Literatura


Cumbres Borrascosas; Emily Brönte


“La importancia del los Fenómenos Climáticos

En Cumbres Borrascosas.”

Emily Brontë, era hija de un pastor evangélico, ella junto con sus hermanas Charlotte y Anne Brontë, dejaron huella en la literatura, publicando por primera vez sus libros bajo los seudónimos de Currer, Ellis y Acton Bell. Ella murió al poco tiempo de la publicación del libro, siendo este su primera y última novela. Emily, escribió Cumbres Borrascosas, la cual en su momento no tuvo una buena aceptación por la crítica, a pesar de ello, tiempo más tarde, fue reevaluada por los críticos, siendo considerada una novela original e irrepetible de la literatura inglesa.

“Cumbres Borrascosas” cuenta la historia de un amor que no se logra llevar a cabo, entre Heathcliff y Catalina Earnshaw, que los lleva a la locura y finalmente a la muerte, para así poder al fin, consumar su amor en un mundo fantasmal, más allá de la vida terrenal.

Este relato es llevado a cabo por Nelly, la ama de llaves de Cumbres Borrascosas, y luego de la Granja de los Tordos, que narra la historia al Señor Lockwood, actual arrendatario de esta última.

Desde un comienzo Emily Brontë deja entrever la importancia de los fenómenos climáticos en la novela. Primero por el título de la novela y luego marcando las diferencias climáticas entre ambas casas en las que se desarrolla gran parte de la historia: Cumbres Borrascosas y la Granja de los Tordos.

“Las Brontë no conocerán las tierras felices en lo que el verde dura sin esfuerzo como dura el horizonte…” El hecho que se hayan desarrollado en estas condiciones tiene gran incidencia en la historia.

Existe gran relación entre el cómo influyen los fenómenos climáticos tanto en la vida de la autora como en su obra narrativa. Por esta razón trataré de explicar a lo largo de este texto, el cómo afectan los fenómenos climáticos, en particular el viento, en el curso de la historia, su trascendencia y la relación con la vida de Emily Brontë.

Wuthering Heights corresponder al nombre original de la novela, su traducción también podría ser Cumbres Rugientes. El verbo wuther también significa bramar con excitación, utilizado usualmente para referirse a fenómenos climáticos.

El título en sí, nos da una señal de que hay relación entre los fenómenos atmosféricos y la historia, y/o también que los acontecimientos que ocurren en la novela ocurren de forma tormentosa. Como el nombre lo indica Cumbres Borrascosas se caracterizaba por las malas condiciones climáticas: “ expresa perfectamente el tumulto atmosférico a el que está expuesto lugar en tiempo tempestuoso”, descripción del señor Lockwood al llegar al recinto. La casa en sí era oscura, con ventanas muy estrechas, asemejaba a un fuerte; ya que era una construcción de piedra muy sólida, diseñada para soportar aquellas condiciones de vida.

Contrastando con la Granja de los Tordos, que se situaba en un valle en donde el clima era mucho más apacible y calmado. La casa era luminosa, poseía una gran sala de estar lujosa y muy bien mantenida.

En cada casa se desarrollaron caracteres completamente distintos, Heathcliff y Catalina, que habitaban en Cumbres Borrascosas, tenían caracteres rebeldes, de instintos salvajes, contrariamente con lo que ocurría en la Granja de los Tordos en donde Linton e Isabel tenían caracteres refinados, endebles, mimados y con alta educación. “Nos entró mucha risa de aquellos niños mimados y un desprecio absoluto por ellos.” En esta frase Heathcliff expresa claramente la diferencia entre los Linton y ellos.

Desde el camino principal (aquel que atraviesa el páramo) Cumbres Borrascosas se encontraba en dirección norte, La granja de los Tordos en dirección suroeste y Gimmerton en dirección este. Este dato es muy importante debido que a partir de este se puede establecer la conexión que el clima, en particular el viento, establecía entre ambas casas.

Un ejemplo muy concreto es cuando Catalina (la protagonista) una vez casada con Edgar Linton, a causa de una pelea entre Heathcliff y su marido, enloquece y se encierra en su cuarto por tres días, este último permitió que Nelly entrara, y en un arranque de locura abrió la ventana. “Estábamos en lo más crudo del invierno. Soplaba fuertemente el viento del nordeste”. Luego continua delirando:”Déjame oír el viento que sopla entre los abetos y pega en la ventana. Ese viento viene derecho del páramo... ¡Déjame que oiga solo un soplo!

Si analizamos con detalle, el viento viene desde el norte, es decir desde Cumbres Borrascosas. No es mera coincidencia que justo en ese minuto Catalina estuviera delirando y recordándose de cómo había sido su vida allá. Además la desesperación que expresa por escuchar el viento se debe a la necesidad de revivir su pasado, cuando vivía en Cumbres Borrascosas y se encontraba con Heathcliff. Por lo tanto, en este caso el viento actúa como conector de Catalina con su pasado, con Cumbres Borrascosas.

Hay otro hecho muy importante que relaciona a Catalina Linton con el viento, pero esta vez no sólo el viento le recuerda a Cumbres Borrascosas sino, que Catalina se reencarna en él para hacerse presente en el relato.

Una vez que esta recuperó la cordura, Edgar le regaló un ramo de pequeñas flores de azafrán. Esta se puso nostálgica y dijo: “Siempre son estas las primeras flores que se abren en Cumbres Borrascosas…Me recuerdan a el suave vientecillo del deshielo...” Luego tiempo más tarde cuando ella muere Nelly expresa:

“El viernes aquel fue el último día bueno que tuvimos por espacio de un mes. Al anochecer se estropeó el tiempo; el viento cambió de sur a nordeste, trayendo primero la lluvia y después la ventisca y la nieve… y las flores de azafrán estaban tapadas por la nevada.”

El hecho que las flores de azafrán le recordara al suave vientecillo del deshielo en Cumbres Borrascosas es muy importante, ya que demuestra nuevamente la conexión ya descrita con anterioridad. Pero es aún más importante el hecho que al morir, haya cambiado el clima drásticamente; que el viento haya cambiado de dirección sur a nordeste y que además las flores de azafrán hayan quedado cubiertas por la nevada. Este último hecho se puede atribuir al hecho que Cumbres Borrascosas ya no es un recuerdo para Catalina, el recuerdo quedó sepultado, al igual de las flores, por que ahora, ella esta viviendo a través del viento (nordeste), pudiendo volver a “vivir” en su lugar natal, donde siempre quiso estar.

Llama mucho la atención en la biografía de Emily Brontë, la gran importancia que le atribuyen al viento o a la landa, a partir de ella buscan la explicación al tono trágico y funesto de su novela, además plantean que el amor para Emily Brontë fue también “como el viento en la landa, un espectáculo de sus ojos que no alcanzó a hajar sus entrañas.” Relacionando este hecho con la novela podemos darnos cuenta que el amor entre Catalina Linton y Heathcliff fue de igual manera, lo vieron, lo sintieron, pero no lo consumaron en vida, fue como el viento, que los envolvió en un torbellino sin salida, que sólo pudieron escapar de él con la muerte, en donde por fin pudieron unir sus almas y fundirlas en una sola, como siempre lo esperaron.

Sin lugar a duda esta novela, posee gran parte de la esencia de Emily Brontë, el hecho que se haya criado en un lugar muy tomentoso climáticamente, viviendo en una casa oscura, donde el padre no prestaba mucha atención a sus hijos con excepción de su hijo hombre, representa en varios ámbitos a la casa de Cumbres Borrascosas, en donde vivía la familia Earnshaw.

Además, que el amor haya sido fugaz como el viento, (para la autora) y que nunca haya llegado a disfrutarlo, representa: el amor entre Catalina Linton y Heathcliff, que sólo se consumó una vez muertos.

El clima es muy importante en la novela ya que marca desde un principio la diferencia entre ambas casas, pudiéndose concluir que, entre más tormentoso fuese el clima más salvaje y rebelde se volvía la personalidad de la persona. Por ejemplo Catalina en Cumbres Borrascosas era rebelde, salvaje y despreocupada de su apariencia, luego de haberse quedado cinco semanas en la Granja de los Tordos (debido a una mordedura de un perro) volvió convertida en toda una señorita, con las facciones más acentuadas, más preocupada de la apariencia y hasta más educada.

El viento, elemento muy trascendente y repetitivo a lo largo de la novela, representa la comunicación entre Catalina y Cumbres Borrascosas y a Catalina después de muerta, que rondaba por el páramo en espera de Heathcliff. Cuando muere este, todo indicio de viento, brisa, torbellinos o cualquier fenómeno climático tormentoso desaparece de la novela. Al regresar el Señor Lockwood después de muerto Heathcliff se encuentra completamente sorprendido: “mis ojos veían a la perfección todos los guijarros y piedrecillas del camino…”, siendo que todas las veces anteriores que había ido, le era muy difícil ver debido a la niebla o el mal tiempo.

Por lo tanto, podemos concluir que el viento y los demás fenómenos climáticos que bramaban con excitación con anterioridad en Cumbres Borrascosas, se debieron al amor no consumado entre los personajes protagonistas, y que, una vez que se encontraron los dos amantes se dio por terminada la tempestad. La representación en vida de este amor se efectuó a través de Cati (hija de Catalina Linton con Edgar) y Hareton (hijo de Hindley, hermano de Catalina Linton) quienes, eran fieles representantes de los muertos y que luego de altos y bajos finalmente se declararon su amor, dejándose entrever al final del libro que iban a casarse, simbólicamente representando la unión de los espíritus de Catalina Linton y Heathcliff en el más allá.

(1417 palabras sin citas)

Texto “La Tierra Tiene la Actitud de una Mujer página 195.

Página 4 de Cumbres Borrascosas.

Página 43 de Cumbres Borrascosas.

Página 108 de Cumbres Borrascosas.

Página 110 de Cumbres Borrascosas.

Página 119 de Cumbres Borrascosas.

Página 151 de Cumbres Borrascosas

Texto “La Tierra Tiene la Actitud de una Mujer página 197.

Página 271 de Cumbres Borrascosas.




Descargar
Enviado por:El remitente no desea revelar su nombre
Idioma: castellano
País: Chile

Te va a interesar