Filosofía y Ciencia


Filósofos latinoamericanos


Filósofos

Latinoamericanos

San Pedro Sula Septiembre 28, 2005

Introducción

En esta investigación pretendo plasmar el pensamiento de algunos de los más importantes filósofos latinoamericanos, haciendo énfasis en nuestros más importantes pensadores.

Los filósofos estudiados en este trabajo son los hondureños Francisco Morazán, José Cecilio del Valle, Rafael Heliodoro Valle y Froylán Turcios; también incluiré al cubano José Julián Martí y al Uruguayo José Enrique Rodó.

De cada uno de ellos leerán su biografía así como los puntos más importantes de su pensamiento, incluyendo mi propia opinión de cada uno de ellos.

José Cecilio del Valle

(1776-1834)

Biografía

Político e intelectual centroamericano, nacido en Choluteca (Honduras) el 22 de noviembre de 1776. Hijo de José Antonio del Valle, linajudo, de las principales familias de la península. Son los tiempos de oscurantismo en Centro América. No exige la escuela popular, apenas está el Colegio Tridentino de Comayagua, donde se cursa estudios superiores. Los padres de José Cecilio, deseosos de educar a su hijo de la mejor manera y, no encontrando en Honduras un centro adecuado, se trasladaron a Guatemala en 1789; habiendo cursado sus primeros conocimientos en la Escuela de Belén. Por ese tiempo, Guatemala, recibía la provechosa influencia de las nuevas corrientes filosóficas, políticas y sociales, que produjeron una verdadera revolución en las ideas que anteriormente se tenían a cerca de los hombres y de las cosas de la vida y las concepciones mentales del hombre.

Estudió Filosofía, Derecho Civil y Canónico en la Universidad de San Carlos, en donde optó el Título de Abogado. Continúo sus estudios sobre Idiomas, Filosofía, Derecho, Economía, Ciencias Naturales, Políticas, Finanzas, Historia, Geografía, Matemáticas. Sin embargo, los conocimientos adquiridos no estaban exentos de la influencia desconcertante la de la Escolástica y la reverencial sumisión a la colonia.

En 1820 ya era alcalde de la ciudad de Guatemala, y en este mismo año funda el periódico El amigo de la Patria, donde destacó como ensayista. Cuando América Central logró la independencia del dominio español en 1821, Valle ayudó a que la región pasara a formar parte de una confederación con el recién creado Imperio mexicano de Agustín de Iturbide. Y el 15 de Septiembre de 1821 redactó el acta de independencia. Valle representó a la provincia de Tegucigalpa en el Congreso mexicano (1822), y se convirtió en secretario de Asuntos Exteriores en el gobierno de Iturbide. El Imperio fue disuelto en 1823, después de lo cual, Valle regresó a Guatemala, y en 1824 se presentó como candidato a la presidencia de las Provincias Unidas del Centro de América (Costa Rica, Guatemala, Honduras, Nicaragua y El Salvador). Aunque le faltó sólo un voto para conseguir la mayoría absoluta, el Congreso le negó el cargo. Ganó las elecciones presidenciales en 1834, pero murió antes de tomar posesión de la presidencia.

Pensamiento

Era humanista, confiaba plenamente en el hombre, al que ve levantarse continuamente de sus fracasos y tropiezos para situarse en un nuevo y mejor terreno. Pensaba que nada valía la ilustración si no servía para ayudar a los hermanos y buscar en términos prácticos su perfeccionamiento, y entendió esta búsqueda como un indagar por la luz en condiciones de mesura, equilibrio y tolerancia.

Valle quería una América como utopía, como ese lugar adecuado para que la razón realice ese perfeccionamiento del hombre que nunca fue posible en Europa. Estaba convencido de que la historia de la humanidad avanza al ritmo del progreso de las ciencias. Sostenía que la enseñanza de éstas era tarea prioritaria de la sociedad, a fin de que las luces y beneficios prácticos que proporcionan, o sea su utilidad, llegasen a todos los sectores del pueblo.

La Importancia que Valle le concedió a la economía se refleja en el siguiente escrito de Julio de 1831: “Si queremos que subsista lo político, pensemos como corresponde en lo económico”. Valle clamaba por la libertad de comercio. Fue uno de los gestores del concepto de integración económica y en sus estudios abogó por los beneficios de una mayor cooperación entre las provincias centroamericanas, con el fin de estimular el desarrollo económico. También recalcó la necesidad de la movilización de los factores productivos como uno de los objetivos básicos del proceso integracionista. Estaba de acuerdo con la anexión de Centro América a México por considerar que necesitábamos de un país más avanzado, como un modelo, para alcanzar totalmente la independencia buscada.

Su concepción política, producto de la Ilustración europea, puede resumirse así:

  • La nación es una sociedad política cuyos miembros se organizan libremente y de acuerdo al derecho, con el propósito de alcanzar la felicidad común.

  • El equilibrio social es fuente de igualdad y unidad.

  • La nación es fuente de independencia, soberanía e igualdad en relación con otros pueblos.

  • Sus ideas sociológicas aparecen en lo que escribió en relación con la problemática indígena y sobretodo, en el ensayo “Soñaba el abad de San Pedro y yo también se soñar”. En él, le recordaba a las naciones americanas el antiguo anhelo de unificarse.

    Valle veía en las ciencias los instrumentos adecuados para mejorar la condición de los hombres y creía que estos instrumentos debían universalizarse y aplicarse mediante una adecuada educación del pueblo.

    Algunas de sus frases y escritos

    “El gobierno que con una mano exige aumento de impuestos debe con otra procurar el aumento de la riqueza”:

    “El pueblo donde haya mayor suma de trabajo, debe tener mayor suma de riqueza. Esta es la verdadera balanza política. Las naciones que quieran inclinarla a su favor, deben aumentar los trabajos, únicos pesos que la hacen volver a un lado más que otro”.

    “Si queremos que Centroamérica, nuestra digna Patria, sea una nación independiente, libre y feliz, es necesario que hagamos todos lo sacrificios que exige la independencia.”

    “La nación es una sociedad política compuesta de pueblos socios, unidos en compañía para su común felicidad si hay equilibrio en todos ellos. La igualdad de intereses mantiene la unión, conserva la justicia y hace la felicidad de todos; si no hay equilibrio, la desigualdad hace que unos sean mas ricos y poderosos que otros; que unos dominen a otros; que unos sean opresores y otros oprimidos; que no exista la sociedad; que se disuelva la nación”.

    “Hijos de América, diseminados por todos lo climas, que formarán una sola familia, una sola nación”

    “No será el indio un ser degradado, que en una misma cara, en los surcos de su frente, manifiesta las señales de la humillación. Será lo que es el hombre: un ser noble que en la elevación de sus miradas da a conocer la de su esencia”.

    “Esos americanos tristes y desmembrados que solo hablan ayes y suspiros se tornarán en hombres alegres, altos y hermosos, como los sentimientos que darán vida a su ser. No serán humildes como los esclavos; tendrán la filosofía del hombre libre”

    “Habrán sabios entre ladinos, habrán filósofos entre los indios, todos tendrán mayor o menor cantidad de civilización; y esta parte de la tierra será la más iluminada de todas”

    “El indio a quién se le cree indolente y perezoso, es activo, capaz de los trabajos mas duros. Sus brazos son los que rompen las montañas y pulverizan peñas para sacar el oro y la plata que exporta el comercio; sus manos son las que han hecho esos millones que suponen cantidad de trabajo”

    Preguntas

    1) Explique el pensamiento de José Cecilio del Valle con sus propias palabras.

    José Cecilio del Valle era humanista, y colocaba al hombre en una posición privilegiada y todo giraba en torno a él. Vela por la seguridad y mejores condiciones de vida de las personas. Y como toda persona perteneciente al humanismo o al renacimiento tenía a las ciencias como el motor de progreso de la humanidad, por tanto tenían que enseñarse a todas las personas de una sociedad.

    En cuanto a lo económico del Valle estaba de acuerdo con la libertad de comercio, es decir que se pudieran exportar e importar cosas mas fácilmente entre naciones establecidas, y con una integración económica en toda América pero más que todo en Centro América; decía que solo así se podía estimular el desarrollo económico. Por esto, en parte, estaba de acuerdo con la anexión de Centro América a México, él no miraba a CA lo suficientemente preparada política y económicamente para impulsarse al desarrollo solo. Buscaba siempre la justicia, y además pensaba que el trabajo producía riquezas, y una nación entre más trabajara y se educara al ritmo de las ciencias, mas oportunidades de desarrollo tendría. Quería que CA fuera una nación, considerando que el concepto que a esta última da, es el de una sociedad política compuesta de pueblos socios, UNIDOS para su común felicidad. Siempre colocó en alto su buena concepción de los indígenas, que merecen vivir dignamente con todos los derechos que se merecen.

    2) ¿Esta usted de acuerdo? ¿Por qué?

    Estoy de acuerdo con su pensamiento de unir a Centro América, y que solo unidos podemos salir adelante, como una solo nación porque esto nos haría más fuertes, “la unión hace la fuerza”. Me parece que la libertad de comercio entre las cinco repúblicas de Centro América podría ayudar a cumplir ese ideal, y que da muchos beneficios en todo sentido. Pero no estoy de acuerdo con su pensamiento de anexionar Centro América a México. Pienso que esto solo provocó pérdidas; hizo que nos “acomodáramos” a que México mande y nos estancáramos en nuestro desarrollo. Perdimos, como parte de la capitanía general de Guatemala, a la intendencia de Chiapas. La dominación cultural fuerte de México, que ahoga la nuestra propia. La facilidad de toma de nuestras riquezas, etc. Del Valle decía que no estábamos preparados para lucir totalmente independientes, pero entonces, ¿Cuándo lo íbamos a estar si todo el tiempo pasábamos a ser colonias ya sea de países del viejo o del nuevo mundo?

    Francisco Morazán Quesada

    (1792-1842)

    Biografía

    Militar y político hondureño. Nació en Tegucigalpa el 3 de Octubre de 1792. Hijo de don Eusebio Morazán, criollo antillano, descendiente de emigrantes corzos, y doña Guadalupe Quezada, de origen centroamericano. Su privilegiada inteligencia le permitió asimilar con rapidez los estudios que sus maestros privados le proporcionaron, y así continuó hasta su vida adulta hasta lograr una amplia educación. Se distinguió como secretario general del gobierno de don Dionisio de Herrera.

    Morazán se unió a la infructuosa lucha por evitar la anexión de Honduras por México (1821). Peleó contra el ejército de Justo Milla en Comayagua, en donde por el escaso número de sus soldados tuvo que escapar hacia Choluteca, por la derrota sufrida; sin embargo Morazán recibió ayuda de Nicaragua y organizó un ejército formado por hondureños y nicaragüenses. Exactamente en el sitio denominado La Trinidad, muy cerca de Saban a grande, peleó contra Justo Milla, venciéndole en forma aplastante lo que le trajo un gran reconocimiento como militar. Con ese mismo ejército se trasladó a Comayagua y se proclamó Jefe de Estado. Fue electo Presidente de Centro América en el año 1830 y trasladó la capital de las mismas a San Salvador.

    Morazán fue elegido presidente de El Salvador (1839-40) y lanzó desde allí un último intentó contra Guatemala en 1840. Durante su mandato, Morazán inició numerosas reformas educativas, judiciales y económicas, y trató de limitar el poder de la Iglesia católica, pero las luchas internas de la confederación le obligaron a llevar a cabo acciones militares con el fin de mantener su unidad; fue derrotado y marchó al exilio en Perú. En 1842 desembarcó en la Plaza Mayor de San José de Costa Rica., donde tomó brevemente el poder; antes de que pudiera iniciar la reconstrucción de la unidad centroamericana fue capturado y fusilado por sus propias tropas un 15 de Septiembre de este año el mismo Morazán arregló las punterías de los soldados. El 6 de noviembre de 1848 el Gobierno de Costa Rica decretó remitir los restos de Francisco Morazán al gobierno de El Salvador.

    A continuación una descripción detallada de su muerte

    "En el ángulo suroeste de la plaza se coloca de espaldas a un pequeño muro. Rehúsa una silla que le ofrecen. A Villaseñor lo colocan en su silla de espaldas al piquete, sin que el lo advierta pues esta apenas consciente, por una dosis de laudano que le hicieron ingerir para calmarle el dolor de sus dos heridas en el pecho. Morazán le arregla los cabellos que le caen sobre la frente expresándole: -Querido amigo, la posteridad nos hará justicia. Se persigna: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Pide el mando de la escolta, y abriéndose la negra levita, y descubriéndose el pecho con ambas manos, yergue su alta y delgada figura, y con voz inalterada como quien da ordenes en una parada militar, manda: -Preparen armas; apunten (corrige una puntería); fue...

    La última silaba es apagada por una descarga cerrada. Villaseñor que recibe el impacto de los plomos en la espalda, se va de bruces. Entre el humo de la pólvora, se ve que Morazán alza levemente la cabeza y musita: -Aun estoy…vivo”

    Tomado de: Morazán, Laurel sin Ocaso Volumen II, por Miguel R. Ortega

    Pensamiento

    Era un militar, y en el sentido político un liberal que buscaba defender la independencia, era un amigo de la libertad y del federalismo. La figura de Francisco Morazán se perfiló como un héroe defensor de las instituciones democráticas, y por sus luchas por la unión centroamericana. Consideró que al lograr la unidad, el istmo tendría más desarrollo, a la vez fuerza y peso para resistir en mejores condiciones cualquier amenaza o peligro. Rechazó a la monarquía y condena las condiciones que la consolidan, exalta las garantías sociales (propiedad, igualdad y libertad) al igual que la voluntad de lucha para defender la federación Centroamericana.

    Estaba rotundamente en contra de Manuel Arce, quien era conservador; trataba de cualquier forma de derrocarlo del poder y así poder instaurar la constitución. No estaba de acuerdo con la anexión de Centro América a México, decía que iba en contra del federalismo y no da las mejores seguridades de su buen modo de proceder en el gobierno. Pensaba que la guerra es un medio para conseguir cambios positivos y que era el único método de conseguirlo, por consiguiente estaba de acuerdo con la milicia, el estado tiene el deber de mantenerla ya que esta protege a la patria.

    Algunas de sus frases

    “Declaro: Que mi amor a Centroamérica muere conmigo. Excito a la juventud, que es llamada a dar vida a este país que dejo con sentimiento por quedar anarquizado, y deseo que imiten mi ejemplo de morir con firmeza antes que dejarlo abandonado al desorden en que desgraciadamente hoy se encuentra. “

    “Para extirpar el mal de las naciones
    es preciso destruir las monarquías:
    Ellas son la desgracia de la tierra...
    con los reyes nació la tiranía.”

    “De estos goces (garantías sociales) disfruta
    Centro América ni tiranos, ni esclavos en su suelo
    consentiremos jamás: si alguno aspira
    a entronizar el fiero despotismo.
    Si pretende derechos de conquista establecer,
    o rememorar que tenga
    por cierta e indubitable ruina”

    “Siempre he creído que el que no aspira a engañar debe presentarse al pueblo con sus propios colores”

    “Desgraciados centroamericanos! Vuestros males se pueden lamentar: pero consolaos con este estéril sentimiento, porque no es posible, en conciencia, hacer responsable de ellos a su autor”

    Preguntas

    1) Explique el pensamiento de Francisco Morazán con sus propias palabras.

    Su pensamiento era básicamente liberal. Tenía una visión unificadora, libre e independiente de Centro América consideraba que si se hacía esto CA tendría mayor fuerza para resistir las luchas y aumentaría el desarrollo; luchó toda su vida e incluso murió por este ideal, esto es lo que mas resalta de su pensamiento, era un federalista. Luego podemos decir que rechazaba totalmente a las monarquías, decía que en una sociedad tenía que haber igualdad, libertad y fraternidad, y el hecho que hubieran clases tan poderosas como esas va en contra de estos principios.

    Como parte de esta visión totalmente independiente de CA, Francisco Morazán, definitivamente no estaba de acuerdo con la anexión de CA a México, porque decía que eso iba en contra de la libertad, de nuestra búsqueda de independencia y de la federación misma. Daba cierta prioridad a la milicia, los militares y todos los cargos que participan en una guerra. Decía que esa era la única forma de conseguir los objetivos. Admiraba a Napoleón Bonaparte por sus aspiraciones, por su fuerza e influencia. Pone muy en claro en su testamento que amó a la federación hasta el último minuto de su vida, y que buscaba sembrar en los jóvenes esa chispa del ideal tan buscado por él. Admiró la honestidad y sinceridad más que todo en los gobernantes. Y también siento que quedó con rencor con el pueblo centroamericano, porque después de haber luchado tanto por ellos, lo asesinaran de la forma como lo hicieron.

    2) ¿Esta usted de acuerdo? ¿Por qué?

    Estoy de acuerdo con su visión unificadora de CA, lo que más admiro es la forma y el afán con el que luchó toda su vida por la federación Centroamericana, pienso que las ventajas que esto trae son muchas, aumentaría nuestro desarrollo económico y tendríamos una cultura más fuerte, porque ya de por sí que todos los países centroamericanos se parecen, su gente, su cultura y sería bueno unificarnos por eso, creo que así de repente apareceríamos en el mapa económico y físico. Las monarquías, como dice Morazán, trajeron la desigualdad y la injusticia al mundo, no son más que un estorbo para llegar a la verdadera igualdad. En lo personal, tampoco estoy de acuerdo con la anexión de CA a México, primero porque eso nos haría mas dependientes, nuestras riquezas serían absorbidas por la potencia en donde estamos encerrados; pienso que nuestra cultura y economía se debilitarían.

    En cuanto a la milicia. Estoy de acuerdo que en esos tiempos, en donde todo estaba formándose y todos peleaban por la tierra del otro, existiera esto, pues para defender cada quien lo suyo; pero actualmente pienso que eso no hace mas que gastar dinero que debería ser invertido en cosas mas importantes, como la educación; en general pienso que han traído mas cosas negativas que positivas.

    José Julián Martí

    (1853-1895)

    Biografía

    'Filósofos latinoamericanos'

    Político y escritor cubano hijo de padres españoles. Máximo símbolo de las aspiraciones cubanas de independencia y destacado representante de la literatura hispanoamericana.

    A los 16 años de edad, un año después del comienzo de la guerra de los Diez Años, recibió condena a trabajos forzados por su apoyo a los independentistas cubanos. En 1871, debido a su delicado estado de salud, fue deportado a España. En ese país publicó El presidio político en Cuba, el primero de sus numerosos escritos en defensa de la independencia cubana del dominio español, y, al mismo tiempo, completó sus estudios en la Universidad de Zaragoza, licenciándose en Derecho y Filosofía y Letras en 1874.

    Después de la firma de la Paz de Zanjón, regresó a Cuba en 1878, pero fue nuevamente deportado un año más tarde por sus continuas actividades revolucionarias. En 1880 fijó su residencia habitual en la ciudad estadounidense de Nueva York, donde en 1892 fundó el Partido Revolucionario Cubano (PRC) y el órgano de expresión de éste, Patria.

    El 25 de febrero de 1895 hizo público desde la República Dominicana, el denominado Manifiesto de Monte Cristi, una vez que ya habían dado comienzo las hostilidades contra el poder colonial español dos días antes.

    AÑO

    ACONTECIMIENTO

    1853

    Nace el 28 de enero, en La Habana, hijo de padres españoles.

    1869

    Es condenado a trabajos forzados por su apoyo a los independentistas cubanos, durante la guerra de los Diez Años.

    1871

    Su delicado estado de salud le vale ser deportado a España.

    1874

    Obtiene la licenciatura en Derecho y Filosofía y Letras por la Universidad de Zaragoza.

    1877

    Contrae matrimonio en México con Carmen Zayas.

    1878

    Tras la firma de la Paz de Zanjón, regresa a Cuba.

    1879

    Acusado de conspiración, es nuevamente deportado a España.

    1880

    Comienza a residir habitualmente en la ciudad estadounidense de Nueva York.

    1882

    Publica Ismaelillo, un libro de poemas dedicado a su hijo.

    1885

    Aparece su novela Amistad funesta, escrita bajo el seudónimo Adelaida Ral.

    1890

    Los gobiernos de Paraguay, Argentina y Uruguay le nombran cónsul en Nueva York.

    1891

    Ven la luz sus Versos sencillos.

    1892

    Funda el Partido Revolucionario Cubano, del que es elegido principal dirigente, así como su órgano de expresión, Patria.

    1894

    Fracasa su intento de invadir Cuba.

    1895

    Febrero: proclama junto a Máximo Gómez el Manifiesto de Montecristi. Comienza la definitiva guerra de la Independencia cubana contra la dominación española.
    Abril: desembarca en Cuba junto a Gómez.
    Mayo: fallece el día 19, en un enfrentamiento contra tropas españolas, en Boca de Dos Ríos.

    Pensamiento

    José Julián Martí defiende el nacionalismo, algunos de sus principales pensamientos proclamados en el manifiesto de Monte Cristi son:

    • La denuncia del mantenimiento del orden colonial,

    • El sentimiento antiimperialista

    • La apelación a la voluntad nacional

    • La defensa del mestizaje cultural.

    Es profundamente civilista, demócrata, amante de la libertad individual. Precisa que es el establecimiento de las libertades públicas "el único objetivo digno de lanzar un país a la lucha".

    Su influencia política fue reconocida incluso por la Constitución cubana de 1976, la cual recogió en su preámbulo una frase de Martí: “Yo quiero que la ley primera de nuestra República sea el culto de los cubanos a la dignidad plena del hombre”.

    Las facetas de su pensamiento se encuentran interrelacionadas en la tarea que se impone y a la cual dedica toda su vida: unir a todos los cubanos, expulsar al colonialismo español, y fundar una República independiente "con todos y para el bien de todos".

    La ética en Martí, es mediación central y núcleo fundamental en su pensamiento y acción. Y su concepción de la política, como todo quehacer del hombre discurre por cauces ético-morales. Considera que "el gobierno es un encargo popular: dalo el pueblo; a su satisfacción debe ejercerse; debe consultarse su voluntad, según sus aspiraciones, oír su voz necesitada, no volver nunca el poder recibido contra las confiadas manos que nos lo dieron, y que son únicas dueñas suyas."

    La guerra misma, en la concepción martiana no es en sí misma, un fin; sino un medio, para realizar un proceso humano de emancipación. No es una guerra de venganza y odio desinteresado, contra el español, sino contra un sistema colonial que asfixia a su pueblo e impide el progreso de la nación.

    Sobre el amor

    “La única ley de la autoridad es el amor.”

    “Es hombre de veras porque ha amado”

    “El cariño es la llave del mundo”

    “Amor con amor se paga”

    Sobre los derechos humanos

    “Patria es eso, equidad, respeto a todas las opiniones y consuelo al triste.”

    Me parece que me matan un hijo cada vez que privan a un hombre del derecho de pensar.”

    “Han de tenerse en grado igual y sumo la conciencia del derecho propio y el respeto al derecho ajeno: y de éste se ha de tener un sentimiento más vivo y delicado que de aquél.”

    Sobre el socialismo y el comunismo

    “La soluciones socialistas, nacidas de los males europeos, no tienen nada que curar en la selva del Amazonas.”

    “El funcionarismo autocrático abusará de la plebe cansada y trabajadora. Lamentable será y general, la servidumbre.”

    “Asociaciones socialistas envían sus azuzadores profesionales.”

    “Un pensador, Herbert Spencer, señala el riesgo que ciertos pueblos modernos corren de caer en un degradante socialismo.”

    “Los crímenes no aprovechan a la libertad, ni cuadran a estatuas blancas, manos rojas.”

    “De ser siervo de sí mismo, pasaría el hombre a ser siervo del Estado. De ser esclavo de los capitalistas, como se les llama ahora, iría a ser esclavo de los funcionarios. Esclavo es el que trabaja para otro que tiene dominio sobre él.”

    Sobre América y Estados Unidos

    "No es los Estados Unidos ciertamente, donde los hombres osarán buscar sementales para la tiranía".

    "Los Estados Unidos, por ejemplo, preferirían contribuir a la solidez de la libertad de Cuba, con la amistad sincera a su pueblo independiente que los ama, y les abrirá sus licencias todas…"

    “Una gran confederación de los pueblos de la América Latina se necesita”

    Preguntas

    1) Explique el pensamiento de José Martí con sus propias palabras.

    José Martí toma la libertad del hombre como el punto máximo que se tiene que alcanzar. Por esta razón en particular no consideraba al socialismo como la mejor forma de gobierno, ya que lo miraba como un sistema en donde muchas cosas estaban restringidas y especialmente el pensamiento, la crítica, puntos que él buscaba arduamente.

    Considera que el respeto a la dignidad del hombre, el amor y la libertad era todo lo que se necesita obtener una sociedad ideal, ya que siempre relacionó su política con la ética-moral. Y fue siempre defensor de la postura antiimperialista, por hallarse involucrado en el dominio de España sobre toda América Latina. Mantenía firme su pensamiento de que todos los países latinoamericanos necesitaban unirse para poder salir adelante.

    Pienso que Martí en sí, buscaba la independencia de Cuba de la dominación española, y que, en general, estaba de acuerdo con el régimen capitalista, porque este permitía la libertad en todo sentido: de pensamiento, comercial, social etc. Esta es una de las razones por las cuáles admiraba a Estados Unidos. También dijo en uno de sus discursos que esperaba que La Cuba independiente y Estados Unidos pudieran mantener relaciones comerciales.

    2) ¿Esta usted de acuerdo? ¿Por qué?

    Estoy de acuerdo con muchos de sus pensamientos. Pienso que tenemos que inculcar en nuestra sociedad valores morales como el respeto, el amor, la libertad (hasta cierto punto) para que tengamos una buena sociedad. Creo que todos los países de América Latina deberían unirse y ayudarse entre sí para poder salir adelante y dejar atrás el imperialismo que ejercen las grandes potencias sobre nosotros actualmente. En aquel entonces era España, ahora Estados Unidos. Estoy de acuerdo con la defensa de los derechos humanos, y el sentimiento nacionalista que refuerza nuestra identidad nacional y nos hace trabajar por lo nuestro. Martí decía que la guerra, una rebelión es la solución al problema de la dominación entre países, y para mí es cierto. Jamás nos vamos a liberar del dominio estadounidense si lo hacemos por las buenas.

    Pero no estoy de acuerdo en su concepto de socialismo y comunismo. Él decía que “las soluciones socialistas, de los males europeos, no tienen nada que curar en la selva del amazonas” y que la persona va a pasar a ser esclavo de los funcionarios. No pienso que sea así. Primero porque el objetivo de este sistema es el de dar a cada persona lo necesario para vivir, repartiendo todo equitativamente. Esta es una solución para el problema que se esta viviendo en América, en donde unos pocos tienen todo y muchos tienen nada. Segundo que la libertad que el busca es una libertad sin medidas, y de esa forma no se puede vivir. El socialismo me parece una buena opción actualmente para mejorar nuestra situación, siempre y cuando el Estado sea justo y no pase lo que dice Martí: “El funcionarismo autocrático abusará de la plebe cansada y trabajadora. Lamentable será y general, la servidumbre.”

    José Enrique Rodó

    (1871-1917)

    Biografía

    Escritor, novelista, ensayista, crítico literario y filósofo. Nació en Montevideo, Uruguay en 1871. Era miembro de una familia de la clase alta de la burguesía uruguaya. Rodó pasó la mayor parte de su vida en Montevideo. Se dedicó al periodismo, y a la enseñanza, y desarrolló una notable actividad política en una etapa crucial para la América española, al iniciarse el siglo XX.

    Fue uno de los miembros más destacados de la llamada "generación de 1900". En Montevideo, participó en la fundación y edición de La Revista Nacional de Literatura y Ciencias Sociales (1895-1897), desde entonces ejerció la crítica literaria con tolerancia y flexibilidad. En esta misma revista publicó en 1897 un artículo famoso titulado "La vida nueva," en donde dio a conocer los ensayos El que vendrá (1897), La novela nueva (1897) y Rubén Darío, en los que describe los malos sentimientos de los Latinoamericanos durante esta época. Esta obra dio énfasis en los aspectos del amor, la armonía, y la paz. "La vida nueva" también es importante porque trató de encontrar una solución positiva a los problemas de la ciencia durante ese tiempo.

    La obra más famosa de Rodó es Ariel, influida por la Guerra Española-Americana de 1898.  Ariel se escribió en 1900, dos años después de la Guerra.  Esta obra es un "sermón laico" dedicado a la juventud de América, y él la escribió con una visión pesimista del futuro de su país y de la religión. Ariel  es un ensayo que esta basado en la obra The Tempest, obra de teatro escrita por el autor famoso William Shakespeare; los dos protagonistas principales son Ariel y Calibán, que representan la América Latina y los Estados Unidos, respectivamente.

    Hasta cierto punto Ariel es una alegoría de las relaciones que existían entre los Estados Unidos y las naciones de Centro y Sur América a comienzo del siglo XX. Invita a los lectores a reconsiderar diferentes tipos de poderes (económicos, políticos, sociales, culturales) que existen entre los países de América Latina (Ariel) y los exigentes Estados Unidos (Prospero).

    Eventualmente se mudó a Europa para continuar su carrera literaria. El éxito no se repitió con sus obras posteriores: Liberalismo y jacobinismo (1906), Motivos de Proteo (1909), El mirador de Próspero (1913) y las póstumas, El camino de Paros (meditaciones y andanzas) publicada en 1918 y Nuevos motivos de Proteo, en 1927. Murió abandonado en un hotel en Palermo, Sicilia en 1917. Sus restos fueron trasladados a Montevideo en 1920. Rodó es llamado el “Maestro de la juventud”.

    Pensamiento

    Era humanista, democrático y progresista. En sus ensayos trató de desarrollar una filosofía nueva de la ética y crear un espíritu político nuevo. Su credo “reformarse es vivir” ocurre vez y otra vez en sus obras.  Las obras de Rodó están embarazadas con el tema de la reformación.  Fue un ensayista o, como él prefería calificarse, un literato de ideas, un pensador y un estilista. Hasta su muerte ocurrida en plena Primera Guerra Mundial fue internacionalmente reconocido como el «Maestro de América».

    Rodó, tiene una visión de una unificación Española - América. Sostuvo la utopía de la «Magna Patria», Esta decía que la América española debe tender hacia la unidad política. Proponía una nueva dimensión hispánica que fuera más allá de los límites nacionales y se extendiera hasta los de la magna patria, formada por las tradiciones compartidas y el idioma común. Decía que no se trata de repudiar el pasado, sino de hacerlo de todos nosotros, tal como lo hemos hecho con el idioma.

    “Si la magna patria ha de unirse, deberá unirse para la justicia, para asentar la organización de la sociedad sobre bases nuevas, que alejen del hombre la continua zozobra del hambre a que lo condena su supuesta libertad y la estéril impotencia de su nueva esclavitud, angustiosa como nunca lo fue la antigua, porque abarca a muchos más seres y a todos los envuelve en la sombra del porvenir irremediable.” José Enrique Rodó.

    También incluye en sus ensayos la crítica literaria. En su opinión, la crítica literaria alcanzará el status de juicio de arte, siempre que el crítico remita la obra a determinados principios que considera verdaderos y que le permitan aprobarla o desaprobarla, sin confundir el punto de vista con parcialidad.

    Toda su obra fue un intento de dar respuesta al profundo sentimiento de crisis del hombre moderno. Frente a la idea de la decadencia afirmó la regeneración, el renacimiento humanista, un nuevo idealismo capaz de unir el progreso material y el espiritual.

    Nos advirtió que el empuje de las riquezas materiales (el afán de lucro) amenazaba ahogar nuestra ingenua vida espiritual (los buenos sentimientos en la política). Rechazaba las actitudes que sólo se apoyaban en los valores de la bolsa y no en los del espíritu.

    Conjugó el idealismo con la filosofía positivista y la búsqueda del sentido metafísico. Rodó no se muestra contrario al reconocimiento de la excelencia de la labor de críticos extranjeros sino que valora la renovación en el estilo, la idealidad con respecto a la enseñanza y la reflexión sobre su tiempo y sus contemporáneos, así como las manifestaciones estéticas de la literatura española.

    Algunas de sus frases

    “Es el criterio propio lo que conviene adquirir como modelo, de lo que hay de falso e inoportuno en la imitación”

    “Aun aquellos que no somos socialistas, ni anarquistas ni nada de eso, en la esfera de la acción ni en la doctrina, llevamos dentro del alma un fondo, más o menos conciente, de protesta de descontento, de inadaptación contra tanta injusticia brutal, contra tanta hipócrita mentira, contra tanta vulgaridad entronizada y odiosa, como entretejidas en su urdimbre este orden social transmitido al siglo que comienza por el siglo de advenimiento burgués y de la democracia utilitarista.”

    Preguntas

    1) Explique el pensamiento de José Enrique Rodó con sus propias palabras.

    Rodó no era partidario de ninguna posición política; socialismo, capitalismo, anarquismo, etcétera. Él solo sentía un rencor en contra de la injusticia que se estaba viviendo en las colonias españolas, de la explotación del hombre por el hombre. Buscaba con ansias la reforma de esta vida, por otra mejor. Era humanista, es decir que ponía al hombre en el centro de todo. Defendió siempre el criterio propio. Y admite una unión y ayuda mutua entre la España y América literaria, admira los trabajos de los literatos extranjeros.

    También sostuvo la utopía de la Magna Patria, que era la América Española. Nos decía que todos los países latinoamericanos tenemos un pasado y una lengua común, pero ¿Por qué quedarnos solo en esas unificaciones? Tenemos que unirnos en una forma política y económica, ayudarnos entre nosotros y que si lo hiciéramos actualmente seríamos una potencia mundial. Este sentimiento es el expresado en su obra Ariel, al ver que apenas nos libramos de España, tenemos a Estados Unidos encima. Pero con todo esto de la unión de los países latinoamericanos el nos recomienda que nunca nos alejemos de la justicia. Nos pone como ejemplo a EEUU, que en un principio se unieron para independizarse de los ingleses y formaron una república en donde gobernaba el espíritu de justicia, respeto y solidaridad, pero que después fue gobernando el empuje de las riquezas materiales en vez de nuestro ingenuo sentimiento del espíritu, y que no tenemos que permitir que eso pase en la magna patria.

    2) ¿Esta usted de acuerdo? ¿Por qué?

    Sí estoy de acuerdo con el pensamiento de José Enrique Rodó. Porque para poder salir adelante todos los países latinoamericanos tenemos que ayudarnos mutuamente, y tener una cierta conexión política y económica, y si así lo hiciéramos saldríamos adelante como una potencia mundial. Lo único que no veo claro en el pensamiento de Rodó es la forma como él creía que se iban a librar de la influencia española, solo dice que hay que hacer una reforma, y después de eso, ¿qué?, no deja claro el sistema de gobierno a utilizar. Creo que en realidad, a él, eso no le interesa, con tal que la justicia este por delante, y estoy de acuerdo en eso, porque ni el mejor sistema puede funcionar sin la justicia.

    José Froylán de Jesús Turcios

    (1875-1943)

    Biografía

    Escritor, periodista y político hondureño. Nació en Juticalpa, Olancho, el 7 de Julio de 1874 y murió en San José de Costa Rica el 19 de noviembre de 1943. Su padre Froylán Turcios, era un hacendado que había hecho capital exportando vacas a Cuba. Su madre, Trinidad Canelas de Turcios, una matrona de mucho aprecio en la ciudad de Juticalpa, procreó 12 hijos y murió, a la edad de 36 años, el 17 de Enero de 1886. Este suceso le trajo mucha desgracia a la familia, pues el padre no pudo recuperarse de dicha pérdida y falleció cuatro años después, el 19 de septiembre de 1890, lo que produjo la ruina económica para aquellas distinguidas personas.

    Froylán comienza sus estudios elementales en la escuela de la maestra María de Jesús Mejía y los termina en el establecimiento dirigido por el educador cubano Francisco de Paula Flores, al que Turcios recuerda con respeto. Desde su temprana infancia fue muy estudioso. A los nueve años de edad ya era un lector entusiasta de Julio Verne, Balzac, Dumas, Hugo y muchos otros autores. En la biblioteca de su padre, quién tenía también esa misma afición, encontró gran parte de los libros que siempre le entusiasmaron. Cuando agotó esta fuente bibliográfica, no tuvo dificultades en solicitar libros prestados a los amigos de su familia. Él cuenta esta anécdota: “un domingo iba distraído por una calle, y al pasar frente a los balcones de la casa del licenciado Pedro Rivera Bustillo me detuve, mirando, en el fondo de un cuarto, un armario-escritorio de cristales repleto de libros empastados. ¡Qué sorpresa! ¿Pero cómo pudo escaparse a mis búsquedas incesantes aquel magnífico tesoro? Mi corazón latió fuertemente”. No soportando mas la tentación, Froylán entró a la casa y le solicitó algunos libros a su propietario, quién conociéndolo a él y a su familia, no vaciló en prestárselos.

    A partir de 1885 inicia Turcios los estudios secundarios en distintos establecimientos de Tegucigalpa. Cuando el patrimonio familiar estaba casi en cero, con el objeto de proseguir su aprendizaje, busca un empleo. En 1893 comienza a publicar con asiduidad sus primeros versos y algunos cuentos breves, utilizando para ello las páginas de El diario de Honduras, cuyos directores, Alberto Zúñiga y Juan María Cuellar, le brindan apoyo con ese fin. Turcios por tanto no hizo estudios superiores y no existe seguridad de que haya concluido los secundarios.

    Es considerado uno de los intelectuales hondureños más importantes de principios del siglo XX. Hombre de vasta actuación pública fue Ministro de Gobernación, diputado del congreso nacional, y delegado de Honduras ante la Liga de las Naciones de Ginebra. Dirigió el diario “El Tiempo” de Tegucigalpa y fundo las revistas El Pensamiento (1894), Revista Nueva (1902), Arte y Letras (1903) y Esfinge (1905), entre otras Realizó una férrea labor de defensa nacional denunciando la política del Gran Garrote implementada por los Estados Unidos en las regiones centro americana y caribeña. Turcios inició en Honduras en el siglo XX el género del cuento. Fue un cuentista de finos rasgos preciosistas, inclinado a los temas violentos, que elaboró sus relatos como filigranas estilísticas. Sus textos en prosa, se caracterizan por la pericia en la tramas, el valor exacto y a la vez ornamental de las palabras y los finales inesperados que marcaron luego buena parte del género en América Latina.

    Dirigió revistas literarias como Ariel y Esfinge y realizó numerosos viajes. Inscrito en la huella del modernismo, publicó libros donde entremezclaba verso y prosa, conforme el modelo de Rubén Darío, entre los cuales figuran Mariposas (1894), Renglones (1899) y Tierra materna (1911). Se le deben asimismo las novelas Annabel Lee (1906), El vampiro (1910) y El fantasma blanco (1911), los volúmenes de narraciones Hojas de otoño (1905) y Cuentos del amor y de la muerte (1930), y las misceláneas Prosas nuevas (1914) y Páginas de ayer (1932).

    Pensamiento

    Era un escritor y en periodista polémico. Se definía a si mismo como un liberal en el perfecto sentido del vocablo. Su pensamiento político es el de un centroamericano que se sitúa entre los más avanzados de su tiempo y que a la vez recoge lo mejor de una tradición de ideas. Tenía un apego a las plataforma de teórica de José Enrique Rodó que lo podemos ver en su obra “Ariel” una de muchos arielitos.

    Buscaba pensar un espíritu universal de tintes inconfundiblemente latinoamericanos. Recupera el morazanismo como lo más avanzado de la América Central, pues el unionismo entendido por él en forma radical, sin concesiones aparece constantemente a lo largo de su vida y de su obra. De Morazán decía que era el único hombre genial que ha producido Centroamérica.

    Apoyó la causa de Sandino, luchando contra el ejército norteamericano que ocupó Nicaragua en diciembre de 1926. Las ideas estéticas de Turcios son las propias de un creador modernista que reflexiona constantemente sobre el estilo y el arte. Siempre esta buscando claridad, transparencia de formas e ideas y una indiscutible sobriedad estilística no exenta de elegancia. Su obra forma las diversas configuraciones de la cultura y de la sociedad latinoamericana. Los modernistas contribuyeron como nadie a formar una conciencia latinoamericana nueva, contemporánea, a la que alimentaron tanto de los mitos y formas universales del pasado como de los más frescos atisbos del presente, y Froylán Turcios es considerado uno de los más importantes representantes del modernismo en Honduras.

    Es un patriota, lo podemos ver en las ocasiones en que Estados Unidos mandó su ejército para calmar las guerras civiles en Honduras y Turcios promovió como pocos el repudio popular contra el ejército extranjero de ocupación. Es romántico, pero el romanticismo de Turcios es objetivo; trabaja con el mayor número de elementos de la realidad exterior que la realidad interior. Es vigoroso, induce más a la protesta que al llanto. Para él los temas sentimentales constituyen la razón de ser del trabajo literario, son un motivo que le permite expresar opiniones respecto a los conflictos del hombre frente al mundo. Leer a Turcios como romántico es oír una voz que incita a la reflexión seria frente al mundo y la vida.

    Algunas de frases y escritos

    “…al día siguiente ingresó a la capital la tropa invasora, y por primera vez sentí, convertida en hecho, la afrenta con que se humillará a mi patria. Lancé una candente hoja suelta protestando de aquel incalificable abuso de la fuerza bruta”

    “El amor es una embriaguez divina. Es la suprema angustia y la suprema delicia. Amar es sufrir, es sentir dentro del espíritu todas las tempestades y todas las alegrías. Es vivir una vida fantástica, impregnada de tristeza y de perfumes. Es soñar dulces cosas a la hora del crepúsculo y cosas extrañas en la callada medianoche. Es llevar constantemente en las pupilas la imagen de la mujer querida, y en el oído su voz, y en todo el ser la gloria de su encanto”.

    Preguntas

    1) Explique el pensamiento de Froylán Turcios con sus propias palabras.

    Era un definido liberal, es decir que apoyaba la unión Centroamericana por la que tanto luchaba Morazán, de quien decía que era el único hombre genial que había producido Centro América. Trataba de implantar una cultura latinoamericana, que siempre sacó a relucir, además pensaba que la cultura es la que nos definía y distinguía y siempre buscó una que caracterizara a los hondureños y a CA.

    Era un patriota, no permitía que gobiernos extranjeros vinieran a sus anchas a mandar a nuestros pueblos y siempre luchó contra eso (ejemplo: Su apoyo a la causa de Sandino en Nicaragua). No estaba de acuerdo con la dominación que ejercía Estados Unidos o México en CA, decía que si éramos independientes teníamos que luchar por ello.

    En cuanto a la literatura era un romántico-modernista. Pensaba que la literatura no tenía que ser vacía, sino que servía para llevar mensajes de protesta contra las injusticias, pero siempre sin dejar atrás su romanticismo.

    2) ¿Esta usted de acuerdo? ¿Por qué?

    Sí estoy de acuerdo con su pensamiento, según se plantea en este trabajo. Apoyo la unión de Centro América, porque es la única forma de salir adelante siempre con el apoyo de Dios. También pienso que tenemos que mantener nuestra idiosincrasia, nuestra propia cultura porque nos hará que el mismo país se beneficie, ya que sintiéndonos pertenecientes a una nación haremos lo que podemos por ayudarla con la menor influencia extranjera posible. Además estoy de acuerdo con el uso que él le da a su literatura, promueve cambios y denuncia las injusticias.

    Rafael Heliodoro Valle

    (1891-1959)

    Biografía

    Nació en Tegucigalpa, Honduras, el 3 de julio de 1891. Graduado en la Escuela Nacional de Maestros de México (1911), Delegado por la Escuela Normal de México al Congreso de Estudiantes de México (1910) Los estudios secundarios los inició en 1906 en la escuela Normal de varones y el primer trabajo literario lo publicó en el Semanario El Figaro de Adán Canales, se llamó "El Mineral de Cedros".

    Afincado en México desde 1907, fue profesor en la Universidad Nacional Autónoma, y embajador de Honduras en EE UU (1949-1956). Su producción comprende obras históricas, Rafael Heliodoro Valle escribió “El rosal del ermitaño” (1911); “Como la luz del día” (1913); “El perfume de la tierra natal” (1917); “Ánfora sedienta” (1922); “El espejo historial” (1937); “Unísono amor” (1940); “Contigo” (1943); “La sandalia del fuego” y “Poemas” (1954). Su viuda, Emilia Romero, en 1964 publicó la antología “La rosa intemporal” la cual incluye varios poemas que habían permanecido inéditos. Fue secretario de la "Sociedad Pedagógica de Estudiantes", Tegucigalpa (1907) y del "Ateneo de Honduras" (1913). Presidente de "Juventud Hondureña" (1913). Delegado de Honduras al Congreso Internacional de Estudiantes de México (1921).

    Cónsul de Honduras en Mobile, Alabama (1915) y en Belice (1916). Ha sido profesor de Historia de México y General y Literatura Castellana en las Escuelas Nacional de Maestros, Nacional Preparatoria y Secundaria. Es redactor de "Excelsior" y colaborador de "La Prensa". Falleció en la ciudad de México el 29 de julio de 1959.

    Pensamiento

    Es humanista con un sello propio, enriquecido desde la más completa y exigente tradición cultural occidental, y levantado sobre las raíces profundas de América. Él, no solamente tuvo un trato continuo con las ideas; sino que fue capaz de buscarlas allí donde se producían y difundían. Cultivó amistades intelectuales con el espíritu ecuménico de su tiempo. Su herencia permite pensar y fortalecer una tradición intelectual propia; tan necesaria para que las ideas en Honduras puedan trazarse un sentido de futuro, tan urgente para que se unifique y produzca lo que en forma tan aislada hace tanteos por aquí y por allá. Se interesó por el tema del hombre, especialmente en sus dimensiones ética, política, estética o religiosa, sustituyendo la obsesión cientificista del positivismo. Decía que todo lo que contribuyese a engrandecer al hombre aquí y en cualquier parte era bienvenido.

    Valle vivió al ritmo de una doble experiencia: la de su Honduras encaminada muy lentamente hacia las formas de pensamiento y la sensibilidad del siglo veinte y la del cosmopolitismo intelectual latinoamericano, en el que nada le fue extraño, a través del cual buscó y percibió la unidad fundamental de nuestra cultura contemporánea.

    Heliodoro Valle tuvo una visión bastante desencantada de los que había sido nuestra evolución cultural; y, en el pasado, solo encontraba una figura intelectual digna de toda la admiración y el respeto: José Cecilio del Valle. Para expresar sus pensamientos él unía fragmentos desde donde es era posible asirlos y señalar con estas uniones precarias las presuntas direcciones en que las ideas habían de fortalecerse para madurar en nuevas formas de conciencia. Decía que la vinculación con el elemento de lo universal es necesaria para pensar la cultura propia porque nada de lo que se piensa existe jamás en el vacío. Las ideas se presentan siempre en conexiones visibles o invisibles que remiten a la totalidad social.

    En el sentido literario era modernista. Tuvo conciencia de los problemas históricos que se agitaban en su época. Para Valle fue una realidad la afirmación clásica de que “nada de lo que es humano me es ajeno”.

    La obra de Rafael Heliodoro Valle se hace eco de aquello que agita a la conciencia contemporánea y se entremezcla en la variedad de sus elementos. Es también la obra de quién ha tenido que abrir camino al pensamiento del futuro. Por eso, más que ser el historiador que ha escrito el pasado, es el que recoge con espíritu minucioso y detallista lo que ha de alimentar las labores historiográficas de los años y décadas venideras.

    Fue un americanista, nada que tuviera que ver con el lo americano se le escapaba. Puso con frecuencia su pluma sobre temas meramente locales. Tenía una imagen de Honduras nostálgica y algo candorosa, Heliodoro no tiene en su registro otra nota que el paisaje.

    En cuanto a sus ideas políticas viene siendo un liberal doctrinario pero no se presentó nunca como un audaz y energético abanderado de los cambios sociales. Se hecha la tarea de rescatar la memoria nacional. Su espíritu fue cosmopolita en el sentido de que vivió su mundo y su tiempo participando de cuanta preocupación tuviera su validez allí. Logró ser local y universal a la vez. Local por sus raíces, universal por el espíritu que anima su obra, la voluntas de hacer. Siempre buscó la unidad superior de nuestra cultura hispanoamericana y por entender la lengua como el vehículo idóneo para lograrla.

    También mostró interés por la cultura anglosajona, a la que siguió con ojo atento a través de amistades intelectuales, lecturas, traducciones o relaciones institucionales. Es el intelectual hondureño que más lúcida mirada ha lanzado sobre Estados Unidos y su cultura.

    Algunas Frases y escritos

    “Te quiero por pequeña, por suave y sensitiva, ásperamente dulce como la piña de oro que en tus vergeles surge con su miel concentrada como si fuera síntesis del verano moreno en que la abeja hilvana sus sueños con paciencia flotando entre las frutas que los golosos pájaros -los más esplendorosos del mundo- picotean en las cuatro estaciones. ¡Oh melódica Honduras, tierra dulce y pequeña, tierra del rostro indio y del alma española; (...)”

    “No vuelvas al pasado, no mires tu ignorancia, que el futuro está en flor aun puedes cultivarlo; no la gastes, ahórrala, no para el odio estéril; no vuelvas al pasado que te puso en el mapa con horrendos colores, y que manchó tu azul y tu blanco y tus pinos, que son la primavera. La imagen del futuro te aguarda como novio, a tu puerta, sonando su guitarra con el cuello adornado de jazmines insignes”.

    “Centro América tiene en México su vieja casa, más allá de cuatro siglos, construida diariamente con las manos amorosas de la cultura y la amistad"

    Preguntas

    1) Explique el pensamiento de Rafael Heliodoro Valle con sus propias palabras.

    Era humanista y un liberal, y siempre se interesó en el tema del hombre, pero a diferencia de José Cecilio del Valle, excluía a las ciencias, las sustituía por “el hombre”. Buscaba unidad cultural entre todos los países latinoamericanos, y que el idioma nos podía ayudar. Miraba a José Cecilio del Valle como una figura digna de admiración y respeto.

    En el sentido literario era modernista. Siempre estuvo conciente de los problemas que agitaban nuestra sociedad y trataba de plantearlos en sus escritos. Se ven temas meramente locales, por ser un americanista, es decir, que entre sus prioridades estaba América y su situación, tenía un espíritu universal, cosmopolita. Pensaba que tenía que haber una misma cultura en toda Latinoamérica y siempre buscó la conexión entre México y Honduras (ejemplo: Su Tesis de “La anexión de Centro América a México”), tanto cultural como políticamente.

    Tenía una no muy buena imagen de Honduras, y no ve en ella algo más que su paisaje.

    2) ¿Esta usted de acuerdo? ¿Por qué?

    Estoy de acuerdo con su pensamiento liberal, porque en ese tiempo eso quería decir que eran partidarios de la unión Centroamericana y otras ideas y estoy de acuerdo con eso. Pienso que la cultura es un valor que tenemos que cuidar y cultivar y no perderlo y Rafael Heliodoro Valle siempre buscaba una cultura propia de los pueblos latinoamericanos. Pero no estoy de acuerdo con la poca importancia que da a las ciencias, o de su posición de querer unir a Centro América con México, culturalmente, pienso que eso hace que nuestra cultura de desvanezca mas.

    Conclusiones

    Latinoamérica no tiene una filosofía propia sino que siempre viene siendo una copia de la europea, tenemos pocos rasgos que diferencian nuestro pensamiento.

    Los filósofos hondureños tienen muchos pensamientos en común; pero el que más sobresale es el de la unión de las repúblicas de Centro América, como un medio para aumentar nuestro desarrollo.

    Destaca también el sentimiento de todos ellos de promover una unidad a nivel latinoamericano tanto a nivel cultural como económico, por haber tenido un mismo pasado como colonias de España.




    Descargar
    Enviado por:María Elena Padilla
    Idioma: castellano
    País: Honduras

    Te va a interesar