Despuès de muchos años de lectura sobre diversos temas que atañen al interès del origen del hombre, de su cultura y evolución en el tiempo, creo haber llegado por diversos caminos a algunas certezas a respuestas que todavía parecen incontestables, y entre ellas, la que mas me llamò la atención, es haber encontrado en un lugar geogràfico
De la tierra, la ubicación del famoso y tan buscado Jardín de Edén bíblico, que figura en el Génesis del Antiguo Testamento.
Así como Jesús hace referencia a las pirámides en el Nuevo Testamento, Moisés también lo hace en el Génesis, autor de este.
Moisés fue criado en Egipto por la hija del Faraón y como uno más de los pocos elegidos, tenía acceso a los llamados conocimientos ocultos de la época y a los rituales iniciáticos
que se daban lugar en las pirámides- si tomamos a estas como templos iniciáticos en los cuales se adquirían dichos conocimientos y no como tumbas de Faraones que fueron utilizadas mucho tiempo después-.
Después de largas horas de medición e investigación por algunos investigadores, se sabe que en las pirámides se encuentran infinidad de datos que coinciden con hechos de la historia, la astronomía, física, y hasta predicciones a futuro como el final de una era y el comienzo de otra.
Las pirámides son como una abstracción que abarca diversos datos de las ciencias, como por ej. la distancia al sol, la composición de una molécula de agua o el nacimiento de Cristo.
Todos estos conocimientos eran adquiridos por los inciados
quienes vestidos de lino blanco ingresaban a las pirámides para conocer mas a fondo los conocimientos ocultos.
Moisés hace referencia a las pirámides y les da una gran importancia en Génesis 2:9 : “ E hizo Jehová Dios nacer de la tierra todo árbol delicioso a la vista y bueno para comer, también el árbol de la vida en medio del huerto, y el árbol del conocimiento del bien y del mal” ; árboles de los cuales uno tomaba fruto, cada una con un fin específico o datos específicos, según lo que uno quisiera conocer.
Por ejemplo, en la pirámide de Micerinos, se encontraron alimentos en estado de conservación que datan de la época de los egipcios y Moisés se refiere a ella como el árbol que es bueno para alimento, ya que allí se almacenaban y preparaban previamente al inicio del ritual iniciático.
También nombra a la pirámide de Kefrén como el árbol de la sabiduría que se encuentra en medio del jardín, ubicándose en medio de las otras dos pirámides.
Nombra también al árbol del conocimiento del bien y del mal o la pirámide de Keops, que es la última y de mayor tamaño, en la que se encuentran datos científicos, conocida también como la gran pirámide.
Moisés cuenta que Dios por algún motivo, le prohibió al hombre el acceso al árbol del conocimiento del bien y del mal, pero el hombre desobedeció e ingresó a la pirámide: Ge 2:16 “De todo árbol del huerto podrás comer, pero del árbol del conocimiento del bien y del mal no comerás, por que el día que de él comas, positivamente morirás”- entonces para que el hombre no tome conocimiento o fruto del árbol de la vida o pirámide de Kefrén , dice que apostó querubines para proteger el camino a esta: 3:22 “El hombre ha venido a ser como uno de nosotros, conocedor del bien y del mal, ahora pues que no alargue su mano, tome también del árbol de la vida, coma y viva para siempre.” 3:23 “Y lo sacó Jehová del huerto de Edén, para que labrara la tierra de la que fue tomado. Echó, pues, fuera al hombre, y puso querubines al oriente del huerto de Edén, y una espada encendida que se revolvía por todos lados para guardar el camino al árbol de la vida”- y puso la esfinge conectada por medio de túneles subterráneos y en línea recta que desemboca directamente a esta.
Moisés describe a esta zona y nombra a un río que se dividía en cuatro cabeceras a partir de la ubicación del Jardín de Edén: Ge 2:10: “Salía de Edén un río, y de allí se dividía en cuatro brazos” y a estos cuatro brazos los llama Pisón, Ghihón, Hidekel y Eufrates , siendo el río Nilo la fuente madre.
Si observamos un mapa de Egipto y prestamos atención a la zona del delta del Nilo, vemos que las pirámides se encuentran justo en la zona en la que el río comienza a dividirse en cuatro brazos para desembocar en el mar Mediterráneo.
Algunos eruditos sitúan al Jardín de Edén, como a una zona ubicada a una cierta altura y describen a esta zona como protegida por una muralla, siendo la zona la meseta de Ghiza y la muralla, la muralla que protegía a todo este complejo arquitectónico.