alumno, y acentuar una formación que inculque la protección del medio ambiente y los recursos naturales.

En secundaria consistió en reorganizar el currículo por asignatura y la distribución de materiales a los docentes.

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Véase en Consejo Nacional Técnico de la Educación, 1992.

En lo que se refiere al ciclo de la secundaria, y en respuesta al amplio consenso de maestros, especialistas y padres de familia, a partir del próximo año escolar y comenzando con el primero de secundaria, se reimplantará en todas las escuelas del país el programa por asignaturas, sustituyendo al programa por áreas establecido hace casi dos décadas. Se reforzará marcadamente la enseñanza de la lengua española y las matemáticas, aumentando a cinco horas semanales la impartición de clases de ambas materias en vez de las tres horas, hasta hace poco previstas. En la secundaria también se restablecerá el estudio sistemático de la historia, tanto universal como de México, la geografía y el civismo. Conviene precisar que en respaldo a esta reforma, la industria editorial elabora ya los libros de texto, basados en el nuevo programa diseñado para este ciclo.

En la dedición de esta reforma pesaron dificultades como: la obligatoriedad de la secundaria, la enseñanza masiva; lo cual requiere maestros con nuevas competencias didácticas, un nuevo lenguaje y acercamiento al alumno; así como la reorganización de los planteles.

Las reformas propuestas sobre el magisterio

Enseñanza normal.

La expansión del sistema educativo que se produjo durante los años 60 y 70 condujo a ampliar y diversificar los servicios de la educación normal y la incorporación de docentes sin las debidas calificaciones.

Por otra parte, la homogeneización salarial es que mediara un estudio sobre los perfiles requeridos no trato con seriedad los esquemas universitarios de organización académica, evaluaciones o requisitos para el nombramiento de planteles normales.

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Véase en http://www.wenceslao.com.mx/sindicato/anmeb.htm 17 de junio de 2006.

Por lo que las deficiencias y deterioro de las escuelas normales coinciden en:

• Desequilibrio de la oferta y la demanda.

• Los criterios de interés político predominan en la definición de licenciaturas y postgrado.

• El incremento desproporcionado de la matricula de normales particulares.

• La heterogeneidad en los criterios y procedimientos de admisión de estudiante y evaluación no sor respetados.

• Los procedimientos viciados en la designación de directivos y administrativos.

• La contratación inmediata de los egresados como profesores de las mismas normales han generado endogamias y consolidado feudos políticos.

• La operación con altos costos unitarios.

• La deficiencia administrativa interna.

• La generación y uso de recursos sin rendición de cuentas.
  

Por ello, es preciso llevar a cabo una revisión profunda de estas áreas, ya que se cree que han transformado en espacios que distraen valiosos recursos y personal académico.

La actual administración plantea reformas hacia la formación inicial, considerando que la administración anterior no satisfacción el programa emprendido, donde el Programa de Mejoramiento Institucional de las Escuelas Normales Públicas (PROMIN), señala que estas escuelas pueden llegar a transformarse aun cuando sus necesidades sean diferentes.

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Véase en Secretaria de Educación Pública, memorias del quehacer educativo 1995-2000, 2 vols., SEP, México, 2000.

Véase en http://normalista.ilce.edu.mx/normalista/promin/promin.htm 19 de junio de 2006

Por lo que creo que debe reafirmarse la importancia de la educación publica, su vinculación con la justicia social y la soberanía del país, y el nacionalismo.

Actualización de maestros.

Se busca la actualización, capacitación y superación profesional a través de talleres generales, cursos nacionales de actualización, instalación de centros de maestro, evaluación y acreditación de los cursos nacionales de actualización, planeación y evaluación del PRONAP y otras acciones para ampliar la oferta y la cobertura. Así como una revisión crítica de las experiencias y evaluaciones del escaso impacto sobre la docencia y calidad de la educación.

Carrera Magisterial.

Tiene como principales objetivos, elevar la calidad de la educación Nacional por medio del reconocimiento e impulso a la profesionalización del magisterio; estimular a profesores de educación básica que obtienen mejores logros en su desempeño; y, mejorar las condiciones de vida, laborales y sociales de los docentes de educación básica.

Lo suscribe la comisión SEP-SNTE, y participa todo aquel docente de educación básica que cuente con nombramiento de alta definitiva o interinato ilimitado, ubicado en los distintos niveles y modalidades.

Implica establecer un sistema de promoción horizontal que abrirá mayores oportunidades de acceso a los docentes, y acordar alguna amanera de evaluar a los docentes. Así como acceder a niveles salariales superiores con base en su preparación académica, la atención a los cursos de actualización, su desempeño

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Véase en Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, Diez propuestas para asegurar la calidad de la educación publica, SNTE, México, 1994.

profesional, y su antigüedad en el servicio y en los niveles de carrera magisterial en sus distintas vertientes.

Sin embargo, Carrera Magisterial ha funcionado como un mecanismo de mejoramiento de ingresos del magisterio y no como un sistema adecuado de evaluación, ni en el mejoramiento docente, que, por consecuencia, no ha mejorado la calidad educativa.

Carrera Magisterial debe recuperar se enfoque evaluativo confiable y eficaz, donde el enfoque de la evaluación sea formativo y no fiscalizador, para que dicha evaluación contribuya a que cada maestro pueda identificar sus fortalezas y debilidades para proseguir en su actualización y mejoramiento, que la evaluación sirva para retroalimentar los contenidos y métodos de los programas de actualización al magisterio y programas de instituciones formadoras; y que se den a conocer a la opinión pública los resultados de las evaluaciones como parte de la rendición de cuentas de las autoridades educativas respecto a este servicio público.

La participación social en la educación.

Se intenta estimular la participación de los padres de familia en las escuelas, la sensibilización de directores y maestros en la aceptación de esta participación, la evaluación de las situaciones y la difusión de los derechos de los ciudadanos.

La dificultad para la participación social es, en gran medida, la falta de una cultura cívica de la población en materia educativa, así como las deficiencias jurídicas. El derecho a la educación es un derecho consagrado en la Ley, pero no exigible jurídicamente, subjetivo e individual, pues no se consagra como derecho colectivo.

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Véase en Comisión Nacional SEP-SNTE de Carrera Magisterial, “Lineamientos Generales de Carrera Magisterial”, México, 1998.

Esto hace difícil la participación ciudadana en lo que la aqueja, exigiendo la satisfacción de sus derechos, que, como se sabe, sólo se consigue del estado aquello para lo cual la sociedad organizada presiona.

Por otra parte, hay confusión e incertidumbre a actores, formas, procedimientos y momentos de la deseada participación o a las modalidades que debe aceptar la rendición de cuentas de las autoridades en respuesta a esa participación.

No obstante, las nuevas formas de participación social en proyectos sociales, dan base para analizar los procesos y factores de éxito en la deseada participación ciudadana en la educación.

El autor concluye que para la continuidad de estas políticas tiene que haber una reformulación clara del ANMEB y el compromiso público de los actores involucrados, entre ellos la SEP, el SNTE y gobiernos estatales.

La descentralización de la educación básica y normal, y la participación social, así como la renovación curricular y las políticas sobre el magisterio, tienen un funcionamiento muy completo con los textos legales. En el caso de la descentralización, la acumulación de decisiones ha reforzado su irreversibilidad.

También, la oposición de intereses entre la SEP y algunos gobiernos estatales se ha podido manejar con discreción y con arreglos satisfactorios; empero, la resistencia del SNTE ha sido más fuerte y notoria, asumiendo que quebrantaría la unidad del sindicato, su carácter de interlocutor principal y su capacidad de negociar incrementos salariales, sin embargo, la resistencia sindical se ha multiplicado en el nivel estatal, llegando a bloquear iniciativas importantes de las autoridades locales.

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Véase en http://bibliotecadigital.conevyt.org.mx/colecciones/documentos/desarrolloeducativo.pdf 22 de junio de 2006.

CONCLUSIONES

En el libro, el autor se propuso reconstruir y analizar las principales políticas de Estado en materia educativa derivadas del Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica (ANMEB), con apoyo en los testimonios y apreciaciones de los titulares de la SEP.

El enfoque de estas conclusiones estaba ya implícito en la definición de “políticas de Estado”, ahí precisamos las características que éstas debieran tener para ser calificadas como tales.

En el curso del análisis se ha mostrado que las cuatro políticas consideradas cumplen los principales requisitos señalados, por lo que han logrado una continuidad notable a lo largo de tres sexenios.

Lo que resta hacer es puntualizar, en los casos concretos, qué factores han contribuido a que esas políticas permanezcan y cuáles han actuado en contra.

BIBLIOGRAFIA

Comisión Nacional SEP-SNTE de Carrera Magisterial, “Lineamientos Generales de Carrera Magisterial”, México, 1998.

Consejo Nacional Técnico de la Educación, “Acuerdo Nacional para la Modernización de la Educación Básica”, Conalte, México, 1992.

http://bibliotecadigital.conevyt.org.mx/colecciones/documentos/desarrolloeducativo.pdf 22 de junio de 2006.

http://normalista.ilce.edu.mx/normalista/promin/promin.htm 19 de junio de 2006

http://www.condde.org.mx/reglamentacion/ley_gral_educacion/cap1.htm 19 de junio de 2006.

http://www.wenceslao.com.mx/sindicato/anmeb.htm 17 de junio de 2006.

Latapí, P. “Educación y pluralismo político”, Proceso, 1098, México, 15 de noviembre de 1997.

Latapí, P. La SEP por dentro. Las políticas de la Secretaría de Educación Pública comentada por cuatro de sus secretarios (1992-2004), FCE, México, 2004, p. 95.

Secretaria de Educación Pública, Memorias del quehacer educativo 1995-2000, 2 vols., SEP, México, 2000.

Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, Diez propuestas para asegurar la calidad de la educación publica, SNTE, México, 1994.

Ulloa, M. y Latapí, P. El financiamiento de la educación básica en el marco del federalismo, FCE, México, 2000.

UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA NACIONAL

SEDE 151

TOLUCA

La SEP por dentro. Las políticas de la Secretaría de Educación Pública comentada por cuatro de sus secretarios (1992-2004).

Autor: Pablo Latapí Sarre

Ensayo

Materia: Políticas Públicas y Sistemas Educativos Contemporáneos

Toluca, Méx., a junio de 2006