La Celestina es un personaje muy materialista y egoísta. Su antigua profesión era la de prostituta; pero al abandonarlo se convierte en alcahueta. Pero no une a las parejas altruistamente, sino que cobra por ello. Desempeña también el antiguo oficio de la buhonera, se dedica a ir por las casas vendiendo útiles de mercería, cosmética,...

Su otro oficio es el de bruja o hechicera, algo muy condenado por la Iglesia. En uno de los actos invoca al demonio: líneas 12-17. “ ¡Oh diablo a quien yo conjuré, cómo compliste tu palabra en todo lo que te pedí! En cargo te soy. Así amansaste la cruel hembra con tu poder y diste tan oportuno lugar a mi habla cuando quise, con la ausencia de su madre.”

Celestina demuestra tener una gran labia, un ejemplo de ello es la forma de convencer a Pármeno con la historia del tesoro. Le cuenta que su padre le confió el secreto, para que así éste necesite de su ayuda. Desde mi punto de vista, la historia del tesoro es una farsa; un argumento que utiliza Celestina hábilmente, percatándose de la codicia del ser humano.

Sempronio, que es mucho más mayor, posee una mayor picaresca; y a su vez es mucho más hipócrita y tramposo. En cambio Pármeno, al principio, es un criado fiel y muy sincero; aunque a lo largo de la obra se deja influir por Sempronio y Celestina, y se acaba pareciendo muchísimo a éste.

El carácter de Melibea, al igual que el de los demás personajes, es confuso y complejo dependiendo siempre del lugar y la situación en que se encuentren. Melibea es una mujer de clase alta que muestra a sus padres una forma de ser que no concuerda para nada con la realidad. Por una parte mantiene una imagen de inocencia hacia sus padres mientras que en realidad es una astuta lujuriosa que escondiéndose detrás de su honra y su impecable reputación engaña a su antojo a todo el mundo, excepto a Celestina y a su criada. Evoluciona a través de la obra, de forma que a partir del primer encuentro con Celestina, se vuelve cada vez más lujuriosa. Es decir, una vez influida por Celestina desata su lado más apasionado encadenado hasta entonces bajo los estrictos principios moralizadores del cristianismo.

Eran torturados por la Inquisición. La tortura, es la imposición de un castigo corporal o psicológico severo y doloroso, ya sea como pena, o como medio para forzar la confesión de un delito o proporcionar pruebas que sirvan para incorporarse a un procedimiento judicial. Era uno de los tipos de oraldía entre los antiguos pueblos germanos, aunque en la antigüedad siempre fue además un modo de castigo de los enemigos capturados, y durante mucho tiempo, una “ forma” de interrogatorio judicial de testigos incómodos o poco deseosos de aportar las pruebas que se les requerían.

Hasta el siglo XIII la tortura no se sancionó en el Derecho Canónico. Sin embargo, las penas aplicadas al delito de traición comenzaron a ser aplicadas también a los herejes, como convictos de un crimen laesa majestatis Divinae (contra la autoridad de Dios). Una vez que se constituyó la Inquisición, el Papa Inocencio IV, influido por la fuerza del Derecho Romano recobró en esta época, dictó un decreto en 1252 que influyó en la adopción de los métodos de tortura en los tribunales civiles, para la obtención de confesiones, ya fuera acerca de actos de herejía imputados al torturado, ya se tratara de los atribuidos a terceras personas.

El influjo canónico sobre la vida judicial civil fue indudable también en este aspecto. Durante la Edad Media este hecho es fácil de constatar. Las autoridades municipales italianas utilizaron la tortura, si bien ésta no apareció en otros países hasta que Francia la legalizó en el siglo XIII. Pronto acabaría siendo un sistema utilizado por toda Europa, excepto Inglaterra y Suecia. Aunque en la Common Law nunca se llegó a su reconocimiento, en Inglaterra se podía utilizar por prerrogativa del rey. En las colonias norteamericanas la tortura era ilegal y sólo se usaba como forma de ejecución.

Una de las formas de tortura empleadas por la Inquisición era el emplumamiento, en el que se bañaba a la persona en una sustancia pegajosa y se le echaban plumas, después era obligada a presentarse así por el pueblo.

Evidentemente la más conocida es la de la hoguera, en la que la persona era quemada e insultada en la plaza pública.

Además podían ser desterrados, sufrir una confiscación de bienes, etc.

Pleberio es mucho menos autoritario, y por tanto se muestra mucho más natural y comprensivo. En cambio Alisa es, desde mi punto de vista, una ejemplificación de la soberbia de la burguesía, y mucho más preocupada por su posición y su imagen de cara al exterior.

Las partes más humorísticas de la obra, son aquellas en las que la Celestina (bastante aficionada a la bebida) cuenta sus chanchullos; o cuando los hace.

Además hay que destacar también el humor especial que dan las muertes, en especial la de Calisto, que muere de forma absurda.

Primero Sempronio y Pármeno matan a Celestina, ya que ésta no les da su parte de la cadena. Al avisar Elicia a la policía deciden tirarse por una ventana, y acaban muriendo.

Después es Calisto el que muere, al sentirse asediado se cae de un muro y muere.

Finalmente, la última en morir es Melibea, que se suicida desde una torre al no soportar la muerte de su amado.

Calisto reacciona bastante mal al enterarse de la muerte de sus criados. Aunque la verdad es que parece sentarle peor por el hecho de matarlos sin su consentimiento, que por el mismo acto de asesinato. Su opinión hacia el juez es, lógicamente, de resentimiento y enfado.

Las características más llamativas de los diálogos son que siempre se producen entre dos personajes, y nunca entre más, y la utilización de corchetes cuando un personaje habla en voz baja a otro.

En los monólogos los personajes reflexionan sobre lo que está ocurriendo.

TRABAJOS LINGÜÍSTICOS Y LITERARIOS

• “Por mucho que madrugue, no amanece mas ayna”

Tiene una clara traducción al castellano moderno que es: no por mucho madrugar amanece más temprano. Eso significa que hay cosas que no pueden avanzar sin esperar, que debe respetarse el tiempo que tarda algo y que no por mucho desearlo se producirá antes.

• “ni es oro lo amarillo que reluce”

Este refrán da a entender que las apariencias nos pueden engañar, que aunque veamos que algo reluzca (nos llame la atención) no tiene por que ser oro (valioso). Ahora la frase ha cambiado un poco: no es oro todo lo que reluce.

• “sobre dinero no ay amistad”

La intención del que emite este refrán es dejar claro que los negocios y la amistad no deben mezclarse, que no puedes fiarte de un amigo cuando se trate de dinero.

• “un solo acto no haze habito”

Tenemos un refrán equivalente que también sale en el libro: una golondrina no hace verano (también: una flor no hace primavera). Esto significa que no debemos generalizar, que un hecho aislado no tiene las mismas consecuencias que una sucesión de hechos.

• “Vale más solo que mal acompañado”

Esta frase deja bien claro el significado del dicho. Sencillamente es mejor hacer las cosas solo que con otros que puedan hacerlas más difíciles.

• “Otros se ganan por malos y yo me pierdo por bueno”

Lo que se pretende demostrar es que a veces la honradez puede no ser beneficiosa, aunque a la larga acostumbra a serlo.

COMENTARIO DEL FRAGMENTO 980-987 (ACTO XII)

Melibea se muestra en este fragmento mucho más dócil que al principio de la obra, donde se obstina en no ver a Calisto. Ahora le alaba. También se muestra prudente ya que no quiere ser descubierta.

Melibea se muestra mucho más recelosa que Calisto a que éste cruce la puerta por miedo a que su honra quede manchada. A Calisto, loco de amor, parece importarle menos.

Pármeno tiene miedo de que la cosa se pueda volver contra ellos e intenta convencer a Sempronio para marcharse. Éste se muestra más paciente, pero no le faltan nervios.

Al estar esta novela escrita en 1499, el castellano que se emplea dista mucho del que ahora nosotros empleamos. Se utilizan palabras ahora poco usadas o usadas en otros contextos (“tu mucho merecer”, “de mi corazón te partieses”, “llamaré a mis criados para que las quiebren”, “ya ha dos horas que te requiero que nos vamos”) y palabras que han ido evolucionando hasta nuestros días (“que de ti hobe entera noticia”, “dispón de mi persona según querrás”, “ que con la tercia parte”, “que no consiente que vamos allá”).

La figura más utilizada es el hipérbaton como por ejemplo en: ”¡En hora mala acá esta noche venimos!” o “nos han en tanto tiempo de sentir de su casa o vecinos”; también se da el asíndeton: “La esperanza es cierta, el tiempo breve, cuanto tu ordenares.” Y la anáfora en los pensamientos da Calisto.

Las alusiones al tiempo son en su mayor parte de Sempronio y Pármeno debido a que tarda en volver tanto su amo que se hace de día.

Para Melibea, en cambio, el tiempo pasa muy rápido.

Las partes en que se puede dividir el texto son aquellas partes en las que hablan Melibea y Calisto y aquéllas en las que hablan Sempronio y Pármeno.

COMENTARIO DE EL FRAGMENTO 1048-1054

(ACTO XII)

En este fragmento Celestina muestra su verdadera naturaleza. Es una vieja avariciosa que se vale del engaño y de la traición para conseguir lo que quiere, y eso es lo que ha hecho con Sempronio y Pármeno.

Sempronio y Pármeno se dan cuenta de que han sido engañados y, lógicamente, se enfadan e increpan a Celestina.

• “Si me viste, burléme; si no te vi, calléme”

• “De lo poco, poco; de lo mucho, nada”

Este refrán da a entender que cuando es poco lo que se pone en juego, es igual darlo todo; pero cuando es mucho es preferible no dar nada.

• “Yo dígole que se vaya y abajase las bragas”

Refrán con el que se alude a que uno hace lo contrario de lo que se pide.

• “Con ese galgo no tomarás más liebres”

Con este refrán se hace saber que no se puede engañar al que lo emite.

El tema principal es la avaricia del ser humano.

El argumento del texto es el reparto de la cadena de oro que Calisto a dado a Celestina, la cuál quedó en ser repartida entre ella, Sempronio y Pármeno; pero que Celestina quiere para sí.

Desde mi punto de vista este fragmento se puede dividir en seis partes. La primera es la primera intervención de Celestina donde se excusa. La segunda es cuando intervienen Sempronio y Pármeno y se dan cuenta de que han sido engañados. La tercera es en la que Celestina apela a lo que ha hecho por ellos para librarse de la riña. La cuarta es en la que Sempronio le dice que no se vaya por las ramas. La quinta en la que Celestina menta a la madre de Pármeno y la sexta en la que Pármeno dice que deje en paz a su madre, que bien está.

En este fragmento se dan casos de polisíndeton, como: “no creas que soy tu cativa por saber mis secretos y mi vida pasada y los casos que nos acaecieron a mí y a la desdichada de tu madre”; hipérbaton, como: ”Entraron unos conocidos y familiares míos en aquella sazón aquí”; apóstrofe, como: “¡ Oh Dios, y como crece la necesidad con la abundancia!”; etc.

El rasgo más llamativo es la utilización de gran cantidad de refranes y dicho populares, lo que da más verosimilitud a la obra.

COMENTARIO DEL FRAGMENTO 1172-1180 (ACTO XVI)

En este fragmento el autor hace gala de una gran ironía, sobre todo en la intervención de Alisa. Utiliza la ironía para expresar que los padres no saben nada de las andanzas de su hija.

Aparecen en el fragmento dos datos premonitorios del final de la obra. Éstos son: “Déjenme gozar mi mocedad alegre si quieren gozar su vejez cansada; si no, presto podrán aparejar mi perdición y su sepultura” y “Faltándome Calisto, me falta la vida la cual, porque el de mi goce, me aplace”.

El discurso de Melibea defendiendo la libertad es una forma de revelarse contra la autoridad de sus padres, que quieren obligarla a casarse.

4. ¿Qué referencias aparecen en relación con el tiempo implícito de la acción?

Las referencias al paso del tiempo hacen siempre alusión al tiempo que Calisto lleva visitando a Melibea, que es un mes.

5. ¿En qué se diferencian los puntos de vista de Alisa y de Pleberio?

En que Pleberio es mucho más liberal y opina que su hija debe participar de la elección de su marido, mientras que Alisa opina que Melibea ni siquiera entiende de ello, por lo que no debe de saber nada.

Lucrecia actúa de cómplice de Melibea desde el principio por lo que la avisa de lo que traman sus padres.

Ello se puede atribuir a que dado su estatus social es probable que haya tenido acceso a un profesor o a una buena biblioteca.

Los paralelismos del texto, como son “En pensar en él me alegro, en verlo me gozo, en oírlo me glorifico” o “para que de su voluntad venga, para que diga cual le agrada”, contribuyen a hacer el texto más melódico.

Sobre el ser humano, piensa que es malo por naturaleza. Es por ello que los protagonistas de la obra, al portarse mal, reciben un castigo, la muerte.

Sobre la vida opina que es algo penoso, peligroso y difícil. Que es una lucha continua.

Celestina acaba siendo el personaje principal debido a que los otros personajes empiezan a depender de ella. De sus acciones depende el resto del relato.

Por otra parte Celestina es un personaje vivo, real, no un personaje literario.