COMO CONSTRUYE EL NIÑO SU REALIDAD ATRAVES DEL DIBUJO DE LA FAMILIA

RESUMEN: En el presente estudio se tuvo la finalidad de observar la evolución de la representación gráfica y el aumento del repertorio conceptual, para lo cuál se aplico la escala de Goodenough, al igual que se determino el nivel de realismo y el análisis de la narrativa de los dibujos de la familia realizados en una sesión por 22 niños con edades que varían de los 2 a los 15 años de edad. Al analizar los resultados, se logró el primer objetivo, en donde todos los dibujos eran típicos de una etapa determinada, excepto 6 de ellos, quienes varían en etapas no correspondientes a sus edades. En el segundo análisis se logro comprobar nuestro segundo objetivo, ya que, entre más avanzada edad, los niños muestran un mayor repertorio conceptual de la figura humana, con excepción de un niño de 10 años, quien mostró un dibujo correspondiente a la edad de 7 años. El último análisis, fue el de las narraciones, en donde se encontró que(AQUÍ VA LO DE CRISTINA). Por lo que se puede concluir diciendo que el dibujo junto con su narrativa es un instrumento muy importante para lograr observar el desarrollo cognitivo infantil, y conocer el como construye un niño su realidad. Palabras clave: realismo, narrativa, desarrollo cognitivo.

El niño vive en una sociedad dentro de la cual mantiene relaciones tanto afectivas como cognositivas, no solo con las personas sino con las cosas. A través de tales relaciones va construyendo representaciones de las personas y del mundo que le rodea, logrando así, estimular su desarrollo cognitivo e intelectual.

Estas representaciones del mundo en el niño se manifiestan en una actividad que a simple vista parece carecer de importancia, esta es: el dibujo.

El dibujo para el niño es un recurso expresivo, que contiene vasta información acerca de la inteligencia, emociones y posición en su contexto social.

En el presente estudio se pretende estudiar el dibujo infantil de la familia a partir de las aportaciones de Luquet , la escala de Goodenough y el significado narrativo de Bruner, por lo que a continuación se detallara de forma breve cada uno de los postulados de estos autores.

La construcción de la realidad en el niño fue objeto de estudio para diversos autores, entre ellos Luquet, quien se interesó por determinar el nivel de pensamiento en el niño a partir de su dibujo. Para Luquet (en Piaget, 1984), el dibujo del niño es su esfuerzo de imitación de lo real, subdividiendo este realismo en cuatro etapas, de acuerdo a la evolución de la representación grafica.

Para él, la primera forma del dibujo es el garabato, denominando a esta etapa: realismo fortuito (hacia los 2 a 3 años de edad), la cual evoluciona a partir de que el niño cree reconocer, reproducir y formar un modelo de manera intencional, detectando en esta intencionalidad la imitación (del modelo) e imagen (memorizándola). La segunda etapa es el realismo fallido (de los 3 a 5 años), caracterizado por la incapacidad del niño de poder representar en el dibujo una figura totalmente coordenada en sus partes. En esta etapa el monigote (figura de la cabeza provista de apéndices filiformes, sin tronco), es el modelo dominante. Viene luego el realismo intelectual, (de los 5 a los 8 años) en donde el dibujo proporciona atributos conceptuales conocidos por el niño, aunque no sean visibles en el modelo visual, (así, un rostro visto de perfil, el dibujo tendrá los dos ojos). Esta etapa logra evolucionar hacia los 8 o 9 años de edad, cuando el niño ya es capaz de representar un realismo visual, en donde el dibujo representa solo lo que es visible, y además, el dibujo cuenta ya con ejes y coordenadas correctas, lo cual indica que el niño cuenta ya con las primeras intuiciones espaciales. Esta es la etapa culminante del dibujo es el (hacia los 9 o 10 años de edad), en donde el niño plasma en el dibujo de manera correcta las relaciones topológicas, indicando así, de manera correcta las aproximaciones, separamiento, envolvimientos, cerramientos, etc. Otra característica de esta etapa es que el niño ya es capaz de anticipar por medio del dibujo la forma de un objeto que se le presenta, de igual manera el niño logra escoger el dibujo correcto en cuanto a su posición espacial, notándose así que la evolución del dibujo es solidaria de toda la estructuración del espacio.

Por todo lo anterior no hay pues que sorprenderse de que el dibujo del niño haya sido tomado como referencia para el estudio del desarrollo intelectual, como lo veremos a continuación:

Una de las precursoras del estudio del desarrollo intelectual en los niños fue la Dra. Florence L. Goodenough, quien nos dice que en el dibujo infantil se reconoce un origen intelectual, el cual se determina por su desarrollo conceptual: “El niño, mas que lo que ve, dibuja lo que sabe” (Goodenough, en Bernstein, 1964).

El merito de la doctora Goodenough fue el proporcionar un instrumento capaz de medir el nivel general del desarrollo intelectual para niños de entre 2 y 15 años de edad, del cual se presenta una breve descripción:

La escala de Goodenough es una técnica para medir la inteligencia general por medio del análisis del dibujo de la figura del hombre (ya que según Bernstein, la figura masculina muestra vestimenta uniforme para ambos sexos) en donde el niño manifiesta en el dibujo su repertorio conceptual de la figura humana.

Por medio de este test se mide el valor de las funciones de asociación, observación analítica, discriminación, memoria de detalles, sentido espacial, juicio, abstracción, coordinación visomanual y adaptabilidad, todo esto de acuerdo a la representación grafica típica de una edad determinada. Para la evaluación del test simplemente se verifica la presencia o ausencia de cada uno de los rasgos gráficos o ítems del dibujo, que generalmente están vinculados a situaciones de la vida afectiva del niño (Bernstein, 1964).

Cabe hacer hincapié de que como lo dice Goodenough (en Bernstein, 1964), al evaluar dicha prueba, se debe tomar en cuenta las características individuales de los niños, sus rasgos físicos que llamen la atención, así como sus narraciones que emita durante o después de dibujar.

En cuanto a las características individuales, se debe tener en cuenta el núcleo de donde provienen estas características, es decir, el núcleo familiar, ya que este tiene importantes efectos sobre el niño, los cuales se manifiestan en la representación grafica, en donde el niño traduce claramente su posición con el resto de la familia, de igual manera, el dibujo es un indicador de las emociones del niño con respecto a los miembros de su familia.

Con respecto a la narrativa, Bruner (%^&%^&) nos dice que por medio de la está los niños aprenden a dar sentido al mundo que les rodea, ya que según él, el impulso humano organiza la experiencia de un modo narrativo, entendiéndose por narrativa, a la forma de pensamiento natural, que se caracteriza por su contexto social, orden secuencial, sensibilidad y por su puesto el narrador. Por lo tanto, la narrativa, es pues, un instrumento que junto con el dibujo pone de manifiesto el mundo tanto emocional como intelectual y social del niño.

En el presente estudio se analizará el dibujo infantil de la familia, de acuerdo a la escala de Goodenough, de igual manera se determinara el nivel de realismo del dibujo, basándonos en los planteamientos de Luquet, y por último, se analizaran las narraciones mas sobresalientes que emitan los niños durante o después de realizar el dibujo. Esto con el objetivo de observar la evolución del dibujo y observar el aumento del repertorio conceptual de la figura humana conforme avanza la edad infantil.

METODO

Sujetos

Se requirió de 23 sujetos de distintas edades entre los 2 años y 14 años, de ambos sexos,12 hombres y 11 mujeres , elegidos de manera aleatoria.

Materiales

Hojas de papel bond blanco tamaño carta, lápices, bolígrafo tinta azul, bolígrafo tinta negra, crayones y una grabadora.

Procedimiento

El estudio se realizó con niños de distintas familias, pidiéndoles su colaboración para hacer un dibujo de su familia el cual lo debían realizar con un lápiz y/o un bolígrafo de tinta azul o tinta negra, utilizando una grabadora cuando el niño estuviera dibujando o bien cuando éste terminara su dibujo, nos lo pudiera explicar.

Posteriormente se les pidió realizar el mismo procedimiento, ésta vez en lugar de lápiz, sería con crayones.

RESULTADOS

TABLA 1

RESULTADOS DE ACUERDO A LA CLASIFICACION DE HARRIS- GOODENOUGH

• Ver anexo 1

TABLA 2

OBSERVACIONES DESCRIPTIVAS DEL INVESTIGADOR

TABLA 3

CATEGORÍAS DE LUQUET

1.3.- “Realismo fortuito” dibujo de garabatos, “Realismo fallido” o fase de la incapacidad sintética (el monigote), “Realismo intelectual” el dibujo a superado las dificultades primitivas, sin preocupaciones de perspectiva visual, “Realismo visual” el dibujo que representa lo que es visual desde un punto de vista perspectivo particular.

DISCUSIÓN

Conforme la edad de los niños avanza, también lo hace la complejidad de su dibujos, respecto a los ítems que se califican en la prueba de Harris-Goodenough, para figuras humanas masculinas y femeninas, vemos en los dibujos recolectados para esta investigación que los dibujos adquieren un grado de complejidad respecto a la edad de los niños, el incremento en los detalles comienzan a observarse con mayor frecuencia a la edad aproximada de 7 años.

En general vemos que los detalles en las figuras de varones, es decir, los ítems que se califican como correctos son mayores, pero esto se puede explicar en el sentido de que muchos de los ítems correctos para la figura femenina se refieren al vestido en forma femenina, tales como falda, joyas, escotes, etc., cosa que generalmente no se ve en amas de casa, así que los niños no las dibujan de dicha forma a sus madres o hermanas, ya que ellas no se visten de tal forma.

Sólo hay un caso que no se ajusta a lo observado en niños de su edad, es un niño de 10 años de edad, cuyo dibujo carece de detalles y es demasiado simple. De acuerdo a los demás dibujos que se tomaron en cuenta para esta investigación su dibujo corresponde al de un niño de 7 años aproximadamente.

Es posible realizar una serie de generalizaciones referidas al estudio psicológico de dibujos gracias a un extenso conocimiento de estudios en los que se han utilizado dibujos de los niños como herramientas para el diagnóstico, aunque esta técnica es más útil cuando se asocia con otras informaciones sobre el niño. La presente investigación se limitó a pedirles a los niños que dibujaran a su familia, más no se recopiló la información sobre la historia del sujeto. Por lo cual el investigador solo enuncia las características del sibujo sin pretender hacer un juicio de ninguno de los sujetos.

Harris-Goodenough dice que la identificación de los elementos de un dibujo pueden considerarse como “signos” clínicos. Pone como ejemplo la noción según la cual una persona excesivamente controlada, psicológicamente trabada o inhibida reflejará esta condición en todas sus conductas motrices, en consecuencia, una figura diminuta podría significar represión psicológica. Según esto se podría interpretar  que aquéllos niños que dibujaron a algún miembro de su familia en el reverso de la hoja   o  que enmarcaron a su familia situando a algún miembro de el, podrían experimentar sensación de lejanía con respecto a ese  integrante. También podría interpretarse que refleja mayor atención a aquellas dibujadas con mayor número de detalles y mayor calidad de precisión en las lineas o al integrante de la familia que se haya dibujado en primer lugar.

Se comprobó que los niños trasladan a sus dibujos sus conceptos cognitivos, especialmente los visuales, ya que en la mayoría de los casos (a partir de los siete años) se observa que la representación en los detalles concuerda con las características físicas reales de la persona dibujada.

Se pudo observa que ambos dibujos (a lápiz y a color), en la mayoría de los casos, eran muy similares entre sí, aunque agregaron mas detalles en el dibujo a lápiz, lo cual puede ser atribuible a que éste es más afín a la tarea de marcar ciertos rasgos.

En la muestra, que consta de 22 niños de ambos sexos se nota que a partir de los dos años y medio hasta los tres años once meses, apoyando la teoría de Luquet dibujan con “Realismo fortuito” la de los garabatos aunque no con esto podamos decir que todos los niños entre esas edades dibujen con el mismo “Realismo fortuito” pues en nuestra muestra encontramos dos niñas una de tres años y otra de tres años ocho meses que ya dibujan con “Realismo fallido”.

A partir de los tres años los niños dibujan con “Realismo fallido” o “Fase de incapacidad sintética”; pretende ser realista pero no llega a serlo, no sabe todavia dirigir y limitar sus movimientos graficos para dar a su trazado el aspecto que el queria. El monigote, que es uno de los modelos más dominantes en el principio, pasa por un estadio de gran interés: el de los monigotes-renacuajos, en que solo se figura una cabeza provista de apendices filiformes, que son las piernas y los brazos pero sin tronco, este realismo se prolonga hasta los cinco años aunque en la muestra hay dos niños de seis años y siete años ocho meses que todavía dibujan con “Realismo fallido”.

De los cinco años y hasta los ocho años se presenta el periodo del “Realismo intelectual” en donde proporciona esencialmente los atributos conceptuales sin preocupaciones de perspectiva visual, aquí encontramos que los niños que están dentro de este rango de edad cumplen en su mayoría con el realismo intelectual, encontrando que cuatro niños se encuentran dentro de este rango a pesar de tener edades, uno de nueve años, dos de diez años y un cuarto de once años cinco meses.

“Realismo visual”, este rango muestra dos novedades las partes ocultas de los objetos no figuran en las pantallas, este realismo se encuentra hacia los ocho o los nueve años, encontrando en nuestra muestra un niño de siete años. En resumen son los varones los que tienden a adelantarse o atrasarse según su edad en el realismo que les corresponde.

CONCLUSIONES

Al clasificar los 22 dibujos por edades, y realizar el primer análisis, pudimos comprobar lo mencionado por Luquet, acerca de que la representación gráfica atraviesa por 4 etapas bien definidas de acuerdo a un rango de edad que va de los 2 a los 11 años de edad. Sin embargo, encontramos 6 casos que no correspondían a la etapa típica de su edad. El primero de ellos fue un niño de 10 años de edad, quien mostró un dibujo típico de la edad de 7 años, posteriormente se encontraron 4 niños mayores de 8 años, quienes mostraron dibujos típicos de niños menores de 8 años. Por último se encontró un niño de 7 años quien mostró un dibujo típico de la edad de 10 u 11 años. Cabe destacar que aunque hubo algunas excepciones con respecto a el análisis del dibujo de acuerdo a Luquet, podemos decir que se logro el objetivo de observar la evolución de las etapas del dibujo.

El segundo análisis del dibujo fue en base a la escala de Goodenough, en donde se corroboro lo mencionado por la Dra., y al mismo tiempo se logro confirmar el segundo de nuestros objetivos, ya que conforme la edad de los niños avanza se observó en el dibujo un mayor repertorio de elementos que conforman la figura humana. En los resultados se observo claramente este incremento de elementos aproximadamente a partir de los dibujos de niños de más de 7 años de edad. Otro aspecto sobresaliente es que en el dibujo de la figura masculina se manifesto un mayor número de detalles, comprobando lo dicho por Bernstein, acerca de que los niños tienen un mayor conocimiento de la vestimenta masculina, ya que ésta es uniforme para ambos sexos. Creemos que la razón por la cuàl la figura femenina carecía de elementos, fue por el hecho de que en la escala de Harris, los ìtems de la figura femenina concuerdan con una imagen muy estereotipada de la mujer, que no corresponde a la imagen de una mujer común, como lo son la madre o hermana de los niños. Cabe destacar que al aplicar este test, todos los dibujos contenían elementos típicos de una edad determinada, con la excepción de uno de ellos. Con esta prueba se pudo observar el desarrollo conceptual de la figura humana, poniendo así de manifiesto el desarrollo intelectual del niño.

Por último, con respecto a las narraciones, encontramos que de los 22 dibujos, solo 4 niños narraron una pequeña historia de sus dibujos.........(CRISTINA)...................

REFERENCIAS

• Piaget J. y Barbel I. (1984). La funciòn semiotica o simbolica. Psicología del niño. (10ª. Ed.) Madrid: Morata. Pp. 70-74

• Espinel, N. (1990). El orden psicomòrfico piagetiano en niños rurales de Colombia. Revista

• latinoamericana de psicología. 21 (2) pp. 180-182

• Bruner (%$&·%). El estudio del apropiado del hombre. Actos de significado màs allà de la revolución cognitiva

• Bernstein, J. (1964). La escala de Goodenough. Manual test de inteligencia infantil por medio del dibujo de la figura humana. Universidad de Minessota. Pp. 2-10

ANEXO 1

Los items corresponden a la clasificación de Harris-Goodenough, que se muestra a continuación.

Escala Masculina

Escala Femenina