Literatura


El arte de amar; Erich Frömm


Guía de lectura del libro “El arte de amar”

A .- Amor entre padres e hijos

1.- Caracterizar el amor materno y el amor paterno. Destacar los aspectos positivos y negativos de cada uno ¿Por qué ambos son necesarios para el normal crecimiento del niño hacia la madurez?

2.- Explicar el desarrollo de la capacidad de amor que vive el niño.

3.- Explicar la evolución del objeto amoroso con que el niño se va relacionando a medida que crece,

4.- ¿En dónde se encuentra la base para la salud mental y el logro de la madurez?

5.- ¿Cuáles pueden ser las distintas causas del desarrollo neurótico? ¿Cuál es el papel que puede jugar la madre al respecto?

B.- Objetos amorosos

1.- Caracterizar en no menos de 20 renglones el amor: fraternal, materno, erótico, amor a si mismo. Resaltar lo más importante y distintivo de cada tipo de amor.

2.- Con respecto al amor a uno mismo: ¿es el amor a uno mismo egoísmo? ¿Cuál es la relación entre ambos? ¿Por qué?

3.- Caracterizar a la persona egoísta.

4.- ¿Se puede amar a los demás y no amarse a uno mismo? Justificar

5.- ¿Qué relación hay entre el egoísmo y una madre sobreprotectora?

6.- Describir la generosidad neurótica.

7.- Comentar las ideas del Maestro Eckhart.

C.- El amor y su desintegración en la sociedad occidental contemporánea

1.- Describir la estructura básica del capitalismo desde sus inicios hasta hoy. Explicar la influencia que ha tenido sobre la estructura caracteriológica del hombre moderno.

2.- ¿En qué consiste el problema humano del capitalismo moderno?

3.- ¿Cuáles son las consecuencias que sufre el hombre? Explicar.

4.- ¿De qué manera el hombre moderno huye de su sentimiento de angustia y culpa por encontrarse en soledad, por no poder superar el estado de separatidad.

5.- ¿En qué consiste la felicidad del hombre moderno?

6.- En la página 94 Fromm describe distintas formas individualizadas de la patología de amor, neuróticas. Señalarlas y describirlas brevemente.

7.-¿En qué consiste la relación amorosa propia de los hombres que en su desarrollo emocional han permanecido fijados a una relación infantil con la madre? ¿Y con el padre?

8.-¿En qué consiste la clase de perturbación neurótica que aprece cuando los padres no se aman?

9.- Describir (mínimo 10 renglones) las otras formas frecuentes de amor irracional (pseudoamor) (Amor idolátrico, amor sentimental, uso de mecanismo proyectivos).

10.- ¿Es posible que en una relación de amor haya conflicto? Explicar

11.- ¿En qué consiste la desintegración del amor a Dios? (Pág. 102)

D.- La práctica de amor.

1.- ¿Hay recetas que puedan recomendar como se debe practicar el amor? ¿Cómo lo fundamenta el autor?

2.- ¿Cuáles son los requisitos o actividades para practicar cualquier arte?

3.- ¿Qué recomienda el autor para aprender la concentración? ¿Qué dificultades se presentan?

4.- De qué manera se practica la concentración en la relación con las personas?

5.- ¿Qué significa y cuál es la importancia de hacerse sensible a uno mismo? ¿Y a otros hombres?

6.- ¿Cuáles son las condiciones para la práctica del arte de amar? Explicar brevemente cada una

7.- Oponer narcisismo a objetividad.

8.- ¿Qué es lo común de todas las formas de Psicosis?

9.- ¿Qué formas adopta el narcisismo, o el ser más o menos insanos en la gente normal?

10.- ¿Cuál es la importancia de la humildad, de la razón y de la objetividad en relación con el arte de amar?

11.- Explicar cuál es la importancia de la fe en relación con el arte de amar.

12.- Explicar en detalle la actitud de ACTIVIDAD y su importancia en el arte de amar.

13.- Elaborar una red conceptual de cada uno de los apartados (Capitulos)

EL ARTE DE AMAR

A.-

1.- El amor materno se caracteriza por ser incondicional, no necesita conseguirlo ni merecerlo, la madre ama al bebe por ser su hijo. Es el que brinda seguridad, la madre quiere que el niño se torne independiente y llegue a separarse de ella.

El aspecto negativo de ser incondicional es que, no solo es necesario merecerlo, sino también es imposible conseguirlo y controlarlo. Si no existe, nada se puede hacer para crearlo.

El padre empieza a tomar verdadera importancia en la vida del niño a partir de un segundo período.

A diferencia del amor materno, éste es condicional, el padre ama al hijo porque llena sus aspiraciones, porque cumple con su deber, porque es como el; la función del padre es enseñarle, guiarlo en la solución de problemas que le plantea la sociedad en la que ha nacido.

El aspecto positivo del amor paterno, es que ya que es condicional, es posible conseguirlo.

Podemos mostrar el aspecto negativo, es que el amor paterno debe ganarse, y que también puede perderse si no hace lo que de él se espera. A la naturaleza del amor paterno débese el hecho de que la obediencia es la principal virtud y la desobediencia el principal pecado.

Tanto el amor materno, como el paterno son necesarios para el crecimiento del niño. En los primeros años el niño necesita el amor incondicional y el cuidado de la madre, tanto desde los psicológico como de lo fisiológico.

Después de los 6 años el niño necesita el amor paterno para que este le sirva de autoridad y guía, si esto no se cumple, puede aparecer una neurosis.

2.- A medida que el niño crece va cambiando su capacidad de amar.

En un primer momento recibe el amor de la madre, el cual es pasivo porque no tiene que hacer anda para que lo quieran; lo aman por lo que es y porque es. Pero en esta etapa el niño responde con gratitud y alegría el amor que le brindan pero todavía no ama. El amor infantil es “Amo porque me aman”.

A partir de los 8 años, el problema consiste en ser amado por lo que es; aparece el sentimiento de producir amor a partir de su propia actividad, piensa en DAR. Aquí es cuando cambia la idea del amor, ya no piensa en ser amado, sino en AMAR.

El niño llega a la adolescencia ya ha superado su egocentrismo, ya no toma a las personas para satisfacer sus necesidades, sino que las necesidades de los otros son igual o mas importantes que las suyas.

Podemos definir el amor inmaduro y el maduro con dos frases, el primero “Te amo porque te necesito”, y la segunda “Te necesito porque te amo”.

3.- La primera relación del infante es con la m vtodavía depende por completo de la madre.

A medida que se va haciendo mas independiente, empieza a perder relación con la madre, prestándole mayor atención al padre, al cual podríamos llamar “amor merecido”.

Por esto no es extraño que, aunque seamos adultos nos aferremos al anhelo de amor materno, aunque es más difícil de satisfacer.

4.- La base de la salud mental y el logro de la madurez esta centrada en la incorporación de la conciencia materna y la conciencia paterna.

La persona llega a la madurez cuando se libra de las figuras exteriores del padre y la madre, y logra interiorizarlas y elaborar una conciencia materna sobre su propia capacidad de amar, y una conciencia paterna fundada en su razón y su discernimiento; y al amar, ama tanto con la conciencia materna como con la conciencia paterna, si no fuera así se tornaría áspero o perdería su criterio y no permitiría el desarrollo tanto de los demás como propio.

5.- Una de las causas del desarrollo neurótico puede basarse en el fracaso de lo explicado en el punto anterior, en la incorporación de la conciencia materna y la conciencia paterna.

Otro motivo puede ser por una madre que juega el papel de amante, que es demasiado indulgente o dominadora y un padre débil e indiferente; en este caso el individuo puede convertirse en un ser independiente, que carece de cualidades paternas, intentando encontrar madres en todo el mundo.

También, si la madre es fría, indiferente y dominadora, transfiere sus obligaciones al padre, creando un individuo con orientación unilateral paterna, entregado a los principios de la ley, orden y autoridad.

La característica principal de los desarrollos neuróticos es que el principio materno o paterno no llega a desarrollarse, o estos papeles se tornan confusos.

B.-

1.- La principal clase de amor es el amor fraternal, a todos los seres humanos, el amor entre iguales.

Este amor comienza cuando amamos al que desconocemos, o al desvalido, al que no necesitamos para nuestros fines personales.

A partir del amor fraternal se entiende el sentido de responsabilidad, cuidado, respeto y conocimiento con respecto a cualquier otro individuo, el deseo de promover su vida.

Este amor se basa en la experiencia de que todos somos uno, somos iguales por la identidad de la esencia humana, para experimentarla es necesario traspasar lo superficial para llegar hasta el núcleo y poder percibir la identidad, la hermandad.

La forma mas elevada de amor, es el amor materno. La esencia de éste es cuidar de que el niño crezca, y esto significa desear y alentar que el niño se separe de ella, esto requiere generosidad y capacidad de dar todo sin desear nada salvo la felicidad del hijo.

En la primer etapa el amor materno es el cuidado y la responsabilidad para la conservación de su vida y su crecimiento.

La segunda etapa es crear en el niño el sentimiento de amor a la vida.

Para poder inculcar este sentimiento la madre debe no sólo ser una buena madre sino una persona feliz.

La forma de amar mas engañosa que existe es el amor erótico; es el anhelo de función completa con una única otra persona.

Decimos que es engañoso ya que se puede confundir fácilmente con las experiencia de “enamorarse”, o hablar de la vida y de los sentimientos para superar la separatidad, por ej. En una relación posesiva; o los deseos sexuales.

El amor erótico es a la vez fraterno; uno de los productos de este último es la ternura, también decimos que es fraterno porque ama a toda la humanidad a través de la otra persona.

La premisa del amor erótico es amar desde la esencia del ser, ya que en esencia todos somos uno, lo que nos llevaría a la conclusión de que el amor es un acto voluntario, sin importar a quien amamos, sino comprometernos a dedicar nuestra vida a la otra persona.

Si lo miramos desde otro punto de vista, todos somos diferentes, el amor erótico requiere elementos específicos y altamente individuales que existen entre algunos seres, pero no entre todos.

Muchos creen que el amor a si mismo es un pecado, pero Fromm nos muestra que es una virtud, y que esta ligado al amor a cualquier otro ser, que son conjuntivas. Que el respeto, el amor y la comprensión del otro no puede separarse de la propia integridad y unicidad, el amor y comprensión del propio si mismo.

Sí un individuo no es capaz de amar productivamente, también se ama a sí mismo.

2.- ¿Es el amor a sí mismo un fenómeno similar al egoísmo o son opuesto? Esto es lo primero que tenemos que analizar.

El egoísmo y el amor a si mismo, están muy lejos de ser idénticos, sino que son realmente opuestos.

Las personas egoístas son incapaces de amar a los demás, pero tampoco pueden amarse a sí mismas.

El amor a sí mismo está inseparablemente ligado al amor a cualquier otro ser..

3.- La persona egoísta sólo se interesa por sí misma, desea todo para sí misma, no siente placer en dar, sino únicamente en tomar. Considera el mundo exterior sólo desde el punto de vista de lo que puede obtener de él; carece de interés en las necesidades ajenas y de respeto por la dignidad e integridad de los demás. No ve más que a sí misma; juzga a todos según su utilidad; es básicamente incapaz de amar.

El individuo egoísta no se ama demasiado, sino que se odia. Tal falta de cariño y cuidado por sí mismo, que no es sino la expresión de su falta de productividad, lo deja vacío y frustrado. Se siente necesariamente infeliz y ansiosamente preocupado por arrancar a la vida las satisfacciones que él se impide obtener. Parece preocuparse demasiado por sí mismo, pero, en realidad, sólo realiza un fracasado intento de disimular y compensar su incapacidad de cuidar su verdadero ser. Freud sostiene que el egoísta es narcisista, como si negara su amor a los demás y lo dirigiera hacia sí.

4.- ¿Es posible amar a los demás y no amarse a uno mismo?

Esto no es posible, el amor a si mismo y a los demás es conjuntivo.

Podemos respaldarlo en un texto bíblico “Ama a tu prójimo como a ti mismo”, esto implica que el respeto por la propia integridad y unicidad, el amor y la comprensión del propio sí mismo, no pueden separarse del respeto, el amor y la comprensión del otro individuo.

En todo individuo capaz de amar a los demás se encontrará una actitud de amor a sí mismo.

El amor genuino constituye una expresión de la productividad, y entraña cuidado, respeto, responsabilidad y conocimiento; es un forzarse activo arraigado en la propia capacidad de amar y que tiende al crecimiento y la felicidad de la persona amada.

Si el individuo sólo puede amar a los demás, no puede amar en absoluto.

5.- Una madre protectora cree conscientemente que en extremo cariñosa con su hijo, pero en realidad tiene una hostilidad hondamente reprimida contra el objeto de sus preocupaciones. Sus cuidados exagerados no obedecen a un amor excesivo al niño, sino a que debe compensar su total incapacidad de amarlo.

6.- La generosidad neurótica es un síntoma de neurosis observado en muchas personas, que habitualmente no están perturbadas por ese síntoma, sino por otros como la depresión, la fatiga, la incapacidad de trabajar, etc. No sólo ocurre que no consideran esa generosidad como un síntoma; frecuentemente es el único rasgo caracterológico redentor del que esas personas se enorgullecen. La persona “generosa” se preocupa y vive para los demás, no se considera importante y por eso se siente orgullosa. Esta persona, no es feliz, y le intriga descubrirlo.

La labor analítica demuestra que este es otro de los síntomas; que la capacidad de amar o de disfrutar de esa persona está paralizada; que está llena de hostilidad hacia la vida y que, detrás de la fachada de generosidad, se oculta un intenso egocentrismo.

El efecto producido por la madre generosa no es demasiado diferente del que ejerce la madre egoísta, y aun puede resultar más nefasto, puesto que la generosidad de la madre impide que los niños la critiquen.

7.- Las ideas del maestro Eckhart sintetizan lo visto en este capítulo, el dice que hay que amar a todos por igual, incluyéndonos, así los amaremos como una sola persona y esa persona es ala vez Dios y el hombre. Si podemos lograr esto, seremos seres grandes y virtuosos.

C)

1.- La sociedad capitalista se basa en el principio de libertad política y del mercado regulador de todas las relaciones económicas.

Tanto las cosas útiles como la energía y la habilidad humanas se transforman en artículos que se intercambian sin utilizar la fuerza y sin fraude en las condiciones del mercado. La energía y la habilidad humanas no tienen valor de intercambio si no existe demanda en las condiciones existentes en el mercado.

La estructura económica se refleja en una jerarquía de valores. El capital domina al trabajo; las cosas acumuladas, lo que está muerto, tiene más valor que el trabajo, los poderes humanos, lo que está vivo.

Como resultado del desarrollo del capitalismo, presenciamos un proceso siempre creciente de centralización y concentración del capital. Las grandes empresas se expanden continuamente, mientras las pequeñas se asfixian.

Cientos de miles de accionistas “poseen” la empresa; una burocracia administrativa bien pagada, pero que no posee la empresa, la maneja.

A través de la sindicalización del trabajo, el trabajador individual no tiene que comerciar por y para sí mismo en el mercado laboral; pertenece a grandes sindicatos.

Actualmente la iniciativa ha pasado del individuo a la burocracia, tanto en lo que respecta al capital como al trabajo. Cada vez mas individuos dejan de ser independientes y comienzan a depender de quienes dirigen los grandes imperios económicos.

Uno de los rasgos del capitalismo moderno, es la forma específica de la organización del trabajo. Empresas sumamente centralizadas con una división radical del trabajo conducen a una organización donde el trabajador pierde su individualidad, en la que se convierte en un engranaje no indispensable de la máquina.

2.- El problema humano que esto produce es principalmente que el capitalismo necesita hombres que cooperen mansamente y en gran número; que quieran consumir cada vez más; y cuyos gustos estén estandarizados y puedan modificarse y anticiparse fácilmente. Necesita hombres que se sientan libres e independientes, no sometidos a ninguna autoridad, principio o conciencia moral; aunque en realidad sean esclavos, a los que se pueda guiar sin recurrir a la fuerza, conducir, sin líderes, impulsar sin finalidad alguna.

3.- El resultado de esto es que el hombre moderno está enajenado de si mismo de sus semejantes y de la naturaleza. Ahora es un artículo; sus relaciones humanas son esencialmente las de autómatas enajenados, que no deben diferir en el pensamiento, el sentimiento o la acción del rebaño.

4.- El hombre moderno huye de su sentimiento de angustia y culpa por encontrarse en soledad mediante diferentes métodos; en primer término podemos nombrar la estricta rutina del trabajo burocratizado y mecánico, que ayuda a la gente a no tomar conciencia del anhelo de trascendencia y unidad. Si esto no basta, el hombre sobrepone a su desesperación inconsciente por medio de la rutina de la diversión, (la división) la consumición pasiva de sonidos y visiones, y de comprar siempre cosas nuevas y cambiarlas inmediatamente por otras.

5.- La felicidad del hombre moderno consiste en divertirse, la satisfacción de consumir y asimilar artículos, espectáculos, comida, bebidas, cigarrillos, gente, libros, películas, obras; todo se consume, se traga. Nuestro carácter está equipado para intercambiar y recibir, para traficar y consumir; todo, tanto los objetos materiales, como los espirituales, se convierten en objeto de intercambio y de consumo.

6.- Hay muchas formas individualizadas de la patología del amor, que ocasionan sufrimientos conscientes y que tanto los psiquiatras como muchos legos consideran neuróticos, por ej:

  • La condición básica del amor neurótico radica en el hecho de que uno o los dos “amantes” no han superado el patrón de relación infantil, y aspiran a repetirlo en sus exigencias afectivas de la vida adulta, en estos casos la persona sigue siendo una criatura de dos, cinco o doce años. En los casos más graves, esa inmadurez emocional conduce a perturbaciones en su afectividad social; en los más leves, el conflicto se limita a la esfera de las relaciones personales íntimas.

  • Otra forma mas grave, la fijación a la madre es más profunda e irracional. En este nivel el deseo consiste en volver a sus entrañas que todo lo reciben -y todo lo destruyen-. Tal tipo de fijación se produce frecuentemente en la relación con madres que tienen con los hijos una actitud absorbente y destructiva, que quieren mantener a su hijo dentro de ellas; este no debe ser libre e independiente, sino un eterno inválido o un criminal.

7.- Cuando la relación principal se establece con padre se produce otra forma de patología neurótica.

El hijo, que sólo cuenta con el afecto del padre, se comporta frente a éste como un esclavo. Su finalidad principal en la vida es complacerlo, y cuando lo logra, es feliz, seguro y satisfecho. Pero cuando comete un error, fracasa o no logra complacer al padre, se siente disminuido, rechazado, abandonado.

Toda su vida se convierte en una serie de altos y bajos, según que haya logrado o no ganar el elogio del padre. Tales individuos suelen tener mucho éxito en su carrera social, pero en su relación con las mujeres, permanecen apartados y distantes. La mujer no posee una importancia central para ellos, la mujer se siente desilusionada cuando descubre que está destinada a desempeñar un papel secundario al afecto fundamental por la figura paterna que predomina en la vida de su esposo en un momento dado.

Otra de las relaciones neuróticas se refiere a los hombres que han permanecido fijados a una relación infantil con la madre, estos hombres nunca fueron destetados, se sienten como niños, quieren la protección, el amor, el calor, el cuidado y la admiración de la madre.

Estos individuos suelen ser muy afectuosos y encantadores cuando tratan de lograr que una mujer los ame, y aun después de haberlo logrado, pero esta relación es superficial e irresponsable. Todo lo que no corresponda a la actitud de la madre amante hacia un hijo encantador, se toma como prueba de falta de amor.

8.- Mas complicado es el amor basado en una situación paterna de distinto tipo, que se produce cuando los padres no se aman, pero son demasiado reprimidos como para tener peleas o manifestar signos exteriores de insatisfacción.

Ese alejamiento les quita espontaneidad en la relación con los hijos. Esto hace que el hijo no tenga un contacto intimo con los padres, nunca está segura de lo que sus padres sienten o piensan; el resultado es que la niña se retraiga en un mundo propio, teniendo ensoñaciones, permaneciendo alejada; y su actitud será a misma en las relaciones amorosas posteriores.

9.- Otra forma frecuente de amor irracional es el amor idolátrico, si una persona no ha alcanzado el nivel correspondiente a una sensación de identidad, de yoidad, arraigada en el desenvolvimiento productivo de sus propios poderes, tiende a “idolizar” a la persona amada. Se enajena de sus propios poderes y los proyecta en la persona amada; se priva de toda sensación de fuerza, se pierde a sí misma en la persona amada, en lugar de encontrarse.

Este amor suele describirse como el verdadero y grande amor; pero, si bien se pretende que personifique la intensidad y la profundidad del amor, sólo demuestra el vacío y la desesperación del idólatra.

Otra forma de pseudoamor es el amor sentimental, este amor solo se experimenta en la fantasía y no en el aquí y ahora de la relación con otra persona real. La forma mas común de este tipo de amor se encuentra en la gratificación amorosa substitutiva que experimenta el consumidor de películas, novelas románticas, etc; al satisfacer sus deseos de amor, unión e intimidad con el consumo de tales productos. Otro aspecto de este amor es la “abstractificación” del amor en términos de tiempo. Este vive en el pasado o en el futuro, pero no en el presente.

Otra forma consiste en el uso de mecanismos proyectivos a fin de evadirse de los problemas propios y concentrarse en los defectos y flaquezas de la persona amada. Estos individuos son muy sutiles para captar hasta los menores defectos de la otra persona y viven felices ignorando los propio.

Otra forma de proyección es la de los propios problemas en los niños. Esta proyección aparece con cierta frecuencia en el deseo de tener hijos, cuando una persona siente que no ha podido dar sentido a su propia vida, trata de dárselo en función de la vida de sus hijos, pero está destinada a fracasar consigo mismo y para los hijos.

10.- El amor no significa la ausencia de todo conflicto, los conflictos reales entre dos personas, los que no sirven para ocultar o proyectar, sino que se experimentan en un nivel profundo de la realidad interior a la que pertenecen, no son destructivos, sino que contribuyen a aclarar, producen una catarsis de la que ambas personas emergen con más conocimiento y mayor fuerza.

El amor es un desafío constante, no un lugar de reposo, sino un crecer; que haya armonía o conflicto es secundario con respecto al hecho fundamental de que dos seres se experimentan desde la esencia de su existencia.

11.- Actualmente hay una desintegración del amor a Dios, esto es una regresión a un concepto idolátrico de Dios, y una transformación del amor a Dios en una relación correspondiente a una estructura caracterológica enajenada.

La manera de comprobar esto es por ejemplo que la gente esta angustiada, careciendo de principios o de fe, no es movida por otra finalidad que la de seguir adelante; por lo tanto, siguen siendo criaturas, confiando en que el padre o la madre acuda a ayudarlos cuando lo necesiten.

El concepto de Dios ha perdido su significado religioso original y se ha adaptado a la cultura enajenada del éxito, en los últimos tiempos la creencia en Dios se ha convertido en un recurso psicológico cuya finalidad es el hacer al individuo más apto para la pugna competitiva.

D)

1.- Fromm escribe su libro en el tiempo del positivismo, donde todo tenía una teoría, una práctica y una conclusión; había por ejemplo, libros con teorías de cómo se debía amar, o como mantener una buena relación tanto amorosa como sexual. Pero Fromm no está de acuerdo con esto, cree que amar es una experiencia personal que sólo podemos tener por y para nosotros mismo; nadie puede dar los pasos hacia la meta, y el examen concluye antes de que se dé el paso decisivo.

2.- Para practicar cualquier arte se necesita disciplina, cualquier cosa que haga sólo porque estoy en el “estado de ánimo apropiado”, puede constituir un “hobby” agradable o entretenido, pero nunca llegará a ser un verdadero maestro en ese arte.

Se puede pensar que para el hombre moderno nada es más fácil de aprender que la disciplina, pero en realidad el hombre moderno es excesivamente indisciplinado fuera de la esfera del trabajo, cuando no trabaja, quiere estar ocioso, como poder “relajarse”. Esto es una reacción contra la rutinización de la vida; y peleando contra el autoritarismo, ha llegado a desconfiar de toda disciplina, tanto de la impuesta por la autoridad irracional como de la disciplina racional autoimpuesta. Sin esa disciplina, la vida se torna caótica y carece de concentración.

También se necesita concentración, paciencia y preocupación.

3.- Otra de las condiciones para el dominio de un arte es la concentración, lo que no se da en nuestra cultura, necesitamos hacer muchas cosas a la vez. Podemos manifestar la falta de concentración con la dificultad para estar a solas con nosotros mismos.

Uno de los principales pasos que hay que aprender para concentrarse es estar solo con uno mismo, sin leer, escuchar la radio, fumar o beber.

Para concentrarnos podemos practicar algunos ejercicios simples como, por ejemplo, sentarse en una posición relajada, cerrar los ojos y tratar de ver una pantalla blanca frente a los ojos , tratando de alejar todas las imágenes y los pensamientos que interfieran; luego intentar seguir la propia respiración; no pensar en ella, ni forzarla, sino seguirla; tratar además de lograr una sensación de “yo”, “mi mismo”, como centro de mis poderes, como creador de mi mundo.

Tenemos también que aprender a concentrarnos en todo lo que hacemos, la actividad que estemos realizando debe ser lo único que cuenta, aquello a lo que uno se entrega por completo. Si uno está concentrado, poco importa qué está haciendo.

Aprender a concentrarse requiere evitar las conversaciones triviales, las que no son genuinas.

4.- La concentración en la relación con el otro significa principalmente poder escuchar, la mayoría de la gente solamente oye, no toma en serio las palabras de la otra persona. Estar concentrado significa vivir plenamente en el presente, en el aquí y el ahora, y no pensar en la tarea siguiente mientras estoy realizando otra.

Es innecesario decir que la concentración debe ser sobre todo practicada por personas que se aman mutuamente, deben aprender a estar el uno cerca del otro, sin escapar de las múltiples formas acostumbradas.

5.- Es tener conciencia, por ejemplo, de una sensación de cansancio o depresión, y en lugar de entregarse a ella y aumentarla por medio de pensamientos deprimentes que siempre están a mano, preguntarse “¿qué ocurre?”. Lo importante es no racionalizarlos en mil formas en que es factible hacerlo, sino tener conciencia.

La persona media es sensible a sus procesos corporales, una sensibilidad semejante para con los procesos mentales, pero esta es mucho más difícil.

6.- La condición fundamental para el logro del amor es la superación del propio narcisismo, y la fijación incestuosa a la madre y al clan; depende de nuestra capacidad de crecer, de desarrollar una orientación productiva en nuestra relación con el mundo y con nosotros mismos.

Requiere el desarrollo de humildad, objetividad y razón. Toda la vida debe estar dedicada a esa finalidad.

También es necesario la práctica de la fe.

7.- El narcisismo hace que solo experimentemos como real el mundo interior, el polo opuesto es el objetivismo, este es la capacidad de ver a la gente y las cosas tal como son, objetivamente, y poder separar esa imagen objetiva de la imagen formada por los propios deseos y temores.

Tenemos la facultad de pensar objetivamente gracias a la razón, es posible ser objetivo si hemos alcanzado una actitud de humildad.

8.- Lo que podemos encontrar en común en todas las formas de psicosis es que hay una incapacidad extrema para ser objetivo. Para el insano, la única realidad que existe es la que esta dentro de él, la de sus temores y deseos, ve al exterior como símbolo de su mundo interior.

Esto nos pasa a todos cuando soñamos, en el sueño producimos hechos que constituyen la expresión de nuestros anhelos y temores, y durante dormimos, estamos convencidos de que el producto de nuestros sueños es tan real como la realidad que percibimos cuando estamos despiertos.

9.- Todas las personas tenemos una visión no objetiva del mundo, que está deformada por nuestra orientación narcisista. Tenemos claros ejemplos de estos, sólo observándose a sí mismo, o leyendo el diario.

La objetividad es la excepción, y lo corriente es una deformación narcisista en mayor o menor grado.

10.- La humildad y la objetividad son indivisibles al igual que el amor. Para aprender el arte de amar, debemos esforzarnos por ser objetivos en todas las situaciones y hacernos sensibles a la situaciones frente a la que no somos objetivos. Debemos tratar de ver la diferencia entre la imagen que tenemos de una persona y su conducta (creadas por el narcisismo), y ver la realidad de esa persona tal como existe independientemente de nuestros intereses, necesidades y temores.

11.- En la esfera de las relaciones humanas, la fe es una cualidad indispensable de cualquier amistad o amor significativo.

Todos tenemos fe en nosotros mismo, tenemos conciencia de la existencia de un yo, de un núcleo de nuestra personalidad que es inmutable y que persiste a través de nuestra vida. En ese núcleo se basa nuestra convicción de nuestra propia identidad.

Solo la persona que tiene fe en sí misma puede ser fiel a los demás, pues sólo ella puede estar segura de que será en el futuro igual al lo que es hoy, y de que sentirá y actuará como ahora espera hacerlo.

La fe en uno mismo es una condición de nuestra capacidad de prometer.

Lo que importa en relación con el amor es la fe en el propio amor; en su capacidad de producir amor en los demás, y en su confianza.

Hay potencialidades que pueden no ser desarrolladas, como las de amar o las de ser feliz, son las semillas que crecen y se manifiestan si se dan las condiciones apropiadas para su desarrollo y que pueden ahogarse cuando éstas faltan.

Tenemos fe en las potencialidades de los demás, en las nuestras y en la de la humanidad, porque hemos experimentado el desarrollo de nuestras propias potencialidades, la realidad del crecimiento en nosotros mismos, la fuerza de nuestro propio poder y del amor.

12.- Otra actitud indispensable para la práctica del arte de amar es la actividad, como una actividad interior, el uso productivo de los propios poderes.

Decimos que es una actitud muy importante ya que al amar hay que estar en constante estado de preocupación activa por la persona amada, pero no sólo por ella; ser activo en el pensamiento, en el sentimiento, con los ojos y los oídos, mantenerse receptivo, es indispensable.

La capacidad de amar exige estar despierto, de acrecentada vitalidad, que sólo puede ser el resultado de una orientación productiva y activa en muchas otras esferas de la vida.

La única situación apropiada para la inactividad es cuando dormimos. El problema de la multitud de individuos es que durante el día están semidormidos durante el día, y semidespiertos cuando duerme




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Enviado por:Tati Conde
Idioma: castellano
País: Argentina

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