La Ciudad de Méjico presenta las siguientes características que son propicias para los problemas de contaminación:
Tiene varios millones de habitantes
Se asienta en una cuenca, lejos de la costa
Tiene unas condiciones climáticas que mantienen estable el aire ambiental
Así es una de las ciudades con más polución del mundo. Las causas son diversas:
Emisiones de gases contaminantes de automóviles, camiones y fábricas
Alto porcentaje de automóviles viejos (con más de diez años)
Deficiencias en el sistema oficial de revisión de vehículos
Combustibles con altas concentraciones de azufre
Hollines provenientes de la quema de carbón y de leña
La cooperación japonesa con Méjico
En 1888 se firmaba el Tratado de Amistad, Comercio y Navegación entre ambos países. Desde entonces, hasta ahora, la colaboración entre Méjico y Japón viene siendo bastante buena.
En los últimos años, el gobierno japonés ha impulsado de manera activa la cooperación financiera y técnica con Méjico por varias razones:
Es uno de los países política y económicamente más importantes de Iberoamérica
Los lazos de amistad entre las dos naciones han sido tradicionales
El aumento de inversión japonesa en Méjico ha creado una relación económica muy estrecha.
En 1990 Japón concedió créditos por 108.400 millones de yenes para cuatro proyectos: Medidas contra la Contaminación atmosférica en Ciudad de Méjico; Reconstrucción de Locomotoras y Ferrocarriles Nacionales de Méjico; Abastecimiento de Agua potable en Monterrey, y Reforestación.
También se han emprendido otros proyectos, como la construcción de una planta para elaborar gasolina sin plomo, financiada con dinero japonés, créditos para sanear el aire y las zonas forestales metropolitanas....
La Reforestación es el proyecto más importante, y tanto los expertos mejicanos como los japoneses que trabajan en él esperan que las zonas reforestadas ayuden a bajar los altos niveles de contaminación en la capital, ya que éste saneamiento evitará la erosión de los suelos, aumentará la producción de oxígeno, facilitará la dispersión de inversiones térmicas, reducirá la humedad relativa y alimentará los mantos freáticos que abastecen a la ciudad.
Así, la relación Méjico- Japón va más allá de la cooperación económica, pues los proyectos vinculados con el mejoramiento del ambiente son prioritarios para la cooperación técnica bilateral en beneficio de la parte mejicana. En éste aspecto, la JICA ha sido el enlace de esas relaciones.
La Agencia de Cooperación Internacional de Japón (JICA)
Desde su fundación en 1974, viene realizando una gran gama de actividades con el apoyo de su embajada en Méjico. Una de las áreas prioritarias de la JICA es el ambiente y la ecología y, para combatir la contaminación en Méjico, ha establecido proyectos de cooperación técnica con varias instituciones mejicanas como el Proyecto del Centro Nacional de Investigación y Capacitación Ambiental (CENICA).
Otras áreas de la JICA comprenden los sectores agrícola y forestal, dentro del primero se estudia el Proyecto de Estudio Conjunto sobre el Uso Eficiente del Agua Residual en el Sector Agrícola.
Asimismo, en el Instituto Mejicano del Petróleo (IMP) se realiza la transferencia de tecnología sobre hidrosulfurización de crudos pesados para producir combustible limpio de mejor calidad, con la participación de dos expertos japoneses.
Además, con el fin de promover un medio de transporte menos contaminante, los expertos japoneses brindaron la asesoría técnica para la rehabilitación de trolebuses sel Sistema de Transporte Eléctrico del Distrito Federal.
Los apoyos de Japón a Méjico han permitido avanzar en la protección del medio ambiente. sin embargo, los requerimientos de tecnología ambiental son cada vez mayores en Méjico que en cualquiera de los países ya industrializados.
Consideración final
A Japón le llevó 25 años sanear su ambiente con tecnologías no contaminantes y ahorradoras de recursos naturales. A Méjico le falta aún un largo camino por recorrer para alcanzar los estándares adecuados en esa materia.