Historia


I República Española


I República (1873-1874)

Los dos años de gobierno de Amadeo I fueron de total inestabilidad. En Cuba también comenzó la sublevación o guerra de los diez años y en 1872 surgieron en España revueltas federalistas alentadas por los republicanos y anarquistas. Hubo seis gobiernos y en febrero de 1873 el rey tuvo que renunciar al trono y marcharse.

De la noche a la mañana las cortes proclamaron la I República española (11 de febrero de 1973) ante el vacío de poder provocado por la abdicación de Amadeo de Saboya y a la minoría de edad de Alfonso XII, probable candidato a ocupar el trono. En ese momento se hicieron probables las distintas tendencias que había dentro de la República: el republicanismo federal (que defiende que España se convierta en una federación de regiones autónomas dotadas de sus propios organismos ejecutivos, legislativos y judiciales, de tal forma que al Gobierno central sólo le corresponden las funciones de política exterior y economía) y el republicanismo central .

En realidad esta República sólo la apoyaban los del Partido Demócrata Republicano Federal de Pi i Margall que solicitaba una nueva forma de organizar el Estado, el laicismo, la ampliación de derechos y la regulación de los derechos laborales. La mayoría de la Cámara era monárquica, pero votó a favor de la República para acelerar el deterioro político y poder posiblemente restaurar la monarquía en la figura de Alfonso, hijo de Isabel II.

Hubo revueltas populares y se constituyen Juntas revolucionarias en muchos lugares. Se pedía la abolición de los consumos (eran impuestos sobre los productos básicos) y las quintas (iba a la mili uno de cada cinco, aunque como se podía comprar y vender esta obligación, siempre iban los pobres). Una vez apaciguada la sociedad se convocaron elecciones para redactar una Constitución con quince Estados federales. Ganaron los republicanos con un 60% de abstención.

El proyecto de Constitución redactado era parecido a la de 1869 con poder repartido entre el Estado, la región y el municipio. Pero no solucionó ni el conflicto carlista ni la guerra de Cuba, ni el levantamiento cantonalista que, alentado por anarquistas, proclamaron multitud de cantones independientes en muchas partes de España, como bien indica el texto con la frase “federalismo de abajo arriba”.

Pi i Margall dimitió para no reprimir con las armas a la revuelta y Salmerón fue incapaz de ejecutar las sentencias de muerte a los cantonalistas dictadas por la autoridad militar. Castelar, republicano conservador, le sustituyó y sin mayoría en las Cortes fue derrotado en ellas en enero de 1974. Había intentado gobernar autoritariamente dando poderes a los jefes militares.

Para impedir la formación de un gobierno de centro-izquierda, el general Pavía invadió las Cortes con la guardia civil, que disolvió la Asamblea. El poder pasó a los unionistas y progresistas del general Serrano. Él mismo intentó estabilizar un régimen conservador, pero el pronunciamiento en Sagunto del general Martínez Campos en diciembre de 1874 acabó con la República.

El día 1 de diciembre Alfonso había publicado en el Manifiesto de Sandhurst desde su destierro en Inglaterra garantizado una monarquía de corte conservadora, católica etc. Alfonso XII, hijo de Isabel II era el nuevo rey de España.




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Idioma: castellano
País: España

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