Literatura
El pazo vacío; Xabier P Docampo
ÍNDICE
| TEMA | PÁGS. |
1. | Índice........................................................ |
1 |
2. | Resumen................................................. | 2-4 |
3. | Personajes............................................. | 4 |
4. | OPINIÓN Personal............................ | 5 |
RESUMEN
N
icolás vivía en Eiravella, solo había ido al colegio tres días, no le gustaba y no quiso volver más. Sus padres no lo sabían, pero Ramiro, que era un amigo suyo que sabía lo que pasaba, siempre al final de cada evaluación le llevaba las notas para que este las fotocopiara con su nombre, para que así sus padres no sospecharan. Los padres de Nicolás siempre estaban viendo la televisión, pero si tenían que ayudarle dejaban de hacer todo y le ayudaban. Nicolás dijo en la escuela que se había ido a otra en la ciudad y así lo creía toda la clase menos Ramiro, Társila y Sol que eran los únicos amigos que había hecho en esos tres días.
Siempre que podía, Nicolás iba a visitar a su tío Delio que vivía en el vagón de un tren abandonado. Nunca le habían hablado de él porque no se llevaba bien con el padre de Nicolás. El vagón estaba bien provisto de electricidad, agua y todas las cosas necesarias para vivir. Delio era un relojero, y aunque no le gustaba que le fuesen a visitarle niños, Nicolás siempre iba para ver como arreglaba relojes antiguos.
Un día que fue Nicolás a visitar a Delio, este tenía un reloj que le habían dado para que arreglase, y le propuso a Nicolás que si quería ayudarle en ese reloj. Estuvo ayudándole mientras no iba a clase. Le hacía muchas preguntas sobre el reloj, de que madera era, de que año era y preguntas por el estilo. En el reloj había un doble fondo que descubrió Delio, en él había un cofre con unas cartas de amor, unas joyas dentro de un pañuelo y unas monedas antiguas. Leyeron las cartas y Nicolás se fue a comer a su casa.
Por la tarde empezaron a buscar el papel donde estaba el teléfono del dueño del reloj. Llamaron a Bouza que era el que le había dado el reloj a Delio para que lo arreglase. Este les dijo que se lo había comprado a un anticuario de la ciudad. Delio conocía al anticuario y mandó a Nicolás con una carta a que fuera.
Al día siguiente fueron Nicolás, Ramiro y Sol a la ciudad a visitar al anticuario. Cuando lo encontraron le dieron la carta y le preguntaron sobre el reloj. El anticuario les dijo le lo había conseguido con un lote de relojes que le dieron, y que se lo compró a un tal Venancio. Los chicos llamaron a Venancio desde el teléfono de la tienda. Fue el anticuario quien habó con Venancio y se lo preguntó, cuando salió le dio a los chicos la dirección y el teléfono en un papel de donde Venancio había conseguido el reloj. En cuanto salieron miraron el papel donde ponía la dirección y el teléfono de Sonia Freire de Silvela, que era así como se llamaba la señora. Fue Sol quien llamó, la mujer le contestó y le dijo que el reloj se encontraba anteriormente en una capilla del Pazo de Eiravella.
Seguidamente, Nicolás se presentó en el vagón de Delio, le comentó sobre lo que había descubierto. Delio le dijo que él había examinado las cartas que había en el cofre y que dos de ellas eran de una persona pero otra no. Por la tarde estaban todos donde Delio y comenzaron a pensar sobre lo que tenían que hacer para conseguir más información. Ramiro tenía que ir a hablar con el padre de Társila que era historiador y sabía todo sobre la historia del pueblo. Mientras tanto Nicolás y Sol tendrían que ir ha hablar con el dueño del Pazo. Los dueños del Pazo eran Celso y Veneranda, y cuando llegaron al Pazo hablaron con Veneranda. Querían saber todo sobre la familia de Veneranda y sobre el Pazo.
Se encontraron con Ramiro en su casa, pero Ramiro estaba acompañado por Társila que había sospechado al verle en su casa tomando apuntes sobre el Pazo, y quiso acompañarle. Le contaron todo a Társila y ésta prometió no contar nada a nadie. Delio no se lo tomo tan bien que haya otra chica en el grupo, aunque conociera al padre de Társila. Tenían apuntado en un cuaderno toda la información que iban recopilando. Cuando ya que tenían toda la información que aportaba cada uno. Decidieron que tenían que buscar lotes como el de las joyas y las cartas, pero para eso tendrían que ir al Pazo y no era cosa fácil. Llamaron a Celso, el dueño del Pazo, para pedirle que Sol fuera visitar el Pazo, y el dueño cedió.
Fueron todos los chicos a visitar el Pazo. Celso no estaba muy dispuesto a enseñárselo pero aun así les guió enseñándoles lo que le parecía más interesante. Cuando llegaron a la salida de un salón, preguntaron a Celso que si podían hacer un dibujo del sitio para que así se fuera y pudieran husmear. Mientras Sol y Társila vigilaban en el pasillo por si volvía Celso, los otros dos buscaban en las habitaciones cualquier pista, solo encontraron un estuche de agujas y una almohadilla en un arca.
Se dirigieron al vagón de Delio para examinar lo que habían encontrado. Dentro de la almohadilla había un papel donde parecía que ponía algo de las cortizas. Acordaron de volver al Pazo a mirar todas las cortizas que hayan. No encontraron nada, solo consiguieron volver a molestar a Celio.
Al día siguiente Nicolás se dirigió a la casa de Sol a buscarla. Tuvo que ayudarla a hacer todos los encargos que tenía que hacer. Después de todo esto aparecieron Társila y Ramiro, el cual traía un árbol genealógico de toda la familia que ha habido en el Pazo, en el cual se observaba que todos los nombres de mujeres empezaban por “S” y los de hombres por “D”. Cuando llegaron al vagón de Delio, éste les dijo que lo que tenían que buscar no eran cortizas, sino cortinas. El único lugar donde se podrían guardar algo para que nadie lo viese, era el doblez de debajo de las cortinas, pero en una cortina que nadie la pudiera mover. Celio ya no les volvería a dejar entrar al Pazo, así que tendrían que entrar de noche, contando, claro está, con las trabas que pondrían los padres de cada uno. Aun así pudieron conseguir que les dejasen por la noche. Delio también les acompañaría al Pazo.
Por la tarde fueron al Pazo, como habían quedado. Buscaron todo tipo de cortinas que nunca se moviesen para luego buscar en ellas. Cuando decidieron salir, a Társila se le olvidó cerrar las contraventanas del baño, así que Celso fue ha cerrarlas. Mientras tanto, Nicolás y Sol se escondieron debajo de las escaleras de salida, y Társila y Ramiro se fueron corriendo para que Celso no viese que solo eran dos. Cuando Celso salió, Nicolás y Sol subieron al piso de arriba a buscar en las cortinas. No encontraron nada y decidieron esperar a Delio. Cuando llegó se dirigieron a donde estuvieron anteriormente los chicos. Allí encontraron en una cortina unos objetos y unas cartas, de repente apareció la sombra de un señor a lo lejos, era Silverio, el último heredero de la familia, que iba a buscar el Deus Solis, que era la herencia de la familia. En uno de los papeles ponía donde se encontraba el Deus Solis, en el banco de la ventana más alta de la torre. Fueron allí rápidamente antes de que Silverio les encontrase. Allí estaba un envoltorio con el Deus Solis en su interior, pero le faltaba el diamante. Lo cogieron y se marcharon, Silverio les vio bajando pero pudieron escapar por otra puerta.
Luego todos se encontraron en el vagón. Siguieron la historia del Pazo y el Deus Solis. De repente apareció en el vagón Silverio reclamando lo que pertenecía y así termino la historia. Por último Delio llamó a todas las casas para explicar lo que sucedió.
PERSONAJES
-
Nicolás: Es el protagonista de historia. No va al colegio pero le gusta aprender y es curioso, por eso empezó a investigar el Pazo
-
Delio: Es el tío de Nicolás, hermano de su padre. No le gustan los niños ni que hablen a la vez. Siempre estaba solo, y la gente le veía como alguien extraño que había desaprovechado su vida.
-
Ramiro: El mejor amigo de Nicolás, aunque a veces no le soportara la forma en la que se comportaba. Era el que siempre ayudaba a Nicolás a ocultar que no iba al colegio.
-
Sol: También una buena amiga de Nicolás. Se sentía atraída por Nicolás y no se lo dijo hasta el último momento.
-
Társila: Otra de las amigas que Nicolás hizo en el colegio los tres días que estuvo. Siempre iba bien abrigada y por eso se la reconocía.
-
Padres de Nicolás: Casi siempre estaban fuera de casa, pero cuando Nicolás tenía una duda éstos le ayudaban. Su madre siempre llamaba a Nicolás Enea, aunque no tuviera nada que ver, y pensaba que su hijo era maravilloso.
-
Aurelio: Era el padre de Társila. Era el historiador del pueblo y fue quien ayudó a hacer el árbol genealógico.
-
Silverio: El último heredero de la familia del Pazo y, por tanto, el que tendría que quedarse con el Deus Solis. Toda su vida había vivido del dinero que sacó de la piedra preciosa del Deus Solis.
OPINIÓN PERSONAL
Es una historia interesante y entretenida, los personajes también son divertidos. También las discusiones que se llevan entre ellos y con Delio. El aguante de Delio, que es una persona solitaria, ante unos niños tan revoltosos.
Los valores que enseñan sobre la amabilidad y sobre siempre decir la verdad, son bastante buenos.
El pazo vacío Trabajo - Lengua.
5
Descargar
Enviado por: | Kalcetin |
Idioma: | castellano |
País: | España |