Literatura


El Quijote de la Mancha; Miguel de Cervantes Saavedra


I. Biografía de Miguel De Cervantes Saavedra

(1547-1616), dramaturgo, poeta y novelista español. Nació en Alcalá de Henares (Madrid), probablemente el 29 de septiembre de 1547. Pasó su adolescencia en varias ciudades españolas (Madrid, Sevilla) y con poco más de veinte años se fue a Roma al servicio del cardenal Acquaviva. Recorrió Italia, se enroló en la Armada española y en 1571 participó con heroísmo en la batalla de Lepanto, donde comienza el declive del poderío turco en el Mediterráneo. Allí Cervantes resultó herido y perdió el movimiento del brazo izquierdo, por lo que fue llamado el Manco de Lepanto. En 1575, cuando regresaba a España, los corsarios le apresaron y llevaron a Argel, donde sufrió cinco años de cautiverio (1575-1580).

Liberado por los frailes trinitarios, a su regreso a Madrid encontró a su familia en la ruina. Se casa en Esquivias (Toledo) con Catalina de Salazar y Palacios. Arruinada también su carrera militar, intenta sobresalir en las letras. Publica La Galatea (1585) y lucha, sin éxito, por destacar en el teatro. Sin medios para vivir, marcha a Sevilla como comisario de abastos para la Armada Invencible y recaudador de impuestos. Allí acaba en la cárcel por irregularidades en sus cuentas. Después se traslada a Valladolid. En 1605 publica la primera parte del Quijote. El éxito dura poco. De nuevo es encarcelado a causa de la muerte de un hombre delante de su casa. En 1606 regresa con la Corte a Madrid. Vive con apuros económicos y se entrega a la creación literaria. En sus últimos años publica las Novelas ejemplares (1613), el Viaje del Parnaso (1614), Ocho comedias y ocho entremeses (1615) y la segunda parte del Quijote (1615). El triunfo literario no lo libró de sus penurias económicas. Dedicó sus últimos meses de vida a Los trabajos de Persiles y Segismunda (de publicación póstuma, en 1617). Murió en Madrid el 22 de abril de 1616 y fue enterrado al día siguiente.

Cervantes centró sus primeros afanes literarios en la poesía y el teatro, géneros que nunca abandonaría. Su obra poética abarca sonetos, canciones, églogas, romances, letrillas y otros poemas menores dispersos o incluidos en sus comedias y en sus novelas. También escribió dos poemas mayores: Canto de Calíope (incluido en La Galatea) y Viaje del Parnaso (1614).

En la prosa narrativa Cervantes empezó escribiendo una novela pastoril que fue su primer libro publicado, con el título de Primera parte de La Galatea (1585). Como en otras novelas de su género, los personajes son pastores convencionales que cuentan sus penas amorosas y expresan sus sentimientos en una naturaleza idealizada. La Galatea se compone de seis libros en los cuales se desarrollan una historia principal y cuatro secundarias. La principal refiere los amores de los pastores Elicio y Galatea, a la cual su padre quiere casar con el rico Erastro. Y las secundarias añaden otros tantos episodios amorosos protagonizados también por pastores.

Entre 1590 y 1612 Cervantes fue escribiendo una serie de novelas cortas que, después del reconocimiento obtenido con la primera parte del Quijote en 1605, acabaría reuniendo en 1613 en la colección de Novelas ejemplares. Teniendo en cuenta las dos versiones conservadas de Rinconete y Cortadillo y de El celoso extremeño, se cree que Cervantes introdujo en ellas algunas variaciones encaminadas a la ejemplaridad social, moral y estética de estas novelas o narraciones cortas, y después las ordenó de acuerdo con un criterio artístico que obedece a la visión orgánica del conjunto. En el prólogo Cervantes proclama su novedad: "Yo soy —dice— el primero que he novelado en lengua castellana". En efecto, así fue, pues en la literatura española no había entonces tradición de novela corta; las que circulaban eran adaptaciones o traducciones de los novellieri italianos. Cervantes españolizó el género, lo ennobleció y creó la novela corta en la literatura castellana.

Amores y aventuras, disfraces y casualidades, engaños y reparaciones entre gentes de la nobleza configuran las intrigas de Las dos doncellas y La señora Cornelia. Los engaños de las doncellas Teodosia y Leocadia componen una intriga con temas pastoriles y técnicas de la novela bizantina. La señora Cornelia, localizada en ambientes estudiantiles y de la alta sociedad de Bolonia, cuenta la azarosa historia de amor de Cornelia hasta su boda con el duque de Ferrara. Y de tales ambientes nobiliarios descendemos a la vileza moral, la marginación social, la estafa y la corrupción en El casamiento engañoso y El coloquio de los perros. Como otro burlador burlado, el alférez Campuzano sale de su casamiento engañado con sus mismas artimañas y enfermo de sífilis. Esta pálida sombra del desengaño barroco es buena imagen de la caída del ideal cervantino del heroico soldado de Lepanto. El interés del Coloquio se centra en tres aspectos: la corrupción social denunciada por Berganza en la narración de su vida, las cínicas disquisiciones filosóficas de ambos perros sobre las convenciones sociales y la maldad en el mundo, y la integración de teoría y práctica narrativas que constituyen la renovación formal más importante en el curso de la novela occidental. He aquí el magistral cierre de la colección de doce historias en once novelas, porque El casamiento y El coloquio forman una sola: ambas comparten el tema del engaño-desengaño, y El casamiento es el marco en el que se introduce El coloquio, que el sifilítico alférez Campuzano escribió mientras se curaba en el hospital y que es ahora un diálogo leído por su amigo el licenciado Peralta.

II. Clasificación de la obra

Don Quijote de la Mancha cumple con las características de la novela, las cuales mencionaré en seguida, aunque también cumple con algunas de la pieza dramática y la obra en verso. Pero en su mayoría es una novela.

La novela:

% Suele tener una extensión y complejidad mayores que el cuento. Se caracteriza por la libertad: este subgénero no tiene límites y puede contener desde diálogos con clara intención dramática o teatral hasta fragmentos líricos o descriptivos. Los subgéneros novelescos son numerosísimos: novela histórica, de aventuras, rosa, policíaca, de acción, negra, psicológica, de caballerías, de amor, de tesis, social... La única condición es que esté escrita en prosa y que en ella intervengan unos personajes sobre los que se nos diga algo.

% Por acción entendemos la historia que se va desarrollando ante nuestros ojos a medida que leemos la novela. En una narración se suelen suceder varias acciones a la vez, las primarias y las secundarias, que, entretejidas entre sí, forman el cuerpo de la novela o argumento.

% Por acción entendemos la historia que se va desarrollando ante nuestros ojos a medida que leemos la novela. En una narración se suelen suceder varias acciones a la vez, las primarias y las secundarias, que, entretejidas entre sí, forman el cuerpo de la novela o argumento.

% El desarrollo argumental de una narración suele evolucionar a través del tiempo. Este tiempo de la novela no tiene por qué presentarse de manera lineal u ordenada, sino que puede ser alterado libremente por el autor con finalidad estilística, argumental o estructural.

% En relación con el tiempo en la novela no podemos olvidar el concepto duración. Un acontecimiento puede durar lo mismo en una narración que en la vida real, pero también puede ser resumido de manera que, por ejemplo, varios años transcurran en pocas páginas, o dilatado en el tiempo, y así un hecho mínimo puede ser descrito y analizado con detenimiento abarcando un gran número de páginas.

% La situación física en que se encuentran los personajes es uno de los recursos principales que los autores utilizan para contextualizar las historias narrativas. Una novela se puede desarrollar en un lugar o en varios, en espacios interiores o exteriores, rurales o urbanos.

% Los personajes son las personas, reales o ficticias, que desarrollan la acción narrada por el novelista. Los personajes principales o centrales son denominados protagonistas, mientras que los demás son secundarios

% En una novela hay varios tipos de personajes:
- Agente de la acción: lleva el peso del desarrollo argumental y es el centro de atención de la historia narrada.
- Elemento decorativo: no aporta nada fundamental a la acción, sino que su función se limita a dar credibilidad a las acciones que le suceden al protagonista. Suelen formar parte de las escenas de grupo.
- Portavoz de la ideología del autor: a través de un personaje, que puede ser protagonista o secundario, el narrador se introduce intelectualmente en la acción y aporta su punto de vista personal al desarrollo argumental.

% Los personajes de una novela se pueden presentar ante el lector de distintos modos:
- Por sí mismos. Este recurso suele aparecer en las novelas autobiográficas.
- A través de otro personaje.
- A través del narrador.
- De forma mixta, combinando las tres formas anteriores.

% Por narrador se entiende la voz que cuenta lo que sucede en la novela. El autor puede narrar los hechos directamente, o bien elegir a un personaje que, con más o menos protagonismo, vaya contando desde dentro la historia. Además, en una misma narración puede haber distintos tipos de narradores, es decir, voces diversas que aportan puntos de vista distintos.

Como vemos, estas características son de la novela, y El Ingenioso Hidalgo Don Quijote De La Mancha cumple con ellas.

III. Las mujeres del Quijote

Cervantes, admite una lectura paralela a través de estas figuras femeninas. Desde los episodios más altos, en Sierra Morena, como en los más profundos, en la cueva de Montesinos, todos los sentimientos se encuentran elaborados, pensados, contrastados y razonados por este lúcido gineceo que transforma la parodia de la novela de caballerías, y aun la novela de caballerías, en una novela moderna de debate. Son mujeres inquietas, errantes, temperamentales, apasionadas, divertidas, graciosas, socarronas, sentimentales, independientes, hoscas, compasivas, irónicas, vulnerables y fuertes. Y las orejas de don Quijote entran en este gineceo hasta saber muy bien la lengua de las mujeres en su cordial maniobra de aproximación. Rosa Rossi nos habló sabiamente del lado femenino de Cervantes, que lleva tanto a su autor como a sus sujetos deseantes, empezando por don Quijote, y siguiendo por las más radicales, Marcela o Maritornes, a hacer su voluntad. El Quijote interpreta esta nueva sentimentalidad, logrando invertir el sentido de la historia central. Se intercambian, entonces, los papeles de los personajes, desplazándose el punto de atención de la obra a los momentos menos militares y más tiernos. Nace una subjetividad nueva, independiente de su sexo, y en particular femenina, que no se puede silenciar. Cervantes pone a las mujeres a hablar desde el sofá del psicoanálisis en una época contrarreformista, en un mundo en el que sólo imperaban los modelos del cristianismo viejo y de la sociedad estratificada y patriarcal.


'El Quijote de la Mancha; Miguel de Cervantes Saavedra'
El ama

Es una mujer que pasa los 40 años, físicamente poco agraciada, pero personalmente muy buena. Es el ama de llaves de Don Quijote de la Mancha y se preocupa mucho por lo que le sucede y hace lo posible por remediar sus problemas.

Ej.

-¿Qué le parece a vuestra merced, señor licenciado Pero Pérez que así se llamaba el cura-, de la desgracia de mi señor? Tres días que no parecen él, ni el rocín, ni la adarga, ni la lanza, ni las armas. ¡Desventurada de mi!, que me doy a entender, y así es ello la verdad como nací para morir, que estos malditos libros de caballerías que él tiene y suele leer tan de ordinario le han vuelto el juicio; que ahora me acuerdo haberle oído decir muchas veces, hablando entre si que quería hacerse caballero andante, e irse en busca de aventuras por esos mundos. Encomendados sean a Satanás y barrabás esos libros, que así han echado a perder el más delicado entendimiento que había en toda la Mancha. (I cap 5)

También se refleja muchísimo su preocupación por Don Quijote cuando estaban quemando los libros, ella colaboraba por el bien de él.

La sobrina:


Tiene unos 17 años de edad.

Se nota que quiere mucho a su tío y busca lo mejor para él. En los capítulos que aparece, siempre se le ve intentando convencer a su tío de que se quede en casa.

Se nota que es inocente e ingenua, pero comprendía perfectamente por lo que pasaba su tío, pero no entendía por qué los demás reaccionaban de una mala manera con su tío, como si le tuvieran, en el fondo, miedo a lo distinto, como se observa en el acto de la quema de los libros realizada por el cura y el barbero. No fueron capaces de aceptarlo como era, y quisieron cambiarlo quemando lo más preciado que tenía (dentro de la poca cordura que le quedaba): sus libros.

Debido a esto la sobrina canaliza todo su cariño en su tío dándole fuerzas para seguir adelante con su sueño.

Su función en la obra es, a fin de cuentas, alentar, apoyar y demostrar cariño a su tío, dándole fuerzas para seguir el camino que había escogido.

Su objetivo es ser el aceite que mantiene encendida una lámpara; ante tanta adversidad, ser el pilar de apoyo moral frente a los ideales, por más fantásticos que éstos sean.

Dulcinea del Toboso:

Es la eterna ausente. Solo aparece en las continuas alusiones de Don Quijote. Es una recreación literaria hecha por Cervantes de las damas de caballería. Su verdadero nombre es Aldonza Lorenzo.
Es el símbolo o mito literario de la mujer ideal, aunque sea partiendo de un ser real. Cervantes deja su figura en una misteriosa penumbra respecto a su auténtica realidad.
Físicamente, tiene un aspecto casi varonil, pero a los ojos del Quijote, es la mujer más bella del mundo.
Su función en la obra no es más que ser el amor platónico e idealizado de nuestro caballero andante, y su objetivo es el mostrar la imagen, también idealizada, que se tenía de las doncellas descritas en los libros de caballería.

Teresa Panza:

Irónica, sarcástica, enérgica.

Esposa de Sancho. Mujer gorda fea e interesada. En los diálogos del libro vemos que siempre está pidiendo cosas a Sancho.

Llegó Sancho a su casa tan regocijado y alegre, que su mujer conoció su alegría a tiro de ballesta; tanto, que la obligó a preguntarle:

-¿Qué traés, Sancho amigo, que tan alegre venís?

A lo que él respondió:

-Mujer mía, si Dios quisiera, bien me holgara yo de no estar tan contento como muestro.

-No os entiendo, marido -replicó ella-, y no sé qué queréis decir en eso de

que os holgáredes, si Dios quisiera, de no estar contento; que, maguer

tonta, no sé yo quién recibe gusto de no tenerle.

-Mirad, Teresa -respondió Sancho-: yo estoy alegre porque tengo determinado de volver a servir a mi amo don Quijote, el cual quiere la vez tercera salir a buscar las aventuras; y yo vuelvo a salir con él, porque lo quiere así mi necesidad, junto con la esperanza, que me alegra, de pensar si podré hallar otros cien escudos como los ya gastados, puesto que me entristece el haberme de apartar de ti y de mis hijos; y si Dios quisiera darme de comer a pie enjuto y en mi casa, sin traerme por vericuetos y encrucijadas, pues lo podía hacer a poca costa y no más de quererlo, claro está que mi alegría fuera más firme y valedera, pues que la que tengo va mezclada con la tristeza del dejarte; así que, dije bien que holgara, si Dios quisiera, de no estar contento.

-Mirad, Sancho -replicó Teresa-: después que os hicistes miembro de caballero andante habláis de tan rodeada manera, que no hay quien os entienda.

-Basta que me entienda Dios, mujer -respondió Sancho-, que el es el entendedor de todas las cosas, y quédese esto aquí; y advertid, hermana, que os conviene tener cuenta estos tres días con el rucio, de manera que esté para armas tomar: dobladle los piensos, requerid la albarda y las demás jarcias, porque no vamos a bodas, sino a rodear el mundo, y a tener dares y tomares con gigantes, con endriagos y con vestiglos, y a oír silbos, rugidos, bramidos y baladros; y aun todo esto fuera flores de cantueso si no tuviéramos que entender con yangüeses y con moros encantados.

-Bien creo yo, marido -replicó Teresa-, que los escuderos andantes no comen el pan de balde; y así, quedaré rogando a Nuestro Señor os saque presto de tanta mala ventura.

-Yo os digo, mujer -respondió Sancho-, que si no pensase antes de mucho tiempo verme gobernador de una ínsula, aquí me caería muerto.

-Eso no, marido mío -dijo Teresa-: viva la gallina, aunque sea con su pepita; vivid vos, y llévese el diablo cuantos gobiernos hay en el mundo; sin gobierno salistes del vientre de vuestra madre, sin gobierno habéis vivido hasta ahora, y sin gobierno os iréis, o os llevarán, a la sepultura cuando Dios fuere servido. Como ésos hay en el mundo que viven sin gobierno, y no por eso dejan de vivir y de ser contados en el número de las gentes. La mejor salsa del mundo es la hambre; y como ésta no falta a los pobres, siempre comen con gusto. Pero mirad, Sancho: si por ventura os viéredes con algún gobierno, no os olvidéis de mí y de vuestros hijos. Advertid que Sanchico tiene ya quince años cabales, y es razón que vaya a

la escuela, si es que su tío el abad le ha de dejar hecho de la Iglesia. Mirad también que Mari Sancha, vuestra hija, no se morirá si la casamos; que me va dando barruntos que desea tanto tener marido como vos deseáis veros con gobierno; y, en fin en fin, mejor parece la hija mal casada que bien abarraganada.

-A buena fe -respondió Sancho- que si Dios me llega a tener algo qué de gobierno, que tengo de casar, mujer mía, a Mari Sancha tan altamente que no la alcancen sino con llamarla señora.

La molinera y la Tolosa:

Las primeras interlocutoras del camino son las dos damas-prostitutas, la Tolosa y la Molinera, que asisten a la ceremonia en la venta en que don Quijote es armado caballero. De la primera, dijo el narrador: "Ella respondió con mucha humildad que se llamaba la Tolosa... y que dondequiera que ella estuviese le serviría y le tendría por señor. Don Quijote le replicó que, por su amor, le hiciese merced que de allí adelante se pusiese don y se llamase 'doña Tolosa'...". Lo mismo sucede con la compañera, "a la cual también rogó don Quijote que se pusiese don y se pusiese 'doña Molinera". Es, evidentemente, una de las primeras parodias de la novela, pero muy significativa en tanto que todavía no ha aparecido el escudero

Marcela:

Marcela es una mujer muy bella físicamente. Aunque es pasiva, calmada, recatada, los compañeros de Crisóstomo creen que tiene muchos amantes, que es una mala mujer y que es la causante de la muerte de Crisóstomo.

El tío de Marcela quería casarla, pero ella rechazaba a todos los hombres que se le acercaban.

Cuando estaban en el entierro de Crisóstomo, ella llegó a aclarar todo:
- Hizóme el cielo, según vosotros decís, hermosa, y de tal manera, que, sin ser poderosos a otra cosa, a que me améis os mueve mi hermosura, y por el amor que me mostráis, decís, y aún queréis, que esté yo obligada a amaros. Yo conozco, con el natural entendimiento que Dios me ha dado, que todo lo hermoso es amable; mas no alcanzo que, por razón de ser amado, esté obligado lo que es amado por hermoso a amar lo que le ama. (I cap 14)

Así prosigue sus explicaciones Marcela, dando a entender que es absurdo corresponder a cuanto amor le ofrecen.

Maritornes:

Moza de origen asturiano. Ancha de cara, llana de cogote, de nariz achatada, de un ojo tuerta y del otro no muy sana. Era muy gibada.

La Torralba

Mujer de condición caritativa y se dolía de las calamidades de su prójimo. Ella ayudó a curar a Don Quijote.

Lucinda:

Mujer hermosa y discreta. Procedente de Andalucía, de linaje noble, padres ricos. Sencilla y buen ánimo.

Dijo Don Fernando que en Luscinda se encerraban todas las bellezas y entendimiento que en todas las mujeres estaban repartidos.

Estaba enamorada de Cardenio y quería casarse con él. Pero por cuestiones de los padres no lo pudo hacer y tuvo que casarse con Don Fernando, lo cual la acongojó mucho. Tiempo después se encontró con Cardenio en una venta y volvieron a ser enamorados ya que Don Fernando aceptó.

Dorotea:

Labradora, vasalla de su padre, que los tenía muy ricos, y era tan hermosa recatada, discreta y honesta, que nadie que la conocía se determinaba en cuál destas cosas tuviese mas excelencia ni mas se aventajase.

Cervantes consigue a través de la oreja de don Quijote hacernos llegar estos impactos. Dejar escrito el autocontrol de Dorotea, sus razonamientos acerca del amante traidor, su sangre fría para reclamar por la vía de la lógica y de la emoción perfectamente conjugadas su derecho, es una prueba que nos ofrece la literatura de una arraigada verosimilitud.

Camila:

Procedente de la provincia de Toscaza de la ciudad de Florencia en Italia.

Esposa de Anselmo debido a que Lotario ayudó para que así fuese. Muy agradecida con el cielo y con Lotario, por cuyo medio tan bien le había venido.

Anselmo, quería poner a prueba a su mujer, Camila, haciendo que su amigo Lotario ofreciera a Camila regalos y joyas para que se probase así la fidelidad que tenia Camila hacia su esposo.

Lotario en un primer momento se niega a hacer tal cosa ya que consideraba que Camila era una mujer muy pura y muy honrada como para acceder a estas ofrendas de Lotario y que lo único que se conseguiría con este plan es demostrar la honestidad de Camila y la poca confianza que tiene Anselmo hacia su mujer.

Lotario tras ver que su amigo estaba dispuesto a utilizar a otra persona para poner en práctica su plan accede el mismo. Pero lo que hace es contarle a Anselmo conversaciones ficticias en las cuales Camila no accede a las ofrendas de Lotario. Anselmo al darse cuenta de este amenaza de nuevo a Lotario con buscar a otro, pero Lotario le jura que volverá a poner en practica el plan que había ideado Anselmo con anterioridad para lo cual Anselmo deja solos a Camila y a Lotario durante 8 días para que Lotario pusiera en marcha el extraño plan.

Tras esos días de incertidumbre Camila se da cuenta de los sentimientos de Lotario y le escribe una carta a su marido contándole lo que esta sucediendo, Anselmo viendo que el plan funciona responde a su esposa diciéndole que no se preocupara de nada que él llegaría pronto.

Cuando este llega le pregunta a su amigo Lotario que es lo que sucede y este le confirma la pureza de su mujer la cual no cesa de rechazar sus proposiciones.

Lotario le cuenta a Anselmo que ha visto salir a un hombre de la casa pensando que este había estado con Camila, habiendo estado en realidad con la criada, Leonela.

Entre Lotario, Camila y Leonela consiguen que Anselmo se esconda como quien no quiere la cosa en una habitación de la casa para así poner en funcionamiento un plan para que tanto Camila como Lotario pudieran quedar bien y resolver todo el entuerto que se había formado. Al acabar con este plan Anselmo sale a hablar con Lotario para manifestarle su alegría tras ver que su esposa es tan pura y sincera como creían en un primer momento y para felicitar a Lotario por lo buen amigo que era y lo bien que se había portado con él.

El hecho es que se comprueba que Camila no es tan pura como parecía, ya que accedió a las insinuaciones de Lotario. Aunque eso es muy relativo, porque ante las insinuaciones, cualquiera accede en un momento de debilidad. Por esta razón Lotario le dijo a Anselmo:

Es de vidrio la mujer;
pero no se ha de probar
si se puede o no quebrar,
porque todo podría ser.
Y es más fácil quebrarse,
y no es cordura ponerse
a peligro de romperse
lo que no puede soldarse.
Y en esta opinión estén
todos, y en razón la fundo;
que si hay Dánaes en el mundo,
hay pluvias de oro también.

Zoraida:

Ella es calculadora, rica, de orgullo voluntarioso para lograr su objetivo al precio que sea,

Zoraida fue hija del renegado Hajji Murad, alcalde de Argel, la cual se casó con el sultán de Marruecos Abd-el-Malik. Si don Miguel llama Zahara a uno de los personajes de Los Baños de Argel, aquí lo transforma en Zoraida, ahora enamorada de un cautivo español, voluntariosa en su empeño por convertirse al cristianismo.

Zoraida (ya no la Zora de su teatro) es un cuadro de seducción erótica, un retrato de hagiografía casi mariana (recordemos como conocemos a nuestros personajes en la obra: su acompañante-"marido", ella huidiza y en cuadrúpedo por transporte, pura escena de Nazareth (I,41), descripción iconográfica al detalle), según algunos críticos "se venera así misma" con una siempre infantil referencia a las leyendas marianas que actúan por milagro en las acciones humanas pero que ella acredita como sustento firme para lograr su conversión.

Nuestra dama no es personaje convencional, es la lucha de su "yo mismo" con su pasado y anterior educación, su propia moral, ego que no dudará en aplicar con toda su dureza y frialdad a su padre Agi Morato. Late aquí un contraste con la moral cristiana pero casa muy bien una cierta conciencia islámica de "cada uno en sus asuntos" (Al Corán, XCIX, 6) y el peso moral y autorresponsable, intransferible de la pureza de alma de uno, y sólo uno propio ante Allah y no ante los demás, meros espectadores del Dictamen Supremo. No hay pues intercesores en el juicio hombre-Dios, sólo uno mismo con sus palabras, acciones y pensamientos:"Lo bueno que te ocurre viene de Allah y lo malo, de ti mismo. Te hemos enviado a los hombres como Mensajero (Muhammad) y Allah basta como Testigo" (Qur´an IV,79). No dudará pues la argelina en despedir a su padre: "Ella (Lela Mariem, la Virgen María) y Alá te guarden", "el verdadero Alá te guarde", "...que el grande Alá...", "Alá te guarde" (I,40)

Leandra:

Joven rica y bella; estas condiciones hicieron que fuera muy solicitada en matrimonio, entre ellos Anselmo y cabrero Eugenio. Se enamora del soldado Vicente de la Roca, y huyen del pueblo; en el campo Vicente aprovecha la soledad y roba todas las joyas con que se había escapado Leandra. Su padre le encierra en un monasterio y todos sus pretendientes se hacen pastores para cantar sus penas y dolores. Esta historia se conoce gracias al cabrero Eugenio, el cual, buscando a una de sus cabras perdidas, se topa con la comitiva que lleva de regreso a don Quijote a la aldea, I, 51.

Quiteria:

Bella joven de unos 18 años. Conoce a Basilio y ambos se enamoran, lo que hace pensar a todos los vecinos en un futuro matrimonio; sin embargo su padre la compromete con Camacho el Rico, decisión que ocasiona desvaríos en Basilio. El día de la boda, gracias a un artificio, Basilio logra casarse con su amada; Camacho y sus amigos no toman venganza gracias a la oportuna intervención de don Quijote, el cual de manera sabia calma los ánimos.

Altisidora:

Joven doncella del palacio de los duques, que finge estar enamorada de don Quijote para burlarse de él. Le canta a don Quijote el romance: “¡Oh, tú, que estás en tu lecho, / entre sábanas de holanda...” II, 44; don Quijote, a su vez, el canta un romance compuesto por él mismo: “Suelen las fuerzas de amor / sacar de quicio a las almas, / tomando por instrumento / la ociosidad descuidada.” II, 46; doña Rodríguez la trata de manera despectiva cuando habla con don Quijote: le llama Altisidorilla, II, 48; le ayuda a la duquesa a castigar a doña Rodríguez cuando ésta le cuenta a don Quijote intimidades de aquella, II, 50; le comenta Sancho a don Quijote: “Maravillado estoy, señor, de la desenvoltura de Altisidora, la doncella de la duquesa: bravamente la debe de tener herida y traspasada aquel que llaman Amor” I, 58; resucita gracias a las torturas a que es sometido Sancho por orden de Radamanto. Dice éste: “¡Ea, ministros de esta casa, altos y bajos, grandes y chicos, acudid unos tras otros y sellad el rostro de Sancho con veinte y cuatro mamonas, y doce pellizcos y seis alfilerazos en brazos y lomos, que en esta ceremonia consiste la salud de Altisidora!” II, 69.


IV. Falso Quijote de Avellaneda

El Quijote de Avellaneda, la historia de una venganza

Durante siglos, el empeño por descubrir la verdadera identidad del autor del Quijote apócrifo fue infructuoso; hasta que, en 1988, Martín de Riquer propuso en su libro “Cervantes, Pasamonte y Avellaneda” la hipótesis de que Alonso Fernández de Avellaneda era en realidad un soldado aragonés llamado Jerónimo de Pasamonte, compañero de milicias de Cervantes.

Jerónimo de Pasamonte nace en el seno de una ilustre familia aragonesa, siendo todavía un niño mueren sus padres y queda en una situación precaria, por lo que entra al servicio del obispo de Soria. A los 17 años va a Barcelona para, desde allí, partir hacia Roma, donde piensa hacerse religioso.

Jerónimo de Pasamonte coincide en tierras italianas con Miguel de Cervantes Saavedra y comparten juntos más de dos años de vida militar. Durante ocho meses forman parte del tercio de Miguel de Moncada y como miembros del mismo tercio intervienen en la batalla de Lepanto, en octubre de 1571. Más tarde, integrando tercios diferentes, coinciden en la jornada de Ambarino (octubre de 1572) y en la toma de Túnez (octubre de 1573). Tras estas campañas, la compañía de Pasamonte permanece en la Goleta y el tercio en el que participaba Cervantes va a Cerdeña a pasar el invierno, en este momento los dos soldados se distancian. El verano de 1574 se produce la toma de Goleta por los turcos y Pasamonte cae preso sufriendo un prolongado cautiverio que discurre entre Constantinopla, Túnez, Bizerta, Alejandría, Misistro y Rodas. También Cervantes resulta hecho prisionero, de regreso a España, en septiembre de 1575, es apresado por corsarios berberiscos y cumple condena en Argel hasta septiembre de 1580.

Tras veintidós años de cautiverio y sufrimiento, remando como galeote y trabajando en la construcción de fortalezas, Pasamonte reúne dinero suficiente para pagar su rescate. A los 40 años, escribe su autobiografía, “Vida y trabajos de Jerónimo de Pasamonte”. con la pretensión de recibir algún tipo de compensación económica de las autoridades por los servicios prestados al rey. El año en que empieza a circular el manuscrito, Cervantes, que se encuentra en la corte, tiene acceso a la autobiografía de su compañero de armas.

Jerónimo de Pasamonte no logra sus objetivos pecuniarios y se ve forzado a regresar a Italia en 1595 para servir como soldado en las guarniciones españolas y de este modo ganarse la vida. Allí continúa escribiendo su biografía y da muestras de sufrir manía persecutoria al creerse constantemente amenazado por seres infernales que tratan de envenenarlo. En sus momentos de crisis, experimenta una serie de visiones delirantes en las que es atacado por criaturas demoníacas con figura de gato o por fantasmas.

Disfrutando de los beneficios de una situación más estable debido a la remuneración por su miopía, contrae matrimonio con una mujer española que saca de un convento. Pronto surgen las desavenencias con sus suegros y su cuñada, a los que considera endemoniados, y los acusa de querer prostituir a su mujer y de intoxicarlo. Expuesto a estos peligros ficticios, busca en la religión el medio para vencer a las fuerzas malignas que le acosan e incluye en el epílogo de su autobiografía un largo listado de oraciones que acostumbra rezar y una serie de consideraciones teológicas sobre las tentaciones del demonio, definiéndolas y distinguiendo sus clases.

El 26 de enero de 1605, Pasamonte da por finalizada su biografía y fecha una de las dedicatorias, haciéndola copiar de mejor letra. Es por entonces cuando se publica en España la primera parte del Quijote de Cervantes, en la que aparece el personaje del galeote Ginés de Pasamonte, un delincuente embustero y ladrón. Cervantes incluye esta figura de manera deliberada, es su forma de materializar una venganza.

Ginés de Pasamonte es la figura encubierta bajo la que se oculta Jerónimo de Pasamonte y la ignorancia generalizada de su “Vida” ha impedido hasta ahora reparar en una prueba insólita. Al leer el manuscrito de la primera versión de la “Vida” de Pasamonte, Cervantes se siente indignado por la falta de ética de su antiguo compañero y, enfurecido, resuelve escarnecerlo en la primera parte del Quijote. Aquí comienza la feroz disputa literaria entre Pasamonte y Cervantes.

Cervantes lleva a cabo una imitación satírica y enmendadora de la escueta descripción de los acontecimientos militares que había realizado Pasamonte en su “Vida” para demostrarle a éste su superioridad artística. Incluye la novela del “Capitán cautivo” en la primera parte de su Quijote, en la que calca paso a paso los episodios militares narrados en la autobiografía de Pasamonte, amplificándolos para dejar una constancia más rigurosa de los hechos y hacerlos más amenos, y le lanza una indirecta a su enemigo al exponer que su capitán permaneció veintidós años fuera de España a causa de su cautiverio entre los turcos, los mismos años y la misma razón que aduce Jerónimo de Pasamonte en su “Vida”. Miguel de Cervantes convierte al galeote de los turcos en un condenado a las galeras reales en España, le carga con las mismas prisiones con que el aragonés se retrata en el episodio mencionado de su “Vida” y lo presenta como autor de una biografía titulada “Vida de Ginés de Pasamonte”, tildándolo de bellaco, embustero y ladrón. Jerónimo de Pasamonte debió sentirse tremendamente humillado por la imagen que se daba de él en esa obra y que era contraria a la de hombre devoto y recto que ofrecía de sí mismo en su autobiografía. Pasamonte, admirador de Ariosto y aragonés, conoce bien el terreno donde se desarrollará esa nueva salida de don Quijote, por lo que acepta el reto y replica a Cervantes ocultándose bajo un seudónimo (Alonso Fernández de Avellaneda ) para escribir el Quijote apócrifo.


La hipótesis de que Alonso Fernández de Avellaneda y Jerónimo de Pasamonte son la misma persona no ha sido hasta el momento unánimemente refrendada, sin embargo, la minuciosa comparación de la “Vida” de Jerónimo de Pasamonte, las dos partes del Quijote cervantino y el Quijote apócrifo ofrecen datos suficientes para confirmar la relación de identidad entre el soldado aragonés y Avellaneda. En el Quijote apócrifo aparecen con frecuencia las mismas expresiones y giros lingüísticos usados por Pasamonte en su “Vida” y se incluyen episodios que sin duda constituyen una traslación literaria de algunas experiencias descritas en la autobiografía del aragonés. El autor del Quijote apócrifo conoce Constantinopla, lugar en el que Pasamonte estuvo cautivo. El don Quijote avellanesco es socorrido por un caritativo canónigo aragonés que lo acoge en su casa, igual que el canónigo aragonés Cabañas acogió en su casa de Roma al ex cautivo Pasamonte. En el Quijote apócrifo, la prostituta Bárbara, asidua acompañante de don Quijote, ingresa en un monasterio de Arrepentidas, tal como Pasamonte intentó hacer con su cuñada. Pero es sobre todo en los dos relatos intercalados del Quijote apócrifo, titulados “El rico desesperado” y “Los felices amantes”, donde son más evidentes las similitudes con los sucesos biográficos descritos en la “Vida” de Pasamonte.


El litigio imitativo entre Cervantes y Pasamonte no se zanja aquí, pues Cervantes, contrariamente a lo que se ha creído, lee el manuscrito de Avellaneda antes de iniciar la segunda parte de su Quijote y decide dar una respuesta contundente a su antagonista. Desarrolla la segunda parte de su obra para pagar al impostor con su misma moneda, realizando, igual que hizo en la primera parte del Quijote con los episodios militares de la “Vida” de Jerónimo de Pasamonte, una versión mejorada y correctora del manuscrito del Quijote apócrifo y amenaza al autor con revelar su identidad si llevaba a cabo su intención de proseguir, como había anunciado al final de su Quijote apócrifo, las aventuras de don Quijote en Castilla la Vieja. Para demostrarle a Pasamonte que lo ha identificado, Cervantes recurre de nuevo a su “sinónimo voluntario”: Ginés de Pasamonte, dándole la identidad del titiritero maese Pedro y hace que dicho personaje protagonice un episodio que es un claro trasunto de otro de la obra apócrifa. Asimismo, Cervantes se burla de algunas experiencias narradas en la “Vida” de Pasamonte: el ataque de un gato que recibe el don Quijote cervantino en la casa de los duques y la visita nocturna de la dueña doña Rodríguez ataviada como un fantasma, son una alusión clara a las alucinaciones de su contrincante y una prueba fehaciente de que le consideraba el autor del Quijote apócrifo.

El Quijote de Avellaneda deja de ser el de la Triste Figura para llamarse el Caballero Desamorado, el don Quijote cervantino cambia su apodo y pasa a ser el Caballero de los Leones. El Quijote apócrifo se refiere en uno de sus discursos a Montesinos, y el cervantino baja a una cueva en la que se encuentra con el mismo personaje. El Quijote de Avellaneda toma a los comediantes de la venta por vestiglos, y el de Cervantes toma por vestiglos a los harineros de la aceña. El Quijote avellanesco es burlado una y otra vez en las casas de los nobles, y el cervantino es sometido a burlas muy similares en casa de los duques. El Sancho de Avellaneda escribe una carta a su mujer y el cervantino le escribe a la suya otra carta casi idéntica. El Sancho de Avellaneda dice entender el lenguaje de su rucio, y el de Cervantes va más lejos, puesto que rebuzna con toda propiedad...


En el verano de 1614, cuando Cervantes llevaba avanzada la redacción de la segunda parte de su Quijote, se entera de que la obra de Avellaneda ha sido publicada y decide cambiar de estrategia para dar contestación explícita a la existencia del falso don Quijote. En el capítulo 59 de la segunda parte de su obra, Cervantes menciona el libro publicado por Avellaneda y hace que un caballero entregue en una venta dicho libro a su don Quijote, abrazándolo y reconociéndole como el verdadero. Pues bien, el personaje en cuestión es otro “sinónimo voluntario” de Jerónimo Pasamonte, formado esta vez con su nombre de pila. El caballero que entrega sumiso el libro apócrifo recién publicado al verdadero don Quijote se llama, es significativo, don Jerónimo, con lo que Cervantes hace en la representación literaria que Jerónimo de Pasamonte reconozca a su don Quijote como el auténtico. De esta forma, mediante los “sinónimos voluntarios” de don Jerónimo y de Ginés de Pasamonte, Cervantes deja indicados el nombre y apellidos de su rival. En el “Prólogo” de la segunda parte del Quijote, escrito tras terminar su obra, Cervantes apunta directamente a Avellaneda y dice saber bien en qué consisten las tentaciones del demonio, dando a entender que es el autor fingido quien ha caído en ellas al pretender ganar fama y dinero con la historia del falso Quijote. No obstante, y aunque Cervantes se dirige ex profeso a Avellaneda, en el Quijote apócrifo no hay ninguna referencia a las tentaciones del demonio, por lo que Cervantes no alude a la obra espuria, sino a las disquisiciones teológicas que realiza Pasamonte sobre las mencionadas tentaciones del demonio al final de su autobiografía, mostrando nuevamente su convencimiento de que el autor del Quijote apócrifo y el de la “Vida” de Pasamonte son la misma persona.


Las evidencias indican que Cervantes tomó como referencia el Quijote de Pasamonte y su “Vida” para narrar la historia de su Quijote, un texto que no puede considerarse original ya que representa, de principio a fin, la respuesta airada a una pugna literaria de la que Cervantes consiguió salir triunfante. Tan bien le salió la jugada que han transcurrido cuatro siglos sin que hayamos reparado en la existencia de Jerónimo de Pasamonte, sin advertir que Cervantes se basó en sus obras para escribir la novela más elogiada y leída de nuestras letras.

V. Autorretrato de Miguel de Cervantes Saavedra

Este que veis aquí, de rostro aguileño, de cabello castaño, frente lisa y desembarazada, de alegres ojos y de nariz corva, aunque bien proporcionada; las barbas de plata, que no ha veinte años que fueron de oro, los bigotes grandes, la boca pequeña, los dientes ni menudos ni crecidos, porque no tiene sino seis, y ésos mal acondicionados y peor puestos, porque no tienen correspondencia los unos con los otros; el cuerpo entre dos extremos, ni grande, ni pequeño, la color viva, antes blanca que morena, algo cargado de espaldas, y no muy ligero de pies. Este digo, que es el rostro del autor de La Galatea y de Don Quijote de la Mancha, y del que hizo el Viaje del Parnaso,... Llámase comúnmente Miguel de Cervantes Saavedra. Fue soldado muchos años, y cinco y medio cautivo, donde aprendió a tener paciencia en las adversidades. Perdió en la batalla naval de Lepanto la mano izquierda de un arcabuzazo, herida que, aunque parece fea, él la tiene por hermosa, por haberla cobrado en la más memorable y alta ocasión que vieron los pasados siglos, ni esperan ver los venideros, militando debajo de las vencedoras banderas del hijo del rayo de la guerra, Carlos Quinto, de felice memoria.

  • * Posición que adopta el narrador con respecto a la obra ¿es la siempre misma?

  • * ¿En qué situaciones fija su atención?

    * ¿Quién era Cide Hamete Benegeli?

    * ¿Cómo maneja Cervantes el narrador de la obra?

    Posición que adopta el narrador con respecto a la obra ¿es la siempre misma

    No. En algunas ocasiones el narrador solo se limita a contar la historia neutralmente, pero en otras hace críticas acerca del comportamiento de los personajes, y a veces cuenta lo que están pensando o sintiendo, guiándose por lo que supuestamente le ha tomado de los escritos de Cide Hamete Benengeli.

    Ej.

    1. Cuenta

    Sacó el libro de memoria Don Quijote, y, apartándose a una parte, con mucho sosiego empezó a escribir la carta, y acabándola, llamó a Sancho y le dijo que se la quería leer, porque la tomase de memoria, si acaso se le perdiese por el camino, porque de su desdicha todo se podía temer. (I 25)

    2. Hace críticas o muestra opinión

    Rióse Don Quijote de las afectadas razones de Sancho, y parecióle ser verdad lo que decía de su emienda, porque de cuando en cuando hablaba de manera que le admiraba; puesto que todas o las mas veces que Sancho quería hablar de oposición y a lo cortesano, acababa su razón con despeñarse del monte de su simplicidad al profundo de su ignorancia; y en lo que el se mostraba mas elegante y memorioso era en traer refranes, viniesen o no viniesen a pelo de lo que trataba, como se habrá visto y se habrá notado en el discurso desta historia. (II 12)

    3. Cuenta lo que piensan o siente

    En estremo contento, ufano y vanaglorioso iba Don Quijote por haber alcanzado vitoria de tan valiente caballero como imaginaba que era el de los Espejos, de cuya caballeresca palabra esperaba saber si el encantamento de su señora pasaba adelante, pues era forzoso que el tal vencido caballero volviese, so pena de no serlo, a darle razón de lo que con ella le hubiese sucedido. Pero no pensaba Don Quijote y otro el de los Espejos, puesto que por entonces no era otro pensamiento sino buscar donde bizmarse, como se ha dicho.

    En qué situaciones fija su atención

    El narrador fija su atención en situaciones de enfrentamiento, como cuando don Quijote y Sancho están en la venta y tienen peleas con los que viven en ella.

    Cuando se enfrenta con las personas que encuentra en su camino.

    Vemos que s le da tanta importancia a estas situaciones debido a que don Quijote ama la caballería y una de sus funciones es proteger (pelear para don Quijote)

    El también fija mucho su atención en la historia de Cardenio, Luscinda, Fernando y Dorotea.

    Y cuando hablan Sancho y Don Quijote.

    Quién era Cide Hamete Benegeli

    En la ficción, el historiador moro Cide Hamete Benengeli aparece como primer autor del Quijote, un morisco toledano es su primer traductor y el mismo Cervantes aparece ficcionalizado como segundo autor, que entrega a los lectores una historia sobre la cual podrá comentar lo que quiera por conocerla toda de antemano a través de la traducción del morisco. Este juego de autores, traductores, narradores y lectores produce una gran libertad creadora a la vez que siembra la ambigüedad y la duda en muchas páginas, por ejemplo en el relato de la cueva de Montesinos. Cualquier perspectiva es posible. Siempre se podrá acusar de los engaños al moro Cide Hamete, al morisco traductor y aun al impresor, a quien, en la segunda parte, se culpa de las incoherencias cometidas en torno al robo del rucio de Sancho en la primera

    Como maneja Cervantes el “aspecto del narrador en la obra”

    El es muy sutil a la hora de contar los hechos, ya que utiliza a un supuesto narrador y a alguien que se supone, fue el primer autor.

    Ej.

    ¡Bendito sea el poderoso Alá! -dice Hamete Benengeli al comienzo de este octavo capítulo-. ¡Bendito sea Alá!, repite tres veces, y dice que da estas bendiciones por ver que tiene ya en campaña a Don Quijote y a Sancho, y que los letores de su agradable historia pueden hacer cuenta que desde este punto comienzan las hazañas y donaires de Don Quijote y su escudero; persuádeles que se les olviden las pasadas caballerías del Ingenioso Hidalgo, y pongan los ojos en las que están por venir, que desde agora en el camino del Toboso comienzan, como las otras comenzaron en los campos de Montiel, y no es mucho lo que pide para tanto como el promete; y así prosigue diciendo. (II 8)

  • Principales situaciones y conflictos: sicológicos, morales, políticos, familiares, artísticos

  • % Un cabrero estaba anunciando la muerte de un pastor que falleció debido a los amores de una moza muy hermosa, Marcela. Esta buena moza rechazaba a todos los hombres e incluso su tío la intentaba casar pero ella se negaba. Cuando don Quijote, unos pastores y Sancho llegaron al entierro vieron que estaba lleno de pastores, y entre todos se veía a Crisóstomo, el pastor muerto, en un baúl lleno de papeles. Uno de los pastores cogió uno de los papeles en donde había escrito sus últimos versos Crisóstomo. En la canción de Crisóstomo se expresan los sentimientos de Crisóstomo en su etapa final de la vida en la que contaba como su amor hacia Marcela no le era correspondido ya que él le ofrecía todo su amor y sin embargo ella le rechazaba continuamente. Al acabar este cantar apareció Marcela diciendo que ella no tenia culpa de la muerte de Crisóstomo ya que si tuviera que corresponder todos los amores que le han declarado no acabaría nunca. También añadió que él era libre y que el amor también debía serlo siendo de esta manera un amor voluntario y en ningún caso forzado. Además comento que ella vivía en las montañas para no molestar a nadie y para vivir sola, que culpa tenia ella de que Crisóstomo se hiciera ilusiones sin darle ella ninguna esperanza. (I 12-13-14)

    % Don Quijote y Sancho fueron a una venta, en la cual se quedaron, ya que el hidalgo venía muy aporreado. En esta venta les dieron unas camas muy mal hechas. En la noche, cuando todos dormían, Maritornes (sirvienta de la venta) entró al cuarto de Don Quijote a buscar al arriero, ya que eran amantes. Cuando la vio el de la triste figura, creyó que era una dulce dama, le cogió las manos y comenzó a alabarle. Al poco tiempo escuchó esto el arriero, se acercó sigilosamente y empezó a darle golpes en la espalda a Don Quijote. Con tanto ruido se despertó el ventero y pensó que era la criada que estaba haciendo una de las suyas. Esta se escondió en la cama de Sancho y él empezó a pegarle. Al ver esto, el arriero y el ventero le pegaron a Sancho. Un cuadrillero llegó, vio a Don Quijote muy mal y paró la pelea. (I 16)

    % Don Quijote y Sancho se encuentran con muchos malhechores que van a cumplir condena en las galeras del rey. Don Quijote al ver que estos presos iban encadenados se interesó del porque de esta inhumana situación. Sancho se lo intento explicar, pero al no quedar satisfecho este comenzó a preguntarle a los galeotes el porque de su condena. Los galeotes comenzaron uno por uno a explicarle a Don Quijote el porque se encontraban encadenados y condenados a trabajar en las galeras del rey. Don Quijote al considerar injusto, que esos hombres estuvieran condenados por algo que él no consideraba una pena mayor, decidió liberarlos y dejarlos marchar en paz. Al acabar esta pequeña batalla entre los galeotes y Don Quijote contra los comisarios, Don Quijote les dijo a los galeotes que fueran a visitar a su amada Dulcinea del Toboso a contarle que el caballero de la triste figura, Don Quijote, les había liberado de sus cadenas y penas. Los galeotes además de negarse a cumplir este pequeño mandato comenzaron a apedrear y saquear a Don Quijote y a Sancho, dejándoles a la intemperie casi desnudos.

    % Cardenio pertenecía a una familia rica y estaba enamorado de Luscinda, hija también de otra familia rica. Cuando Cardenio había conseguido el consentimiento del padre de Luscinda para casarse con ella, el padre le comunico que tenía que irse a la casa del Duque Don Ricardo. Cardenio mantenía una gran amistad con el hijo del Duque Don Ricardo con el cual tenia una confianza absoluta. Don Fernando había separado de Luscinda al pobre de Cardenio, que al poco tiempo recibió una carta de Luscinda en la cual decía que su padre había acordado con Don Fernando el próximo casamiento de Luscinda con este. Al oír esto Cardenio se apresuro en irse junto a su amada para hablar con ella antes de la boda. Luscinda acordó que si no conseguía anular la boda antes de "sí quiero" se mataría con una daga que llegaba escondida. Cuando Cardenio aprecio como su amada pronunciaba el "sí quiero" sin hacer nada para evitarlo decidió refugiarse en esos montes para allí pasar el resto de su vida.

    En Sierra Morena encontraron a una mujer llamada Dorotea y decía que estaba allí ya que un hombre llamado Don Fernando le había prometido matrimonio pero este la dejo tras conseguir sus propósitos, días después se había enterado de que este Don Fernando iba a casarse con Luscinda pero esta en el momento de la boda se había desmayado encontrando en su vestido una nota que decía que ella en realidad quería a Cardenio pero que había dicho que si por no desobedecer a sus padres y que tenia la intención de matarse si no la dejaban estar con Cardenio, lo que se confirmo tras encontrar también una daga en su vestido. Después de este acontecimiento Fernando entro en cólera e intento matar allí mismo a Luscinda pero los invitados se lo impidieron.

    % Don Quijote se en cuentra a un caballero que se hace llamar "El Caballero del Bosque" que al igual que él era caballero andante, bajaba de su caballo y comenzaba a explicar como su amada, Casildea de Vandalia, no le correspondía para nada todo el amor que él le ofrecía. Al darse cuenta el caballero de que Don Quijote estaba cerca de él se presentó y comenzaron a hablar de sus amores. Los dos escuderos dejaron a sus respectivos caballeros hablando solos mientras ellos se iban a hablar de cosas de escuderos algo mas lejos de allí.

    El escudero del Caballero del Bosque dice que su amo es muy valiente pero algo bellaco. Sancho dice que Don Quijote no tiene absolutamente nada de bellaco ya que, en realidad, es incapaz de hacerle daño a nadie.

    El Caballero del Bosque afirmó que entre sus aventuras había vencido a muchísimos caballeros incluyendo entre ellos al gran Don Quijote de la Mancha. Don Quijote al oír esto se hizo el tonto para que más tarde confesara su propia mentira. Al ver que este no lo confesaba y se emperraba en su mentira Don Quijote le reto a un duelo en el cual el caballero que saliese vencido obedecería al vencedor.

    Ambos caballeros fueron a avisar a sus escuderos para que prepararan todo para la batalla. Momentos antes de la batalla Sancho se subió a un árbol ya que tenia miedo del Caballero del Bosque debido a todo lo que le había contado el escudero de este caballero.

    Finalmente, debido a que el caballo del Caballero del Bosque se quedó parado justo delante de rocinante durante la pelea, Don Quijote derribó al Caballero del Bosque y salió victorioso del Duelo.

    Después de caer al suelo el Caballero del Bosque Sancho y Don Quijote se dieron cuenta de que era el Bachiller Sansón Carrasco. A su vez Sancho se dio cuenta de que el escudero del Caballero del Bosque era su vecino Tomé Celial y entonces le pidió a Don Quijote que no matara a Sansón Carrasco. Al reanimarse Sansón Carrasco Don Quijote le obligo a ir al Toboso a encomendarse a la dama de Don Quijote y a admitir que no había vencido a Don Quijote sino a alguien que se parecía mucho a él.

    % Hubo unas bodas a las cuales invitaron a Don Quijote. Una vez llegaron los novios Don Quijote afirmo que nunca había visto una mujer tan guapa como Quiteria, sin contar claro esta a Dulcinea.

    Al poco rato apareció Basilio (del cual estaba realmente enamorada Quiteria) diciendo que si Quiteria no se podía casar con él debido a que le había dado su palabra a Camacho, se mataría y sacando de un bastón una espada se la clavó. Cuando el Cura se acercó a él para darle las bendiciones este dijo que no quería bendiciones sino que quería que Quiteria se casase con el in articulo mortis. El Cura, Quiteria y Camacho aceptaron pero en cuanto estaban casados Basilio se levanto diciendo que no estaba herido sino que era un truco. Cuando los personajes presentes se dieron cuenta quisieron anular la boda pero Quiteria dijo que no, que la boda era valida.

    % Un día mientras Don Quijote paseaba, armado, por la playa se encontró a un hombre que sé hacia llamar el Caballero de la Blanca Luna. Este le dijo que había ido a buscar a Don Quijote para hacerle confesar que su dama era más bella que la de Don Quijote. Don Quijote no lo admitió y decidió batirse en duelo con el de la Blanca Luna. El trato era que si Don Quijote perdía debería de admitir que su dama no era la más hermosa y debería de permanecer un año de vida sosegada en su pueblo sin utilizar las armas. Si Don Quijote vencía seria él quien decidiera acerca de la vida del otro caballero y se quedaría con sus armas, fama y caballo.

    Una vez en la batalla Don Quijote salió derrotado y humillado frente al Caballero de la Blanca Luna. Don Quijote se vio obligado a cumplir su palabra y dijo que se retiraría un año de la caballería pero reafirmo que su dama era la más bella del mundo. Después de la batalla el Caballero de la Blanca Luna se marchó y a Don Quijote le llevaron a la ciudad en una silla de mano.

    % Llegó un médico a la casa de Don Quijote y le vio dijo que seria mejor que se fuese confesando ya que no le quedaba demasiado tiempo de vida. Don Quijote al oír eso hizo llamar a sus amigos y les comenzó a decir que era consciente de todos los peligros en los que se había metido pero que ya había vuelto en sí y que ya era otra vez Alonso Quijano el Bueno. Sus amigos le intentaban animar diciéndole que pronto iban ser todos pastores y que Dulcinea ya estaba desencantada, pero Alonso Quijano les decía que no se burlaran de él que ya era cuerdo. Tras hacer testamento y dejar una clara muestra de que ya había vuelto a la cordura comenzó a criticar la actitud de Avellaneda que había escrito un libro falso acerca de estupideces como las que él había vivido.

  • Causas y consecuencias de la pérdida de la razón. Crítica y selección de libros de caballería

  • Causas

    % Introducir demasiada información en el cerebro. Esta se puede confundir y ser interpretada erróneamente.

    % Leer, escuchar, ver o imaginar historias que influyan a tal punto de querer hacer revolución a partir de esta.

    % Creer que si no existen personas como uno, el mundo jamás cambiará.

    % Idealizar el mundo y todos sus componentes.


    Consecuencias

    % Pelear sin razón alguna.

    % Creer que siempre está pasando algo malo y que si no se está presente no se puede solucionar la situación.

    % Ver cosas donde realmente no las hay.

    % Creer que existen sujetos sobrenaturales.

    Lo que sabemos, porque nos lo dice el autor en el propio texto de la novela, es que Don Quijote es una parodia de los libros de caballería. El autor pretendió, según sus propias palabras “...destruir la autoridad inoportuna que ejercen en el mundo entero y entre el pueblo los libros de caballería”. En el último capítulo de la obra, cuando Don Quijote está en su lecho de muerte y recupera la lucidez, volviendo a ser el bueno de Alonso Quijano, se desahoga con lo amigos que lo rodean: “Tengo ya el juicio libre y claro, despejado de las sombras de la ignorancia con las que me ofuscó mi amarga y continua lectura de los detestables libros de caballería. Ya conozco sus disparates y sus embelesos y sólo me pesa haber llegado tan tarde a este desengaño, que no me ha dado el tiempo para enmendarme, leyendo otros libros que fueran luz para el alma”. Y más adelante: “Ya soy enemigo de Amadís de Gaula y de la infinita caterva de su linaje, ya me son odiosas todas las historias profanas de la caballería andante, ya reconozco mi necedad y el peligro en que me puso el haberlas leído, ya por misericordia de Dios y bien escarmentado, las abomino.”

    Una novela no es sólo obra de la razón. Ella se crea sobre todo a partir de un trabajo del inconsciente, allí dónde la intuición elabora la materia prima que sorprende al propio autor. Por eso, más allá del motivo explícito revelado por Cervantes, la crítica radical a la literatura de caballería, hay que preguntarse que otras motivaciones lo llevaron a dedicar tantos años a una obra tan bien estructurada.

  • ¿Por qué a Don Quijote no le importaban las burlas de los demás?

  • Debido a su locura, Don Quijote tomaba las burlas como elogios y felicitaciones a sus actos, pensaba que hacía siempre el bien defendiendo lo “justos” y condenando lo “injusto”. Incluso a veces era violento en la defensa de su supuesta justicia.

  • ¿Cuál es la motivación que tiene Don Quijote para realizar sus hazañas?

  • Yo pienso que tiene dos motivaciones:

    % Defender el bien y hacer que el mundo mejore gracias a él.

    % Dedicarle sus triunfos a su amor idealizado, Dulcinea del Toboso.

    VI. Don Quijote desea un tipo de sociedad como la que había existido en la edad de oro. ¿Qué características tenía esta sociedad?

    El período entre el Renacimiento y el Barroco, la "Edad Dorada" de España realmente se extendió durante dos siglos (el XVI y el XVII) y es la etapa más fecunda y gloriosa de las Artes y las Letras españolas. La novela alcanzaría su más alto nivel de universalidad y expresión con Don Quijote de Miguel de Cervantes y otros géneros claramente españoles como el de la novela picaresca (Lazarillo de Tormes y el Guzmán de Alfarache de Mateo Alemán).

    Fue también una época dorada para la poesía. En el siglo XVI, Boscán y Garcilaso de la Vega adaptaron la poesía lírica italiana al castellano alcanzándose la máxima expresión en la poesía mística de Fray Luis de León y San Juan de la Cruz y en la prosa de Santa Teresa. Dos grandes figuras de los siglos XVI y XVII fueron Luis de Góngora, cuyo estilo difícil y complejo derivaba originalmente de un movimiento latinizante ("culteranismo"), y Francisco de Quevedo, maestro del "conceptismo".

    El teatro es otro género que también alcanzó un gran nivel. La obras dramáticas ya no se pusieron en escena en los alrededores de las iglesias después de la creación de los "corrales de comedias", algunos de los cuales todavía existen, como el de Almagro (Ciudad Real). Juan de Encina, Torres Navarro y Gil Vicente fueron los precursores de Lope de Vega, Tirso de Molina y Calderón de la Barca.

    También el Humanismo había florecido desde los principios de la Edad Moderna con Luis Vives y las obras monumentales en las que colaboraban varios autores, como la Biblia Políglota Complutense. Obras fundamentales en los campos de la historia y la política fueron las de Mariano Zurita, Hurtado de Mendoza y las crónicas de la colonización de América de varios protagonistas.

    El período del siglo XVII se cerró con la publicación de Idea de un Príncipe, del licenciado Saavedra Fajardo, y de El Criticón, del filósofo y escritor Baltasar Gracián.

    El siglo XVI produciría uno de los maestros de la pintura española: Doménikos Theotokopoulus, "El Greco", que realizó la mayoría de su trabajo en Toledo, donde se conservan muchas de sus pinturas: El expolio (Cristo con sus ropas desgarradas), El martirio de San Mauricio, La resurrección de Cristo y El entierro del conde Orgaz representan un momento decisivo para la pintura española y universal.

    Entre los primeros pintores del siglo XVII que practicaron el realismo figuran Ribalta y Rivera pero este estilo alcanzó su esplendor con Diego de Velásquez (1599-1660), cuyas numerosas obras cuelgan en el Museo del Prado: Las Meninas, La rendición de Breda, La fragua de Vulcano, además de sus famosos retratos de Felipe IV, el príncipe Baltasar Carlos y del conde-duque de Olivares.

    Velázquez fue el pintor de Madrid pero Zurbarán y Murillo trabajaron en Sevilla, volcados en la temática religiosa. La Edad de Oro tiene también su estilo arquitectónico propio, el Plateresco, un estilo similar al trabajo de los plateros, una reacción purista y espartana contra el trabajo de filigrana. Su ejemplo más representativo es el monasterio de El Escorial de Felipe II que fue iniciado por Juan Bautista de Toledo y que terminó, tras su muerte, Juan de Herrera.

    Relación obra-contexto histórico:

    España se encontraba el período de mayor esplendor en cuanto a lo artístico, iba desarrollando su sabiduría y aumentando su territorio: estaba cerca de conseguir su dominio en Europa; todos estos positivos cambios se reflejaban en la sociedad.
    “El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha” nos muestra el panorama de la sociedad española de la transición de esta etapa, con personajes de todas las clases sociales, de las más variadas profesiones y oficios, muestras de costumbres y creencias populares, es decir, es una suerte de “paisaje escrito” de la sociedad, pero no sólo esto, sino también la visión que tenía un personaje en especial, Cervantes, de ésta.
    Los personajes de Don Quijote y Sancho Panza que representan una especie de síntesis del ser humano: Sancho representa el materialismo en el hombre y Don Quijote el ideal de cada uno de nosotros, lo que anhelamos, sin dejar de lado el toque de ironía que ambos tienen, y dejan entrever otros aspectos, más negativos y burlescos, se podría decir, de la propia época.
    En resumen, Cervantes se basó en la sociedad que vivía en dicha etapa, conocida como “El Siglo de Oro”, la resumió en cada personaje y, en base a esto, crea “Don Quijote”, y cuestiona principalmente lo subjetivo contra lo objetivo, lo ideal contra lo real (como se ve en el paralelismo del Quijote y Sancho).Y, de alguna forma, cuenta lo que es conflictivo en forma de burla.


  • La visión que tiene Don quijote de la vida es ideal. ¿En su totalidad o solo en algunos aspectos?

  • Yo pienso que la visión que tiene Don Quijote de la vida es ideal en algunos aspectos.

    Vemos que en algunas ocasiones tiene momentos de lucidez y reconoce que hay problemas que son complicados de solucionar, aunque siempre busca la forma de hacerlo.


  • Idealismo en Don Quijote y realismo en Sancho.

  • En cuanto a la relación entre Don Quijote y Sancho, Don Quijote representa al idealista (a la fantasía). El piensa en sí mismo como en un real caballero andante, sin embargo Sancho representa por contraposición al realista, es quien se preocupa por el sentido práctico de las cosas. Es astuto, egoísta, pero al mismo tiempo bondadoso y leal. De este modo, se puede pensar que Don Quijote y Sancho no son figuras contrarias sino una misma figura que muestra la complejidad de la persona materialista e idealista a la vez, una perfecta mixtura de fantasía y realidad.

    En la segunda parte de la obra, se cambian los papeles, Don Quijote se vuelve más cuerdo y Sancho comienza a ser más fantasioso. Incluso, en un pasaje de la novela, Sancho se arrodilla ante una labradora y ofrece un discurso más propio del Don Quijote de la primera parte. En el último capítulo, en el momento de la muerte de Don Quijote, éste se vuelve cuerdo y resulta ser Sancho quien comienza a decir las cosas más dispares. A esto se le ha llamado la “quijotización” de Sancho.

    Las últimas palabras hacia su amo resultan maravillosas a la vez que desgarradas por el dolor: “No se muera, por favor. Porque la mayor locura es dejarse morir. ¡Levántese, vámonos al campo!”.

    Don Quijote se fija mas en los pensamientos, en todo lo interno, a tal punto de deformar lo que ve. En cambio Sancho manifiesta que los objetos comunes percibidos por los sentidos, como lo vemos en la aventura de los molinos de viento, el ve lo que es realmente.


  • Ideas principales del discurso sobre las armas y las letras.

  • % No hay ninguno más pobre en la misma pobreza, porque está atenido a la miseria de su paga, que viene o tarde o nunca, o a lo que garbeare por sus manos, con notable peligro de su vida y de su conciencia.

    % Es más fácil premiar a dos mil letrados que a treinta mil soldados, porque a aquéllos se premian con darles oficios, que por fuerza se han de dar a los de su profesión, y a éstos no se pueden premiar sino con la mesma hacienda del señor a quien sirven; y esta imposibilidad fortifica más la razón que tengo.

    % Alcanzar alguno a ser eminente en letras le cuesta tiempo, vigilias, hambre, desnudez, vaguidos de cabeza, indigestiones de estómago y otras cosas a éstas adherentes, que en parte ya las tengo referidas. Mas llegar uno por sus términos a ser buen soldado le cuesta todo lo que al estudiante, en tanto mayor grado que no tiene comparación, porque a cada paso está a pique de perder la vida.

    En pocas palabras…

    Don Quijote habla del soldado, de cómo es la persona más pobre que hay en el mundo ya que tiene que sobrevivir con los mínimos recursos existentes y aun así consigue sacarle el mayor partido a cualquier situación dificultosa. También les dijo que los menos premiados en la guerra y los más importantes en ella son los pobres soldados, que además suelen morir en ellas.

    También comparó el trabajo de los letrados con el trabajo de los soldados ya que trabajan muchísimo mas los soldados que los letrados y en realidad es muchisimo menor la recompensa que recibe un soldado. También afirmo que es necesaria la presencia de los letrados ya que sin ellos no habría leyes y sin leyes no se podrían defender los reinos y sin las leyes no se podrían defender los caminos y sin esto no habría seguridad ni la gente podría ir tranquila por las calles.


  • ¿Qué motivos impulsaron a Sancho para seguir con Don Quijote?

  • Sancho era consciente que a pesar de la locura, Don Quijote le podía ayudar a volverse aunque sea un poco culto y educado.

    Aparte de su sueño de ser gobernador de la Ínsula Barataria, podemos ver otro ejemplo de que Sancho va cambiando en esta novela. En el capítulo diez, después de la lucha con el vizcaíno, Sancho y Don Quijote tienen una conversación en que podemos ver un cambio en la actitud de Sancho. El dialogo de Sancho refleja un sentido común y un tipo de conocimiento de la tierra, unida con una avidez que podemos ver porque Sancho continúa preguntando a Don Quijote sobre la isla que quiere ganar: "Alto, pues, sea ansí," dijo Sancho, "y a Dios prazga que nos suceda bien, y que se llegue ya el tiempo de ganar esta ínsula que tan cara me cuesta, y muérame yo luego...Perdóneme vuestra merced," dijo Sancho, "que como yo no sé leer ni escribir, como otra vez he dicho, no sé ni he caído en las reglas de la profesión caballeresca"

    Otro episodio en que es evidente que Sancho está adquiriendo algunas características mas educadas, pero es todavía rústico, es en el episodio en la Sierra Morena. Sancho está tratando de recordar la carta de Dulcinea, y está hablando y actuando más como Don Quijote, más educado; pero él dice una palabra incorrecta, y por eso, nos recuerda que Sancho aún es el mismo hombre que era en el principio: "Así es," dijo Sancho, "luego, si mal no me acuerdo, proseguía... si mal no me acuerdo: "Él llego, y falto de sueno, y el ferido besa a vuestra merced las manos, ingrata y muy desconocida hermosa," y no sé que decía de salud y de enfermedad, que le enviaba, y por aquí iba escurriendo hasta que acababa en "Vuestra Merced hasta la muerte, el Caballero de la Triste   Un ejemplo al final de la Primera Parte del libro que muestra el cambio en ciertos aspectos del carácter de Sancho Panza es en el capítulo cuarenta y ocho. Aquí, Don Quijote está encarcelado en una jaula y él está discutiendo que es un caballero encantado.  Sancho quiere hacer que Don Quijote se libere de la jaula y que sea libre del mundo de ilusión y fantasía. La dualidad de Sancho es muy evidente en este episodio. Sancho intenta cambiar las ideas de Don Quijote, y lo hace bien; pero en un estilo muy vulgar y simple: "Digo que yo estoy seguro de la bondad y verdad de mi amo, y así, porque hace al caso a nuestro cuento," pregunto, hablando con acatamiento, "si acaso después que vuestra merced va enjaulado, y a su parecer encantado, en esta jaula, ha venido gana y voluntad de hacer aguas mayores o menores, como suele decirse"

    En pocas palabras la cuestión del aprendizaje y la cultura que estaba adquiriendo Sancho es muy importante.

    Aunque también vemos que Sancho se ha encariñado mucho con Don Quijote.


    XI. Reflexión de los consejos que da Don Quijote a Sancho.

    Creer en Dios es fundamental para poder alcanzar un mínimo de sabiduría, si no creo en el, no puedo creer en mi mismo, ni en lo que digo, ni en lo que hago, porque Dios es la base de todo y le debo respeto.

    No hay nada más bello que sentirnos orgullosos de nuestras raíces, de lo que somos, donde venimos, nuestra familia, amigos, ciudad, casa, etc. Que a la hora de haber surgido, yo pueda decir con orgullo que fui humilde y que he prosperado gracias a mi esfuerzo y dedicación.

    Aunque no se crea, el cuidado del cuerpo juego un papel muy importante en la sociedad. Si me ven limpia bien arreglada, bien peinada, vestida para la ocasión, etc. Muy posiblemente generaré respeto, pero si me ven mal arreglada y oliendo feo, quizá me miraran con horror.

  • Causas de la muerte de Don Quijote.

  • Es obvio que la vida de Don Quijote estaba basada en sus sueños y en su caballería.

    Todos estos sueños se acabaron en el momento en el que Don Quijote tuvo que regresar a su aldea.

    Un hombre no puede vivir sin sueños e ideales, por esta razón Don Quijote murió. Le quitaron sus deseos de vivir.

    Con esto se concluye que Don Quijote De La Mancha murió de pena moral.

    XIII. Personajes principales y secundarios

    Personajes principales

    Don Quijote de la Mancha:

    Es, por supuesto, el protagonista de la obra. Un hombre de unos 50 años de edad que, debido a su ociosa y aburrida vida, se dedicó a leer novelas de caballería. Debido a que esto le tenía ocupado de día y de noche (leía todo el tiempo), perdió la cordura, volviéndose completamente loco y queriendo así, convertirse en caballero andante, como en las novelas que leía. Tomó, entonces, el nombre de Don Quijote -de la Mancha-, por su lugar de origen.

    Don Quijote tenía una complexión débil, era enjuto, arrugado por la edad, pero era un hombre lleno de ideales caballerescos como la honradez, la piedad, la bondad y amabilidad, pero fue tanto su afán de lograr fama y renombre que llegó a convertirse en un hombre maquiavélico, pues, a pesar de que él pensaba que todo lo que hacía era bueno, causó daño a muchos, para conseguir su objetivo y quedar como un héroe, logrando lo contrario, ya que la gente se daba cuenta de que tenía zafado un tornillo.

    Él veía el mundo con los ojos de la locura, pues todo lo adaptaba a su propia novela caballeresca, siendo él el héroe de ella.

    En la obra, con el personaje con quien más se relacionas es con Sancho Panza, su escudero, ya que lo acompaña en todas sus locuras, como por ejemplo las batallas, la búsqueda de su doncella, Dulcinea del Toboso, que no es más que una vulgar campesina.

    Con respecto a su objetivo, Cervantes lo concibe, en su aspecto más externo, como herramienta para ridiculizar los libros de caballerías, cuyo género provocaba particulares prevenciones estéticas en el autor, que veía tales obras como disparatadas, inverosímiles y escritas con un estilo falso e innecesariamente redundante. Don Quijote es el prototipo de hombre bueno y noble que quiere imponer su ideal por encima de las convenciones sociales y de las bajezas de la vida cotidiana, actuando a modo de héroe de una realidad que todos los días le hiere y ofende, erigiéndose campeón de las más puras esencias del amor, el honor y la justicia.

    Su función es la de caballero andante, como se lo dictaba su locura.

    Su relación principal en el transcurso de la historia es con Sancho, con quien logra compenetrarse.

    Sancho Panza:

    Es un personaje fundamental en la obra, ya que se complementa con Don Quijote, y a la vez constituye un contraste natural entre los dos. Sancho, el escudero del loco caballero andante, es un pueblerino lleno de fe y de astucia, es materialista, pero a la vez bondadoso, de ambición ingenua y sentido común.

    Físicamente, no se tiene claridad de cómo era Sancho, pues, en el capítulo del vizcaíno, se le llama Sancho Zancas, o piernas largas, pero después el personaje se va figurando como un hombrecillo bajo y panzudo. Se cree que ni el mismo Cervantes tuvo, por lo menos en un comienzo, una idea clara sobre su aspecto (ocurre lo mismo con el nombre de la señora de Sancho).

    En cuanto a su función en la obra, su personaje nace necesariamente para contener y refutar la fantasía desviada de su señor; es quien mantiene los pies del Quijote en tierra firme. Por ejemplo, en la primera salida de nuestro hidalgo, nos damos cuenta de que a su lado falta una figura que le relacione con la verdadera realidad de las cosas y le ofrezca su simpática compañía. Es necesario el escudero, que, a partir de la segunda salida, acompañará en todo momento a don Quijote.

    Se puede decir que Sancho Panza ha venido a convertirse en el signo del materialismo, en contraste con el idealismo de don Quijote. Contra los típicos personajes de la novela picaresca, aquí se describe a un hombre del pueblo, infantil y egoísta, pero a la vez leal, y, a pesar de su desconfianza, crédulo de los sueños de su señor. “Ambos, el intelectual señor y el empírico escudero, pierden al soplo de una ilusión el equilibrio de su vivir y de su penar.”

    Su mayor relación en la obra, es con su amo.

    Sansón Carrasco:

    A pesar de que no aparece mucho en el libro, es uno de los más importantes porque es quien da un cambio radical a la vida de Don Quijote.

    Sansón Carrasco es uno de los personajes ficticios que aparece en las dos partes de la novela Don Quijote de la Mancha escrita por Miguel de Cervantes. A diferencia de Don Quijote, Carrasco elige voluntariamente convertirse en caballero andante con el único propósito de vencer a Don Quijote y así, bajo las reglas de la caballería, obligarlo a retirarse para que pueda ser curado de su locura.

    La primera vez que se enfrenta Carrasco a Don Quijote lo hace como el Caballero de los Espejos y es derrotado. La segunda vez, como el Caballero de la Blanca Luna, lo derrota y obliga a retirarse de la caballería por un año. Don Quijote cumple su promesa y se retira.

    Dulcinea del Toboso:

    Es la motivación de Don Quijote, prácticamente por ella hace todo lo que hace.

    (Pág. 7)

    Personajes Secundarios

    Barbero:

    Del barbero se puede decir que era un tipo altamente influenciable y voluble. Se reía a costa de los demás como lo hacía con Don Quijote. Necesita de alguien que lo apoye en esto, como el Cura, pues es la típica persona que tiene poder cuando no se enfrenta sólo a las cosas, en fin, un cobarde y aprovechador de los más vulnerables.

    Su visión del mundo estaba en constante cambio, pues tenía conexión directa con la influencia de los demás.

    Su función, en el fondo, es mostrar la maldad como una enfermedad tanto o más terrible que la locura.

    Su objetivo es mostrar otra clase de personas que hay en la sociedad y que siempre están presentes para entorpecerle el camino a la gente con ideales.

    Pareciera ser un hombre adulto, de contextura ancha y barbas grandes.

    Se relaciona principalmente con el Cura, que era su “fuente de poder”.

    Cura:

    Era un personaje de decisiones extremas, decidido, pero a la vez bastante ignorante, pues pensaba que hacía el bien con algunas cosas que perjudicaban, como las burlas a costa del Quijote, o la quema de sus libros; no tomaba el peso de lo que hacía, o a quién pasaba a llevar para conseguir algo.

    Pare él la visión del mundo debía basarse en la perfección a su propia manera, viéndose a él como mediador entre lo divino y lo funesto, pues se iba a los extremos…

    Su objetivo es mostrar el punto al que se puede llegar por tener lo desconocido como algo temible, porque, sin duda, sus artimañas eran sólo un escudo protector contra su ignorancia.

    Su función en la obra era curar al Quijote de su locura, pero valiéndose de malas formas, viéndose más locura en él y en el barbero que en el propio Quijote, que no le hacía mayor daño a nadie (con su locura). Su aspecto debía ser similar al del barbero.

    Relación principal con el Barbero, que intentaban sacar al Quijote de la locura por medio de sufrimiento, daño y más locuras que todas las del hidalgo juntas.

    Indudablemente un personaje muy importante es Ginés de Pasamonte, del cual hablé en puntos anteriores.

    Otros de los personajes secundarios…

    Teresa Panza.

    La duquesa

    Altisidora

    Cardenio

    Don Fernando

    Dorotea

    Luscinda

  • Influencia de Don Quijote en Sancho y viceversa

  • Don Quijote es un hombre muy intelectual y culturizado, esto ha influido mucho en Sancho, vemos que utiliza palabras con mayor sentido, sus refranes empiezan a tener lógica, encuentra temas de interés de los cuales hablar. Todo esto lo podemos ver reflejado en su gobierno en la isla Barataria, ya que es muy inteligente y sutil a la hora de resolver los problemas que se le presentan.

    Sancho le ha mostrado a Don Quijote que se puede confiar de verdad en alguien y que realmente existen personas buenas e incondicionales en el mundo. Don Quijote ve en Sancho una ayuda y un apoyo, que analiza las cosas de una forma diferente, pero lo puede llegar a hacer caer en cuenta de los errores que comete auque le cueste aceptarlos.

    XV. Tiempo histórico.

    Primera salida de Don Quijote.

  • Venta donde fue armado caballero.

  • Aventura del muchacho Andrés.

  • Encrucijada donde tuvo duda de que camino seguiría.

  • Aventura de los mercaderes.

  • Segunda salida de Don Quijote

  • Aventura de los molinos de viento.

  • Aventura de los frailes y el vizcaíno.

  • Bosque donde durmió con los cabreros.

  • Aventura de los Yangüeses.

  • Venta de innumerables aventuras y sucesos.

  • Batalla de las ovejas.

  • Aventura del cuerpo muerto.

  • Aventura con los batanes.

  • Aventura con el barbera a quine ganó el “yelmo de mambrino”.

  • da libertad a los galeotes.

  • Ocultase en Sierra Morena.

  • En Sierra Morena haciendo penitencia.

  • Tercera salida

  • Lugar en donde encontró a Dulcinea encantada.

  • Aventura del carro de las cortes de la muerte.

  • Aventura del caballero del Bosque.

  • Aventura de los leones.

  • Bodas de Camacho.

  • Cueva de montesinos.

  • Aventura del rebuzno.

  • La aventura del titiritero.

  • Aventura del barco encantado.

  • Aventura de la bella cazadora.

  • Palacio del duque.

  • Ínsula Barataria.

  • Sitio de los moriscos.

  • Dónde cayó Sancho y su jumento.

  • Aventura de las redes y las batallas de toros.

  • Aventura de los ladrones del bosque.

  • Aventura de los ladrones en el bosque.

  • Batalla con el caballero de la Blanca Luna.

  • Aventura de los cerdos.

  • Último encuentro con los duques.

  • Estructura de la obra

    Confluyen diversos aspectos en la estructuración de la novela:

    % En primer lugar las dos partes . Y esto, que podría haber sido una mera división externa, se convierte en auténtico hecho estructurador por las diferencias que se muestran entre una y otra. Especialmente importante, en este sentido, la que afecta al desarrollo de los personajes principales. En efecto, si bien hay una evolución continua a lo largo de toda la obra, la diferencia de su comportamiento entre la primera parte y la segunda es marcada. En la primera, don Quijote ve la realidad transformada por su imaginación caballeresca (donde hay molinos ve gigantes, por ejemplo); en la segunda, en cambio, la ve como es y son los demás personajes los que las convierten en aventuras caballerescas (como ocurre en el pasaje de los leones). Don Quijote, por tanto, se acerca cada vez más al mundo de la realidad. Por otra parte, Sancho, en la segunda parte, se ha acomodado mejor a su amo y participa más de su mundo, llegando a vivir la pura ilusión en la ínsula Barataria. Todo ello des emboca en el entrecruzamiento final del idealismo de don Quijote con el realismo de Sancho.

    % Aparte de esto se aprecian las tres salidas como otro elemento estructurador, el más generalmente tratado. La división de la obra en tres salidas permite ver claros paralelismos entre ellas, aunque su extensión es muy diferente: una preparación y salida, una serie de aventuras y vuelta.


    % Desde otra perspectiva, tal vez más de acuerdo con la verdad de la novela, cabe formular esta línea estructural, teniendo en cuenta no las salidas, sino las vueltas. Dicha formulación permite ver mejor el proceso evolutivo de don Quijote y Sancho en ese encuentro entre idealismo y realismo. En la primera vuelta , don Quijote regresa no sólo armado caballero sino también triunfante, desde su perspectiva, con su primera hazaña (la del muchacho vapuleado); y ni siquiera obsta su optimismo caballeresco el molimiento por parte de los mercaderes. En la segunda , ya su vuelta se realiza enjaulado y, pese al recurso del encantamiento, es una situación humillante que puede crear dudas en don Quijote: "Muchas y muy graves historias e yo leído de caballeros andante; pero jamás he leído ni visto, ni oído, que a los caballeros encantados los lleven desta manera y con el espacio que prometen estos perezosos animales" . En la tercera , se da el derrumbamiento total de Don Quijote y de su ideal caballeresco; tal es así, que vuelve para morir tras haber recuperado la razón. Si esta evolución de don Quijote la consideramos a la par que la de Sancho, de sentido contrario, estaremos probablemente en el auténtico meollo del asunto de la novela. Efectivamente, hay un progresivo acercamiento de las iniciales posturas contrapuestas de don Quijote y Sancho (idealismo - realismo) hacia un equilibrio e incluso entrecruzamiento final.

    Por último, un elemento estructurador fundamental, olvidado con demasiada frecuencia, es el carácter paródico de la novela. La estructura de El Quijote parece ser la de una parodia de los libros de caballerías y, por ello, sigue sus esquemas: se apropia de la disposición general de dichos libros, de sus personajes, del encadenamiento de aventuras y de sus quimeras.

    ¿La introducción de relatos cortos en el libro, como “el curioso impertinente” ¿han sido un acierto, o una equivocación?

    Yo pienso que ha sido un acierto porque es una forma de recrear el libro. A mi me gustaron mucho esas lecturas, ya que son entretenidas y tienen elementos muy interesantes para analizar.

    Formas de expresión

    Si estoy de acuerdo ya que para que un libro sea entretenido (al menos para mi) debe tener diversidad, en este caso de lenguaje. Los libros que usan un solo tipo de lenguaje se me hacen monótonos y aburridores. No me gustan en absoluto.




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    Enviado por:Ximena Calderón
    Idioma: castellano
    País: Colombia

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