El desarrollo embrionario, en esta ocasión para hablar e ilustrar este proceso, se usara como ejemplo de embrión, el embrión humano...

El óvulo, en su camino hacia el útero, es fecundado por un espermatozoide. En la fecundación, el óvulo y el espermatozoide se unen para formar una sola célula, que se llama célula huevo o cigoto

A medida que se acerca al útero, el cigoto se va reproduciendo. Desde que comienza a hacerlo le llamamos embrión

El embrión llega al recubrimiento del útero, que está preparado para recibirlo, y ahí se establece. La mujer está embarazada

A las seis semanas se ve así. Fíjate cómo se ha desarrollado. Ya se le están

formando dedos, manos, pies, ojos, nariz, boca y oídos. A través del cordón umbilical y de la placenta, el embrión se nutre, recibe oxígeno y elimina sus desechos.

A los siete meses se ve así. Ya casi ha terminado de formarse. Si por alguna razón nace a esta edad, sus aparatos digestivo y respiratorio pueden comenzar a funcionar. Sin embargo, el bebé sólo vivirá si se tienen muchos cuidados con él.

A los nueve meses, los músculos del útero empiezan a empujar al feto hacia afuera. El nacimiento ha comenzado.

Al mismo tiempo, los músculos del cuello del útero y la vagina se aflojan, permitiéndole el paso al feto. La madre puede hacer ejercicios durante el embarazo para que el parto no le produzca demasiadas molestias.

El bebé ha nacido. Ahora respira y elimina sus desechos por sí mismo. La mamá lo alimentará con su propia leche.

Esta es una nueva responsabilidad que antes no tenía la pareja. El cariño que los unió los ha llevado a dar origen a un nuevo ser, al que quieren y cuidan.

La mamá y el papá deben ser capaces de mantener y educar a su familia. Un ambiente de cariño y amor dará a los niños seguridad y confianza.