Historia


Fascismo Italiano


EL FASCISMO ITALIANO


1. CRISIS DE LA DEMOCRACIA BURGUESA

A pesar de contarse entre los vencedores de la Primera Guerra mundial, los resultados de los tratados de paz no habían sido favorables para Italia.

La situación económica se agravó notablemente y los obreros del campo y la ciudad se vieron sorprendidos por un alza de precios notablemente superior a la de sus salarios y por un alarmante nivel de paro. La agitación alcanzó altos niveles de radicalización. Los obreros agrícolas no habían visto cumplidas las promesas de reparto de tierras, y organizados en la Federación Nacional de Trabajadores agrícolas llevaron a cabo numerosas ocupaciones de tierras en las zonas de latifundio, organizándose repartos e imponiendo a los propietarios las condiciones de trabajo. En las elecciones generales de 1919 el voto campesino dará grandes éxitos a los socialistas. A partir de la primavera de 1919 se suceden las ocupaciones de fábricas y las huelgas.

El paro y la nostalgia de las actividades heroicas influirán en un amplio número

de ex-combatientes, que no se habían readaptado a la vida civil.

La vida política italiana pasa por tres corrientes fundamentales:

El Partido Socialista Italiano, que cuenta con una fuerza muy importante. Sufre una escisión en 1921, separándose de él los comunistas partidarios de la federación a la Tercera Internacional. La figura más importante será Antonio Gransci, que terminará sus días en las cárceles de Mussolini.

El Partido Popular Italiano, de inspiración católica, pero no confesional, que agrupaba personas de distintas ideologías. Tuvo importancia entre las zonas rurales al proponer una reforma agraria algo radicalizada. Fue el primer partido demócrata-cristiano europeo.

Los partidos gubernamentales que representan a las diversas francciones de la burguesía, divididos desde antes de la guerra en intervencionistas y neutralistas. Estos partidos se habían sucedido en el poder desde 1919.

La Confindustria, organización unitaria de la patronal, aumentó su apoyo financiero a los partidarios de Mussolini, como medio para liquidar la agitación obrera. Estas mismas intimidaciones consiguen que en unas nuevas elecciones, celebradas en mayo de 1921, aumente el número de diputados fascistas. Los votos socialistas tienen también otro motivo para disminuir: las divergencias entre las diversas fracciones del Partido Socialista sobre la amplitud y duración de la lucha revolucionaria.

2. EL SURGIMIENTO DEL FASCISMO

Tras la guerra mundial, una amplia capa de la población se va a encontrar en situación de paro y desarraigada con respecto a sus formas de vida civiles anteriores a la contienda. Es en estas capas sociales donde va a arraigar el nacionalismo. La idea de un todo nacional servirá para borrar las diferencias de la sociedad en la que operan distintas clases con distintos intereses, considerándose que lo que es bueno para la nación es bueno para todos los habitantes. Coincidirá esto con una cierta crisis del pensamiento nacionalista y una hipervaloración de conceptos, como la fuerza, la irracionalidad...

Emprenderá Mussolini el camino que le llevará al poder.

En marzo de 1919 funda los “Fasci di combattimento”. Su fundación coincide con el comienzo del auge del movimiento revolucionario en toda Italia. Destruir el orden burgués establecido. Se propone reconstruir la sociedad y el Estado sobre bases tradicionales y conservando la misma clase dominante.

Los grandes industriales han sido inmediatamente conscientes del papel que contra el movimiento obrero podían tener estas organizaciones. El apoyo de la Confindustria llega con prontitud, y esto, unido a la inercia de las fuerzas policiales y a la complicidad del Estado liberal hace que los “fasci” adquieran rápidos éxitos en sus atentados contra los socialistas y sus razzias contra centros de reunión. Sin embargo, el movimiento fascista tarde en despegar. En noviembre de 1921 Mussolini funa el Partido Nacional Fascista.

Las organizaciones obreras son desmanteladas. Tras el simulacro de la marcha sobre Roma, Mussolini se encuentra al frente del Gobierno.

3. LOS COMIENZOS DEL RÉGIMEN

Mussolini formó un gobierno de minoría fascista, que estaba decidido a tranquilizar a los grandes industriales y a prometer que se mantendrían y afianzarían sus privilegios y se protegerían sus intereses no dejando resurgir el movimiento obrero. Por esto se suprimió el derecho a la huelga.

De 1922 a 1925 la adopción, en lo político, de un Estado totalitario, y en lo económico, de un sistema que favoreciera a los grandes industriales.

En el Parlamento, Mussolini consiguió que se le cedieran plenos poderes durante un año. Durante este período se elaboró una ley electoral, y la Cámara fue obligada a disolverse y a celebrar nuevas elecciones legislativas. Los fascistas obtuvieron una absoluta mayoría. Cuando una voz se deje oír acusando al Gobierno de manipulación electoral, se acabará con ella. Los escasos diputados de la oposición se retiren de la Cámara legislativa. La prensa de la oposición fue reducida y se comenzó a legislar por decreto. Se disolvieron los partidos.

Se hablaba de la importancia de la propiedad privada, y se abandonaban las ideas anteriores de gestión de loas trabajadores en las empresas... Se había llevado a cabo una alianza entre el fascismo y el gran capital que había financiado el movimiento. Hubo una inmediata reforma fiscal que suprimía gravámenes sobre los beneficios de las empresas, las herencias, y que hacía recaer las presiones fiscales sobre los salarios medios y bajos. Los monopolios del Estado se cedieron a particulares, y para estimular las inversiones privadas, se declararon libres de impuestos los capitales extranjeros invertidos a largo plazo.

4. EL ESTADO FASCISTA

El objetivo fundamental se funda en le engrandecimiento de la nación italiana. La primacía del Estado, y del jefe, el Duce, serían las premisas que sirvan de aglutinante a un conjunto de teorizaciones.

El Senado estará nombrado por el rey y los senadores carecerán de poder político; la Cámara de los Diputados se elegirá por plebiscito a partir de una lista de nombres que elegirá el Gran Consejo Fascista, que a su pez los ha elegido, depurándolos, de otra propuesta hecha por las corporaciones. En 1930 se sustituirá por un organismo, denominado “Cámara de los Fascios y las Corporaciones”, compuesta únicamente por dirigentes fascistas, y que tendrá un papel puramente consultivo. El rey mantendrá su corona, pero adoptará un papel puramente representativo. El poder se ejerce directamente por el Duce, que sólo es responsable ante el rey, y que tiene facultades para nombrar y separar a sus ministros. Está asistido por el Gran Consejo Fascista.

El “corporativismo social”, que se traducía en agrupar en un único sindicato a patronos y obreros, que, en común, establecían las negociaciones colectivas que regulaban los salarios y las condiciones de trabajo. En 1934 los sindicatos fueron integrados en grandes corporaciones de las que saldrían los delegados para asistir al Consejo Nacional de Corporaciones, que tendría un papel preponderante en la vida política.

El adoctrinamiento, en especial de la juventud, en la fidelidad y el conocimiento del régimen será una de las realizaciones esenciales.

Para enseñar en las escuelas y universidades se exigía el carné del partido; pero fracasaron los intentos de desarrollo de una cultura fascista. Una importante producción intelectual estuvo en contra del fascismo.

La antigua clase dirigente siguió manteniendo sus posiciones de privilegio. Algunos elementos de las clases medias ocuparon altos puestos en la dirección del Estado, pero no se benefició con ello el conjunto de estas clases. Si bien el nivel de organización y movilización para la conquista de sus derechos fue nula, y en la organización corporativa el Estado siempre apoyó a los grupos patronales.

5. POLÍTICA ECONÓMICA DEL FASCISMO

Mussolini buscará una explosión demográfica, que le servirá de pretexto para sus aventuras imperialistas.

Tres fases se pueden distinguir en la gestión económica:

  • A partir de 1922 a 1927 se toman medidas liberales. Se abandonó la política intervencionista. Se favorecieron las inversiones privadas.

  • A partir de 1926 a 1927, el Duce pretende mantener fuertemente la moneda, y comienza la época de las grandes realizaciones. Período intervencionista. Se limitan las importaciones; se aumenta la producción de trigo hasta el acero, etc. Paliaron de forma importante el paro.

  • La crisis de finales de los veinte tocó a Italia en 1932, y contribuyó a aumentar la política autárquica. Las exportaciones cayeron. Descendió la producción y los salarios; quebraron empresas industriales y financieras. El gobierno se vio obligado a subir los derechos arancelarios y a restringir los intercambios internacionales. El Estado pasó a concentrar muchas industrias en sus manos y a intervenir directamente en la vida económica de la nación.

6. POLÍTICA IMPERIALISTA

La política exterior fue expansionista y agresiva. La guerra de Etiopía, será la expresión máxima de esta política; servirá además para intentar dar una salida a la crisis económica que se había planteado.

Mussolini no deja de expresar la necesidad de que se revisen los tratados de paz. En 1923 la escuadra italiana ocupa Corfú sin el consenso internacional, y es obligada a abandonar la isla.

Tras la guerra de Etiopía, la Sociedad de Naciones impondrá a Italia sanciones económicas. Intervendrá en la guerra civil española favoreciendo a las fuerzas de los sublevados contra el gobierno de la República.

7. LA OPOSICIÓN AL RÉGIMEN MUSSOLINIANO

La oposición democrática, socialista y comunista mantiene unas determinadas tácticas de lucha contra el régimen en le poder. Los luchadores antifascistas acabaron sus vidas desterrados en el sur o en lejanos presidios.

Fuera de Italia, la oposición antifascista fue muy importante. Su principal objetivo consistió en denunciar en le ámbito internacional la naturaleza y métodos del fascismo. Algunos de sus miembros su sumaron a la lucha internacional contra éste. Pero la oposición , bien organizada en el exterior, con sus partidos y prensa funcionando, no tendrá verdadera importancia real dentro del país hasta la invasión de Alemania en 1943. El triunfo de la resistencia constituida y el final de la Segunda Guerra mundial darán paso a un régimen democrático.


8. BIBLIOGRAFÍA

“HISTORIA DEL MUNDO CONTEMPORÁNEO”

ANTONIO FERNÁNDEZ

EDITORIAL VICENS-VIVES

“ENCICLOPEDIA UNIVERSAL SOPENA”

EDITORIAL RAMÓN SOPENA

“CURSO DE HISTORIA DEL MUNDO CONTEMPORÁNEO”

JOSÉ L. GÓMEZ NAVARRO

PROYECTO MT-62 ALHAMBRA



ÍNDICE

EL FASCISMO ITALIANO

1. CRISIS DE LA DEMOCRACIA BURGUESA.......................................................pág. 1

2. SURGIMIENTO DEL FASCISMO........................................................................pág. 2

3. LOS COMIENZOS DEL RÉGIMEN......................................................................pág. 3

4. EL ESTADO FASCISTA........................................................................................pág. 3

5. POLÍTICA ECONÓMICA DEL FASCISMO.........................................................pág. 4

6. POLÍTICA IMPERIALISTA...................................................................................pág. 5

7. LA OPOSICIÓN AL RÉGIMEN MUSSOLINIANO..............................................pág. 5

8. BIBLIOGRAFÍA...........................................................................pág. 6

EL

FASCISMO

ITALIANO

JOSÉ PABLO PÉREZ GARCÍA




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Enviado por:Chusky
Idioma: castellano
País: España

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