Arquitectura, Obras y Construcción
Cimentación
ZAPATAS
Las zapatas son cimentaciones superficiales o directas, como toda cimentación ha de
garantizar, de forma permanente, la estabilidad de la obra que soporta.
Los tipos de zapatas pueden ser:
Por su forma de trabajar:
- Aisladas.
- Combinadas.
- Continuas bajo pilares.
- Continuas bajo muros.
- Arriostradas.
Por su morfología:
- Macizas,
Que a su vez pueden ser.
- Rectas.
- Escalonadas.
- Piramidales.
- Aligeradas.
Por la relación entre sus dimensiones (lo que condiciona su forma de trabajo).
- Rígidas. En las que el vuelo es menor o igual a dos veces el canto.
- Flexibles. En las que el vuelo es mayor a dos veces el canto.
Por la forma:
- Rectangulares, cuadradas, circulares y poligonales.
El uso de las zapatas aisladas como elemento de sustentación está limitado y se emplean
cuando el terreno tiene, ya en su superficie, una resistencia media o alta en relación con las
cargas, y es suficientemente homogéneo como para que no sean de temer asientos diferenciales.
En el proyecto de obras de edificación de cualquier tipo deberá figurar, expresamente, una
exposición detallada de las características del terreno, a cuyos efectos el Técnico que lo redacta
podrá exigir al propietario un estudio del suelo y subsuelo, formulado por Técnico competente.
Para su dimensionamiento y cálculo se adopta en todos los casos la hipótesis de reparto
de presiones lineal, que corresponde al caso de cimiento rígido sobre terreno elástico. En casos
excepcionales, en los que la importancia de la obra lo requiera, se adoptarán repartos diferentes
para un dimensionamiento más apropiado de estos elementos.
Para el análisis y dimensionamiento riguroso de estos elementos aconsejamos al alumno
la lectura y estudio de las obras:
- Cimentaciones de Hormigón Armado, autores; Montoya-Meseguer-Morán.
- Cálculo de Estructuras de Cimentación, autor; J. Calavera.
Abordaremos solo el análisis de zapatas rectangulares por ser las más utilizadas. Se
realizará así mediante la condición de no existencia de tracciones en el terreno y con análisis
separados en las dos direcciones principales, cuando existan momentos aplicados en ambas.
Tensión admisible del terreno y asientos admisibles.
Para disponer de una idea orientativa tanto de las tensiones admisibles de los distintos
tipos de terrenos, como de los asientos generales admisibles y las cargas a considerar en el
proyecto de la cimentación se puede consultar el Capítulo VIII. Presiones en terreno de
cimentación, de la NBE-AE-88. En la misma (apartado 8.9. Reconocimiento del terreno) se
establecen los criterios para la elección de la presión admisible en el terreno. En cualquier caso,
y dada la complejidad del problema de los asientos, cuando por las características de la
estructura o la naturaleza del terreno sean de temer asientos superiores a los admisibles, el
proyectista debe acudir a un especialista en cimentaciones.
Los valores más usualmente manejados oscilan entre 1 y 2 kp/cm2.
Comprobación al vuelco.
La primera comprobación que debe efectuarse en zapatas sometidas a momentos o
fuerzas horizontales es la seguridad al vuelco. El problema se reduce a comprobar que el
llamado momento de vuelco afectado por un coeficiente de seguridad (por norma 1.5) es
inferior al momento estabilizador, para ello se toma momentos respecto al eje -O-.
( N + P ) b/2 _ ( M + V h ) _s
Siendo:
N, M, V = Esfuerzos en base de pilar.
P = Peso propio de la zapata.
b = ancho de la zapata.
h = altura o canto de la zapata
_s = coeficiente de seguridad de valor 1.5
En esta ecuación no está incluido el peso del suelo que gravita sobre la zapata, cuyo
efecto es estabilizador.
Comprobación al deslizamiento.
El el caso de zapatas sometidas a acciones horizontales y que no estén debidamente
arriostradas, deberá comprobarse la seguridad al deslizamiento. La fuerza de rozamiento entre la
base de la zapata y el terreno o la cohesión de éste se tomará como única fuerza estabilizante,
despreciándose generalmente el empuje sobre la superficie lateral de la zapata. Se deberá
cumplir que:
( N + P ) tg _2/3 _ V _s para suelos sin cohesión (arenas).
A c1/2 _ V _s para suelos cohesivos (arcillas).
Siendo:
N, V = los esfuerzos normal y cortante en la base del pilar.
P = Peso propio de la zapata.
_2/3 = 2/3 _ = ángulo de rozamiento interno de cálculo minorado.
c1/2 = 0.5 c = valor de cálculo minorado de la cohesión.
A = superficie de la base de la zapata.
_s = coeficiente de seguridad al deslizamiento, de valor 1.5.
Repartos de tensiones.
CASO I.- La excentricidad e = M/N _ b/6
Las tensiones deducidas serán:
Se deberá cumplir que:
CASO II.- b/6 < e _ b/3
Se deberá cumplir que:
CASO III.- e > b/3
Este caso no es válido y deberán modificarse las condiciones geométricas por falta de
seguridad al vuelco.
Cálculo de la armadura.-
El dimensionamiento de las armaduras necesarias en las zapatas de hormigón armado se
efectuará de acuerdo con la norma EH en vigor. En la misma se establece primero una
clasificación de las zapatas atendiendo a la relación entre el vuelo y su canto, siendo las mismas:
Tipo I. en las que el vuelo está comprendido entre: 0.5 h _ v _ 2 h.
El las que el cálculo de la armadura se realiza a flexión simple, generalmente por el
método del momento tope, comprobando la adherencia de las mismas, así como, el esfuerzo
cortante. El cálculo del punzonamiento generalmente no es necesario.
Tipo II. en las que el vuelo está comprendido entre: v _ 0.5 h.
Se calculará la armadura como si se tratara de una mensula corta.
Tipo III. en las que el vuelo está comprendido entre: v _ 2 h.
Se calculará como losa la armadura necesaria.
Tipo IV. Se trata de zapatas en masa (sin armar), en las que deberá comprobarse que no se
sobrepasen los valores de las resistencias virtuales de cálculo del hormigón a tracción por
flexión, al esfuerzo cortante y al punzonamiento.
Existe una segunda clasificación, mas extendida, en la que se considera:
- zapatas rígidas, aquellas en las que el vuelo es menor o igual que el canto.
- zapatas flexibles, aquellas en las que el vuelo es mayor que el canto.
Animamos al alumno al estudio de otros métodos, como por ejemplo el método de las
bielas, o el método Belgo-Luxemburges, también empleados con frecuencia en el cálculo de
zapatas.
VIGAS DE CIMENTACIÓN
1. DESCRIPCIÓN
La presenta especificación hace referencia a las actividades a realizar y materiales
empleados para la construcción de vigas de cimentación.
2. MATERIALES
2.1. CONCRETO
Éste deberá ser de una resistencia igual o superior a la señalada en los planos y deberá
cumplir como mínimo con las características de materiales y procedimientos señalados en
la especificación 3. Concretos
2.2. ACERO
Éste deberá ser de una resistencia igual o superior a la señalada en los planos y deberá
cumplir como mínimo con las características de materiales y procedimientos señalados en
la especificación 2. Acero de Refuerzo.
3. EQUIPOS
3.1. FORMALETA Y OBRA FALSA
El Constructor deberá suministrar e instalar todas las formaletas necesarias para confinar
y dar forma al concreto, de acuerdo con las líneas mostradas en los planos u ordenadas
por el Interventor. Las formaletas podrán ser de madera o metálicas y se deberán poder
ensamblar firmemente y tener la resistencia suficiente para contener la mezcla de
concreto, sin que se formen combas entre los soportes u otras desviaciones de las líneas
y contornos que muestran los planos, ni se pueda escapar el mortero.
Las formaletas de madera podrán ser de tabla cepillada o de triplex, y deberán tener un
espesor uniforme.
La obra falsa o armazones provisionales deberán ser construidos sobre cimientos
suficientemente resistentes para soportar las cargas sin asentamientos perjudiciales.
Toda la obra falsa deberá ser diseñada y construida con la solidez necesaria que le
permita soportar, sin sufrir deformación apreciable, las cargas a que estará sometida, las
cuales deberán incluir, además del peso de la superestructura, las correspondientes a las
formaletas, arriostramientos, pistas de tráfico y demás cargas que le puedan ser
impuestas durante la construcción. La obra falsa deberá ser convenientemente
apuntalada y amarrada para prevenir distorsiones y movimientos que puedan producir
vibraciones y deformaciones en la formaleta de la superestructura.
3.2. ELEMENTOS PARA LA COLOCACIÓN DEL CONCRETO
El Constructor deberá disponer de los medios de colocación del concreto que permitan
una buena regulación de la cantidad de mezcla depositada, para evitar salpicaduras,
segregación y choques contra las formaletas o el refuerzo.
3.3. VIBRADORES
Los vibradores para compactación del concreto deberán ser de tipo interno, y deberán
operar a una frecuencia no menor de seis mil (6.000) ciclos por minuto y ser de una
intensidad suficiente para producir la plasticidad y adecuada consolidación del concreto,
pero sin llegar a causar la segregación de los materiales.
3.4. EQUIPOS VARIOS
El Constructor deberá disponer de elementos para usos varios, entre ellos los necesarios
para la ejecución de juntas, la corrección superficial del concreto terminado, la aplicación
de productos de curado, equipos para limpieza, etc.
4. EJECUCIÓN DE LOS TRABAJOS
4.1. PREPARACIÓN DE LA ZONA DE LOS TRABAJOS
La excavación necesaria para las cimentaciones y su preparación se deberá efectuar
conforme a lo estipulado en el especificación 1. Excavación Manual de estas
especificaciones. Cualquier deterioro ocurrido después de terminada la excavación,
deberá ser subsanado por el Constructor, empleando procedimientos aceptables para el
Interventor.
4.2. FORMALETEADO Y OBRA FALSA
Todas las formaletas en las cuales sea necesario confinar y soportar la mezcla de
concreto mientras se endurece, deberán ser diseñadas por el Constructor y aprobadas
por Interventor. Las formaletas deberán ser diseñadas de tal manera, que permitan la
colocación y consolidación adecuada de la mezcla en su posición final y su fácil
inspección; así mismo, deberán ser suficientemente herméticas para impedir pérdidas del
mortero de la mezcla.
La aprobación del diseño de las formaletas por parte del Interventor, no exime al
Constructor de su responsabilidad respecto de la seguridad, calidad del trabajo y
cumplimiento de todas las especificaciones.
Las formaletas, tanto de madera como metálicas, se ensamblarán firmemente y deberán
tener la resistencia suficiente para contener la mezcla de concreto sin distorsiones. Antes
de iniciar la colocación del concreto, se deberán limpiar de impurezas, incrustaciones de
mortero y cualquier otro material extraño.
No se podrá colocar concreto dentro de las formaletas, si éstas no han sido
inspeccionadas y aprobadas por el Interventor.
Las formaletas se podrán remover parcial o totalmente tan pronto como la mezcla haya
adquirido la resistencia suficiente, comprobada mediante ensayos, para sostener su
propio peso y e l peso de cualquier otra carga.
Toda obra falsa o cimbra para la construcción de puentes u obras similares, deberá ser
diseñada por el Constructor, quien someterá el diseño a consideración del Interventor. En
el diseño se deberán tener en cuenta las cargas muertas y vivas a las que estará
sometida la obra falsa durante y después de la colocación del concreto. Las eventuales
deflexiones de la obra falsa, debido a las cargas, se deberán compensar mediante
contraflechas, de tal forma que la estructura terminada se ajuste a los niveles indicados
en los planos.
4.3. PREPARACIÓN PARA LA COLOCACIÓN DEL CONCRETO
Por lo menos cuarenta y ocho (48) horas antes de colocar concreto en cualquier lugar de
la obra, el Constructor notificará por escrito al Interventor al respecto, para que éste
verifique y apruebe los sitios de colocación.
La colocación no podrá comenzar, mientras el Interventor no haya aprobado el encofrado,
el refuerzo, las partes embebidas y la preparación de las superficies que han de quedar
contra el concreto. Dichas superficies deberán encontrarse completamente libres de
suciedad, lodo, desechos, grasa, aceite, partículas sueltas y cualquier otra sustancia
perjudicial. La limpieza puede incluir el lavado por medio de chorros de agua y aire,
excepto para superficies de suelo o relleno, para las cuales este método puede no ser el
adecuado.
Se deberá eliminar toda agua estancada o libre de las superficies sobre las cuales se va a
colocar la mezcla y controlar que durante la colocación de la mezcla y el fraguado, no se
m ezcle agua quepueda lavar o dañar el concreto fresco.
Las fundaciones en suelo contra las cuales se coloque el concreto, deberán ser
humedecidas completamente, o recubrirse con una delgada capa de concreto, si así lo
exige el Interventor.
4.4. COLOCACIÓN DEL CONCRETO
Esta operación se deberá efectuar en presencia del Interventor, salvo en determinados
sitios específicos autorizados previamente por éste. El concreto no se podrá colocar en
instantes de lluvia, a no ser que el Constructor suministre cubiertas que, a juicio del
Interventor, sean adecuadas para proteger el concreto desde su colocación hasta su
fraguado.
Todo el concreto debe ser vaciado en horas de luz solar y su colocación en cualquier
parte de la obra no se debe iniciar si no es posible completarla en dichas condiciones, a
menos que se disponga de un adecuado sistema de iluminación, aprobado por el
Interventor.
El concreto no se debe exponer a la acción del agua antes del fraguado final.
En todos los casos, el concreto se deberá depositar lo más cerca posible de su posición
final y no se deberá hacer fluir por medio de vibradores. Los métodos utilizados para la
colocación del concreto deberán permitir una buena regulación de la mezcla depositada,
evitando su caída con demasiada presión o chocando contra las formaletas o el refuerzo.
Por ningún motivo se permitirá la caída libre del concreto desde alturas superiores a uno y
medio metros (1.50 m).
Al verter el hormigón, se removerá enérgica y eficazmente, para que las armaduras
queden perfectamente envueltas; cuidando especialmente los sitios en que se reúna gran
cantidad de ellas, y procurando que se mantengan los recubrimientos y separaciones de
la armadura.
En todos los casos que sea difícil colocar el concreto junto a las formaletas debido a las
obstrucciones producidas por el acero de refuerzo o por cualquier otra condición, se
deberá procurar el contacto apropiado entre el concreto y las caras interiores de las
formaletas, vibrando estas últimas por medio de golpes en sus superficies exteriores con
mazos de caucho o madera o por medio de vibradores de formaleta.
En caso de usar equipos inclinados (canoas, canaletas) deben tener una longitud máxima
de 7 m, manteniendo un flujo continuo a una velocidad uniforme del hormigón con
pendientes, según el asentamiento del concreto, Norma de ensayo INV E-404.
4.5. VIBRACIÓN
El concreto colocado se deberá consolidar mediante vibración interna, hasta obtener la
mayor densidad posible, de manera que quede libre de cavidades producidas por
partículas de agregado grueso y burbujas de aire, y que cubra totalmente las superficies
de los encofrados y los materiales embebidos. Durante la consolidación, el vibrador se
deberá operar a intervalos regulares y frecuentes, en posición casi vertical y con su
cabeza sumergida profundamente dentro de la mezcla.
Para lograr la compactación de cada capa antes de que se deposite la siguiente sin
demorar la descarga, se debe usar un número suficiente de vibradores para consolidar el
concreto que se está recibiendo, dentro de los quince (15) minutos siguientes a su
colocación dentro de las formaletas.
Para evitar demoras en el caso de averías, se debe disponer de un (1) vibrador auxiliar en
el sitio de la obra para fundiciones individuales hasta de cincuenta metros cúbicos (50 m3)
y dos (2) vibradores auxiliares para fundiciones de mayor volumen.
Las vibraciones se deben aplicar en el punto de descarga y donde haya concreto
depositado poco antes. Los vibradores no deberán ser empujados rápidamente, sino que
se permitirá que ellos mismos se abran camino dentro de la masa de concreto y se
retirarán lentamente para evitar la formación de cavidades.
La vibración deberá ser tal, que el concreto fluya alrededor del refuerzo y otros elementos
que deban quedar embebidos en el concreto y llegue hasta las esquinas de las
formaletas.
La vibración no debe ser aplicada sobre el refuerzo, ni forzarse a secciones o capas de
concreto que hayan endurecido a tal grado que el concreto no pueda volverse plástico por
su revibración.
No se deberá colocar una nueva capa de concreto, si la precedente no está debidamente
consolidada. La vibración no deberá ser usada para transportar mezcla dentro de las
formaletas, ni se deberá aplicar directamente a éstas o al acero de refuerzo,
especialmente si ello afecta masas de mezcla recientemente fraguada.
Con el fin de obtener un concreto debidamente compactado, carente de cavidades,
hormigueros y similares, la vibración mecánica deberá ser completada con la
compactación m anual que sea necesaria a lo largo de las superficies de las formaletas y
en las esquinas y puntos donde sea difícil obtener una vibración adecuada.
Las dimensiones de las agujas de los vibradores de inmersión y, en general, los tiempos
de vibrado deberán ser cuidadosamente controlados, de manera de obtener las
densidades máximas sin sobrevibrar.
4.6. CURADO
Inmediatamente después del retiro de las formaletas y del acabado de las superficies, el
concreto se someterá a un proceso de curado que se prolongará a lo largo del plazo
prefijado por el Interventor, según el tipo de cemento utilizado y las condiciones climáticas
del lugar.
En general, los tratamientos de curado se deberán mantener por un período no menor de
catorce (14) días después de terminada la colocación de la mezcla de concreto; en
algunas estructuras no masivas, este período podrá ser disminuido, pero en ningún caso
será menor de siete (7) días.
Se deben tomar todas las precauciones necesarias para proteger el concreto fresco
contra las altas temperaturas y los vientos que puedan causar un secado prematuro y la
formación de agrietamientos superficiales. De ser necesario, se colocarán cortinas
protectoras contra el viento hasta que el concreto haya endurecido lo suficiente para
recibir el tratamiento de curado.
En la eventualidad de que se produzca un sismo durante el proceso de curado, el
Constructor deberá tener especial cuidado en efectuar una revisión detallada del concreto
colocado y de la estructura luego del sismo, informando al Interventor sobre cualquier
daño motivado por el fenómeno. Sin perjuicio de ello, si así lo estimase el Interventor, se
realizarán los ensayos que considere convenientes para verificar la calidad del concreto,
pudiendo ordenar el retiro de éste si, a su juicio, los ensayos realizados revelaren
alteraciones al concreto colocado.
5. MEDIDAS Y PAGOS
5.1. MEDIDAS
La medida para el pago de las vigas de cimentación se realizará por M3 de obra
ejecutada según los detalles de los planos y la aprobación de la Interventoría. El volumen
se calculará con base a las dimensiones señaladas en los planos.
Descargar
Enviado por: | Yoel CHACA VILCA |
Idioma: | castellano |
País: | Perú |