Historia


Écpoca de la Restauración (1874-1923)


LA ÉPOCA

DE LA RESTAURACIÓN

(1874-1923)

1. EL RÉGIMEN POLÍTICO DE LA RESTAURACIÓN Y SUS FUNDAMENTOS SOCIALES

La Restauración Borbónica abarca desde el año 1874 hasta el 1923. Se proclamó el 29 de Diciembre de 1874, tras el pronunciamiento militar del general Martínez Campos.

Las causas por las que se volvió a restaurar fueron varias.

Los españoles estaban decepcionados con el sexenio democrático, con la monarquía de Amadeo y con la I República. También estaban desilusionados por el caos económico en el que se encontraba España: gobernantes débiles e ineficaces, amenaza de la unidad de España por las insurrecciones cantonalistas… (Algunas ciudades querían su independencia).

Además, no hubo oposición por parte de ningún sector social, económico o político fuerte. Sólo se oponen los republicanos, los carlistas y nacionalistas.

ANTONIO CÁNOVAS DEL CASTILLO

Antonio Cánovas del Castillo fue un intelectual, de ideología profundamente conservadora, liberal y antiabsolutista, que desde la I República luchó por instaurar la monarquía borbónica.

Sus objetivos eran recuperar la monarquía y el liberalismo moderado para España.

Creó un nuevo sistema político que estuvo vigente durante toda la época de la Restauración.

Para conseguir sus objetivos, realizó algunos cambios en relación al reinado de Isabel II: ésta debía ceder el trono a su hijo Alfonso, y además, el partido conservador sustituirá al moderado

NUEVO SISTEMA POLÍTICO DE ANTONIO CANOVAS DEL CASTILLO

El nuevo sistema político de Antonio Canovas del Castillo constaba de dos elementos: la monarquía era compartida entre el rey y las Cortes, y dos partidos políticos que se turnaban en el poder, el partido conservador liderado por Canovas, y el liberal liderado por Sagasta.

En el momento de las elecciones siempre va a ganar uno u otro.

Los dos partidos eran oligarcas, es decir, políticos estrechamente relacionados con los terratenientes y la burguesía adinerada. Las elecciones estaban amañadas y ellos estaban de acuerdo en que se turnaran.

Los objetivos eran los siguientes: evitar que ninguno de los dos partidos se quedara excluido del poder y terminar con los pronunciamientos militares, asegurar la estabilidad del sistema político y evitar los bruscos cambios políticos del sexenio, evitar a otros grupos hacerse con el poder, y mantener el orden socioeconómico en beneficio de las clases dominantes.

El soporte social del régimen de a Restauración fue el caciquismo.

El cacique se encargaba de asegurar el voto adecuado en cada momento y controlaba el voto en el ámbito rural. España era eminentemente rural y analfabeta en aquella época. En el medio urbano, tuvo poca influencia.

El sistema de la Restauración favoreció la celebración de consultas electorales pero el voto no fue libre sino sometido a la manipulación y el fraude de los caciques. A esto también se le conoce como pucherazo.

Las consecuencias fueron que ni conservadores ni liberales mostraron interés por cuestiones sociales, no tuvieron en cuenta la opinión pública porque el voto lo tenían asegurado con el fraude.

CONSTITUCIÓN DE 1876

La constitución de 1876 fue la base legal del sistema político de la Restauración.

Representa un retorno a la de 1845, y estuvo inspirada por Cánovas.

Presentaba una serie de características.

La soberanía era compartida entre el rey y las Cortes, que eran bicamerales: el Congreso de los Diputados y el Senado.

Se ampliaron los poderes del rey: designaba al jefe del gobierno, vetaba leyes, nombraba senadores y podía disolver las Cortes.

El sufragio fue restringido hasta el año 1890, donde pasó a ser universal masculino.

Se reconoció la religión católica como la oficial del Estado.

Se limitaron los derechos y libertades individuales.

El turno de partidos empieza con los conservadores en el poder y Canovas al frente desde 1875 hasta 1880 para consolidar el sistema.

Alfonso XII muere en 1885. Le sucede su esposa Mª Cristina de Habsburgo como regente de su hijo que nacerá en 1886.

REGENCIA DE Mª CRISTINA DE HABSBURGO (1885-1902)

Alfonso XII muere en 1885, y le sucede su esposa Mª Cristina de Habsburgo, como regente de su hijo que nacerá en 1886. En ese momento, los liberales de Sagasta están en el poder.

Durante el gobierno de Sagasta se llevaron a cabo varias actuaciones políticas.

Se ampliaron las libertades de expresión y de cátedra, es decir, los profesores y periodistas podían criticar abiertamente a la monarquía, al ejército o a la iglesia católica.

Se crea una nueva ley de asociación. Se legalizan las actuaciones de todas las organizaciones obreras y sindicales.

Se estableció el sufragio universal masculino en 1890.

En la década de los ´90 la práctica del turno bipartidista conservador-liberal se mantuvo de forma casi matemática. También muestra síntomas de agotamiento por no poder o no querer resolver los problemas de España como el analfabetismo, el endeudamiento estatal, la ausencia de reformas sociales efectivas: pensiones de jubilación, asistencia sanitaria, etc. Y ausencia de verdaderas instituciones democráticas por el turno de partidos y el fraude electoral que impidieron la participación de todos los ciudadanos.

2. LA CRISIS DEL ´98 EN ESPAÑA: CAUSAS Y CONSECUENCIAS.

La crisis del ´98 ocurre durante la regencia de Mª Cristina de Habsburgo y el gobierno de Sagasta.

La regencia de Mª Cristina asiste a un hecho importante: la pérdida de las colonias, ya que España en el contexto internacional era una pequeña potencia sin fortaleza militar ni económica. En 1895 estallan insurrecciones independentistas en Cuba y Filipinas.

Hubo varios antecedentes por los que ocurrió la crisis de ´98.

Cuando Alfonso XII llega a España, Cuba se encontraba ya luchando por su independencia.

El general Martínez Campos consiguió en 1878 la paz firmando un acuerdo con las colonias llamado el convenio de Zanjón.

CONVENIO DE ZANJÓN

El convenio de Zanjón es un acuerdo firmado entre España y Cuba que pone fin a la guerra que mantenían desde hacía diez años.

Con este convenio Cuba se compromete a poner fin a las hostilidades, y España da cierta autonomía a Cuba con representaciones en las Cortes y amnistía (perdón) para los revolucionarios.

En 1895 Cuba vuelve a ponerse en lucha por el incumplimiento del Convenio de Zanjón, y será lo que le lleve a la independencia. Los cubanos están dirigidos por José Marti, un personaje con orígenes canarios.

De España fueron para solucionar el conflicto primero Martínez Campos y después Valeriano Weyler.

Cuba estuvo apoyada por EEUU, que estaba equipada con armamento. EEUU protestó por la dureza del ejército y gestionó con la reina la compra de la isla pero ésta y el gobierno se negaron profundamente.

EEUU tenía varios objetivos, no quería que se liberara Cuba, y quería dominar la isla por un doble interés.

En cuanto a lo económico, Cuba exportaba un 90% de su producción de azúcar a EEUU, por lo tanto, le interesaba dominar la isla para que así le saliese gratis.

También le interesaba Cuba por fines estratégicos ya que desde allí EEUU podría tener el control militar sobre el Caribe y Centro América.

En 1898, explosionó el buque de guerra norteamericano Maine en la Habana. EEUU culpa a España sin pruebas y le declara la guerra, que fue como un paseo para los norteamericanos. La armada española quedó destruida por dos ataques de EEUU: el primero en la batalla de la bahía de Manila, en Filipinas, y el segundo en la batalla de la bahía de Santiago de Cuba.

Después de estos dos ataques se pone fin a la guerra firmando un acuerdo de paz en Paris, ya que tenía que ser en un estado neutral. Se firmó en Diciembre de 1898. El contenido del acuerdo de paz fue que España cedió a EEUU, Puerto Rico, Filipinas y la isla de Guam en el pacífico, y Cuba alcanzó la independencia.

Esta guerra tuvo sus consecuencias. España no supo enfrentar con inteligencia el problema de Cuba. Las repercusiones de esta guerra para España fueron varias. Se perdieron 16 buques de guerra y 426 millones de pesetas en material militar. También hubo enormes pérdidas humanas.

Se creó en el país un sentimiento de inferioridad, y miedo por las Islas Canarias por su situación geográfica. Además influyó en la literatura, en la generación del ´98, y en el Regeneracionismo, que es un movimiento político.

REGENERACIONISMO

El Regeneracionismo estuvo liderado por Joaquín Costa. Aportó una visión crítica al sistema político de la Restauración. Lo calificó de inmoral, corrupto e ineficiente. Propuso un Regeneracionismo, es decir, sustituir la política de la Restauración, que protegía los intereses de la oligarquía, por una política más social: hacer obras hidráulicas, construir carreteras y escuelas y hacer una redistribución de la tierra.

No tuvo éxito, pero si hizo tambalear el sistema político de la Restauración.

Este movimiento duró poco tiempo pero consiguió introducir ciertos cambios en la política, ya que obligó a los partidos políticos a proponer en sus programas reformas sociales y políticas, para renovar el sistema político de la Restauración.

Estas reformas no tuvieron éxito porque los grupos sociales dominantes (alta burguesía y terratenientes) no quisieron poner en peligro sus intereses políticos y económicos pero debilitaron el sistema.

3. EL REGIONALISMO Y LOS NACIONALISMOS. EL MOVIMIENTO OBRERO.

Los movimientos nacionalistas se definen por la exaltación de pertenencia (orgullo de pertenecer) a una misma comunidad y se apoyan en la existencia de elementos culturales diferenciales como una lengua propia, un pasado histórico peculiar, una cultura distinta, costumbres propias o un diferente nivel económico.

Desde mediados del S. XIX surgen en Europa sentimientos nacionalistas. Las tendencias fueron tanto autonomistas, protagonizadas fundamentalmente por Cataluña, como independentistas, protagonizadas fundamentalmente por el País Vasco.

En España los movimientos nacionalistas se dieron casi siempre en Cataluña y País Vasco, aprovechando la debilidad del sentimiento patriótico en muchos ciudadanos debido a la incapacidad del gobierno para difundir el sentimiento de identidad y orgullo patriótico entre los españoles al no aportar recursos económicos para obtener buenas infraestructuras, servicios públicos, seguros sociales, mejorar la educación y la sanidad, etc.

En España el nacionalismo se presenta en dos vertientes: el que reclama autonomía, en Cataluña; y el que reclama independencia, en el País Vasco.

NACIONALISMO CATALÁN

El nacionalismo catalán se caracteriza por la evolución desde antes de la restauración.

En 1830 surge un movimiento intelectual preocupado por recuperar el pasado de Cataluña, especialmente su lengua, La RenaixenÇa.

En 1882 se crea el Centre Catalán. Su artífice fue Valentín Almiral, republicano de izquierda que denuncia la corrupción política. Reclama autonomía para Cataluña.

En 1891 se creó la Unió Catalaniste. Su artífice fue Prat de la Riba, conservador. Su programa aparece recogido en las bases de Manresa, que reclaman autogobierno para Cataluña, reparto de funciones entre el poder central y el autonómico, y excluye el sufragio universal, sólo votan los padres de familia.

En 1901 surge la Liga Regionalismo, formada por la unión de varios grupos catalanes moderados como la Unió Catalaniste. El principal dirigente fue Francesc Combó. Los objetivos eran, autonomía política para Cataluña, y protección para la actividad industrial catalana. Piden autonomía, no independencia.

Otros nacionalismos de la época fueron el nacionalismo gallego o valenciano. Pero no tuvieron tanta fuerza.

NACIONALISMO VASCO.

Los elementos diferenciales del nacionalismo vasco son: un lenguaje propio, el euskera; y una cultura y tradición diferencial.

Su máximo representante fue Sabino Arana, fundador del PNV, en 1895. Creó todos los símbolos nacionalistas: la ikurriña. Formuló la ideología del PNV.

Los fundamentos ideológicos del PNV son: independencia para el País Vasco, con gobierno propio y fronteras internacionales; radicalismo antiespañol, ya que pertenecer a España lo sienten como una esclavitud, un sometimiento, se alegran de los males de España. Además, presentan una exaltación racista y xenófoba de la etnia vasca, ya que rechazan matrimonios mixtos, y a los inmigrantes (cualquier español). También integrismo ultracatólico: su fin es llevar el pueblo vasco hacia Dios y subordinar de lo político a lo religioso.

Promocionan la lengua vasca y la apología del mundo tradicional vasco, en contra de la urbanización.

Los apoyos son por parte de la clase media y pequeña burguesía, y el mundo rural. La alta burguesía, el proletariado formado por inmigrantes llegados de otra provincia y los intelectuales vascos no los apoyan.

El nacionalismo Gallego y Valenciano experimentan un desarrollo lento, piden una autonomía política.

MOVIMIENTO OBRERO

Los orígenes del movimiento obrero fueron importantes a partir de 1868. Las causas fueron la creación de la A.I.T. (Asociación internacional de trabajadores), y el reconocimiento de plena libertad sindical en Europa

La A.I.T. se formó en Londres, en 1864, por representantes obreros de diferentes países.

El objetivo era lograr la unión de todo el proletariado europeo para luchar contra la burguesía capitalista.

Karl Marx fue el encargado de redactar los estatutos. Se celebraban congresos anuales en diversas ciudades europeas. Dentro de la A.I.T. surgen diferencias por razones ideológicas. Las dos tendencias son: los anarquistas, seguidores de Bakinin, y los socialistas, seguidores de Marx.

En España dominó la tendencia anarquista (anarcocomunismo y narcosindicalimo).

También hubo partidos de los socialistas, el tipógrafo Pablo Iglesias, fundador del PSOE.

Durante la 1ª República, en 1874, el gobierno de Serrano suprimió la sección española de la AIT. Se vieron obligados a pasar a la clandestinidad.

En 1881, el gobierno de Sagasta declaró libertad sindical. Se produjo así la expansión del movimiento obrero.

El sindicalismo en España presentaba tres tendencias: anarquistas, socialistas y sindicalismo católico.

ANARQUISTAS

Los anarquistas son los seguidores de Bakunin. Se dividen en múltiples grupos. El más importante FTRE (Federación de Trabajadores de la región Española). Las actuaciones que tuvieron fueron: ineficacia en el terreno laboral, y el terrorismo, asesinaron a Cánovas del Castillo.

Los anarquistas de dividen en dos tendencias: los anarcosindicalistas, que actúan dentro de la legalidad y luchan por la obtención de mejoras parciales, y los anarcocomunistas. La ideología de los anarcocomunistas era la siguiente: rechazo a cualquier autoridad impuesta, rechazo de la propiedad privada y el dinero, apoliticismo (no participar en las elecciones, no forman partidos políticos), rechazan la religión y la iglesia porque favorecía la resignación y la pasividad de los trabajadores, y defienden la revolución violenta, para destruir el Estado burgués que oprime al hombre.

En 1910, se crea en Barcelona la CNT (Confederación Nacional de Trabajadores). Es un sindicato anarquista.

SOCIALISTAS

El socialismo es una corriente marxista del movimiento obrero, creado en 1888 por Pablo Iglesias, formado por trabajadores de la imprenta. Son seguidores de Marx y Engels. Crearon en 1879 el PSOE (Partido Socialista Obrero Español) y en 1888 la UGT (Unión General de Trabajadores). Ambas lideradas por Pablo Iglesias. Su ideología era derribar el sistema político liberal, poner fin a la dominación burguesa, y acabar con el capitalismo, que son quienes tienen sometido al obrero. Quieren la toma del poder político por la clase trabajadora, cuando llegue el momento, y la supresión de la propiedad privada. Además, rechazan el terrorismo, la guerra y el colonialismo.

SINDICALISMO CATÓLICO

La iglesia católica favoreció la creación de organizaciones sindicales. El objetivo era impedir el avance de los sindicatos ateos de socialistas y anarquistas.

Se crearon los círculos católicos de obreros, formados por obreros y patrones. En España su impulsor fue el jesuita Antonio Vicente. Solicitan a los propietarios salarios justos y evitar abusos.

Su influencia fue más importante en el campesinado de Castilla, Navarra, Andalucía y Extremadura. No fue importante en los medios industriales urbanos.

  • LOS PROCESOS DE IRBANIZACIÓN E INDUSTRIALIZACIÓN EN LA ESPAÑA DE LA RESTAURACIÓN

  • Durante la época de la Restauración, la población española tiene un ritmo de crecimiento lento. El crecimiento vegetativo, es decir, la diferencia que hay en una región o país entre los nacimientos y muertes de personas, fue solo de un 5%, ya que se produjeron epidemias y hambrunas.

    A pesar del débil crecimiento fue un período de fuerte emigración, sobre todo a América. Se produjeron también migraciones internas, del campo a las ciudades y de las zonas más atrasadas a las más desarrolladas.

    Como actividad de la población y como componente de la economía nacional, dominaba absolutamente la agricultura. Incluso en la industria predominaban las actividades derivadas la agricultura. La exportación estaba integrada por productos agrícolas y minerales.

    Se trataba de una agricultura poco evolucionada, sin innovaciones técnicas y de bajos rendimientos, y debía estar protegida de la competencia. La protección solicitada por los productores implicaba que el mercado español se reservaba para los productos españoles, que tenían precios garantizados y no se veían forzados a modernizar las explotaciones para abaratar precios.

    Ese sector tradicional comprendía latifundios de Andalucía, Extremadura y La Mancha, y también minifundios como los gallegos.

    Gran parte de los campesinos vivía situaciones de hambre y miseria, lo que provocó rebeliones agrarias.

    Sin embargo, existía también un sector agrícola capitalista que logró un crecimiento de la agricultura y una mayor extensión de la superficie cultivada. Aunque predominaban los trigales, comenzaban a disputarles terrenos el olivo, la vid y los cítricos, y se difundió el maíz.

    Los dos sectores exportadores clave eran el aceite y el vino, que se benefició de la epidemia de filoxera en las viñas francesas, pero esta epidemia también llegó a España. El olivo aumentó la extensión cultivada, pero la rentabilidad se basó en sueldos muy bajos.

    Otros sectores agrarios se industrializaron, como el harinero, el de conservas vegetales y el naranjero.

    España siguió dependiendo del mundo industrial europeo, y solo se desarrollaron algunos sectores y algunas regiones clave. Sectores económicos como el minero, siguieron controlados por capitales extranjeros. La demanda continental de hierro, cobre y plomo explica el gran período de explotación de las minas de las Sierras Béticas, de Sierra Morena y de la cordillera Cantábrica y los Montes Vascos.

    La industria española se vio perjudicada por el librecambismo, que se refiere a la libertad de comercio, en el que no hay aduanas que pagar, y luchaba por el proteccionismo, es decir, por la protección para los productos nacionales estableciendo aranceles aduaneros que graven los productos extranjeros. El tendido del ferrocarril fue una ocasión perdida de desarrollo industrial, porque hasta 1896 las empresas importaban maquinaria y material extranjero. La ampliación del tendido permitió ir construyendo un mercado nacional. La industria se benefició de encargos oficiales, del ejército y de la armada, y del casi monopolio con que actuaba en las colonias del Caribe.

    Andalucía fue una región de explotación de minerales como el plomo y el cobre, explotados por unas pocas empresas extranjeras.

    El relevo lo tomó el País Vasco. En 1882 se creó la Sociedad de Altos Hornos y Fábricas de Hierro y Acero de Bilbao, y tres años más tarde se instaló allí el primer convertidor Bessemer, que permitió reducir el consumo de combustible y usar hierros de baja concentración en fósforo.

    Los vascos no utilizaban todo el mineral de hierro en sus siderurgias, y exportaban una gran parte del mismo. El capital acumulado por estos negocios se invertía en otras actividades industriales, y en la creación de un capitalismo financiero. Con ello se consolidó la burguesía industrial vasca.

    Cataluña se había desarrollado como potencia textil, especialmente algodonera. La Restauración fue un período de expansión, por el aumento de la demanda. Las prendas de vestir de algodón se impusieron en toda la Península: eran más cómodas, prácticas y baratas. El problema clave de la industrialización catalana había sido el alto coste del carbón y la búsqueda de soluciones alternativas. Una consistió en compartir la energía proporcionada por una máquina de vapor, la otra la utilización de la energía de turbinas hidráulicas.

    La industria catalana no se limitaba al algodón. Existía un núcleo industrial lanero, y se renovó la industria metalúrgica y mecánica.

  • CRISIS FINAL DE LA RESTAURACIÓN: EL IMPACTO DE LA I GUERRA MUNDIAL Y EL AGOTAMIENTO DEL SISTEMA POLÍTICO.

  • El 17 de mayo de 1902, Alfonso XIII inicia su reinado hasta 1923. Durante esta época se mantiene el sistema canovista que se mantuvo en una crisis debido a los continuos cambios de gobierno que duraban menos de un año. Además, se dividieron los partidos turnantes por enfrentamientos por el liderazgo tras la muerte se Sagasta y Cánovas.

    La actuación política de Alfonso XIII fue negativa. Se entrometió en asuntos que sólo conciernen a las Cortes o al consejo de Ministros.

    Además, el regeneracionismo también debilitó el sistema político de la Restauración.

    Tras el desastre del ´98, se plantea la necesidad de reformar el sistema desde dentro.

    Los gobernantes que sucedieron a Cánovas y a Sagasta como gobernantes fueron: Francisco Silvela, Antonio Maura, José Canalejas y Eduardo Dato.

    Propusieron fórmulas sociales y políticas para renovar el sistema político pero no tuvieron éxito, ya que los grupos sociales dominantes no quisieron poner en peligro sus intereses políticos y económicos, pero debilitaron el sistema.

    La situación de España era crítica ya que tenía varios problemas: externos, como la guerra de Marruecos o la 1ª Guerra Mundial, e internos, por las fuerzas opuestas al sistema, como el nacionalismo, el movimiento obrero y los intelectuales.

    Los dos hechos que verdaderamente hicieron que se pusiera fin a la Restauración fueron la Semana trágica de Barcelona, y la Crisis de 1917.

    Esta crisis fue debida a la Guerra de Marruecos. La zona de Magreb era deseada por Gran Bretaña, Francia, España y Alemania. Era deseada por razones estratégicas y económicas, ya que era un paso marítimo esencial para la navegación comercial. La cuestión se resuelve por la vía de la negociación mediante el acuerdo Franco-Británico de 1904.

    Gran Bretaña apoya a Francia para conseguir Marruecos frente Alemania, y Francia apoyaría a Gran Bretaña para conseguir Egipto. Reservan para España una zona al norte de Marruecos por deseo de Gran Bretaña, que prefiere que esté controlada por una potencia débil.

    La Conferencia Internacional de 1906, celebrada en Algeciras, los países europeos y EEUU reconocieron los derechos franceses y españoles de Marruecos.

    En el tratado Franco-Español de 1912, se fijan los límites de los territorios franceses y españoles en Marruecos: el norte para España y el centro y sur para Francia.

    La Guerra de Marruecos empezó cuando los españoles invadieron la zona. La zona española era montañosa, de difícil acceso, habitada por tribus poco dóciles e independientes.

    En 1909 los indígenas atacaron el ferrocarril que se estaba construyendo para unir Melilla con los yacimientos de mineral de hierro en Beni-bu-ifur. Las tropas españolas intervienen y son derrotadas.

    La consecuencia fue la Semana Trágica de Barcelona.

    El ejército español fue incapaz de dominar la zona norte marroquí, sobretodo porque otros territorios que poseía en el norte de África: Ceuta, Melilla y Larache, estaban aislados entre sí y era difícil conectarlos.

    En 1920 se crea la Legión, formada por soldados voluntarios, para combatir en esta zona. Entre los fundadores se encuentra el general Franco.

    En 1921 el ejército español fue derrotado en Annual. Murieron 12000 soldados. La causa de la derrota fue la ineptitud de los generales Dámaso de Berenguer y Manuel Fernández Silvestre.

    Annual supuso una nueva frustración colonial para España.

    Las consecuencias fueron el refuerzo de las convicciones antidemocráticas, y de las preferencias políticas autoritarias entre la mayoría de los oficiales españoles que combatieron allí: Francisco Franco, José Sanjurjo, Emilio Mola, Manuel Goded, etc., que también pelearon en el bando antirrepublicano en 1936.

    La guerra no se terminó hasta la dictadura de Miguel Primo de Rivera.

    EL IMPACTO DE LA 1ª GUERRA MUNDIAL Y SUS CONSECUENCIAS SOCIALES

    La primera Guerra Mundial duró desde el año 1914 hasta el 1918.

    Los bandos eran: la triple alianza, formada por Alemania, el Imperio Astro-Húngaro, e Italia, y la triple entente, formada por Gran Bretaña, Francia y Rusia.

    Cuando comienza la 1ª Guerra Mundial, el presidente del gobierno era Eduardo Dato, que estuvo en el cargo desde 1913 hasta 1915.

    España se declara neutral, como Suiza, Holanda, Suecia, Noruega o Dinamarca.

    La guerra afectó a España de manera positiva para la industria, y de manera negativa para la agricultura.

    Para la industria fue positivo porque: recibió numerosos pedidos de los países en guerra, se benefició la industria minera, textil, etc., por ejemplo, la compañía española de automóviles Hispano-Suiza produjo motores de avión para Francia. Además, la industria textil fabricó botas, mantas, etc. Se crearon nuevas empresas que cerraron cuando acabó la guerra. Se obtuvieron grandes beneficios: se dobló el capital del banco de España y el de otros bancos privados y se pagó la deuda externa.

    Para la agricultura fue negativo porque se dejaron de exportar productos como vino, plátanos y naranja. Además, no se pudo importar cereales de Rusia porque se dejó de sembrar en los países en guerra.

    En cuanto a las repercusiones sociales, el incremento industrial llevó a un incremento de los precios por encima de los salarios debido a la escasez de muchos productos, que venían de países en guerra y ahora no llegaban.

    A finales de 1917 el coste de la vida había subido un 68% en relación a 1914. Aumentó la diferencia entre ricos y pobres. Tienen lugar huelgas y protestas exigiendo el abaratamiento de los precios.

    UGT y CNT convocaron para el 18 de diciembre de 1916 una huelga general secundada en toda España.

    En cuanto a las repercusiones políticas, el sistema político no reaccionó. Se mostró incapaz de resolver los problemas pendientes. Además, se cuestiona la validez del sistema político oficial.

    SEMANA TRÁGICA DE BARCELONA (JULIO 1909)

    Se le llama Semana Trágica de Barcelona a los acontecimientos violentos que tuvieron lugar en Barcelona y otras ciudades próximas donde se encontraban los núcleos industriales más importantes de la península.

    Las causas fueron: la guerra de Marruecos y el anticlericalismo irracional, influido por los anarquistas; para acudir a asilos u hospitales se necesitaba un certificado bautismal.

    Los hechos fueron los siguientes: hubo disturbios en el puerto de Barcelona por el embarque de soldados para luchar en Marruecos. Se convocó una huelga general apoyada por anarquistas, socialistas y radicales.

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    Enviado por:LaCanaria
    Idioma: castellano
    País: España

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