Salud


Enfermedades cardiovasculares


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ENFERMEDADES CARDIOVASCULARES

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INTRODUCCIÓN

Según la organización Mundial de la Salud (OMS) dieciséis millones de personas murieron en todo el mundo durante el año 2002 a causas de distintas "enfermedades" cardiovasculares, cerebrovasculares y otras dolencias cardiacas por lo que constituyen la primera causa de muerte en las sociedades industrializadas.

La asociación norteamericana del corazón (AHA) calcula que hay más de 60 millones de norteamericanos que padecen de algún tipo de molestias cardiovasculares. Se cree que, proporcionalmente, la situación es semejante en los países sudamericanos y centroamericanos.

La sociedad occidental, por su gran poder adquisitivo y la gran oferta que encuentra de productos ricos en grasas, está consumiendo aproximadamente un 40% del total calórico en forma de grasa, esta tendencia se ha demostrado perjudicial para la salud, sobre todo si las grasas consumidas son de origen animal.

Las enfermedades cardiovasculares constituyen sin lugar a duda el principal problema de la población adulta de nuestro país, y ocupan el primer lugar como causa de muerte para los mayores de 45 años.

La mala noticia es que las enfermedades del corazón son silenciosas y dan pocas señales de alerta. Así como ciertas formas de cáncer y ateroesclerosis se han relevado con un elevado consumo de grasa, junto con una disminución en el consumo de fibra. Por lo que se recomienda que la cantidad de grasa de la dieta aporte el 30% del total calórico. También se aconseja reducir la ingesta de colesterol a 300mg./día, aunque el nexo entre colesterol y enfermedad cardiovascular no parece demasiado significativo.

El 95% de las grasas contenidas en los alimentos y en el cuerpo humano son triglicéridos, también tenemos los fosfolípidos y el colesterol, que aunque están en pequeñas cantidades son nutrientes cuya misión principal es la producción de energía, (1g grasa produce 9 Kcal.).

La buena noticia es que hoy día hay mucha mas información de la que había antes acerca de los pasos que se pueden tomar para mantener una salud cardiovascular optima. A través de una dieta apropiada, ejercicio regular, y chequeos físicos regulares.

ANATOMIA Y FISIOLOGÍA DEL CORAZÓN

El corazón es un músculo del tamaño de un puño cerrado, está constituido casi exclusivamente de tejido muscular (miocardio) que es capaz de contraerse con fuerza y relajarse, está localizado en el centro del pecho detrás del hueso esternón y frente a la espina dorsal. Este músculo tiene cuatro cámaras con válvulas que regulan el flujo de sangre (de las cámaras del corazón a las arterias pulmonares y aorta). La aorta y otras arterias llevan sangre que sale del corazón y se conectan con pequeños vasos sanguíneos llamados vasos capilares. Éstos se unen para formar venas que llevan la sangre de vuelta al corazón y a los pulmones por la arteria pulmonar. Es decir, cuando el corazón se contrae, envía la sangre que contiene al sistema vascular, cuando se relaja, se llena de sangre en su interior. Al movimiento de contracción se le llama sístole y al de relajación, diástole. (Vargas, 1993).

Según Stuart Ira (2004), una de las funciones principales del sistema cardiovascular o circulatorio es la de transportar de manera continua oxígeno a todas las células del organismo. Este gas es captado desde los alvéolos pulmonares donde es intercambiado por otro gas, el dióxido de carbono, este último es producto del metabolismo celular, el cual es expulsado al aire externo porque no es de utilidad celular. El oxígeno es fundamental en todos los seres vivos, es captado del aire exterior donde es transportado por medio de la hemoglobina de la sangre hasta llevarlo a todas las células que así lo requieran. También es el encargado de transportar nutrientes esenciales para la producción de energía (pp 376).

Si el transporte de oxígeno y de nutrientes esenciales no puede ser distribuido de manera eficaz, se presentará la muerte celular al cabo de unos minutos, y las funciones normales de los órganos empezarán a decaer, estas características fisiopatológicas suelen presentarse en una etapa de paro cardio-respiratorio. Según González (2006) el paro cardio-respiratorio es la interrupción repentina y simultánea de la respiración y el funcionamiento del corazón. Puede producirse el paro respiratorio y el corazón seguir funcionando por unos minutos, o puede darse un paro cardíaco pero casi simultáneamente se presenta el paro respiratorio (pp. 47).

Debe tomarse en cuenta, que en cuanto a las causas del Paro Cardio-respiratorio, no sólo las enfermedades cardiovasculares son agentes causales de dicho colapso cardíaco-respiratorio. Tales acontecimientos, como los accidentes de inmersión, corrientes eléctricas, intoxicaciones, caídas, accidentes por choques, perforaciones en dichos órganos (disparos), asfixia, entre otros, pueden incurrir en un paro cardio-respiratorio.

Uno de los factores de mayor importancia en la disfunción del sistema cardiovascular, concierne a las enfermedades de este sistema, que causan la mayoría de las muertes alrededor del mundo, Costa Rica no es la excepción.

ENFERMEDADES CARDIOVASCULARES

Por enfermedad cardiovascular se entiende la enfermedad del corazón secundaria a aterosclerosis que afecta las arterias coronarias que nutren el corazón y por extensión en especial la aterosclerosis de las arterias cerebrales, de la aorta y de las extremidades inferiores.

Las enfermedades cardiovasculares refieren todas aquellas patologías que atacan los vasos sanguíneos, principalmente las arterias y arteriolas del corazón, llamadas arterias coronarias. El corazón experimenta una discapacidad gradual de las funciones orgánicas de la cual está capacitado, tal como el suministro continuo de oxígeno en el organismo, además del transporte de biomoléculas o nutrientes esenciales a las células de todo el cuerpo. Estas enfermedades se producen principalmente por la acumulación progresiva de compuestos orgánicos, como los depósitos de grasas saturadas y colesterol en el interior de los vasos sanguíneos (arterias coronarias y periféricas), este proceso se produce en mayor o menor medida en todas las arterias del organismo, pero los mayores riesgos para la salud se presentan cuando esas obstrucciones se dan en las arterias encargadas de la irrigación del cerebro y del corazón. (Medicina Humanista, 2007)

Las enfermedades cardiovasculares más estudiadas y de mayor aquejo en la población se encuentran: La arteriosclerosis, la aterosclerosis, dislipidemias como la hipercolesterolemia, infarto agudo de miocardio, isquemia cardiaca, entre otros.

El conjunto de enfermedad arterial aterosclerótica es causa de infartos de diferentes órganos (corazón y cerebro), aneurisma o dilatación anormal de la aorta abdominal y gangrena de las extremidades inferiores.

La enfermedad coronaria es un tipo de enfermedad del corazón. Es causada por el bloqueo gradual de las arterias coronarias. Su corazón obtiene oxígeno y nutrientes de la sangre que fluye a través de estas arterias.

En la enfermedad coronaria, se forman acumulaciones gruesas de tejido graso en el interior de las paredes de las arterias coronarias. Estas acumulaciones se llaman placas. Al engrosarse la placa, disminuye el flujo de sangre. Esto hace que el corazón reciba menos oxígeno. La placa, o un coágulo de sangre que se forma en la placa, pueden bloquear totalmente la arteria. Este adelgazamiento en el espacio interno de las arterias por la placa, y a veces el bloqueo completo, aumentan su riesgo de sufrir un ataque cardíaco y de morir súbitamente.

COLESTEROL

El colesterol es un tipo de grasa que circula por nuestra sangre y que interviene en múltiples procesos de nuestro organismo, como la fabricación de algunas hormonas (como las sexuales o las esteroideas), la digestión de las grasas o la formación de ácidos biliares, y forma parte de todas las membranas celulares.

El organismo tiene dos fuentes principales de colesterol, ambas de similar importancia: la hepática (producción de colesterol en el hígado), y la intestinal (absorción de colesterol biliar y de la dieta en el intestino).

Cuando los niveles están por encima del límite recomendado por los expertos, el colesterol se puede convertir en un factor de riesgo muy importante de padecer enfermedades cardiovasculares.

Existen 2 tipos de colesterol, el LDL y el HDL. El colesterol LDL, conocido como colesterol malo, en concentraciones elevadas se asocia directamente a un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular. El colesterol LDL se deposita en las paredes arteriales, causando la formación de una sustancia dura y gruesa denominada placa de ateroma. Con el paso del tiempo estas placas de colesterol hacen que las paredes de las arterias se engrosen y se estrechen, dando lugar a la aterosclerosis. Esto debido a que la este tipo de colesterol se encarga de transportar el colesterol desde el hígado hacia las arterias.

El colesterol HDL, denominado también colesterol bueno, previene la aterosclerosis al ser capaz de extraer el colesterol de las paredes arteriales y eliminarlo a través del hígado. En otras palabras cumple la acción contraria al anterior, ya que este lo que hace es una especie de barrido del colesterol de todo el organismo hacia el hígado donde se puede eliminar.

Las cifras recomendadas:

Según los últimos estudios realizados, cuántos más factores de riesgo de sufrir un problema cardiovascular tenga una persona, más debe reducir sus niveles de colesterol LDL o (colesterol malo). O lo que es lo mismo, cuanto más bajo sea el nivel de colesterol malo mejor. Las cifras recomendadas dependen de los factores de riesgo de cada individuo:

  • Nivel de riesgo ALTO O MUY ALTO (Personas con problemas coronarios o con riesgo equivalente): El colesterol LDL debe ser menor de 100 mg/dl.

  • Nivel de riesgo MODERADO (Dos o más factores de riesgo: tabaquismo, hipertensión, antecedentes familiares coronarios, etc.):

  • El colesterol LDL debe ser menor de 130 mg/dl.

  • Nivel de riesgo BAJO (Uno o ningún factor de riesgo): El colesterol LDL debe ser menor de 160 mg/dl

En general, las cifras consideradas como deseables para personas que no presenten factores de riesgo deberían situarse por debajo de 200mg/dl en adultos y de 170mg/dl en los niños.

Arteriosclerosis

La arteriosclerosis es un síndrome caracterizado por el depósito de sustancias lipídicas, llamado placa de ateroma, en las paredes de las arterias de mediano y grueso calibre.

Clásicamente, en el término arteriosclerosis se incluyen tres entidades diferentes: aterosclerosis, esclerosis de la media o enfermedad de Mönckeberg y arteriolosclerosis.

La arteriosclerosis es una enfermedad caracterizada por el desarrollo de múltiples lesiones focales, llamadas placas de ateroma, en la pared de la aorta y las arterias de gran y mediano calibre. Esas placas están compuestas por lípidos, como el colesterol, y por células inflamatorias, como los monocitos, que desde la sangre penetran en el interior de la pared arterial. Una vez dentro de ésta, los monocitos atrapan el colesterol y se convierten en células espumosas. Estas células provocan una serie de cambios en la pared que provocan el crecimiento desordenado de las células musculares de ésta y la formación de tejido fibroso. Al final, la placa está compuesta por una mezcla de elementos distintos, lo que le confiere su denominación de ateroma, que significa engrudo.

Se ha calculado que en el año 2020 la arteriosclerosis será la primera causa de mortalidad en todo el mundo. A ello contribuirán de forma determinante dos factores que facilitan su desarrollo: de un lado, el progresivo envejecimiento de la población mundial y, de otro lado, la incorporación de los hábitos de vida occidentales (principalmente, la alimentación excesivamente rica en grasas y calorías, y la vida desordenada y estresada que comporta el ejercicio profesional y laboral) al tercer mundo.

Para que se inicie la formación de una placa de ateroma es preciso que dentro de la pared arterial penetren sustancias y células que están en la sangre. En condiciones normales, eso no sucede porque la sangre está separada de la pared arterial por una barrera que es el endotelio. Actualmente, se sabe que diversos factores pueden dañar de tal modo el endotelio que éste deja de actuar como una barrera. Esos factores son conocidos como factores de riesgo de aterosclerosis.

La aterosclerosis es la forma más frecuente de la arteriosclerosis, y consiste en un endurecimiento producido en las paredes arteriales por cualquier causa, como puede ser el paso de la edad que hace que se vaya perdiendo elasticidad en los tejidos.

FACTORES DE RIESGO

Factores NO modificables:

      • SEXO: los hombres tienen más riesgo que las mujeres, en éstas aumenta durante la menopausia al cambiar los niveles estrogénicos

      • EDAD: al aumentar la edad, aumenta el riesgo de aterosclerosis porque se ha estado más tiempo expuesto a otros factores de riesgo

      • ANTECEDENTES FAMILIARES: cuando un progenitor u hermano padece una enfermedad cardiovascular (en mujeres antes de los 65años y en hombres antes de los 55 años), el riesgo de padecerla por el sujeto es mayor.

Factores modificables:

      • TABAQUISMO: la nicotina y el CO aumentan el riesgo cardiovascular ( en la mujer aumenta si toma anovulatorios)

      • DIABETES: tiene más frecuencia de enfermedad cardiovascular, en ellos aparece de forma más precoz e intensa

      • HIPERTENSION ARTERIAL (HTA): potencia la lesión vascular, si se controla disminuye el riesgo

      • OBESIDAD: se asocia con el sobrepeso superior al 30%, además se suele asociar a otros factores de riesgo y “los factores de riesgo no se suman, sino que se multiplican”

      • SEDENTARISMO: las personas con una vida poco activa son más propensos a sufrir una muerte súbita por una complicación de la aterosclerosis.

PREVENCIÓN

La mejor manera de combatir la aterosclerosis radica en su prevención primaria. Para ello se debe actuar a tres niveles. En primer lugar hay que llevar una vida sana, lo que significa:

  • Seguir una dieta cardiovascular saludable (evitando las grasas animales y el exceso de calorías, y favoreciendo el consumo de aceite de oliva, verduras y frutas).

  • Realizar ejercicio físico habitualmente (cada día se debe caminar no menos de una hora o correr suave, nadar y andar en bicicleta un mínimo de media hora).

  • Eliminar el consumo de tabaco de manera total y definitiva.

  • Procurar eliminar las situaciones estresantes de la vida cotidiana o, cuando ello no haya sido posible, vivirlas con una perspectiva positiva y mínimamente perjudicial.

En segundo lugar, las personas con hipertensión arterial y/o con hipercolesterolemia han de seguir tratamiento farmacológico (fármacos (antihipertensivos y fármacos (hipolipemiantes) de forma continuada para mantener cifras de presión arterial por debajo de 130/85 milímetros de mercurio (mmHg) y cifras de colesterol inferiores a 200 y miligramos por decilitro (mg/dl).

En tercer lugar, en personas con ciertas alteraciones se podrán instaurar tratamientos específicos según el criterio de su médico (por ejemplo, en las mujeres con predisposición a la aterosclerosis que han tenido la menopausia podría valorarse el tratamiento hormonal sustitutivo).En los casos en los que ya han surgido manifestaciones clínicas el médico instaurará el tratamiento pertinente para cada caso individualizado, a la par que instaurará medidas de prevención secundaria (por ejemplo, aspirina a bajas dosis) destinadas a impedir la aparición de nuevas complicaciones.

RECOMENDACIONES

Para bajar los niveles de colesterol LDL es esencial una dieta baja en grasas saturadas y colesterol.

Los pacientes que sufren de enfermedades del corazón o aquellos que no pueden reducir su colesterol LDL con estas restricciones deben limitar aún más su consumo de grasas saturadas, a un máximo de un 7 % de las calorías totales.

Una dieta para reducir el colesterol debe consistir principalmente en verduras y frutas; panes integrales, cereales, arroz, legumbres y pastas; productos lácteos descremados o parcialmente descremados; y carne magra, pollo sin piel y pescado.

Otros cambios esenciales en el estilo de vida para reducir los niveles de LDL son el aumento del nivel de actividad física, la deshabituación a la nicotina y el control del peso.

BIBLIOGRAFÍA

Libros

  • Ira, Stuart (2004). Fisiología Humana. México D.F, México: Editorial Mc Graw Hill.

  • Vargas, Zeidy (1993). Manual de Asistencia de Primaros Auxilios. San José, Costa Rica: Cruz Roja Costarricense: PRONEM, DINACAP.

  • González, Sunny (2006). Manual de Primeros Auxilios. San José, Costa Rica: Universidad de Costa Rica.

Páginas Web

  • Medicina Humanista. Enfermedades Cardiovasculares. Recuperado en diciembre, 2007 de

http://medicinahumanista.blogspot.com/2007/01

  • MedlinePlus, Enciclopedia Médica. Cardiopatía coronaria. Recuperado en diciembre, 2007 de

http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/ency/article]

  • Organización Mundial de la Salud. Enfermedades cardiovasculares. Recuperado en diciembre, 2007 de

http://www.who.int/mediacentre/factsheets/fs317/es/index.html

  • Medicina Humanista. Enfermedades Cardiovasculares. Recuperado en diciembre, 2007 de

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Enviado por:Marco Leitón Hidalgo
Idioma: castellano
País: Costa Rica

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